Re: A media voz (nick&tu)

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 11:59 am

Bno amm!
aiier no puede subir! porqe!!
pelie con mi mami & no sentia animos de nada!
& hoi tampoco los tengo pero!!
les subire su maraton!!
de 6 caps!!
solo por qe qiererro a mis lectoras!!
palabraa de jonathiqaa-lovathiqaa!!

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 12:17 pm

A media voz (nick&tu) - Página 19 Intimidad

Capitulo 3(parte 6)

Ella gritó, sintiendo cada contracción erótica que la llevaba al éxtasis. Después se dejó caer, húmeda, contra su pecho, mientras sus cuerpos todavía estaban unidos, y metió la cabeza bajo su barbilla.
Él la rodeó con sus brazos y la abrazó con fuerza, sintiéndola, tan frágil y tan fuerte al mismo tiempo. Y continuó abrazándola mientras dormía.
El duelo de los cuentos de hadas le había enseñado algo a Nick: los dos estaban encantados. Pero ¿qué posibilidades tenían de vivir felices y comer perdices?

________ tenía mucho calor.
Las mantas le pesaban y no podía respirar. Abrió los ojos para mirar el reloj de la mesilla, y se asustó al despertarse en un lugar extraño.
El despertador no estaba en su lado de la cama, y lo que le pesaba sobre el cuerpo no eran las mantas, sino el cuerpo desnudo de un hombre. La estaba abrazando, y aquello era lo que le daba tanto calor.
Se las arregló para mirar a la otra mesilla y vio el reloj del hotel. Eran las cuatro y media de la mañana. Podía quedarse dormida de nuevo en los brazos de su amante, y quizá hicieran el amor de nuevo al despertar, somnolientos, un sábado por la mañana.
Con un suspiro de impaciencia, se acurrucó contra él, notando un cosquilleo de deseo cuando su espalda se apretó contra el vientre del hombre. Podrían desayunar juntos.
Desayunar a la luz del día.
Frunció el ceño y abrió los ojos. Aquello era imposible.
En cuanto su mente se despertó por completo, se dio cuenta de lo tonta que había sido al quedarse dormida en el hotel. No tenía la intención de hacerlo, por supuesto, pero estaba tan adormilada después de hacer del amor, que se había sentido muy bien al quedarse junto a él y cerrar los ojos.
Sin embargo, tenía que recordar que no estaba embarcada en una aventura normal; era una fantasía secreta que se desvanecería a la luz del día. Se le puso la carne de gallina. Menos mal que había conseguido despertarse. Tenía que salir de allí, porque una parte de ella quería conocer a aquel hombre, y una voz muy fuerte en su interior le advertía que no tentase al destino.
Se incorporó un poco en la oscuridad y le acarició el pelo. Estaba tan profundamente dormido que el ritmo lento de su respiración no se alteró cuando lo rozó. Mientras lo hacía, se le ocurrió una idea.
Podría encender un segundo la luz, lo suficiente para satisfacer su curiosidad. ¿Lo reconocería vagamente, o sería un completo extraño?
Si él no se enteraba de que ella lo conocía, las cosas no cambiarían nada.
Sin embargo, ella sí lo sabría.
Alargó la mano lentamente hacia la lámpara, con los dedos temblorosos, pero cuando tocó el interruptor, se detuvo.
¿Realmente quería saberlo? Una vez que conociera la identidad de su amante, aquella fantasía deliciosa terminaría. Incluso aunque él no supiera que lo conocía, nada volvería a ser lo mismo. Cabía la posibilidad de que él fuera alguien que no le cayera bien.
No. No merecía la pena arriesgarse. Era mucho más intrigante como fantasía. Él era como ella quería que fuera: podía parecerse a Mel Gibson, o a Denzel Washington. Sonrió para sí misma. Ni siquiera tenía que elegir. Mel y Denzel podían estar con ella en viernes alternos. Él era divertido, brillante, y tenía ética. Exactamente, como a ella le gustaba. Retiró la mano de la lámpara. Por el momento, confiaría en que él guardara su secreto.
Se deslizó de la cama y buscó a tientas la ropa y las sandalias. Una vez que estuvo vestida, cruzó la habitación guiándose por la pared. Cuando su mano tocó el metal frío del picaporte, se detuvo.
¿Qué pasaría si él malinterpretaba su escapada a medianoche?
¿Y si él no volvía a ponerse en contacto con ella?
Al pensarlo, el corazón le dio un vuelco, y estuvo a punto de encender la luz para asegurarse de que podría reconocerlo en el futuro. Pero algo la detuvo. Fue un escalofrío, una sensación, algo de miedo y de excitación. Rebuscó en el bolso y sacó una libreta y un bolígrafo.
Era la primera vez que escribía una nota completamente a oscuras. Probablemente, parecería que su letra era infantil. Entonces decidió escribir un mensaje tan simple como el de un niño.

