Re: Take Care {Larry Stylinson} Capítulo 19 [Septiembre 21]

por **Vicious ϟ** Dom 13 Abr 2014, 2:14 pm

AdrianaDirectioner:) escribió:sigue <3

Sigo *:

por **Vicious ϟ** Dom 13 Abr 2014, 2:16 pm

Angeles escribió:"Louis no estaba enamorado, pero le gustaba sentirse querido, y con el tiempo se había dado cuenta de que Thomas había sido el único y será el único que realmente lo había amado. Triste, pero era lo único que tenía, y vamos, no es como si mereciera más que eso. Lo tenía claro desde hacía un buen tiempo. De hecho, se lo habían dejado claro hace años, pero él no había querido creerlo, y la realidad se había encargado de darle una fuerte bofetada."
Justo lo que me contestaste. Dios, pobre Lou, me siento mal ahora :c
Encima el estúpido de Thomas... que mierda, todo. Bueno, casi todo.
Harry estuvo ahí para ayudarlo y contenerlo, y fue todo lindo, lo adoro <3
Espero que Lou pueda superarlo... y vivir feliz al fin u.u
Me gustó el capitulo!!!!
Besos!

Me alegra que hayas entendido a Louis! Pobrecito, me da pena que sufra ): wuasljkadjkasda
Gracias por leer *:

por **Vicious ϟ** Dom 13 Abr 2014, 2:32 pm

Johanna139 escribió:¡Hola! Siento no haber comentado,pero la escuela no me deja mucho espacio;bueno tengo que decir que en cierta forma comprendo a Louis, sabes,su miedo,tambien tengo que decir que Thomas es un idiota,un jodido bastardo idiota cobarde que sólo hiere a Louis porque "lo hace sentir mejor".Idiota, espero que Louis realmente lo comprenda esta vez,que vea que ese bastardo no merece su amor y que deje que Harry entre a su vida que le ayude a superar sus miedos...Bueno, realmente me gusto el capitulo ( exceptuando al idiota de Thomas y su mierda) porque por fin Louis ha dejado "entrar" a Harry a su vida.Síguela cuando puedas-xx Johanna xx

No te preocupes, yo no he podido actualizar por la misma razón. Louis... ya comprenderá que estaba mal, al menos Harry se lo deja bien claro. Me alegra mucho que te haya gustado! Gracias por leer y comentar *:

por **Vicious ϟ** Dom 13 Abr 2014, 2:36 pm

Gabriela Arenas escribió:¡Hola! Soy nueva lectora dime Gaby.
Quiero decirte que la novela esta super genial, escribes muy genial.
Por otra parte el hecho de que Louis ande detras del culo de Thomas me enoja y mucho (andaba ya que en este capitulo abrio sus ojitos y se dio cuenta de la verdadera persona que es Thomas).
En cuanto al bromance de Liam y Zayn dejame decirte que es una de las más tiernas jiji.
Y bueno eso era siguela no importa cuando pero siguela.
PSDT: perdon por el comentario tan pobre pero estoy un poco cansada y me termine de leer la novela a las 11:42 pm y pues tenia que comentar ya que soy muy compulsiva y no puedo esperar hasta mañana además no estoy muy inspirada que digamos pero tratare de comentar la proxima con al menos un poco de creatividad y emocion.
Bye, kiss and hugs :3
-GABY

Hola, Gaby, soy Carla (:
Louis ya se dio cuenta, ahora esperemos que comience a hacer las cosas bien ~
Zan es mi personaje favorito <3 woijskja
No te preocupes por el comentario, yo soy igual de impulsiva. Gracias por leer, me alegra que te haya gustado <3

por **Vicious ϟ** Dom 13 Abr 2014, 2:55 pm

X

Secrets

I wanna tell you things

I never tell myself

These secrets hurt like hell

Ambos permanecieron en silencio durante unos minutos. Louis intentaba no mirar a Harry para así no incrementar el notable nerviosismo del menor, pero se sentía mal por lo que estaba haciendo. Harry no tenía ningún deber con él, no tenía por qué hacerlo sentir bien, no tenía por qué cuidar de él, no tenía por qué preocuparse. ¡Dios, ni siquiera se suponía que Harry estuviera allí en ese momento!

Sin embargo, internamente agradecía que Harry estuviera allí, ya que no quería ni imaginar qué sería de él si estuviera solo en ese momento.

Harry abrió y cerró la boca en un par de oportunidades y Louis no sabía si se debía a qué no sabía cómo empezar o que simplemente no podía enfrentar aún lo que fuera que tanto le acongojara. Se mordió el labio e intentó hablar.

— Harry, no tienes que hacerlo si no…

— No, no. Tengo que hacerlo. –dijo con una sonrisa torcida. Louis asintió y Harry tomó aire para comenzar. - Cuando tenía dieciséis años, conocí a una chica en secundaria. – partió. Su voz sonaba más profunda de lo normal.- Su nombre era Nicole. Ella… solía sentarse sola en el último banco del salón. No hablaba con mucha gente y durante los recesos siempre se encontraba oyendo música o leyendo. Siempre llamó mi atención, la rodeaba un aura de misterio que me atraía a ella, pero era tímido –rió con vergüenza.- y no me atrevía a hablarle, hasta que un día decidí que lo haría y me acerqué con la excusa de no entender los ejercicios de la clase de matemáticas. –Hizo una pausa en la que Louis pensó que tal vez estaba teniendo una imagen mental de lo ocurrido.- Nos fuimos haciendo amigos y luego de un par de meses, le pedí que fuera mi novia. Estaba jodidamente nervioso, no lo imaginas. –sonrió.- Ella aceptó y no podría explicarte lo feliz que estaba. Nicole también parecía feliz, y yo creía que las cosas iban bien, pero yo no me… -respiró profundo. Louis creyó que se pondría a llorar.- no fui capaz de darme cuenta de que las cosas no iban bien, que ella no estaba bien, y yo no pude hacer nada para ayudarla.

El oji-azul le acarició la espalda casi por inercia. Esto no estaba siendo agradable, a él no le gustaba ver a Harry de esa manera, incluso… le dolía, aunque no lo admitiría fácilmente, le dolía, le molestaba y sentía impotencia al ver a Harry tan afectado. Él nunca lo había visto así y definitivamente no quería volver a verlo de esa manera nunca más.

— Sé que ha pasado mucho tiempo, pero jamás podré perdonarme el haber sido tan jodidamente ciego como para no poder ver lo que estaba ocurriendo frente a mí. –dijo con ira contenida.

— Tranquilo. –susurró cerca de su oído, subiendo su mano hasta el cabello de Harry, acomodándole un par de rizos detrás de la oreja. Louis no sabía por qué estaba haciendo ese tipo de cosas, sólo… le nacían, quería hacerlas y suponía que así podría calmar un poco al menor.

— Llevábamos seis meses juntos y te juro por Dios, que la amaba. Era un crío, lo sé, pero ella era tan divertida, alegre e inteligente y yo estaba seguro de estar enamorado. Aun ahora pienso que estuve enamorado de ella. –Suspiró.- El asunto fue que tuvimos nuestras vacaciones de Navidad. Nosotros vivíamos en Holmes Chapel, pero su familia tenía parientes en Liverpool, así que decidieron pasar con ellos las fiestas de fin de año. El día en que se fueron, tuve un mal presentimiento. Nicole estaba extraña y no paraba de decirme lo mucho que me amaba y que jamás debía olvidar eso. En ese entonces no entendía no podía ver lo que había detrás de aquellas palabras y no hay día de mi vida en que no me sienta un imbécil por no haberlo hecho.- Louis ya sabía de qué se trataba y mordió su labio inferior con nerviosismo.- Como debes suponer, sí, ella se suicidó. Ella cortó sus muñecas y se desangró en el jodido baño de la casa de sus abuelos. –La respiración de Harry se hizo pesada.

— Oh, Harry. –fue todo lo que pudo susurrar, volviendo a acariciar su espalda. Se acercó un poco más y recostó su cabeza en el hombro del menor- No fue tu culpa. – dijo bajito.

— ¿Por qué pudo haber tomado una decisión así? ¿Por qué no compartió conmigo lo que fuera que le tenía tan mal como para llegar a tomar una decisión tan drástica como aquella? Las cosas siempre pueden hablarse y cuando compartes lo que te pasa,

el peso en tu mochila disminuye. –habló el menor, como intentando hurgar nuevamente en sus recuerdos para ver si podía encontrar al fin alguna explicación que le convenciera.

— A veces no es tan fácil hablar las cosas, Harry. –Explicó.- Hay mucha gente que prefiere guardar para sí mismo lo que les ocurre por diversas razones, y es totalmente válido y comprensible.

— ¿Estás justificando un suicidio?

— No, claro que no. –negó separándose para poder mirarlo. – Sólo quiero que entiendas que las cosas no siempre son tan fáciles como tú sueles pintarlas. –dijo suavemente. – Quizás ella tenía mucho dentro y no sabía cómo sacarlo, o tal vez no podía porque tenía miedo de tu reacción, o de la de otros, no lo sé… pueden haber un millón de motivos por los cuales ella no pudo decirte, y atormentarte pensando en cuál podría haber sido la razón de su suicidio, por duro que suene, no va a servir de nada. Lo único que te queda, es esperar que ella esté un lugar mejor. –Harry le miraba con los ojos rojos, cargados de lágrimas.

