The Olympic Gods Errors-Larry Stylinson (LINK)

- ¡Dime quien eres, imbécil! O te pulverizaré .

Harry no sabía exactamente como hacía sucedido esto. Estaba tan atónito cómo Liam y Jason. Eros miraba con furia a Jason mientras lo acorralaba y golpeaba en una pared, Josón lo miraba con temor y en ocasiones desviaba la mirada para pedir ayuda a sus otros compañeros pero estos no respondían, se mantenida quietos cómo si estuvieran hechos de piedra. Eros agarró la camisa de Jasón y lo azotó de nuevo.

- ¡Habla, idiota!

La voz de Eros era furia pura, sus ojos se oscurecieron mostrando a un Eros que Harry no hubiera querido ver. No entendía que estaba pasando con Eros pero tenía que intervenir rápido antes de que matara a Jason.

- ¡Eros, no lo hagas! -Gritó Harry- Él es Hareos -Miró a Jasón- ¡Muéstrale!

Los ojos de Jasón brillaron con intensidad, haciendo que parezcan de auténtico oro puro. Su rostro empezó a cambiar y con un tenue destello su apariencia volvió a ser idéntica a la de Harry. Eros no cambio su actitud al ver esto, pero si empeoró. La mano de Eros brilló con un intenso resplandor plateado, sus ojos azules llegaron al punto que parecieran negros. Todos los músculos de su cuerpo estaban tensos, listo para atacar.

Harry no pudo soportar más la escena y se abalanzó sobre Eros. Él parecía no notarlo, estaba rígido cómo el metal por lo que a Harry se le hizo imposible derribarlo. Harry tomó el brazo de Eros y el color de los ojos de Eros pareció volver a la normalidad y el brilló de su mano cesó por un instante. Pero después el color sombrío volvió. Él se soltó del agarre de Harry y gritó, pero ya no era la voz de Eros. Esta era cómo si dos personas hablaran al mismo tiempo, dándole un gran poder a sus palabras.

- ¡Apártate, semidiós! Tus trucos no servirán conmigo -dijo.

Harry ignoró aquello y volvió a intentar separarlos pero era imposible. Una pared invisible se había formado para que Harry no pudiese pasar y así Eros acabara de una vez con aquello, pero no lo podía permitir. Tacleó la pared con todas sus fuerzas para derrumbarla pero parecía irrompible. Tras un par de tacleadas más, Harry estuvo agotado y se recargó en el muro invisible, este desaparecióntes de que n Harrlo tocara y lo que provocó que casi cayera. Harry se levantó rápidamente y, con una fuerza que ni siquiera el sabía que tenía separó a Eros de Jasón.

Jasón al instante se derrumbó en el suelo y cambio a su apariencia original. Su rostro mostraba terror y angustia. Harry sabía como se sentía, aunque no del todo. Él había sido atacado por una furia disfrazada de su mejor amigo pero Jasón había estado apuntó de morir carbonizado por Eros. Eso debía ser diez veces peor.

Eros pareció calmarse un poco y en ratos su rostro adquíida confusión. Liam pareció haber salido de su trance porque fue a ayudar a Jasón. Harry quiso decirle: “Gracias por la ayuda, Liam. No sé que hubiera hecho sin ti”, pero era claro de que no era el momento.

Harry sostuvo a Eros con miedo de que volviera a su estado anterior pero ahora el parecía más confundido que furioso. Poco a poco sus ojos volvieron a su azul normal, dándole un gran alivio a Harry. Eros se sentó en el pasto y posó sus manos en su rostro.

Liam cargó a Jasón y lo llevó dentro. Se veía muy mal. Estaba pálido, temblaba demasiado y no dejaba de murmurar algo que Harry no entendió del todo. Era algo así comoNo puede ser él””.

