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"Sombras en la noche" {Joe & tu}
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
OMG 8) ME E QUEDADO SI PALABRAS :silent: WUO ME A ENCANTADO LOS CAPS :D PRINCIPAL MENTE LO HOT :twisted: quiero q la sigas ya o sino me vas a tener muerta esperando los caps y eso no queremos a si que pon muchos caps :cheers: :cheers:
Invitado
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Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
No llorabas por mi, no llorabas por nada, Dejastes que el dolor, te curtiera la pieeeeel, ojala no sea tarde, para volver a nacer, para poder levantarte ♪
JAJA sorry, queria cantar.
AHí dejo otro cap:)
JAJA sorry, queria cantar.
AHí dejo otro cap:)
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
Se deshizo de las imágenes de aquella mujer y caminó hacia la salida del habitáculo. Después, se encaminó hacia la ciudad.
A alimentarse.
________ llenó la bañera de agua fría y se sumergió en ella, intentando quitarse de la mente aquellas imágenes de Joe. Aunque había soñado muchas veces con él, despierta y dormida, sabía que en aquella ocasión había sido algo más que un sueño. Lo había sentido. Había sentido sus manos en la piel, su respiración en el cuello, sus dientes atravesándole la carne, su boca succionando.
Había sido real. Y había sido increíble.
Suspirando, se hundió más en el agua, cerró los ojos e intentó pensar en otra cosa.
La ceremonia de los premios. El vestido que todavía tenía que elegir. El tiempo que tendría que pasar en Los Ángeles. El menor tiempo posible. Allí estaba ocurriendo algo, y tenía que explorarlo completamente antes de poder entenderlo.
No iba a ir a ningún sitio hasta que lo entendiera.
Qué demonios. Bien podía empezar en aquel mismo momento.
Cerró los ojos y visualizó la escena que acababa de borrar de su ordenador. Encogió las rodillas hasta que sobresalieron del agua, deslizó la mano entre los muslos y empezó a acariciarse, pensando que era la mano de Joe la que lo hacía. Se estremeció y susurró su nombre.
— Joe...
Podía viajar muy rápidamente cuando la necesidad lo asediaba, como aquella noche. En menos de una hora estaba en Bangor, caminando por las calles, vigilante.
La encontró con facilidad. Ella no necesitaba trabajar, no con lo generosamente que él le pagaba para que estuviera disponible. Y aquella noche no tenía tiempo de buscar una víctima que se mereciera morir. Aquella noche necesitaba sentir algo gratificante con rapidez.
Ella abrió la puerta y sonrió.
—Hacía mucho tiempo.
Él asintió, entró y cerró la puerta.
—Ven aquí.
Ella se acercó a él, le puso las manos en el pecho y dejó caer la cabeza hacia atrás. Joe no titubeó. La mordió. Ella jadeó, se quedó rígida, pero al instante se relajó y se derritió contra él. Su sangre se deslizó por la lengua del vampiro, llenándolo y dándole calor. La vida le recorrió las venas, y sintió que el deseo sexual se despertaba, y deslizó sus manos hasta las caderas de la mujer para pegarla a su cuerpo. Dios, ansiaba aquello. Su sangre le entraba en la boca con cada latido de su pulso, pero de repente, empezaron a hacerse más lentos.
Él se sintió alarmado y levantó la cabeza, lamiéndose los labios. La cabeza de la mujer rubia se cayó hacia un lado, y él se dio cuenta de que estaba muy pálida. Dios, ¿la habría matado?
—¿Belinda? Vamos, despierta —la sacudió suavemente y le dio unos golpecitos en la mejilla.
Sus párpados temblaron, pero no abrió los ojos. Él la tomó en brazos y la llevó al sofá. Después la tapó con una manta.
Ella se despertó, sonriendo débilmente.
—Demonios, me haces bien —susurró.
—¿Cómo te encuentras?
Inhalando lentamente, ella se fue recuperando.
