Re: Are you Alice? | N.C |

por **hange.** Miér 20 Nov 2013, 12:15 pm

Capitulo 30

Todo tiene una moraleja, sólo falta saber encontrarla.

Lottie Bauer || Harry Styles - Cheshire

Había tenido un sueño. Más bien, estaba segura de que era algo más parecido a una visión. Pero algo la inquietaba. No había sido un recuerdo de una “Alice”, porque nunca escucho de alguna de ellas había sido pelirroja. Y también estaba más segura, ya que, en el sueño, Alice se encontraba al lado de la chica, usando un vestido azul cielo y hablando animadamente. Ella se encontraba observando desde un punto más o menos alejado y con bastante altura, como si estuviese sentado en la rama de un árbol. Pero cuando trato de mirar hacia abajo, algo la hizo despertar de manera brusca.

Se sentó en la enorme cama y se sorprendió un poco al encontrarse empapada en sudor. La noche estaba fría y silenciosa. Lo único que se escuchaba en la habitación eran sus jadeos por la exaltación que el sueño le provoco, aunque aún no entendía muy bien por qué. No había sido terrorífico.

¿Habría algo más, tal vez? ¿Algo que estaba olvidando?

Un sonido, un leve y casi inaudible ruido, llamo su atención y la hizo desviar sus orbes marrones hacia el banco que se encontraba al lado de la cama. Lo miro detenidamente, aun en la oscuridad, tratando de averiguar que había provocado aquel sonido. Pero no encontró nada. Despejando su cabeza, volteo la vista y se dejó caer en el enorme colchón una vez más, pasando desapercibido el rastro azul que había encima del mueble.

• * * *

-¿Todavía ningún recuerdo? –le pregunto Jack mientras tomaban el desayuno que había servido una de las criadas del hombre.

La mesa, a pesar de solo ser para dos personas, se encontraba significativamente llena. Tanto, que Lottie estuvo a punto de preguntarle si esperaba algún visita. Pero decidió mantener la boca cerrada. Estaba consciente de que él no estaba para nada alegre con el cambio de pareja entre ella y Alessia; pero ya no había vuelta atrás. Además, estaba casi segura de que era mejor estar sola que con aquel engendro.

Trato de parecer casual mientras terminaba de ingerir un pedazo de pan, al mismo tiempo pensando en que decirle: la verdad o algún invento.

-No…no…-pero por más que quiso, no pudo obligarse a mentir.- Algo así –soltó un suspiro con desgana.

Jack detuvo su mano en el aire, con un pequeño cuchillo lleno de mantequilla y asimismo, puso la tostada de vuelta en su plato. Fijo sus ojos en la pequeña pelirroja, llenos de curiosidad y sospecha.

-¿Podrías explicarte? –pregunto cuando ella no continuo hablando, sino que se limitaba a morderse el labio de manera insegura y a no mirarlo a la cara.
-Pues, si fue un recuerdo y si estaba una Alice…-hizo una pausa.- pero el recuerdo no fue de ella, fue de alguien más.

Lottie tomo un sorbo del delicioso te que preparo la señora Marta y observo como Jack se enderezaba en su lugar, tomando una actitud más seria al escuchar lo que salió de sus labios.

-¿Quién más estaba allí? –pregunto, entornando los ojos y volviendo su tono de voz sospechoso. Comenzaba a suponer algo que no quería creer.
-Pues…había una chica pelirroja, sonriente –comenzó a describirle lo amable y simpática que se veía aquella chica, que parecía ser más madura de lo que aparentaba, pero que también poseía una actitud de inocencia, sin notar como la expresión de Jack se iba tornando más inexpresiva y sombría al pasar los segundos. Su boca se transformó en una línea recta, uniforme y su cuerpo se tensó totalmente.

Él sabía exactamente de quien hablaba Lottie y estaba segurísimo de quien era el dueño de aquella memoria.

• * * *
Lottie caminaba hacia la dirección que le había entregado el Duque antes de partir hacia el lado contrario. Luego de desayunar y de ir a arreglarse, dejándola ayudando a Marta –aunque esta le agradaba bastante- había tomado su brazo y la había sacado a rastras e ignorando todas sus preguntas durante todo el camino. No sabía si estaba más confundida que molesta o viceversa.

“Tengo que reunirme con alguien, tu solo ve allí y trata de hacer algo productivo.”

¿Algo productivo? Para eso la dejaba en la casa y así ella ayudaba con la limpieza o a cocinar, pues estaba más que interesada en todas las recetas deliciosas que preparaba Marta. Aquellos postres que servía eran los más deliciosos que había probado alguna vez. Pero no. La ignoro y se fue, luego de mandarla a la Biblioteca.

No entendía que se suponía que haría allí hasta que llego al enorme lugar. Era una especie de edificio, en la entrada tenia columnas estilo griego-romano, pero con un toque peculiar que le daba el ser originado en Wonderland. Había un gran jardín antes de llegar, del que se enamoró a simple vista. En vez de ir allá dentro, podía quedarse admirando los tipos de flores que se encontraban allí. Había algunas parecidas a las del bosque, y otras totalmente diferentes. Ya era oficial, estaba enamorada de la fauna y la flora de aquel lugar.