Harry dirigió su mirada hacía Eros, quien estaba incluso igual que Jasón. Sus ojos estaban aguados y también temblaba. Había abrazado sus piernas en a unposición que incluso daría ternura si no hubiera visto lo anterior. Se acercó lentamente, con miedo de hacer algo mal y que el Eros anterior vuelva, pero eso no sucedió.Se sentó a su lado, dándole pequeñas palmadas en la espalda para tranquilizarlo pero era obvio que eso no ayudaría.

Eros paro de temblar inesperadamente, su cuerpo se tensó y alzó la vista. Lágrimas aún corrían por sus mejillas. Harry no creyó poder ver a un dios llorar algún día, ni siquiera se habría imaginado que llorarán pero Eros era diferente a los demás dioses, estaba seguro. Eros se tensó aún más ysus ojos se oscurecieron un poco. El temor inundó a Harry, no quería que lo anterior se repitiera pero Eros no hizo nada más que decir:- Tenemos que ir con Hécate.

No entendió eso del todo ¿Hécate? Seguro era una diosa, supuso Harry, estaba seguro de que la había oído antes, pero no entendía porqué deberían ir con ella. Quizá el arco de Eros estuviera allí.

Eros se levantóy adentro en la casa, Harry lo siguió, temiendo de lo que Eros pudiera hacer. Eros busco a Liam y a Jasón, que estaban en la sala con la gran pantalla y el sofá en forma de U. Jasón estaba sentado en el y a un lado estaba Liam, verificando si no temía ningún daño.

- Tenemos que irnos -dijo Eros.

Liam se quedó inmóvil, poco a poco se giro hacíE eros y asintió. Se levantó del sofá y tomó las llaves del auto. Harry sabía que Eros le estaba haciendo algo, Liam parecía estar en una especie de trance, estaba distante y no parecía parpadear, ese no era Liam.

Liam salió de la casa con Eros detrás de él, Harry y Jasón no tuvieron otra opción más que seguirlos. Una vez fuera se dirigieron al auto naranja que Apolo les había dado. Liam puso marcha el auto y Eros se sentó en el asiento del copiloto mientras Harry y Jasón iban en los asientos de atrás. Ellos miraban con miedo e intriga la esce, s sabían que no podían hacer nada, Harry a duras penas pudo separar a Eros de Jasón antes de que lo matará, hacerlo de nuevo sería incluso más difícil.

Liam empezó a avanzar, Eros empezó a ordenarle cosas en griego que, sorprendentemente, Liam podía entender. Condujo por las calles de Londres tranquilamente, por alguna extraña razón no había tráfico, las calles estaban vacías, sin señal de vida humana. Eros empezó a decirle las órdenes a Liam con una voz firme y fría, como si estuviera perdiendo poder en él.

Harry miró a Jasón, quien estaba distraído mirando por la ventana del auto, inspeccionando cada esquina, tratando de averiguar hacia donde los conducían.

Jasón no parecía tener resentimiento hacía Eros, aunque si los tuviera no sería el momento de demostrarlo, sólo un completo idiota haría eso en el estado en el que se encontra.s.

Liam se estacionó en frente de una pequeña casa de ladrillo. Era algo vieja y despintada pe aúnin así era muy bonita, tenía un hermoso jardín verde por donde corríu o r en miniaturaíoue e parecía venir de la nada. El techo estaba decorado con pequeños signos que Harry no entendió pero le daban un poco de esplendor a la casa. Harry miró un letrero que estaba en la puerta principal (Era de madera y también tenía rosos signos en ella pero estos era diferentes). Harry leyó el letrero y se sorprendió al ver lo que decía:¡ “ARTEFACTOS Y HECHIZOS MÁGICOS 50% DE DESCUEN!TO”. Estaban en la casa de una bruja y Harry empezó a sospechar de que no se trataba de unarujasa normal (Lo que sea que signifique “normal” para una bru).
.

