"Espíritus Libres" (Nick y Tu) Adaptación.

Hahahahaah.. Enserio amo a mis padres y a tu novelaa!
Siguelaa

ivana-ilove escribió:

JoaaJonass! escribió:Nueva Lectora!
Me encanta la verdad mi mama se llama Marian que casualidad :D
Siguelaa! .. :love:

BIENVENIDAAAAAAA!!!!!!!!!!! :D vaya vaya ahora tu mama se gano un papel en la novee
que afortunadas dos protagonistas en la msma casa jeje
:P y eres de venezuela que orgullo 8) jej tal vez algun dia nos conoscamos
de que parte eres??

Si que suerte
Y soy De Caracas y tu?

Wii Pasee de Paginaa!
Cap!

Me encantaron los caps!
amo las locuras de mis padres!
al sexi doctor! hahahahahaha!
sigueee! xD

JoaaJonass! escribió:Hahahahaah.. Enserio amo a mis padres y a tu novelaa!
Siguelaa

ivana-ilove escribió:

JoaaJonass! escribió:Nueva Lectora!
Me encanta la verdad mi mama se llama Marian que casualidad :D
Siguelaa! .. :love:

BIENVENIDAAAAAAA!!!!!!!!!!! :D vaya vaya ahora tu mama se gano un papel en la novee
que afortunadas dos protagonistas en la msma casa jeje
:P y eres de venezuela que orgullo 8) jej tal vez algun dia nos conoscamos
de que parte eres??

Si que suerte
Y soy De Caracas y tu?

yo soy de Barquisimeto
we estamos lejos :( jeje
tal vez algun dia nos encontremos :)

Capitulo 5


-Oye Nick ¿Vas a venir con nosotros al partido este fin de semana? -le preguntó uno de los médicos cuando Nick iba por el corredor hacia la cafetería.

-Lo siento pero aún estoy intentando desembalar mis cosas, y éste va a ser mi primer fin de semana libre desde que llegué -contestó, haciendo una pausa al reconocer a una enfermera rubia que acompañaba al doctor. Ella sonrió, indicando que también lo reconocía.

Era la amiga de _____ Cassidy.

-¿Cómo está tu amiga? -le preguntó.

-Supongo que bien. Con la barbaridad de trabajo que tenemos aquí no he podido hablar con ella. Pero si quieres averiguarlo por ti mismo, deberías venir al partido, _____ va a jugar con nosotros.

Nick sintió como una especie de extraña palpitación en su interior.

-Quizás vaya con vosotros. Lo pensaré. Hasta luego.

-¿Por qué te has molestado, Julieth? -le preguntó el doctor cuando Nick se hubo alejado-. No va a venir. Jamás se ha interesado por ninguna de nuestras actividades. Ese tipo es un auténtico ermitaño. ¿O es que has pensado que esos encantos tuyos tan exquisitos iban a tener éxito donde los de otras no lo han tenido?

Julieth miró hacia atrás para asegurarse que Nick no podía oírles.

-No, pero tengo una amiga cuyos encantos pueden surtir el efecto deseado.

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Mientras contemplaba su cena con escaso entusiasmo, Nick no podía dejar de recordar aquellos ojos azules y rasgados y aquella boca tremendamente sensual, y le resultaba curioso tener tan nítido el recuerdo de una mujer con quien apenas había hablado cinco minutos.

-Las natillas envasadas no son una visión muy suculenta que digamos.

Nick levantó la vista y se encontró con Julieth de pie junto a él, con una bandeja en las manos.

-¿Puedo sentarme?

-Sea usted mi invitada, por favor.

Julieth puso sus platos sobre la mesa.

-Ya sabrás que te has convertido en el misterio del hospital. No vas a fiestas, no juegas al golf, trabajas todas las horas del mundo, y si alguien quiere librar un fin de semana tú les haces el turno y nadie sabe nada de tu vida privada.

-Estoy contento con mi vida gris tal y como es.

Julieth alargó un brazo, arrebatándole la cucharilla de la mano.

-Si remueves las natillas será aún peor -y apoyando la barbilla sobre las dos manos, le preguntó-: ¿qué piensas de _____-?

