"Espíritus Libres" (Nick y Tu) Adaptación.

AQUI ESTOYY ESPERANDO CAP SHALALALA

MISSSSSSSSSSSS AMORES
HE VUELTOOOOOOOOOO
Feliz Navidad!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! jeje creo que me atrase un poco pero lo que vale es la intencion
espero que santa les haya traido muchos regalosssssss!!!!!!!!!!!!!!! y la hayan pasado cool!!!!!!
ME EXXTRAÑARON??? :( :)
ya les subo lo que les prometi
muchas gracias por sus comentariosssssss
besitossssssssssssss

_______ echó un vistazo a los cajones. La mayoría estaban vacíos, a excepción de algunos utensilios básicos y de una caja con cuchillos, tenedores y cucharas de plástico.
-Jonas, esta vista es francamente desoladora -dijo, levantando los ojos hacia él justo a tiempo para verlo sonreír-. ¿De qué te ríes?
-Me gusta que me llames Jonas.
-Pues bueno Jonas, manos a la obra.
_____ echó un vistazo a su alrededor.
-Lo mejor será empezar por el salón. Menos mal que las cajas están marcadas. La última vez que me mudé, embalé todo sin acordarme de escribir el contenido de las cajas, así que después las cosas del baño aparecieron en la cocina y las cosas de dibujo en el dormitorio -con un simple movimiento de la muñeca abrió en un instante todas las cajas. Y con la misma rapidez, sacó varios vasos y una escultura de forma inidentificable.
-Esto, a la basura -dijo Nick, cogiéndole la escultura de entre las manos y tirándola a la papelera.
-¿Por qué la tiras? Parece bastante cara, aunque sea más fea que un pecado.
-Ha sido cara en muchos más sentidos de los que te puedas imaginar.
_____ lo miró durante unos instantes antes de continuar con la caja.
-Cuando Craig y yo nos separamos, rompí una vajilla entera. Empecé por las tazas, luego seguí con los platos de café y los de postre. Cuando llegué a los platos hondos, ya me sentí mucho mejor, pero fueron los platos llanos los que me hicieron sentirme a las mil maravillas. Romper platos es el mejor ejercicio de relajación que puede hacerse.
-¿Por qué? -preguntó él con toda atención.
-¿Y por qué no? Era una vajilla ostentosa y cara, muy del estilo de Craig, y quería quedársela, pero yo me negué -un resplandor divertido iluminó el azul pálido de sus ojos—. Sé que fue una niñería, pero me ayudó a tranquilizarme. Cuando Craig se enteró no pudo dejar de gritar. Pensar en lo que le había costado le revolvió el estómago, y ver su rostro congestionado y las venas hinchadas que amenazaban con saltar del cuello hizo que valiese la pena. La presión arterial debió disparársele aquel día.
Nick no podía dejar de sonreír.
-Eres tremenda, _____. No me gustaría nada ser tu enemigo.
-No suelo ser tan mala, pero aquello fue un ajuste de cuentas - _____ sacó un mantel y unas servilletas-. Esto es aburridísimo, Jonas. ¿Es que sólo te gusta el color beige?
-El beige combina bien con todo.
-Pues parece ser que yo me he cruzado en tu camino para alegrarte la vida -comentó ella mientras abría la caja siguiente.
-Y yo diría que estás haciendo un trabajo excelente -contestó él.
_____ se detuvo un instante.
-No suelo reaccionar de esa manera con hombres que apenas conozco -susurró.
Nick apartó su cabello y acarició suavemente su nuca.
-No he creído que lo hicieras, pero me encanta que fuese yo el elegido.
_______ se dio la vuelta, pero Nick siguió apoyando la mano en su nuca. Era una presión confortable y que ella no quería perder, y en aquel instante se preguntó qué opinarían sus padres de esa situación. ¡Conociendo a su madre, estaría ya pensando en el menú de la boda!
-No lo comprendes, Nick. Eres médico.
Nick tuvo que morderse el labio inferior para no sonreír, ya que ella había hablado completamente en serio.
-Si, eso es lo que dice mi diploma.
-Los médicos sois inestables –protestó-. Creéis que la medicina es una forma de conocer mujeres y pasaros la vida de fiesta en fiesta. Sólo tienes que recordar a tus compañeros. Sabes muy bien que estuvieron allí hasta que cerraron el restaurante. Jeff, por ejemplo, estaba atacando a la camarera nueva con su consabido «Confía en mí: soy médico».
Nick la abrazó de forma más confortable que apasionada.
-¿Recuerdas lo que te he dicho en la cocina? -murmuró con suavidad en su oído-. Yo no soy Craig Sommers. Soy yo, Nick Jonas, un cirujano de traumatología que se encuentra día tras día con toda clase de miembros de la raza humana en urgencias. No puedo recordar cuánto tiempo hace desde que asistí a la última fiesta. La noche pasada fue mi primera salida en todo este año. Mi mundo está constituido por accidentes de automóvil, heridas de bala, navajazos, y a veces alguna embarazada que no tiene tiempo de llegar a maternidad. Mi trabajo no siempre es agradable, ________. Mi dosis diaria de realidad es mucho más grande que la que muchas personas estarían dispuestas a soportar.
_______ se quedó envuelta en sus brazos, preguntándose si su otra mujer se habría dado cuenta del hombre tan especial que había dejado escapar.
-Entonces no cabe duda que necesitamos salir de compras -dijo al fin.
-¿Compras?
_____ asintió.
-Si ese es tu único mundo, necesitas darle color a esta casa -retrocedió unos pasos y cogió la navaja. Abrió rápidamente unas cuantas cajas más y encontró lo que había esperado-. ¿Cuántas cajas más tienen libros?
-Casi todas las que faltan por abrir.
-Eres tan perverso como yo -dijo. Y cogiendo su bolso, añadió-. Vámonos.
-¿Puedo cambiarme antes?
-Te doy diez minutos.
Mientras se dirigía a su habitación, oía las murmuraciones de ______ sobre colores primarios y tonos pastel.
Nick aprendió enseguida que _____ no creía en hacer las cosas a medias. Una vez se subieron al coche, le indicó el camino hacia un centro comercial, pero no al que quedaba más próximo sino a otro más grande que quedaba bastante más lejos.
-En ese hay la clase de tiendas que necesitamos -explicó una vez cogieron la autopista-. Y si lo que he visto en esas cajas es todo, me temo que vamos a tener que visitar muchas.