Eros se adelanto y entró en la casa. Harry y los demás le siguieron. Una vez entraron Liam pareció volver a la normalidad y el color sombrío de los ojos de Eros desapareció, pero empezó a murmurar cosas cómo “¿donde está?” mientras observaba tropa la casa.

Una mujer se materializó delante de ellos. Vestía igual que una gitana, su vestido era de una combinación de azul con verde y blanco , sus muñecas estaban tapadas de pulseras de oro su y cabello castaño rizado caía sobre sus hombros. La mujer les sonrió, mostrando sus perfectos dientes blancos.

- ¿Se les ofrece algo? -dijo la mujer.

Su voz era hipnotizante y hacía a Harry querer hacer todo lo que la mujer le pidiera, pero se resistió. La mujer miró a Eros y frunció el ceño, empezó a inspeccionarlo con los ojos entrecerrados como si tratara de descubrir quién era, luego desvió la mirada para volver a sonreír.

- Cómo sea ¡llegan justo a tiempo! -dijo la mujer con una extraña emoción- acabo de recibir mercancía nueva ¡y están a mitad de precio! ¿No es increíble? ¡Es una gran oferta!

Harry estuvo horriblemente tentado a decir “¡Si, lo es!” y comprar toda la mercancía que la bruja tenía pero se controlo. Eros dio un paso adelante y la bruja lo miró. Eros se acercó más y la bruja pareció reconocerlo porque arqueó una ceja.

- Hécate -murmuró Eros.

- ¿Eros? -dijo Hécate- Vaya, vaya, hace mucho que no te veo. Pensé que tu ascenso se te subiría a la cabeza y nunca volverías a háblame, sería algo común en ti, pero, tranquilo, siempre pensé que Deméter hizo lo correcto al cederte el puesto.

Harry no entendía la mayoría de lo que decía pero no importo. Hécate miró a Harry y luego a los demás, los analizaba como si pensara en que serían unos muy buenos conejillos de indias para sus hechizos. Harry recordó su clase de historia antigua, su maestro había mencionado a Hécate, lo recordaba.

- Usted es Hécate, diosa de la hechicería -se adelanto Liam.
La diosa sonrió y asintió.
- Así es, hijo de Atenea. Me encanta tener personas únicas como tu, le dan más fuerza al aura mágica de está casa. Sabes a lo que me refiero ¿no?
Liam palideció, dándole a entender a Harry de que si sabía a lo que se referida.

- Ya sé porque han venido- dijo la diosa- ¡Quieren que les diga su futuro!

La diosa sonrió aún más y dirigió su mirada a Jasón. Su rostro cambio al instante, su sonrisa se fue, mostrando una mueca como reemplazo.

- Hijo de Momo -Dijo Hécate con repulsión- hace mucho tiempo que no veía a alguien como tu, y sinceramente, eso me hacía feliz. Tu padre es un odioso, mucho más con sus mayores, es por eso que lo desterraron del Olimpo. Pero eso no importa ahora. Tus poderes son muy impresionantes joven semidiós pero al final ellos serán tu ruina.

A Jasón no pareció molestarle aquello, pero tampoco le agradaba, de vez en cuando su cara palidecía y se movía con nerviosismo, era obvio que escondía algo pero decidió no preguntar. Por último Hécate dirigió su mirada a Harry.

- Hijo de Apolo -dijo la diosa pensativa- Tienes un gran don. Eres diferente a los demás hijo de Apolo, los dioses empiezan a tener temor hacia ti. Aún no has descubierto tu habilidad y eso es raro en un semidiós de tu edad, ellos piensan que eso no es nada bueno. Yo, a diferencia de los demás dioses, sé cual es tu don, pero no puedo ver tu futuro, es confuso, como si tu mismo lo estuvieras protegiendo de ser visto. Ni siquiera tu propio padre, que es el dios de las profecías, puede averiguarlo.