— Supongo que tienes razón, pero es difícil. Han pasado casi tres años y cada vez que pienso en ello, me da la sensación de que fue tan sólo ayer cuando llamaron para avisarme. –Limpió un par de lágrimas que rodaron por sus mejillas.- Si tan sólo me hubiera dado cuenta…

— Basta, Harry. –le frenó en un murmuro.- Deja de lastimarte de esa manera, no te hace bien. -Louis estaba sorprendido con lo que estaba diciendo, sintiéndose un hipócrita porque él no seguía sus propios consejos.

Y es que sus consejos eran para gente normal, no gente jodida como él. Harry estaba herido, eso era obvio, pero Louis sabía que el menor era fuerte, mucho más que él, así que podría salir a delante, podía superar aquel dolor que arrastraba desde hacía tanto tiempo, de eso no le cabía ninguna duda.

— No es fácil dejar algo aunque nos daña, ¿verdad, Louis? –el oji-azul lo miró directamente a los ojos y asintió. - Lo que quiero que entiendas, –se volteó hacia él. – es que siempre se puede empezar otra vez. Yo estuve jodido un tiempo, pero tuve la dicha de amar y ser correspondido y aunque duela como los mil demonios, me gustaría volver a enamorarme. –Louis abrió sus ojos sorprendido.- Quien sea que haya dicho

que el amor es hermoso y dulce, mentía. El amor es complicado, Louis, duele y si no duele y no cuesta, entonces no es amor.

— Eres masoquista. –soltó una corta carcajada.

— Todos lo somos, Louis. Todos. Entre más difícil es, más fuerte se hace, entre más duele, más se disfruta luego del tormentoso inicio. Es así y quien diga lo contrario, puede joderse. –Ambos rieron.- Todos merecemos ser amados, a todos nos espera alguien, sólo hay que saber esperar con paciencia.

— ¿Almas gemelas y eso? –preguntó con una sonrisa.

— Exactamente.

— ¿A ese nivel llega tu romanticismo? ¿A creer en las almas gemelas? Dios, Harry. – bromeó.

— En algo hay que creer. Somos humanos, somos cobardes y tenemos la necesidad de aferrarnos a algo que pensamos más grande que nosotros, necesitamos tener esperanza. La esperanza es lo que nos mueve, Louis. –señaló.

Louis le miró un momento en silencio, pensando en lo último que Harry había dicho y no podía estar más de acuerdo. Él tuvo la esperanza de que las cosas con Thomas podrían volver a ser como antes, que podían volver a ser la pareja feliz que alguna vez fueron. Eso era lo que le movía, la esperanza de lograr que esta vez sí resultara, que esta vez las cosas fueran distintas, pero Thomas había cambiado, ya no era, ni nunca volvería a ser, ese chico del cual se enamoró, y ahora por fin estaba convencido de que no había vuelta atrás.

Demonios, esa noche lo había comprobado y se había acabado definitivamente. Ya no quería esa mierda en su vida.

— Gracias. –Susurró.- Por traerme a casa, por compartir esos secretos que tanto te duelen… por estar aquí, en realidad. –le sonrió.

— Gracias a ti por escucharme, Louis, esto ni siquiera lo sabe Zayn. Bueno, sabe sólo una parte. –Señaló.- Nadie más que tú sabe la historia completa porque nunca antes me sentí preparado para sacarlo. Supongo que la necesidad de hacerte entender lo mal que estabas haciendo las cosas, fue el empujón para por fin dejarlo ir. –eso fue más una reflexión y Louis no sabía cómo sentirse al respecto.

— ¿Debo sentirme importante entonces? –intentó bromear.

— Eres importante, Louis. –afirmó el menor, haciendo que Louis sintiera un extraño malestar en el estómago.

— ¿Tu mochila está más liviana ahora? –preguntó el oji-azul en tono dulce pasando por alto el comentario de Harry.

— Sí, bastante más liviana. –aceptó con una sonrisa.

Harry pasó un brazo por detrás de la cabeza del oji-azul y se acercó a él para depositarle un beso en la frente que tomó por sorpresa a Louis. El contacto había sido protector y suave, logrando que el castaño se sintiera mejor repentinamente.

Cuando se separaron, Louis no pudo evitar bromear sobre lo horrible que debía lucir y lo horrible que también lucía Harry. Ambos con los ojos rojos e hinchados, era una imagen digna de inmortalizar, así que el oji-azul fue a su habitación por la cámara y ambos pusieron una cara estúpida que sólo los hacía lucir peor.

“Si vamos a lucir mal, hay que hacerlo con dignidad”, había dicho Louis, provocando sonoras carcajadas por parte del oji-verde.

Vieron la fotografía y rieron. Esa fotografía podía arruinar la carrera del oji-verde, y Louis se lo dijo, ganándose un leve golpe en el brazo.

— Louis… sé que hay algo que no me estás diciendo, y siento que si me lo dijeras, podría entender a la perfección toda esta situación. Me refiero a lo del idiota de Thomas y tú.- Louis le miró sorprendido. ¿Cómo mierda Harry podía saberlo? ¿Era una especie de síquico o algo por el estilo? – Pero lo que sea, sabes que puedes contar conmigo, ¿verdad? Si quieres sacarlo, estaré feliz de oírte, ¿sí? – El castaño no reaccionaba, y es que no lograba comprender. No lograba seguirle el paso a Harry.- ¿Louis? – le llamó otra vez.

— Sí, sí, claro. –Respondió parpadeando varias veces.- Gracias. –El menor le dedicó una tierna sonrisa.

Todo había sido un jodido desastre, pero ahí había estado Harry para atraparlo de la dura caída que había sufrido, impidiéndole caer de lleno en el pavimento, amortiguando el golpe.

Era tarde, cerca de las dos de la mañana y a Louis le preocupaba que Harry se fuera a esa hora, considerando que era sábado por la noche y que debía haber más de alguien manejando en estado de ebriedad. Era convincente, pero en realidad esa no era la única excusa que el oji-azul tenía para que Harry se quedara. Louis quería que Harry se quedara con él esa noche. Se sentía bien con Harry, cómodo, y no quería pensar en que eso podía ser peligroso. No quería pensar en que podía ser que estuviera dejando crecer sentimientos que iban más allá de la amistad para con el menor.

No quería nada más que disfrutar de lo bien que se sentía la presencia de Harry allí esa noche.

Justamente esa noche.

~

Louis despertó gracias al olor de tocino y huevos revueltos que llegó a su nariz. Abrió los ojos lentamente, sintiéndolos pesados y pequeños. En efecto, cuando se miró al espejo, se dio cuenta de que lucía como un jodido sapo. Su cabello se veía sucio y era un desastre. Bueno, Louis era un desastre desde hacía un tiempo, así que no debía sorprenderse demasiado.

— ¡Hey! Buenos días. –le saludó Harry en cuanto le vio hacer aparición en la cocina luego de haber lavado su cara y sus dientes.- Espero que no te moleste que me haya adueñado de tu cocina. –dijo con una sonrisa.

— No, por favor, adelante, estoy hambriento. – señaló en un bostezo.

— ¿Cómo dormiste? –preguntó el menor poniendo a calentar agua en el hervidor eléctrico.

— El llanto es un muy buen somnífero. -señaló- Así que dormí bien, supongo. Sí. ¿Qué tal tú?

— Digamos que estoy considerando la idea de llevarme la cama de Liam y traerle la mía antes de que llegue, claro, para que no se dé cuenta.- Louis rió porque el oji-verde parecía hablar en serio.- Es muy cómoda.

— Liam se daría cuenta, lo sé. – Atravesó la cocina para buscar dos tazas.- ¿Café? –le preguntó a Harry y éste asintió.

Harry sugirió encender la radio, ya que sentía que el apartamento estaba muy silencioso. Louis le sonrió y le dijo que la encendiera si quería, pero no contaba con que Harry sintonizaría la única estación de radio que detestaba a esa hora de la mañana.

— ¡Buenos días, Inglaterra! –El oji-azul rodó los ojos al oír aquella molesta voz.

— ¡Sabes que lo odio! –gritó desde la cocina.

— ¡Oh, es cierto! –rápidamente cambió la radioemisora. – Lo siento, lo había olvidado. –se disculpó Harry entrando nuevamente.

— Ya bastante tengo con saber que probablemente estará presente en el desfile de Carrie. –se quejó.

— ¿Hablas en serio? Genial. –Louis en serio no lo entendía. Nick era un jodido idiota que lo único que hacía era ser sarcástico y hablar mierdas de quien quisiera. ¿Cómo alguien como él podía agradarle a Harry?

Finalmente se sentaron a desayunar y conversaron como si la noche anterior no hubiese pasado nada del otro mundo, cuando en realidad todo lo que se dijeron, había sido bastante revelador y a Louis le había dado una perspectiva totalmente distinta de Harry, mientras que para este último, había significado comprender casi a la perfección la forma de ser del oji-azul, pero sabía que había algo más. ¿Qué sería eso que Louis aún ocultaba?