—Mareada. Muy mareada. Esto nunca me había pasado antes —sus palabras sonaban ligeramente desfiguradas, como si estuviera borracha. Él había tomado demasiado.
—Lo siento —le dijo—. Ha sido culpa mía. Yo... no volverá a ocurrir.
Ella sonrió de nuevo.
—A mí me gusta, pero me gustaría que además hicieras el amor conmigo. ¿Por qué no quieres?
—Eso no es parte del trato —dijo él, suspirando—. Estarás bien. Duerme, ¿de acuerdo? Tienes que descansar.
—Lo que tú digas, cariño. Tú eres el jefe —cerró los ojos y se durmió al instante.
Joe se puso de pie y dejó diez mil dólares sobre la mesa. Dinero extra para Belinda. Antes vendía su cuerpo, pero un día, cuando él la había encontrado, había empezado a venderle su sangre y ganaba mucho más. Era su prostituta personal. Él había tomado la determinación de no acercarse demasiado a ella, de no tocarla más de lo necesario. Y sólo se alimentaba de ella algunas veces al año. Tenía más mujeres como aquella por todo el país, y en Europa. Las mantenía en lujosos apartamentos y les pagaba generosamente. Ellas nunca se quejaban.
Las había encontrado en la calle, en el arroyo. Y cuando se sacaba a alguien de aquella pobreza, nadie tenía ninguna queja, sólo gratitud y lealtad. Uno no podía confiar en alguien que hubiera nacido rico. Al menos, ésa era su opinión.
Aquella mujer, la de su casa de Maine, había nacido rica. Podía olerlo. No confiaba en ella.
Una vez que hubo saciado su hambre, pensó que lo más seguro era volver allí. Mirar con más atención a aquella mortal que sabía tanto sobre él.
Tenía que empezar la tarea de conocer todos sus secretos.
A alimentarse.
________ llenó la bañera de agua fría y se sumergió en ella, intentando quitarse de la mente aquellas imágenes de Joe. Aunque había soñado muchas veces con él, despierta y dormida, sabía que en aquella ocasión había sido algo más que un sueño. Lo había sentido. Había sentido sus manos en la piel, su respiración en el cuello, sus dientes atravesándole la carne, su boca succionando.
Había sido real. Y había sido increíble.
Suspirando, se hundió más en el agua, cerró los ojos e intentó pensar en otra cosa.
La ceremonia de los premios. El vestido que todavía tenía que elegir. El tiempo que tendría que pasar en Los Ángeles. El menor tiempo posible. Allí estaba ocurriendo algo, y tenía que explorarlo completamente antes de poder entenderlo.
No iba a ir a ningún sitio hasta que lo entendiera.
Qué demonios. Bien podía empezar en aquel mismo momento.
Cerró los ojos y visualizó la escena que acababa de borrar de su ordenador. Encogió las rodillas hasta que sobresalieron del agua, deslizó la mano entre los muslos y empezó a acariciarse, pensando que era la mano de Joe la que lo hacía. Se estremeció y susurró su nombre.
— Joe...
Podía viajar muy rápidamente cuando la necesidad lo asediaba, como aquella noche. En menos de una hora estaba en Bangor, caminando por las calles, vigilante.
La encontró con facilidad. Ella no necesitaba trabajar, no con lo generosamente que él le pagaba para que estuviera disponible. Y aquella noche no tenía tiempo de buscar una víctima que se mereciera morir. Aquella noche necesitaba sentir algo gratificante con rapidez.
Ella abrió la puerta y sonrió.
—Hacía mucho tiempo.
Él asintió, entró y cerró la puerta.
—Ven aquí.
Ella se acercó a él, le puso las manos en el pecho y dejó caer la cabeza hacia atrás. Joe no titubeó. La mordió. Ella jadeó, se quedó rígida, pero al instante se relajó y se derritió contra él. Su sangre se deslizó por la lengua del vampiro, llenándolo y dándole calor. La vida le recorrió las venas, y sintió que el deseo sexual se despertaba, y deslizó sus manos hasta las caderas de la mujer para pegarla a su cuerpo. Dios, ansiaba aquello. Su sangre le entraba en la boca con cada latido de su pulso, pero de repente, empezaron a hacerse más lentos.
