"no es tu hombre" (JOE Y TU ) TERMINADA

ya viene otro cap :) comneten mas

SOY NUEVA LECTORA¡¡¡
ESPERO QUE LA SIGAS¡¡¡ME ENCANTA ESO DE QUE JOE Y TU NO DEBAN ESTAR JUNTOS
POR DIFERENTES CLASES SOCIALES¡¡¡
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bienvenida berenice :)

ahi te va cap :)

10º Capitulo.

Decidió no volver por la gasolinera y pasó el domingo siguiente y no fue. Pero esa misma tarde, al anochecer, cuando se hallaba con sus amigos en "La Gaviota" lo vio entrar, erguido, alto, con el suéter atado al cuello y aquel andar suyo, lento, como si nunca tuviera prisa, aquellos ojos negros que sin gafas parecían abarcar el mundo entero...
Lucas estaba a su lado y él pasó saludando solamente con la cabeza y una mirada que ____ no olvidaría en toda la tarde.
Se mantuvo distraída y vió como el se alejaba, cómo había estado a su lado tomando una cerveza y fumando un cigarrillo...
Aquella noche lloró en su cama y lo más raro del caso es que no sabía por qué, cuando Lucas la había besado al despedirse, como hacia todas las noches, había sentido repulsión.
Esa misma noche habló por teléfono con Selena; era su amiga de siempre, su confidente, la que conocía, aunque no del todo, su intenso romance con el gasolinero. Estaba loca, completamente loca permitiendo que su pensamiento se fuera hacia la estación de gasolina un solo instante.
-No soy capaz de superarlo. Tenías razón. Me he metido en la boca del lobo... y, además, para mayor desconcierto, él no ha alentado para nada mis ansiedades. Es algo que nace e intento doblegar por todos los medios y no soy capaz. Ya te conté lo de la otra semana, la ira contenida de mi padre y todo lo demás. He procurado no ir a la estación este domingo, pero ahora mismo me siento totalmente derrumbada.-
-Clama, ____, hazme un favor, sé juiciosa y no te dejes dominar por una pasión absurda que ha nacido de la nada. Si el gasolinero no te animó, si salió contigo como me has contado y no se propasó en nada, ¿por qué te has enamorado de él? Atájalo ahora, ataja ya ese sentimiento, que estás a tiempo-
-Si supieras cómo lo estoy intentando, el esfuerzo que hago... si supieras cómo he pasado hoy cerca de la gasolinera sin entrar en ella... si supieras el sufrimiento que esto me esta ocasionando... Yo no he sentido jamás nada asi por Lucas. Es más, me doy cuenta de que nunca he estado enamorada de Lucas, fue algo que llegó a mi vida como una razón natural, algo que no disgustó a mis padres, por el contrario, les agrado y yo me deje llevar, pero ahora sé que de ninguna manera podré casarme con él. Esta noche me ha besado y he sentido repulsión.
-¡Dios Santo, ___! Me estás asustando. Yo estuve esta mañana en la gasolinera, y claro que reconozco que es un hombre atractivo, pero sólo eso, ___, ni es de tu mundo, ni es de tu ambiente, ni tiene nada afín con nosotros, ni contigo, ni conmigo, ni con ninguno de nuestros amigos. Piensa que es un trabajador, un hombre rudo, que será exquisito, cmo tú dices, cariñoso, afectuoso, pero no deja de ser un hombre desconocido que no sabes cómo puede reaccionar...-
-Todo eso lo entiendo, absolutamente todo...-
-¿Y entonces?-
-No puedo disipar de mi mente su recuerdo,¡NO PUEDO!-
-¿Pero él te ha dicho algo?-
-¡Claro que no! Soy yo. ¡Qué sé yo, lo qué él piensa o siente! Unicamente sé que es amable conmigo, que es delicado, que tiene unos ojos negros bellísimos y que me mira con dulzura... Es más, no concibo que haya maldad en su mente, que haya malos propósitos, que sea retorcido, no. Es un hombre sencillo, de esos que gustan, que calan, que influyen, que tienen una química especial. Te puedo asegurar que cuando lo miro siento que tengo con él una cierta y oculta complicidad-
-¡Dios ___! En verdad me asustas. Duérmete y piensa en otra cosa. Borra de tu mente su imagen, te lo aconsejo- como si fuera tan fácil -Puede torcer tu destino y ser muy grave todo lo que te ocurra en el futuro. Voy a colgar y tú trata de dormirte-
Colgó, pero no pudo dormir. Fue una semana insoportable, más que nada porque empezaba a sentir enojo hacia sus propios padres y sobre todo hacia Ignacio Setién, maldito chismoso. Ese domingo no pudo doblegar su ansiedad. Cuando echó el pie a tierra y se fue a la ducha, mientras el agua le golpeaba el cuerpo con fuerza, ella pensaba que nada ni nadie, podría evitar ya, que fuera por la gasolinera, pero buscando fuerzas en su voluntad, evitó ir. Sin embargo, tampoco estaba dispuesta a reunirse con sus amigos en la terraza del club de regatas.
Empezaba a sentir odio mortal hacia todo y hacia todos. Entendía que ella para sí misma era un ser libre y tenía derecho a elegir su propia felicidad, claro que todo esto cabalgaba sobre su cerebro sin darle una realidad contundente, porque entendía que ni estaba preparada para enfrentarse a sus padres, que ya eran mayores, ni para aceptar un amor que, evidentemente, no le convenía...