Si Louis dejaba al descubierto esa parte de su pasado, se sentiría extremadamente expuesto, y aún no estaba preparado para eso. Sólo Liam lo sabía, y era porque lo había vivido con él: Liam estuvo a su lado cuando todos estuvieron en su contra. De no ser así, Louis jamás le hubiera revelado lo horrible que fueron los primeros años de secundaria, comenzando con el hecho de haber descubierto que no le gustaban las chicas, que los senos y traseros grandes que calentaban a sus compañeros, no le provocaban nada. En cambio le gustaban las piernas torneadas y tonificadas de los jugadores del equipo de fútbol, la espalda ancha y el pecho amplio.

Con el tiempo había comprendido que ser homosexual, no tenía absolutamente nada de malo, en realidad su error radicaba en el hecho de haberlo hecho público a tan

temprana edad, cuando no estaba preparado como para combatir la intolerancia y la crueldad de los chicos, y eso era lo que todavía no era capaz de superar; aún podía oír los gritos, las burlas y los insultos a los cuales se había visto expuesto contando con tan sólo trece años de edad.

Lo peor es que ahora estaba casi convencido de que gran parte de las cosas horribles que le dijeron, eran ciertas. Y dolía.

— Aún me debes una cena. No creas que lo he olvidado. –le apuntó Harry. Louis le sonrió.

— Dime cuando tengas libre. Prometo que no estaré demasiado ocupado esta semana. De alguna manera me las arreglaré para hacer un tiempo y poder ir a cenar juntos.- Harry asintió con una amplia sonrisa.

Luego del desayuno, Harry le dijo que era hora de irse, ya que sentía que eso era lo más sensato. Sinceramente no quería irse, pero tampoco quería incomodar a Louis con su presencia. No se arrepentía de nada de lo que había ocurrido, extrañamente, ni siquiera sentía pesar por haber dejado a la mitad su cita con Sarah. Esto había sido mil veces más importante y significativo para él que la cena, aunque claro, para Harry siempre habían estado las amistades primero y luego las relaciones amorosas. Además, si antes sentía un deseo de protección para con Louis, después de lo que se había enterado, aquel deseo se había hecho más fuerte. Tal como le había dicho, él quería cuidar de Louis y estar a su lado todo cada vez que le necesitara, después de todo, ¿no era ese el deber de los amigos?

~

Cuando Harry llegó al apartamento, visualizó la figura delgada de Zayn en el balcón, fumando. Se acercó para saludar.

— ¿Qué tal estuvo tu noche? Supongo que tuviste suerte porque claramente no dormiste bien.- dijo con gesto gracioso.- ¿Cómo era eso de que no querías follártela, Harry? ¡Una mierda! –se rió. El menor le sonrió de medio lado.

— En realidad no estuve con Sarah. –dijo apoyándose en la baranda. Zayn alzó una ceja exigiendo una respuesta completa, ya que odiaba cuando Harry contaba las cosas segmentadas, dejándole con intriga.

El oji-verde tuvo que soportar las ideas sin sentido que el moreno creaba, como que luego de la cena se había sentido frustrado sexualmente y se había ido a bailar a algún lado para encontrar a alguien con quien acostarse y, “¡Dios, Harry! ¡Podrías haberme llamado por lo menos! Podríamos haber salido a bailar juntos”, lo cual hizo reír a Harry. ¿De dónde mierda Zayn podía sacar tanta estupidez? Definitivamente tenía una gran imaginación y podía escribir una novela sobre amores no correspondidos y drama y esas cosas. Tal vez Liam podía ser el protagonista.

Sonrió ante eso último y nuevamente se encontró con la muda pregunta en el rostro de Zayn. ¿Qué demonios había pasado? Harry no sabía si era correcto revelarle lo que Louis le había confiado, pero Zayn era su amigo, y mucho de lo ocurrido la noche anterior también tenía que ver con él y… Nicole.

El menor intentó hacerlo de la manera más resumida posible, intentando pasar por alto algunos detalles del relato de Louis, pero supo que de todas maneras había sido demasiada información para procesar de una sola vez, cuando los ojos almendrados de Zayn se abrieron de par en par.

Estaba genuinamente impresionado.

—Le contaste lo de Nicole. –Repitió.- ¿Es en serio? Y además le contaste cosas que yo no sabía. –Oh, eso sonaba a celos.

— Lo creí necesario. –respondió encogiéndose de hombros.

— ¿Porque te dijo lo jodido que estaba? –Preguntó con ironía.- Oh, espera. –Zayn le miró un par de segundos y el gesto de su rostro se suavizó. - ¿Te gusta?

— ¿Vas a seguir con eso? –bufó el rizado, ingresando al apartamento. El moreno apagó rápidamente el cigarrillo y le siguió.

— Harry, te gusta. Louis te gusta desde que lo viste. –Harry le miró divertido.- ¡Te preocupas demasiado por él! ¡Incluso le confiaste las cosas que más guardadas te tenías! Cosas que ni siquiera a mí me pudiste contar.

— ¿Qué mierda estás hablando? ¿Estás celoso, Zayn? –inquirió enojado.

— Lo estuve, un poco, hace tan sólo unos minutos, pero porque soy tu amigo, ya sabes. – Explicó.- Pero ahora que lo veo de otra manera…

— Que me preocupe por Louis es completamente normal, somos amigos –se apresuró en decir. Zayn se rió.

— ¿Podrías decirme desde cuándo son amigos?

— Oh, Zayn, por favor. –el oji-verde rodó los ojos y comenzó a caminar hasta su habitación.

— ¡Sólo necesito que lo aceptes! –vociferó el moreno siguiéndole.

— ¡Déjame en paz, Zayn! –gritó cerrándole la puerta en la cara.

— ¡Esto sólo lo confirma! –dijo en tono de burla.

Zayn pensó en llamar a Liam para contarle que Harry había pasado la noche que Louis, lo cual sería una gran, gran noticia para ambos que habían estado prácticamente empujándolos a salir o hablar con el otro, lo cual era muy infantil y estúpido, lo aceptaba, pero podían ver algo ahí, algo en la forma en la que se miraban. Ellos podían notarlo.

Si bien al principio Zayn no quería que Harry tuviera nada que ver con Louis, algo había cambiado en el camino y no tenía absolutamente nada que ver con Liam. ¡Claro que no! Y por supuesto enviarle un mensaje al castaño no era una excusa para hablar con él, o mejor dicho, mantener la conversación que desde ayer tenían. Había comenzado con un inofensivo “¿Qué tal el viaje? Espero que llegues bien.”, por parte de Zayn y Liam respondiendo que todo iba bien, sólo un poco ansioso y, claro, preguntándole al moreno cómo se encontraba y deseándole suerte en la carrera, aparte de un “cuídate”, que hizo que el moreno se sintiera como una estúpida adolescente nerd enamorada. Que Liam se preocupara por él no era gran cosa, pero… en realidad sí era la gran cosa para Zayn.

Así que el moreno le envió un mensaje a Liam y éste contestó que apenas llegara a Londres, iba a interrogar a Louis, y que luego le contaría.

Niall también estaba al tanto de la situación, así que Zayn le envió un texto diciéndole que podía oler el comienzo de una nueva relación.

“¡¿Estás jodiendo?! ¡Debes estarlo! ¡No puedo creerlo! Voy al apartamento para que me cuentes todo.” Al ver la respuesta, Zayn soltó una carcajada.

por **Vicious ϟ** Dom 13 Abr 2014, 2:57 pm

— ¡Hey! –Golpeó la puerta de la habitación del oji-verde.- Vendrá Niall, iré por unas cervezas.

— ¡Okay! –respondió desde el otro lado con voz ronca.

Harry estaba cansado y había comenzado a dolerle la cabeza. Suspiró con la vista pegada al techo, no queriendo darle vueltas a las palabras de Zayn. Él estaba comenzando algo con Sarah y pondría lo mejor de él para que eso funcionara, de hecho pensó que debía llamarla o enviarle un texto pidiéndole disculpas por haberla dejado a mitad de la cena y darle las explicaciones pertinentes, aunque no tan explícitas como con Zayn.

A él no le gustaba Louis, claro que no. Además, si llegase a gustarle Louis, no habría diferencia alguna en su relación de amistad, profesional o lo que fuera. El oji-azul no se fijaría en un chiquillo torpe como él, y claramente no estaba listo ni quería una nueva relación.

Mucho menos con él, eso era obvio.

~

Louis conducía hasta la estación de trenes pensando en si le diría o no a Liam lo ocurrido. Era un tema delicado, muy delicado en realidad, y debía saber abordarlo de la manera adecuada, probablemente obviando algunos “detalles”, para que el relato no sonara tan escabroso como lo había sido, ya que eso no sería sano ni para él ni para Liam quien, probablemente, esta vez estallaría.

Se mordió el labio mientras esperaba a que la luz del semáforo cambiara a verde.

Estaba nervioso y no se sentía completamente preparado para enfrentarse a sí mismo y para además revelar lo ocurrido. Harry había sido una especie de bálsamo que había suavizado la situación, y ahora que recordaba todo lo ocurrido en su presencia, se sentía surreal, como si esa parte de su vida hubiese ocurrido en otra dimensión. Harry había sido capaz de sacar una de sus más grandes penas y exponérselas a él, sólo para que se diera cuenta de que siempre se puede comenzar de nuevo. Aún le era extraño que hubiese sido el oji-verde quien le hubiese acompañado en, si no su peor,

uno de sus peores momentos, y le era más extraño aun que Harry hubiese podido tranquilizarlo y hacerle sentir bien. Que hubiese cuidado de él.