Quiero verte de nuevo. A la misma hora, la semana que viene. Yo reservaré la habitación, G.

Le pareció que al arrancar el papel de la libreta había hecho muchísimo ruido, pero después pensó que seguramente haría falta dar martillazos al lado del oído de su amante para despertarlo. Lo había dejado exhausto. Sonrió de nuevo en la oscuridad, sintiéndose horriblemente contenta consigo misma, mientras se acercaba de nuevo a la cama para dejar la nota sobre la mesilla de noche.
Sin poder resistirse, se inclinó y le dio un beso en la mejilla. Notó que le raspaba los labios, porque la barba ya le estaba creciendo.
Él ni siquiera se movió. Ni cuando lo besó, ni cuando salió silenciosamente de la habitación.
¿Se estaría volviendo loca?, se preguntó mientras conducía por las calles de Chicago de madrugada. ¿Había perdido la cabeza por completo?
Probablemente.
¿Le importaba?
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To be continued!!

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 12:28 pm

Capitulo 3(parte 7) (maraton 2/6)

En aquel momento, no. La radio del coche estaba sintonizada en una emisora de noticias, pero aquello no iba con su estado de ánimo, así que cambió a otra que emitía canciones clásicas de rock and roll. «She loves you, yeah, yeah, yeah…». Cantó en voz alta con los Beatles, pero cambiando la letra de la canción: «He loves me, yeah, yeah, yeah…». Se sentía tan inmadura como una estudiante de primer año de la facultad al principio de una relación.
Siguió cantando la canción, sintiéndose libre y algo temeraria.
Había ido a la habitación de aquel hotel porque había sido temeraria. Porque tenía veintiocho años, y si no hacía algo imprudente en aquel momento, pronto sería demasiado tarde.
De repente, se paró en un semáforo y dejó de cantar. ¿De dónde había salido aquella idea de que sería demasiado tarde?
Cuando el semáforo se puso verde, se dirigió hacia un bar y compró un café para llevar.
En el coche, le dio un buen trago y disfrutó de la inyección de cafeína. Se dio cuenta de que estaba muy cansada y emocionada con su aventura. La locura y la incertidumbre ya habían desaparecido de su vida y tenía una cita para la semana siguiente, así que no había necesidad de perder más tiempo en la tierra de la fantasía.
Por supuesto que no era demasiado tarde. Pero sí sería demasiado tarde, si no tenía cuidado, para llegar a ser socia del bufete. Cambió la emisora de radio otra vez y sintonizó las noticias.
Mientras hacía una lista mental de todas las cosas que tenía pendientes aquel día, se dio cuenta de que no había trabajado hasta altas horas de la noche durante varios días. Intentó, además, calcular el tiempo que había perdido al ir y venir del gimnasio. Quizá debería comprar una máquina para hacer ejercicio en casa.
Pero tampoco tenía tiempo de investigar cuál era la mejor y de ir a comprarla. Y tampoco tenía sitio donde colocarla en su loft de Lincoln Park, así que desechó la idea. Quizá debiera quedarse trabajando más días por la noche e ir menos al gimnasio, pensó mientras metía el coche en el garaje de su edificio.
Siempre pensaba con más claridad en su casa, y suspiró de satisfacción mientras subía los cuatro pisos que había hasta su apartamento. Le encantaba su loft. Era un antiguo almacén con techos a una altura de cuatro metros, las tuberías y las vigas vistas y los pilares de madera.
Ella misma lo había comprado y lo había decorado, y también le encantaba limpiarlo.
Sin embargo, no le encantaba la parte del mantenimiento y la reparación de averías. La primera cosa que hizo cuando entró fue comprobar el cubo que había puesto bajo el fregadero. Estaba medio lleno, así que la gotera no iba peor. De todas formas, tendría que recordarle a Nick su promesa de que la ayudaría. Tiró el contenido del cubo y volvió a ponerlo bajo el fregadero. Después se quitó la ropa, la metió en la cesta de la ropa sucia y fue hacia la ducha.
Sintió los pezones muy sensibles bajo el agua caliente. Se enjabonó y recordó las manos de su amante sobre su piel. Le resultaba muy extraño conocerlo tan íntimamente y, sin embargo, no poder ponerle un rostro.
Sabía, por el tacto, que tenía un cuerpo atlético y un poco peludo. Recordó que era alto, porque lo había visto en el baile de disfraces de Mardi Gras. Alto, pero no enorme. Le parecía que su pelo era muy oscuro, pero no tenía ninguna pista sobre cómo era su cara.
Se puso unos pantalones viejos y una camiseta, y tomó los útiles de limpieza. Con todas las horas que trabajaba, podría permitirse el lujo de contratar a una asistenta, pero sin embargo, le gustaba aquel ritual del sábado por la mañana. Además, odiaba que entraran extraños en su apartamento. Podrían cambiarle las cosas de sitio, o meterse donde no debían.
Mientras limpiaba, recordó lo que le había dicho su amante. Ella no era una maníaca del control. Simplemente, le gustaban las cosas ordenadas y a su manera. ¿Qué había de malo en ello? Quizá debiera llevar unas esposas a su próxima cita. Así vería lo que era de verdad una maníaca del control.
Sintió que el calor le recorría el cuerpo, y decidió llamar al hotel en aquel mismo momento para reservar la misma habitación.
Ella no era una mujer de las que posponían las cosas, especialmente las cosas que quería, así que tomó la guía telefónica, buscó el número del hotel Shaftsbury y llamó.
—Buenos días —dijo ______ cuando respondieron—. Me gustaría hacer una reserva para el próximo viernes por la noche. La habitación 1604.
—Un momento, por favor…
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To be continued!

