"Nunca te lo dije" [Zayn Malik] Parte I Terminada

Estaba en mi penúltimo año en el colegio y se supone que debería tomar las cosas más en serio y pensar que voy a estudiar cuando me gradúe. Ya había dejado atrás la primaria y secundaria, porque ahora me encontraba en el “Sixth form” (Bachillerato). Eso quiere decir especializarme en el campo que deseo estudiar y prepararme para ingresar al mundo universitario. Sabía que por mis notas promedio podía ser más fácil entrar a una buena universidad en Londres. Tal y como mi hermana mayor lo había hecho.

Uno de los requisitos que pedía cualquier universidad era saber otro idioma a parte del inglés. Te daban la oportunidad de obtener un certificado máximo hasta el segundo año de que comenzarás la universidad. Pero si ya lo habías obtenido antes, pues era mucho mejor. Para suerte mía, mi madre era latina así que sabía hablar español muy bien. Por eso cuando di el examen de español, me dieron un certificado que acreditaba mis conocimientos en esa lengua.

Sin embargo, algunas de mis amigas del colegio, tenían que ir a alguna academia para aprender francés, español, italiano, portugués, chino mandarín, etc. Se supone que yo debía sentirme feliz por no tener que estudiar más después del colegio, pero el escuchar hablar a mis amigas sobre lo divertido que lo pasaban con sus nuevos “amigos” me hacía sentir algo incomoda. No sé si me entiendan, pero mi colegio era sólo para mujeres. “The City of London School for Girls” (CLSG). Uno de los mejores colegios para “señoritas” como diría mi papá. Prácticamente toda mi vida la he pasado estudiando en ese colegio. Jamás he sabido cómo se siente ser “la nueva”.

Pero a los 16 años, las cosas cambian para una adolescente. Ahora el tema principal son las fiestas y los chicos. Eso es lo que comúnmente se habla en los colegios. A mi la verdad no me importaba mucho. Prefería quedarme en mi casa y leer o dibujar, pero el bichito de la adolescencia ya se estaba haciendo presente. Mis amigas empezaban a tener novios de otras escuelas o amigos. Yo sólo tenía amigas mujeres y la verdad es que ellas eran increíbles. Las amaba demasiado, pero también quería tener un amigo varón. Alguien a quien contarle cosas que jamás le contaría a una chica. Quería tener un novio. Quería experimentar esa nueva sensación de enamorarse.

Al final de todo, deje convencerme por mis amigas y me inscribí en la academia italiana. Mi mejor amiga, Lauren, estudiaba ahí pero ella estaba en un nivel intermedio al igual que Danielle. Sin embargo, tenía amigas que estaban en un nivel básico y justo una de ellas iba a estar en el mismo salón que yo. Al fin no iba a estar sola o sentirme fuera de lugar.

-Molly, tengo miedo. Ni si quiera sé donde están los salones. – me encontraba caminando en los pasillos de la academia con el uniforme de la escuela puesto. Era común ver a algunos alumnos con uniforme ya que nos habíamos inscrito en el horario escolar. Eso quiere decir, a penas salíamos del colegio, corríamos hacia la academia. Sin embargo, también había chicos universitarios o chicos de otras escuelas que no utilizaban uniforme. Veía a hombres y mujeres caminar de un lado para otro. Algo totalmente desconocido para mí, pero placentero. No podía parar de sentir una sensación rara al ver a chicos lindos. A veces me pregunto ¿Dónde he estado escondida todo este tiempo que no he visto a chicos así?
-Tranquila Luna. – mi amiga me sonrió y me saco de mis pensamientos. Molly era más alta que yo. Su cabello era liso corto y negro. Ella venía del este de Inglaterra así que tenía un acento un poco diferente al de nosotros. La había conocido el primer año de secundaria y desde ese momento perteneció al grupo de mis mejores amigas. – Ese es nuestro salón. – Molly me señalo la puerta de un salón que tenía el número “308”. Ella entró al salón y yo la seguí. Mis piernas me temblaban de los nervios. Podía sentir algunas miradas sobre mí y eso me tensaba. – Hay que sentarnos ahí. – hice caso y me senté donde Molly había dicho. Estábamos en los asientos del medio. Lamentablemente, las carpetas no eran de dos, pero aun así nos sentamos al lado de la otra.

-Esperó que hallan chicos lindos. – le susurré a mi amiga para que nadie más escuchara.
-Lo mismo espero yo, aunque ya conozco a casi todo el salón. – miré a mi alrededor y no había nadie que me llamara la atención. –aunque siempre hay chicos nuevos u otros que se cambian de salón. – dejé de hablar con mi amiga y me puse a revisar el libro. Algo tonto pero no sabía nada más que hacer. Después de unos minutos, volví a mirar a mi alrededor y me di cuenta que habían chicas de diferente edades. Unas eran menor que yo y otra mayores. El salón estaban mesclado entre estudiantes y universitarios.

