Re: Centro de Rehabilitación|Harry Styles|

por **joinmetobealone** Jue 23 Mayo 2013, 5:27 pm

El amor es el silencio más fino, el más tembloroso, el más insoportable
Jaime Sabines.

Capítulo 9: Felicidades, Belle.

Él seguía hechizado por el azul de sus húmedos ojos. Desarmado, y completamente a su merced, ignoraba la posición con la que estaba frente a ella. Lo único que le importaba en ese momento era saber qué le pasaba, por qué lloraba. Y ya no era por urgencia suya, sino por la maldita necesidad de hacer algo para no verla sufrir más.
Vaciló un poco antes de actuar. No quería empeorar las cosas. Así que, con lentos movimientos, cogió una de las pequeñas manos entre las suyas.

Massi tembló ante su tacto e intentó soltarse, pero él se lo impidió, ejerciendo suave fuerza sobre sus muñecas.

–No temas – paseó la yema de sus dedos sobre su palma temblorosa, rogando porque ella lograra entenderle – no te haré daño.

La rubia se fue tranquilizando conforme las letras eran trazadas, finamente, sobre su piel. Y, aunque el corazón aún le latía fuertemente, las lastimeras imágenes de su pasado, que se comenzaban a formar en su mente, se fueron disipando.

–¿Te sientes bien?

Ella asintió, aún poco reticente ante la forma en que Zayn se estaba comunicando. ¿Era necesario el contacto entre sus cuerpos para ello? Aunque... debía admitir que, en parte, se sentía bien.

–¿Por qué lloras?

Inclinó el rostro a modo de respuesta. Eran demasiadas palabras, y tan dolorosas, que, aun pudiendo hablarlas, no se atrevería a decir. Solo Niall lo sabía... solo su hermano conocía su trágica historia, pues juntos la habían compartido. Esa mañana de infierno en la que fueron secuestrados. En donde el cristal explotó, incrustando sus lacerantes espigas en sus vidas. Inspiró hondo y cerró sus ojos, con su frente surcada ante el tormento de su pasado. Las imágenes pedían volver. Se volvían nítidas al mirarle; había algo en su rostro que la inquietaba siempre.
Sabía que Zayn no era peligroso, o al menos, trataba de convencerse que no era así. Pero sus facciones...

Un mudo gemido se escapó de su garganta al evocar a ese maldito diablo y, sin poder controlarse, comenzó a temblar. El moreno se alarmó al verla tan repentinamente desesperada.

–Massi, ¿Qué sucede? – preguntó, poniéndose de pie, pese a lo bien consciente que estaba de que ella no podía escucharle.

–¡Aléjate! – le ordenó la tormentosa mirada que Massiel le dedicó antes de encogerse en su asiento; pero la ignoró. La ignoró fácilmente, pues una violenta necesidad de protegerla de aquello que la asustaba le impulsó a mover sus brazos para cubrirla con ellos.

–¿Por qué? ¿Por qué siempre que estoy cerca te comportas así? – musitó, sintiendo cómo su fino cuerpo temblaba bajo sus manos, preparándose para la lluvia de culpa y remordimiento que llegaba cada vez que ella le repelía de esa manera. Dispuesto a lidiar con esos ponzoñosos sentimientos que le hacían odiarla más y más con cada día que pasaba.

Pero cuál fue la sorpresa del moreno que, al paso de unos segundos, no encontró nada más que el mismo nacido deseo de resguardarla. Además, tenía que admitir que no quería soltarla... Su cuerpo junto al suyo se sentía bien...

La rubia dejó de forcejear al apreciar la misma calma penetrando en su piel y sus empuñadas manos dejaron de empujar, inútilmente, para relajarse sobre la varonil espalda. Jamás antes recibió consuelo más dulce. Jamás antes se sintió así de protegida. Cerró los ojos, que no dejaban de expulsar lágrimas saladas, y dejó que aquella paz le bañara por completo.

–Llora, Massi, llora... Pero ya no temas más. Yo nunca dejaré que te hagan daño... – susurró Zayn, como si pudiera ser escuchado.

Y, de alguna manera, así era. La muchacha estaba consciente de que le estaba hablando. Sentía la respiración expulsada de sus labios cerca de sus oídos, como prueba física, y también estaba el invisible bálsamo que le calmaba el ardor de las heridas habidas en su alma, lo que parecía transmitirle, de alguna manera mágica, lo poco que él le estaba diciendo.