Me encanta sigu sigue

cap para tu suzzey :) pero sube en tu nove tambien :)




11º Capitulo.
Suponiendo que Joseph Jonas sintiera hacia ella lo mismo que ella sentía, ¿qué podia hacer casada con él, habituada como se hallaba, a vivir a lo grande, sin que le faltara ni el más mínimo capricho? Sabía por intuición y por realismo natural que la pasión se evapora y luego queda el vacio de la soledad y, sobre todo, cuando ésta no es adornada por una abundancia material. De pasiones no vive el hombre y no entendía que Joe pudiera compararse con Lucas Pimentel, su novio.
Tal vez por eso y por las reflexiones que continuaron, decidió aislarse y pasó aquel domingo en el polideportivo, donde se juntaba con la gente de toda clase social. Allí no existía el clan del élite al que ella pertenecía, allí había seres humanos de todo tipo.
No supo si se divirtió, seguro que no, sentía como si le faltara una parte de su corazón, pero al menos logró que transcurriera el día sin verse con sus amigos o con su novio. Por la noche tuvo un enfrentamiento con su padre.
-Paree ser- le dijo él -que Lucas no te ha visto hoy. Ha llamado mil y una veces y no hemos sabido qué decirle. ¿Qué te esta ocurriendo, ____?-
-Nada.-
-No mientas- intervino la madre -También tus amigos te han llamado desde el club. No nos gustaria que te vulgarizaras huyendo de tus amigos, de tu ambiente social, al cual sabes muy bien que perteneces desde que has nacido. ¿Me entiendes, hija?-
Así continuó una retahila de reproches. Los oyó todos pacientemente y, cuando entro en su cuarto, sintió la sensación de que algo iba a fallarle, de que iba a morirse, de que no soportaba más aquella tirantez ni aquella crispación y se dio cuenta, por supuesto, de que se había enamorado a lo tonto de un desconocido gasolinero. Por eso, como si una telepatía lo indujera, oyó de repente el timbre del teléfono cuando, tirada de bruces en la cama, ocultaba el rostro entre los brazos.
Se hallaba boca abajo y al oír el timbre del teléfono, suponiendo que era Lucas, estiró un brazo y asió el auricular que estaba sobre la mesa de noche.
-___...
La voz que sonó al otro lado la dejó una fracción de segundo tensa, la obligó a sentarse en la cama de golpe y a asir el auricular con las dos manos.
-¡Joe!-
-Diré algo vulgar- murmuró la voz ronca al otro lado del aparato telefónico -Como Mahoma no va a la montaña, es la montaña quien va a Mahoma. Dime, ___, ya no has venido y... no sé qué pensar. No debiste volver, pero has vuelto y eso me produjo un interés desinteresado, no sé si me entiendes, pero es que yo no hubiera querido que me interesaras y el caso es que... me estas interesado-
-Lo siento, Joe, no hice nada para despertar en ti interés alguno.-
-Te equivocas ___, el amor no se busca, tú misma lo has dicho el otro día, el amor llega, claro que no sé si esto que siento es amor, he hablado solo de interés, de deseos de volver a verte, de seguir con mi mirada tu Porsche y he de confensar que no sé qué me interesa más, si tu automóvil o tú misma-
-Eso es ofensivo- replicó ___ con cierta amargura