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 12:46 pm

Capitulo 3 (parte 8 ) (maraton 3/6)

_______ no sabía por qué aquella mujer, ni todo el mundo, se preocupaba en usar aquella frase inútil. Siempre significaba que había que esperar interminablemente, escuchando un hilo musical cuya melodía no guardaba el menor parecido con la composición original. Afortunadamente, tenía un teléfono inalámbrico, con lo cual podía seguir limpiando.
Al cabo de un minuto, la mujer volvió.
—Lo siento, señora, pero la habitación que usted desea ya está reseñada. Puedo darle otra.
—¡No! Quiero decir, perdone, pero tiene que ser ésa —por primera vez, sintió no tener otra forma de contactar con su amante misterioso. Se vio a sí misma vagando por el hotel, preguntándole a todos los extraños con los que se cruzara si eran Neptuno.
—Lo siento, señora, pero esa habitación ya está reservada para el próximo viernes.
—¿Y no podría usted trasladar a esa gente a otra habitación? Es muy importante que tenga la habitación 1604. Soy… eh… muy supersticiosa.
—Y también lo es el caballero que acaba de reservarla hace un cuarto de hora. Él ha dejado muy claro que quería esa habitación.
—Hace un cuarto de hora… —entonces lo entendió todo y sintió una punzada de irritación. Era un machista y un déspota… Ella le había dicho que reservaría la habitación para la semana siguiente. Lo había dejado escrito en su nota. Bueno, los dos podían jugar a ser déspotas—. ¿Y el viernes siguiente?
—Un momento, por favor.
Mientras esperaba, limpiando las persianas, murmuraba maldiciones al ritmo del hilo musical.
—Señora, esa habitación estará disponible en enero del año próximo.
Genna se quedó con la boca abierta por aquel completo descaro… Nadie excepto Neptuno podía ser tan arrogante. Tenía que pensar en un castigo especial para su dios del mar particular.
—Gracias.
—¿Quiere que se la reserve para entonces?
—No, gracias.
Se acercó a la mesilla y colgó con tanta suavidad que se quedó maravillada de su propio control. Era evidente que Neptuno había hecho una reserva permanente.
Tenía que admitir que era razonable que hubiera reservado la habitación para asegurarse de que la tendrían disponible cada viernes, pero el hecho denotaba una petulancia que a _______ la dejaba sin habla.
—Egocéntrico… —iba a empezar con una retahíla de insultos, pero de repente oyó el timbre del telefonillo.
Era un poco raro, porque no estaba esperando a nadie.
Quizá fuera Nick, que había ido a arreglarle el grifo.
Tuvo una ligera punzada en el estómago mientras iba hacia el vestíbulo. Todavía se sentía extraña por cómo habían terminado la conversación en su despacho. Él había hecho que pensara en cosas en las que no quería pensar. No estaba segura de querer verlo tan pronto de nuevo. Sin embargo, necesitaba que le arreglara el grifo.
Cuando respondió, se llevó una sorpresa.
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To be continued!

