Viviendo el Sueño (Nick Jonas) 2da Temporada [TERMINANADA]

Cap. 26

PARTE 2

POV Hanna

UNA HORA DESPUÉS

Y ahí estábamos los dos, parados en el aeropuerto esperando ver a mi familia salir por el amplio pasillo. No sabía porque algunas de las escenas más importantes de nuestras vidas se daban aquí… AEROPUERTOS, que misterio tendrían eh? después de todo fue en uno de estos donde me pidió que me casara con él, de solo recordar ese día me da taquicardia… aun mentalizo sus Ray Vans oscuras y ese precioso anillo de diamantes con incrustación de amatista, ese beso… ahí me dijo que me quería y sin dudas el lugar donde siempre terminábamos con la promesa de que nos veríamos pronto. Teníamos historia e los lugares más extraños, pero eso éramos Nick y yo una pareja singular y fuera de serie.

- en que tanto piensas?? – Me pregunto mientras me abrazaba por la espalda y besaba mi mejilla con dulzura – has estado muy callada, eso no es propio de ti… ya se… estas cansada? – me dijo con cierta burla. Claro… burlándose de mi cuando fue él, el que quiso ‘‘recargar’’ baterías esta mañana.

- Nick… si quieres que Hércules tenga algo de acción en lo que resta de tu vidas, será mejor que cierres la boca… a lo mejor mi padre sabe algunas técnicas para tranquilizarlo – dije como el que no quiere la cosa. Note a mi esposo tensarse tras de mi… esos comentarios siempre funcionaban. Cualquier comentario Anti-sexo activaba todas las terminaciones nerviosas de Nick y lo hacía estar atento… hombre tenía que ser. Y si a eso le sumábamos el termino padre… Nick salía despavorido huyendo como un niño asustado, oficialmente mi papa se había convertido en la película de terror de mi esposo.

- no harías eso – balbució con pánico, trate de aguantar la risa, pero al voltear hacia su dirección y ver su expresión se me hizo imposible, era difícil negarle algo a esos ojitos marrones – Hani porque eres tan cruel conmigo – dijo como niño chiquito mientras hacia una adorable puchero, deje un beso sobre sus labios y le sonreí. Las cosas entre nosotros eran bastante espontaneas y originales, pasar un día con mi esposo no era nada aburrido, de hecho, era todo lo contrario y siempre salía algo nuevo.

- te amo – le dije simplemente, el coloco una sonrisa boba en su rostro y me miro con ojos brillantes.

- sabemos que se quieren hermanita… pero no creo que sea el lugar más adecuado para dar esas demostraciones de afecto – escuche que decía una voz a mis espaldas – odiaría salir en el noticiero de la tarde te imaginas!!

- ROY!!!!!!! – grite antes de salir del resguardo de los brazos de Nick y saltando sobre mi hermano,, ya no tan pequeño… bien, no es que contara con una gran estatura… porque de hecho no era así, por el contrario Nick me decía pequeña por muchísimos motivos, pero el enano había crecido unos cuantos centímetros… podría jurar que él y Nick eran del mismo tamaño.

- sé que soy indispensable en tu vida Hanna, pero no es para que me asfixies – se quejo el al estrecharme en sus brazos y besar mi frente. Cuanto extrañe a mi hermanito, aunque peleaba con Nick y Joe bastante seguido, nunca era lo mismo.

- y para nosotros no hay abrazo?? – dijo mi madre, cuando levante la vista me los encontré a los dos mirándome con una enorme sonrisa. Tenía tanto sin verlos que fue inevitable no soltar un par de lagrimas, Dios me había vuelto una sentimental al lado de tanto artista pop!!! solté a mi hermanito y corrí hacia mis padres.


Hanna abrazaba a sus padres alegremente, han sido unos largos meses sin verse, sonreí ante la escena… esperaba que cuando tuviéramos hijos nos viéramos asi.

- y tu que cuentas Nick??? Como se ha portado mi hermana?? – me pregunto Roy golpeándome el hombro, le di un abrazo y sonreí.

- todo a estado de maravilla y Hanna se ha portado bien – le dije bromeando.

- cada día andas más guapo Nick – me dijo la señora Cecilia llegando a mi lado y observándome con una sonrisa picara tan parecida a la de mi esposa. Me envolvió en un abrazo maternal y beso mi mejilla – solo espero que mis nietos salgan tan lindos como tú!! – dijo con ilusión, escuche a Hanna dando resoplidos junto a su padre.

- yo no estoy tan fea – dijo quejándose mientras se cruzaba de brazos, se veía tan adorable, parecía una muñequita.

- Nicholas – dijo Roberto llamando mi atención, en seguida me entraron los nervios... estaba asustado… - dale una abrazo a tu suegro – dijo alegre, eche fuera todas mis inquietudes y lo abrace amistosamente, me palmeo el hombro varias veces y me brindo una sonrisa – te ves bien – agrego él. Luego de los saludos nos pidió a Roy y a mí que le ayudáramos con las maletas. Las llevamos todas hasta el auto, acomodamos el equipaje en la cajuela y emprendimos camino hacia mi casa, donde se quedarían hasta pocos días después de año nuevo.