Recordándose a sí misma que tenía otras cosas que hacer, dejo de acariciar a las flores de melodiosas risas y camino dando pequeños saltos hacia el enorme lugar. Una vez dentro, se sorprendió bastante al encontrarse con un sinfín de filas de estantes llenos de libros. El lugar parecía infinito. Se movió más hacia delante y al subir la mirada, contemplo como los estantes de libros subían y subían y subían y no parecían acabar.

-Vaya.

-Sí, eso mismo dije yo –una voz femenina dijo detrás de ella. Se giró sobre sí misma para encontrarse con Charlotte, la que le sonrió al encontrarse su mirada.
-¿Qué haces aquí? Creí que la oruga no te dejaba salir del bosque –dijo la pelirroja, confundida y buscando al moreno con la mirada.
-La verdad es que yo también estoy confundida; solo me dijo que lo esperara aquí –se encogió de hombros y frunció el ceño, cruzándose de brazos.- Honestamente, muchas veces me pregunto si me deja sola a propósito. Es un maldito imbécil desconsiderado, porque le dije que tengo hambre, no deseos de leer.

La rubia continuó murmurando maldiciones y maldiciones en contra de su guía al mismo tiempo que Lottie optó por dejarla desahogarse y continuar adentrándose en aquel maravilloso lugar. En ese momento sentía una enorme curiosidad por saber que clases de libros habrían allí. Aquel país, ciudad, reino, lo que fuese, no era normal. Su habitantes mucho menos. Tal vez, los libros ocultaban algún secreto sobre eso o sobre cualquier cosa que los humanos normalmente considerarían imposibles.

Pero mientras caminaba entre los libros de todos los tamaños y colores, no se preguntó si realmente eran esos los que escondían un secreto, y no Jack y La Oruga, los cuales habían dejado a sus Alice en un lugar que no conocían y no deseaban estar. El Reino Rojo, poco a poco, comenzaba a decaer. A pesar de todos los intentos del Rey para protegerlo, nada ni nadie puede contra la gran influencia que tiene Alice en el país. Más aun cuando son diecisiete, y una parte de las anteriores aun rondan por los bosques de lugar.

Realmente, Wonderland era una bomba de tiempo contra el reloj. Y nadie sabía que pasaría luego de la explosión, algo bueno o malo, hasta que ocurriese.

***
-Hay que hacer algo, y hay que hacer algo ya –hablo el rey Grant, pero algo raro se distinguía en su voz esta vez.

Junto con su porte, su actitud y sus expresiones, era claro que el Rey Rojo no se encontraba para nada bien. No se le notaba enojado, gruñón o irritante como siempre; sino que estaba decaído. Y a pesar de que casi nadie se lleva bien con él, no era agradable ver a tu rey en aquel estado.

-Hay que hacer todo lo posible por mantener esta situación de las Alice bajo control, ¿me entienden? – inquirió mientras masajeaba sus cienes lentamente. – No quiero que ellos se aparezcan aquí, porque entonces no solo yo pagaría, sino todos.

Los presentes en la habitación, por primera vez desde que pusieron un pie dentro de esta, mantuvieron su expresión seria y preocupada acerca del tema que trataba el Rey Grant. Cada uno había sido llamado hacia él, a pesar de sus obligaciones, porque todos tenían que ponerse de acuerdo sobre que harían acerca de las Alice del juego, incluyendo a la ahora demente. Ella era la que estaba trayendo más problemas últimamente, estando cerca de matar a algunas varias veces.

Si antes no era recomendable, ahora no era seguro dejar a alguna Alice sola y sin algo con que defenderse. Estaba ultramente prohibido hacer aquello. Si todos, o por lo menos la mayoría, quería que la paz y la armonía reinara otra vez en Wonderland tendrían que hacer sacrificios por ello.

-¿Qué sugiere su Majestad que hagamos, además de no dejarlas solas? Porque Gin..mi Alice, no ha querido salir del Castillo desde que llegamos junto a la Tortuga y la rubia – dice uno de los gemelos Tweedle. Dee se cruza de brazos y espera ansioso la respuesta del Rey, mientras mantiene el pensamiento positivo en su cabeza de que nada le pasaría a Gin. A pesar del poco tiempo que llevaba conociéndola, no parecía ser así.
-Pueden vivir en grupos, ¿no? Y deben mantenerse todos comunicados todos los días, mandando reportes hacia mí y hacia los demás guías. Si viven lejos, como la Tortuga, tu serias bien útil en eso – hablo y senalo hacia Cheshire, el cual mantenía su forma de gato, para quedarse recostado encima de una de las estatuas que habían en el Salón en donde se encontraban.
El felino abrió los ojos, poniendo verdadera atención a lo que estaba diciendo uno de sus peores conocidos y no dijo nada; dejo su expresión con una única sonrisa sutil.

-¿Me estas oyendo, idiota? – cuestiono Grant a no recibir más que una mirada y la común sonrisa que le hervía la sangre.
-Sí, mi querido rey –el sarcasmo en la voz de Harry era palpable. – Hare todo lo que pueda por informar a todos, a pesar de que eso no evitara que pasen catástrofes.
-Pero es una manera rápida de evitarlos o de conocerlos previamente – replica el As de Corazones, fiel a la opinión de su Rey.
-Sí, sí, lo que digan; ¿puedo irme ya? Tengo cosas que hacer.