Y así quedaron durante un breve, pero significante, momento. Ella entre los poderosos brazos de él. Él, sumergido en la subida calidez de ella. Juntos. Complementados. Sin miedo. Sin pasado... sin tormentos.

.

.

Para cuando el resto de los chicos abandonaron la sala de cine, Massi y Zayn ya se habían separado y tomado asiento para esperarlos. Ambos otra vez distantes, pero ya no tanto por resentimiento, si no por un incómodo sentimiento que ellos no lograban descifrar.

–¿Qué pasó? ¿Por qué ya no regresaron? – preguntó Belle

–La película nos pareció aburrida – contestó Zayn. No era necesario el ser muy inteligente como para suponer que decir la verdad no era lo que Massiel quería; además, preocuparían al resto.

Y no es que a él le importara que los demás se la pasaran bien, era solo que no le gustaba ser inoportuno, ¿Verdad?
Se levantó del asiento en cuanto vio aparecer a ______, que, con aspecto cohibido, venía casi al lado de Harry (quien también se mostraba incomodo).

–Zayn – dijo ella, al sentir que sus manos tomaban las suyas – ¿Estás bien? ¿Dónde está Massiel?

–Estamos bien los dos – contestó, frunciendo el ceño al verla cubierta por la sudadera de Harry, pero pasando el detalle por alto – ¿Y tú? ¿Qué tal la estás pasando?

–Bien – mintió la chica, regalándole una sincera sonrisa de agradecimiento por su interés.

.

.

–Parece que Zayn cuida mucho de ______, ¿no es así? – señaló, inocentemente, Amy, justo cuando Harry se aproximó.

–¿Ah sí? ¿Por qué lo dices? – preguntó el muchacho, sintiéndose repentinamente molesto

–No lo sé... Ya ves, simples detalles que suceden entre ambos

–¿Qué tipo de detalles?

La muchacha se encogió de hombros, ignorando todo el cumulo de sensaciones que estaba provocando con su ingenua platica.

–La forma en que siempre la procura, el cómo le habla y la mira...Siempre está atento a lo que ella hace

–Ahora... ¿Qué están haciendo? – quiso saber Harry

–Están charlando y él la tiene tomada de las manos. Es una escena muy tierna...

Los puños del muchacho se crisparon de manera involuntaria. Justo en ese momento, Niall, Belle, Massi y Peter llegaron a su lado.

–¿Pasa algo, Harry? – preguntó la pequeña, al ver la expresión sombría de éste.

–No – contestó, con un hilo de voz, sin agregar más.

El paseo entre la plaza comercial continuó, y, aunque los ocho muchachos avanzaban juntos, cada uno iba sumergido en sus propios pensamientos, en su propio mundo. Zayn y Massiel se habían adentrado, sin saberlo ni admitirlo, en un imparable juego de miradas furtivas en la que ambos se descubrían a cada poco. Belle y Niall se habían detenido en una pequeña dulcería. Y, mientras tanto, Harry era consumido por ese punzo cortante sentimiento que se había instalado en su pecho desde el momento en que el nombre de Zayn y ______ bailaban juntos en su imaginación.

Sus manos se volvieron a empuñar sobre sus rodillas y el sabor amargo que tenía en la boca se acentuó al reconocer que la idea le molestaba más de lo que debía.

Eres un maldito egoísta, se dijo así mismo, con profundo rencor hacia su propia persona, Eres un maldito egoísta traicionero, recalcó pues, a pesar de saber que ni si quiera debería de estar pensando en ______ con semejante intensidad, no podía controlar esa rabia que sentía al pensar que ella podría corresponder a los amorosos sentimientos de Zayn.

.

.

.

Acababa de anochecer para cuando el singular grupo arribó de vuelta al Centro de Rehabilitación. El resto de los jóvenes se retiraron, con intención, a sus habitaciones, para dejar solos a Belle y Niall. Bien sabido tenían ellos que la salida entre todos había sido solo parte de la celebración. Ahora, era momento de darle, exclusivamente a ellos, su momento a solas.

Las mejillas de la pequeña se sonrojaron al encontrarse sola con Niall, en una de los salones desocupados que él mismo había pedido prestado a Anne y Anthony para limpiarlo y usarlo esa noche. En el centro, había un pastel reposando sobre la pequeña mesa redonda, con manteles azules y velas blancas.

El rubio se acercó y se hincó frente a ella, para después tomar una de sus manos.

–Cierra los ojos – pidió, como siempre, paseando la yema de sus dedos suavemente sobre la palma de su mano. Belle asintió y, en cuanto lo hizo, Niall la levantó entre sus brazos.