La estación no estaba demasiado llena. Iba a llamar a Liam para preguntarle cuánto tiempo de viaje le quedaba, cuando oyó que le llamaban.

— ¡Louis! –se volteó para ver su amigo acercándose con su maleta.

— ¡Hey, amigo! –Esperó a que Liam dejara la maleta para abrazarlo.- Te extrañé, aunque hayan sido sólo dos días. –confesó, recibiendo por respuesta una queda carcajada por parte de su amigo.

— Yo también te extrañé. ¡Todos te extrañamos! La celebración fue muy aburrida sin ti. – Liam hizo un puchero y Louis sonrió.

— ¡Ya lo creo! –exclamó mientras comenzaban a caminar hacia el estacionamiento.

Durante el trayecto al apartamento, Liam le habló sobre el gran pastel de chocolate que le había comprado, al cual incluso le había tomado fotografías para mostrárselo ya que en serio había sido un gran pastel. También le dijo que Karen le había enviado croissants, y Louis abrió sus ojos como platos porque jamás en la vida había probado unos croissants más sabrosos que los que hacía la madre de Liam. Le contó que su abuela nuevamente le había regalado un sweater tejido en lana por ella misma y que le quedaba enorme y picaba mucho, tal como todos los otros que le había dado a lo largo de su vida.

Louis sonrió con nostalgia. Aunque su adolescencia en la escuela no fuera una etapa que recordaba con mucho afecto, sí extrañaba su casa, a su madre, a sus hermanas, las tazas de chocolate con malvaviscos al llegar a casa luego de la escuela durante el invierno, y las cálidas cenas familiares llenas de conversaciones y vida. Su hogar era su lugar de seguridad y tenía los más lindos recuerdos.

— También vi a… Brad. –Louis sintió su cuerpo tensarse ante la mención del nombre.

De pronto, un montón de recuerdos se agolparon en su cabeza. Golpes, sangre, hematomas, cicatrices, llanto, odio y el rostro de Johannah, su madre, quien había sido su gran protectora y de la quien había recibido más apoyo.

~

Johannah notaba que su hijo había estado distinto desde hacía un tiempo. Supuso que se debía a que Louis aún estaba adaptándose a la secundaria, aunque ya estaba cursando segundo año, por lo que no se preocupó demasiado al respecto, hasta el día en que Louis llegó con un ojo morado y el labio roto. Su corazón se partió en dos cuando vio a su pequeño pálido y con los ojos aguados.

Esa no había sido la primera vez que Louis había sido agredido. Todo había comenzado cuando se le había ocurrido decirle a Brad, el capitán del equipo de fútbol, que gustaba de él. Primero fueron sólo insultos, Louis podía manejar eso, luego fueron golpes “accidentales”, zancadillas, ataques cobardes.

No había mucho que Liam pudiera hacer, ya que él también había salido perjudicado muchas veces por intentar ayudar a su amigo, hasta que un día, Louis le pidió que no siguiera defendiéndole. Liam le dijo una y otra vez que se lo contara a su madre, pero Louis siempre se negó. Él no quería armar un escándalo de lo que ocurría si podía cubrir las marcas que ellos dejaban en su cuerpo.

Sin embargo, esta vez habían marcado su rostro. Esta vez habían llegado demasiado lejos.

— Vas a decirme quién te hizo esto y por qué. –le había dicho con firmeza, aunque por dentro se sintiera destruida.

— Me caí, mamá, es todo. –había susurrado mirando sus pies.

— Te tuve nueve meses en mi vientre, Louis, eres mi hijo y te conozco más de lo que tú mismo te conoces. Sé que me estás mintiendo. Amor, –le tomó del mentón- dime quién fue el animal que se atrevió a dañarte de esta forma y cuál fue el motivo.- Johannah sabía que su hijo era un chico extrovertido e hiperactivo, pero estaba segura de que jamás golpearía a alguien o se metería en alguna pelea.

— ¿Soy raro, mamá? –Preguntó al borde del llanto.- ¿Hay algo mal en mí?

— ¿Qué? ¡Claro que no, cielo! No hay nada mal contigo. –le besó la frente.

— Incluso si… -tomó aire.- incluso si… -cerró los ojos.- ¿incluso si me gustan los chicos? –aun con los ojos cerrados, un par de lágrimas brotaron de sus ojos. Johannah le abrazó.

— Incluso si te gustan los chicos. – Afirmó ella.- Mírame, Louis. –Exigió secándole las mejillas.- Eres un niño maravilloso, inteligente y guapo, y que te gusten los chicos está bien, cariño. –una tenue sonrisa se asomó en sus labios.- ¿Por eso te golpearon? –el asintió.- En ellos algo nada mal, pero no en ti, cielo, jamás pienses eso, ¿sí? Te amo tal como eres y siempre estaré para apoyarte.

Johannah fue a la escuela para hablar con el director e informarle de lo que había pasado, sin poder creer que el grupo de imbéciles que habían golpeado a Louis no hubiesen tenido ningún tipo de castigo. El director le aseguró que jamás volvería a pasar, pero en cuanto esos chicos supieron que la madre de Louis había ido a la escuela para hablar con el director, encontraron otro motivo para molestarlo y golpearlo.

No hubo otra opción que cambiar a Louis de escuela y por supuesto, Liam le siguió. Las cosas parecían ir mejor. Nadie molestaba al oji-azul, en realidad era algo así como popular, todos sabían sobre su homosexualidad y no había ningún idiota que le hiciera la vida imposible. Louis había vuelto a ser el chico ruidoso e inquieto que siempre había sido, pero Brad había roto algo dentro de Louis, algo que aún no era capaz de reparar.

~

— ¿Lou? ¿Estás ahí? –Liam le sacudió. Louis parpadeó un par de veces y le miró.

— Sí, sí, sólo… recordaba algunas cosas.- susurró.

— No pienses en el imbécil de Brad, ¿sí? — Louis no había notado que estaba apretando el volante con tanta fuerza, que sus manos comenzaban a ponerse blancas.- - Te vas a lastimar.- advirtió Liam alzando una de las manos de Louis, quien aflojó su amarre. – Él está jodido. Metido en drogas, ya sabes, su padre le exigía ser el mejor en fútbol, siempre debía brillar, entonces el tipo comenzó a meterse metanfetaminas y envió todo al demonio.

Louis se sintió mal por él. Sí, era un imbécil y le había hecho la vida imposible durante un tiempo, pero era un buen jugador. Podría haber tenido un futuro mejor, fácilmente podría haberse convertido en la nueva estrella del fútbol nacional. No exageraba.

— ¿Estás bien? –preguntó Liam.

— Lo estoy. –asintió exageradamente. – Estoy bien.- llegaron al estacionamiento del edificio y se desabrocharon el cinturón de seguridad para salir.

Subieron hasta su apartamento y una vez allí, Liam dejó su maleta en la habitación y fue a la cocina por un platillo para dejar los croissants que su madre había enviado. Se sentó en la mesa e invitó a Louis a acompañarle.

— ¿Y qué tal estuvo tu fin de semana? ¿Algo que contar? –preguntó el menor luchando por esconder la sonrisa burlona de sus labios, porque él sabía que había algo.

— Sí, en realidad sí lo hay. –Louis suspiró y le dio una mordida a un croissant.- Es… yo… acabé con Thomas, pero ahora es definitivo. Juro no volver nunca más a esa mierda, ya no puedo seguir haciéndolo.- Liam le miró atento. Esa información no era la que él estaba esperando.

— ¿Qué? ¿Volviste a verlo? ¡Jodida mierda, Louis!

— Hey, calma, ¿sí? Está bien. Estoy bien. Acabé con eso.

— ¿Qué pasó? ¿Por qué hablas con esa seguridad? ¿Te hizo algo? –en la última pregunta elevó el tono de voz, y Louis decidió que no le contaría absolutamente nada de lo que había pasado en el motel.

— Sí, pero no te voy a decir, no es necesario ni bueno que lo sepas. –Habló con firmeza.- Sólo espero que confíes en mí y creas que ya no seguiré con esto.

— ¿Por qué no me llamaste? Dios, Louis, odio que estés solo en momentos así.- el oji- azul se mordió el labio.

— No… yo no estuve solo. –Suspiró.- Llamé a Harry porque… tuve que hacerlo, ¿de acuerdo? Y él fue por mí, me trajo a casa y se quedó. Le estoy muy agradecido, Liam, se portó muy bien conmigo.

— ¿Fue por ti? ¿Se quedó? –Louis rió nervioso ante la notable confusión de su amigo.

Así que le dijo que le contaría un poco más, sólo si prometía no hacer preguntas al respecto. Liam lo pensó un momento, pero era conveniente la propuesta, era eso o no saber nada en lo absoluto, así que aceptó. Entonces Louis le relató desde que estaba

en la carretera, hasta que llegaron a la casa, la –muy, muy importante- conversación, que se había quedado a dormir y se había marchado luego de desayunar.

— Es un buen chico.- comentó Liam.

