Hospital WestMaeyer || Novela Colectiva

En todo momento mis recuerdos fueron borrados aquel noche cuando me sentía sola e resentida por aquel acto que mi padre se iba de la casa junto con sus maletas, mientras gritaba con las lágrimas en mis ojos llena de esperanza por tratar de escapar de ese mundo mientras  mi madre estaba embarazada cayendo de tristeza hacía la puerta, no podía evitar aquel momento, era un abandono de mi propio padre.

Desde aquel entonces no he podido olvidar con tal pesadilla  a pesar de las circunstancias que haya para hablar eso con mi madre junto con mi hermana menor Lucy que apenas cumplió los ocho años hace un mes, cuando el despertador timbró tan fuerte que mi mano lo aventó hacía la pared, suspiraba fuertemente para no querer levantarme pero tuve que hacerlo, me levantaba y me miraba al espejo con grandes ojeras, gruñía en mis adentros por verme tan espantosa.  

Estaba maquillándome, no tenía mucho tiempo sólo tapar esas ojeras junto con mi ropa para salir, alistarme completamente, era tarde, pero no podía hacer nada. Cuando termino fui con mi ropa y me puse unos jeans ajustados junto con una blusa blanca con un dibujo de un tigre de bengala, agarraba mi mochila y me iba de la casa.




Cuando llegaba a la escuela en los pasillos todos comentaban sobre el famoso "rumor" de Max Donovan, lo odiaba, ni loca iría por él aunque era tentadora pero no me gustaba para nada ese sujeto, era horrible y no me gustaba estar cerca de él.

Estaba abriendo mi casillero hasta cuando la cerré estaba el mismo Donovan, rodaba los ojos de ironía, me enfermaba estar cerca de él  —
— ¿Qué quieres Donovan? — la castaña preguntaba tan sería que se le notaba que estaba del asco, reía Max a verla — ¿Qué es tan gracioso Donovan? —
Tu voz, te nota que estas peor de lo normal — reía aquel chico que le encantaba molestarla, Emelie gruñía mientras agarraba sus libros para irse —
No estoy de humor y si no quieres que te rasguñe entonces lárgate — escupió aquellas palabras para que se fuera —
Tranquila gata sólo vine para invitarte al Hospital, aunque me caías mal pero quiero que vayas —

¿Gata? ¿Quién se cree que es? a mi nadie mi nadie me dice así ni mucho menos un muchacho de cuarta, lo miraba seria, odiaba que estuviera cerca de ahí y no hidria porque él me lo pidiera. — Déjame pensar emmm no — le decía sarcástica mientras sentía unas manos en mis hombros y mire como ¿Qué te pasa? ¿Eres tonto o qué? —

Mira Zweig, tu iras si o si al menos que quieras que todo el colegio te digan una cobarde por ser tan torpe — me decía amenazando   — Tienes una hora para decirme porque si no lo haces, te verás conmigo preciosa — sonreía sádica mente mientras se iba de ahí, cuando se fue tire los libros pateandolos por todos lados ¿!Quién se cree¡? no le tengo miedo a alguien machista pero ¿Yo Cobarde? ni que fuera una prostituta acostándose con él, estaba encabronada, enojada quería sacarme el coraje golpeando a todo el mundo —

Recogía mis libros para ir a clases, no podía evitar desquitarme con mis pobres libros pero odiaba a ese chico, enserio, no podía evitarlo es guapo y todo pero estoy harta de que siempre se meta conmigo pero sinceramente sobre el hospital era tentadora pero a la vez me daba miedo que me lastimaran o peor aún saliera muerta del hospital.



Estaba en clase de Historia del Arte, era interesante pero a la vez aburrida, anotaba todo los apuntes para el examen, no podía evitarlo era muy importante esto, así que quería hacer algo, miraba el reloj eran las once para las cinco, tenía pendiente cuando dijo que vendría en una hora siempre cumple sus promesas a pesar de todo, lo odiaba pero tenía algo de razón, siempre cumple cuando dice algo.

Estaba tan concentrada que sentí que alguien me tiraba algo, mire asqueada una bola de papel así que busque la mirada a ver ¿Quién me lo había hecho?, y ahí esta, en la puerta estaba el est*úpido de Donovan con una mirada de seductor, que asco, no me daba ganas de besarle aunque se admitía que era guapo.

Bueno viniendo el tema me levante para irme hacía la puerta, no tenía que pedir permiso a los Profesores, así que iba hacía la puerta y salia caminando unos pasillos pero cuando llegue con Donovan el mi idi*ota estaba tomando tocia por el humo mientras el me miraba — Y bien? — decía con todo claro mientras el se acercaba mirándome y yo mientras suspire pesadamente y lo mire —

— Vale, acepto pero te quede claro Donovan que no me gustan que me diga cobarde — aclare las cosas enojada mientras cruzaba los brazos y sonreía burlona mente mientras para Donovan estaba bien porque aceptara  —

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