Escritor de fanfics (One Direction)

Leyó todos los comentarios con una sonrisa, le hacía muy feliz ver cuánto le gustaban sus fanfics a otras personas que se sentía la persona más dichosa del mundo.
Respondió cada uno de los comentarios con alegría, pero de pronto, un grito le sacó de su felicidad.
—¡Vamos, Harry, tenemos que irnos pronto! —escuchó el estridente grito de Louis, y cerró su notebook de inmediato, con miedo de que su amigo descubriera su más oculto secreto.
Ser un escritor en internet, bajo el seudónimo de “Liz”, y muy popular entre su propio fandom no era algo muy normal, así que no creía que los chicos se lo tomaran muy bien si se llegaban a enterar. Mucho menos Louis, con quien tenía tanta cercanía, jamás le confesaría que a pedido de una chica, había escrito un one shot Larry. Aún se sentía sucio, pero el haber pasado esa cruda prueba le hacía feliz, al menos se sentía mejor de saber que podía pasar cualquier reto como escritor, incluso si éste era escribir algo íntimo y romántico entre su mejor amigo y él mismo, como una pareja.
—¡Harry, echaré la puerta abajo ahora mismo! —le volvió a gritar Louis. Harry se terminó de arreglar y esperó a que se apagara por completo su equipo. Después lo guardó en su bolso y en el mismo momento en que Louis se tiró encima de la puerta, Harry la abrió y Louis cayó al suelo.
—¡Idiota!
—Louis, ¿quieres dejar de gritarme? Es denigrante tener que escuchar cómo me insultas —Louis se le quedó mirando un rato desde el suelo, intentando descifrar que había querido decir Harry.
—Alan tenía razón, te has comido un diccionario —sentenció finalmente.
Harry se mordió el labio, nervioso. Últimamente leía mucho, demasiado dirían sus compañeros de banda. Ya había terminado con la Saga Crepúsculo, debido a las super ventas que tenía, y seguidamente fue por Los Juegos del Hambre. Ambos libros le gustaron, pero sólo fueron el principio de lo que se convertiría una obsesión. Siempre iba bien disfrazado, nadie lo había reconocido hasta ahora, así se metía a las librerías y compraba libros por montones, todos románticos y juveniles.
Debía decir que su favorito era Harry Potter, pero leía más romance para tener un punto de vista femenino, se suponía que él era “Liz” y era una chica, una fan más de One Direction que escribía fanfics.
A veces se preguntaba si se estaba volviendo loco o gay.
Harry nunca se esforzó demasiado en conseguir una respuesta, le gustaba el mundo del fandom, ver las cosas divertidas –o a veces, pervertidas- que hacían de ellos. Pero lo que más le gustaba era escribir.
Comenzó como algo simple, un one shot. Al ver que recibía críticas muy buenas, continuó con algo más grande, un fanfic. El primero que escribió, llamado “Dreamer”, fue normal, de una chica que conocía a su artista favorito. Lo escribió con él como protagonista, narrado por él para hacerlo más sencillo. Relató más que nada la fantasía que le gustaría tener con una fan… Y resultó ser todo un éxito.
Así siguió escribiendo, pero a medida que se hacía popular, también le pidieron más fanfics, pero con los otros chicos. Harry no supo cómo responder a esos pedidos, era extraño y sería muy difícil, pero cuando comenzó, resultó que no. El más fácil de retratar era Louis, con quien tenía más confianza, y el más difícil, Liam, a quien veía como alguien tan bueno, que era como irrumpir en su privacidad al escribir algo sobre él.
Pero ya llevaba más de un año en esa vida clandestina, y ya no sentía ningún tipo de remordimiento. Incluso, de vez en cuando les preguntaba a los chicos cómo era su chica ideal, o qué tipo de historia les gustaría vivir, en el plano romántico. Eran muy buenos dándole ideas.
—Bueno, ¿te vas a quedar ahí como idiota o me vas a ayudar a ponerme de pie?
—Eres toda una diva, Lou, o como dirían, Sassy —le respondió Harry y carcajeó un rato al ver el rostro de su amigo, Louis no sabía de qué estaba hablando y eso le causó gracia, si se enteraba de que era conocido como “La diva de One Direction”, seguro le daba un ataque de nervios y se convertía en la persona más servicial para esfumar esos rumores.
Pero, a quién iban a engañar, toda la banda sabía que Louis era una diva, y eso no era fácil de retractar.
—Harry… —le advirtió Louis desde el suelo.
—Está bien, en seguida te ayudo —se agachó para ayudarlo y con un poco de fuerza, en segundos ambos estaban de pie.
—¿Ordenaste tus cosas?
—Sí, Lou.
—¿Lavaste tus calzoncillos?
—Eso también —Harry se sonrojó un poco, no por la pregunta de Louis, sino porque hace poco había escrito un capítulo para “Alone Heart”, el fanfic de Lou, dónde la chica le hacía la misma pregunta a Louis.
Todo era tan raro cuando sentía los déjà vu.
