Killer for Love [Terminada]

Los invitados habían arribado, los deliciosos banquetes estaban listos para ser servidos y los regalos apilados en una mesa y las mesas ordenadas en circunferencia decoradas con bouquets de flores menudas de lavanda.
Todo estaba en orden, esperando la entrada de Luciana y Sir Hutcherson con la bebé en brazos.
Pisaron el umbral sin mucha algarabía y se mantuvieron estáticos un momento hasta que es el propio Lucier el que se acercó corriendo para ser el que dé la bienvenida. Acto espontáneo, es decir, que no fue para nada planeado.
—Bienvenida, Annelill.
Y todos los presentes emitieron el sonido gutural que refleja encanto por el gesto tan tierno del niño, también todos sintieron alivio por esa reacción inesperada.
—Sí, Lucier. Todos démosle la bienvenida al mundo a Annelill —dijo el orgulloso padre de la bebé.
Lucier acarició con un dedo el fino cabello de la niña y besó la frente de ella.
—Es tan hermosa. Sé que no somos hermanos realmente —dijo Lucier y todos quedaron impactados y asustados—, pero desde hoy siento que tengo una hermanita menor, una hermanita que debo cuidar y proteger con mi vida. Eso es todo.
—¡Claro que sí! —dijo el señor Andarcia. —Sólo podrás quererla como se quieren a las hermanas —enfatizando que es su hermana de ahora en adelante.
El niño asintió con movimientos verticales de su cabeza. Lucier se alejó unos pasos, bajó los tres escalones de la entrada y a mitad de ellos se sostuvo la cabeza con sus manos, como tratando de mantener el equilibrio pero esa fuerza fue superior a él y lo derribó al suelo.
La gente se abalanzó pero Luciana se abrió paso con la bebé en brazos y se arrodilló junto a él.
—¡Lucier! —exclamó ella.
—Cuida a Annelill con tu vida. Así como prometí yo —dijo con poca voz y terminó susurrando—, te amo, Annelill.
Dio un último vistazo a la niña y cerró los ojos por siempre.

La fiesta se debió cancelar pero tanto la familia Andarcia como la Hutcherson se negaron a hacerlo.
Luciana se encerró en el castillo para aislarse de todo el bullicio y no sabía que pensar sobre el giro en los acontecimientos. No se molestó en escuchar las especulaciones de la gente.
Algunos decían que Lucier murió por una especie de maleficio que le lanzó su padre desde el inframundo por no haber jurado amor pasional hacia la niña como él hizo con la madre de ella; otros, por el contrario, dijeron que el niño murió de felicidad, de toda la que le brindó el ver a la criatura más encantadora que haya visto y el regocijo en su corazón pudo más que incluso fue su muerte.
Lo cierto es que la muerte de Lucier fue un total misterio y no se habló más del asunto. Un boticario alguna vez dijo “muerte súbita” aunque todos insistieron que fue algo antinatural.
Al respecto, sobre experiencias inexplicables la gente asegura que él acompaña espiritualmente a Annelill, como si de su ángel guardián se tratase y que Bill, como siempre lo llamará Luciana, la protege a ella misma.

~Fin~ ✣