-Lo siento... dime, ¿eres capaz de acercarte a "La Gaviota"?-
-¿Pero que deseas de mí?-
-No lo sé. Tal vez me conforme con verte solamente...-
-Es que ni tú ni yo podemos aspirar juntos a nada.-
____ hubiera jurado que dicho aquello, la exclamación de Joe fue muy sorpresiva.
-¿Y por qué?¿Acaso no somos un hombre y una mujer jóvenes, valientes, capaces de enfrentarnos a la vida juntos?- y sin dejarla intervenir, añadió con firmeza -¿Eres tan cobarde, ___? Quiero que sepas que por aquí y por otras gasolineras donde trabajo pasan muchas mujeres bellas. Converso con ellas y procuro, como tú sabes que soy, poner de manifiesto mi delicadeza y educación, pero sólo eso. En cambio, cuando empecé a tratarte a ti, las cosas no fueron igual y te lo estoy confesando sinceramente.-
-Si supieras que me hiere que seas tan delicado y tan educado...-
-¿Y por qué?-
Por que te empiezo a amar -Te lo puedo decir, porque media entre ambos el teléfono y la distancia, gustas, calas, tienes como una química especial para la complicidad, eres sorpresivo y seductor, y tú sabes muy bien que yo estoy comprometida, que tengo un novio desde hace dos años con el cual pienso casarme... algún día.-
-Pero no lo amas-
-Eso no me lo he preguntado...-
-Ni te lo vas a prguntar.-
-Posiblemente, no-
-Otra vez tu cobardía ____... cuando aparentemente eres todo lo contrario. Al volante de tu automóvil pareces poderosa, casi insensible, altiva y personal, pero ahora mismo, desde tu cuarto y el pobre cuarto de mi fonda, eres sensible, pero cobarde, y la cobardía no da el triunfo, querida-
-Dime, Joe, ¿a que te has dedicado en la vida además de ser gasolinero?-
-A buscar trabajos que me producían algo de dinero...-
-Pero también has estudiado.-
-El bachillerato únicamente, y luego, pues he leído, he recorrido mundo, he sido libre, sigo siendo libre, sigo buscando algo y no sé qué es o no lo supe hasta que te vi. Me va a ser difícil renunciar a ti, no sé si es amor, deseo o solo amistad, pero sea lo que sea, es fuerte y me gustaría darle a esto que desconozco la debida compensación-
-¿Conmigo?-
-¿Y por qué no? Te repito que para mí no existen ciertas cosas sociales como es la fortuna, la antiguedad, las tradiciones, los estúpidos esquemas que se imponen las familias poderosas, pero en cambio sí que existe el hombre, la mujer, a solas ambos y nada más, el sentimiento que los pueda unir, la pasión que los pueda hacer gozar, la continuidad de la comprensión...-
-Basta Joe!, te explicas muy bien, pero yo no puedo seguirte-
-O sea, que no eres capaz de salir de esa jaula de oro de tu palacete, caminar por esas calles llenas de turistas y llegar al muelle, entrar en La Gaviota y tomar conmigo la última copa...-
Era una fuerte y terrible tentación. Todo el cuerpo le ardía y la sangre se diría que palpitaba por sus venas, como si su fuerza pretendiera romperlas.
-___, ¿estas ahí?-
-Sí.-
Y su voz era tan sutil, que Joe soló acentó a murmurar desde el otro lado.
-Esta bien, ___, déjalo para el domingo. Será lo mejor.-
Cuando colgó el receptor, ___ rompió a llorar...