Nick sonrió al ver el brillo de sus ojos.
-No te olvides que soy un pobre y humilde médico.
-No pretendo sobrecargar tu tarjeta de crédito. Sólo quiero añadir algo de color a tu casa -contestó ella con suavidad, recordando las paredes claras de su salón e imaginando que las de su dormitorio debían ser por el estilo-. Todo el mundo necesita color en su vida.
-¿Por eso dibujas tus tiras con esos colores tan brillantes? -preguntó.
-El color hace la vida más digerible –explicó-: Puedo soportar casi todo si hay color a mí alrededor.
Nick dio el intermitente al coger la salida que _____ le había indicado.
-¿Y cómo es que vas vestida con un azul tan pálido que es casi blanco?
-Porque hace juego con el color de mis ojos —contestó ella con una sonrisa infantil-. El otro día leí en un artículo de periódico sobre mí en el que se decía que tengo unos ojos azul exótico, y he de admitir que eso de exótico me gustó mucho. Nunca había pensado que tuviera algo así. Tengo una boca demasiado grande...

«Sensual»
-pensó él.
-... unos ojos demasiado pálidos...
«Maravillosos».
-... mi nariz es demasiado larga...
«Elegante».
Ajena a los pensamientos de Nick, ______ le indicó que se dirigiese a una plaza de aparcamiento vacía y se bajó del coche casi antes que se hubiera detenido del todo.
-Prepárate para comprar hasta que caigas exhausto -le avisó ella.
-Algo me dice que eres una compradora incansable.
-Sólo si llevo un propósito claro, y tú eres la mejor excusa que me ha surgido desde hace mucho tiempo - ______ se agarró de su mano y lo condujo hasta la puerta de entrada-. No te preocupes, hay una de las tiendas en las que lo encontraremos casi todo. Está en el tercer piso.
Enseguida llegaron a una tienda en la que anunciaban «Todo para el hogar».
-Bien. Vamos a empezar por la cocina.
Nick echó un vistazo a los manteles que colgaban en las perchas.
-No sé qué tamaño tiene mi mesa.
-La he medido yo mientras te vestías - _____ acarició un mantel de fondo blanco estampado con brillantes tulipanes rojos, amarillos y azules-. Es bonito, pero no es tu estilo. Nada de flores.
-Tendría que comer con gafas de sol -comentó él, mientras miraba otro mantel de fondo beige y con dibujos verdes y lilas, pero _____ se lo arrebató de las manos.
-Nada que se parezca al beige.
_____ se dirigió a otro estante lleno de manteles. Sabía qué estaba buscando: algo alegre y brillante que saludase a Nick al volver a casa después de esas noches de batallar contra la muerte. Pinceladas de color que le saludasen por la mañana al levantarse. Cuando le había hablado en su casa de aquel modo, ella había sentido ganas de llorar, pero sabía que lo que él necesitaba eran risas y alegría.
Y sin pensar en el significado real de sus palabras, murmuró:
-Me necesita. Nick me necesita.

Fin Cap 8

Capitulo 9

-Señorita Cassidy, tengo que admitir que tiene usted un toque mágico para transformar apartamentos sosos y prácticos -Nick miró a su alrededor-. Has hecho un auténtico milagro.
El color resplandecía por todos los rincones, asaltando sus ojos desde los cuadros que colgaban en las paredes, desde los cojines dispuestos sobre el sofá y del jarrón rechoncho y multicolor que habían colocado sobre la mesita. La cocina lucía paños nuevos y un cuadro coquetón con todos los animales de la jungla. El baño se adornaba con toallas nuevas y una alfombra a juego colocada delante de la bañera. ______ no había visto el dormitorio de Nick pero no dudó en comprar un edredón y unas sábanas nuevas estampadas en los colores de una puesta de sol en el desierto. Pero la cosa no se quedó ahí. Cuando volvieron de comprar, le puso a abrir cajas mientras ella colgaba los cuadros, vestía la mesa con el mantel nuevo y encontraba un sitio para la planta que le había regalado aquella misma mañana.
El orgullo de _____ era evidente en su rostro al examinar los cambios.
-Esto es lo que yo quería ver -murmuró.
-¿Y qué es lo que querías ver, ______?
-Colores brillantes y vivos. Será lo primero que veas cuando entres en casa, y te relajarán o te darán vigor según lo necesites.
Nick no pudo evitar sonreír.
-Crees de verdad en ello ¿no?
-Por supuesto que sí. El color juega un papel muy importante en el bienestar de una persona. ¡Así me sentía yo de mal en la sala de urgencias! Todo ese blanco... ¡puaj!
-Eso es porque estuviste en la sección que aún no han pintado. Las demás las han puesto en un azul muy suave, casi el color de tus ojos.
______ no era una persona que acostumbrase a volverse atrás, pero pensó que había llegado el momento de retirarse. El beso de Nick aún persistía en su memoria con espeluznante precisión.
-Creo que ya he hecho bastante daño por hoy -dijo, dando media vuelta e intentando coger el bolso para huir.
-Espera un momento, por favor. Lo menos que puedo hacer es invitarte a cenar para agradecerte el trabajo que has hecho.
-No es necesario -contestó ______ sin atreverse a mirarlo.
-Sí. A no ser -Nick dudó un instante-, que tengas otros planes.
-No tengo otros planes, pero me gustaría cambiarme primero.
-¿Qué te parece si te recojo dentro de una hora?
-Perfecto. Hasta luego.