-No creo que el golpe tuviera efectos secundarios.

-Eso no es lo que yo quiero decir y tú lo sabes. ¿Qué es lo que opinas de ella?

-No la conozco lo suficiente como para darte una respuesta apropiada.

Julieth lo observaba con atención.

-¿Ex fumador?,

Nick sonrió con timidez.

-Se nota ¿no?

-Sólo a los ojos de otro fumador de tres paquetes diarios. Hace dos años que lo dejé y volví locos a mis amigos durante un tiempo -tomó un sorbo de café-. _____ y yo somos amigas desde que íbamos al jardín de infancia, y creo que los dos os llevaríais muy bien.

-¿De verdad va a ir _____ al partido? –preguntó con cierta preocupación.

La sonrisa de Julieth fue amplia y cálida.

-Irá.

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-Sí, Simon, te estoy escuchando.

_____ miró hacia el techo. Su agente, Simon, era un hombre tremendamente aprensivo y su pesadilla más angustiosa era la forma tan despreocupada en que ______ llevaba su negocio, y estaba reprendiéndola por ello. _____ estaba frente al espejo e hizo una mueca espantosa.

-Simon, no te preocupes. Yo me ocuparé de todo. Aunque la mueca que desfiguraba la cara de ______ fuera más espeluznante que la de cualquiera de los monstruos de las películas de terror, su voz era cantarina y suave.

-¿Y quién me lo asegura? -se inquietó Simon.

-Yo. Te prometo que me reuniré con esos adorables ejecutivos del sindicato de diarios, los envolveré con mis encantos y los convenceré que Fritzi sería un suplemento maravilloso para sus ediciones de los domingos.

_____ se inclinó hacia delante, acercándose más al espejo para tocarse lo que le había parecido un pequeño grano en la barbilla.

-Si sigues haciendo eso, te quedarás bizca para siempre -le advirtió Marian.

-¿Me estás escuchando? -preguntó Simon con voz quejumbrosa.

-Sí, Simon, te oigo fuerte y claro. Mira, cariño, ahora tengo que irme. Llámame cuando lleguen y arreglaremos una reunión. Y no te preocupes: te prometo que me portaré bien.

-¡_____, tenemos que hablar de esto!

-No es necesario, Simon. Ni siquiera sabemos si van a venir o no. Hasta luego, Simon -colgó el teléfono-. Necesita tranquilizarse.

-¿Entonces por qué trabajas con él? –preguntó Patrick.

-Porque es el mejor en este negocio.
- _____ ¿te has dado cuenta que no has hecho nada con las cintas de vídeo que te regalé? -le dijo Marian, de cuclillas junto al vídeo-. Todavía tienen la envoltura de plástico. .

______ deseó haber escondido las cintas de ejercicios que su madre le había ido regalando durante años.

-No tengo tiempo.

-Pues deberías encontrarlo. Sólo necesitarías entre quince y veinte minutos para hacer algunos ejercicios. Ya sabes que es difícil para una mujer estar en forma a partir de los treinta.

Antes que ______ pudiera contestar a su madre, alguien llamó al timbre de la puerta.

-Hola, Julieth -dijo alegremente al encontrarse con un rostro amigo.

-No te interrumpo a mitad de tu trabajo ¿verdad?

-No, qué va. Entra.

Julieth entró, pero se detuvo a un paso de la puerta al ver a Suzi sentada en el sofá, acariciando el aire con la pata y maullando.

-Si yo estuviera en tu lugar, llevaría a Suzi a un psicólogo para gatos. Tiene los nervios de punta la pobre.

-No es la única que tiene los nervios de punta -murmuró _____ -. ¿Te apetece una taza de café?

-Buena idea - Julieth se sentó en el mostrador que separaba la cocina del salón-. ¿Tienes planes para el sábado?

-No, aún no.

-O sea, que Jasón no te ha llamado desde vuestra fantástica cena ¿eh?

_____ le había contado la historia por teléfono al día siguiente.

-Todavía no -contestó, tendiéndole su taza de café.

- ______, seamos sinceras: tú querido Jasón actuó como un cretino de primera clase. ¡Incluso pretendió que despidieran al pobre camarero! Sacó una cena gratis, y estoy segura que, además, se las ha arreglado para sacar algo más de todo aquel asunto.

