Five Crimes The Last Memories One Direction and Them

Una chica de pocas palabras, mejor dicho, sumisa y piensa antes de actuar. Insegura, terca, reservada, inocente pero independiente.
Es muy risueña, siempre esta riendo. Es tímida con las personas que no conoce, pero después ya toma más confianza.
Nunca la vas a ver llorar, claro a menos que seas alguien en quien ella confié y quiera demasiado, ya que odia que piensen que es débil.
Es sencilla y con solo sonreír hace que te llenes de alegría. Es demasiado miedosa, siempre necesita a alguien que la proteja. Tiene un lado oscuro, pero nunca le gusta hablar de el o mostrarlo, el cual muestra su mayor miedo y adicción.
Es una persona que se hace querer, hasta la persona mas fría puede abrirse y mostrarse como es con ella, da confianza.
Odia parecer "la niña buena" pero no le gusta defraudar a nadie.
Es muy despistada, muchas veces vas a verla mirando el cielo y olvidándose de todo lo demás. Es la mejor persona para charlar, siempre esta cuando la necesitas, puede escucharte por horas y siempre te dará un buen consejo... sobre todo. Puede parecer que no quiere socializar con otros, pero no quiere salir lastimada y ,ademas, tarda mucho en tenerle confianza a alguien, por lo cual no le gusta que le mientan, difícilmente volverá a confiar en ti si lo haces.
La bipolaridad en persona, para decirlo mejor, puede estar feliz y por algún acto o dialogo que no le agrade terminara ignorándote y poniéndote una cara de "pocos amigos".

"El amor no es facil." Esa fue la frase que más le repetía su madre a la más pequeña de los Rudenko. Aixa nacio en Kiev, Ucrania, en el invierno de 1995. La pequeña era la segunda hija de Victor Rudenko, un joven estudiante de odontología ucraniano y Mira Jalaf, una adolescente musulmana que ya hacia unos dos años se había mudado a Kiev. Al presenciar miles y miles de infidelidades y actos de violencia a sus cortos 5 años y luego de que Victor ganara la tenencia la pequeña se muda a Inglaterra, lejos de su mamá Mira y su hermano mayor Kevin. ¿La escuela? Siempre fue una pesadilla para ella. El ser una niña que no tenia una muy buena idea sobre el ingles y, ademas, era pequeña -1.46-hacia que fuera el centro de las burlas. Al cumplir 7 años y ya haber sido cambiada a más de 3 escuelas en 2 años hizo que la pequeña tenga una mala idea de las instituciones de aprendizaje.
Otro "primer día" de escuela comenzaba, su pollera le quedaba grande y las dos coletas que sostenían su cabello estaban disparejas. < Vamos, no puede ser tan malo. > fueron las palabras de aliento que resonaron en su cabeza. Tomo lo poco que le quedaba de "valor" y entro en el aula. Todos se quedaron callados, observándola. La profesora la presento y cuando iba a hablar la puerta se abrió y dejando ver a un niño moreno de 8 años sonriendole a la profesora y preguntando si ese era el salón de 3° grado. Las clases transcurrieron normales y por fin ella pensaba que al fin todo cambio, ¿que ingenua, no? Sintió que la empujaron, cayo al suelo golpeándose las rodillas y las risas se comenzaron a escuchar. Sintió que alguien la ayudaba a levantarse... ¡Era el niño que entro a su salón! < Gracias. > la pequeña solo pudo decir y el le respondió con una sonrisa para luego marcharse corriendo. El tiempo pasaba, las burlas seguían, aunque no sabia el porque, seguía siendo un poco rellenita y enana pero ahora hablaba muy bien el ingles. Nunca le dijo a su papá de las burlas, se quedo en ese instituto solo por el niño de ojos miel, ahora sabia su nombre, Zayn. Pero el solo la llamaba "Gorda" como la mayoría de ese lugar.
< Un corte, otro más, ¿porque no piensas en mi, Zayn? > Con solo 12 años ya odiaba su vida y se desahogaba con sus muñecas, vientre y piernas. Termino internada en una clínica por desangramiento y al salir de allí la llevaron a un internado del cual al cumplir 15 salio. Era una chica nueva, había crecido unos centímetros y la pubertad la ayudo con sus curvas y su, ahora, vientre plano. Volvió al colegio y luego de dejar todo atrás, seguía manteniendo esos sentimientos por el moreno que le hizo tan mal. Decidió conquistarlo, no tenia nada que perder y luego de miles de intentos el al fin la miro, no con una mirada dulce sino con otra, de deseo o tal vez... de pertenecía. Salieron ocho meses, desde que ella cumplió 16. El logro lo que quería, tenerla en la cama y que sea otra más en su larga lista, pero ella se obsesiono. Pensaba que cuando el le corto era solo una broma hasta que lo encontró en una fiesta "desvirgando" a otra. Solamente lloro, seguía siendo una muda de mierda, le dijo en voz baja < Te odio, pero sigo amándote. > y se marcho. "El amor no es fácil" fue la ultima palabra que escucho en su mente luego de ingerir otra droga más y caer en el manchado de sangre piso del baño en un profundo sueño del cual, tal vez, nunca despertaría.