-¿Ese médico de urgencias tan agradable va a invitarte a cenar? ¡Qué bien! -exclamó Marian, siguiendo a _____ hasta su habitación-. ¿Cuándo lo has visto? ¿Qué te vas a poner?
-Lo he visto hoy. He ido a llevarle una planta para su casa.
Necesitaba mantener un poco la calma, y encendió un cigarrillo ante la mirada de desaprobación de su madre.
-¿Has tardado todo un día en dejarle una planta? -preguntó Patrick desde la puerta muy en el papel de padre suspicaz.
_____ abrió las puertas de su armario y rebuscó entre las perchas.
-No. Estuve ayudándole a decorar su apartamento. ¿Dónde están mis pantalones verdes? -murmuró, empujando las perchas de acá para allá. Estaba tan afanada en la búsqueda que no se dio cuenta de la mirada cómplice que intercambiaron sus padres-. Tendrían que estar aquí.
-A tu derecha -señaló Marian.
_____ sacó la percha y eligió una blusa de seda blanca con un pronunciado escote. Después sacó un par de zapatos rojos y un bolso a juego.
-Me gustaría vestirme sola.
-Ya me voy -dijo Patrick, desapareciendo casi en el sentido literal de la palabra.
-Supongo que debería estarte agradecida porque no te deshagas en una nube de humo o de llamas, o algo por el estilo - ______ miró al punto donde su padre acababa de estar.
Marian siguió sentada en la cama.
-Supongo que también quieres que me vaya yo.
Lo había dicho con un aire tan triste que ______ no pudo soportarlo, y se sentó a su lado.
-No, mamá; es que los dos actuáis como si Nick fuese a convertir vuestros sueños en realidad. Pero sólo vamos a salir a cenar porque quiere darme las gracias por haberle ayudado a decorar su apartamento.
-No querrás seguir saliendo con Jasón después de lo que ocurrió anoche.
-No. Creo que ayer aprendí algo sobre él que siempre quise ocultarme. Incluso me pregunto si no habrá estado todo este tiempo detrás de mí para conseguir mi cartera. Estoy empezando a dudar que haya un hombre en este mundo que me quiera por lo que soy.
Marian la abrazó como cuando era pequeña.
-Yo sé que ese hombre está ahí fuera en alguna parte.
______ sonrió y apoyó la cabeza en el hombro de su madre.
-¡Te he echado tanto de menos! A veces levantaba el auricular del teléfono para llamarte, y después me daba cuenta que ese número de teléfono ya no era el vuestro -su risa escondía las lágrimas que amenazaban con escaparse de sus ojos-. ¿Sabes que estuve a punto de volverme atrás con la venta de vuestra casa? No me gustaba la idea que unos extraños viviesen allí.
Marian le dio unos golpecitos consoladores en el hombro.




-¿Cómo son los nuevos dueños? Espero que no hayan talado el árbol del jardín delantero -murmuró-. Daba una sombra estupenda durante el verano, aunque tu padre se quejara de las hojas que tenía que recoger en otoño.
-Tienen dos niños y un perro. Son una familia típicamente americana, de las que a ti te gustan - ______ estaba disfrutando de sentirse de nuevo en los brazos de su madre-. Cuando me enteré que papá y tú habíais muerto, no podía dejar de pensar en la cantidad de cosas que hubiera querido deciros...
-¿Como cuáles, cariño?
-Por ejemplo que había conseguido entender por qué me castigasteis cuando volví a casa con cuatro horas de retraso aquella vez que salí con Ron Thomas, y aquella otra vez en que nos fuimos de viaje por Arizona y nos perdimos por aquellos pueblecitos. Ahora sé que actué como una chiquilla porque tenía catorce años, pero debí estropearos las vacaciones.
-No _____, no nos las estropeaste. Nos dimos cuenta perfectamente que pretendías hacernos creer que lo estabas pasando fatal perdida en Arizona, cuando en realidad lo estabas pasando bomba. Cuando me di cuenta que me habían separado de ti, no podía dejar de pensar que ya no volvería a tener la oportunidad de decirle a mi hija lo mucho que la quiero. Eso era lo que más me dolía.
_____ hizo un esfuerzo por tragarse las lágrimas.
-Ni siquiera pude despedirme de vosotros. Sólo hablamos por teléfono porque yo creía estar demasiado ocupada como para acercarme a vuestra casa.
-Entonces no olvidemos lo afortunados que somos de tener esta segunda ocasión de decir algunas cosas que no pudimos decir en su momento.
-Sí, mamá –contestó-. ¡Dios mío! No me había dado cuenta de lo tarde que es -exclamó, pero sin hacer un solo movimiento para separarse de su madre.
-Además tienes que ponerte lo más guapa posible para Nick.
-Mamá... papá y tú no estaréis influyendo de alguna manera entre Nick y yo ¿verdad? -preguntó con voz recelosa»-. Es un hombre magnífico y si se os ocurriera utilizar alguno de los trucos que empleasteis con Jasón...
- ______, ni siquiera se nos ha pasado por la imaginación. Además, su tía Chloe no nos lo perdonaría. Ella también espera que él encuentre la mujer adecuada.
_____ salió despavorida hacia el cuarto de baño.
-¡No quiero saber nada más!
Terminó enseguida de arreglarse y aún le quedaron unos minutos de sobra.
-¿Y es el mismo médico que te atendió cuando la conmoción? -preguntó Patrick mientras esperaban-. Me pareció una buena persona aquella noche cuando vino a verte. Parece que se preocupa de verdad por las personas y no por los honorarios que le puedan aportar los enfermos.
-Está fijo en la plantilla del hospital. Su especialidad es traumatología -replicó _____ al tiempo que dejaba el plato de Suzie lleno de comida en el suelo de la cocina.
Cuando sonó el timbre de la puerta _____ dio media vuelta para advertirles una vez más a sus padres:
-Os lo digo en serio: ni un solo truco o llamo a los Cazafantasmas.
-Lo que nos faltaba: encima con chistecitos -murmuró Patrick cuando _____ estaba a punto de abrir la puerta-. Te prometo que nos portaremos bien -dijo rápidamente ante la mirada amenazadora de su hija.
Nick, vestido con pantalón gris y una camisa a rayas azules y grises le sonrió al abrir la puerta.
-Ofrécele algo de beber -sugirió Marian.
-¿Te apetece tomar algo? -preguntó mientras con la mano a la espalda hacía señas a sus padres para que desaparecieran.
-No, gracias. Soy un aguafiestas en lo que se refiere a la bebida. He visto demasiados conductores ebrios entrar en las urgencias del hospital -se disculpó.
-¡Menuda diferencia con Jasón! Ese tipejo parecía disfrutar con exceso del vino -comentó Patrick.
-Se tomó tres copas en la cena y un brandy después aquella vez que vino a casa -comentó Marian.
-Pues entonces espera un segundo que cojo el bolso -dijo ______, intentando disimular y mirando a sus padres con expresión asesina.
-Tienes un apartamento precioso -dijo Nick mientras acariciaba a Suzie que se había acoplado confortablemente en sus brazos, sin preocuparse que la camisa se le llenara de pelos.
_____ no había visto a Suzie en una disposición tan amistosa con alguien extraño. Bueno, en realidad había muy poca gente con la que aquel animal se comportara cariñosamente.
-Gracias. Me vine a vivir aquí después de divorciarme.
Nick apoyó la mano sobre la espalda de ______ al salir del apartamento.
-Espero que te guste la comida mejicana.
-Esa comida siempre le produce acidez de estómago -comentó Marian que había oído la frase de Nick-. Menos mal que siempre ha sabido cómo decirles a los chicos con los que ha salido que no puede soportar la comida mejicana.
-Es una de mis favoritas -oyó decir a ______ a lo lejos.
-Me temo que nos espera una noche bien larga -murmuró Patrick con una media sonrisa.