____ miró por encima del hombro de Julieth a sus padres. Aún no podía terminar de creerse que no hubieran tenido nada que ver, y no dejaba de preguntarse si no habría una especie de liga de padres fantasmas que se dedicara a guiar a sus hijos descarriados hacia el buen camino.

-Vamos a reunimos unos cuantos el sábado por la tarde para echar un partido de softball y luego ir a cenar unas pizzas. Las otras veces que has venido con nosotros te lo has pasado muy bien.

-No sé... ¿Y si llama Jasón?

Julieth dejó su taza sobre el mostrador con un golpe seco.

-¿Qué? ______, estás perdiendo tu personalidad. Jamás habías permitido que un hombre pasase por encima de ti de la forma que se lo estás permitiendo a Jasón. La ______ que yo conocía le habría mandado a freír espárragos hace siglos - Julieth suavizó el tono de voz-. Cariño, sé lo mucho que Craig te hizo sufrir y que la muerte de tus padres fue un duro golpe para ti, pero si te casas con Jasón lo único que vas a conseguir es hacerte aún más daño. Tienes que ser sincera contigo misma: te has pegado a él porque era exactamente el polo opuesto a Craig.

-Créeme, Julieth; sé lo que me hago –contestó _____ con una sonrisa que suavizó sus palabras.

Ella suspiró. Era el momento de cambiar de tema.

-Entonces ¿vas a venir a jugar con nosotros el sábado?

-No lo sé. ¿Quién va a ir?

-Los de siempre. Bueno, esta vez viene el Doctor Jonas.

continuara!!!!!!!!!!!!!!!!!11

Sean felices mis niñas
sorry por haber tardado pero todo el dia estuve ocupada fuera de mi casa y ahora es que acabo de llegar!!!!!!!!
gracias por sus comentariosss
besossss!!!!!!
COMENTEN!!!!!!!!

siguela me encantaaaaaaaaaaa
tiene que ir el sabado para encontrarse con el doctor sexy jajajaja
que vieja tan testaruda ahi amarrada al chocante ese jajaja
siguelaaaaaaaaa
y pronto plisssssssss

Si vaa el doctor sexyy!
tiene que ir y tienen q encontrarsee!
me encantaa!
siguee! xD

wara es q la dejaste en la mejor partee!!

Hola Ivana! Soy Rudy!!

y por favor Siguelaa!! me volvi a obsecionar con una nove tuya!!
SIGUELAA :D
aprovecha q ya salimos de vacaciones!! :D

N&J (Miér Dic 15, 2010 9:37 pm) escribió:wara es q la dejaste en la mejor partee!!

Hola Ivana! Soy Rudy!!

y por favor Siguelaa!! me volvi a obsecionar con una nove tuya!!
SIGUELAA :D
aprovecha q ya salimos de vacaciones!! :D

MI AMORRRRRRRRRRRRRRRRRR!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!1 :D
crei que nunca comentarias jeje
ahhhhhhhhhhhhhhhh y es tu primer coment jeje
mas cool!!!!!!!!!
si no fuera por ti jamas hubiera leido esta nove ni la estuviera subiendo eh eh :D

SIGUELA
SIGUELA....PORFIS SIII.... :D

El tono excesivamente casual de Julieth no pasó desapercibido.

-La última vez que intentaste esa táctica conmigo fue en el baile de despedida del último curso. Tú querías ir con Neill Harris y necesitabas alguien que fuese con su primo.

-Neil me dijo que su primo era tan guapo como una estrella de cine -se defendió Julieth entre risas.

-¡Igualito que el Fantasma de la Ópera! –añadió _____ riéndose.

-No sé qué habrá sido de él -se preguntó Julieth.

-Volví a verlo una vez -contestó ______ -. ¡En los dibujos animados!

-Esto es lo que de verdad echo de menos -le dijo Marian a Patrick-. Siempre se lo han pasado de maravilla juntas. Me encantaría verlas casadas a las dos.

-No te preocupes también por Julieth, Marian. Sus padres están aún vivitos y coleando y ya se preocuparán por ella. Nosotros ya tenemos bastantes problemas con ______.