El Rey Rojo no había asentido bien cuando el Gato sonriente desapareció sin más, sin decir adiós o alguno de sus comentarios sarcásticos y burlones. A pesar de aparecer igual para la mayoría de todos allí, George presentía que era lo que atravesaba sus pensamientos. Además de que, el Harry que conocía no rechazaría tan rápido a joder un poco a todos los presentes en la habitación. Suspiro, se estaba comenzando a agobiar por la situación; no sabía cómo tomarlo. Y tenía el perturbante presentimiento de que Perrie se aparecería pronto en su circo. Solo esperaba notarlo con anticipación y no ser tomado por sorpresa. Aun mas, deseaba que nada le pasase a su rubia Alice.

Sentía algo de lastima por Jack. El Tweedle era un chico ejemplar, a pesar de ser un vagabundo juguetón; tenia buenos sentimientos y anteriormente noto que miraba con cariño a su Alice. Pero la chica ya no parecía ser ella misma. La locura de Wonderland estaba poseyendo su alma.

***
-¿Alguna de ustedes comprende lo que está pasando? –pregunta la pequeña Lottie frunciendo el ceño y mirando cuestionante a las chicas alrededor de ella.

Charlotte y ella se habían aburrido rápidamente de la Biblioteca, pues no sabían cómo encontrar los libros que estaban buscando: sobre la historia de Wonderland, aquel extraño país en el que se encontraban. No aparecía nada relacionado a la historia o momentos relevantes ocurridos allí, casi como si los estuviese ocultando a propósito. Así de después de un rato sin sus guías dar señales de vida, decidieron caminar hacia el castillo, donde tenían entendido que se encontraban todos.

Al llegar se habían topado con las demás chicas, las cuales estaban sentadas en el césped, cerca de uno de los tantos jardines que se localizaban alrededor del Castillo. Al ver a Eleanor, Isabella y Lauren con bendas en distintas partes del cuerpo, ambas chicas no ocultaron la sorpresa y miedo de sus expresiones. ¿Por qué estaban heridas? ¿Qué les había pasado?

En cambio, las otras encontraron extraño no haber sido notificadas por sus guías de la horrible situación que se desataba en el país.

-¿Qué Perrie que? –exclamo Charlotte, abriendo los ojos y la boca a mas no poder.

Gin asintió de manera desganada y triste, pues a ella le afectaba más que a las demás chicas. Después de todo, ella paso más tiempo con la rubia que cualquier otra. Lottie se encontraba sin palabras para reaccionar adecuadamente. Solo el pensamiento de que Perrie podía estar poseída, andando por ahí con cuchillos y navajas y sin miedo de clavarlos en alguien, la hacía estremecerse de pies a cabeza.

Ya no quería estar allí.

-Esto parece cada vez más irreal –comento Kenneth, recostándose del paso y colocando sus brazos detrás de su cabeza. – Realmente, no puedo esperar para largarme de aquí.
-Entonces, ¿ya has aceptado que no es un mal sueño? ¿O que no estamos drogadas? –inquiere la Alice del conejo Blanco, mirándola curiosamente. Todavía recordaba como la morena había sido una de las que se había inclinado por la opción de que todo lo que estaba ocurriendo, no era más que un producto de su alocada imaginación.
Kenneth suspiro y asintió con desgana, pues no quería aceptar la derrota o lo que esto conllevaba.

-En realidad, yo solo creo que hay que tratar de salvarla.
-¿Te estas volviendo loca?
-Pues, no; es solo que creo que Perrie aún sigue allí.

***
Desde que había tenido ese reencuentro inesperado y perturbante con las demás chicas, para que luego cada una de estas se fuera yendo con su guía dejándola totalmente sola, había provocado que la pelirroja estuviese más paranoica de lo que ya era. El mínimo ruido que captara su atención, lo hacía de manera brusca y espontánea, casi haciéndole vomitar el almuerzo de la rapidez. Detestaba sentirse así.

También se sentía observada. Se sentía de esa manera desde hace unos días, en la casa de Jack; luego el sentimiento se detuvo y ahora, de la nada, volvía otra vez, amenazando contra sus nervios cada dos minutos. Lottie no era una persona muy resistente a esa clase de cosas, así que en aquel momento estaba tratando con todas sus fuerzas de no sucumbir al terror. Nunca espero que algo así pasara, no al menos cerca de su vida, círculo social… El solo pensar que había posibilidades de que una rubia saltara de la nada con un cuchillo apuntando hacia alguna parte de su cuerpo, le provocaba ganas de no volver a dejar su hogar.

Hogar.

Ella tenía un hogar. No en ese lugar, en su casa, su lugar de nacimiento. ¿Dónde estaba? ¿Dónde estarían todos? Su familia – al menos los que solían dirigirle la palabra – y los empleados del Acuario, que trabajan con ella; y los cocineros del restaurante de su mama. ¿Cómo estarían sus primitos? Siempre adoraron que ella les leyera cuentos de Disney, Pixar, Aventuras ficticias. En un principio no supo cómo reaccionar a que no volvería a su casa, a donde según todo lo relativo legal, es donde perteneces. Ahora…ahora no sabía que sentir respecto a eso.

