Re: Pareja abierta- nick & tu TERMINADA

por **romina.13** Miér 29 Jun 2011, 9:31 pm

ahhhh me encanto el cap!!!
un nick inexpresivo??
y sexy??
wao!! me vuelvo loca!!

por Invitado Miér 29 Jun 2011, 11:51 pm

Holaaaa :bounce: :bounce:
NuevaLectora'

!
Mii nombre es FaBiiaNaa...
....Me puedes Deciir Fabii (:
Me Fasciina La Nove, Esta Geniial
Tiienes que SeGuiirLaaa!! :jeje: :jeje:
xoxo

por **chelis** Jue 30 Jun 2011, 11:22 am

ooohhh
jejejje
siguela porfa

por **Pily....** Jue 30 Jun 2011, 5:57 pm

aa bienvenidas alas lecoras y espero ke les guste!!!
luego les subo porke no e tenido mucho time pro ya les subire no me ire a dormir sin subiles jaja okey bueno se les kiere mucho!! :hug:

por **Pily....** Jue 30 Jun 2011, 9:53 pm

bueno no es mucho pero algo es algo!!!!

Eso fue lo que la hizo acercarse a Paul; el querido y atractivo Paul, bueno y agradable.
En aquel entonces, Serina tenía veintiséis años y se encontraba muy sola. Había comenzado a pensar que jamás encontraría al hombre de sus sueños. Paul la adoraba y ella intentó corresponderle, convencerse de que él era el hombre adecuado con quien debía casarse. Incluso se fue a la cama con él porque pensó que su delicadeza al amarla quizá podría derribar esa barrera que había levantado a través de los años.
Sin embargo, las cosas no resultaron así. Sus relaciones sexuales con Paul fueron un tremendo fracaso. Ella sólo permaneció tendida sin comprometer sus emociones, ni sus sentidos. No fue desagradable, sino todavía peor: no fue nada. Esa fue la razón por la cual _______ no se animó a dar el paso de unir su vida a la de Paul para siempre.
________ miró a nick de soslayo y el estómago se le encogió al pensar que con él, el sexo jamás sería «nada». Evidentemente deseó convencerse de que eso se debía a que nick siempre había sido el hombre de sus sueños. Pero su alegría pronto se vio sustituida por la tristeza. ¿Cómo podía ser el hombre de sus sueños, ¿si estaba casado?, se preguntó Serina mientras preparaba el whisky con soda que le había pedido el cliente que estaba delante de ella, en la barra.
—Gracias, cariño —expresó el cliente en cuanto ________ le entregó su bebida.
_______ le sonrió con cortesía, pero sin darle el menor estímulo; sin embargo, el cliente pareció interpretarla mal y quiso entablar conversación mientras ella servía la cerveza que le había pedido nick. Se alegró de poder disculparse para llevar la cerveza.
—Aquí tienes —le dio la bebida y se dispuso a regresar a la barra, apresurada.
—No te vayas —le pidió nick sin embargo, cuando ________ lo miró a los ojos, percibió en ellos una intensidad alarmante y atrayente a la vez.
—Yo…
—Seguramente no tendrás deseos de volver a la barra, donde te aguarda tu admirador —comentó nick con tono sarcástico—. A pesar de que lo has manejado de una manera admirable hace unos momentos puede convertirse en una molestia para ti. Deberías haber visto la forma en que, te miró cuando venías hacia aquí. Vamos, siéntate y cuéntame más cosas —sugirió y retiró una silla para que tomara asiento—. Estoy seguro de que no te meterás en ningún problema, y si entra algún cliente, yo te avisaré.
El sentido común le indicó que no lo hiciera; pero al fin lo hizo.
—¿Bien? ¿Qué quieres saber? —preguntó con aparente serenidad.
—Todo —respondió él con decisión.
—¿Todo? —repitió.
—Bueno, tal vez no todo —sonrió—. Me conformo con saber dónde vives ahora, si tienes novio… Si la respuesta es «no». También me gustaría saber a qué hora sales de trabajar para que te invite a cenar.
—No pierdes el tiempo, ¿verdad?
—El tiempo no espera a ningún hombre, ________. Además, es poco probable que vuelva por aquí. He venido sólo por un asunto de negocios. Llevo una vida muy ocupada.
—Apuesto a que sí —aseguró _______ y no pudo evitar sentirse decepcionada. No era una sensación agradable que su ídolo cayera de su pedestal y fue peor el vuelco que le dio el corazón al escuchar esa invitación, que revelaba que estaba interesado. Empezaba a tentarle la idea. Imaginó lo que sería que la acariciara, la besara, le hiciera el amor…
—¿Y bien?
—Vivo en mi antigua casa de Gosford. Por el momento, no tengo novio, pero no necesitas saber a qué hora salgo de trabajar, porque no pienso salir contigo.
—¿Por qué? —la miró fijamente.
—Porque yo no salgo con hombres casados.
Él estalló en carcajadas; había un matiz cruel y duro en su tono.