OMJ! Joe es tan agsdsja sexymente sensual!
Me choca eso.de las clases sociales!
Son unos idiotas los que discriminan por el.dinero!
Ellos ya se enamoraron! Awww
siguela please! Me encanta!

me perdí 2 capis! :risa: bueno ya no!
Me encantaron los caps!
Pobre rayis no puede olvidar a joe :/
Siguelaaa ;)

chicas ahi les va cap :)


12º Capítulo.
Durante la semana el próximo domingo rondaba en su mente, pero ocurrió algo antes. Había visto a Selena en el gimnasio. Las dos iban a la misma hora, después de hacer un recorrido con las zapatillas deportivas. En invierno acudían ambas a la universidad, y en verano no solían separarse.
Aquella mañana de jueves, Selena le reprochó en voz baja:
-No te he visto por las tardes, ningún día de estos. El domingo no has ido, ni el lunes, ni el martes... nuestros amigos se preguntan qué te ocurre y he encontrado a Lucas desconcertado. Dice que cuando salen juntos, ni siquiera abres los labios, que estás encerrada en tu cascarón como si estuvieras apunto de sufrir una depresión...-
-No tengo ganas de hablar, Selena-
-Eso es lo peor- y tras una pausa, sin dejar de correr rítmicamente, preguntó -¿El gasolinero?-
____ dejó de correr, deteniendose bruscamente y miró a su amiga de frente.
-¿Qué le pasa al gasolinero?-
-No, nada, que yo sepa. Te pregunto a ti. El domingo lo vi, fui a poner gasolina solo para verlo. No creo que nos asocie a ti y a mi como amigas, por lo tanto, como no me moví del auto y a mi lado iba Nick, nos sirvió la gasolina y nos cobró sin pronunciar apenas una palabra.-
-Prefiero no hablar de eso.-
-Andate con cuidado, ___, tú sabes lo mucho que te quiero y me doy cuenta de demasiadas cosas, no resbales en ese sentido. Tus padres nunca te permitirán casarte con un don nadie y si aún así te casas, te expones a demasiadas cosas negativas, como son que no te quieran en casa, que tus padres de la fortuna solo te den lo que te corresponde por ley, pero sea alguien ajeno el beneficiado con la parte que queda, y eso te haria mucho daño. Tú sabes muy bien que tus padres fueron educados en una escuela muy conservadora, ya sé que tu no, pero es la suya y estas obligada y estas obligada a respetarla; por encima de los sentimientos estan los deberes y tu tienes uno como hija única-
-¡¡Dije que prefiero no continuar hablando, Selena!!- explotó ___ echando a correr más aprisa
Y es que le daba horror pensar que tendría que destruir su destino, torcer toda su vida para dar gusto a dos personas que, por mucho que ella las amase (y las amaba), nunca podrían pensar del mismo modo.
Dejó que Selena siguiera conversando sobre lo mismo, pero ella ya no la escuchaba, porque mientras más hablara con Selena, más se cerraba en sí misma, más se obsesionaba y más comprendía que nunca podría casarse con Lucas, porque el solo pensamiento de tener que acostarse con él le producia repulsión.
Pero en cambió, cuando su mente acudía a una cama y una compañía como la del gasolinero, se rompían en ella todos los esquemas y se convertía en el objeto amado y en el objeto amante. Se había dejado enamorarse sin darse cuenta, había sido seducida seguramente sin la intención de que la sedujeran y además intuía que se había enamorado de un hombre noble, educado y fiel, un hombre sencillo dentro de su marcada personalidad, un hombre capaz de llenar sus vacíos y cumplir profunda y abundantemente sus ansiedades femeninas.
Con esta convicción dejó de correr de correr, se vistió después de darse un baño en la piscina del polideportivo y pensó que sería un gran refugio como lo había sido aquellas tardes aquel lugar lejo de sus aritócratas amigos, aquellos que solían casarse entre sí para no perder sus privilegios.
Ella prefería el pueblo y ser del pueblo, y eso sólo le ocurría desde que por primera vez vio al gasolinero...
Fue por la tarde de ese mismo jueves. El teléfono sonó toda la mañana y parte de la tarde. Había pedido a Teodora, la muchacha de confianza de toda la vida, la que la crió realmente, que dijera que no estaba, aprovechando la ausencia de sus padres que se habán ausentado para ir de compras a la capital próxima: "Tu diles que no estoy", le recomendó. Y Teodora hizo lo que le manadaba, así que a las cuatro de la tarde de aquel jueves, decidió irse al polideportivo. Allí se sentía libre, nadaba, corría, jugaba tenis con cualquiera de los que se hallara en la pista. Prefería estar con desconocidos.
Su mundo, ya sabía, no era éste, y ella en aquel lugar era una intrusa; pero aquella tarde, decidió que prefería mezclarse con desconocidos a tener que darles explicaciones a sus amigos y a su novio, del cual estaba huyendo un día sí y otro también.
Y no por temor a darle una explicación, a que nunca se casaria con él, que no lo amaba y no se casaría sin amor, sino por el temor al dolor de sus padres, a la ira que nunca iba a comprender, a la indignación qu para ellos iba a suponer que ella no siguiera sus esquemas, sus tradiciones, sus... dejó la frase en el aire al verlo de súbito...