No sabía cómo había terminado en el bosque o si estaba en el camino correcto, pero en ese momento buscaba llegar al Circo de George. De todos los lugares a los que había ido en sus días en Wonderland, aquel sitio era el que le parecía más reconfortante y en la más segura se sentía. Antes, se sentía casi igual en el hogar de los hermanos Tweedle, junto con Gin y Perrie. Sin embargo, el pensar en eso ahora solo le traía malos presentimientos.

De manera inesperada y brusca, una congelada brisa estampo contra ella, haciendo que su pequeño y delgado cuerpo tiemble de pies a cabeza. Se quedó quieta, tensa, disminuyendo su respiración lo más posible en un intento por notar si había alguien cerca de ella. O algo. Miro a su alrededor fugazmente y se dio cuenta de que estaba en una zona más oscura de lo normal, aunque el sol traspasaba por algunas hojas. Era casi como una habitación en el atardecer, sin luz. El ambiente se comenzó a tornar frio, lo que encontró más extraño aun. Se supone que el bosque era frio en la noche. Eso no le estaba agradando para nada.

Mientras el tiempo pasaba, el aire comenzó a sentirse más denso de lo común. Y aunque en ese lugar nada lo era, eso la extraño. Y estaba casi segura de que algo malo se avecinaba.

Genial, voy a morir sola y abandonada. En un país de fantasía.

El único pensamiento lógico que cruzaba por su mente era aquel. Una y otra vez. Quería huir, correr lejos de allí y de todo lo malo que pudiera ocurrirle. No quería estar más en Wonderland si era perjudicial, así tanto como para temer por su vida en cada momento del día.

Justo cuando el presentimiento de que ese algo malo estaba a punto de aparecer ante ella, el reconocible polvillo azul paso por enfrente de sus ojos y en un parpadear, Cheshire se encontraba delante de ella. Sus enormes ojos la miraban con un brillo peculiar, característico del felino, más cerca de lo recomendable. Por la sorpresa, retrocedió bruscamente unos pasos y casi se cae al suelo lleno de hojas. Harry no pudo evitar soltar sus carcajadas cantarinas al ver la reacción torpe de la pelirroja, y más aún, la cara de susto que tenía cuando apareció ante ella.

Pero Lottie ni siquiera estaba de humor para mandarlo al infierno, como era lo normal. Sus nervios estaban demasiado sensibles como para recuperarse después de aquel susto.

-Oye –la llamó con voz ronca y cantarina. Se podía decir que n ya era común, de una forma u otra, que él se apareciese en aquellos momentos. Desde que había llegado a ese extraño país, fue aprendiendo a esperar lo inesperado y a no sorprenderse cuando las cosas no son lo que parecen ni lo peor que puedas llegar a pensar; sólo son lo menos considerado posible. Pero de sólo pensar en Perrie todo eso se iba al caño.

Subió sus ojos y se encontró con la mirada inquisitoria de Harry, aun con ese brillo común y una pequeña sonrisa en el rostro. Aunque pudo percibir que algo no andaba bien.
-Oh…-chasqueo la lengua.- No me dices que me vaya, te deje de molestar o algo por el estilo...-hizo una pausa y su sonrisa se ensanchó.- Dime, pequeña, ¿acaso te ha comido la lengua el gato?

La chica se enfocó en soltar el aire retenido en sus pulmones por todo ese rato. Ignoro al ser delante de ella y trato de tranquilizar su pulso y el temblor insistente de sus manos, a pesar de todos los intentos por detenerlas. Harry la miraba con curiosidad, sin remover la sonrisa de su rostro, a pesar de que ella no lo veía a él. Pero su mirada esta vez no significaba burla o cinismo, como lo era la mayoría de las veces. Un destello azul brillante cruzo por sus ojos, cambiando su semblante por completo.

-¿Estás así por el caos que se ha desatado en el país, tal vez? –cuestionó de manera escéptica, pero sus intenciones no eran esas, más el tono de voz le salía inconscientemente. Cuando Lottie no respondió, el continuo hablando. – Escúchame pequeña naranja –no pudo evitar fulminarlo con la mirada ante eso, para volver a rodar los ojos y mirar hacia el suelo. – Es que eso pareces…o un pequeño mango. En fin, no debes preocuparte por eso, ¿está bien?

No hubo respuesta.

El felino suspiró con desgana y flotó un poco más cerca de la chica.

-Tal vez parezca que no, pero estoy hablando en serio. Perrie no te hará nada.

Pasaron unos minutos en los que Lottie se debatió entre creerle o no hacerlo. Confiar o mirarlo incrédula. Tranquilizarse o dejar que sus nervios empeoren, perjudicándola a ella misma. Cuando por fin se decidió y subió la mirada, se encontró con unos ojos humanos no tan grandes como los del gato, pero con la misma viveza y expresividad que siempre. Y por igual, el mismo brillo. Harry estaba en su forma humana, una que no disfrutaba utilizar muchas veces, de pie en frente de su antigua Alice.

-¿Cómo lo sabes? –el susurro de la pelirroja a penas se escucharía para alguien común y corriente, pero el rizado logró captarlo.

Mientras, ella solo podía pensar en la enorme diferencia de tamaños que había entre el Harry que tenía en frente y el Gato regordete con complejos de mosca que nunca te deja en paz. Pero esa comparación terminó abruptamente cuando el avanzó un poco más hacia ella, quedando lo bastante cerca para sentir su aliento en su mentón.