me encantooooooo
nick es hermoso jaja como siempre
siguela plisssssssss

-Me sorprende que no te hayas comprado una casa -comentó Nick mientras abría la puerta del coche para ______.
-Es lo mismo que dice mi agente, pero todavía no he encontrado nada que me llene, y no quiero comprar una casa simplemente por el hecho de poseer una. Él dice que estoy loca.
-Que diga lo que quiera. Eres tú la que tienes que vivir en ella.
______ se sintió satisfecha con aquel comentario.
-Tienes razón.



-¿Cómo buscas la casa? ¿Por los anuncios del periódico o por agencia?
-Como no estoy muy segura de lo que quiero, suelo ver los anuncios de venta de casas en el teletexto de televisión, y así puedo ver imágenes de la vivienda. Lo que me temo es que Suzie, que está acostumbrada a vivir en un apartamento, no sepa adaptarse a una casa con jardín. Y a mamá y papá no creo que les hiciese mucha gracia mudarse ahora que se han instalado tan cómodamente -añadió casi para sí misma.
-¿Perdón? -dijo Nick mirándola brevemente.
-Nada importante. Estaba pensando varias cosas a la vez.
-¿Y eso te ocurría antes de la conmoción?
-Desgraciadamente sí. Me han dicho que es algo que ocurre muy a menudo entre la gente que desarrolla actividades creativas.
-Según me has dicho, dibujar tiras es un trabajo muy duro, así que supongo que tu mente se permite ciertos desvaríos para relajarse.
-Supongo que sí. Además ahora me han pedido que haga un libro de material nuevo. He estado dándoles largas desde hace un año, pero me temo que no voy a tener más remedio que tomar una decisión.
-Me da la impresión que no quieres hacerlo.
-Ya tengo mucho trabajo.
El restaurante que Nick había elegido era bastante grande.
_____ pidió una margarita en primer lugar, con la esperanza que el alcohol atontara su estómago para que no pudiese notar lo que venía después. ¿Por qué demonios no le había dicho que tenía un estómago a prueba de toda clase de comidas excepto de la mejicana? Mientras revisaba el menú, intentó recordar si llevaba pastillas para la acidez en el bolso. Al fin, se decidió por pollo con arroz. Parecía el plato más inofensivo de todos.
-¿Estás disfrutando de tu vida en esta ciudad? -preguntó ______ una vez que el camarero les hubo servido sus bebidas.
-Tanto como puede disfrutar una persona con una jornada laboral de ochenta horas semanales. He conocido una tienda de comestibles y un tinte entre mi apartamento y el hospital y unos cuantos restaurantes de comida rápida -explicó con una sonrisa algo triste.
-Entonces ¿por qué elegiste traumatología si te obliga a llevar un ritmo tan febril?
-Por mi propia satisfacción –contestó-. La medicina traumatológica es un campo relativamente nuevo y... Pero dejemos ese tema. Normalmente los ojos de la gente que me escucha suelen ponerse vidriosos antes de los cinco minutos.
-¿Yo también los tengo vidriosos ya? -preguntó ella pestañeando rápidamente.
-No. Están preciosos.
_____ no supo qué decir. No era la primera vez que le había hecho un cumplido, pero sí era la primera ocasión en que tenía la sensación que la otra persona había sido sincera.
-Debe ser muy duro trabajar en urgencias.
-Sí, normalmente hay que manejar varios casos al mismo tiempo, lo que te somete a una gran tensión.
-Tú eres tan tranquilo, tan relajado que se me hace difícil imaginarte en una situación tan tensa.
_____ tomó un sorbo de su margarita y se llevó una patata a la boca. Nick hizo lo mismo, pero antes de comérsela la sumergió en salsa picante.
-Es mejor así –explicó-. Quizás es esa actitud tranquila lo que me ayuda a no perder la calma. Mientras los demás corretean por las salas yo camino despacio, y esa actitud es algo que se refleja en todas mis cosas. No tienes más que ver cómo era mi apartamento antes que alguien entrase con cubos de colores para iluminarlo.
-Oye, Jonas, que no hay nada de malo en ser una persona comprometida con el trabajo -dijo _____ alargando un brazo para apoyar su mano sobre la de él-. Y además ya te he dicho antes que yo no te veo ni soso ni aburrido, así que deja de pensar en eso ¿de acuerdo?
- ______ ¿no hay nada que te deprima?
-Sí: ver a mi exmarido. Eso es algo que me deprime inmediatamente.
-¿Tan malo fue su matrimonio?
-Lo peor era que ese hombre tenía una arrogancia infinita. ¿Has visto alguna vez a la enfermera que atiende su consulta? Se parece al ama de llaves de «Rebeca». ¿Sabes por qué escogió una enfermera de esas características? Pues porque temía que una enfermera joven y bonita acabaría enamorándose de él. Con Irene no tiene que preocuparse de esos temas. ¡Eso sí que es ser vanidoso!
-Hay que admitir que es un tipo muy atractivo.
-Y él lo sabe. Creo que lo que más repulsión me causa de Craig es que es el equivalente masculino de una ramera pero no lo aparenta –exclamó-. Al menos podría tener algo de barriga y arrugas en la cara. Pero siempre parece que acaba de salir del gimnasio.
-No te preocupes. Ya le tocará. _____ miró el plato que el camarero acababa de dejar frente a ella con la advertencia que estaba quemando.
-Ya no lo amo, pero no me importaría que sus pecados afloraran de una vez por todas a su rostro. Sí, puedo verlo. Profundas grietas surcando sus mejillas -rebuscó en el bolso y sacó un lápiz, y una servilleta que cogió de una mesa vacía al lado de la suya, garabateó con rapidez-. Unas cuantas cicatrices, de las más horripilantes... del estilo de las de Frankenstein.
Nick la observaba hipnotizado por la facilidad con que las imágenes salían de su lápiz.
-¿Y verrugas?
______ se mordía el labio inferior mientras dibujaba.
-¡Por supuesto!
Y le tendió la servilleta con el rostro apenas reconocible de Craig Sommers. Sus rasgos estaban allí, pero desfigurados por varias cicatrices, verrugas, un ojo bizco, la boca ladeada en una mueca infernal y el cuello cubierto de pelos gruesos y tiesos como los de un cerdo.
-Tienes un talento natural para los comics de terror.