Él se sintió alarmado y levantó la cabeza, lamiéndose los labios. La cabeza de la mujer rubia se cayó hacia un lado, y él se dio cuenta de que estaba muy pálida. Dios, ¿la habría matado?
—¿Belinda? Vamos, despierta —la sacudió suavemente y le dio unos golpecitos en la mejilla.
Sus párpados temblaron, pero no abrió los ojos. Él la tomó en brazos y la llevó al sofá. Después la tapó con una manta.
Ella se despertó, sonriendo débilmente.
—Demonios, me haces bien —susurró.
—¿Cómo te encuentras?
Inhalando lentamente, ella se fue recuperando.
—Mareada. Muy mareada. Esto nunca me había pasado antes —sus palabras sonaban ligeramente desfiguradas, como si estuviera borracha. Él había tomado demasiado.
—Lo siento —le dijo—. Ha sido culpa mía. Yo... no volverá a ocurrir.
Ella sonrió de nuevo.
—A mí me gusta, pero me gustaría que además hicieras el amor conmigo. ¿Por qué no quieres?
—Eso no es parte del trato —dijo él, suspirando—. Estarás bien. Duerme, ¿de acuerdo? Tienes que descansar.
—Lo que tú digas, cariño. Tú eres el jefe —cerró los ojos y se durmió al instante.
Joe se puso de pie y dejó diez mil dólares sobre la mesa. Dinero extra para Belinda. Antes vendía su cuerpo, pero un día, cuando él la había encontrado, había empezado a venderle su sangre y ganaba mucho más. Era su prostituta personal. Él había tomado la determinación de no acercarse demasiado a ella, de no tocarla más de lo necesario. Y sólo se alimentaba de ella algunas veces al año. Tenía más mujeres como aquella por todo el país, y en Europa. Las mantenía en lujosos apartamentos y les pagaba generosamente. Ellas nunca se quejaban.
Las había encontrado en la calle, en el arroyo. Y cuando se sacaba a alguien de aquella pobreza, nadie tenía ninguna queja, sólo gratitud y lealtad. Uno no podía confiar en alguien que hubiera nacido rico. Al menos, ésa era su opinión.
Aquella mujer, la de su casa de Maine, había nacido rica. Podía olerlo. No confiaba en ella.
Una vez que hubo saciado su hambre, pensó que lo más seguro era volver allí. Mirar con más atención a aquella mortal que sabía tanto sobre él.
Tenía que empezar la tarea de conocer todos sus secretos.
Invitado
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Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
Para el proximo capitulo se conocen de verdad verdad, osea que hablann. Así que si lo quieren comenten, que les parecieron los otros, o si quieren que la sigan o cualquier cosa AJAJA. Pero si no me aburro solo subiendo la nove, es más copado también cuando hablo con ustedess, o leo lo que dicen x) enfin; espero que les guste:)
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
nanijonas escribió:OMG 8) ME E QUEDADO SI PALABRAS :silent: WUO ME A ENCANTADO LOS CAPS :D PRINCIPAL MENTE LO HOT :twisted: quiero q la sigas ya o sino me vas a tener muerta esperando los caps y eso no queremos a si que pon muchos caps :cheers: :cheers:
Me alegro que te alla gustado!, y ya subi otro cap:)
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
Que hot :| quede traumada. Acabas de ensusiar la mente de una niña sana(? boe que decia XD
SEGUILA!
Dios... si hicieron eso en un sueño lo que van a hacer cuando se conozcan no? JAJAJAJAJ
SEGUILA!
Dios... si hicieron eso en un sueño lo que van a hacer cuando se conozcan no? JAJAJAJAJ
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
HELLOEVERYBODY!!!!
