"Friends, Lovers Or Nothing" (Zayn Malik) TERMINADA

-Wow.- exclamé al ver la gran habitación que los abuelos paternos de Zayn me habían preparado.
-Crees que vas a estar bien?.- me preguntó entrando justo detrás de mí.
-Es una broma? Es perfecta!.- Las paredes de color rosado hacían resaltar el blanco acolchado en el que me recosté. Zayn lo hizo a mi lado. Giré mi cabeza y quedamos mirándonos el uno al otro. –Vos vas a dormir acá? Conmigo?.- pregunté algo preocupada. Después de lo que había pasado hace unos días atrás, no quería volver a estar en la misma situación. El Sonrío, dejando a la luz sus perfectos dientes.
-No, yo estoy en la habitación de alado.- Nos miramos unos segundos, y sonreí. –Bueno, nos espera un gran día. Será mejor que nos vayamos preparando. Yo me voy a bañar, y en un rato estoy por acá, dale?.- Me besó en la frente, y salió de su habitación. Miré mi reloj. Eran las 4 p.m, y nosotros debíamos estar en la iglesia a las 7, así que decidí tomarme una corta siesta de media hora, para recuperar algunas energías y así estar perfecta para toda la noche.
Mi celular sonó, pero no era la alarma de las 4.30. Era una llamada entrante de mi mamá.
-Hola?.-
-Aldi, Cómo va todo por ahí? Ya estas lista?.-
- No, ni me preparé todavía… Tengo tiempo.- Dije dejando salir un largo bostezo.
-Aldi, son casi las 6! Cómo que tenés tiempo?.- Ahí fue cuando se me helo la sangre. Cómo que las 6? Miré mi reloj pulsera, y las agujas marcaban las pasadas 6.
-No! Me quedé dormida! Tengo que dejarte. Muchas cosas para hacer! Adiós, manda saludos!.-
No dejé que mi mamá dijera palabra alguna, corté el teléfono, corrí baño de mi dormitorio y me duché lo más rápido que pude.Dejé mi ropa en el suelo, y busqué desesperadamente una toalla. No encontré ninguna. Ahí fue cuando recordé que Zayn me había dicho que estaban dentro del placard. Así que abrí la puerta del baño, y salí caminando lentamente a la habitación para no resbalarme. El choqué frío del aire luego de una ducha de agua caliente me hizo estremecer. Abrí las puertas del mueble, y agarré las toallas. Me envolví en ellas.
Justo en ese momento un ruido captó mi atención. Algo parecido a un carraspeo. Giré sobre mis talones y me encontré cara a cara con Zayn. Se me detuvo el corazón por unos segundos.
-Hace cuanto que estas acá?.- Pude notar cómo Zayn sonreía, resaltando sus sonrojadas mejillas.
-Hace unos 10 minutos más o menos.- Evitaba mirarme a los ojos, y reía mirando el suelo. Suspiré profundo.
-Decime por favor que no viste nada.- Escondí mi cara entre mis manos y me senté en la cama. Zayn quedo de pie enfrente de mí. No paraba de sonreír.
- Lo haría, pero sería mentir, y yo no miento.- No lo podía creer. A quién se le ocurre salir del baño sin nada ensima en una casa ajena? Eso solo me podía suceder a mí. Me abrazó dulcemente y besó mi mejilla. –Anda a cambiarte, estamos algo atrasados.-

Salí del baño ya cambiada. Zayn se paró al verme, y me sonrió dulcemente.
-Estas hermosa.- Dijo tomándome la mano, y besándola suavemente.
-Wow, todo un caballero estas hecho, Malik!.- dije riéndome. El color ya había vuelto a mi rostro luego de tan embarazoso momento, al igual que Zayn: sus mejillas ya no estaban tan coloradas.
-Voy a ver cómo están las cosas por acá. Vos terminá de prepararte y te paso a buscar en unos minutos, okey?.- Asentí, y salió por la puerta. Suspiré y comencé a terminar con mi preparación. Me sequé el cabello, me lo planché, me maquillé un poco, y me puse los zapatos color crema. De pies a cabeza estaba lista, pero no tanto internamente: Iba a conocer a la familia entera de Zayn. Si eran como sus padres, todo sería muy fácil: son simpáticos, encantadores, y fácil de sacar tema de conversación. Pero, y si no son como ellos? Eso no lo sabría hasta llegar a la boda. Me miré rápidamente al espejo, y al saber que estaba lista, tomé mi cartera, y caminé hacia la sala, donde nos encontramos con los papás de Zayn y sus abuelos, que es necesario mencionar, eran muy simpáticos. Ya casi las 7, nos dirigimos todos a la iglesia que quedaba a unas calles de allí.
Me bajé del auto, y quedé hipnotizada con aquella gigantesca catedral que yacía ante nosotros. Zayn tomó mi mano, y nos apartamos del lugar. El sol se estaba poniendo, tiñendo el cielo con hermosos colores anaranjados y rosados. Se escuchaban las conversaciones de los familiares emocionados, niños corriendo por todos lados, las damas de honor parloteando en la entrada. Todos parecían estar muy felices ante aquella unión.
Su tío entró a paso acelerado a la iglesia. Zayn lo señalo, y me abrazó por la cintura.
-Mirá cuando sea yo el que entre por esa puerta, nervioso. Cuando mi vida esté a punto de cambiar al dar este paso importante. Cuando te vea caminar por el pasillo principal con tu largo vestido blanco…- Me estremecí de pies a cabeza. No pude evitar sonreír. Era perfecto. Era perfecto y solamente mío. Después de 5 largos meses caí bien en la cuenta que lo nuestro iba más que en serio. –Será mejor que vayamos entrando, o mis primos nos van a sacar los lugares más cercanos al altar. Quiero tener una vista privilegiada de la boda.- Sonrió, y aún tomados de la mano, nos dirigimos a la iglesia, y nos acomodamos en el tercer banco de la izquierda. Estaba más que entusiasmada. Muy ansiosa. Y no entendía por qué, ni siquiera era mi casamiento, pero aún así, los nervios los tenía de punta.
-Pero quien es esta hermosa chica que te acompaña hoy?.- preguntó una voz a mis espaldas. Giré y vi a Zayn hablando con chico joven, de unos veinte años como mucho. Me miraba con una enorme sonrisa blanca, casi tan linda como la de Zayn, a diferencia que sus ojos eran de un profundo color verde.
-Ella es Aldi, mi novia.- El misterioso chico tomó mi mano y la apretó suavemente. –Él es mi primo, Thomas.-
-Es un gusto.- dije con una sonrisa en forma de simpatía.
-El gusto es mío, Aldi.- Pude notar como Zayn lo fulminaba con la mirada, y al instante pasó su brazo por mi cintura. La música del órgano nos interrumpió. Una hermosa muchacha estaba entrando con un largo vestido blanco, y un velo hasta el suelo. Sostenía un ramo de rosas rojas, y parecía algo nerviosa, pero lo disimulaba muy bien con la gran sonrisa que proyectaba su rostro. Fue ahí que me invadió un calor interno, y me hizo sentir más feliz que nunca. Sería algún día yo, la chica del vestido blanco?

