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Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
Jajaja PRIS!!iohmyzayn escribió:¿Qué le pasó a raya? :lloro:
Louis te salvará,querida,él lo hará.
Algo le hicieron,ya eso es una pista.
Tu novela es un enigma.
Tengo mis suposiciones,pero nada es seguro,así que tendré que esperar.
Espero que pronto puedas subir más capitulos,y cuando pienses que es buen momento,hasta un maratón nos puedes regalar.
¡Me moriríaaaaaa!
Yaa,besote para Ceci :*
Tranquila Tranquila ya vas a saber que pasa aqui!! Y sip algo le isieron a rayis :)
El fin de semana subo nuevamente!! Y si alomejor me anime y suba un maraton!! :)
Bss
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
omfg,me muero muerta.CeciHoran* escribió:Jajaja PRIS!!iohmyzayn escribió:¿Qué le pasó a raya? :lloro:
Louis te salvará,querida,él lo hará.
Algo le hicieron,ya eso es una pista.
Tu novela es un enigma.
Tengo mis suposiciones,pero nada es seguro,así que tendré que esperar.
Espero que pronto puedas subir más capitulos,y cuando pienses que es buen momento,hasta un maratón nos puedes regalar.
¡Me moriríaaaaaa!
Yaa,besote para Ceci :*
Tranquila Tranquila ya vas a saber que pasa aqui!! Y sip algo le isieron a rayis :)
El fin de semana subo nuevamente!! Y si alomejor me anime y suba un maraton!! :)
Bss
¿para ti cuando comienza el fin de semana? ¿viernes,o sabado?
solo para saber,cuando podrias subir xd.
jkfdhikdfnbvkjddxdnfs
Good Vibes.
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
Jajaja mm para mi el sabado!!Iiohmyzayn escribió:omfg,me muero muerta.CeciHoran* escribió:Jajaja PRIS!!iohmyzayn escribió:¿Qué le pasó a raya? :lloro:
Louis te salvará,querida,él lo hará.
Algo le hicieron,ya eso es una pista.
Tu novela es un enigma.
Tengo mis suposiciones,pero nada es seguro,así que tendré que esperar.
Espero que pronto puedas subir más capitulos,y cuando pienses que es buen momento,hasta un maratón nos puedes regalar.
¡Me moriríaaaaaa!
Yaa,besote para Ceci :*
Tranquila Tranquila ya vas a saber que pasa aqui!! Y sip algo le isieron a rayis :)
El fin de semana subo nuevamente!! Y si alomejor me anime y suba un maraton!! :)
Bss
¿para ti cuando comienza el fin de semana? ¿viernes,o sabado?
solo para saber,cuando podrias subir xd.
jkfdhikdfnbvkjddxdnfs
Asi que puede que mañana o el domingoo, pero yo creo que mañana :)
Bss
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
YESSSSSS.CeciHoran* escribió:Jajaja mm para mi el sabado!!Iiohmyzayn escribió:omfg,me muero muerta.CeciHoran* escribió:Jajaja PRIS!!iohmyzayn escribió:¿Qué le pasó a raya? :lloro:
Louis te salvará,querida,él lo hará.
Algo le hicieron,ya eso es una pista.
Tu novela es un enigma.
Tengo mis suposiciones,pero nada es seguro,así que tendré que esperar.
Espero que pronto puedas subir más capitulos,y cuando pienses que es buen momento,hasta un maratón nos puedes regalar.
¡Me moriríaaaaaa!
Yaa,besote para Ceci :*
Tranquila Tranquila ya vas a saber que pasa aqui!! Y sip algo le isieron a rayis :)
El fin de semana subo nuevamente!! Y si alomejor me anime y suba un maraton!! :)
Bss
¿para ti cuando comienza el fin de semana? ¿viernes,o sabado?
solo para saber,cuando podrias subir xd.
jkfdhikdfnbvkjddxdnfs
Asi que puede que mañana o el domingoo, pero yo creo que mañana :)
Bss
¡ALABEMOS A CECILIAAAAAAA!
Good Vibes.
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
CAPITULO 6
Se encontro con la llamada perdida al abrir el móvil y con el número de ella impreso en la pantalla. Lo había memorizado, así que el nombre también aparecía encima de las nueve cifras.
_____.
Louis se apoyó en la pared más cercana. Lo había estado pensando, y aun así, el momento decisivo era aquél. Podía olvidarse, no llamar, darle a enterder que pasaba. O podía llamarla y abrir una puerta que ya no sería fácil de cerrar.
Una puerta que no conducía a ninguna parte.
También podía decirle la verdad.
—Es mi trabajo, ¿sabes? Lo siento. ¿Por qué no colaboras...?
La verdad no servía de nada. Ya no. La perdería.
Y, por encima de todo, quería volver a verla.
—Le harás daño.
Ya la conocía, el resto lo inventaba y en paz. No sería tan dificil escribir...