AKI NUEVA LECTORA REPORTANDOSE KKGGG CAMBIO
de verdad que AME tu nove :D
Es tan misteriosa, romantica, HOT, entretenida, fasinante!!!
Y YA ME IMAGINO A JOE COMO VAMPIRO :twisted:
POR JEBUS!! SUBE UN CAP
haslo por mi tobillo esginsado... :sad:
ya kiero ver a joe :twisted: 8)
byee!! :D
AKI NUEVA LECTORA REPORTANDOSE KKGGG CAMBIO
de verdad que AME tu nove :D
Es tan misteriosa, romantica, HOT, entretenida, fasinante!!!
Y YA ME IMAGINO A JOE COMO VAMPIRO :twisted:
POR JEBUS!! SUBE UN CAP
haslo por mi tobillo esginsado... :sad:
ya kiero ver a joe :twisted: 8)
byee!! :D
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
karliitaaa_1_ escribió:HELLOEVERYBODY!!!!
AKI NUEVA LECTORA REPORTANDOSE KKGGG CAMBIO
de verdad que AME tu nove :D
Es tan misteriosa, romantica, HOT, entretenida, fasinante!!!
Y YA ME IMAGINO A JOE COMO VAMPIRO :twisted:
POR JEBUS!! SUBE UN CAP
haslo por mi tobillo esginsado... :sad:
ya kiero ver a joe :twisted: 8)
byee!! :D
Bienvenidaa! Me encanta que te guste la nove! Pronto subire más caps, y lo are por tu tobillo y por mi salud mental y fisica (?) x)
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
Bueno si hay alguien para dejar algun cap.. avise! :D
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
xrollercoaster escribió:Que hot :| quede traumada. Acabas de ensusiar la mente de una niña sana(? boe que decia XD
SEGUILA!
Dios... si hicieron eso en un sueño lo que van a hacer cuando se conozcan no? JAJAJAJAJ
JAJJA siempre me dicen lo mismo, la gente me dice que ensucio sus mentes, no solo con lo que leo, escribo, digo, JAJAJA creo que esá sera mi trabajo en esta vida (?) JAJAJ pero que es la vida, si un poco de mentes sucias? x) bue qe decia. JAJAJ
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
Me acabo de dar cuenta que pasa al nivel 'Lectora:D' JAJA me siento una persona productiva. (?)
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
YOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!
SUBE CAPITULOOOOOOOOOOOOOOO :caliente2: :caliente2:
no broma :D pero sube capituloo :sad:
SUBE CAPITULOOOOOOOOOOOOOOO :caliente2: :caliente2:
no broma :D pero sube capituloo :sad:
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
karliitaaa_1_ escribió:YOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!
SUBE CAPITULOOOOOOOOOOOOOOO :caliente2: :caliente2:
no broma :D pero sube capituloo :sad:
Hay perdoname justo habia salido, pero ya me pongo a editar y te dejo un capitulo:D
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
8
Aquella noche, él fue de nuevo a ella. Y de nuevo, ella supo que sólo era un sueño.
Cuando se había acostado, después del baño, había dejado las puertas del balcón abiertas, casi como un desafío. Casi como si alguna parte ridícula de su mente aceptara la idea de que él podría ser, de alguna forma, real.
Los personajes de ficción no cobraban vida y visitaban a sus creadores, se dijo. Entonces, ¿por qué se había cepillado el pelo hasta que le dolió el brazo y se había puesto un camisón negro y transparente?
Era una tonta. Estaba obsesionada, enamorada de un hombre que no existía. De hecho, probablemente nunca había existido. Era producto de la imaginación de un escritor.
Sin embargo, aquella noche se quedó despierta durante mucho tiempo, rogándole en silencio que acudiera a ella. Finalmente, se durmió.
Y entonces sintió una suave brisa que venía del balcón y supo que él estaba allí. En su sueño, abrió los ojos y lo vio, observándola, y también supo que aquel sueño no era igual que los demás. Si no supiera que era imposible, habría creído que era real.