Harry miraba con la boca abierta a Hécate. ¿Un don? ¿Que clase de don? Harry no lo sabía. Su mente estaba confusa, todo lo que le había dicho la diosa no podía tratarse de él ¿los dioses le tienen miedo? ¿por qué deberían de hacerlo? De seguro había otro hijo de Apolo que aún no sabía su habilidad vagando por algún lado y Hécate se había confundido. Eso era más lógico.

- Hécate -dijo Eros- no queremos comprar nada venimos por mi...
- Oh, si. Tu arco. -interrumpió Hécate- Lo había olvidado. Zeus me lo entregó hace dos días pero me dijo que no te le diera, al menos no voluntariamente.
Harry frunció el ceño.
- ¿Por qué Zeus le dio el arco?
Hécate sonrió.
- Zeus me tiene confianza. De vez en cuando me pide favores. Es lo menos que puedo hacer después de que el mismo me dio estos dones con la hechicería.
- El arco -Interrumpió Eros- ¿donde está?
Hécate frunció el ceño.
- Esa no es forma de pedir las cosas -suspiró- La única forma de que te dé el arco es ganándolo. Alguno de ustedes tendrá que aceptar mi desafío.
- Yo lo hago -dijo eros.
- ¡Por supuesto que tu no! -replicó Hécate- Tú eres un dios. Me refiero a él.

Harry palideció. Deseaba que no estuviera oyendo bien o que alguien estuviera parado detrás de él. Pero no. Hécate le estaba señalando, esperando su respuesta. Eros lo miraba con tristeza, era difícil imaginar que antes estaba a punto de matar a Jasón y después dándole órdenes en griego a Liam como si estuviera poseído. Harry dejó esos pensamientos a un lado y miró a Hécate, dio un paso hacía delante.

- Acepto tu desafío -dijo.
Hécate sonrió.
- ¡Estupendo!

La diosa desapareció por un instante y luego volvió a aparecer con una pequeña caja dorada con inscripciones griegas. Hécate agitó una mano y toda la sala empezó a extenderse. El piso se convirtió en arena y aparecieron dos estanques llenos de agua de la nada, cada uno a cada lado de la sala. Hécate sonrió y acarició la caja.

- Esto me lo dio una semidiosa -Empezó- me lo dio de intercambio por unos cuantos hechizos y pociones, sabía que vendrías, es por eso que acepte está oferta.

Hécate quitó el seguro de la caja y lentamente abrió la caja. Esta brilló y polvo dorado salió de la caja y empezó a acumularse en la tierra.

- Ya que has aceptado mi trato -dijo Hécate- te podrás llevar el arco... Pero sólo si luchas contra él.

Harry palideció. ¿Luchar? Ni siquiera pudo terminar su entrenamiento. Harry estaba seguro de que esto no terminaría bien.

Como si una fuerza del universo estuviera en su contra, el polvo dorado tomó forma humana. Hécate amplio su sonrisa y la figura humana empezó a transformarse. A Harry casi se le detenía el corazón al ver lo que el hombre de arena se había convertido. Era Louis. Estaba de pie, enfrente de él. Invitándolo a atacar pero no podía, sus pies no respondían y todo su cuerpo se hizo más pesado.

- Creo que ustedes ya se conocen -dijo Hécate- así que me ahorran la presentación. Cuando lo obtuve, inmediatamente tuve planes para él. Lo mejoré y le di dones, es el mortal más valiente que he conocido. Es por eso que de ahora en adelante lo he hecho mi hijo.

PERDÓN!!! Lo lamento tanto, me tarde demasiado en actualizar esto, de verdad perdón, incluso se merecían un maratón o como mínimo dos capítulos pero no pude escribir más de uno, lo lamento. Ahí esta el capítulo, traté de hacerlo más interesante, espero y les guste. Y gracias a todos aquellos que se quedaron en esta novela, se los agradesco infinitamente. Ahora solo podre subir una vez a la semana y serán los Jueves, trataré de respetar este horario se los primero. Adiós.