—Eres tan formal, _______. Pero, ¡qué estúpido he sido al no darme cuenta de que tú no lo sabías! Ya no estoy casado. Naomi murió el año pasado, después de una breve lucha contra el cáncer.
_________ se quedó perpleja. Al mismo tiempo experimentó un verdadero júbilo, porque eso significaba que el hombre de sus sueños ya no estaba casado, ya no estaba prohibido para ella. Ahora ya no lo veía como un mujeriego vividor, sino como un viudo solitario y amargado, que trataba al mundo con un desdén nacido del dolor y de la frustración.
—Qué tragedia —murmuró—. Debió ser muy difícil para ti.
—Lo fue —convino con amargura—. Y para Christine.
—¿Christine? Ah, sí. Tu hija. ¿No tuviste más hijos, nick?
—No —respondió bruscamente—. Pero hoy no hay que hablar de cosas tristes, __________ —volvió a sonreír—. Hoy me he encontrado con una antigua amiga, vamos a salir y nos vamos a divertir juntos, ¿de acuerdo? No puedes poner ninguna objeción, ya que te has dado cuenta de que no soy un mujeriego impertinente.
—Esta tarde no puedo salir contigo —explicó _____ sin aliento—. Tengo que ir a Gosford. La casa familiar está en venta, y el agente inmobiliario va a llevar a un posible comprador para que la vea, esta tarde. Como el comprador viene desde Sydney, no creo que sea correcto cancelar la cita. Pero esta noche no voy a trabajar, así que… —guardó silencio al darse cuenta de que nick la miraba extrañado—. ¿Qué… qué noche?
—Esto es sorprendente —movió la cabeza—. Estás hablando de mí. Yo soy el posible comprador.
—¿Tú?
—Sí, yo. Por lo menos, eso creo. La descripción de la casa que voy a ver es muy similar a la casa que te llevé aquella noche, hace tantos años. ¿Es de dos pisos, estilo colonial y con persianas blancas?
—¡Sí! —exclamó ________ muy sorprendida por la coincidencia.
—Y la inmobiliaria que contraste se llama Hogares de la Costa Central?
—Sí. ¡Cielos, esto es increíble!
—Sí, ¿verdad? Tal vez sea el destino, que está empeñado en reunirnos —esbozó una amarga sonrisa.
A ________ se le encogió el estómago. Esa sonrisa era muy peligrosa. Le preocupaba además pensar en lo que se estaría metiendo al aceptar salir con nick. Sabía que ese hombre no andaba en busca de una relación permanente y seria con ella. Daba la impresión de estar muy herido por la muerte de su mujer.
Eso la llevó de vuelta a su conclusión original. nick sólo deseaba sexo, al igual que la mayoría de los hombres que la invitaban a salir. Sexo puro y sin complicaciones. Aventuras de una sola noche. La conclusión a la que nick debió de llegar acerca de su moralidad, por lo sucedido aquella noche en la discoteca, más el hecho de que era soltera, sin duda le hacía pensar que con ella podría divertirse mucho.
________ se estremeció ante la idea y un ataque de orgullo repentino la hizo ponerse de pie con rapidez.
Ella no tenía por qué exponerse a eso.
—Lo siento, nick —expresó con frialdad—. No puedo aceptar salir contigo. Acabo de recordar… que mi hermano Rupert, ha quedado en pasar esta noche por casa para hablar acerca de algunos problemas legales que hay con la propiedad que mamá nos legó. Pero puedes pasar a ver la casa, si gustas.
Por suerte en ese momento llegó la cena que nick había pedido, porque _______ estaba segura de que él iba a insistir. Su expresión se tomó sombría ante su repentino cambio de opinión y apretó los labios como si estuviera decidido a encontrarle solución a ese problema. Pero Serina aprovechó la presencia del camarero para huir de allí.
—Nos vemos, nick —colocó la silla en su lugar—. Le dije al agente inmobiliario que estaría en casa a partir de las cuatro y media de la tarde. Si decides no ir, yo lo entenderé. Que tengas un buen viaje de regreso a Sydney y no vayas a trabajar demasiado —después de eso, giró sobre sus talones y fue a refugiarse tras la barra.
Ella esperaba que cuando terminara de cenar nick se acercara, pero no lo hizo. En vez de eso, la miró como con curiosidad cuando se levantó y asintió con cortesía en respuesta al sutil gesto de despedida que le hizo ______.
Dejó escapar un prolongado suspiro una vez que nick se fue lo cual mostraba lo tensa que había estado durante la última media hora. Aliviada, pensó que, por lo menos, si iba a ver la casa, iría acompañado del agente inmobiliario. Era el único consuelo que encontraba a los acontecimientos de esa tarde.