— Sí, lo es. –concedió con una sonrisa.

Liam no dijo más, pero sentía algo distinto en Louis, en su manera de hablar, en su mirada y le creía, le creía que había acabado definitivamente con Thomas, y Louis había dicho que el oji-verde había sido de gran ayuda.

Liam cada vez estaba más seguro de que Harry era justamente el tipo de persona que su amigo necesitaba a su lado, y si él podía hacer algo para que ellos estuvieran juntos, lo haría. Además, tenía el apoyo de Zayn y Niall, confiaba que ellos tres podrían hacer grandes cosas.

*:

Muchas gracias por leer, comentar y por tener paciencia <3

por **Johanna139** Dom 13 Abr 2014, 5:34 pm

¡Hola! la historia de Harry: :lloro: :wut: Take Care {Larry Stylinson} Capítulo 19 [Septiembre 21] - Página 9 1545862508

enserio siento pena por Harry no me quiero imaginar como se siente perder a una persona que amas de esa manera;me alegro de que Louis y Harry hayan creado esa conexión y que Liam ha vuelto.Síguela pronto-xxJohannaxx

por Invitado Dom 13 Abr 2014, 6:28 pm

Pobre Harry!!
Seguila pronto!!
Yo se que el esta enamorado de Louis

por **inmaaamlg** Dom 13 Abr 2014, 6:43 pm

ay no por qué le hicieron eso a louis, gilipollas de mierda el brad ese también de verdad es que el pobre louis sólo se ha encontrado con subnormales de mierda en su vida... ains menos mal que estaba liam, y ahora harry :)

por **Gabriela Arenas** Mar 15 Abr 2014, 11:36 am

¡Hallooo! El capitulo estuvo estupendo, pobreshito Harry. Pensar que la persona que tanto amas se suicide es muy, es muy Take Care {Larry Stylinson} Capítulo 19 [Septiembre 21] - Página 9 2914770506

Take Care {Larry Stylinson} Capítulo 19 [Septiembre 21] - Página 9 2914770506

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Take Care {Larry Stylinson} Capítulo 19 [Septiembre 21] - Página 9 1421880775

(Maldito mundo).

Y me alegra que Louis lo apoyo y lo consoló eso fue muy tierno y hermoso.
Estoy ansiosa por el momento en el que Louis le cuente y confíe en Harry.
Y también me da esperanzas el hecho de que a Zayn, a Liam y a Niall les gusta y apoyarían la relación entre ellos (ojalá que tengan alguito serio).
Y bueno eso es todo.
No me dejes ahí, síguela cuando puedas ya sabes que estaré esperando :chkt: .
:bye: Kiss and hugs :corre:

PSDT: Carla.....que bonito nombre :3
-GABY

por **laultimaymevoy** Jue 17 Abr 2014, 10:23 am

Zayn es un chismoso! pero igual es hermoso xD
me dio tristeza la historia de ambos :c son fragiles, espero que les ayude estar juntos *_* y que sus amigos no vayan a arruinar todo con tanta insistencia, gracias por subir :)

por **Angeles** Jue 17 Abr 2014, 4:47 pm

Awww Harry es muy adorable, y no sé, quisiera conocer alguien así c:
Pero... pobre, lo que le pasó con la chica... y estoy de acuerdo con lo que dijo Louis, a veces la gente no está preparada para hablar, a mi me pasa eso, no se lo puedo decir a nadie, así que me lo guardo.
Ah! jajajaja Niall, Liam y Zayn son una especie de nosotras con respecto a Louis y Harry jajaja
Me gustó el capitulo!!!
Saludos (:

por **Vicious ϟ** Dom 04 Mayo 2014, 1:41 pm

XI

Storm

Can't go

Can't go on running

With these muddy roads

Holding my feet

El lunes por la mañana, Louis tuvo que correr por el apartamento porque se había quedado dormido. No tenía que ir a la revista tan temprano, sino que tenía que encontrarse con Carrie y mostrarle lo que tenía hecho: El desfile era en un mes, y ella le había informado que comenzarían a armar todo la semana entrante. Así que Louis tendría mucho, mucho trabajo. Se sentía optimista al respecto, la revista y el desfile lo mantendrían lejos de toda la mierda, su cabeza estaría ocupada todo el tiempo y de aquella manera estaría a salvo.

Bajó la maqueta, y echándole un último vistazo, se dispuso a entrar al gran edificio.

Carrie le dio un beso en la mejilla y le abrazó afectuosamente, luego pidió té para ambos y se dispusieron a analizar el trabajo del oji-azul. La diseñadora estaba deslumbrada con el trabajo hecho por Louis, la manera en la que había decorado la maqueta era en colores sobrios, naranja pálido, rojo rubí, gris y negro, acorde a las estaciones otoño-invierno. Carrie no podía estar más contenta, así que como estaba presupuestado, comenzarían con la ambientación la próxima semana. Tenía algunas cosas que arreglar, algunas cosas que cambiar de la decoración, pero en general, estaba totalmente encantada.

— Muchas gracias por esto, Louis- dijo sincera.- Sé que no tiene que ver con tu área, y es por eso que me alegra que te hayas atrevido a hacer esto –sonrió sincera-. Sabes todo el cariño que te tengo, ¿verdad? –el asintió.- Estoy orgullosa, Louis. Muy orgullosa de haber podido trabajar contigo.

— Fue un placer, Carrie. Toda mi vida quise estar envuelto en esto. –confesó con una vergonzosa sonrisa.

— Tendrás un pase exclusivo para tomar fotografías donde quieras. –le prometió. Louis abrió sus ojos de par en par y no pudo aguantar el impulso de abrazarla.

— Te lo agradezco mucho. En serio disfruté haciendo esto.

— Estaré encantada de contar con tu ayuda la próxima vez. –él le sonrió y revisó la hora en su celular. Tenía quince minutos para llegar a la revista, por lo que se despidió rápidamente, agradeciendo una y otra vez por la confianza y por el pase, por supuesto.

Ese día tenía la primera reunión con sus jefes y los otros fotógrafos, para seleccionar las fotografías que usarían para la edición de ese mes, la cual saldría al mercado el 10 de Septiembre, es decir, sólo en un par de días. Vio sus fotos sobre la mesa, la primera que le había tomado a Harry, aquella en el campo de juego donde el menor estaba vestido de jugador de fútbol americano, la de las motocicletas –esa había sido su sesión favorita, definitivamente-, y las que había tomado cuando todos estaban pendientes de la semana de la moda en Madrid.

No pudo evitar sentirse nervioso al ver su trabajo expuesto ante aquellas personas que tanto sabían sobre el tema, sobre todo por los fotógrafos. Recién ahora podía estar con los otros dos y eran mayores, tenían por lo menos treinta años, mientras que él cumpliría veintidós recién en diciembre. Tenían más experiencia, habían recorrido mucho más camino que él, y eso le mantenía expectante. Ellos comenzaron a elegir mientras Jessica hablaba sobre los artículos que ya estaban escritos.

— ¿Qué opinas tú, Louis? –oyó a la distancia. Parpadeó en repetidas oportunidades apartando la vista de las fotografías sobre la mesa. - ¿Louis? –insistió John mirándole con una sonrisa.

— Está bien. –fue todo lo que salió de sus labios. John y Evan rieron bajito y él se aclaró la garganta.- Me parece bien, pero si me permiten… -estiró su brazo para tomar una de las fotos de la primera sesión con Harry.- me parece que ésta es mejor de la que eligieron. Es el gesto en su cara, sus ojos, es distinto. –intentó explicar y creyó que la estaba jodiendo por cuestionar la elección de los otros dos fotógrafos, pero ellos asintieron.

— Estoy de acuerdo.- dijo Evan.- Sí, tiene razón, me parece bien. – el hombre elevó la vista y le sonrió amigablemente.

— Yo también estoy de acuerdo. –dijo Jessica guiñándole un ojo, y Louis se sintió aliviado.

Su corazón seguía acelerado hasta que abandonaron la sala de reuniones. Jessica le felicitó una vez más y se vanaglorió de lo buena que era para elegir a su personal.

John y Evan también le felicitaron y le dieron algunos consejos para que siguiera creciendo y desarrollándose.

Louis se alegró por el hecho de que fueran tan sinceros con él. Siempre creyó que el mundo de la moda era frío y una guerra de egos constante, y quizá se debía a que nunca había estando tan inmerso en ello, pero ahora que trabajaba en una de las revistas de moda más conocidas en el mundo, sabía que estaba equivocado. Bueno, por lo menos dentro del equipo corporativo no era así, pero quizá en el mundo netamente del modelaje, lo era.

Le preguntaría a Harry.

Y en efecto, como si el rizado hubiese sentido que estaba pensando en él, le llamó.

— Hey, Lou, me preguntaba si tenías libre el miércoles en la noche. – Hace años que Louis no tenía una especie de agenda mental donde tuviera anotadas los compromisos que pudiera tener, pero aun así lo pensó un minuto.

— Uhm, no. ¿Por qué? ¿Quieres ir a cenar? –preguntó sonriente.

— Síp. ¿Te parece bien el miércoles a las ocho?

— Sí, por mí está bien.

— ¿Quieres que pase por ti? – Harry era tan caballero.

— Como quieras.