-Porque no dejaré que eso pase.

Spoiler:

por **Sky.** Miér 20 Nov 2013, 9:33 pm

MILY DE MI CORANZÓN<3
Mañana leeré tu capitulo y dejaré un comentario enormeeee<3 Are you Alice? | N.C | - Página 47 1857533193

por **tenshittae** Miér 20 Nov 2013, 9:34 pm

ana ya lo leyo en la tarde but no inspiration:c
te juro mily que mañana te dejo comment asi bien grande de cuanto me encanto<3333

por **Sky.** Miér 20 Nov 2013, 9:38 pm

ANITAAA, te extraño, el colegio me consume :'c

por **peralta.** Jue 21 Nov 2013, 12:00 am

quiero volver Are you Alice? | N.C | - Página 47 1926951358

por **spitfire.** Jue 21 Nov 2013, 4:08 pm

Amé el cap pls :3
lo comentaría entero but estoy desde el móil y el teclado es caca T.T
HAZZA FUE SUPER CUTE AL FINAL XKABXLEFOTFU no es la primera vez que leo a Harry con Bella y sinceramente no me gusta el ship but son cutes anyway
ah, espero el próximo cap

por **Sky.** Jue 21 Nov 2013, 10:35 pm

VUELVE mi pequeño saltamontes Are you Alice? | N.C | - Página 47 1926951358

Alouette. escribió:quiero volver

por **peralta.** Vie 22 Nov 2013, 1:15 am

Sky. escribió:VUELVE mi pequeño saltamontes
Alouette. escribió:quiero volver

quisiera

pero debo miles de fichas y capítulos por aquí y por allá que se me hace imposible estar pendiente con algunas colectivas:c

por **dragón.** Vie 22 Nov 2013, 2:20 am

despues de millones de añor vuelvo.. y bueno ire al grano ,, aun debo leer el cap de Mily.. pero el de Drea. fue fantástico simplemente me enamoro, amo los capítulos especiales..
esto me ayudo a comprender mas cosas
Are you Alice? | N.C | - Página 47 4242539333

Are you Alice? | N.C | - Página 47 4242539333

por **Haven.** Vie 22 Nov 2013, 9:07 am

Drea tu capitulo fue tan akjgljkl ahora creo qu comprendo un poco más las cosas aunque en esta colectiva nunca se que esperar. La historia de Grant y Rosalie, de scar
Are you Alice? | N.C | - Página 47 4242539333

Todo. No tengo palabras, no me sale nada, Dios mio Are you Alice? | N.C | - Página 47 1857533193

Mily

Are you Alice? | N.C | - Página 47 3275125450

El capitulo fue hermoso. Harry la estaba observando mientras dormía :cosi: y.. y Grant todo decaído Are you Alice? | N.C | - Página 47 1857533193

Lo ame completamente, y más el final. Are you Alice? | N.C | - Página 47 4120812466

no puedo con esto.
Pronto subiré mi capitulo, ya empezé a escribirlo, seguro que no pasa del viernes.
Las amo<3

por **Sky.** Vie 22 Nov 2013, 10:33 am

DIOS PADREEEE!
Are you Alice? | N.C | - Página 47 1440745896

MILYYY! Tu capitulo me ha enamorado por completo, fue tan perfecto, Grant todo preocupadiso!! Y Lottie con su memoria, asdfghjklñ, esa pelirroja, ¿será Rosalie? e.e idk, erjfkdlasjl, pero todos sabemos que la Rosalie es mala, mugre pelirroja que engaño a mi Grant Are you Alice? | N.C | - Página 47 1926951358

ese no es el caso, el caso es que tu cápitulo al igual que el de Dreita han sido de los más geniales de la segunda ronda, si que si, ya estamos por terminar y me vienes con esta hermosa idea, con este hermoso capitulo, asdJKJlkds, la verdad es que te amoo :conny: y hablaré contigo por dm, yo know Are you Alice? | N.C | - Página 47 1857533193

Todos sabemos que en su interior, Harry ya ama a Lottie e.e, fdklajskljsla, me los imagine al verla dormir *-* una ternura juntoooos<3
"-¿Cómo lo sabes? –el susurro de la pelirroja a penas se escucharía para alguien común y corriente, pero el rizado logró captarlo.

Mientras, ella solo podía pensar en la enorme diferencia de tamaños que había entre el Harry que tenía en frente y el Gato regordete con complejos de mosca que nunca te deja en paz. Pero esa comparación terminó abruptamente cuando el avanzó un poco más hacia ella, quedando lo bastante cerca para sentir su aliento en su mentón.