_____ movió nerviosamente la nariz.
-Si este dibujo cayese en manos de Julieth, lo pondría en el boletín del hospital para que todos lo viesen.
Nick cogió un trozo de tortilla y lo mezcló con carne de cerdo, hortalizas y salsa, envolviéndolo después como si fuese un rollito. Y acto seguido le dio un mordisco que acompañó con un gemido de placer que recorrió la espina dorsal de _____ de arriba abajo. Se preguntó si gemiría del mismo modo cuando hiciese el amor. En un intento de disimular, tomó un mordisco de pollo y estuvo a punto de toser con la explosión de especias que invadió su garganta. Tuvo que hacer un enorme esfuerzo para coger suavemente la copa de agua en lugar de aferrarse a ella y vaciarla de un solo trago.
-¿Demasiado fuerte? -preguntó Nick.
-No -contestó ella casi sin voz-. No, está bien -y para demostrar lo que acababa de decir, tomó otro bocado de pollo con unos granos de arroz en un intento de suavizar el picante, pero el arroz estaba tan fuerte como la carne. Estaba segura que su cara debía estar empezando a ponerse al rojo vivo.
-¿Estás segura que no te resulta demasiado fuerte? -insistió Nick preocupado.
-Para nada -contestó alegremente, cogiendo el tenedor con entusiasmo. ¡Estaba dispuesta a comérselo todo, pasara lo que pasase!
Cuando salieron del restaurante, el estómago de ______ empezaba a lanzar señales de auxilio.
Una vez en el coche, Nick dijo:
-Quiero volver a verte. Ya sé que los médicos no somos precisamente una de tus debilidades, y no tengo ni idea de lo que Jasón Palmer significa para ti, pero si hay una posibilidad de...
-Me gustaría que volviéramos a salir juntos, siempre y cuando tengas presente que no eres ni soso ni gris.
-Alguien me lo dijo tantas veces que terminé por creérmelo.
-¿Una mujer?
-Vivimos juntos, y yo llegué a creer que incluso teníamos un futuro en común, pero ella salía regularmente por las noches para hacer clientes nuevos para su negocio mientras yo pasaba mis escasas noches libres en casa. No soy una persona a la que le gusten demasiado las fiestas y esa clase de cosas. Ella creía que podía poner una consulta privada para ganar más dinero, y como yo no estuve de acuerdo, dedujo que yo era aburrido.
Nick le explicó todo aquello sin atreverse a mirarla.
-Quizás debiéramos presentársela a Jasón. Podrían salir juntos y hacer todos los contactos de negocios que deseen. Incluso podrían hacer apuestas a ver quién es capaz de conseguir más clientes en una sola noche.
-Los rumores decían que ibas a casarte con Jasón -dijo Nick que quería sacarlo todo afuera.
_______ sabía que tenía que ser sincera con él.
-Es cierto, pero las dudas han empezado a crecer últimamente. Y después del episodio de la otra noche... bueno, creo que ya no puedo confiar en él. A mis padres les gustaría mucho oírme decir esto -musitó.
-¿Tus padres?
-A veces pienso en voz alta. Así me imagino que aún puedo hablar con ellos.
_____ suspiró profundamente. ¿Y si le dijera la verdad? ¿La creería o la enviaría a la celda acolchada más próxima?
Nick hizo intención de arrancar el motor, pero se detuvo.
-No tengo horario fijo, _____. Si hay una urgencia me llaman enseguida y siempre tengo que llevar un busca encima. Si quieres que te diga la verdad, me extraña que haya estado tan tranquilo durante todo el fin de semana.
-Pues yo a veces cuando tengo que entregar mi trabajo en una fecha fija y me siento en mi mesa frente a una hoja de papel en blanco, tengo que trabajar veinticuatro horas seguidas hasta que termino. Supongo que eso nos hace semejantes. Habrá momentos en los que tu ausencia me crispe los nervios, pero intentaré comprender... tanto como espero que tú sepas comprenderme a mí.
-Señorita Cassidy, es usted demasiado buena para ser verdad.
Y dicho esto, se acercó a ella y la besó en los labios.