Louis continuó mirando la pantalla del móvil.
¿Por qué tenía que ser ella?
No la había apartado de su pensamiento en aquellos dos días. Pero aún: había soñado con _____. Paseaba con ella, nada más, los dos cogidos de la mano y charlando, riendo. Ni siquiera hubo algo sexual. Y al despertar, el sabor de boca era tan delicioso como amargo fue el choque con la realidad y su brutal desencanto.
—Te gusta —se estremeció.
¿Y qué? ¿Tenía algún sentido?
Volver a verla no les haría daño. Mejor decírselo cara a cara, recibir la bofetada, sentir la herida de sus lágrimas. Había sido un estúpido. Él y su maldito instinto, su afán de protagonismo, sus ganas de subir cuanto más rápido mejor.
Tenía la excusa, se aferró a ella.
Hizo la llamada.
Todavía pensó que el destino le echaria una mano, que ella tendría el móvil desconectado y que ya no volvería a intentarlo. Pero no fue así. Escuchó su voz al otro lado, llena de promesas y música
—Hola, Louis. ¿Cómo estás?
—Bien. Te has adelantado.
—Esta noche he de ir a cenar a casa de mis padres, y ellos no saben nada. No quería que me llamaras estando yo allí. Me daría corte, ¿entiendes?
—Claro
—¿Cómo estás tú?
—Todavía un poco... sorprendido.
—Yo también.
—No sabía si querrías...
—¿Seguir?
—Si.
—¿Por qué no?
¿Por qué no?
No supo qué decir y se quedó en silencio a lo largo de unos embarazosos segundos.
—¿Sigues ahí?
—Perdona.
—Tu carta era menos convencional, más apasionada —pareció burlarse ella.
—Si, se me da mejor escribir —reconoció él.
—Eso es bueno. Admiro a la gente que sabe verter en un papel sus sentimientos. Oye... —Cambió el tono para decir—: no estás convencido, ¿verdad?
—Si, si lo estoy —Louis cerró los ojos y apretó el puño libre—. Quiero volver a verte.
—Y yo a ti.
Apretó aún más el puño, y sus ojos. El la oscuridad vio un millón de lucecitas cambiando de formas y colores. Volvía a tener la boca seca y el corazón al limite.
—¿Cuándo quieres que nos veamos?
—¿Mañana? —propuso _____
—Tengo trabajo. ¿Qué tal el sábado? Podemos ir al cine, luego cenamos... Así tendremos tiempo de charlar.
—De acuerdo, el sábado, ¿donde el otro dia?
—Si.
—¿Prefieres a primera hora, a media tarde...?
—A primera hora. ¿Las cuatro?
—Las cuatro, bien. ¿Puedo hacerte una pregunta ahora?
—Adelante.
—¿En qué trabajas?
Fue rápido. No tenía preparada la respuesta, pero aun así fua rápido.
—Soy fotógrafo.
—Suena interesante —reconoció ella.
—He de dejarte.
—Hasta el sábado.
—Si. Cuidate.
—Y tú.
Cortó la comunicación pero continuó apoyado en la pared de la que no se había movido, en la mitad de la calle, rodeado de personas anónimas y el tráfico habitual de cada día. Ni siquiera se había dado cienta del ruido. Estaba como en una campana de cristal, aislado del mundo entero. Ahora sin embargo todo volvía, y multiplicado por diez. Un estriendo ensordecedor lleno de voces, pasos, motores...
Otra cita.
Louis frunció el ceño.
Fotógrafo.
Bueno, era lo más parecido a la verdad. Después de todo también hacía fotos cuando era necesario.
Se encontro con la llamada perdida al abrir el móvil y con el número de ella impreso en la pantalla. Lo había memorizado, así que el nombre también aparecía encima de las nueve cifras.
_____.
Louis se apoyó en la pared más cercana. Lo había estado pensando, y aun así, el momento decisivo era aquél. Podía olvidarse, no llamar, darle a enterder que pasaba. O podía llamarla y abrir una puerta que ya no sería fácil de cerrar.
Una puerta que no conducía a ninguna parte.
También podía decirle la verdad.
—Es mi trabajo, ¿sabes? Lo siento. ¿Por qué no colaboras...?
La verdad no servía de nada. Ya no. La perdería.
Y, por encima de todo, quería volver a verla.
—Le harás daño.
Ya la conocía, el resto lo inventaba y en paz. No sería tan dificil escribir...
Louis continuó mirando la pantalla del móvil.
¿Por qué tenía que ser ella?
No la había apartado de su pensamiento en aquellos dos días. Pero aún: había soñado con _____. Paseaba con ella, nada más, los dos cogidos de la mano y charlando, riendo. Ni siquiera hubo algo sexual. Y al despertar, el sabor de boca era tan delicioso como amargo fue el choque con la realidad y su brutal desencanto.
—Te gusta —se estremeció.
¿Y qué? ¿Tenía algún sentido?