— Quiero, así que paso por ti a las ocho. Puedes elegir el lugar. –dijo como si estuviera concediendo algo muy importante.

— Oh, gracias, Harry, es un gesto muy amable de tu parte.- se burló y escuchó la ronca risa del menor desde el otro lado de la línea. – Yo elijo entonces, será una sorpresa. – La verdad es que Louis jamás había sido muy asiduo a salir a cenar, por lo que no tenía más de un par de opciones, dos restoranes a los cuales había asistido junto a Thomas, y definitivamente no quería asistir a esos lugares. No ahora y menos con Harry, así que tendría que pedir ayuda.

— Genial. Nos vemos entonces.

— Nos vemos, adiós.

Louis estuvo sonriéndole al celular aproximadamente treinta segundos antes de decidir guardarlo en su bolsillo. Harry le agradaba, Harry era amable y comprensivo, Harry de verdad quería pasar tiempo con él, y eso le parecía bien. Estaría loco al pensar lo contrario luego de aquella especie de “noche de confesiones”, que pasaron. Así que esperaba con ansias la cena. Socializar un poco no le mataría y debía admitir que se sentía bien ampliar su círculo de amistades.

Amistades, claro.

~

El miércoles llegó rápido, habían pasado tres días, casi cuatro desde que no veía a Harry, y no estaba en sus planes detenerse a pensar en por qué llevaba la cuenta. Se encontraba en su departamento luego del trabajo y estaba realmente hambriento, no había comido decentemente desde el lunes en la mañana, ya que Liam había estado con Zayn luego de las clases. Sí, lunes y martes por la tarde. A Louis le pareció un poco sospechoso, considerando que su amigo no era muy bueno para salir durante la semana, por la universidad y el estudio, pero ni siquiera había tenido tiempo de preguntar porque Liam llegaba tarde, más tarde del tiempo que él se podía quedar despierto, así que no tenía detalles.

Como estaba solo, puso algo de música. Decidió probar por primera vez con el pendrive lleno de música indie que Harry le había dado. Y sinceramente no estaba mal, le gustaron mucho un par de canciones de algunas bandas de nombre demasiado extraño y rebuscado como para que él se los aprendiera. Le sorprendió encontrar un par de canciones de The Fray, “I can barely say”, y la que todo el mundo amaba, pero que él tanto odiaba “Look after you”. Apenas oyó aquella última, corrió al equipo para cambiarla y eliminarla. No quería volver a oír esa canción en su vida. Le traía malos recuerdos y no estaba listo aún para enfrentar su pasado.

Suspiró pasando a “Little talks” de Of Monster And Men, y la alegría de la música se encargó de hacerle olvidar el sabor amargo que le había dejado la canción anterior. Con la misma melodía, fue hasta su habitación para buscar ropa y una toalla, y luego meterse al baño para darse una ducha.

La música se oía sobre el agua y era una sensación agradable. Incluso, sin darse cuenta, había comenzado a tararear la melodía.

Salió a los pocos minutos y por alguna razón decidió afeitarse. Había olvidado lo joven que era, la barba en serio le hacía parecer bastantes años mayor.

Aún no terminaba de vestirse cuando el timbre sonó, sobresaltándolo. No era Liam, él tenía llaves, y era demasiado temprano como para que Harry llegara. Bueno, faltaban sólo diez minutos, pero no creía que el rizado fuera tan puntual. Ni siquiera él lo era.

Grande fue su sorpresa al a Harry Styles parado en las afueras del apartamento.

— Ouh, ¿demasiado temprano? –preguntó al notar que Louis iba sin camisa y con el pantalón a medio abrochar. –Lo siento, creo que exageré con esto de llegar a la hora. Bueno, de todas maneras saldría a cenar contigo… así. –Le miró de arriba abajo descaradamente y Louis no pudo evitar sonrojarse - ¡Tu cara! –se burló. Louis rodó los ojos y le tiró del brazo para que ingresara al apartamento.- Hey, estás escuchando lo que te pasé. –celebró mientras dirigía sus pasos hasta el equipo de música. Louis volvió al baño. - ¿Te gusta? –preguntó lo suficientemente alto como para que él escuchara.

— ¡No está mal! –respondió.

— Claro que no, esto es muy bueno. – Louis no tardó en oír al menor cantar al ritmo de una canción que no conocía. La voz de Harry no cambiaba demasiado al cantar, seguía siendo profunda y varonil, pero definitivamente era genial en eso. Le gustaría oírlo cantar más seguido.

— Bien, podemos irnos. –señaló apareciendo otra vez en la sala de estar. Harry le sonrió ampliamente y caminaron hasta la puerta.

Louis había hecho averiguaciones para llevar a Harry a un buen restaurante, con buena comida y buen ambiente. Quería que el lugar fuera una sorpresa, por lo que le preguntó si podía conducir esta vez.

— ¿Tenías que comprar una camioneta de este tamaño? –Refunfuñó entre dientes, sintiéndose pequeño en el asiento del conductor.- ¿Por qué no podías comprar un auto normal? –eran preguntas para sí mismo. Al oír una carcajada por parte de Harry, se paralizó.- Lo dije en voz alta, ¿verdad? –se mordió el labio. El rizado sonreía.

— Ahá. –Asintió.- Y déjame decirte que si Pitufo Gruñón se subiera a un automóvil, se vería igual que tú. –rió otra vez, y Louis no pudo hacer más que reírse.

— Eres la segunda persona que me dice eso. –señala encendiendo la camioneta.

— ¿Sí? ¿Quién más te lo dijo? –curioseó.

— Liam. Una vez que hablamos sobre que él sería un perfecto Papá Pitufo, y Niall podría ser Pitufina. –Harry abrazó su estómago con ambas manos mientras se retorcía de la risa.

— ¿Y quiénes seríamos Zayn y yo? –no pudo evitar la pregunta.

— Uhm… no lo sé. No pensamos en ustedes, realmente. –rió.

— Me hieres, Louis. –Dijo con voz dramática llevándose una mano al corazón.- Creo que Zayn podría ser Pitufo Vanidoso. Sí, definitivamente. –Sonaba convencido.- ¿Y yo? Uhm… ¿qué podría ser yo, Lou? – El aludido se encogió de hombros y pensó. No hay una sola palabra que defina a Harry. Tal y como había pensado, Harry era muchas cosas, demasiadas, y en su mayoría buenas, así que él no podría pensar en qué era Harry exactamente. Imposible definirlo en una palabra.- Pitufo Encantador. –le oyó decir con orgullo. Louis sabía que Harry bromeaba, pero él estaba de acuerdo. Harry era muy encantador, de eso no cabía duda.- ¿Qué opinas? – Sí, estaba de acuerdo, pero no se lo diría, así que se limitó a responder con una sonrisa.

Durante el trayecto, Harry encendió la radio del auto y Louis no tendría que haberse sorprendido de escuchar las mismas canciones que el menor había grabado para él. Harry miraba por la ventana mientras cantaba en voz baja, deteniéndose sólo para hacer un comentario sobre alguna canción, o una frase en específico, que le gustaba mucho. Louis sólo sonreía y asentía escuchándolo, conociendo esa faceta un tanto infantil del oji-verde. Era como un niño lleno de emociones, y en ocasiones Louis podía notar lo mucho que tenía por contar... Le causaba ternura.

— ¿Puedo cambiar esa canción? –preguntó cuando una vez más sonó Look after you.

— Claro. –Asintió sin darle mayor importancia.- Eres la primera persona que conozco a la que no le gusta esa canción.

— Me gustó mucho alguna vez. –dijo en susurro.

— Déjame adivinar. ¿Se la dedicaste a la persona equivocada? –Louis asintió en silencio.- ¿Sabes cómo hacer que los malos recuerdos se borren? O bueno, las malas decisiones en este caso.-El mayor negó.- Lo explicaré con ejemplos, es más fácil. Si estás en un lugar que te trae malos recuerdos, entonces debes ir y hacer nuevos recuerdos, ¿comprendes?

— ¿Nuevos recuerdos?

— Exacto. Si fuiste, por ejemplo, a la playa con una persona y lo pasaste genial, pero luego las cosas se fueron al demonio y volver a la playa te causa daño, entonces ve a esa playa con una persona que sepas jamás te va a hacer mal y haz nuevos recuerdos.

— Oh, ya veo…

— Entonces, si le dedicaste esa canción a alguien que no lo merecía, debes olvidarlo y dedicarle esa canción a alguien que sí lo merezca. No puedes huir de una canción toda la vida. –dijo gracioso.

— Puede que tengas razón.

— Tengo razón, así que mi humilde opinión es que me la dediques a mí.- dijo con solemnidad. Louis rió.

— ¿Alguna vez te han dicho que eres muy bueno diciendo estupideces?

— Un par de veces, sí.- Louis sonrió, negó con la cabeza y no dijo más, en cambio, Harry a su lado comenzó a cantar algo que no logró identificar.

El restaurante era agradable. Louis nunca había estado ahí, pero le habían dicho que era un buen lugar con música en vivo, sencillo y acogedor. Creyó que a ambos les gustaría y no se había equivocado. Las mesas estaban dispuestas alrededor de un pequeño escenario en el cual había chicos tocando Jazz.