creo que se las deberia dejar alli!!!! 8) :roll:
mm que piensan ustedesssss??? :lol:

Denni ya me asustastes amiga
y no quiero moriar antes de tocar los rizos de nick asi que creo que mejor
subo pero no me mates?? si :( :lol:

en esta parte creo que les dara un poquito de rabia pero mejor lean

Pero no estaba dispuesto a conformarse con un beso rápido y sin complicaciones, sino que la cogió entre sus brazos disfrutando del sabor de su boca. ______ gimió y se acercó más a él, mientras sus manos se deslizaban por dentro de su camisa, convirtiendo un roce suave en una caricia profunda.
-Oye Jonas -murmuró _______ al tiempo que él besaba la base de su cuello-. Estamos bajo las farolas de la calle y cualquiera que salga del restaurante puede vernos. ¿Qué te parece si hiciéramos un pase privado de esta representación?
-Buena idea.
Nick puso en marcha inmediatamente el motor y salieron del aparcamiento con los neumáticos chirriando sobre el asfalto.
-De una pieza, Jonas. Se trata de llegar de una sola pieza -dijo _____ entre risas, acercándose a mordisquear el lóbulo de su oreja.
-Entonces te sugiero que dejes al conductor tranquilo hasta que nos hayamos encerrado en tu apartamento.
Llegaron a casa de _____ en un tiempo récord.
-Me parece que ha llegado la hora de marcharse -anunció Patrick al verlos entrar.
-Buena idea -contestó _____.
Pero si esas palabras contestaban a su padre o iban dirigidas a Nick que acariciaba su espalda, nadie lo supo nunca.
-Oh, Nick -exclamó _______ cuando cayeron entrelazados sobre el sofá.
Rodeó el cuerpo de Nick con sus brazos, arqueando la espalda al sentir que su mano había alcanzado uno de sus pechos y que sus dedos jugueteaban con su pezón hasta endurecerlo como una fruta madura.
-Oigo campanas -susurró ______.
-¿Mm? -Nick se detuvo un instante y se dejó caer, lanzando iracundos juramentos al reconocer aquel sonido metálico que se difundía por la habitación en silencio-. Es mi busca -masculló.
______ no sabía si reír o llorar, y se decidió por lo primero.


-El teléfono está allí -e indicó la barra de la cocina.
Nick se levantó a regañadientes y cogió el auricular para marcar casi a puñetazos el número del hospital.
-Diez coches han chocado en la autopista -explicó unos instantes después-. Necesitan todas las manos disponibles.
-Y las tuyas valen por cuatro. Lo único que te pido es que descanses si tienes oportunidad - _____ se dio perfecta cuenta que el pensamiento de Nick estaba ya en el hospital-. Y si puedes, llámame para saber que estás bien ¿de acuerdo?
-Puede ser muy tarde -dijo él besándola con fuerza.
-No me importa.
Nick se quedó pensativo, como si temiera creerse todo lo que estaba ocurriendo.
-Ésta es nuestra primera prueba de fuego.
-Entonces tenemos que salir airosos -y acercándose a él, le dio un beso que le erizó la piel desde el cuero cabelludo hasta la punta de los pies-. Conduce con cuidado.
-Después de esto, tendré suerte si llego al hospital de una sola pieza.
Y salió con rapidez del apartamento.
-Tengo la impresión que has cambiado de opinión sobre los médicos.
_____ dio un grito y se volvió al oír una voz inesperada detrás de ella.
-¡No vuelvas a hacer eso! -dijo con voz entrecortada.
Marian levantó los brazos en alto.
-De acuerdo. La próxima vez reapareceré delante de ti. Es que estoy muy contenta que hayas encontrado a alguien presentable. Chloe dice que es un encanto -añadió.
-Ese como-se-llame no parecía muy contento que no estuvieras en casa -comentó Patrick, apareciendo al lado de Marian.
-¿Qué tal os ha ido la cena? -preguntó Marian-. ¿Has encontrado algo que no te hiciera polvo el estómago?
_____ apretó los dientes.
-Esto es el colmo -murmuró.
Los avisos que le había estado enviando el estómago estaban empezando a convertirse en auténticos alaridos, y salió disparada hacia el baño, donde se encontró con un frasco de Maalox situado estratégicamente sobre el lavabo. Y sin dudarlo tomó un sorbo directamente del frasco.
-Vas a dejar a ese estúpido banquero ¿verdad? -dijo Patrick desde la puerta-. Hace un rato ha llamado por teléfono y no parecía demasiado tranquilo.
La idea de tener a Jasón tras de ella no le hacía la más mínima gracia. ¡Cómo había podido estar tan ciega! Con la llegada de Nick a su vida tenía muy claro cuál era su decisión respecto a Jasón.
-Mañana escucharé sus mensajes.
Leyó rápidamente el prospecto del jarabe para saber si podría tomarse otra buena cucharada dentro de unos cinco minutos, porque su estómago estaba empezando a arder, y entre eso y sus padres deseosos de averiguar cómo les había ido la cena, supo que le esperaba una noche larga, muy larga.

fin cap 9
la sigooo?????????????? :lol:

Capitulo 10

-¿Que has cenado en un restaurante mejicano? -exclamó Julieth-. _____, sabes de sobra que la comida mejicana te produce quemaduras de tercer grado en el estómago.
Julieth había aparecido en casa de ____ quince minutos antes suplicando una taza de café. Al llegar a su apartamento después de su último turno se había dado cuenta que no le quedaba ni un gramo de café, y ella solía tomar una taza antes de irse a la cama para dormir bien.
-¿Qué estás haciendo? -preguntó Julieth levantando la vista del periódico que estaba leyendo.
-Busco leche -contestó con el cartón en la mano-. Intento acallar mi estómago.
-¡Pero si a ti la leche no te gusta! Además, no te servirá de nada.
-¿Qué quieres decir? Los médicos mandan beber leche a los pacientes con úlcera de estómago.
-Desde hace unos años ya no se manda eso. Antes me has dicho que has tomado Maalox, y eso debería bastar.
-Hace horas que apuré el frasco y las pastillas no me hacen nada.
_____ cogió la cafetera y sirvió una taza de café, y tras dársela a Julieth, metió dos rebanadas de pan en el tostador.
-Hay algo que me intriga muchísimo ¿quién ha sido el caballero que te ha fascinado tanto como para convencerte de comer especialidades mejicanas?
_____ hundió la cabeza en las profundidades de la nevera con la excusa de estar buscando su jamón favorito.
-¿Y qué te hace pensar que estaba con alguien?
-Pues muy fácil. No eres lo suficientemente tonta como para hacerlo tú sola, así que tiene que haber por medio algún tipo al que quisieras impresionar - Julieth detuvo la taza en el aire antes que rozara sus labios-. ¿Nick Jonas?
-¡*******! -exclamó ______ al golpearse la cabeza con la nevera.
-¡He acertado! -gritó Julieth dejando su taza a un lado-. Saliste a cenar con Nick Jonas. Ya me parecía a mí que algo estaba pasando entre vosotros dos. Hacéis una pareja estupenda. Tú tan vivaz y él tan serio.
-Nick no es aburrido -protestó _____ en un tono algo áspero.
Julieth ni siquiera parpadeó ante el ataque.
-Nunca he dicho que lo fuera, aunque es evidente que alguien sí que lo pensó. ¿Por eso tiene esa actitud tan fría? ¿Porque piensa que es una persona aburrida?
_____ necesitaba hablar con alguien y nadie mejor que Julieth para dar rienda suelta a sus sentimientos.
-Anoche me demostró que los hombres pueden ser tan vulnerables como las mujeres en lo que se refiere a sentimientos. Hubo una mujer que le hizo mucho daño, Julieth. Ayer fui a su apartamento para llevarle una planta de regalo, al fin y al cabo, es nuevo en esta ciudad -se defendió.
-¿Tú, una planta? Pero si serías capaz de matar un árbol centenario con sólo tocarlo.
_____ le dirigió una mirada asesina, que muy a su pesar, no tuvo efecto alguno en Julieth.
-Era una planta de seda, pero eso no tiene nada que ver. Su apartamento carecía de color. Nada de nada. Nadie debería vivir sin tener algo de color a su alrededor. Yo no podía dejarlo así, y decidí llevarlo de compras.
Julieth sabía que ______ se rodeaba siempre de mil colores; brillantes lavandas, turquesas y rosas adornaban cada rincón de su apartamento y cada una de sus prendas de vestir. Y le estaba mostrando una faceta que ella desconocía. Para ser una mujer que había jurado no volver a tener nada que ver con un médico, se estaba tomando un montón de molestias para hacer la vida de uno de ellos más agradable. Tuvo que morderse los labios para evitar su sonrisa de triunfo. ¡Lo único que faltaba era que el estúpido de Jasón Palmer desapareciese por completo de la escena!
-¿Y qué pasa con Jasón? Supongo que todo esto significa que vas a mandarlo a tomar viento fresco ¿no?
____ dudó un instante. ¿Cómo iba a ser capaz de contestar aquella pregunta si eso mismo era lo que ella se había estado preguntando durante los últimos días? Jasón había cambiado tanto que no estaba segura que fuese el mismo hombre que ella había conocido e imaginado como marido. Cuanto más sabía de él, menos le gustaba, pero en el instante que iniciaba su respuesta, un ruido interrumpió sus palabras. ¡Peep!
-«____, mira la hora que es, pensé que ya me habrías llamado con tu respuesta. Tengo que hablar contigo lo antes posible», -la voz de Jasón sonaba a lata a través del contestador automático-. «Espero que lo hayas pensado bien, y estoy seguro que tomarás la decisión más inteligente. Por favor, llámame para que podamos empezar con el papeleo. No podemos permitirnos perder ni un minuto más».
Julieth dio media vuelta y miró sin comprender hacia el contestador.
-¿Qué ha pasado? No he oído sonar el teléfono.
_____ también estaba algo aturdida. Sabía perfectamente cómo había ocurrido pero tenía serias dudas que su amiga creyese su explicación.
-Está estropeado y falla mucho últimamente -explicó _____ tímidamente.
-Eso no explica el comportamiento de Jasón al teléfono. El hombre de hielo parecía estar perdiendo la compostura. Si quieres que te diga la verdad, me ha dado la impresión que estaba desesperado. Me alegro que ya no tengas nada que ver con él.
-No pensarías que es de hielo si hubieras presenciado su bronca de hace dos noches.
-¿Bronca? ¿Jasón ha sido capaz de montarte una bronca? ¡Maldito sea! -exclamó dando un golpe con la palma de la mano sobre el mostrador-. ¡Y yo me la he perdido! Es una noticia digna del telediario de las diez.
______ desconectó el tostador y untó las tostadas con mermelada de fresas, las partió en dos y le tendió dos mitades a Julieth en una servilleta.
-Usa un plato, cariño -le riñó Marian.
-Todos los platos están sucios -musitó _______ casi sin darse cuenta.
-¿Y qué? -preguntó Julieth -. Hemos usado las servilletas como platos cientos de veces, y nunca me he quejado. Menos mal que nuestras madres no pueden ver los malos hábitos que hemos estado cultivando durante años.