Volver a verla no les haría daño. Mejor decírselo cara a cara, recibir la bofetada, sentir la herida de sus lágrimas. Había sido un estúpido. Él y su maldito instinto, su afán de protagonismo, sus ganas de subir cuanto más rápido mejor.
Tenía la excusa, se aferró a ella.
Hizo la llamada.
Todavía pensó que el destino le echaria una mano, que ella tendría el móvil desconectado y que ya no volvería a intentarlo. Pero no fue así. Escuchó su voz al otro lado, llena de promesas y música
—Hola, Louis. ¿Cómo estás?
—Bien. Te has adelantado.
—Esta noche he de ir a cenar a casa de mis padres, y ellos no saben nada. No quería que me llamaras estando yo allí. Me daría corte, ¿entiendes?
—Claro
—¿Cómo estás tú?
—Todavía un poco... sorprendido.
—Yo también.
—No sabía si querrías...
—¿Seguir?
—Si.
—¿Por qué no?
¿Por qué no?
No supo qué decir y se quedó en silencio a lo largo de unos embarazosos segundos.
—¿Sigues ahí?
—Perdona.
—Tu carta era menos convencional, más apasionada —pareció burlarse ella.
—Si, se me da mejor escribir —reconoció él.
—Eso es bueno. Admiro a la gente que sabe verter en un papel sus sentimientos. Oye... —Cambió el tono para decir—: no estás convencido, ¿verdad?
—Si, si lo estoy —Louis cerró los ojos y apretó el puño libre—. Quiero volver a verte.
—Y yo a ti.
Apretó aún más el puño, y sus ojos. El la oscuridad vio un millón de lucecitas cambiando de formas y colores. Volvía a tener la boca seca y el corazón al limite.
—¿Cuándo quieres que nos veamos?
—¿Mañana? —propuso _____
—Tengo trabajo. ¿Qué tal el sábado? Podemos ir al cine, luego cenamos... Así tendremos tiempo de charlar.
—De acuerdo, el sábado, ¿donde el otro dia?
—Si.
—¿Prefieres a primera hora, a media tarde...?
—A primera hora. ¿Las cuatro?
—Las cuatro, bien. ¿Puedo hacerte una pregunta ahora?
—Adelante.
—¿En qué trabajas?
Fue rápido. No tenía preparada la respuesta, pero aun así fua rápido.
—Soy fotógrafo.
—Suena interesante —reconoció ella.
—He de dejarte.
—Hasta el sábado.
—Si. Cuidate.
—Y tú.
Cortó la comunicación pero continuó apoyado en la pared de la que no se había movido, en la mitad de la calle, rodeado de personas anónimas y el tráfico habitual de cada día. Ni siquiera se había dado cienta del ruido. Estaba como en una campana de cristal, aislado del mundo entero. Ahora sin embargo todo volvía, y multiplicado por diez. Un estriendo ensordecedor lleno de voces, pasos, motores...
Otra cita.
Louis frunció el ceño.
Fotógrafo.
Bueno, era lo más parecido a la verdad. Después de todo también hacía fotos cuando era necesario.
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
Pris!!! Como siempre tus comentarios! gracias por leer :p
Alomejor mañana suba otro cap!! Se viene capitulo 7 descubrimientosss!! Jaja
Comenten!!
Bss
Alomejor mañana suba otro cap!! Se viene capitulo 7 descubrimientosss!! Jaja
Comenten!!
Bss
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
Ohhh nueva lectoraaa. Yo quiero saber en qué trabaj Louuu y también porque el negro lo va a despedir. En qué está metido!!
Me encanta sigue adaptándola aquí seguiré yo (:
Me encanta sigue adaptándola aquí seguiré yo (:
~La Castaña de Horan~
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
¡Te leo siempre,debes saberlo,y tenerlo seguro!CeciHoran* escribió:Pris!!! Como siempre tus comentarios! gracias por leer :p
Alomejor mañana suba otro cap!! Se viene capitulo 7 descubrimientosss!! Jaja
Comenten!!
Bss
Esta es la unica novela que he leido con Louis,nunca en mi vida me habia imaginado poniendome loca por Louis,no se por que,lo veo como un hermano,pero ahora NO MÁS,ahora si es verdad,estoy loca con todo el mundo.
Amo tu novela,espero que puedas subir de verdad mañana!
Por fin sale a la luz el Lou.
besitotes:aah:
Good Vibes.
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
BIENVENIDA!!~La Castaña de Horan~ escribió:Ohhh nueva lectoraaa. Yo quiero saber en qué trabaj Louuu y también porque el negro lo va a despedir. En qué está metido!!
Me encanta sigue adaptándola aquí seguiré yo (:
Jaja gracias por leer!! Woo ahora de apoco te vas a enterar de todo.
La seguire adaptando!! Pero hoy no puedo estoy llena de pruebas, tratare de seguirla en la semana.
