Solo un vez- Larry Stylinson (Mini novela)

Capitulo |1|


Mi hermana Ester entro sonriente y campante una tarde de domingo, yo yacía sobre uno de los sofás del living mirando esos programas sosos típicos de una tarde como esas, no le preste mucha atención a lo que hablaban con mi madre.
Lo que si me intereso fue cuando comenzaron a hablar de un chico.
-Pues hazlo pasar niña- la alentó mi madre con su típica alegría.
-¿Segura mamá?- pregunta mi hermano mayor con un poco de pudor en su voz.
-Claro, no creo que lo dejes toda la tarde en el auto, anda que estamos muy ansiosos por conocerlo ¿verdad Harry?- mi madre se dirigió hacia mí, mirándome con sus ojos verdes, insistiéndome en silencio que la apoyara en esto.
Fingí las mejores de mis sonrisas al tiempo que respondía- Si, por supuesto.
Mi mamá chillo encantada mientras se ponía de pie e iba a la cocina, ella solía tener esa maldita costumbre de alegrarse como una niña pequeña cuando se hacia lo que quería. Suspire cuando mi hermana salió de la casa en busca del famoso candidato de este mes, así es, Ester cambiaba de novio como se cambiaba de sostén, o sea cada medio día.
Cerré los ojos y trate de calmarme, algunas veces deseaba ser como Ester y poder llevar a todos los chicos con los que me enrollaba a casa, pero no, había salido del armario pero nunca lleve a ninguno chico a casa. Yo era la oveja negra que se refugiaba en su oscura y solitaria burbuja donde nadie podía entrar era el marginado que prefería pasar horas reventándose los tímpanos con rock pesado que gastar mi tiempo en salir de fiesta y ligar con alguna pobre idiota.
Esa etapa ya la había superado, cuando estuve cien por ciento seguro que era gay deje de usar a las chicas como mi cortina para ocultar lo que yo mismo no podía admitir; a mis dieciocho años todos los hombres con los que había estado eran mayores y anónimos, una noche y luego ni siquiera recordaba sus nombres al principio me molestaba ser tan imbécil para dejarme utilizar de esa manera pero con el tiempo fue entendiendo este mundo donde ser diferente es un martirio y un suicidio social si vivías en una comunidad tan pequeña como era la ciudad en la crecí y me crie. Si bien las únicas dos personas que lo sabían era la pequeña familia que tenía, no podía decírselo al resto del mundo… no aun.
 Sentí el ruido de la puerta al abrirse y por instinto mire hacia allí.
Creo que logro cautivarme desde el momento exacto que cruzo el umbral de la puerta de mi casa, era alto y delgado, con la piel tostada de un color tan lindo que daba gusto recorrer con la mirada esos brazos y ese rostro calado a causa de horas bajo el ardiente sol de julio, de seguro pasaba mucho tiempo exponiendo su piel porque ese bronceado no se lograba de buenas a primera.
Tenía unos ojos azules tan profundos y oscuros que solo con mirarlos se te formulaban mil preguntas sobre que escondían esas orbes tan majestuosas y misteriosas, cuando me miro sentí que podía calar mi alma tan solo con observarme el tiempo suficiente.
Su cabellera era una mata rebelde de color castaña que se apreciaba más clara cuando se le reflejaban algunos que otros rallos de sol traicioneros que entraba por la ventana a últimas horas de la tarde, exactamente como hacían en ese momento. Cada detalle que se podía apreciar de su anatomía a mi me hacia delirar y sentirme lo suficientemente excitado como para estar incomodo.
Me removí en mi lugar sin sacarle la vista de encima. Mi hermana miro alrededor hasta clavar su vista en mí, sonrió y lo tomo de la mano para que caminara junto a ella.
-Mira Louis, el es mi hermano pequeño, Harry- me señalo.
Yo estaba mudo y tenso por tenerlo tan cerca que podía olfatear el olor a su colonia, una dulce mezcla de hombre y sudor; eso me puso duro al instante.
-Hola- dije con toda la calma que pude simular.
-Hola- me sonrió y dejo ver una hilera de dientes perfectos y blancos- Mucho gusto- me tendió la mano y se la apreté con firmeza, estuve a punto de saltar en el sofá cuando su dedo pulgar me acaricio la parte de arriba de la mano.
Me sonrió cómplice y me soltó.
Yo mire a mi hermana para ver si se había dado cuenta, mi corazón latía desbocado y de seguro estaba sonrojado, pero ella ni siquiera se percato estaba más ocupada llamando a mi madre que prestando atención a la descarada insinuación de su novio, amante, amigo o lo que jodidos fuera.
Mi madre salió de la cocina con el pelo recogido y su grande sonrisa de bienvenida.
-Hola cariño- le dio un sonoro beso en la mejilla- Veo que ya se conocieron con Harry, es agradable- me miro con los ojos entrecerrados- cuando se lo dispone, vamos niño levántate de ahí y ven a ayudarme- me dijo en un reproche falso, mi mamá jamás me retaba o reprochaba como era, aunque tratara de ser una madre normal ella tenía ese espíritu libre que le hacía imposible ser dura y firme como quería aparentar.
Me levante haciéndola creer que me asusto su falsa actuación y camine hasta estar junto a ella.
-Así está mejor- me apretó al mano, era su forma de agradecerme que la ayudara en su actuación- ¿Te quedas a cenar?…- miro a Ester- No me dijiste como se llama este encantador muchacho.
-Oh disculpe, soy Louis- le sonrió- Aquí estoy para lo que usted desee- dijo muy lentamente, la última palabra mirándome con descaro.
Resople e hizo el mejor de mis esfuerzos para no poner blanquear los ojos, odiaba a los “escondidos” aunque mi madre y Ester sabían que era gay, yo nunca llevaba a nadie ni les presentaba a mis amigos gay, me daba un poco de pudor pensar en las preguntas que estas dos podrían hacerle. Mi ley era no andar con los que fingían ser heteros, y sin dudas Louis era uno de esos o se estaba burlando de mi.

Mordí el interior de mis mejillas para no reírme, era la primera vez que uno de los novios de mi hermana se me insinuaba, era cómico pero también algo incomodo porque el muy maldito era la cosa más apetecible que había visto en mucho tiempo.

siguela estoi ansiosa esperando nuevo cap :) :3