La pequeña solo suplicaba por que el temblor de su cuerpo no fuera tan evidente. Esa noche estaba mucho más nerviosa que nunca al tenerlo así de cerca. Tanto, que casi podía jurar que podía escuchar su propio alocado palpitar.

Sintió los tranquilos pasos de Niall detenerse. Un ligero roce sobre sus parpados fue lo que le avisó que ya podía abrir los ojos y, cuando lo hizo, una sonrisa fue estirando sus labios poco a poco.

–Niall... – susurró, demasiado aturdida por la belleza que se le presentaba al frente.

Su regalo era un hermoso cuadro pintando por él mismo. En él, había un lago, de tranquilas aguas azules, y dos enormes cisnes parecían bailar en ellas de manera sincronizada. Sus blancas alas, que contrastaban perfectamente con la noche, estaban alzadas en alturas distintas, pero se complementaban perfectamente unas a las otras, como si se estuviera llevando a cabo una danza perfecta. Gotas cristalinas salpicaban de sus níveas plumas y acompañaban a los rayos plateados de la luna, que se alzaba como único espectador de tan majestuoso espectáculo.

Belle ya se sentía mágicamente aturdida. Era como si estuviera ahí, dentro de ese prodigioso escenario. Como si ella fuera la luna que observaba la sublime y sencilla belleza que Niall le había pintado.

–Muchas gracias –dijo, pegando su rostro al pecho de él, para ocultar las lágrimas que querían escapar de sus ojos. Era tanta la emoción. Tanta la dicha. Estaba feliz por conocerlo. Por haber tenido la fortuna de encontrarlo. Lo amaba tanto...

–¿Qué pasa? – se preocupó el muchacho, ante su delicado llanto, sentándola en una de las sillas que compartían la mesa.

–No es nada – sollozó la pequeña, sonriéndole para tranquilizarlo – Es sólo que estoy muy feliz, Niall. Es un cuadro muy bonito. Muchas gracias...

Él suspiró, aliviado. Temía que Belle pudiera sentirse abatida al recordar su pasado o los días en que ella pasó su cumpleaños sola. Llevó una de sus manos para enjuagar sus lágrimas, siguiendo especialmente una gotita salada que culminó en la entrada de sus labios. Las yemas de sus dedos quedaron sutilmente posadas en las delicadas líneas de éstos y su mirada celeste se perdió en su delicada forma entreabierta, que le invitaba a probarlos...

Espera, le dijo una vocecita interna, brindándole la concentración necesaria para alejarse.

Belle, por el contrario, le tomó un poco más en reaccionar. Aún podía sentir las mariposas subir y bajar por su estómago. ¿Había sido su imaginación o Niall en realidad iba a...?

No. No debía ilusionarse tan rápido. Tal vez solo lo había imaginado.

Jugó nerviosamente con sus dedos, e intentó ocultar el rubor de sus mejillas manteniendo la mirada fija en el mantel, mientras Niall preparaba los platos y vasos y aproximaba el pequeño pastel. Entonces, cuando todo estuvo listo, sus manos volvieron a ser tomadas por él.

– Feliz Cumpleaños, Ali – "dijo" y, después, besó su mano.

La morena no pudo reprimir un suspiro ante la delicadeza con que siempre la trataba.

–¿Partimos el pastel? – propuso después.

Ella asintió, apenas y consciente de las letras dibujadas sobre su piel.

Después de servirse y comer el dulce postre, Niall acercó los regalos que le habían dado para que ella los abriera. El primero que ella cogió fue uno de curiosa envoltura negra, la cual no recordaba haber recibido.

–Es de Zayn – explicó su compañero – me pidió que te lo diera yo.

Soltó una risita. Ese chico no tenía remedio. Pero igual, era ese carácter tan esquivo lo que lo hacía especial. Su sonrisa se extendió al abrir el presente y encontrarse con una libretita con pasta de madera barnizada e ingeniosamente decorada. Era fácil deducir que él mismo la había hecho. Zayn era bueno para ese tipo de artes.
Adentro, había una pequeña notita escrita con tosca, pero entendible, caligrafía.

Veo que te son de utilidad y supongo que es mejor a que
te haya regalado el típico peluche de farmacia que mantendrás
fielmente guardado en una repisa.
Que la pases bien.
Zayn.

Belle apretó el cuadernito contra su pecho y después la acomodó, con mucho cuidado, sobre sus piernas y pasó a abrir los demás, recibiendo, con cada uno de ellos, un pedacito de la esencia de sus amigos.