Bss
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
Awwwww Pris!!! Love u girl!!iohmyzayn escribió:¡Te leo siempre,debes saberlo,y tenerlo seguro!CeciHoran* escribió:Pris!!! Como siempre tus comentarios! gracias por leer :p
Alomejor mañana suba otro cap!! Se viene capitulo 7 descubrimientosss!! Jaja
Comenten!!
Bss
Esta es la unica novela que he leido con Louis,nunca en mi vida me habia imaginado poniendome loca por Louis,no se por que,lo veo como un hermano,pero ahora NO MÁS,ahora si es verdad,estoy loca con todo el mundo.
Amo tu novela,espero que puedas subir de verdad mañana!
Por fin sale a la luz el Lou.
besitotes:aah:
Que bueno que te gusto :) gracias chica por todo siempre estas ahi para comentar!!
Y sii Lou sale a la luz!!
Bss y gracias!!
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
Chicasss no voy a poder subir hoy :/
Se me vienen la pruebas globales que son las pruebas finales y despues examenes, voy a tratar de subir lo antes posible, ojala en la semana!! Espero que entiendan
Bss
Se me vienen la pruebas globales que son las pruebas finales y despues examenes, voy a tratar de subir lo antes posible, ojala en la semana!! Espero que entiendan
Bss
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
No te preocupes hermosa,cuando puedas.CeciHoran* escribió:Chicasss no voy a poder subir hoy :/
Se me vienen la pruebas globales que son las pruebas finales y despues examenes, voy a tratar de subir lo antes posible, ojala en la semana!! Espero que entiendan
Bss
Lo bueno es que subes seguro <3
Good Vibes.
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
CHICAS!!!!
Perdon perdon no voy a poder subir en la semana pero el fin de semana hago maratonn si o si!!
Bss
Perdon perdon no voy a poder subir en la semana pero el fin de semana hago maratonn si o si!!
Bss
CeciHoran*
Re: Un poco de Abril, Algo de Mayo, Todo Septiembre (Louis T y Tu)
CAPITULO 7
DESCUBRIMIENTOS
Salieron de la sala rodeados por la flora y la fauna habituales de la primera sesión de la tarde: silenciosas parejas de novios adolescentes aislados en su paraiso terrenal, chicos y chicas prepúberes riendo y hablando a gritos como si estuvieran solos en el mundo y personas mayores que preferían esa hora a las restantes, mucho más llenas y con largas colas frente a las taquillas de los multicines. Sus brazos se rozaban. Era el único contacto. Este y el de sus miradas, mucho más intensas, mucho más fugaces, siempre buscando encontrar desprevenido al contrario, algo dificil porque chocaban una y otra vez, enredándose entre el misterio, las dudas, las vacilaciones.
Apenas si habían hablado al encontrarse en el bar, salvo trivialidades, y en el cine los dos estuvieron pendientes de la intriga de la pantalla. Tres horas después del encuentro, perdidos de nuevo los nervios iniciales, sabían que era el momento de las revelaciones.
Caminaban sin rumbo.
—Aqui cerca hay un parque —propuso _____—. ¿Quieres que vayamos?
—Si
—Es que así no tendremos ruidos, ni habrá humo —quiso justificarse ella—. Odio el tabaco. No sabes lo que agradezco que no fumes.
Ni siquiera tuvieron que variar el rumbo. Sus pasos les llevaron directamente al parque, todavia con un buen número de madres, abuelas o asistentas cuidando de un enjambre de niños y niñas pequeños en la zona de juegos dado el buen tiempo. Entraron en él y buscaron la parte más alejada de los gritos infantiles. Sobre el césped, por entre los árboles, las parejas o los grupos de chicos y chicas surgían como setas bajo ese sol, _____ se dejó caer en el suelo y se sentó esperando que él hiciera lo mismo. Louis la imitó. Las rodillas de ambos quedaron separadas apenas por unos centimetros. Podían tocarse con sólo alargar una mano, aunque no era el caso.
La última mirada fue desnuda.
—¿Por dónde quieres empezar? —preguntó ella.
Louis tragó saliva.
Verdades en medio de una gran mentira.
Porque lo único que no podía hacer era...
Estaba bloqueado.
Ella le parecía aún más maravillosa que el día de la cita a ciegas. No era un espejismo.
—¿Qué te pasa?
—Nada —reaccionó—. Es que eres tan... preciosa.
—Gracias —bajó los ojos por primera vez antes de recuperarse—. Venga, va. Empecemos por la familia. Te toca.
Louis ya no luchó.
—Soy hijo único, mis padres viven, entán casados hace veintinueve años. Él tiene cincuenta y seis y ella cincuenta y cuatro. Son muy activos. Papá tiene un taller de artes graficas y mamá todavia hace de secretaria. Así que... No hay más.
—Mis padres son más jóvenes. Se casaron muy pronto. Ella tiene cuerenta y dos años y él cuarenta y tres. Tengo dos hermanos más pequeños, chico y chica.