13º Capítulo.
Si, lo vió de súbito. Nada más llegar al polideportivo, y cuando estacionaba el auto alineado a los demás, a punto estuvo a punto de ponerlo denuevo en marcha y salir corriendo; pero una fuerza superior la contuvo. Estaba viendo por el espejo retrevisor a Joe Jonas que descendía de su moto, que se quitaba el casco, se estiraba y miraba al frente, con aquel gesto suyo altivo, alzando la cabeza.
Al girar los ojos, la vio e inmediatamente caminó hacia ella.
-¡Vaya!- exclamó -Hoy no te has ido con la élite*-
___ dijo e tono bajo, más bien cohibida y titubeante:
-Tampoco venia a buscare a ti...-
-Me lo imaginaba. Estas huyendo, ___, huyes de algo que ya abulta demasiado. Y lo peor de todo es que esos sentimientos que no se notan, están dentro de uno-
Seguidamente, alzó el brazo y se lo pasó por los hombros.
-Vamos, comportémonos si quieres como dos buenos amigos, que, aunque tiene muchas cosas que decirse entre si, no se las van a decir. Yo quiero respetar tu silencio, pero tú no te enfades si yo lanzó exclamaciones y te hablo de esos sentimientos que están dentro de mí-
____ se detuvó y alzó la cara. Le pareció que Joe era gigantesco.
-Tengo novio, te lo he dicho, Joe.-
-Sí, ya lo sé- y hundiendo la mano en el bolsillo trasero del pantalón, extrajo una cartera y la extendió ante los ojos de ____ -Mira, ¿ves esta mujer, esta jovencita? También era mi novia. Yo también tenía novia, pero le he dicho que no puedo casarme con ella, ni siquiera seguir saliendo a su lado. Cuando los sentimientos mandan, de poco sirve todo lo demás-
____ se separó de él girando en redondo, pero Joe la detuvo.
-No te vayas- le dijo -No merece la pena. Si quieres, me coso la boca y no te hablo de nada, de nada referente a tí ni a mí. Pero no te vayas.-
____ alzó de nuevo la cara.
-¿Por qué éstas aquí?¿No haces guardia toda la semana por las gasolineras de los Benet?-
-Tengo algunos días libres al mes, y aunque son los lunes, hoy no sé por qué pedí el jueves, quería buscarte, no sé por qué el instinto me dijo que la niña mona, la del Porsche, había tenido la misma idea que yo- meneó la cabeza. Seguía con su pelo rizado -Lo siento, ___, esto me entró demasiado fuerte y tú sabes muy bien que yo no lo busqué. Fuiste tú aquella mañana de domingo, hace ya muchos domingos. A punto estuve este último domingo de cambiar con otro empleado e irme a cualquier otra gasolinera de la ciudad, pero no pude. Tampoco soy tan valiente. En el fondo pienso que soy tierno y que me gusta serlo.-
Mientras hablaban, caminaban hacia el interior del polideportivo. ____ tenía claro ya que ni iba a nadar ni que iba a jugar al tenis. Ni siquiera se iba a cambiar de ropa. Vestía un pantalón blanco ajustado a los tobillos, demarcando sus formas y esbeltez, y una especie de polo blanco también con un suéterde algodón rojo que ataba al cuello por las mangas. Era muy joven, pero con aquel atuendo aún lo parecía más.
-¿Adónde vamos por aquí?- le preguntó él.
-A la cafetería- dijo ____
-¿No vas a meterte a la piscina?¿Y para qué quieres la mochila si no te vas a meter?-
-No voy a nadar, no voy a cambiarme siquiera.-
-¿Y a dónde vas a ir?¿Con tus amigos o con tu novio?-
-A casa- replicó ella.
No sería facil de olvidar la conversación sostenida con Joe en el polideportivo, las veces que él le confeso su cariño, ni la despedida al del automóvil: ya anochecido, cuando él la tomo en brazos y la beso largamente. No pudo rechazarlo. Jamás nadie la había besado así, jamás nadie la había estremecido de pies a cabeza, jamás nadie la había hecho sentir tanto placer, tanto goce con un simple beso, digamos, como si la hubiese poseído allí mismo, a la vista de todos, pero para ella, imaginariamente, en la intimidad...