Lo primero que me sale cuando entro es :
- ¡Dime quien eres, imbécil! O te pulverizaré .   Yo :pokerface: :pokerface: 


¿Louis? ¿ahora es hijo de la bruja? wtf!!! esto no acabará bien 
¿Por qué las cosas raras siempre le pasan a mi babe? es hijo de un dios no se puede esperar otra cosa y todo l que dijo la bieja esa  

WHAAAAAAAAAAAAAT?!?!?!?! Cómo dices que dijiste?!?! Ya no entendí nada.... Y eso me encanta!!!!! 
Síguela cuando puedas xX

WHAAAAAAAAAAAAAT?!?!?!?! Cómo dices que dijiste?!?! Ya no entendí nada.... Y eso me encanta!!!!! 
Síguela cuando puedas xX

HOLAAAAA!!!
PERDOOON!!! EL FORO DE MIERDA NO M AVISO!!! ME PERDÍ UN MONTON DE CAPITULOS!!!    :fuckya: :fuckya: :fuckya: :muere: :muere: :misery: :misery: :gasp: :gasp: :gasp: :wut: :wut: :wut: :lloro: :lloro: :lloro: 

LA AMOOOO!!!!! TE JURO QUE LA AMOOO!!! SE ESTÁ POIENDO LA INTERESANTEEE!!!    

HARRY TIENE Q PELEAR CON LOU??? NOOOOO ME MUEROOOOO!!!!

SEGUILA PRONTOOOO
BESOOOOSS

como es que paso esto??? jeje necesito saber mas !!! que demonios va a pasar en la pelea.... gracias por subir capi... :bye:

07.09.201319:56:08
  HOLA MI NOmBRE ES LIZ Xd 
lo se soy dzsadasa ok vamos al punto 
voiii a llorar :lloro: :wut:  me encanta tu nove :):canto:
:imdead: voy a morir heart attack :enamorado: :ilusion:  enamorada de tu nove :):muere:  :OWO:  se me sale el gsfddhs     te estoy vigilanDo Xd

De pronto el ambiente se volvió frío y sombrío, sus manos no respondían, nada de él lo hacía, su respiración estaba agitada y su corazón latia mil veces por minuto. Aquello no le podía estar pasando, ese no era Louis ¿o sí?

Su mente estaba a punto de explotar tratando de encontrar una razón lógica a todo ello, claro, no había una que lo convenciera. Debería haberse acostumbrado, nada era lógico desde que conoció a Eros y se entero de que su padre era un dios griego. Era como sí todas las cosas raras le pesaran a él.

Avanzó a paso lento hacia Louis, siendo cuidadoso de que sus movimientos no lo alterarán y lo atacara. Louis, en cambio, estaba quieto, con su rostro frío y sin emociones, estaba esperando a que Hécate diera la orden de atacar y una vez eso pasara... Harry hizo a un lado esos pensamientos, Louis no lo lastimaría, de eso estaba seguro. “Pero él no es Louis, es sólo un títere de Hécate”, se dijo. Decidió no pensar más en ello y concentrarse más en sobrevivir, no sabía que le había hecho Hécate a Louis pero era seguro de que no era nada bueno.

Hécate sonrió. Esa mujer empezaba a desagradarle, incluso ya no quería comprar sus productos en oferta.

- Louis, cariño -dijo Hécate con una voz exageradamente dulce- puedes empezar.

Louis se tensó. Sos ojos oscurecieron y una sonrisa cínica apareció en su rostro. Alzó una una mano e inmediatamente Harry sintió escalofríos por todo su cuerpo. Una gigantesca ola se abalanzó hacía él, lanzándolo hasta la otra esquina de la sala. Golpeó en una pared y cayó al suelo con casi todos sus huesos rotos. Cuando estaba por levantarse, la arena se levantó, golpeándolo en el mentón, arrojándolo de nuevo al suelo. El último intento fue el peor, intentó levantarse pero esta vez un fuerte viento lo elevó por los aires, lanzándolo de una pared a otra hasta dejarlo rendido en el suelo.