—Bien, entonces creo que estamos listos para irnos de este hotel, en serio, el servicio es pésimo, hace media hora que llamé para un jugó de frutillas, y todavía no me lo traen. Ellos se pierden la propina…
Harry miró a Louis por unos segundos, analizó su rostro, su forma de moverse y hacer gestos al hablar, todo eso sin duda iría al siguiente capítulo. Sí, a las chicas les encantaría una versión más Sassy de Louis, porque hasta el momento, era un chico muy romántico en busca del amor de su vida, pero que lamentablemente no tenía buena suerte. Un giro en la historia sería genial, así tal vez la protagonista comenzaría a fijarse en él, el chico más invisible de la escuela.
—¿Qué tanto me miras, Harry? Andas muy… no sé, observador estos días.
—Oh, es que sólo me preguntaba que marca de acondicionador usabas… —Louis no pareció muy convencido, pero suspiró, resignado.
—La misma que tú, no hay secreto ni fórmulas, Harry. Simplemente mi cabello es fabuloso.
—Por Dios, Lou, suenas tan gay —ambos rieron y bromearon sobre ser una pareja muy “fabulosa” por los pasillos. Algunas personas se les quedaban mirando, pero ellos siguieron con su juego para incomodar a los demás.
Cuando estuvieron en la recepción, se encontraron con Liam y Niall, pero de Zayn no había rastro.
—¿Dónde se metió ahora? —exclamó Niall, cansado de tener que esperar siempre al moreno.
—Me dijo que se bañaba y bajaba —dijo Liam.
—Pero eso fue hace una hora, me pregunto por qué se demorará tanto.
Louis dio por terminado el juego de la pareja feliz y se unió a la conversación, acotando que estaba extraño, que desde hace unas semanas le veía muy exaltado.
—Por ejemplo, ayer, cuando le pregunté qué hora era, casi me asesina con la mirada. Después gruñó algo como “Ellen, pobre Ellen”. Creo que ha llegado la hora de que le escondamos las cajetillas de cigarros, está afectando su cerebro —señaló Louis, exaltado y emocionado de contar su experiencia con la posible locura de Zayn.
—¡Creí que era el único! El otro día me dijo que si llegaba a embarazar a una chica, me mataba si al dejaba sola y me iba con otra —añadió Harry, muy preocupado.
—A mí me dijo “Traidor” —agregó Niall.
—A mí no me ha dicho nada —todos miraron a Liam cuando habló—, sólo me ha dicho que era el chico perfecto que cualquier chica podría desear, aunque creo que eso también es extraño viniendo de un chico, ¿no lo creen?
Todos asintieron, era una situación demasiado fuera de lo común, no siempre hablaban como un grupo de chicas sobre otra persona, pero eso parecían, allí en medio del pasillo, juntos como unas viejas chismosas.
—Bien, es demasiado, que alguien lo vaya a buscar, y si es necesario, que lo arrastre por el pasillo y lo tire dentro del ascensor, pero tenemos que irnos, ahora ya —Niall estaba al borde perder los nervios, odiaba retrasarse, era estresante.
—Que vaya alguien al azar, elijan un número —dijo Louis.
Liam esxogió el 9, Niall el 5, Louis el 10 y Harry el 4.
—Bien, el que dijo el menor número va…
—¡¿Qué?! —pero no importó cuánto reclamó, Harry tuvo que ir contra su voluntad a sacar a Zayn de su habitación.
Mientras esperaba el ascensor, recordó el cómo las fans creían que Zayn era vanidoso. Era verdad que habían acertado al creer que Louis era una diva, pero con Zayn estaban equivocadas. Su amigo era tan inseguro, que entre todos le escogían la ropa que debía usar cada día, e incluso, habían tenido que llegar al extremo de decirle un millón de veces que lucía bien para que saliera a la calle.
Harry se preguntaba cuándo sería el día en que Zayn se diera cuenta del nivel que alcanzaba el amor hacía él por parte de las fans, porque si supiera cuánto fantaseaban con él, seguro se caería de la conmoción.
Tocó la puerta de su habitación un par de veces, pero como nadie respondió, sólo entró.
Zayn no estaba allí, Harry crispó los labios, fastidiado. Si ya había bajado mientras él subía, golpearía a Louis por su brillante idea de “Los números”.
Sin embargo, vio el notebook de Zayn encendido sobre su cama, así que debía seguir allí.
Se acercó un poco por curiosidad, y vio abierto su twitter. Sonrió con malicia y escribió un tweet como venganza:
“Harry_Styles hazme tuyo”
No pudo evitar reírse, las fans de Zarry se volverían locas.
Pero algo llamó su atención, había una pestaña oculta. Bien, eso también formaba parte de su venganza por ir a buscarlo injustamente, y porque era su amigo, tenía el deber de invadir su privacidad.
Abrió la otra pestaña, pero deseó no haberlo hecho en el momento en que escuchó como Zayn salía del baño y le gritaba que no tocara su computador.
Zayn se lo quitó de las manos y lo cerró de golpe, con el rostro enrojecido y los ojos fundidos en pánico. Harry tenía la mirada fija sobre el colchón de la cama, sin poder olvidar las palabras que había leído… era como una pesadilla, la peor de todas sin dudas.