—Me dijiste que no lo sabían.
—Cierto
—¿Por qué?
—Porque ahora no es necesario. Les haría sufrir inútilmente.
Cuando llegue el momento se los diré, y eso no será hasta que se ma manifieste la enfermadad.
Aquella naturalidad le hizo daño.
—Si fuiste a cenar a su casa significa que no vives con ellos.
—Me fui de casa cuando lo supe. Vivo con una amiga que se llama Amy. Es divina. No tiene mucho espacio pero... No hay problemas. Nos llevamos muy bien.
—¿Qué les dijiste para irte de casa?
—Que queria emanciparme, nada más. Pero fue problematico y... bueno, no me gusta mucho hablar de ello. ¿Y tú, dónde vives?
—Tengo mi propio piso.
—Vaya —hizo un gesto significativo con la cabeza.
—Más bien es un agujero, ya sabes.
—Puedo imaginarlo. —No le dejó columpiarse en la vaguedad de la conversación y, tras mirarlo con mayor fijeza, dijo—: segunda face. ¿Qué te pasó?
—¿Cómo me...?
—Si.
Escuchó la primera voz, el grito: <>.
Y una docena de voces más: <>, <>, <>, <>, <>...
—Fue una estupidez —su propia voz sonó igual que una derrota, apenas un hilo cargado de sinrazones—. Tuve una relacion con una chica y no usé preservativo.
—¿Aqui?
—No, en Santo Domingo. Fue algo... Inesperado.
—Pero con una sola vez es muy dificil...
—Lo hicimos varias veces, toda una noche y buena parte del dia. Dijo que se quería venir conmigo a España, que era el primer hombre de su vida... Bueno, no sé, pasó y ya está.
—¿Cómo te lo detectaron?
—Un año después. Tuve una etapa de mucha flojera, cansancio, así que me hicieron unas pruebas. Creían que era hepatitis, pero no. Entre todas las pruebas una fue esa y... Salió positiva.
—Cuando te conocí, pese a todo, pensé que había sido por un tema de drigas o algo así.
—¿Te di esa impresión?
—No sé, perdona —se encogió de hombros.
—Pues no fue por usar una jeringuilla contaminada, ni por ser gay, te los aseguro.
—Ya sé que no eres gay. Se te nota.
—¿Ah, si? ¿En qué?
—Por cómo me miras.
—¿Cómo te miro?
—Mitad alucinado, mitad sorprendido, mitad embobado.
—¡Valla por Dios!
—No, si me gusta. Eres un encanto.
—Me habían llamado de todo menos <>.
—Siempre hay una primera vez. ¡Eh! —vio que él bajaba ahora los ojos—. No te enfades.
—No me enfado.
—Soy demaciado directa, ¿verdad?
Estaba inclinada hacia adelante. Su mano acababa de posarse en su rodilla izquierda. Sintió deseos de... Besarla.
Se enfrentó una vez más a sus ojos, brillantes lo mismo que sus labios rosados y húmedos.
—Escucha, ¿cómo eres tan fuerte?
—¿Fuerte? ¿Qué dices? ¡Estoy cagada de miedo!
—No lo parece.
—¿Porque hablo así, con naturalidad,y de cosas tan importantes como lo que nos pasa? ¿Y qué quieres que haga? Tú también pasate por ello. Primero te humdes, se te cae el mundo encima, todos tus planes de deshacen como un castillo de arena bajo la lluvia. No hay futuro, no hay nada. Pero queda la esperanza. Nadie sabe cuánso va a morir. Todos creemos que lo haremos de viejos, a los noventa o los cien años, pero a lo peor mañana nos atropella un coche. Nosotros si lo sabemos, más o menos, tenemos una fecha de caducidad, nada más. Si son diez años, son diez años, y si son cinco, son cinco. Yo no quise rendirme ni tirar la toalla, y tú tampoco, si no, no estarías aqui. Yo reaccioné con ese anuncio y tú lo hisiste respondiéndome con esa carta. Pero reaccionamos, que es lo único que importa. Yo no llamo a eso ser fuerte. ¡Es el miedo el que nos mueve! ¡Pero da lo mismo! ¡Si no, no estariamos hablando de dar un paso tan importante!
—_____...
—No, espera —frenó su vehemencia—. Ahora me toca a mi.
Louis sintió cómo lo desarmaba. No era dificil. La mano de la rodilla, la mirada, el sueve jadear de su pecho cuando se emocionaba...
Retiró la mano.
—Me enamoré —susurró igual que si hubiese desvelado un secreto inconfesable.
No podía ser de otra forma. Estaba seguro.
Absorbió cada palabra de ella y la introdujo en su mente.