por **romina.13** Jue 30 Jun 2011, 10:20 pm

ahhh estuvo super genial el cap!!

por **chelis** Vie 01 Jul 2011, 12:24 pm

AAAAAIIII
JEJEJEJEJE
SIGUELA PORFA

por **♥..:Tiff:..♥** Vie 01 Jul 2011, 8:54 pm

Quiero mas!! quiero q llegen a la mejor parte!!

por **Pily....** Sáb 02 Jul 2011, 8:04 pm

chikas lo siento por no subir pero e estado muy wow
mi vida dio un gran giro y aun no lo creo
pero luego les subo sii porfa tengame paciencia siii se les kiere mucho!!!!

por #Fire Rouge..* Dom 03 Jul 2011, 11:38 am

dios sea lo que sea te apoyare
besoos siguela cuando puedas
:(

por **Pily....** Dom 03 Jul 2011, 8:17 pm

bueno chicas lo siento por no haverles subido pero
el amor toco mi puerta y e estado muy wow
pero a qui les dejare cap si quieren mas me dicen se les quiere mucho

Poco después de que ____________ aparcara su moto en el sendero privado de la casa, llegó nick. Ella se encontraba en la habitación principal de la casa y acababa de salir de la ducha, cuando oyó que un coche se detenía frente a la puerta. Estaba en ropa interior, pero corrió a la ventana y con los ojos desorbitados y el corazón acelerado vio que nick bajaba de un lujoso coche de color azul claro para dirigirse a la entrada principal. Lo maldijo en silencio. Debió suponer que nick no se daría por vencido con tanta facilidad.
De inmediato se puso unos vaqueros blancos y una blusa de algodón. Sólo tuvo tiempo para cepillarse su larga melena rubia. Cuando nick llamó a la puerta, la joven corrió escalera abajo. En el descansillo se detuvo para normalizar su respiración y bajó los últimos escalones con lentitud. Antes de que abriera la puerta, el timbre volvió a sonar.
—Has venido —expresó en tono sorprendido, pero a la vez tranquilo—. Pero, ¿dónde está el agente inmobiliario?
—No vale la pena pagar la comisión si se puede evitar —explicó él con tono suave—. Si me gusta la casa, podemos llegar a un acuerdo privado.
________ sintió un escalofrío ante el sutil énfasis que él había dado a la palabra «privado». No obstante, ignoró esos pensamientos convenciéndose de que sólo eran un efecto de su calenturienta imaginación.
—Tal vez no te guste la casa —respondió ________ en tono un tanto irónico.
nick sonrió y ella volvió a estremecerse. Había algo en aquella sonrisa que nada tenía de agradable.
—Es posible —aceptó él entre dientes—, pero nunca lo sabré si me dejas de pie aquí, en la puerta.
—Ay… —ruborizada, lo hizo pasar al vestíbulo—. Como podrás ver —se dispuso a explicarle—, la sala y el comedor se encuentran a la derecha, nada más entrar, y la escalera a la izquierda; debajo hay unos estantes para guardar cosas.
nick miró con rapidez a su alrededor y después posó la mirada en ___________; observó con detenimiento su melena larga y ondulada que le caía húmeda sobre la espalda, sus mejillas sonrojadas y, por último, se detuvo en sus labios. Ella se tensó.
—Por aquí está la zona menos formal de la casa —añadió bruscamente y pasó bajo un arco a una enorme cocina.
No obstante, cuando se volvió, ____________ se dio cuenta de que nick se encontraba en el estudio de la casa, al otro lado de la escalera. Se trataba de una habitación muy interesante y atractiva, con un enorme ventanal que daba al exterior, donde había un invernadero con helechos.