-¡Oh! Te sorprendería saber la cantidad de cosas que saben sobre nosotras -contestó ______ mientras Marian se sonreía.
-Volviendo a Jasón ¿qué es lo que le pasa?
-Ha averiguado que tengo una cartera de acciones confiada a una firma de inversores y quiere que se la transfiera a él. Me gustaría saber quién se lo ha dicho –murmuró-. Suponía que esa clase de cosas se mantenían en privado.
Julieth pensó durante unos instantes antes de contestar.
-Quizás tu querido Jasón no sea tan honesto en sus prácticas comerciales como tú te creías.
____ odiaba admitir que ella había empezado a pensar lo mismo. Había creído conocer al hombre perfecto y se estaba dando cuenta en los últimos días que era todo lo contrario.
-Doug y el agente de mi padre se ocupan de todo eso. Los dos son personas muy respetadas en ese campo y con tantos estafadores como hay en el gremio estoy muy satisfecha de tener gente en la que puedo confiar. Jasón sugirió que había sido el agente que tiene mi cartera el que se había ido de la lengua, pero eso no tiene mucho sentido porque llevo trabajando años con Doug y jamás he tenido ninguna queja. A propósito, voy a llamarle ahora mismo. Quiero comentarle todo esto.
-¿Por qué Jasón tiene tantas ganas de echar el guante a tus inversiones? -preguntó Julieth -. Siempre ha presumido muchísimo de la cantidad de millonarios prestigiosos que le confían sus inversiones, y con la forma que tiene de infravalorar tu trabajo, yo creía que no querría tener nada que ver con tu negocio.
-Yo también me he preguntado lo mismo -admitió, tomando un bocado distraídamente de su tostada-. Me he estado preguntando un montón de cosas.
Las dos amigas terminaron en silencio su desayuno.
- ______ ¿crees que Jasón puede estar metido en algún lío? -preguntó Julieth de pronto.
-¿Jasón en un lío? Imposible.
-El mundo financiero está muy revuelto, ______. Y tienes que admitir que, últimamente, Jasón ha acelerado su búsqueda de clientes.
______ miró el reloj de la cocina.
-Voy a llamar a Doug ahora mismo. Tengo que averiguar qué ha pasado -cogió rápidamente el teléfono y marcó un número, y enseguida tuvo en la línea al hombre que manejaba sus inversiones. Como ya se había imaginado, Doug no estaba muy contento que alguien hubiera estado hablando sobre su cartera, y le prometió hacer algunas averiguaciones y llamarla tan pronto como tuviera las respuestas.
-Eres una chica lista -dijo Julieth, aclarando su taza en el fregadero-. Me voy a dormir. Es horrible hacer turnos dobles. Se pierde la noción del tiempo.
-Y yo que pensaba que la pediatría era un chollo.
-Hay rachas mejores y peores como en todo, y ahora están todas las camas ocupadas -el teléfono empezó a sonar y Julieth se acercó a la puerta-. Me voy. Oye _____, si por casualidad Jasón empezase a actuar como Atila, el Rey de los Hunos, me llamas ¿de acuerdo? Dos mejor que una.
-No te preocupes Julieth, puedo manejarlo.
-Al antiguo Jasón, quizás. Pero este nuevo tipejo parece no tener nada que perder, hasta luego.
_____ asintió y cogió el auricular. Era Doug.
-Bueno ______, ya está todo en orden -dijo con su voz áspera de fumador empedernido-. Roger estuvo de baja por enfermedad y un crío bastante bocazas se ocupó mientras de tu cartera. El muchacho supuso que no hacía nada malo hablando de tu cartera con Palmer ya que los dos salíais juntos. Ya le he dicho que aunque estuvierais casados no tenía por qué mencionarle tus inversiones, porque esa es una cuestión que te incumbe única y exclusivamente a ti.
______ sonrió.
-No pierdes el tiempo ¿verdad?
-Hay que ir al grano. Prometo resultados a mi gente y hago todo lo necesario para conseguirlos. Y cuando su superior directo se entere de todo esto, mi bronca le va a parecer un paseo por el parque.
______ dudó un instante antes de hacerle la pregunta que le rondaba por la cabeza, pero cerró los ojos y se lanzó a ello...
-Doug, quiero que me hables con sinceridad. ¿Qué sabes del trabajo de Jasón Palmer en Trainor y Asociados? -un escalofrío recorrió su espalda-. Por favor Doug, quiero saberlo.
-Siempre y cuando no asesines al mensajero, te lo contaré. Se dice que ha intentado abarcar demasiado. Parece ser que ha perdido una cantidad importante del dinero de sus clientes, así que como imaginarás, no están muy contentos con él. La mayor parte lo han abandonado, y se comenta que no va a poder mantener esa situación durante mucho tiempo, y que si no trae nuevos clientes con saludables cuentas bancarias va a perder hasta la camisa.
-Y todo esto ha ocurrido recientemente -dijo con lentitud.
-Sí, en estos días.
Aquella oleada de cenas y fiestas, aquel afán por impresionarla mencionando nombres de personas importantes... Había creído que simplemente intentaba interesarla por su trabajo. ¡Claro que intentaba interesarla! Y a cambio quería recibir su cartera de inversiones.
-Gracias por tu sinceridad, Doug -dijo con un hilo de voz.
-Yo... supongo que no vas a seguir saliendo con él.
_____ apretó los dedos en el auricular. Había recibido tantas sorpresas en aquella última semana que una más no debería afectarle demasiado, pero no podía evitarlo. El hombre que ella creía amar no era lo que había pensado. ¿Es que nunca iba a ser capaz de hacer una elección adecuada? Estaba empezando a dudar de sí misma, e incluso de Nick. ¿Y si resultaba tener también los pies de barro? ¿Y si había algo en su pasado, o incluso en su presente, que probase que no era lo que ella creía ver?

yap termine
comenten!!!!!!!!!!!!! :D

me encantoooooooooo
y nooooooooooo
no puedo dudar de nick el es perfecto jajaj
sigue pronto plissssssss

OMG esta buenisima wow que mande a volar ya a jason pfff no no la comida mexicana es de las mejores que le pasa!! hahaha pero bueno sigela pronto ivana & claro que te extrañe tq!