La ceremonia terminó cerca de las 8.30, y nos dirigimos al salón de fiestas. Luces antiguas en forma de araña llenas de cristales colgaban del techo. Las mesas, envueltas en finos manteles color negro, estaban bañadas en pétalos de rosa rojos. La música clásica sonaba por todo el salón. Elegantes mozos caminaban de un lado a otro con bandejas que contenían las exquisiteces más raras del mundo. La gente se iba acomodando en las mesas a medida que iban llegando. Mi ubicación era junto con Zayn, por supuesto, en la mesa del fondo. En ella también estaban ubicados todos sus primos, que por cierto, eran muchos.
-Ella es Aldi.- dijo presentándome ante la mesa.- Ellos son Paul, Candance, Mateo, Sam, y bueno, ya conociste a Thomas.- El morocho de ojos verdes me sonrió y dedicó un guiño.
-Vení Aldi, hay espacio acá a mi lado.- Dijo Thomas palmeando la superficie de la silla.
-Aldi se sentará a mi lado, gracias por la oferta.- Dijo Zayn, matándolo con una mirada que hasta a mí me dio miedo.
-Vamos, Zayn. Puede estar a tu lado, acá hay dos lugares.- Y en efecto, eran los únicos dos lugares que quedaban libres en la mesa. Zayn me tomó de la mano y nos dirigimos a los asientos. Indicó que me sentara junto a Paul, y él se sentó a mi derecha, justo en el lugar que quedaba entre Thomas y yo. Todos eran muy simpáticos, y la estaba pasando de maravilla.
-Veni Aldi, voy a presentarte a mi tío.- Nos pusimos de pie y juntos fuimos hacia dónde habían entrado los recién casados. –Tío, ella es Aldi.-
-Hola Aldi, He oído tantas cosas de vos.- Tomó mi mano en forma de saludo.
-Espero que hayan sido cosas buenas.- sonreí tímida.
-Quiero presentarte a Ludmila. Ella es su esposa.- La mujer de blanco tomó mi mano y la apretó suavemente. Los hombres quedaron hablando vaya a saber uno de qué, y me quedé a solas con la novia.
-Felicitaciones.- Dije sin pensar mucho. Fue definitivamente, lo primero que salió de mi boca. La mujer me miró.
-Muchísimas gracias.- Dijo devolviéndome la sonrisa. – No podría estar más feliz. Jawaad es maravilloso, estoy muy feliz de haberlo conocido.- Ambas quedamos mirando a Zayn entablando conversación y riendo con su tío.
-Parece que se llevan muy bien.- Agregué, solo para hacer algún comentario.
-Y así es. Son inseparables, y tiene personalidades muy parecidas. Aldi, Zayn es un gran chico. Espero que les vaya bien.- No pude evitar sonreír.
-Gracias, yo también lo espero.- Los chicos se dieron media vuelta y se acercaron nuevamente a nosotras.
-Mi amor, el fotógrafo nos está esperando en la entrada. Quiere sacar algunas fotos del lugar.- Jawaad miraba a su esposa con los ojos iluminados. Se miraron los recién casados y se dirigieron hacia donde le sabían indicado.
-Y? Por ahora que pensas de mi familia?.- Aún con las manos en los bolsillos, Zayn esperaba ansioso mi respuesta.
-Son muy simpáticos. La verdad la estoy pasando muy bien.- Sonrió y me besó cortamente en los labios.
-Tengo que admitir que estaba algo nervioso, especialmente la parte de conocer a mis insoportables primos, pero al parecer todo va bien.- Sonreí. En ese momento la música disminuyó, y todos los integrantes de la fiesta se fueron sentando uno a uno en sus respectivos lugares.
-Vení, vamos a nuestros asientos. Ya esta por comenzar la cena.-