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 2:13 pm

Capitulo 3 (parte 9) (maraton 4/6)

—Soy Demi.
—Sube —le dijo, preguntándose qué haría Demi allí. No vivían tan cerca, y además, se habían visto la noche anterior.
No tardó mucho en averiguar lo que quería su mejor amiga.
—Muy bien, dispara —le dijo Demi en cuanto entró por la puerta, con dos cafés en vasos de plástico en las manos y una bolsa de donuts bajo el brazo. Tenía el pelo húmedo de la ducha, y las mejillas enrojecidas por el ejercicio prolongado.
_______ parpadeó.
—¿Has ganado el partido de squash?
Demi sonrió malvadamente.
—La he borrado del mapa. Ahora estoy en el puesto número tres de la lista del club. Espero estar en el número uno antes de que termine el año.
—Guau —algunas veces, se le olvidaba que Demi era igual de ambiciosa que ella. No era raro que fueran tan buenas amigas; se parecían mucho.
—Y ahora es tu turno de hablar. Te sacaré la verdad aunque tenga que matarte.
__________ supo que era inútil resistirse. Si su amiga había concentrado toda su energía en un objetivo, lo conseguía. Otro rasgo que tenían en común era la obstinación. Tomó uno de los cafés, porque sabía que los dos eran iguales: con leche y poco azúcar.
Después tomó un par de platos, un par de cuchillos, la crema de queso y las servilletas, y ambas se sentaron a la mesa de la cocina. Cuando estuvieron instaladas, ________ le dio un trago a su café como si fuera whisky, para reunir valor.
Todo lo que consiguió fue calcinarse la lengua.
—¿Y bien? —presionó Demi, con los ojos clavados en ________ como si fueran dos escalpelos, listos para hacer trizas cualquier excusa que ella pudiera darle.
—He conocido a un hombre —dijo ________, finalmente, rindiéndose a lo inevitable.
—¿Has conocido a un hombre y estás teniendo las mejores relaciones sexuales de tu vida? ¿O sólo es una cuestión de tener una cita para pasar el rato?
—Lo primero —respondió ______, sin querer ahondar demasiado.
—Oh, lo sabía —sonrió Demi, encantada—. ¿Sabes? La única razón por la que he seguido siendo amiga tuya después de casarme con Joe ha sido que así podría tener una vida sexual indirecta y excitante. Tengo que decirte que has sido toda una desilusión, hasta este momento —mientras hablaba, rebuscó en la bolsa y sacó un donut mientras sonreía sin disimular su alegría.
—¿Quieres una servilleta? —dijo _____, y se levantó a medias.
—¡Siéntate! —le ordenó Demi, cortando en dos mitades el donut con precisión—. Y habla.
—No te va a gustar.
—Estás disfrutando mucho. ¿Por qué no me va a gustar? —entonces la miró con los ojos entrecerrados—. Estás disfrutando del sexo, ¿verdad?
—Del mejor sexo de mi vida —susurró ella, sin poder evitar ruborizarse.
Demi se carcajeó.
—Muy bien. ¿Y quién es él?
Aquélla era la parte que _______ temía. Tomó una servilleta y limpió una manchita de café de la superficie de la mesa.
—No lo sé.
Demi se quedó en silencio mientras masticaba el donut. La miró.
—¿Qué significa que no lo sabes? ¿Estás acostándote con un fantasma?
—No es un fantasma —y otra sonrisa curvó su boca—. Es un dios del mar.
—No sé si te funciona el cerebro. ¿Quién es?
—Por eso no te conté nada anoche cuando salimos del cine. Me estoy acostando con un extraño.
Demi tragó y dejó el donut sobre la mesa con una expresión de terror en el rostro.
—Y yo que creía que eras lista. ¿Es que estás eligiendo a tipos en los bares, o algo así?
—No. No es nada de eso. Puede que lo conozca, pero no lo creo. Es sólo que siempre hemos hecho el amor en la oscuridad más completa —entonces, apoyó la cabeza entre las dos manos y miró a la mesa—. Es imposible de explicar. Olvida lo que te he dicho.
—Darren no me espera hasta las tres. Será mejor que empieces a explicármelo.
_________ miró a Demi y observó su cara de preocupación. Aquella mujer era como una hermana para ella, y se merecía la verdad. Y quizá pudiera ayudarla a poner en orden sus confusos sentimientos.
Respiró hondo y empezó a hablar.
—¿Te acuerdas de la convención de la empresa a la que fui, en Nueva Orleans?
Demi asintió.
—Bueno, había un jardín…
Fue un alivio hablar libremente de su extraña relación. Demi la escuchó totalmente petrificada, sin apartar la mirada de su cara, sin morder el donut mientras _______ hablaba de la noche de la fiesta de disfraces y de la nota que le había dejado al hombre que dormía, sólo unas horas antes.
Cuando terminó de contar la historia, Demi se quedó callada durante un buen rato.
—Bueno. ¿Qué piensas? ¿Estoy loca?
—Creo que quizá sea él —le dijo su amiga, asombrada.
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To be continued...