Una linda blusa color azul por parte de Massi. Una grande y acolchonada almohada decorativa por parte de Amy y Peter. El CD más reciente de su banda favorita por parte de Harry. Un libro, que llevaba por título "Cumbres Borrascosas", por parte de ______ y, por último, un bonito y elegante reloj por parte de Anne y Anthony.

Cerró sus ojos e inspiró profundamente. Lo creía casi imposible. ¿Qué había hecho ella para merecer estar rodeada de gente tan buena, a la cual, todo debía? No podía si quiera imaginarse una vida sin ellos. Sin su refinada Massiel, sin su alegre Amy y su intelectual Peter. Sin Harry y sus amables y pausadas palabras y cuidados. ¡Sin el rebelde de Zayn! Pero, sobre todo, ¿qué sería de ella sin él, sin su gentil Niall?

Sus ojos se abrieron al sentir algo frío rozar la punta de su nariz.

El rubio rió al verla hacer graciosos bizcos para lograr distinguir el diminuto objeto que se posaba frente a ella y oscilaba casi pegado a sus pestañas. Después, lo alejó y lo dejó caer sobre sus manos.

Entonces, Belle reconoció lo que era: Una medallita de plata, en forma de cisne, que pendía de una delgada cadena de fino trenzado.

Era un arreglo sencillo, pero muy hermoso, como ella. Por eso Niall, instintivamente, buscaba esa combinación entre lo fastuoso y lo natural. Aunque claro, siempre se terminaba convenciendo de que la única mezcla perfecta de esas dos características solo la encontraría en su tierna mirada.

La noche avanzó. Belle soltó, involuntariamente, un ligero bostezo. El muchacho la acomodó en su silla de ruedas, para llevarla a su recamara, y ella no protestó. La verdad es que se sentía muy cansada.

–El cuadro – recordó.

Niall se detuvo y se lo dio para que lo condujera sobre sus piernas, junto con el resto de sus obsequios
Llegaron a la habitación. Massi y ______ ya dormían. Era más de media noche. Trataron de hacer el menor ruido posible al acomodar, previamente, los regalos en su buro. Al final, solo quedaron en sus manitas el cuadro y la medallita. Niall tomó la pintura primero y la dejó reposar en el suelo, a un lado de su cama, después, se volvió a acercar.

–¿Puedo? – preguntó, señalando el dije. Belle se estremeció ante su caricia y asintió.

Sus temblores aumentaron cuando sintieron el roce de sus manos sobre su cuello y su respiración, involuntariamente, cerca de su oído. El corazón le bailaba fuertemente en el pecho cuando él, estando a menos de treinta centímetros, le sonrió cálidamente.

–Se te ve hermoso.

–G-gracias – musitó, bajando el rostro. Huyendo de la celeste mirada que parecía brillar más en la oscuridad.

Luego, sin decir más, Niall la tomó en brazos. Ella sabía que era solo para pasarla a la cama, pero los latidos de su corazón se dispararon más violentamente que antes. Suspiró, sin poder contenerse, y fue su cálida respiración lo que enajenó al muchacho que comenzaba a dejarla caer sobre la cama. Lo único que Belle supo después, fue que su espalda estaba ya recostada sobre el suave colchón y que los labios de Niall estaban, accidentalmente, cerca de los suyos. Nunca habían estado de esa manera. Las mejillas se le encendieron a ambos. El sonido de sus corazones parecía hacer eco en el silencio de la habitación. Sus manos aún reposaban sobre sus hombros y él se sostenía con las suyas, sumergidas paralelamente a su cintura. Sus miradas se encontraron y sus fulgores no ayudaron para recuperar la noción de la realidad, si no por el contrario, los dos se desconectaron del presente, reduciendo su mundo solo en los ojos del otro. Entonces, pasó. El rostro de Niall se inclinó, sin apremio, hacia el de Belle que, trémula y tímida, cerró sus ojos y dejó escapar un suspiro al sentir sus labios acariciar los suyos suavemente, con un roce que apenas y le tocaba, pero le transmitía toda una cadena de vibraciones en la piel. Y, mientras sus bocas bailaban una inocente y breve danza, él acomodó su mano sobre una de sus mejillas y ella deslizó sus manos hacia sus dorados cabellos.