—Joe —susurró.
Él levantó las cejas como si estuviera sorprendido.
—La mayoría de las mujeres reaccionarían de una manera muy diferente si se despertaran y encontraran a un extraño mirándolas mientras duermen.
—Tú no eres un extraño. Te conozco.
—Eso me ha parecido — su voz era exactamente tal y como ella había sabido que sería. Profunda y muy suave. Erótica—. Lo que quiero saber es ¿cómo?
Ella se incorporó y apartó la sábana. Quería que la viera. Y él respondió como ella deseaba. Su mirada se deslizó por su piel, deteniéndose ligeramente en el pecho, visible a través de la finísima tela.
—¿Cómo has llegado a conocerme? —le preguntó él de nuevo.
Ella cerró los ojos y sintió que su cuerpo reaccionaba bajo su mirada como si fuera una antorcha.
—Ni siquiera yo misma estoy segura. Es como si me hubieras poseído por completo —abrió los ojos y los fijó en él—. O simplemente, que quiero que eso ocurra.
—¿De verdad?
Ella asintió.
—Es extraño. Nunca he sentido nada parecido a esto por ningún otro hombre. Y tú sólo eres una fantasía. Sólo un sueño —lo miró y continuó—. Supongo que eso es lo mejor. Así nadie se hace daño.
Él inclinó la cabeza hacia un lado.
—Así que soy un sueño.
Ella asintió.
Él sonrió un poco.
—¿Es eso lo que quieres que sea? ¿Un sueño? ¿Como el que has tenido esta tarde?
Ella abrió mucho los ojos y sintió una oleada de deseo y de miedo. No respondió, pero él se acercó a la cama y tiró de la sábana, dejando a la vista las piernas de _____.
—Dime lo que quiero saber, y es posible que te complazca —se sentó a su lado e hizo que ella se reclinara en el cabecero. Él le acarició el pecho con el dorso de la mano, rozándole el pezón con los nudillos—. Empezando con tu nombre.
—_______. _______ ________.
—Eso está bien —dijo él, y le dio un suave pellizco. Ella jadeó de placer.
—Me pregunto, _______, si serías tan permisiva si yo fuera real —le preguntó, tirándole suavemente del pezón.
—Si fueras real, me harías como tú.
Aquellas palabras lo dejaron asombrado. Dejó de acariciarle el pecho por un momento y la miró directamente a los ojos.
—¿Por qué crees que haría eso?
—Porque estamos hechos el uno para el otro, Joe. Tú eres parte de mí, y yo soy parte de ti —ella bajó los ojos—. Fantasía, sí. Pero si fueras real, estos sentimientos también lo serían. Y no podrías resistirte a ellos más que yo.
Por un instante, a ella le pareció que había miedo en sus ojos. Entonces le cubrió la mano que tenía sobre su pecho con la suya.
—Pero no eres real. Ni siquiera aunque esta fantasía mía se haya convertido en algo más real de lo que nunca haya sido —dijo, y miró la mano de Joe sobre su pecho—. Te siento.
Él interrumpió sus delicadas caricias.
—Quiero sentirlo todo contigo, Joe. Todo lo que he imaginado.
Aquella noche, él fue de nuevo a ella. Y de nuevo, ella supo que sólo era un sueño.
Cuando se había acostado, después del baño, había dejado las puertas del balcón abiertas, casi como un desafío. Casi como si alguna parte ridícula de su mente aceptara la idea de que él podría ser, de alguna forma, real.
Los personajes de ficción no cobraban vida y visitaban a sus creadores, se dijo. Entonces, ¿por qué se había cepillado el pelo hasta que le dolió el brazo y se había puesto un camisón negro y transparente?
Era una tonta. Estaba obsesionada, enamorada de un hombre que no existía. De hecho, probablemente nunca había existido. Era producto de la imaginación de un escritor.