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 3:37 pm

Capitulo 3(parte 10) (maraton 5/6)

—¿Quién? —_______ sintió una punzada de irritación. Parecía que Demi, desde que se había casado, pensaba que ella tenía que hacer lo mismo.
—El que te convencerá de que en la vida hay algo más que trabajo.
—No lo entiendes.
—Sí, cariño, sí lo entiendo. Crecimos juntas, ¿no te acuerdas? Cuando llevabas a casa las notas y si eran todos sobresalientes pero tenías un notable, te pasabas dos semanas enfadada. Nunca me lo dijiste, pero yo creí que te culpaste a ti misma de que tus padres se separaran.
—De verdad, no creo que…
—Siempre estás trabajando para superarte, para superar todos los límites. Pero la vida no es un marcador de puntos. ¿Qué nota crees que tendrías por tu vida en este momento, eh? Un sobresaliente en la asignatura de lo profesional, y un cero en todo lo demás.
—Bueno, ahora tengo vida sexual. De matrícula de honor —dijo ________, levantando la barbilla, con el instinto competitivo exaltado.
—Una cana al aire con un extraño no es una relación real. Sólo te sube la nota a un dos. Pero quizá ese tipo sea un paso en la dirección correcta. Quizá él te ayude a conseguir una vida real.
—¿Por qué de repente todo el mundo está tan interesado en mi vida personal? —quiso saber _______, sintiendo que se le enrojecía la cara de indignación.
—Define «todo el mundo».
—Tú, Nick e incluso el extraño, ayer, me contó un cuento de hadas sobre una princesa maníaca del control.
La carcajada que soltó Demi le salió de lo más profundo.
—Bueno, princesa ________, ¿y qué vas a hacer al respecto?
Antes de que pudiera contestar, volvió a sonar el telefonillo.
Aquella vez sí era Nick. _________ apretó el botón para abrir la puerta del portal y miró a Demi.
—Qué casualidad. ¿Te llamó él?
—¡No! —respondió su amiga—. Me imaginé que estabas en un lío yo solita, por tu actitud de ayer después del cine.
Continuaron mirándose fijamente durante un instante, y después _______ bajó la vista.
—Estaría enfadada si no tuvieras toda la razón. Demonios. ¿Qué demonios estoy haciendo?
Mientras estaba en la puerta, esperando a que Nick subiera, se dio cuenta de que no quería verlo en aquel momento. Era todo demasiado extraño y se sentía insegura. Si sus dos mejores amigos se unían para hablar de aquel asunto, estaría perdida.
Miró a Demi para rogarle que no hablara de ello delante de Nick, pero ya era demasiado tarde. Él estaba llamando a la puerta.
___________ abrió y se obligó a sonreír.
El hombre que estaba allí no era un abogado ni un ejecutivo, sino un trabajador que llevaba una caja de herramientas en la mano.
—Hola —dijo—. ¿Ha llamado alguien a un fontanero?
Aunque sus palabras tenían un tono burlón, su mirada examinó el rostro de _______ como si estuviera intentando leerle el pensamiento, y una vez más, ella se ruborizó. ¿Cuándo dejarían aquellos dos de meterse en su vida personal?
Ella dio un paso hacia atrás.
—Vamos, pasa. Únete a la fiesta.
Se apartó para que entrase, observando atentamente la cara que ponía cuando viera a Demi, pero pareció que se sorprendía genuinamente. Le dedicó a Demi la sonrisa destinada a los viejos amigos.
—Hola, Demi —le dijo, mientras dejaba la caja en el suelo y se acercaba para darle un beso en la mejilla—. ¿Qué tal están los niños?
—Muy bien —respondió ella.
«¿Lo sabe?», le preguntó a ______ silenciosamente, formando las palabras con los labios mientras él se volvía por su caja.
«¡No!», respondió ________ de la misma forma, sacudiendo la cabeza frenéticamente.