—Se llamaba Max. Bueno... Se llama. Todos decían que no era trigo limpio, que no era de fiar, que era esto y aquello y lo de más allá. Y yo con la venda en los ojos, como una ingenua, cumpliendo con el ritual y el papel que dice que las tontas entregamos nuestro corazón a quien no lo merece —abrió y cerro las manos en un gesto de impotencia—. Se me puso el cerebro del revés, porque de todas maneras creo que es la única forma de amar, con entrega absoluta. Para mi sólo existia él, y claro, lo hicimos. Era... Como tocar el cielo con la manos. Me gustaba, ¿entiendes? No sé si te pareceré promiscua, pero para mi el sexo es la suma expresión del amor. Vivía, reia, la vida era radiante. ¡Estaba enamorada! Dios, ¿sabes lo que es eso? ¡Enamorada!
Se detuvo por primera vez, como si reflexionara sobre la dimensión de la palabra. Tardó en volver a respirar.
—Sigue —le pidió Louis.
—Tomamos precauciones durante casi un año, hasta que me dijo que, puesto que éramos novios, quería hacerlo sir preservativo. Por lo menos algunas veces, cuando yo no estuviese ovulando y todo eso. Yo le dije que si. Le queria. No pensaba en quedarme embarazada. Confiaba en él. Lo hicimos y a los tres meses él me dejó, se enamoró de otra —sus ojos se endurecieron un poco—. Fue cuando descubri su doble vida, la forma en que me había estado engañando. Fue sincero al comienzo, en parte, porque también se enamoró de mi y eso duró tanto. Pero después... Me dijo que no queria atarse, y que conmigo iba de cabeza a eso y que no funcionaria, porque no podia prometerme nada, y menos no intentarlo y hacerlo con otras. Supe que estaba conmigo y al mismo tiempo se lo montaba con una de su trabajo y con otra de su escalera, casada.
—Fue un cerdo.
Acabó de decirlo y la palabra le quemó el alma.
—El dia que me llamó para decirme que tenia el sida y que me hiciera el test... Fue el segundo peor dia de mi vida.
—El primero fue el de los resultados.
—Si: seropositiva —lo proclamó con firmeza—. Y tuve suerte. Tú debes de saberlo. Hacerte ese test a tiempo y descubrir que tienes el VIH te da más años de vida y más oportunidades. Lo peor es no saberlo y descubrirlo cuando ya es tarde. Si más gente se lo hiciera...
El sol ya se había puesto. Todavia había luz, y una excelente temperatura, pero _____ se estremeció, asi que atrapó su chaqueta y la colocó por encima de los hombros. Cerca de ellos una pareja se besaba sobre la hierba, devorándose el uno al otro, ajenos al mundo entero. No era la única, aunque si la más expresiva. Otras se limitaban a estar tumbadas, hablar, acariciarse...
—El resto ya lo sabes —concluyó ella—. Por el momento sólo soy eso, seropositiva. Lo demás puede tardar diez años.
El limite. Siempre se hablaba de diez años.
Algunos lo superaban, cuidandose, permaneciendo alerta y vigilantes. Otros, quizá la mayoria, no tenian tanta suerte.
—Diez años es mucho tiempo —dijo él.
—No cuando es una cuenta atrás.
—Si descubren la maldita vacuna...
—¿Y quién va a esperar un milagro?
Fue Louis el que tomó la iniciativa ahora. Alargó su propia mano y atrapó la de ella. Era muy suave. Una caricia. Enredó sus dedos con los suyos y le acarició el dorso con el pulgar. _____ le dejó hacer, sin ninguna resistencia.
—No somos más que tiempo —suspiró la muchacha—. Si no hay tiempo, ¿qué nos queda?
DESCUBRIMIENTOS
Salieron de la sala rodeados por la flora y la fauna habituales de la primera sesión de la tarde: silenciosas parejas de novios adolescentes aislados en su paraiso terrenal, chicos y chicas prepúberes riendo y hablando a gritos como si estuvieran solos en el mundo y personas mayores que preferían esa hora a las restantes, mucho más llenas y con largas colas frente a las taquillas de los multicines. Sus brazos se rozaban. Era el único contacto. Este y el de sus miradas, mucho más intensas, mucho más fugaces, siempre buscando encontrar desprevenido al contrario, algo dificil porque chocaban una y otra vez, enredándose entre el misterio, las dudas, las vacilaciones.
Apenas si habían hablado al encontrarse en el bar, salvo trivialidades, y en el cine los dos estuvieron pendientes de la intriga de la pantalla. Tres horas después del encuentro, perdidos de nuevo los nervios iniciales, sabían que era el momento de las revelaciones.
Caminaban sin rumbo.
—Aqui cerca hay un parque —propuso _____—. ¿Quieres que vayamos?
—Si
—Es que así no tendremos ruidos, ni habrá humo —quiso justificarse ella—. Odio el tabaco. No sabes lo que agradezco que no fumes.