Sin embargo, aquella noche se quedó despierta durante mucho tiempo, rogándole en silencio que acudiera a ella. Finalmente, se durmió.
Y entonces sintió una suave brisa que venía del balcón y supo que él estaba allí. En su sueño, abrió los ojos y lo vio, observándola, y también supo que aquel sueño no era igual que los demás. Si no supiera que era imposible, habría creído que era real.
—Joe —susurró.
Él levantó las cejas como si estuviera sorprendido.
—La mayoría de las mujeres reaccionarían de una manera muy diferente si se despertaran y encontraran a un extraño mirándolas mientras duermen.
—Tú no eres un extraño. Te conozco.
—Eso me ha parecido — su voz era exactamente tal y como ella había sabido que sería. Profunda y muy suave. Erótica—. Lo que quiero saber es ¿cómo?
Ella se incorporó y apartó la sábana. Quería que la viera. Y él respondió como ella deseaba. Su mirada se deslizó por su piel, deteniéndose ligeramente en el pecho, visible a través de la finísima tela.
—¿Cómo has llegado a conocerme? —le preguntó él de nuevo.
Ella cerró los ojos y sintió que su cuerpo reaccionaba bajo su mirada como si fuera una antorcha.
—Ni siquiera yo misma estoy segura. Es como si me hubieras poseído por completo —abrió los ojos y los fijó en él—. O simplemente, que quiero que eso ocurra.
—¿De verdad?
Ella asintió.
—Es extraño. Nunca he sentido nada parecido a esto por ningún otro hombre. Y tú sólo eres una fantasía. Sólo un sueño —lo miró y continuó—. Supongo que eso es lo mejor. Así nadie se hace daño.
Él inclinó la cabeza hacia un lado.
—Así que soy un sueño.
Ella asintió.
Él sonrió un poco.
—¿Es eso lo que quieres que sea? ¿Un sueño? ¿Como el que has tenido esta tarde?
Ella abrió mucho los ojos y sintió una oleada de deseo y de miedo. No respondió, pero él se acercó a la cama y tiró de la sábana, dejando a la vista las piernas de _____.
—Dime lo que quiero saber, y es posible que te complazca —se sentó a su lado e hizo que ella se reclinara en el cabecero. Él le acarició el pecho con el dorso de la mano, rozándole el pezón con los nudillos—. Empezando con tu nombre.
—_______. _______ ________.
—Eso está bien —dijo él, y le dio un suave pellizco. Ella jadeó de placer.
—Me pregunto, _______, si serías tan permisiva si yo fuera real —le preguntó, tirándole suavemente del pezón.
—Si fueras real, me harías como tú.
Aquellas palabras lo dejaron asombrado. Dejó de acariciarle el pecho por un momento y la miró directamente a los ojos.
—¿Por qué crees que haría eso?
—Porque estamos hechos el uno para el otro, Joe. Tú eres parte de mí, y yo soy parte de ti —ella bajó los ojos—. Fantasía, sí. Pero si fueras real, estos sentimientos también lo serían. Y no podrías resistirte a ellos más que yo.
Por un instante, a ella le pareció que había miedo en sus ojos. Entonces le cubrió la mano que tenía sobre su pecho con la suya.
—Pero no eres real. Ni siquiera aunque esta fantasía mía se haya convertido en algo más real de lo que nunca haya sido —dijo, y miró la mano de Joe sobre su pecho—. Te siento.
Él interrumpió sus delicadas caricias.
—Quiero sentirlo todo contigo, Joe. Todo lo que he imaginado.
Invitado
Invitado
Re: "Sombras en la noche" {Joe & tu}
Bueno hasta ahí, sisi soy mala JAJA, pero no se pueden quejar hoy eh puesto varios capitulos. Mañana a las 4 de la tarde de argentina. Subire cap, por si quieren saber, talvez suba antes, pero no mucho más de esa hora x)
Hasta mañana, tengo mucho sueño x)
Hasta mañana, tengo mucho sueño x)
Invitado
Invitado
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