“xx:
Liz, me encantan tus fanfics, ¿cuándo subirás el siguiente capítulo de ‘Naked Soul’?”

________________________________________________

En lo personal, no me gusta el capitulo, lo odio /: nunca me había pasado eso, salvo con los primeros tres capítulos de I love you, que tampoco son de mis favoritos D:
Todos los blogs que aparecen al principio son reales, hace tiempo hice un post preguntando a quién le gustaría aparecer, y esas personas se ofrecieron, así que están bajo su consentimiento ;)

Elizabeth Mernes | 16 años | Inglaterra | Atrid Bergès-Frisbey

Elizabeth tiene una vida de lujos, es hija de un inversionista y su madre una famosa cazatalentos. Por eso conoce a la mayoría de los artistas dentro de la industria.
Es sarcástica, no teme decir lo que piensa y casi nunca le importan los demás a menos que pueda sacar algún beneficio de ellos.
Pero cuando conoce a una banda que está haciendo historia en ventas, en una visita con su madre a un estudio de grabación, y alguien la confunde con una tal “Liz”, Elizabeth se une a uno de los chicos para descubrir la identidad de esa chica y así, tal vez, sacarle provecho a la situación.




Katherine “Kat” Gray | 19 años | Estados Unidos | Miley Cyrus

Rebelde sin causa, Kat es la última sensación en la música. Lidera las listas de canciones más pedidas y cd’s más vendidos de América.
Pero Kat es demasiado rebelde, le gusta hacer las cosas a su manera y no soporta que nadie la contradiga, por eso, a veces es vista como una mala influencia para los jóvenes.
Así que su representante se pone en acción y decide tomar cartas en el asunto. Arregla un trato justo con el representante de One Direction, y de un día para otro, le avisan a Kat que tendrá que hacerse pasar por la novia de unos de los chicos para “endulzar su imagen” frente a los medios.
Y eso a Kat, le cae pésimo, por lo que decide hacerle la vida imposible a “su novio”




Emily Foster | 17 años | Inglaterra | Scarlett Johansson

Acosadora, obsesiva e impulsiva. Y a la vez, la chica más ignorada de su escuela.
Conocida como “La fan de los gays”, Emily ha tenido que soportar las burlas de sus compañeros toda la vida, pero eso no le importa en absoluto con tal de poder conseguir la última foto de One Direction.
Es declarada la mayor fan de los fanfics de “Liz” y su blog es visitado por múltiples fans día a día, así que su impopularidad en la escuela no le preocupa demasiado.
Sin embargo, es muy acosadora, y eso le traerá muchos problemas, como a la vez beneficios. Como esa vez que se hizo pasar por la estilista de One Direction y la pasó en grande revisando las cosas privadas de los chicos. Claro, hasta que ellos mismos la atraparon y Emily se desmayó.




Sunny Strom | 17 años | Inglaterra | Taylor Swift

Con tendencias suicidas y muy depresiva, Sunny -con mucha ironía- no es una chica feliz. No le gusta relacionarse con los demás y tampoco al resto le gusta acercarse a ella. Simplemente desprende un aura negativa que entristece todo a su alrededor.
Pero, cuando conoce a Annie, una chica dentro del hospital en el que está internada después de un intento suicida, algo parece convencerla de que una locura con esa chica haría su vida completa, y que así, finalmente podría morir de una vez. Así que se une a ella en un loco plan para conocer a la banda favorita de Annie, cinco chicos de los que Sunny jamás había escuchado hablar, pero que después de ese plan, no podría dejar de hacerlo.




Constanse Melford | 18 años | Inglaterra | Freya Mavor

Constanse es una chica extrovertida, le gustan las fiestas y molestar con sus amigos. Tiene una hermana pequeña, fanática de One Direction, y debido a eso, tiene que cargar con ella cada vez que ellos hacen una firma o un concierto. Constanse los odia por eso, sólo le gustaría tener una vida normal sin licencia de conducir para no tener que llevar a su hermana a todos lados.
Sin embargo, en una de esas “acarreadas”, cuando su hermana quiere conseguir un autógrafo y los guardias la golpean, Constanse deja salir su lado protector, y hará hasta lo imposible -como colarse al hotel de los chicos- para conseguir ese autógrafo. Pero lo que se encuentra, es mucho mejor que eso…