—Este era el lugar favorito de mi madre —murmuró después de colocarse detrás de nick—. Pasaba más tiempo aquí que en cualquier otra parte.
—Es una habitación encantadora —convino él y se volvió para encontrarse con los ojos brillantes de ________—. ¿La echas mucho de menos, _____?
—Sí —aseguró a punto de estallar en llanto, de manera que dio media vuelta y ambos entraron en, la cocina—. Las alacenas son de madera —se apresuro a señalar—. Cedro rojo.
_______ tuvo que ignorar de nuevo el acelerado latido de su corazón; señaló el detalle del suelo de baldosa y la conveniencia de que la habitación de lavado estuviera a un lado de la cocina.
—Esto es todo lo que hay en la planta baja —señaló después de mostrarle un cuarto de baño—. ¿Subimos para que veas las habitaciones?
—Por supuesto.
Ella lo miró de inmediato para buscar alguna evidencia en su rostro de que su respuesta contenía un doble sentido, pero al final concluyó que estaba equivocada. Sin embargo, no dejaba de ser demasiado consciente de su presencia, muy cerca de ella, mientras subía las escaleras.
—Habrás notado que cada habitación está pintada en un color diferente.
nick miró dos de las habitaciones sin mayor interés hasta que llegaron a la tercera y rió con sarcasmo.
—¿Debo suponer que ésta es tu habitación?
—Sí —respondió ________ contemplando la habitación de estilo inequívocamente femenino, decorada según el gusto de su madre más bien que del suyo.
nick entró en la habitación y tomó una fotografía con marco de plata que estaba sobre el tocador. Era un retrato hecho por un fotógrafo profesional en un restaurante donde la familia se reunió para festejar los veintiún años de Rupert. ________ conocía la fotografía de memoria. Todos estaban ante una mesa, sonrientes; su padre parecía menos reservado de lo que era su costumbre, su madre estaba muy guapa, vestida de verde pálido, Rupert reflejaba seguridad en sí mismo, al contrario que Philip, mientras que _________, con trece años, llevaba un espléndido vestido rosa.
Como nick se quedó mirando fijamente la fotografía, la joven se sintió incómoda. Al dar un paso hacia él y mirar el retrato, se dio cuenta por primera vez de que en aquel entonces ya tenía los senos bastante desarrollados y los pezones se destacaban con claridad en la ajustada tela del vestido.
Pero en ese preciso instante perdió el aliento, pues se dio cuenta de que el brazo de nick estaba en contacto con un lado de su seno. Dio un paso atrás y se llevó una