-Al menos Julieth nos está ayudando inconscientemente. ¿La has oído decir que el Doctor Jonas va a estar en el partido del sábado?

-Vamos, _____, sabes que te apetece ir -presionó Julieth-. Además, si Jasón llama y no estás en casa, se dará cuenta que no estás siempre a su disposición. No le vendrá mal preocuparse un poquito por saber dónde estás y con quién.

_____ se echó reír y levantó las manos en alto en señal de rendición.

-Está bien, de acuerdo. Iré.

-¿y no será que querías dejarte convencer porque Nick Jonas va a estar allí? - Julieth cogió su taza y se acercó al fregadero para aclararla-. Me voy.

-Supongo que el Doctor Jonas va a ir para conocer gente del hospital.

-Le dije que tú ibas a ir -contestó Julieth cuando ya estaba en el corredor.

_____ la miró con los ojos abiertos de par en par.

-¡Lianta, más que lianta! ¡Pues ahora te vas a fastidiar; porque no pienso ir! -dijo ______ cerrando de golpe la puerta
.
-Sí que irás -continuó Julieth desde fuera-. Porque tienes tantas ganas de verlo como él a ti.

_____ dio media vuelta, sabiendo lo que se iba a encontrar: un par de sonrisas maliciosas.

-Siempre he sentido debilidad por esa chica -comentó Patrick, conectando el televisor en su adorada cadena deportiva.

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Nick estuvo toda la semana dándole vueltas a la cabeza con el dichoso partido. Cuando Julieth se le acercó el viernes por la tarde para recordárselo, intentó buscar una excusa en ese instante para no ir, pero no se le ocurrió nada, así que se limitó a asentir.

Unas cuantas cajas llenas con Dios sabe qué seguían inundando el salón de su apartamento mientras Nick se vestía. Una última mirada a aquella habitación tan desordenada fue suficiente como para hacerle salir corriendo. Llegó enseguida al campo, donde ya había mucha gente.

-No pienso quedarme con Cathy de ninguna manera -decía Dennis en voz alta.

-¿Y puede saberse por qué? -aulló la enfermera rechazada.

-Hace tres años que no bateas ni una sola pelota, esa es la razón. Y no quieres estar en el campo porque temes coger una bola y romperte una uña.

-Cuando te pongas enfermo, conseguiré que te pongan en mi planta.

-Está bien, me quedaré con Cathy -aceptó Jay, el capitán del otro equipo-. Pero entonces exijo a _____ como premio de consolación.

-¡De ninguna manera! ¡Es nuestra mejor bateadora! Quédate con Julieth o Sheryl a cambio.

-Quiero a ______.

Los dos hombres se miraron ceñudos, nariz contra nariz.

-¿Por qué no lo echáis a suertes? -sugirió _____ -. Al fin y al cabo, esto no es más que un juego, chicos, no el debate sobre el estado de la nación.

-Es una buena idea -dijo Nick que acababa de llegar a la altura de _____ -. ¿Por qué no probáis con pares o nones? Jay, elige.

-Nones.

Los dos hombres escondieron una mano a la espalda y sacaron un cierto número de dedos. El total resultó ser de seis, y Dennis masculló algo entre dientes.

_____ miró a Nick.

-Ésta es la primera vez que una de sus discusiones se soluciona tan rápidamente.

Él intentó mirar a cualquier parte menos a aquella mujer vestida con pantalones cortos color caqui que dejaban al descubierto un par de piernas magníficas, y una camiseta color naranja brillante con un dibujo de Fritzi. Llevaba el cabello recogido en una coleta bajo una gorra de béisbol y unas zapatillas de deportes desgastadas. En resumen, estaba absolutamente adorable. Pero él jamás habría tenido el valor de reconocerlo en voz alta.

_____ se inclinó hacia él, y en voz baja le comentó:

-He oído que prácticamente han tenido que arrastrarte hasta aquí.

Algo en aquel rostro tan alegre le hizo sonreír.

-Pataleando y gritando.

-Nick ¿vas a jugar? -le gritó Dennis.

Él asintió ausente, con la atención aún centrada en ______.

