en la oscuridad.

en la oscuridad.

autor: hoshi. ~ ambientada en: Asylum ~ palabras: 423

«NO ENTRAR»

Se leía en el pequeño letrero, algo desgastado, que colgaba tambaleante en la tentadora puerta de madera frente a él.

Jackson se quedó observándola por varios segundos más. Las pequeñas gotas rojas poco visibles le hacían querer retroceder y no le importaba si después de eso los chicos que estaban cuchicheando en las escaleras detrás de él lo llamaban cobarde. No entraría a ese lugar ni loco, ni cuerdo.

Las historias que susurraban por los pasillos sobre el sótano de la residencia Brookline, en la cuál vivía, dudaban de ser ciertas, pero él sabía de segunda mano que si lo eran.

Habían pasado 10 años del incidente que hizo que se cerrarán las puertas de Brookline y abrieran investigaciones las cuales, después de 5 años, tanto policías como ciudadanos, dejaron de interesarse.

El propietario de la misma cambio, al igual que el director de la preparatoria New Hampshire, y con ello llegó el inicio de un nuevo año escolar.

De todas las reglas que les daban sus superiores, había una que estaba estrictamente prohibida romper: Entrar al sótano del edificio Brookline.

Y era justo lo que sus compañeros idiotas le habían retado hacer. Si no le hubieran insistido tanto en ir a su supuesta fiesta de Halloween, él estaría en casa, disfrutando de sus vacaciones por la temporada, recostado en el sofá de la sala, mientras comía de los dulces que le habría de robar a su hermano menor.

Era algo lamentable, pero preferiría eso, a esto que era casi obligado a hacer.

—Vamos Jack, no estaremos aquí toda la noche, solo es cuestión de abrir la puerta y entrar, esperar 5 minutos y estar de vuelta a la seguridad de la habitación. —comento burlesco su estúpido compañero de cuarto, Oliver.

«Si es tan sencillo, házlo tú» quiso responder pero prefirió callar, en parte su compañero tenía razón, mientras más rápido mejor.

Así que decidido, tomo el pomo de la puerta entre su mano derecha mientras que con la otra encendió la lámpara de su celular, listo para entrar.

Dió un largo suspiro y giro el pomo, la puerta crujía al ser abierta y un sudor frío bajaba sobre su nuca.

Cerro los ojos un momento antes de adentrarse al lugar, mentalizandose de que no le iba a ocurrir nada. «Después de todo, estar entre la oscuridad es algo a lo que todos estamos acostumbrados ¿no es verdad?» pensó para si mismo. Y sin más, entro.

Y la puerta se cerro detrás de él con un fuerte golpe, sellandose por completo.