-Porque no dejaré que eso pase. "

Y BUUUUM!!! Mi corazón exploto de ternura y amooor Are you Alice? | N.C | - Página 47 961472736

Are you Alice? | N.C | - Página 47 961472736

no puedo con este cap, no puedo, llorare por las nalgas :'c
Te amooo<3

por **Sky.** Vie 22 Nov 2013, 10:36 am

Oh, ya entiendo :'ccc
Bueno Steph, te extraño, pero igual te entiendo, asi que no te preocupes, dsakjdsñla, te amooo<3 :c

Alouette. escribió:
Sky. escribió:VUELVE mi pequeño saltamontes
Alouette. escribió:quiero volver
quisiera :juay:pero debo miles de fichas y capítulos por aquí y por allá que se me hace imposible estar pendiente con algunas colectivas:c

por **Haven.** Mar 26 Nov 2013, 1:29 pm

Capitulo O31

Los más ingenuos de Wonderland

Brennan Farley||Niall Horan {el lirón}

Había muchas cosas sencillas en la vida de Brennan: atar los cordones de sus zapatos, hacer a alguien sonreír, decidir entre verduras o chocolate; pero en esa lista no se incluía descifrar lo que los habitantes de Wonderland escondían. No. Eso más bien, figuraba en la lista de cosas difíciles, en los primeros lugares, justo debajo de comer carne y arriba de despedirse de su familia.

Cuando todos los guías las dejaron en el castillo, mientras ellos se reunían con el Rey, ninguna tenía idea de que hacer o qué esperar. Lottie, la pelirroja que, según recordaba Brennan, era la Alice de Cheshire, y Charlotte, la rubia de ojos grandes cuyo guía era la oruga, era las más sorprendidas con respecto a la situación. Brennan también se había sorprendido cuando supo lo de Perrie fuera de control y sobre las chicas heridas, peo tampoco es que Niall le hubiera informado con mucha delicadeza del asunto.

La castaña estaba asombrada, pero más que anda, aterrorizada. La cosa más peligrosa a la que alguna vez se había enfrentado, fue caminar sola por la calle de un barrio bajo, a altas horas de la noche, aunque eso sólo duró dos minutos, cuando su hermano Jhon llegó en su auto por ella. Por el contrario, ahora estaba propensa a que una chica poseída que traía una navaja y Dios sabe que más, la atacara para sacarla de una competencia a la que no había solicitado entrar; y esta vez Jhon no aparecería para salvarla. Aunque, bueno, tenía a Niall. Confiaba en él, sabía que la defendería, sin embargo sentía algo de tristeza por Perrie. Ella tampoco había pedido entrar, no la culpaba por haber cedido ante la locura del lugar. Brennan o quería enloquecer, pero una parte de ella, o podía evitar preocupase y decirle que en Wonderland, todos estaban locos ¿no lo estaría ya ella también? Tendría que estar algo loca para estar ahí ¿no?

Pensó en preguntárselo a Niall. Habían salido de la reunión y caminaban por el bosque, pero no parecía el mejor momento para esa clase de preguntas. El rubio, el adorable y tierno lirón, ahora tenía una expresión que su Alice no lograba descifrar, sus labios osados y finos, estaban firmes e una línea y miraba fijamente hacia adelante. Brennan o sabía si se encontraba preocupado, enojado, o estaba tranquilo pero tenía uno de sus ataques de locura.

-¿A dónde vamos?-le preguntó y finalmente, el lirón posó su azulina mirada en ella.

-Iremos a nuestra cabaña por ropa y comida, después con la Tortuga, él es mi amigo, de ahí ya veremos que hacer-su voz no era dura, más bien era dulce, como si tratara de calmarla, lo que seguramente era su intención.

Brennan sintió cosquillas en su estómago con las palabras ”nuestra cabaña”
.
-¿Por ropa y comida?

-El Rey nos dijo que debíamos vivir en grupo, así estaremos más seguros. Ustedes realmente sacuden nuestro mundo- añadió al final. Niall le regaló una sonrisa de lado y le dio un ligero apretón en las manos, entrelazando sus dedos, ruborizando a la castaña en un dos por tres.

Era increíble como en medio de toda la locura y lo irreal de la situación, los sentimientos de Brennan florecían al lado de su guía. Comenzaron a mover sus manos unidas de adelanta hacia atrás mietras caminaban, formando un columpio, lo que provoco una sonora carcajada por parte del rubio. Era una de las risas más peculiares e inoportunas que ella había escuchado y sin duda, la que más le gustaba, así que lo secundó, pero de una manera más tranquila.

Sin previo aviso, el lirón se detuvo, se puso rígido y serio.

-¿Escuchaste algo?

Su tono preocupó a Brennan y notó como las orejas de Niall se movían, buscando la procedencia del sonido. Su oído de roedor era mucho más agudo que el de la completamente humana chica.

-¿Tú escuchaste algo?-inquirió ahora ella.

-Shh. No te muevas, vuelvo enseguida.

Niall soltó la mano de su Alice y en menos de dos segundos, tomó su forma de lirón, alejándose a una velocidad icreíble, desapareciendo entre los coloridos arbustos. Apenas se había marchado el animalito, a algunos árboles de distancia, una rubia apareció.

Los latidos del corazón de Brennan se volvieron más rápidos, su respiración se volvió irregular y sus delicadas manos se cerraron en puños al ver a Perrie frente a frente, con ese diabólico brillo en los ojos que dejaba ver que esa no era ella realmente.

-Agh, tanta cursilería me da ganas de vomitar-espetó con una sonrisa burlona.

No sonaba como Perrie, y su cuerpo estaba sucio, al igual que su vestimenta y su enmarañado cabello, debido al tiempo que llevaba sola en los bosques, corriendo de aquí para allá.

-Perrie… tú no quieres hacer esto.-replicó Brennan luego de algunos minutos de silencio , tratando con todas sus fuerzas que su voz no temblara.