mano al cuello, pero no antes de percibir que sus pezones se endurecían, hasta un grado casi doloroso, bajo la fina tela del sostén.
nick miró por encima de su hombro y fijó la mirada en sus ojos, de manera directa.
—¿Qué edad tenías cuando os hicieron esta fotografía?
—Tre… tice —respondió apresurada.
—Sólo trece —repitió él, colocó la fotografía en su lugar y otra vez la miró de manera penetrante—. ¿Te causó muchos trastornos desarrollarte tan rápido?
—No… no fue fácil —tragó saliva.
—Creo que sé a lo que te refieres. Yo me desarrollé muy rápido también. No era precisamente un enclenque a los dieciséis años. Entonces empecé a actuar y a desear como un hombre, pero no era un hombre. Cometí muchos errores.
—¿nick? —la joven estaba perpleja y se preguntó si se referiría a su relación con Naomi y al hecho de haberla dejado embarazada tan joven.
—Yo, __________ —hizo una mueca—. ¿Creíste que por haber sido aclamado por el público, navegué por la vida sin ningún problema? La fama no siempre trae la felicidad, muy al contrario.
—Bueno, pero ahora ya no tienes que preocuparte por eso. Ya no eres una persona asediada por la prensa.
La expresión desolada desapareció del rostro de nick y la sustituyó una fría resolución que ya antes _________ había visto en sus ojos. El le inspiraba miedo; tanto por sus cambios de carácter como por la reacción que provocaba en ella.
—Tienes razón, _________ —expresó al fin—. Tienes toda la razón.
El timbre del teléfono fue una interrupción bienvenida.
—No tardo —se disculpó la joven y se dirigió a la habitación principal, en la que había un teléfono junto a la enorme cama doble.
Se inclinó para levantar el auricular, y cuando levantó la vista se sorprendió al ver que nick la había seguido y que estaba mirando el cuarto de baño integrado en la habitación. Lo vio tomar una toalla húmeda que estaba en el suelo y colgarla en un toallero de pared. Cuando _________ se volvió para darle la espalda, escuchó la impaciente voz de su hermano Rupert por el auricular.
—¿_________? ¿Estás ahí? ¡Maldita sea, Sen, contéstame!
—Sí, soy yo —respondió la joven teniendo cuidado de no mencionar su nombre, pues le había dicho a nick que lo iba a ver más tarde.
—¿Qué sucede? —preguntó—. ¿Está mal la línea?
—No lo creo.
—Pues entonces habla más fuerte porque no te oigo.
¿Qué pasó con el comprador que fue a ver la casa ayer? ¿Hizo alguna oferta?
—Me temo que no. Cuando se enteró de que en el testamento había una cláusula que prohibía que se talasen los árboles del jardín trasero, y que por lo tanto no podría construir una piscina, salió a toda prisa de aquí.
—Maldita sea. No veo qué sentido tenía que mamá pusiera esa cláusula tan estúpida. Debiste convencerla de que no lo hiciera, ________. Tú eras la que vivía con ella.
—Ni siquiera se me habría ocurrido —replicó—. Mamá adoraba a esos árboles. ¿Recuerdas que solía medir lo que habían crecido en un año, por Navidad? Eran muy importante para ella, Rupert —demasiado tarde se dio cuenta de que no debió mencionar su nombre.
—Tal vez —aceptó él—, pero ahora que mamá no está, ¿qué importancia tiene? Son sentimentalismos y nada más.
—El sentimiento es importante para algunas personas —señaló, aunque sabía que a su hermano y a su cuñada lo único que les importaba era vivir a lo grande, sin preocuparse de nada.
—¡No me vengas con esas estupideces, _________! ¡Tú eres tan dura como una bota vieja!
—¿Eso crees? Mira, Rupert, tengo que colgar. En este momento un comprador está viendo la casa. ¿Quién sabe? Quizá tenga buenas noticias cuando te vea —concluyó y se le ocurrió dar la impresión de que su hermano se dirigía hacia la casa.
—¿Cuando me veas? No me vas a ver, pues te llamaba entre otras cosas para avisarte de que Philip y yo, con nuestras respectivas mujeres, vamos a pasar la Navidad en un crucero. He querido advertirte para que decidas qué es lo que vas a hacer por Navidad, ya que sé la clase de demente tradicionalista que eres —Rupert estalló en una seca carcajada—. Todavía recuerdo cómo llegaste la última Navidad. De verdad, _______, jamás entenderé cómo puedes encontrar algún encanto a todas esas estupideces. ¡Debe de haber toda una fila de hombres deseosos de pasárselo bien con una mujer como tú!
__________ sintió deseos de llorar. Y no por la forma en que acababa de ofenderla Rupert, porque ya estaba acostumbrada a que los hombres de su familia la consideraran una mujer fácil. La idea de tener que pasar sola la Navidad precisamente ese año, la afectaba profundamente.
—¿Tú crees? —replicó indignada—. Es posible que estés equivocado, pero no te preocupes. Vete y que te diviertas —añadió sin poder ocultar cierto tono de amargura.
—No seas así, hermanita, yo… ¡ay, al diablo contigo! No permitiré que me sometas a un chantaje emocional. Tú vive tu vida y yo viviré la mía. ¿Estamos? Adiós.
—Adiós —_______ colgó el auricular de un golpe y se dio cuenta de que acababa de anular la fingida cita. Se volvió lentamente y se encontró con el rostro inexpresivo de nick.
—Deduzco que Rupert no va a venir.