Ni siquiera tuvieron que variar el rumbo. Sus pasos les llevaron directamente al parque, todavia con un buen número de madres, abuelas o asistentas cuidando de un enjambre de niños y niñas pequeños en la zona de juegos dado el buen tiempo. Entraron en él y buscaron la parte más alejada de los gritos infantiles. Sobre el césped, por entre los árboles, las parejas o los grupos de chicos y chicas surgían como setas bajo ese sol, _____ se dejó caer en el suelo y se sentó esperando que él hiciera lo mismo. Louis la imitó. Las rodillas de ambos quedaron separadas apenas por unos centimetros. Podían tocarse con sólo alargar una mano, aunque no era el caso.
La última mirada fue desnuda.
—¿Por dónde quieres empezar? —preguntó ella.
Louis tragó saliva.
Verdades en medio de una gran mentira.
Porque lo único que no podía hacer era...
Estaba bloqueado.
Ella le parecía aún más maravillosa que el día de la cita a ciegas. No era un espejismo.
—¿Qué te pasa?
—Nada —reaccionó—. Es que eres tan... preciosa.
—Gracias —bajó los ojos por primera vez antes de recuperarse—. Venga, va. Empecemos por la familia. Te toca.
Louis ya no luchó.
—Soy hijo único, mis padres viven, entán casados hace veintinueve años. Él tiene cincuenta y seis y ella cincuenta y cuatro. Son muy activos. Papá tiene un taller de artes graficas y mamá todavia hace de secretaria. Así que... No hay más.
—Mis padres son más jóvenes. Se casaron muy pronto. Ella tiene cuerenta y dos años y él cuarenta y tres. Tengo dos hermanos más pequeños, chico y chica.
—Me dijiste que no lo sabían.
—Cierto
—¿Por qué?
—Porque ahora no es necesario. Les haría sufrir inútilmente.
Cuando llegue el momento se los diré, y eso no será hasta que se ma manifieste la enfermadad.
Aquella naturalidad le hizo daño.
—Si fuiste a cenar a su casa significa que no vives con ellos.
—Me fui de casa cuando lo supe. Vivo con una amiga que se llama Amy. Es divina. No tiene mucho espacio pero... No hay problemas. Nos llevamos muy bien.
—¿Qué les dijiste para irte de casa?
—Que queria emanciparme, nada más. Pero fue problematico y... bueno, no me gusta mucho hablar de ello. ¿Y tú, dónde vives?
—Tengo mi propio piso.
—Vaya —hizo un gesto significativo con la cabeza.
—Más bien es un agujero, ya sabes.
—Puedo imaginarlo. —No le dejó columpiarse en la vaguedad de la conversación y, tras mirarlo con mayor fijeza, dijo—: segunda face. ¿Qué te pasó?
—¿Cómo me...?
—Si.
Escuchó la primera voz, el grito: <
Y una docena de voces más: <
—Fue una estupidez —su propia voz sonó igual que una derrota, apenas un hilo cargado de sinrazones—. Tuve una relacion con una chica y no usé preservativo.
—¿Aqui?
—No, en Santo Domingo. Fue algo... Inesperado.
—Pero con una sola vez es muy dificil...
—Lo hicimos varias veces, toda una noche y buena parte del dia. Dijo que se quería venir conmigo a España, que era el primer hombre de su vida... Bueno, no sé, pasó y ya está.
—¿Cómo te lo detectaron?
—Un año después. Tuve una etapa de mucha flojera, cansancio, así que me hicieron unas pruebas. Creían que era hepatitis, pero no. Entre todas las pruebas una fue esa y... Salió positiva.
—Cuando te conocí, pese a todo, pensé que había sido por un tema de drigas o algo así.
—¿Te di esa impresión?
—No sé, perdona —se encogió de hombros.
—Pues no fue por usar una jeringuilla contaminada, ni por ser gay, te los aseguro.
—Ya sé que no eres gay. Se te nota.
—¿Ah, si? ¿En qué?
—Por cómo me miras.
—¿Cómo te miro?
—Mitad alucinado, mitad sorprendido, mitad embobado.
—¡Valla por Dios!
—No, si me gusta. Eres un encanto.
—Me habían llamado de todo menos <
—Siempre hay una primera vez. ¡Eh! —vio que él bajaba ahora los ojos—. No te enfades.
—No me enfado.
—Soy demaciado directa, ¿verdad?
Estaba inclinada hacia adelante. Su mano acababa de posarse en su rodilla izquierda. Sintió deseos de... Besarla.
Se enfrentó una vez más a sus ojos, brillantes lo mismo que sus labios rosados y húmedos.
—Escucha, ¿cómo eres tan fuerte?
—¿Fuerte? ¿Qué dices? ¡Estoy cagada de miedo!
—No lo parece.