- Te gusta lo que hice con él -Dijo Hécate, sonriente- ¡Creo que es el mejor trabajo que he hecho en siglos!

Louis sonrió y asintió. Harry estaba horrorizado con lo que la diosa había hecho. Louis era una perfecta máquina de destrucción. Frío, calculador e increíblemente poderoso. Definitivamente ese no era Louis.

Louis agitó su mano y una nueva ola salió de uno de los estanques. Harry tenía que moverse rápido antes de que la ola lo golpeara. No podía perder, no sí Louis estaba involucrado. Con todas sus fuerzas se levantó y se lanzó hacia un lado, justo antes de que la ola llegara hacia él.

- ¡Levántate! -Decía Eros- ¡Pelea con él!

Se levantó, apoyándose de un bonito mueble de madera con signos muy raros tallados en él. Harry examinó los signos. A diferencia de Eros, él no sabía hablar ni leer griego, pero aquella palabra en ese signo mágico lo pudo reconocer con tanta facilidad que le dio miedo. Buscó por todos lados y encontró un pequeño cuchillo de adorno colgado en una pared ceda de él. No era mucho pero serviría.

Caminó hacia él, esquivando cada uno de los ataques de Louis, ola tras ola, viento tras viento y todo en un solo minuto. Harry estaba tan impresionado y horrorizado con lo que Louis podía hacer ahora. Un escalofrío recorrió todo su cuerpo al darse cuenta de algo de lo que no quizo pensar en un principio ¿Qué pasaría sí Louis no volviera a ser el mismo? ¿y sí Hécate no lo libera y se queda con ella toda su vida? No, no iba a permitir qué eso pasara.

Apresuró el paso, era difícil con el sin fin de ataques qué Louis lanzaba, pero aún así, Harry llegó con vida hasta el cuchillo, lo tomó y regresó haya aquel mueble de madera. Hécate miraba sus movimientos con una expresión de intriga pero sonreía como sí disfrutará de aquél espectáculo. Harry espero que aquel cuchillo pidiera cortar, y lo más importante, que el hechizo permitiera que cortara.

Sus movimientos fueron rápidos, fue como sí uestuviera cortando mantequilla con el cuchillo. Sostuvo muy fuerte aquel pedazo de madera y se dirigió hacia Louis.

Hécate estaba susurrándole a Luis en el oído, sonriente. Louis asintió y se acercó a Harry. Ahora él podía ver con claridad sus ojos, el azul se había ido por completo, dejando dos huecos negros y espeluznantes. Louis sonrió. Su sonrisa también había sido modificada por Hécate, la seguridad y calidez que sentía al verla fue vilmente demacrada por el horror y la inseguridad. Era un hecho de que aquel no era Louis.

- Ahora -Dijo Hécate.

La mano de Louis ardió, literalmente. Una gran llama de un extraño y hermoso fuego azul se formó en la palma de su mano, moviéndose majestuosamente. Louis lanzó el fuego hacia un lado y el suelo ardió en llamas creando un círculo azul alrededor de ellos. Louis acechó a Harry con otra llama azul en mano. Apretó más el pequeño trozo de madera, un poco más y traspasaría su piel.

Louis lanzó la llama azul, Harry cerró los ojos, esperando que su plan funcionara. Al no sentir un incesante calor, abrió los ojos. Una esfera verdosa y brillante lo rodeaba, protegiéndolo del fuego.

La sonrisa de Hécate desapareció y frunció el ceño. Harry quería reírse, regodearse de la sorpresa y la confusión de la diosa pero no era el momento, Louis aún seguía bajo su control. Harry avanzó y la esfera lo hizo con el. Louis seguía disparando fuego, haciendo que en el interior de la esfera el ruido muerto de una explosión dejara aturdido a Harry. El trozo de madera estaba exageradamente caliente, Harry se preguntó cuanto resistiría.