Se alejaron al poco tiempo, cuando el eco de un murmullo entre sueños les hizo reaccionar. El abandono de sus labios fue delicado, pausado. Hacía tanto que ambos, secretamente, habían deseado este momento y, ahora, que se había presentado, eran incapaces de hacer otra cosa que mirarse a los ojos e intentar descifrar, en ellos, si había en el otro el mismo sentimiento que alteraba a sus corazones...

–¿Belle? – La adormilada voz de ______ les hizo saltar – ¿Belle? – repitió la castaña, ante el misterioso silencio. Ignorando lo que estaba interrumpiendo – ¿Estas ahí?

–S-si – dijo al fin la pequeña, sin desviar sus pupilas del piélago celeste le hechizaba –estoy bien. No te preocupes.
La morena asintió y volvió a recostar su cabeza en su lecho, quedando dormida casi al instante.

Niall se incorporó. Ambos sabían que tenían que "hablar", pero no era el momento. Así que, despidiéndose en un tímido silencio, se dijeron adiós, antes de que el muchacho se retirara del cuarto, dando inaudibles tropezones...

Ya en cuanto amaneciera, él iría y no esperaría más para hacerle saber lo mucho que la quería. Ese beso le había armado de valor, pues, la ingenua forma en que Belle lo había aceptado, le había dejado en claro que le correspondía de la misma manera...

Dentro de poco, Belle sabría todo lo que ella significaba para él...

por **maria delgado hdz** Sáb 25 Mayo 2013, 11:44 pm

awww!! :amor: siguelaaaa!!

por **Gime :)** Dom 26 Mayo 2013, 4:47 pm

Holaaaaa!! siguela pronto :)

por **kissesOfSugar** Mar 28 Mayo 2013, 9:25 am

AWWWWWWWWW Esta hermosaaaa tu novela! Me enamore mucho muchooo :33 Y ese Nialler tan dulce Siguelaaaa Siguelaaaa! Soy nueva lectora :$$

por **justateenagegirl** Miér 05 Jun 2013, 1:02 am

Nueva Lectora ME ENCANTA tu novela por favor Siguela!!!

por **Laura ☮** Miér 05 Jun 2013, 5:59 am

¡Nueva Lectora!
Hola, me llamo Laura y me encanta la nove :)
La historia es increíble <33
Espero que la sigas pronto :)
Cuídate, besos ♥

por **leyla_nicole** Miér 19 Jun 2013, 9:33 am

Hola Soy una NUEVA LECTORA me Encanta tu novela Porfis Síguela!!!!!!!!!!!!!!

por **Nela Escobar** Miér 19 Jun 2013, 5:09 pm

NUEVA LECTORA!!

Me encanta tu nove, creo que si no lasigues vas

a matarme de curiosidad por que soy super curiosa

y necesito saber que pasa después!!!;);)

por **JonasTomlinson** Dom 23 Jun 2013, 9:44 pm

Nueva lectora, me ha encantado toda lo que va de la novela, es hermosa *-*
Espero y la sigas, cuídate :)

Charlie xx

por **kissesOfSugar** Mar 25 Jun 2013, 2:58 pm

SIGUELAAAA PRONTOOOO POR FAVOOOOOOOOOR!! ES GENIAL TU NOVELA.
SOY NUEVA LECTORA Y TE JURO QUE LA AMO MUCHOOO, ES MUY HERMOSA :3

por **Robin.** Miér 26 Jun 2013, 5:34 pm

SOY TERRIBLE... ME CASTIGARON Y NO PUDE COMENTAR NI LEER NADA... ACABO DE LEER LOS CAPITULOS... POR FAVOR SIGUELA... YA QUIERO QUE LA RAYIS Y HARRY SE QUIERAN :333

por **basketballgirl** Jue 27 Jun 2013, 2:55 am

dios SIGUELAAAA

por **Robin.** Sáb 29 Jun 2013, 8:01 pm

Siguela!!!!!!!....Perdon por no comentar, pero es que estuve ocupada... y mucho...DIOS!!! GENIAL ~('-'~) (~'-')~ ~('-')~ BAILE SEXY ~('-'~) (~'-')~ ~('-')~SIGUELA~('-'~) (~'-')~ ~('-')~SIGUELA~('-'~) (~'-')~ ~('-')~ SIGUELA ~('-'~) (~'-')~ ~('-')~

por **dulce styles** Jue 04 Jul 2013, 7:54 pm

tienes que seguirlaaaaaa!!! me encantooooo!! :ilusion:

por **dulce styles** Miér 10 Jul 2013, 2:16 am

Siguelaaaaaaaaa!!!

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