-¿Cómo sabes tú niña tonta, lo que quiero o no quiero hacer?-preguntó repentinamente enojada.
-Yo… tu… tu y yo podríamos ir al castillo, ahí te ayudarán, Perrie-Brennan sabía que no podía hacerla entrar en razón, pero quería retrasar lo más posible el inminente ataque.

En ese momento, sus ojos se desviaron por una fracción de segundo al suelo y vió al lirón, caminando sigiloso hasta la aterradora rubia. Casi quiso sonreír de alivio, pero la asesina mirada que la observaba lo impidió.

-”Ahí te ayudarán Perrie”-imitó con voz boba y chillona a Brennan-Tú y ese rubio son uno para el otro, los más ingeuos de Wonderland-se burló.

-Podríamos sorprenderte-repuso la castaña.

-Lo veremos.

En ese segundo, Perrie se abalanzó sobre ella, sin embargo, su navaja que era ya casi parte de su mano, apenas hizo un corte superficial en el brazo de Brennan, porque los dientes pequeños y afilados de Niall, se encajaron en su tobillo. La rubia soltó un alarido y cayó al suelo, dándoles la oportunidad de correr.

-Corre, corre y recuerda no mirar atrás-ordenó el lirón y comenzó la carrera.

Brennan lo siguió de imediato, moviendo sus piernas de la manera más rápida que podía. Escuchó la maldiciones de Perrie que dejaba atrás, y supo que por más ganas de ayudarla que tuviea, no podía hacer nada por ella. Continuó mirando a Niall, que esquibava con agilidad todo obstáculo a su paso. El corazón aún lo tenía desbocada y casi ni le dolía la herida en su brazo, por la adrenalina que corría po sus venas. El viento fresco le golpeaba la cara y se sentía valiente. Le recordaba la sensación que tenía cuando le horrorizaba tener que subir a una montaña rusa, pero cuando lo había y bajaba de ella, quería volver a subir.

Luego de correr algunos metros más, esa sesación se fue desvaneciendo, su respiración fue traquilizandose y sintió su cuerpo pesado. Brennan tropezó con sus propios pis y ya no pudo levantarse, se había quedado clavada al piso. Intentó llamar a Niall, pero su voz no respondía. Se concentó entonces en mantenerse respirando. Uno… dos… uno… dos Hasta que todo se volvió negro.

Cuando abrió los ojos, se encontraba en aquel lugar en donde habían festejado la primera fiesta de té, la que organizaron al inicio de la competencia. Pro las tazas, platos, teteras, el mantel e incluso los individuos, se encontraban en mucho mejor estado. Sentados a la mesa, estaban Mad Hatter, la liebre de marzo y una niña que veía todo maravillada.

-¿Y qué es un no cumpleaños?-pregunto ingenua la rubia.

-¿No sabes qué es un o cumpleaños?-gritó la liebre-Un o cumpleaños es cuando tú… tú-comenzó a balbucear y luego soltó una risotada-¡No sabe qué es un no cumpleaños!

-¡Que tonta!-rió Mad, explicándole a la niña que todos los días del año que no eran tu cumpleaños, eran un no cumpleaños.

-¡Entonces también es mi no cumpleaños hoy!-exclamó emocionada esta al comprenderlo.

-¿De verdad? Oh, qué pequeño es el mundo

Comenzaron a cantar una canción alegre de felicitaciones, bailando sobre la mesa y con la vajilla. Todos lucían más vivos. Brennan se dio cuenta que en una de las teteras, dormía plácidamente el lirón, y fue precisamente él, quien terminó la melodía con un extraño poema.

-¿Y bien, cómo llegaste hasta aquí?-preguntó Mad después de todo el festejo, sirviendo té en la taza de la rubia.

-Bueno… pues la verdad es que no sé por dónde comenzar.

-Empieza por el principio y cuando termines, te callas-indicó el castaño con su torcida sonrisa.

El escenario comenzó a volverse borroso y moverse, en una explosión de colores, resonando la voz de Mad Hatter en la cabeza de Brennan, razón por la que creyó que seguía en la visión cuando escuchó esa misma voz.

-¿Y está viva?-sonaba divertido, incluso emocionado y la castaña sintió como un zapato chocaba con su pierna repetidas veces.

Abrió los ojos, encontrándose con Mad, de pie frente a ella, pateándola para ver si reaccionaba y este soltó una risotada cuando ella lo miró confundida. Sinceramente, era ese personaje quien más la asustaba, parecía el más chiflado de todos.

-¿Qué es tan gracioso?-peguntó.

-Tú-se mofó el castaño y continuó riéndose. Brennan rodó los ojos, aún un poco aturdida, a su derecha se encontraba Niall, sonriéndole como si no la hubiera visto en años.

-Me alegra tanto que estés bien-dijo y la envolvió con sus marcados brazos.

La chica se hundió en el cuello del lirón, aferrándose a él, disfrutando del olor a tierra mojada, hojas y masculinidad que desprendía el rubio. A ella también le alegraba que él se encontrara bien.

-¿¿Qué te sucedió?-inquirió una voz femenina, provocando el fin del abrazo.