Él no sabía nada de sus escapadas sexuales con un extraño, y ella no quería que lo supiera. No estaba segura de por qué, pero no quería.
Nick llevaba unos vaqueros desgastados y una camiseta vieja, pero de todas formas, estaba muy atractivo.
—¿Te apetece un poco de café? —le preguntó _______—. Puedo hacer una cafetera.
—No, gracias —se agachó y abrió la puerta que había bajo el fregadero—. Vosotras seguid hablando de vuestras salvajes vidas sexuales, y yo fingiré que no oigo nada.
__________ puso los ojos en blanco, como si ella y Demi no estuvieran haciendo exactamente aquello, y dijo alegremente:
—Demi, ¿qué tal te salió la receta del guiso de bonito?
Demi sonrió también y subió la voz para que Nick no se perdiera ni una de las palabras.
—Deliciosa. Le añadí las patatas al final, cuando le quedaban diez minutos, y un poco de laurel.
—Oh, ya está bien. Se me está haciendo la boca agua —dijo Nick, desde la cocina.
Demi empezó a reírse.
—Eh, Nick. Eso me recuerda que vamos a dar una cena la semana que viene. Joe tiene una directora de relaciones públicas nueva en la empresa. Es soltera y no conoce a nadie aquí. A él le parece que haríais buena pareja.
Nick se levantó, y la camiseta le marcó los músculos del pecho y de los brazos mientras apretaba con unos alicates la unión del grifo y la tubería. Le lanzó una mirada a _______ antes de volverse hacia Demi. _____ tuvo un sentimiento extraño, casi de celos, cuando él dijo:
—Claro. Joe tiene muy buen gusto para las mujeres —y le guiñó un ojo a Demi antes de lanzarle una mirada que hizo que enrojeciera—. Aunque de ti no se puede decir lo mismo. Me dejaste por él.
Demi enrojeció aún más.
—Eso no es exactamente… Me refiero a que fuimos los dos los que…
Nick se rió.
—Olvídalo. Tú estabas destinada a Joe. Supongo que yo estoy destinado a otra persona.
—Quizá la directora de relaciones públicas de Joe —dijo _______ con aspereza. Y ella que había pensado que aquellos dos estaban interesados en su vida personal. Aparentemente, la vida amorosa de Nick era mucho más interesante.
Él se encogió los hombros.
—¿Quién sabe?
—¿Y qué pasa conmigo? —interrumpió _______—. ¿Yo no estoy invitada a la fiesta?
—Pues claro que sí.
Ella entrecerró los ojos.
—Pero no vais a emparejarme con nadie, ¿no? —odiaba profundamente aquellos emparejamientos, porque siempre resultaban ser un desastre. Prefería elegir ella misma a sus hombres.
—No. Todo el mundo sabe que no estás disponible emocionalmente. Pero te queremos, así que ven de todas formas. Y si quieres, puedes traer a alguien —Demi le lanzó una mirada desafiante, que ella no acusó porque Nick estaba allí delante.
—Eso de que no estoy disponible no es cierto. Así que asegúrate de poner comida extra por si decido llevar a alguien de verdad —dijo ella, y fue a tomar su agenda electrónica de su escritorio—. ¿Cuándo es la cena?
—El viernes por la noche.
Se oyó un sonido metálico y una maldición cuando a Nick se le cayó el grifo al suelo de la cocina.
—¿El viernes? —dijo ella, aturdida. De todas las noches de la semana, ¿tenía que ser el viernes? Aquélla era su noche con el extraño. Demonios, demonios y demonios—. El viernes. Oh… eh… creo que no podré quedarme hasta muy tarde. Tengo… eh… un desayuno de negocios el sábado temprano.
Demi le lanzó una mirada que podía traducirse como: «Sé perfectamente adonde vas a ir, y no es a un desayuno de negocios».
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To be continued!