por **chelis** Lun 04 Jul 2011, 4:13 pm

jejejejejeje
descubrio a ____
jejejejeje
siguela porfa

por #Fire Rouge..* Lun 04 Jul 2011, 4:48 pm

quiero mas
el amor toco tu puerta q lindo!
quiero mas ay ya odio a rupert!!

por **chelis** Mar 05 Jul 2011, 2:11 pm

ESPERANDO CAPIS

por **Pily....** Mar 05 Jul 2011, 9:52 pm

—No —respondió malhumorada.
—¿Entonces puedes salir conmigo después de todo?
—No —gritó, pues estaba demasiado furiosa para mostrarse amable.
—¿Por qué no?
—Ay, Dios —murmuró con amargura—. De nuevo con lo mismo. Mira, nick. He intentado rechazarte sin herir tu orgullo, pero tengo la impresión de que no has comprendido el mensaje. No quiero salir contigo. No estoy disponible para la clase de cita que tienes en mente. Nunca lo he estado, lo creas o no. Ahora vuelve por donde has venido, porque yo no… —aspiró para tomar aire—… quiero…
Se le hizo un nudo en la garganta y se dio cuenta de que tenía que esforzarse para reprimir el llanto histérico que amenazaba con estallar.
El silencio que reinó en la habitación era eléctrico y nick la miraba con tal expresión de perplejidad que __________ casi se echó a reír. «Pobre nick», se dijo. Tal vez, lo único que él deseaba era un poco de alivio físico; una noche de falso amor; sin embargo, esa clase de relación no iba con la forma de ser de __________. Por más que se sintiera atraída por nick, no pensaba ceder, pues eso significaría perder el respeto que se debía a sí misma.
—Lo siento. No había necesidad de ser tan grosera contigo, pero estoy cansada de que los hombres apenas me miren y ya piensen que pueden tener una aventura conmigo. Así que… hazme un favor y vete —se estremeció cuando nick se le acercó y la tomó de los hombros—. No —le pidió ella.
El de inmediato la soltó, pero no se movió de donde estaba. _________ levantó lentamente la mirada y se encontró con sus ojos que parecían hipnotizarla.
—Yo también lo siento. Me siento un poco avergonzado, porque tienes razón. Quería acostarme contigo, sin ataduras ni compromisos. Sólo sexo, sin detenerme a mirar atrás, a la mañana siguiente. Y la verdad es que… no pensé que a ti te importara.
Esa sincera confesión dejó a __________ sin aliento.
—Pero veo que me he equivocado. No eres en absoluto esa clase de mujer. Y con toda franqueza, es un alivio, porque tratándose de ti, ____________, yo no me conformaría con una aventura de una sola noche. Deseo mucho más que eso de ti.
Se aprovechó de su aturdimiento para tomarla entre sus brazos, y ella se dejó hacer sin oponer resistencia, más por su confusión que porque realmente lo deseara. Pero una vez en sus brazos, en contacto con la sólida calidez de su pecho, sus sentidos comenzaron a dar vueltas. «Si me besa», pensó ofuscada «no sé qué voy a hacer».
—Siempre te he deseado, _______________—murmuró nick, al tiempo que le acariciaba el cabello y la espalda—. ¿Lo sabías? Cuando te vi bailando en la discoteca de la escuela, me quedé pasmado al comprender lo mucho que te deseaba. Casi no pude soportar estar allí, y si después no fui más severo con los jóvenes, fue porque estaban haciendo lo mismo que quería hacer yo. ¡No te muevas! —continuó abrazándola—. Sé que no había excusa para lo que trataron de hacerte esos chicos, pero quiero explicarte la razón por la cual los hombres se comportan de una forma tan abominable contigo. ¿Tienes idea de lo tentadora que eres, _________? Deja de luchar y escúchame. Después tú puedes decirme lo que quieras. Tienes tal sensualidad que haces que los hombres te deseemos, aunque no sea esa tu intención. Pero hoy, ________… tú también me has deseado. Lo sentí cuando me miraste y si lo niegas estarás mintiendo.
Ella se estremeció entre sus brazos, de manera que casi aceptó lo que nick acababa de señalar.
—Comprendo que no quieras correr a acostarte conmigo de inmediato. Piensas que si lo haces no te respetaré. Eso es admirable, sin embargo no es necesariamente cierto, porque somos adultos, no adolescentes, _____ —la apartó un poco y la miró intensamente a los ojos—. Sin embargo, aceptaré tus deseos y primero nos conoceremos un poco. Después correremos a la cama —añadió.
___________ lo miró fijamente preguntándose al mismo tiempo por qué no le había respondido, por qué no le aclaraba que no tenía por qué ser necesariamente así. No se trataba de conocerse un poco mejor, sino de si se enamoraban o no.
—¿Qué tal si bajamos a la cocina y me preparas una taza de café? —la volvió hacia la puerta con suavidad para que salieran de allí—. Estamos demasiado cerca de esa cama doble, para que me sienta tranquilo. Y así aprovechas para contarme lo de la cláusula del testamento; la casa me gusta, pero mi hija siempre ha querido tener una piscina.