Brennan no se había percatado de que la morena intimidante de labios partidos, también estaba presente. Kenneth estaba de pie a un metro de Mad, quien había parado de reír y ahora casi metía la nariz en el agujero de su guante blanco, examinándolo como si de eso dependiera su vida.

-Me… me he golpeado con una rama cuando huíamos de Perrie-mintió la castaña, cosa extraña en ella. No solía mentir, era una chica honesta, pero no quería decirle a Niall, ahí frente a Kenneth y el loco, que había visto la memoria de una Alice. Estaba lo suficientemente aterrada como para no confiar, por el momento, en nadie que no fuera el dulce lirón.

-¿Te golpeaste?-el ojiazul empezó a apartarle el cabello de la cara frenéticamente, examinando su frente por revisar si tenía un golpe grave-¿Pero estás bien?

-Sí, si-Brennan asintió para calmarlo-Anda hay que levantarnos.

-¿Perrie logró herirte no?-Niall se levantó y le tendió la mano para ayudarla.

La castaña había olvidado la cortada en su brazo.

-No duele-aseguró tomando la mano del lirón y se levantó.

Kenneth los observaba como si fuesen lo más raro que había visto.

-Deberíamos volver al castillo, nuestra cabaña aún está lejos y luces cansada. ¿Ustedes quieren venir?-preguntó Niall

Mad Hatter sonrío y después su rostro pasó a serio casi enojado.

-No-espetó.

Niall comenzó a reír, seguido por el castaño y Brennan negó con la cabeza ante la repentina locura, Kenneth por su parte, negó con la cabeza casi aburrida de las riss lunáticas.

-Adiós lirón-se despidió Mad y se alejó tomado por el brazo a la pelinegra y llevándosela con él.

-Vamos Brennie
El bosque quedó en repentina quietud se escuchaban tenuemente los sonidos de la faun de Wonderland, el viento, deslizándose entre el follaje de los árboles y el cielo se estaba coloreando de rodo. Brennan se preguntó cuánto tiempo había estado inconsciente, pero en lugar de preguntárselo a Niall, decidió decirle sobre su visión.

-Debo decirte algo importante-gachó la cabeza nerviosa, sin razón alguna.

-Deletrea “importante”-Cheshire apareció de pronto cerca del rostro de la chica que gritó espantada.

-¿Podrías no hacer eso?-pidió retrocediendo varios pasos.

-Lo pensaré-le guiñó el ojo, el azulado minino.

-Oye ahora que estás aquí ¿te importaría avisarle a la tortuga que no podré ir su casa hoy?-se le ocurrió a Niall pedirle.

-¿Parezco tu mensajero o algo?-preguntó sarcástico Cheshire, dándole vueltas a su cabeza.

-Por favor, necesito ir al castillo para que curen a Alice-explicó.

-Vaya, la otra Alice se tomó muy enserio la competencia

-Oh, vamos, sólo avísale a la tortuga, por favor-suplicó Brennan que comenzaba a fastidiarse de la habladuría del gato.

-¿A qué tortuga?-preguntó éste.

-A Leo-contestó Niall.

-¿Y dónde está?

-En su casa

-¿La casa de quién?

- De él, de Leo La Tortuga

-¿De qué hablan?-preguntó el felino y se echó a reír.

Brennan se dio cuenta de la broma y tomó a Niall del brazo, para que volvieran a caminar.

-Que carácter Alice-comentó el gato y se desvaneció.

{…}

Finalmente llegaron a l puerta del palacio, para entonces ya había oscurecido por completo. Una de las cartas de corazones le abrió la reja y entraron. Brennan aún o le había dicho al lirón sobre su visión, de hecho, habían estado en silencio durante el resto del viaje, lo dos tenían demasiadas cosas en la cabeza.

Entraron el gran castillo, inmenso y hermoso pero seguían sin decirse nada. La castaña seguía repitiendo el episodio en su mente no quería olvidar ningún detalle, tal vez le serviría de algo. Lo más extraño era que se le había quedado grabado el poema del lirón.

”Lindo, lindo parpadeo
Estrellitas en el cielo
Que allá arriba están volando
Con alitas de murciélago”

-¿Qué dijiste?-preguntó exaltado Niall a su lado.

Brennan no había pensado en el poema, lo había susurrado y el rubio la había escuchado.

-Yo… yo... No me golpeé con una rama, es que encontré una memoria, creo que de la primera Alice-confesó Brennan en voz baja.

-¡¿Por qué no me lo dijiste?!

-No grites por favor-pidió serio el As de corazones que los recibía frente al trono del Rey. Grant estaba sentado, con la cabeza baja y frotándose las sienes, a su lado la rubia Eleanor lo miraba un poco preocupada.

-¿Ahora qué?-preguntó el rey. Y los miró con unas ojeras horribles, ya ni siquiera parecía amenazante o gruñón.

Spoiler:

por **spitfire.** Jue 28 Nov 2013, 10:50 am

asjlsjdif Me encanta Nicky :3
Como siempre nunca sé que comentar... ole yo...
Me encantó, Niall es muy cute y Brennan me cae muy bien, LE ESTOY EMPEZANDO A TENER MANÍA A PERRIE. Leo es mío :3

por **Karou.** Jue 28 Nov 2013, 4:46 pm

Lamento no comentar de verdad pero no tuve tiempo ahora cometo el mily y el de nicky.

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