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 3:52 pm

Capítulo 4

_______ llevaba varios minutos mirando absorta las figuras que hacía el salvapantallas de su ordenador. De repente, dio un respingo.
¿Qué demonios estaba haciendo, perdiendo el tiempo de aquella manera?
Volvió la mirada hacia el teléfono. Era todo culpa de él. Si al menos pudiera llamarlo por teléfono, escuchar su voz, y quizá ir con él a tomar algo o al cine, dejaría de tener fantasías todo el día.
Lo cual venía a demostrar que lo que había dicho Demi era mentira. Ella sí estaba disponible emocionalmente. Era su amante el que no lo estaba, hasta el viernes por la noche.
Miró la hora. Las tres, cinco minutos y dos segundos. Ojalá no faltara tanto para el viernes. ¿Es que nunca iba a llegar?
Sacudió la cabeza e intentó concentrarse en el informe en el que estaba trabajando.
—Ah, ________.
Miró hacia arriba y vio a Maureen, su secretaria, en la puerta, con un papel en la mano.
—Hola. ¿Qué ocurre?
—Es acerca de este memorándum.
—El edificio que tenía el sistema de calefacción estropeado le costó a nuestro cliente dos días de productividad porque hubo que cerrarlo. ¿Cuál es el problema?
Maureen sonrió.
—Creo que deberíamos mudarnos allí. Imagínate tener una oficina con el clímax controlado.
—¿Con el clímax controlado? ¿Yo he escrito eso? —__________ se tapó la boca con la mano—. Quería decir clima. Clima controlado.
Maureen puso el memorándum sobre la mesa de ________.
—Ha sido un tropiezo freudiano.
—Gracias por advertírmelo —dijo ella, débilmente. Oh, Dios, estaba viendo sexo por todas partes.
Nunca había pensado que fuera especialmente imaginativa, pero aquellos días le parecía que podría escribir su propia versión del Kama Sutra. Con dibujos bien detallados.
Sacudió la cabeza de nuevo, como si quisiera ponerse el cerebro en orden. Después tomó un cuaderno y se puso en camino hacia el despacho de Nick, para recabar más detalles del caso Knight. Quizá que algo o alguien le recordara lo triste que podía ser el amor haría que el cerebro volviera a ser lo que era.
Salió por la puerta de su despacho y, de repente, notó que sus pechos colisionaban con otro pecho fuerte y musculoso. Tomó aire y tuvo una sensación extraña que le recorrió el cuerpo.
Alguien la tomó por los hombros con dos manos firmes y cálidas, y al mirar hacia arriba, se encontró a Nick observándola, respirando hondo también.
—¿Estás bien? —le preguntó.
—Aparte de haber disminuido una talla de sujetador, sí —dijo, pero tenía la respiración entrecortada al fijarse en el contorno de su tórax y en su camisa impecablemente blanca—. Y es posible que te haya arrugado la camisa.
Él todavía la tenía agarrada por los brazos, y el calor que le traspasaban sus dedos a los antebrazos era asombroso. Al estar tan cerca de él, olió el almidón de la camisa, planchada profesionalmente, y vio cómo su pecho subía y bajaba con la respiración, y notó algo como… bueno, como una atracción. Oh, Dios. Realmente, se estaba volviendo loca. Incluso estaba proyectando su deseo sexual hacia Nick. Miró hacia arriba y vio que él continuaba observándola, con el ceño fruncido.
—¿Seguro que estás bien?
—Sí —los nervios hicieron que empezara a reírse, y dio un paso hacia atrás—. Iba a verte a tu despacho.
—Y yo venía a verte al tuyo —dijo él, y le sonrió. _____ sintió que el pulso, que había empezado a calmársele, se le aceleraba de nuevo. ¿Cuántas mujeres había visto ella caer bajo el hechizo de aquella sonrisa? Y nunca la había afectado antes.
—Supongo que entonces podemos quedarnos en tu despacho, que está más cerca —dijo él.
—Sí, claro, ningún problema —entonces ella se volvió, entró en el despacho y se dejó caer en su silla.
Se sentaron uno frente al otro, y ___________ se preguntó si él también habría sentido aquella extraña punzada de atracción. Si lo había hecho, no lo había demostrado.
—Tenemos un problema con el caso Knight —dijo él sin ningún preámbulo.
Todos los pensamientos sobre el sexo se desvanecieron en cuanto él pronunció aquellas palabras.
_________ odiaba aquello. Había tres niños pequeños en la fotografía que Tiffany Knight les había enseñado. No quería que la familia Ross se rompiera. Le caía bien Tiffany, aunque no fuera la mujer más inteligente que había conocido.
—¿Cuál es ese problema? —abrió el cuaderno y se preparó para tomar notas.
—He hablado con el abogado del señor Knight hoy, y le he explicado lo que ha dicho nuestra clienta, que ella no ha cometido adulterio y que le gustaría que las cosas se arreglaran.
_______ asintió. El primer deber de los abogados en un caso de divorcio era explorar la posibilidad de que hubiera una reconciliación.
—Ellos contrataron a un detective privado que tiene pruebas de que Tiffany sí tenía una aventura.
_______ frunció el ceño.
—Pero parecía sincera cuando nos dijo que no se había acostado con ese actor de poca monta. ¿Qué puede haber visto ese detective? —preguntó. Cerró los ojos y recordó la historia de Tiffany.
—Quizá jugara con el doctor Ersatz más de lo que ha admitido —sugirió Nick.
Ella abrió el informe con las notas que había mecanografiado en el ordenador y empezó a buscar.
—Dijo que habían tomado café y habían comido juntos —miró a Nick—. Puede que dieran la impresión de ser amigos muy íntimos.
Continuó leyendo, y entonces tuvo una punzada de angustia.
—Oh, oh. Mira esto.
Él rodeó el escritorio y se inclinó sobre el hombro de _______ para mirar la pantalla. Ella intentó concentrarse en su trabajo, pero Nick estaba tan cerca que notaba el calor que irradiaba su cuerpo. Cuando él se apoyó en su escritorio, ella vio el vello oscuro de su antebrazo, y notó lo fuerte que era su mano.
Tenía unas manos muy bonitas. Cuadradas y decididas.
—Ya veo. Su marido le dijo que quería el divorcio un día después de que la señora Knight comiera con el falso doctor. Demonios. Ella entró en aquel edificio justo después de que entrara el actor. Es fácil llegar a la conclusión de que se estaba acostando con ese idiota. Eso es lo que está en el informe.
_____ asintió, mientras se obligaba a concentrarse en el trabajo.
—Sí. Y sabemos que estuvo en aquel apartamento durante un rato, buscando su buzón y leyendo el artículo del periódico.
—Son todo pruebas circunstanciales, pero… —Nick se irguió y empezó a caminar—. Eso no ayudará a salvar su matrimonio.
—No. Todo lo que tenemos es su palabra de que no se acostó con él.
—Tenemos que encontrar a ese doctor Ersatz… ¿Cuál era su nombre real?
Ella consultó sus notas.
—Nathan Kress.
—Necesitamos que corrobore su historia.
—Oh, eso sería divertido. Supongo que quieres que lo encuentre, ¿no?
Él empujó suavemente el respaldo de su silla, obligándola a que lo mirara. Incluso mirándolo desde abajo, su cara era impresionante, con los ojos grises y su pelo negrísimo.
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To be continued!!