—¿Porque hablo así, con naturalidad,y de cosas tan importantes como lo que nos pasa? ¿Y qué quieres que haga? Tú también pasate por ello. Primero te humdes, se te cae el mundo encima, todos tus planes de deshacen como un castillo de arena bajo la lluvia. No hay futuro, no hay nada. Pero queda la esperanza. Nadie sabe cuánso va a morir. Todos creemos que lo haremos de viejos, a los noventa o los cien años, pero a lo peor mañana nos atropella un coche. Nosotros si lo sabemos, más o menos, tenemos una fecha de caducidad, nada más. Si son diez años, son diez años, y si son cinco, son cinco. Yo no quise rendirme ni tirar la toalla, y tú tampoco, si no, no estarías aqui. Yo reaccioné con ese anuncio y tú lo hisiste respondiéndome con esa carta. Pero reaccionamos, que es lo único que importa. Yo no llamo a eso ser fuerte. ¡Es el miedo el que nos mueve! ¡Pero da lo mismo! ¡Si no, no estariamos hablando de dar un paso tan importante!
—_____...
—No, espera —frenó su vehemencia—. Ahora me toca a mi.
Louis sintió cómo lo desarmaba. No era dificil. La mano de la rodilla, la mirada, el sueve jadear de su pecho cuando se emocionaba...
Retiró la mano.
—Me enamoré —susurró igual que si hubiese desvelado un secreto inconfesable.
No podía ser de otra forma. Estaba seguro.
Absorbió cada palabra de ella y la introdujo en su mente.
—Se llamaba Max. Bueno... Se llama. Todos decían que no era trigo limpio, que no era de fiar, que era esto y aquello y lo de más allá. Y yo con la venda en los ojos, como una ingenua, cumpliendo con el ritual y el papel que dice que las tontas entregamos nuestro corazón a quien no lo merece —abrió y cerro las manos en un gesto de impotencia—. Se me puso el cerebro del revés, porque de todas maneras creo que es la única forma de amar, con entrega absoluta. Para mi sólo existia él, y claro, lo hicimos. Era... Como tocar el cielo con la manos. Me gustaba, ¿entiendes? No sé si te pareceré promiscua, pero para mi el sexo es la suma expresión del amor. Vivía, reia, la vida era radiante. ¡Estaba enamorada! Dios, ¿sabes lo que es eso? ¡Enamorada!
Se detuvo por primera vez, como si reflexionara sobre la dimensión de la palabra. Tardó en volver a respirar.
—Sigue —le pidió Louis.
—Tomamos precauciones durante casi un año, hasta que me dijo que, puesto que éramos novios, quería hacerlo sir preservativo. Por lo menos algunas veces, cuando yo no estuviese ovulando y todo eso. Yo le dije que si. Le queria. No pensaba en quedarme embarazada. Confiaba en él. Lo hicimos y a los tres meses él me dejó, se enamoró de otra —sus ojos se endurecieron un poco—. Fue cuando descubri su doble vida, la forma en que me había estado engañando. Fue sincero al comienzo, en parte, porque también se enamoró de mi y eso duró tanto. Pero después... Me dijo que no queria atarse, y que conmigo iba de cabeza a eso y que no funcionaria, porque no podia prometerme nada, y menos no intentarlo y hacerlo con otras. Supe que estaba conmigo y al mismo tiempo se lo montaba con una de su trabajo y con otra de su escalera, casada.
—Fue un cerdo.
Acabó de decirlo y la palabra le quemó el alma.
—El dia que me llamó para decirme que tenia el sida y que me hiciera el test... Fue el segundo peor dia de mi vida.
—El primero fue el de los resultados.
—Si: seropositiva —lo proclamó con firmeza—. Y tuve suerte. Tú debes de saberlo. Hacerte ese test a tiempo y descubrir que tienes el VIH te da más años de vida y más oportunidades. Lo peor es no saberlo y descubrirlo cuando ya es tarde. Si más gente se lo hiciera...
El sol ya se había puesto. Todavia había luz, y una excelente temperatura, pero _____ se estremeció, asi que atrapó su chaqueta y la colocó por encima de los hombros. Cerca de ellos una pareja se besaba sobre la hierba, devorándose el uno al otro, ajenos al mundo entero. No era la única, aunque si la más expresiva. Otras se limitaban a estar tumbadas, hablar, acariciarse...
—El resto ya lo sabes —concluyó ella—. Por el momento sólo soy eso, seropositiva. Lo demás puede tardar diez años.
El limite. Siempre se hablaba de diez años.
Algunos lo superaban, cuidandose, permaneciendo alerta y vigilantes. Otros, quizá la mayoria, no tenian tanta suerte.
—Diez años es mucho tiempo —dijo él.
—No cuando es una cuenta atrás.
—Si descubren la maldita vacuna...
—¿Y quién va a esperar un milagro?
Fue Louis el que tomó la iniciativa ahora. Alargó su propia mano y atrapó la de ella. Era muy suave. Una caricia. Enredó sus dedos con los suyos y le acarició el dorso con el pulgar. _____ le dejó hacer, sin ninguna resistencia.
—No somos más que tiempo —suspiró la muchacha—. Si no hay tiempo, ¿qué nos queda?
CeciHoran*
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