Tomaron asiento y no hizo falta mucho tiempo para que una chica se acercara y tomara su orden.

— Me encantó este lugar, Louis. Es realmente genial… -los ojos verdes de Harry brillaban mientras recorrían el lugar. – Muy buena elección.

— Muchas gracias, me alegra que te haya gustado. –Sonrió sintiendo satisfacción.

Mientras comían el oji-azul pensó en que no sabía mucho sobre Harry, y tenía que ser sincero consigo mismo, le gustaría saber más. No sabía de dónde había nacido esta repentina curiosidad, sólo sabía que allí estaba. Quería hacer preguntas, pero no sabía cómo hacerlas sin sonar invasivo o algo por el estilo. Había pasado ya un buen tiempo desde que se había sentido interesado en alguien como para querer averiguar más cosas sobre su vida, por lo que aquella curiosidad tendría que haber activado algunas alarmas en Louis.

No se había percatado de que estaba mirando fijamente al menor, sin probar su comida, hasta que aquel par de orbes verdes le observaron confundido.

— ¿Qué pasa? –preguntó el rizado.

— ¿Uhm? Nada, no es nada, lo siento. –sonrió con vergüenza y bajó la vista hasta su plato, tomando los cubiertos para continuar comiendo.

— ¿Hay algo que me quieras decir? –inquirió. Louis negó llevándose un trozo de carne a la boca.- ¿Algo que quieras preguntar entonces? – El mayor asintió levemente.- Adelante entonces, soy un libro abierto. –dijo con una sonrisa.

— No es nada en particular. Sólo pensaba en que no te conocía demasiado, y bueno, ya que fuiste parte de un momento muy difícil para mí, y compartimos un par de secretos, no lo sé… creo que me gustaría saber más de ti. – al finalizar, se sintió nervioso y no tenía idea de por qué.

— Louis, mírame. –ordenó el oji-verde. Él obedeció.- ¿Qué quieres saber?

— Ya te dije que no tengo una pregunta en particular. Lo que quieras contarme estará bien. –dijo bebiendo vino, a ver si así lograba calmar el rápido latir de su corazón.

— Está bien, está bien. Uhm… -se enderezó en la silla. – Mi madre se llama Anne Cox y mi padre Des Styles. Tengo una hermana mayor que yo, su nombre es Gemma. Mis padres se separaron cuando era pequeño, pero mi papá siempre ha estado presente y hablamos por lo menos una vez a la semana. Con mi madre y mi hermana, hablamos casi todos los días, aunque últimamente mamá ha estado con demasiado trabajo y mi hermana ha estado ocupada con la Universidad; es su último año y va camino a recibirse con honores. –dijo con una sonrisa orgullosa que contagió al oji-azul. – Así que no he podido ir a visitarlas, y ellas no han podido venir. –su voz se hizo un poco

más baja.- Demonios, las extraño. –bebió de su copa y luego aclaró su garganta. – Lo siento por eso, es que no estamos acostumbrados a estar demasiado tiempo lejos.

— Lo sé, te entiendo completamente y no tienes nada por lo cual disculparte. Yo también me estaría volviendo loco si no viera a mi familia hace tiempo. –le dedicó una sonrisa de apoyo, y pensó, sin querer, claro, en lo mucho que sus hermanas amarían a Harry.

— ¿Qué más puedo decirte? Otoño mi estación favorita. Me encantan los animales, sobre todo los perros, aunque Zayn intente comprarme un gato a como dé lugar y no entiendo por qué.- sonrió.- Me gusta el color rojo. Mi número favorito es el 17 y deseo la paz mundial. –Louis rió ante eso último. Harry le sonrió ampliamente.- Entonces, ¿estoy calificado para pasar a una segunda cita? –preguntó con una provocadora sonrisa.

— ¿Cita? Oh, Dios, tendrías que haberme dicho que esta era una cita, así podría haberme vestido acorde a la ocasión.- Louis fingió seriedad.

— ¡Claro que es una cita! –Exclamó.- Me hubiera gustado verte vestido acorde a la ocasión. –dijo con picardía.

— Tienes una mente muy sucia, Styles. –ambos rieron.

Continuaron comiendo entre anécdotas y risas. Harry le contó que una vez se había disfrazado de Elvis Presley para una obra de la escuela y prometió algún día mostrarle fotografías. Luego le preguntó a Louis qué estaría haciendo si no se hubiera decidido a estudiar fotografía. Era una pregunta difícil, porque a Louis le gustaban un montón de cosas, incluso decidirse por fotografía había sido difícil. Lo había pensado durante un buen tiempo, ya que también le gustaba la arquitectura, las artes visuales, la actuación, incluso el fútbol.

— ¿Eres multifuncional o qué? –se burló Harry.

— No, no soy bueno ni para la mitad de las cosas que me gustan. –el menor iba a protestar por lo que continuó hablando.- Pero probablemente estaría intentado hacer algo en el fútbol. –bebió de su copa de vino.- ¿Y qué hay de ti y el modelaje? ¿Planeas seguir con esto hasta que ya no te contraten por viejo? –ambos rieron.

— No, en realidad me gustaría iniciar una carrera como cantante. –Confesó.- Es sólo un sueño, ya sabes. –rió nervioso.

— Me parece genial. Cantas muy bien, no veo por qué no podrías hacerlo.

— Gracias, por no estoy seguro aún. No sé si soy lo suficientemente bueno, y en realidad me siento seguro modelando. – Oh, Louis entendía el punto.

— No te gusta tomar retos. –afirmó.

— No es eso. Me gusta, en serio me gusta probar cosas y ver si soy bueno en eso, pero esto es distinto. Es algo así como el sueño de mi vida, pero jamás me había permitido soñar tan alto, ¿entiendes? –el mayor asintió.- Así que decidí sólo verlo como un hobby, algo que me gustaba, pero que no sería capaz de hacer profesionalmente.

— Y por lo que veo, algo ha cambiado. –Harry asintió mordiendo su labio inferior.

— Sólo he pensado más al respecto y quizá pueda intentarlo. Clark conoce a un par de productores musicales, pero será más adelante. Aún hay cosas que quiero hacer en el modelaje. –Louis asintió.

— Estoy seguro de que cualquier cosa que te propongas hacer, saldrá bien, Harry. En serio eres muy bueno. –sonrió con sinceridad.

— Sí, bueno, gracias.

— Entonces… ¿escribes canciones y ese tipo de cosas? –inquirió.

— Así es.

— ¿Podrías mostrarme?

— Uhm… claro, pero están en el apartamento. ¿Quieres ir? –Normalmente Louis se hubiera negado, pero se sentía inexplicablemente emocionado esa noche, por lo que aceptó sin poner ningún tipo de objeción. Pidieron la cuenta y el castaño pagó, le debía la apuesta a Harry.

Harry condujo y tuvo que acomodar el asiento del conductor, ya que como Louis era más pequeño, tuvo que moverlo para acercarlo un poco al manubrio. Esta vez fue Louis que no dejaba de preguntar, era como si de repente un millón de incógnitas se hubieran formado en su cabeza. Y así fue cómo se enteró de que Harry amaba el café de vainilla, hacer ejercicios y el yoga. Su vida estaba allí en Londres, ya que lo único que había dejado en Holmes Chapel al tomar sus maletas y marcharse, había sido su

familia. Le gustaba aprender cosas nuevas y le gustaban los rompecabezas, los acertijos y los juegos de ingenio.

Llegaron al apartamento y se encontraron con nada más y nada menos que con Zayn y Liam cenando. Harry enarcó una ceja al verlos, como preguntando mudamente a su amigo qué sucedía allí, a lo que él respondió encogiéndose de hombros con nerviosísimo. Louis le sonrió a modo de saludo.

Liam les invitó a comer, entusiasmado por el hecho de que el moreno había cocinado, agregando que “estaba delicioso, lo mejor que ha comido en mucho tiempo”, y Louis pudo jurar ver que las mejillas de Zayn se colorearon levemente. Harry negó y les dijo que ya habían cenado.

— Voy a mostrarle unas cosas a Louis. –indicó caminando hacia su habitación. – Lamento haber interrumpido. –La mirada que el moreno le lanzó, fue de odio puro. Louis no quería ni pensar en cuál sería la venganza que Zayn tomaría por ese comentario.

Apenas entraron a la habitación y cerraron la puerta, Louis soltó una carcajada y Harry le miró divertido sin entender, así que el mayor le explicó que le parecía divertida la situación y lo obvio que era Zayn estando alrededor de Liam. Su mirada almendrada lo decía todo.

— ¿Tiene oportunidad? En serio le gusta Liam. –señaló el menor mientras buscaba algo en la habitación que estaba impregnada con el aroma de Harry. Era como si sin querer marcara las cosas de esa manera, con su aroma.

— Uhm, no lo sé. Es decir, hasta donde yo sé, Liam es completamente hetero.

— ¿Completamente? ¿Seguro? –inquirió aún sin mirarlo.

— Besó a un chico una vez, Martin, pero estaba muy ebrio, de hecho ni siquiera lo recuerda bien. –indicó.

— Oh, entonces no tiene… problemas con eso de la homosexualidad. ¡Te encontré! – exclamó extrayendo una carpeta azul desde uno de los cajones de su escritorio.

— Harry, es mi mejor amigo, por supuesto que no tiene problemas.