- tu casa es asombrosa!!! – balbuceo Roy tan pronto nos aparcamos en el porche. Menos de media hora de camino y ya habíamos llegado, sin duda era una ventaja vivir cerca del aeropuerto.

- Denise tiene muy buen gusto – dijo la señora Cecilia con una cálida sonrisa. Saque las maletas del baúl con ayuda de Roy y nos encaminamos dentro. Cuando entramos al recibidor nuestras familias comenzaron a saludarse con entusiasmo, Hanna apretó mi mano suavemente y me brindo una sonrisa nerviosa, ella no era la única que andaba de los nervios, de hecho yo hacia todo lo posible por controlarme. Decidí dejar las maletas cerca de la escalera mientras mi madre dirigía a los padres de mi esposa al comedor, mama se había esmerado preparando el desayuno para este día en especial, ayer habíamos salidos tarde del supermercado para equipar la despensa… a solo días de Navidad y podía jurar que había comida para todo un armamento, mi madre se tomaba en serio esto de las visitas y más si eran de mi familia política. Sentí unos labios estamparse contra mi mejilla, sonreí a sabiendas de quien había sido la que me aporto esa caricia.

- todo saldrá bien Nick – me dijo mientras tomaba mi mano y me miraba con esos impactantes ojos verdes.

- si estas a mi lado nada puede salir mal – susurre jalándola hasta mis brazos y envolviéndola entre ellos – te quiero – murmure yo antes de darle un beso.

- lo sé – respondió ella con autosuficiencia – me los has dicho varias veces en lo que va de día… pero solo para que sepas, yo también te quiero mucho – expreso ella juguetonamente, uní mis labios a los suyos nuevamente antes de dirigirnos hasta el comedor y acompañar a la familia en el desayuno.

La verdad era que por primera vez en años el comedor se veía completamente lleno, todas las sillas están ocupadas y la mesa estaba adornada por un gran desayuno, había de todo, huevos revueltos, tocino, salchichas, cereal de varios tipos, leche, jugo, café, pan, mermelada, mantequilla, avena, patatas y muffins de chocolate, los favoritos de Hanna . Luego de una breve oración por parte de mi padre empezamos a degustar los alimentos. El ambiente era excelente, me gustaba ver cómo nos llevábamos tan bien entre todos, nuestras familias conversaban con fluidez a lo largo de la comida, algunas bromas por parte de Joe y Roberto. Una mini guerra de comida entre Frankie y Roy, las típicas conversaciones de Danielle y mi esposa… y claro esta nuestras manos unidas bajo el comedor, esto se había hecho de por sí una costumbre, me gustaba sentirla cerca todo el tiempo.

Al terminar, las mujeres fueron hasta la cocina a limpiar los trastes sucios, mientras que nosotros nos recreábamos en la sala. Roberto y papa hablaban como si fueran amigos de años, al parecer ambos eran aficionados a las antiguas peleas de boxeo. Los chicos y yo estábamos sentados en el sofá jugando Guitar Hero… por lo visto Hanna no era la única buena en ese juego, Roy le estaba dando pelea a Joe, ambos eran muy buenos y el juego iba bastante reñido.

- mira lo que te traje – escuche que decía mi esposa mientras ingresaba en la sala con un pequeño vaso lleno de gelatina – es bajo en azúcar y sin embargo está muy bueno – comento ella mientras metía una cuchara en el recipiente y sacaba un poco. Amaba su expresión al comer algo que le resultaba delicioso… um justo como cuando está a punto de llegar… si… me resulta muy difícil dejar de pensar en ciertas cosas luego de conocerla a ella… gracias al cielo su padre no era un lector de mentes… de lo contrario no conservaría alguno de mis miembros, siendo Hércules el principal afectado.

- no se supone que era para mí!! No te lo comas Hanna – le dije haciéndole pucheros, escuche como nuestras madres se reían de nosotros. Hani se sentó en mi regazo y me ofreció un poco de gelatina – umm es cierto está muy rico – dije secundándola mientras dejaba que ella me diera de comer.

El ambiente se vio envuelto nuevamente en conversación adulta, todo iba perfectamente bien hasta que escuche la palabra matrimonio e hijos. Hanna me miro asustada y yo solo pude apretar suavemente su rodilla con la intención de calmarla. Pero no era fácil escuchar a nuestras madres planear nuestra boda… que vestido, que entrada y comida y no sé cuantas cosas más… si ellas supieran que nos hemos volado todo ese protocolo… si, de seguro nos matarían. Cecilia estaba entusiasmada, Hani era su primera hija, así que era algo especial para ella… Mama también estaba ilusionada…. Tendría 21 años, pero para ella seguía siendo su bebe, era algo frustrante.

- comienzo a sentir culpabilidad – me susurro ella contra mi oído, Joe se reía a nuestras espaldas, claro… él no estaba atravesando lo mismo que nosotros.

- y si le decimos ahora… digo… están todos aquí – le digo de vuelta, mi esposa agarro mi mano con fuerza y me miro con terror.