Dennis sonrió abiertamente, levantó los ojos hacia el cielo y murmuró:

-¡Gracias, Dios mío!

-Parece que vamos a estar en bandos diferentes -musitó _____ -. ¿Por qué se ha puesto tan contento Dennis?

-Probablemente porque he ido a un colegio donde se jugaba el béisbol como deporte de reglamento.

-¡No me digas! -exclamó con una sonrisa.

-También era un buen bateador.

Nada le gustaba más a _____ que un reto.

-Vamos a aplastaros.

-¿Quieres hacer una apuesta privada?

-El perdedor tendrá que comer anchoas en la pizza.

-¿y si a mí me gustan las anchoas en la pizza?

-A nadie en su sano juicio pueden gustarle.

-¡Vamos, _____! -gritó Jay.

_____ echó a correr, lanzando un beso por el aire en dirección a Nick.

-Les pediré para ti doble ración de anchoas.

-Algo me dice que mi amiga te está trastornando -murmuró Julieth al oído de Nick.

-¿Trastornando?

-Sí... fascinando, interesando, todas esas cosas. Y tú ya has superado el primer obstáculo.

-¿Obstáculo?

-En condiciones normales no concedería a un Doctor más de cinco minutos de atención, y en tu caso no sólo te ha dado más de cinco minutos, sino que ha hecho una apuesta contigo. ¡Me encanta ser el cerebro de todo esto! -concluyó con una risilla malévola mientras entraba a ocupar su posición en el campo.

Nick no dejó de observar ni por un momento a _____. Estaba muy relajada, balanceando el cuerpo de lado a lado, pero no demasiado; justo lo suficiente para que él no pudiera apartar los ojos de ella. Estaba tan absorto que no se daba cuenta ni siquiera de los gritos de ánimo de los dos equipos.

-¡Eh! ¡Venga! ¡Bate, bate, bate, bate...!

-¡Chicas, Hank acaba de quitarse la camiseta! -un coro de silbidos siguió el aviso.

Nick se echó a reír.

-¿Siempre es así?

-Qué va. Normalmente somos mucho más salvajes -contestó Dennis-. Una vez vinimos aquí hacia media noche para echar un partido rápido después de atender a unas cuarenta víctimas de una colisión múltiple. Trajimos latas de cerveza que pronto hicieron efecto. ¡Eso sí que fue un partido!

-¿Cuántos perdisteis? -preguntó con voz serena.

-Cinco niños y siete adultos -Dennis agitó la cabeza para disipar aquellos recuerdos-. Esa es la razón que no entienda cómo eres capaz de trabajar en urgencias todo el tiempo. Es como si eso fuera lo único que se ve allí: el dolor y la muerte.

-También tiene sus ventajas. Ayer salvé un bebé.

-Sí... supongo que no queda más remedio que mirarlo de esa forma.

Nick podía comprender fácilmente el estado de ánimo de su compañero. Quemarse era algo muy corriente en la medicina de urgencias. Muchas veces él había estado a punto de quemarse también. Incluso aquel mismo sábado se encontraba tan cansado que había pensado en no asistir al partido y quedarse en casa para descansar. Pero todo lo que tenía que hacer en aquel momento era mirar a ______ Cassidy para sentirse lleno de energía.

continuara!!!!!!!!!!!!!!!!!
espero les gusteeee
COMENTEN y mas tarde la sigo!!!!!!!!!!!!!

me encatooooooooo
wwaauuu nick me encanta enserio necesito encontrar un doctor como el jijiji es encerio jajaja
sube otro cap plisssssss
amo tu noveeee
siguelaaaaaaaaa

arrrrrg
hasta antes de leer esta nove, odiaba a lso medicos...
(y los sigo odiando, excpeto al doctor Jonas [waa eso suena tan bonito])
ivanita hermoza siguelaaaaaaaaaaa

hola!!..NUEVA LECTORA!!*
soy fabiana..me puedes decir fabi*
y M E * E N C A N T A* T U * N O V E
¡ S I G U E L A! :)
------------------------------------
soy de V E N E Z U E L A * :happy:

woww!! mi parte favoritaa!!
definitivamente el concepto de doctor cambio con esta adaptacion!!

SIGUELA plz!! :D