— Sí, pero no me refería a eso. Harían linda pareja. –Louis rió.

— Veré que puedo hacer. Me agrada Zayn. –los ojos verdes de Harry se iluminaron.

— Él va a amarte. –el mayor rodó los ojos.

— Bien, muéstrame eso. –indicó mirando la carpeta.

El rizado le hizo un gesto para que tomara asiento en un banco que había a un lado del escritorio, para luego pasarle dos hojas, dos canciones. Louis las leyó con detención, deleitándose con cada línea, cada verso, cada palabra. Harry era suave, romántico, pero no empalagoso, y eso le gustó mucho. Incluso se emocionó.

Al terminar levantó la vista y se encontró con un Harry expectante que no podía dejar de mover sus piernas, claramente nervioso.

— Me encantan. Quiero oírte. –fueron las dos frases que abandonaron sus labios. Harry abrió sus ojos sorprendido.

— ¿Hablas en serio?

— Absolutamente.

— Pero… no me sé la canción en guitarra. –se mordió el labio inferior.

— Oír sólo tu voz será aún mejor. –le alentó.

El oji-verde se encontraba conmocionado. A su familia le gustaba lo que escribía, a Zayn y a Niall también, pero por lo que conocía a Louis, era difícil darle en el gusto, y que sus canciones le hayan gustado al punto de pedirle que las interprete para él en ese mismo momento, le hizo sentir increíblemente bien, como si millones de endorfinas hubieran sido liberadas sin razón aparente.

Harry estuvo a punto de comenzar, cuando el timbre sonó. Segundos después, la inconfundible voz de Niall llenó el apartamento. El menor sonrió y salió de la habitación pidiéndole a Louis que le esperara un minuto.

— ¡Hey, Louis! –le saludó un entusiasmado rubio ingresando a la habitación.

— ¡Niall! –respondió él de igual manera dándole un abrazo.

— Amigo, te necesito. –dijo Harry mordiendo su labio inferior.

— Veo que están teniendo un momento íntimo aquí. –Dijo gracioso mirando las canciones que Louis tenía en las manos.- Lo siento, no quería interrumpir, pero Harry… - el oji-azul soltó una carcajada histérica que no supo de dónde provino, pero necesitaba que Niall se callara.

— No seas idiota. –Harry le golpeó el hombro.- Louis quiere oírme cantar y llegaste justo a tiempo para acompañarme con la guitarra. –el rizado caminó hasta el rincón donde descansaba el instrumento.

— ¡Genial! ¿Qué vas a cantar?

— ¿Dont’t let me go? Creo que es la que mejor sabes en guitarra. –se burló Harry.- Okay, empecemos. - Harry se aclaró la garganta y comenzó.

Now you were standing there right in front of me I hold on it's getting harder to breathe All of a sudden these lights are blinding me I never noticed how bright they would be

Louis le había oído cantar con anterioridad, pero estaba seguro de lo que había oído, no se comparaba con… esto. Era simplemente genial.

I saw in the corner there is a photograph

No doubt in my mind it's a picture of you

It lies there alone in its bed of broken glass

This bed was never made for two

Nunca había sido fanático de la música romántica, pero había algo que le hacía pensar que podría oír esa canción un montón de veces al día.

I'll keep my eyes wide open

I'll keep my arms wide open

Don't let me

Don't let me go

'Cause I'm tired of feeling alone

Niall tocaba muy bien, y no podía mentir, la letra era muy linda, muy… Harry, pero había algo más, algo especial.

I promised one day that I'd bring you back a star

I caught one and it burned a hole in my hand oh

Seems like these days I watch you from afar

Just trying to make you understand

I'll keep my eyes wide open yeah

Don't let me

Don't let me go

'Cause I'm tired of feeling alone

Para entonces, Liam y Zayn estaban de pie en la puerta, observando el espectáculo con sonrisas en sus rostros. Zayn sonreía con orgullo, y Liam llevaba una sonrisa de asombro.

Don't let me

Don't let me go

'Cause I'm tired of feeling alone

Don't let me

Don't let me go

'Cause I'm tired of sleeping alone

[continúa abajo]

por **Vicious ϟ** Dom 04 Mayo 2014, 1:42 pm

Y entonces Louis lo supo. No importaba la letra, no importaban los instrumentos, todo iba en la voz de Harry. La voz de Harry era increíblemente profunda, y le hacía erizar la piel, pero a la vez era suave, y despertaba una sensación de calidez en su pecho.

Liam y Zayn aplaudieron mientras alababan la bella interpretación y repetían una y otra vez lo talentoso que era Harry. Niall dejó guitarra a un lado y le palmeó el hombro al oji-verde felicitándolo, mientras que el menor le devolvió una sonrisa y le agradeció por acompañarle.

Louis tuvo una segunda imagen de todos ellos reunidos. Esta vez no era en su casa, esta vez no era Zayn quien andaba de intruso intentando averiguar más cosas sobre Liam para así poder acercarse a él con mayor facilidad, sino que esta vez, él estaba en casa de Harry porque había querido saber un poco más de él, de su vida, y se alegraba de lo que había encontrado. Le gustaba lo que veía, cinco chicos en una pequeña habitación disfrutando de una buena canción. No podía negar que le causaba algo extraño en el pecho, pero era reconfortante y se sentía bien, como si de alguna manera ellos cinco se pertenecieran. Era absurdo tal vez, pero eso, era de aquellas cosas que carecen de explicación y sólo se sienten.

— ¿Louis? –oyó que le llamaba Liam. Pestañeó varias veces para enfocar a su amigo.- ¿Qué tal te pareció la canción? –averiguó con aquella amable sonrisa patentada por Liam.

— ¿Puedes grabar un cd para mí? –se escapó de sus labios, desatando la risa de los cuatro chicos junto a él. Harry se sonrojó un poco y le dedicó una mirada que no supo descifrar, mientras los demás hacían bromas respecto a su estúpida pregunta.

Eran las once de la noche, así que Louis comenzó a despedirse, arrastrando a Liam consigo. Pudo oír que Zayn insistía en que el de ojos marrones le acompañara a la carrera de esa noche, pero Liam se rehusó diciendo que por su culpa, estaba comenzando a quedarse dormido durante las clases, ya que estaba llegando bastante tarde al apartamento. A Zayn se le hizo casi imposible esconder una sonrisa triunfante. Louis pensó en que, quizá… Zayn estaba consiguiendo algo con su amigo.

Por otro lado, Harry le agradeció por la cena y le dijo lo mucho que se había divertido e hizo bromas respecto a que no había estado en sus planes llevarlo a su habitación durante la primera cita. Louis rió repitiendo que eso no había sido una cita, porque era mucho más fácil para él pensarlo de esa manera. — Debemos repetirlo.- sentenció el menor guiñándole un ojo mientras se despedían en la puerta.

— ¡Tenlo por seguro! –exclamó con una gran sonrisa mientras comenzaba a caminar junto a Liam por el pasillo hacia los elevadores.

— ¡¿Tengo la segunda cita entonces?! –Zayn le miró curioso. Louis volteó y le miró gracioso. — Definitivamente. – Lo último que vio el oji-azul, fue la sonrisa tonta en el rostro de Harry antes de cerrar la puerta. Una vez en el apartamento, específicamente en su cama, Louis hizo un recuento en el día, sintiendo mariposas revolotear en su interior cuando recordó a Harry cantando. ¿Qué era eso? ¿Por qué sentía esas molestas cosas en el estómago? Se sobresaltó al considerar la idea de que Harry le gustara, de que le gustara en serio. No podía ser posible, él no estaba preparado para volver a sentir ese tipo de cosas por nadie. Era demasiado pronto…

Pero podía haber una explicación, algo así como que al ser Harry el único que estuvo con él cuando todo se fue a la mierda de forma definitiva, su cerebro reconoció al oji- verde como una especie de héroe para él. Tenía sentido, y lo veía en la televisión todo el tiempo. La gente suele sentirse atraída a quienes les hacen sentir protegidos, porque, tal como Harry le había dicho, somos frágiles y vulnerables, claramente necesitamos sentirnos protegidos.

Suspiró aliviado ante esto último y cerró sus ojos para por descansar por fin. Había sido un día inusualmente largo, pero le había servido para darse cuenta de que no podía seguir amarrado a Thomas y su mierda, y que los chicos hacían que todo fuera más fácil. Especialmente Harry.

*:

Hey hey, espero que estén muy bien. Quería saber si tenían cuenta en wattpad? Porque si todas leyeran allí, me ahorraría el tiempo de subir y ya saben, tiempo es lo que menos tengo ahora, pero si no tienen cuenta, está bien, continuaré subiendo acá.

Mi usuario es este http://www.wattpad.com/user/lostinjupiter just in case!

Nos vemos <3

por **inmaaamlg** Dom 04 Mayo 2014, 5:16 pm

awwwwwwwwwwwwwwwwwwww cuanto ha cambiado louis por favor parece otra persona ay por fiin se comporta normal con harry y tontean =) =) bueno y ahora louis está reconsiderando el hecho de que le guste? sí louis, harry es tu héroe y estás enamorado de él, no hay más que hablar. qué alegría que la seguiste por dios me encanta muchísimo este fic! no tardessss

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