-Llegó el profesor. – me aviso Molly y vi entrar a un hombre de unos 34 años aprox. Todo el salón se quedó en silencio.
-Buon pomeriggio – con mi poco conocimiento en italiano, entendí que eso era un “Buenas tardes”. Después todos le devolvimos el saludo en el mismo idioma. – Para los nuevos alumnos, mi nombre es Bruno Cueto. Abran el libro en la página 20 mientras voy pasando lista. – dijo el profesor y se sentó en su escritorio para abrir una carpeta de apuntes y llamar a los alumnos.
-Molly Collingwood? – dijo el profesor mirando su lista.
-Presente. – respondió en italiano mi amiga y levantando la mano.
-Luna Crowley? – ahora era mi turno, así que imité lo que Molly dijo e hizo.
-Benvenuto. – me dijo el profesor al reconocer que era mi primera clase y yo sólo sonreí. En cambio, los demás al saber que era nueva, me miraron como si fuera algo que jamás hubieran visto. Parecían unos “fisgones”. El profesor siguió pasando la lista hasta que todos volteamos hacia la puerta, ya que alguien había llegado.
-Louis Tomlinson. – escuché al profesor decir el nombre del chico, pero en ese momento yo me encontraba hipnotizada. El chico que había llegado tarde, era muy simpático. Por como vestía, deduje que no era un chico de colegio. Además se veía de unos 18 años. Su cabello era castaño y liso. Además de que utilizaba un “quiff” (copete) y eso dejaba ver con más facilidad su rostro. Tenía unos hermosos ojos azules.
-Presente. – dijo el chico entrando al salón después de que el profesor lo llamara. El profesor siguió llamando a otros alumnos y el chico nuevo se empezó a abrir camino entre las carpetas para poder sentarse. Pero mientras veía que se acercaba por donde yo estaba, empecé a decir mentalmente que por favor no se sentara a mi costado, porque o sino iba a estar con una cara de boba. Es que el chico era jodidamente lindo.
-Hola chicos! – antes de que el chico sexy se sentará a mi costado y yo entré en un cuadro crítico de idiotez, saludó a dos chicos que estaban sentados adelante. Uno era rubio y estaba adelante mio, mientras que el otro que estaba delante de Louis, era moreno y llevaba puesto unos lentes grandes y redondos.
-¿Es lindo no? – sentí que mi celular vibraba y vi que me había llegado un nuevo mensaje. El cual era de Molly.
-Demasiado. – respondí rápidamente para que el profesor no se diera cuenta.
Estuve atenta a la clase porque esa era la razón de que sacrificara mis tardes. Pero no podía evitar mirar disimuladamente al chico de a lado. Llevaba puesto un pantalón negro, una t-shrit ploma y unos mocasines oscuros. Definitivamente, el chico sabía vestirse bien.

Ya casi para finalizar la clase, el profesor nos dijo que resolviéramos un ejercicio del libro en parejas. Yo automáticamente, pensé en Molly, ya que era a la única que conocía. Pero el profesor nos asignó las parejas. La persona que se encontraba sentada delante de uno, era tu compañero para el ejercicio. Yo miré a Molly y ella me devolvió una sonrisa como tratándome de decir que me vaya bien. Ella sabía que me costaba un poco socializar.

-Hola. – el chico rubio que estaba sentado adelante mio, se dio la media vuelta con su libro y me saludo. – Soy Niall Horan. – por inercia le sonreí y él hizo lo mismo. Sus ojos eran también azules pero algo diferentes a los de su amigo. No iba a negar que el chico era simpático pero cuando me sonrió, automáticamente se me vino el presentimiento de que íbamos a ser muy buenos amigos.
-Luna Crowley. – le dije y el frunció el ceño.
-Tu nombre es español? – me preguntó y yo asentí. – Lo sabía. – soltó una leve risa. - ¿Sabes español?
-Sí, mi madre es latina. – confirmé.
-Yo soy de Irlanda pero hace unos meses me mudé a Londres. Aunque en mi antiguo colegio, solía estudiar español así que sé algunas cosas. – era perfecto. Al fin alguien que supiera español también. – Así que estudias en el CLGS… – dijo mirando las iniciales en mi saco de color gris oscuro. No sé por qué pero me daba confianza para hablar con él.
-Estoy en mi primer año de “Sixth Form” (Bachillerato) – afirmé. - ¿Y tú? – dije notando que él también llevaba uniforme.
-En Private Paul. – Había escuchado de ese colegio religioso. Se encontraba a pocas cuadras del mio y era sólo para hombres. –También voy en primer año.
-Niall, ¿Sabes la respuesta de la pregunta 4? – una chica que estaba sentada en la mesa del otro costado de Niall se acercó a nosotros. La chica era un poco más baja en estatura que yo. Su cabello era laceo y oscuro.
-No la sé, Paula. Aún vamos en la tres. – dijo Niall y yo solté un leve risa, ya que ni siquiera habíamos hecho la pregunta uno. – Ella es Luna. – la chica que se llamaba Paula, mi miro como si fuera algo desagradable y después volvió a mirar a mi compañero. ¿Y esta que se había creído para mirarme así?
-Hola. – dijo fingidamente. – Se supone que deberías estar haciendo los ejercicios. – miró nuestros libros.
-Sí, pero estoy hablando con Luna de otras cosas. – Niall sonrió y eso pareció molestarle a Paula. Ahora su cara parecía de “pie grande”. Estaba enojada y no paraba de mirarme mal. Esta chica ya estaba en mi lista negra. Odio a las personas así.
-Luego nos vemos. – dijo Paula volviendo a sentarse en su sitio. Mi presencia le había molestado.