-Teleió̱ste ton -Gritó Hécate- Chri̱simopoií̱ste apólyti̱ exousía sas .

Harry sorprendentemente entendió un poco de lo que dijo Hécate. Entendió “acaba con él” y “máximo poder”. Aquellas palabras no le gustaban a Harry.

Los ojos de Louis se volvieron totalmente negros, incluso la parte blanca. Sus manos brillaron con intensidad y en unos instantes... Louis se hacia ido. Harry lo buscó por todos lados, otro sin suerte. Unos horripilantes golpes resonaron en la esfera verdosa pero no podía averiguar de donde provenían. Con un grito ahogado, se dio cuenta de que Louis golpeaba la esfera, desapareciendo y reapareciendo con una velocidad sobrehumana. Louis parecía un auténtico tornado humano.

La esfera fue perdiendo color, pasando de verde a amarillo después a naranja y ahora rojo. El corazón de Harry se aceleró. La esfera se rompió en pedazos pequeños, bañando a Harry de una hermosa lluvia rojiza. Louis tomó a Harry de el cuello. Dolía, pero no apretaba lo suficiente cómo para asfixiarlo. Un brillo de esperanza se encendió en él, en el fondo Louis era el de antes, ahí estaba su Louis, el que nunca le haría daño.

- Louis -Murmuró Harry.

Luis seguía sosteniendo su cuello pero eso no impidió a Harry tomar su mejilla, disfrutando del tacto de su piel con la suya. Cerró los ojos y esperó a que Louis lo apartara.

- ¿Harry?

Abrió los ojos. El majestuoso mar azul plasmado en los ojos de Louis fue lo primero que vió. La alegría y la emoción lo inundó, con sus ojos llenos de lágrimas abrazó a Louis como sí fuera la última vez que lo haría. Louis correspondió el abrazo confundido.

Hécate rió y aplaudió. Su sonrisa mostraba orgullo y satisfacción del entretenimiento que acababa de presenciar. Louis se separó de Harry y miró a Hécate con el ceño fruncido.

- Te explicaré después -Dijo.

Louis asintió a pesar de que se notaba que tenía más que decir. Harry avanzó hacia Hécate.

- Gané -Empezó- Dame el arco.
Hécate sonrió.
- Bien hecho, semidiós -dijo la diosa- Y dices no saber tu don, ¡Ja!
Harry frunció el ceño.
- De que estas...

La mano de la diosa brilló y el arco de Eros se materializó. Era igual al dibujo, de un plata tan brillante casi como la misma luna, Harry podía sentir el poder que irradiaba, tan grande y puro. Harry estiró su mano para tomar el arco pero la diosa lo alejo.

-Oh no, cariño -Dijo Hécate- El arco es muy poderoso, ningún mortal aguantaría tal poder.

La diosa hizo un ademán con la mano y el arco se materializó en la mino de Eros.

- Cuidalo bien -le dijo la diosa a Harry y se acercó a su oído- y no me refiero al arco.

Al decir esto la diosa se desintegró en polvo dorado y la habitación se distorsionó, haciéndolos caer en una inmensa oscuridad.

Hola!! Bueno, aquí esta el capítulo. Lo sé dije el jueves y ahora publico el sábado pero modificaron mi horario en la escuela y bla bla bla, lo que quiere decir que sólo subiré los sábados. También lamento no contestar comentarios pero estoy desde mi celular. ¡Disfruten el capítulo! aunque no me haya gustado del todo la forma en la que narro las partes de acción, espero y les guste. Bye.

Quedo perfecto no te preocupes ^^ sigi sin entender hahaha
Cuídate xX

me encanto!! louis volvio a ser él al menos en parte. Besos xx