Esa noche ________ se quedó despierta, tendida en su cama, hasta la madrugada. nick la había acompañado hasta su casa después de que fueron a cenar y a ver una película. La dio un beso apresurado ante la puerta de su casa y le prometió que la llamaría pronto. Después se dirigió a su coche, silbando.
«¿Qué es lo que quiere de mí?», se preguntaba, tendida en el lecho.
Por la tarde, cuando le aseguró que deseaba que se conocieran mejor y que no quería una aventura de una noche con ella, _______ pensó que nick tal vez era sincero; que realmente quería una relación verdadera que comenzara con una simple amistad, esperando que sus sentimientos se profundizaran, antes de que se acostaran juntos.
Pero ahora _______ ya no podía tener esa esperanza.
Esa noche se había dado cuenta de que nick no hacía auténtico esfuerzo por conocerla mejor. Ni una sola vez le había preguntado algo personal sobre ella y tampoco le había dado información alguna sobre él, su matrimonio, su hija o su negocio. Durante la cena solo había hablado de comida y vinos, y en el cine, de actores y actrices. Por lo tanto, _______ se quedó con la sensación de que simplemente estaba ganando tiempo; que nick, con astucia, estaba esperando el momento en que pudiera dar el zarpazo de nuevo.
Eso la llevó de nuevo a la pregunta original: ¿qué quería de ella? Experimentó una desagradable sensación al comprender que sólo deseaba tener una aventura.
«¿Por qué la realidad nunca puede ser como soñamos? ¿Por qué los hombres no pueden ver más allá de un rostro sensual y de un cuerpo bonito, sin tener en cuenta a la mujer que llevamos dentro?» se preguntaba.
Paul era el único hombre que conocía que sí la había querido por ella misma. _________ cerró los ojos con fuerza. No le gustaba pensar en Paul, ni en su expresión de profunda tristeza cuando ella dio por terminada la relación. Sin embargo, comprendía que había sido lo mejor porque habría sido peor que las cosas continuaran, y fingir que todo estaba bien cuando no era cierto. ________ habría hecho todo lo posible por facilitar las cosas al dejar su empleo de secretaria de recepción en el hotel de Paul y trasladarse al norte, a la costa.
Sin duda, le había resultado muy difícil dar la espalda al único hombre que la había apreciado por lo que era y no por su apariencia de símbolo sexual.
No tenía que esforzarse mucho para decir cuál era la __________ que le interesaba a nick. Aunque para ser justa, comprendía que un hombre tan amargado, como era su caso, no estuviera dispuesto a enamorarse. Tal vez, al cabo de un año, de nuevo estaría dispuesto a contraer un compromiso que al final condujera al matrimonio. El problema era que ________ realmente no creía que él fuera a esperar tanto tiempo antes de intentar seducirla de nuevo.

chicas lo siento por no subir ayer pero no pude!!1
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