Niall y yo seguimos hablando de más y encontramos que teníamos varias cosas en común. Nunca me había sentido tan bien hablando con un chico. Además de que Niall era muy amable y se veía carismático.
-Hey Niall me prestas un lápiz? – A penas escuché esa voz, todo en mi cuerpo se detuvo. Niall se volteo y sacó un lápiz de su estuche para volver a la posición anterior y entregarme a mi el lápiz.
-¿Se lo puedes dar? – Niall me entregó a mí el lápiz y yo con temor lo agarré. Era obvio que él me lo estaba dando porque estaba más cerca del chico sexy.
-Hola. – Louis me sonrió al entregarle el lápiz.
-Hola. – dije tratando de calmarme. Oh por Dios! él me había sonreído.
-Gracias. – me dijo para volver a trabajar en los ejercicios con su amigo. Después de un minuto, la campana sonó avisando que la clase había terminado.
-No hicimos nada. – comentó Niall mientras se paraba de su asiento y arreglaba sus cosas. –Pero… que importa. – rio.
-Sí, el profesor no se dio cuenta. – dije también riendo y arreglando mis cosas.
-Lu, ¿vamos? – mi amiga que ya estaba caminando hacia la puerta me llamó para salir juntas. Yo le hice señas de que ya iba.
-Adiós Niall. – levante mi mano en forma de despedida y caminé hacia mi amiga.
-Adiós Luna. – me gritó él, ya que ya no nos encontrábamos cerca.

-¿Así que ya hiciste un amigo nuevo? – Molly y yo nos encontrábamos caminando hacia la estación para tomar el bus.
-Sí, su nombre es Niall. – dije sonriendo. – Me encantó conocerlo
-Él siempre es así. – respondió mi amiga. – Sólo hemos hablado pocas veces pero nada más. - ¿Y viste al chico sexy?
-OBVIO QUE SÍ!! – grité como loca emocionada. Ella también hizo lo mismo.
-Según me han contado algunas amigas, él se ha cambiado de salón y por eso ahora esta con NOSOTRAS!!! – definitivamente Molly y yo parecíamos unas dementes.
-Me dijo “hola” – confesé.
-¿qué qué? Eso es lo primero que debiste contarme. – Le expliqué a Molly como había sido todo y ella me escuchaba emocionada.
– Awwww me dijo “hola” – reí. – Ese es un comienzo.
-Ojala y sea así Lu…
-Molly quien era el chico que estaba sentado delante de Louis? – pregunté, ya que este chico parecía ser amigo de Louis y necesito saber cual es el entorno social de mi “nuevo futuro primer novio”. Parecía una loca pensando así jaja.
-Su nombre es Zayn. Es un chico raro… Bueno ese es mi bus, ya me tengo que ir. Nos vemos mañana en el colegio. – mi amiga se despidió con un beso en la mejilla y subió a su bus. Mientras que yo tomé el siguiente y me senté casi al final. No podía parar de recordar todo lo que había pasado hoy. Definitivamente, me había encantado mi primer día. Antes de que el bus arrancara, levanté mi mirada y noté que Niall había tomado el mismo que yo. Él me reconoció y caminó hasta donde yo estaba mientras sonreía y hacia caras raras como “Hey, yo te conozco”.
-Nos volvemos a encontrar. – Niall se sentó adelanté mio como en el salón.
-Eso parece. – sonreí.
-¿Y te gustó tu primer día?
-Sí. – me limite a asentir. –Todos son agradables. – a excepción de Paula, pensé.
-Es que somos el mejor salón. – alardeo y yo reí. Este chico era muy divertido. – Noté que eras amiga de Molly.
-Sí, estudiamos juntas. ¿Y tú tienes también amigos? – obvio que los tenías pero no quería parecer como una stalker.
-Soy amigo de todo el salón, pero con los que mejor me llevó son Louis y Zayn. – afirmó. - ¿Los conoces? – negué. – El chico que llegó tarde. – volví a mentir. No quería que Niall se diera cuenta que me había fijado en su amigo desde que puso un pie en el salón. – Al que te pedí que le entregaras el lápiz.
-Ahh sí, sí. Ahora me acuerdo. – sonreí.
-Su nombre es Louis. Él esta en la universidad, pero aún así somos amigos. También esta Zayn.
-¿Él también es universitario? – dije acordándome del chico raro.
-No. Él esta en el colegio. Va en el mismo grado que nosotros pero no estudiamos juntos. Él estudia en un colegio para hombres y mujeres.
-Ahhh. – dije al enterarme de esta nueva información. Luego Niall y yo seguimos hablando hasta que ambos bajamos en el mismo sitio y nos dimos cuenta que vivíamos cerca. Él vivía a tres cuadras de mi casa. No había duda de que mi presentimiento de que Niall y yo íbamos a ser amigos, se estaba cumpliendo