- tan pronto… - soltó ella mientras miraba a Cecilia con espanto – le tengo miedo a mama cuando se enoja… por qué no lo dejamos para más tarde, no se… quizás dentro de un par de años mas – dijo ella hundiendo su rostro en mi cuello, parecía un pequeño gatito asustado.

- tenemos que decirles algunas vez – dije dando un suspiro – vamos a mi habitación, hay que hablar de esto – le dije.

- nuestras familias están reunidas en la sala, así que no pueden ponerse ‘juguetones’’ chicos – exclamo Joe de repente, lo mire mal por un segundo ocasionando que comenzara a reirse.

- no te metas que no es contigo – le dije, tome a mi esposa de la mano y nos fuimos en silencio hasta mi habitación. Ambos nos tiramos sobre la cama y nos hundimos en los brazos de otro, desesperados y algo angustiadas.

- quiero decirles, pero- comenzó a decirme ella mientras daba pequeñas caricias a mi cuello – por un lado tengo miedo de su reacción… aunque eso no me preocupa tanto como el hecho de romperles la ilusión de verme casada… ahí Nick tu oíste a mi padre!! El quiere entregarme en el altar, como rayos le niego eso!! Y mama quiere organizar una boda Nick!! Nunca ah hecho eso – dijo entre gimoteos… ella lloraba contra mi cuellos, sentía las húmedas lagrimas y su respiración algo alterada la abrace con más fuerza y comencé a acariciar su espalda, no me gustaba verla llorar – además también está tu madre… ella quiere ayudar a mama!! Lo que daría por darles el gusto, juro… que hasta dejaría que eligieran todo solo por verlas felices, me pondría un vestido y esos zapatos que tanto aman… y sabes que los odio… pero las quiero mucho, lo haría por ellas, por papa… porque rayos todo tiene que ser tan difícil – expreso derrotada mientras me miraba con ojitos llorosos, limpie sus lagrimas con mis dedos y bese sus mejillas y sus ojos con suavidad, amaba a esta mujer tanto como odiaba verla llora. Me gustaba que sonriera, porque con solo una de sus sonrisas mi corazón parecía iluminarse de repente, mi respiración se alteraba y todo mi mundo cambiaba. Mi felicidad dependía de ella en su totalidad.

- Hani viéndolo de esa forma… si quiere, no les decimos nada – le sugerí – podemos esperar unos años y hacer una boda tradicional… podremos ir a comprar los anillos juntos – ofrecí con una sonrisa – por que aun no te eh comprado ninguno.

- pero me diste tu anillo de pureza y para mí eso vale mucho sabes – dijo ella mostrándomelo en su mano, lo había mandado a achicar hace un buen tiempo y ahora ella lo usaba.

- sí, pero no es lo mismo!! Me gustaría regalarte un anillo de bodas y pedirte nuevamente que seas mi esposa, tomar tu mano y deslizar la argolla luego que me digas que si… también me gustaría verte en un vestido de novia, diablos!! Juro que te verías hermosísima… y quitártelo… eso sí que sería interesante… mejor que abrir un regalo de cumpleaños – dije con picardía, Hani golpeo suavemente mi pecho mientras reía – me gusta verte sonreír gatita – le dije rememorando el apodo que le había puesto a mi traviesa esposa – que dices??? Quieres que enfrentemos a los titanes o lo dejamos para dentro de unos años, por mi no hay problema – le susurre.

- bueno… me convenció lo de quitarme el vestido – dijo con picardía, le di un beso en respuesta – aunque odio tener que escaparnos para poder estar juntos de ‘‘esa’’ manera – dijo moviendo graciosamente las cejas haciéndome reír a carcajadas - esperemos y hagamos a nuestras madres felices, que escojan todo lo que quieran y yo solo les diré que si – respondió resignada – lo que se hace por la gente que se ama eh?

- dímelo a mi – les respondí mirándola. No importaba lo que pasara siempre estaríamos para el otro. Acercándome a ella mordí su labio inferior y adentre mi lengua en su cavidad llenándome de su dulzura, nuestras bocas se movían al unisonó buscando saciar nuestras almas.

- oye Nick – la escuche decir cuando nos separamos aunque no lo suficiente, aun sentía el contracto de sus labios cuando hablaba. Conteste con un pequeño ‘’umm’’ – faltan 5 días para navidad y aun no eh comprado nada - me dijo preocupada, yo la mire con una enorme sonrisa sabiendo que le había llevado la delantera – ya compraste los regalos??? – me pregunto impactada.

- jajaj si, ya lo hice – dije con tono confidencial.

- umm… y que me compraste? – pregunto ella como niña curiosa, la mire negando con la cabeza, ni en un millón de años le contaría lo que compre para ella, solo quería ver su expresión… de seguro su cara pasaba por distintas tonalidades de rojo cuando se lo obsequiara, digno de una fotografía.

- no te lo diré…. Es un secreto – le dije mirándola con picardía, Hanna me miro con sospecha… estas serian unas navidades muy divertidas.