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 3:57 pm

Hasta aqi su maraton!!
esperoo que lo haiian disfrutadoo!!
las qieroo!!
comenteen muchoo!!
palabraa de jonathiqaa-lovathiqaa!!

por Invitado Dom 16 Oct 2011, 5:32 pm

Diooooos, me estoy sintiendo atraida por Nick sin saber que el es Neptuno.
SIGUELA NOW, esta MUY interesante-.

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Dom 16 Oct 2011, 9:11 pm

JonasLoveP escribió:Diooooos, me estoy sintiendo atraida por Nick sin saber que el es Neptuno.
SIGUELA NOW, esta MUY interesante-.

iiiaa vez!!
siempre posteo buenas historias!!
palabra de jonathia-lovathiqaa!

por **gabby** Dom 16 Oct 2011, 11:36 pm

=O OMJ!!!!!! SSSIII ME ESTOY FIJANDO EN NICK, AUNQUE NO CREO QUE ESTO VAYA A TERMINAR MUY BIEN DESPUES DE SABER QUE EL ES NEPTUNO=( DE TODOS MODOS YA QUIERO QUE SEPA! QUE EMOCION, ME ENCANTO QUE NICK YA TUVIERA RESERVADA LA HABITACION POR MUCHO TIEMPO=D

por **angiemu** Lun 17 Oct 2011, 11:56 am

wwwwowwwwww me encanta y te tengo que confesar mujer que solo cree una cuenta aqui para decirte lo fascinante que es tu novela!!!!!!!!!!!! sigue asi la amo.... y no se porque pero ya quiero que todo el asunto de neptuno se descubra jajajaj sigue asi me encanta!

por **SandyJonas** Lun 17 Oct 2011, 2:30 pm

SIGUEEEEEEEEE!!!

por **jamileth** Lun 17 Oct 2011, 4:02 pm

sigue................

https://onlywn.activoforo.com/t7470-asi-lo-quiso-el-destino-un-jonas-y-tu

por **heyIt's Egla Lovato Jonas** Lun 17 Oct 2011, 4:15 pm

angiemu escribió:wwwwowwwwww me encanta y te tengo que confesar mujer que solo cree una cuenta aqui para decirte lo fascinante que es tu novela!!!!!!!!!!!! sigue asi la amo.... y no se porque pero ya quiero que todo el asunto de neptuno se descubra jajajaj sigue asi me encanta!

aww de verdad?
qee lindaa!!
me da mucha alegria qe motive a una fantasmita a hacerse lectora official!!
asi qe bienvenidaa!!
palabraa de jonathiqaa-lovathiqaa!!

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