14º Capítulo.
No supo ni cómo condujo el auto hasta su casa ni cómo entró en ella, pero sí supo que su padre la esperaba con el semblante cerrado, indicador de que sabía de dónde venía y con quien había estado. Lógicamente, tenía motivos para ser así, porque la villa no dejaba de ser un pueblo donde todos se conocían, dónde lo que sucedía en una cocina se sabía enseguida en la otra.
Pero para entonces ella estaba dispuesta a todo, dispuesta a defender lo que amaba y lo que sabía que podía hacerla feliz, con más o menos dinero, pero mientras el amor fuera vivo y el deseo vibrante, no habría forma de complacer a sus padres de casarse con Lucas e iba a decirlo así.
-Pasa- dijo el padre con un acento bastante seco.
Ella cruzó el umbral. Entró por el vestíbulo hacia el salón y lo dijo sin que su padre pudiera tomar la palabra, mientras su madre la miraba espantada.
-Voy a dejar a Lucas- y su voz a ella misma le sonaba fuerte -Voy a casarme con un joven sin dinero, con un empleado de una gasolinera y lo conocen muy bien, porque dado como son, ya habrán pasado por allí para saber quién era el hombre que me apartaba del elegido por ustedes. No, no hables, papá, ni tu, mamá, ahora me toca hablar a mí, ya sé que no los voy a convencer de nada, pero no habrá forma humana, ni siquiera el cariño que les tengo, que me fuerce a algo que no deseo. Me doy cuenta ahora de que me han buscado novio a su gusto, ¿dónde queda mi elección? dime, ¿dónde papá? es por eso que no me veo feliz a su lado. No es que lo odie, pero nunca, jamás, podría ser la mujer de Lucas. No me veo a su lado teniendo hijos con él y mucho menos teniendo vida íntima. Perdónenme, ya sé que éste no es lenguaje de ustedes, ustedes pertenecen a otra generación, y yo, afortunadamente, pertenezco a la generación de HOY, la que vive HOY y lucha HOY, y lo curioso es que quiero ser de la generación a la que pertenezco, sin pensar ni en el pasado ni en el futuro, solo en el presente.-

Guardó silencio y esperó. No fue larga la espera. Inmediatamente, ambos, marido y mujer, murmuraron a la vez:
-Si cometes la mezquindad de casarte con ese gasolinero, no cuentes con nosotros para nada. Y no te lo decimos por hoy ni por mañana, te lo decimos para siempre. No podremos desheredarte- la voz del padre vibraba de indignación -pero si tendrás que esperar a que nos muramos para heredar, y aún somo muy jóvenes para morir.-
De repente, ocurrió algo muy extraño. Teodora, la muchacha, apareció en el umbral del salón en el momento en que su padre estaba de lo más indignado.
-Señor- dijo Teodora -Hay un matrimonio aquí, en el vestíbulo, esperando que ustedes los reciban.-
-No esperamos ninguna visita.-
-Eso han dicho, pero el caso es que insisten. Dicen que no estan citados con ustedes, pero que han considerado conveniente venir a verles. Han descendido de un Mercedes azul- y titubeante, añadió -Son gente rica, señor, gente de la capital, muy elegantes...-
Marido y mujer se miraron. En cambio, ___ había caminado lentamente hacia el bar y tras el mostrador, se servía un whisky, ella que nunca tomaba alcohol, estaba deseando tomar aquel licor para calmar un poco sus nervios, o quizás se los desatara de tal modo que pudiera decir lo que pensaba de la respuesta que le había dado su padre.
Por lo visto, sus padres se habían olvidad de ella en aquel instante. Pegados como estaban a sus esquemas y prejuicios, el hecho que la visita fuera de gente distinguida, como había anunciado la muchacha, les obligaba a ambos a cambiar de semblante y a recibir a los que quizas fueran sus amigos.
-Hazles pasar- oyó ___ decir a su padre con voz amable, muy diferente, mientras ella tomaba un largo sorbo de aquel líquido ardiente que le quemaba la garganta de tal modo, que le saltaron las lágrimas a los ojos y no sabía si aquellás, eran provocadas por la pena, la amargura o la decepción, o simplemente, por el licor ingerido.
Vio entre una cortina como si fuera de humo, cómo la pareja se perfilaba en el salón, y su madre y su padre salían al encuentro. Ella no los conocía, pero talvez su padre y su madre, sí.
Eran un hombre y una mujer aún jóvenes, muy elegantes, con una gran distinción, aunque parecían sencillos. El vestía de sport y ____ tuvo una corazonada. Y la tuvo porque aquel rostro curtido por el sol y surcado por alguna arruga le recordaba a otro rostro terso, con una melena enmarañada...

hola! veo que debi entrar antes pero bueno estoy aqui!!
wow se rebelo a sus padres! aplausos para la rayis!!
seran los padres de Joe? entonces tienen dinero?
hasta a mi me seduce Joe sin querer! xD
siguela please!
me encanta tu nove!