Re: El Círculo {One Direction} |NC|

por **peralta.** Sáb 27 Sep 2014, 9:55 pm

como no hacemos spam aquí entonces me olvidé que tenía que subir u_u subiré el martes o miércoles, espero :c
bueno, creo que debemos de buscar reemplazo para Mary porque no se ha aparecido y ya han pasado como dos o un mes y medio El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 481143288

es lo que pienso El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 481143288

ah, y prepárense para mi capítulo, grandes cambios se vienen ~~creo~~ El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 481143288

por **hange.** Dom 28 Sep 2014, 9:13 am

Steph me emocionas muack

por **indigo.** Jue 02 Oct 2014, 5:32 am

Em, perdona por tardar tanto en comentar tu capítulo, aunque lo leí hace ya unas semanas. También siento no poder hacerte un comentario como me gustaría. Pero bueno, mejor esto que nada.
Me has dejado flipada con todo lo que ha pasado en él, sobre todo, porque ya estaba deseando conocer más sobre la vida de Lenna, ya que alrededor de ella siempre ha habido cierto misterio. Lo que más me ha dejado con la boca abierta ha sido que su padre esté vivo y que además haya traicionado al Círculo, estos padres... También me ha gustado mucho la parte en la que está con Edward y descubre más sobre sus poderes, no sé, me gusta ese rollo de Obi Wan que se trae El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 82537658

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Está parte en concreto me ha causado bastante gracia, me gusta que Lenna se dedique a torturar a los chicos de vez en cuando.

—¡Hija de…! —el dolor aumentó y tuvo que cerrar la boca para no chillar. Me reí y decidí que fue suficiente, así que devolví la energía y camine lejos de allí.
—¡Eres una asquerosa! —chilló Louis.
—Y tu una nenaza —repetí las palabras de Alexa mientras me reía.

¡Y Dios! la parte de los sueños, en la que Lenna y Zayn sueñan partes del pasado del otro. Me pregunto quiénes eran ésas personas que torturaban al pobre Zayn. Pero sin dudo, la parte que más me ha gustado de todo el capítulo, la que hizo que se me pusieran los pelos de punta, de buena manera, fueron estas pequeñas frases.

— No somos tan diferentes, Bloom. Ambos hemos atravesado el infierno y vuelto de él.
—Eso no es cierto. Yo todavía no he vuelto.

Ya te lo he dicho muchas veces, pero me encanta como escribes, chica. Quiero seguir descubriendo muchas cosas de Lenna El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 1477071114

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Espero con ansias el capítulo de Steph y descubrir de una vez que nos tiene preparado.

por **hange.** Jue 02 Oct 2014, 4:05 pm

Ay gracias Kate, no te preocupes El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 1477071114

STEPH

por **peralta.** Mar 07 Oct 2014, 5:40 pm

que no me toca a mi? El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 3232760151

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por **peralta.** Mar 07 Oct 2014, 5:40 pm

ahhhh, i see what u did there, ems xD

por **hange.** Mar 07 Oct 2014, 5:41 pm

S T E P H

mujer, manten el secreto El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 1313521601

por **peralta.** Dom 19 Oct 2014, 5:55 pm

ya tengo el capítulo planeado, ya escribí lo que pasará, por favor, si vayan preparándose El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 481143288

por **peralta.** Dom 19 Oct 2014, 5:56 pm

yo también me iré preparando para su odio, i know El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 481143288

por **hange.** Dom 19 Oct 2014, 7:23 pm

NO JODAS AY DIOS El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 1022085747

por **peralta.** Vie 24 Oct 2014, 2:05 am

CAPÍTULO 32.

Stella Fabron.

Miraba fijamente a Edward, quién a su vez también me miraba a mi. Quería evolucionar mi poder justo como Joan, Lenna y Elise lo habían hecho. Y quería ser la mejor, era todo.
Sonreí para mis adentros cuando Edward desvió la mirada, había ganado nuestra pequeña batalla.
—Tienes algo especial Stella, ¿te has dado cuenta de eso?
Si, yo soy especial, por favor.
—Pienso que si, tu lindo ego te hace ver hasta cualidades que no tienes.
—Pero que soy capaz de desarrollarlas, ¿verdad? —Levanté una ceja, en cambio Edward me miró con cara de pocos amigos.
—Si, si eres capaz. —Suspiró. —No te lo quería decir por el gran ego que tienes pero eres el punto clave del círculo.
Mi mandíbula estuvo a punto de caerse, ante la sorpresa de la confesión del padre de Elise.
—¿Entonces soy más poderosa que Joan? —Una extraña alegría invadió mi tono de voz. Realmente estaba cansada de ver que ella recibía toda la atención en el grupo. “Joan necesito tu ayuda” “Joan, esto, Joan aquello”
—¿Tan desesperada estás para quitar a Joan como líder del grupo?
—No, necesariamente.
—Stella, mira. Ustedes la eligieron como líder del grupo, asi que no hay vuelta atrás.
—Pero...
—A lo que me refiero con que eres el punto clave del grupo, es que tus poderes combinan perfectamente con los poderes de las demás. Las haces más fuertes.
—¿A ellas? —Escupí.
—Y a ti, especialmente. ¿Sabes como recuperar la energía, una vez que usas demasiada?
—Siempre supuse de las moléculas de alrededor. No lo sé. —Me encogí de hombros, Edward sonrió de medio lado, su sonrisa no me trasmitía confianza alguna.
—Déjame decirte que asi es como no se hace. Le robas la energía a los demás, ellos no lo notan, por supuesto; pero tu no te cansas tan rápidamente como las chicas. Pero eso te lo explicaré más adelante, ahora vamos a ver los poderes secundarios que tienes. Manipulación molecular es como tener la vida de los demás, de todo el planeta en tus manos.

Me preguntó si yo sabía parar las cosas, ralentizar las moléculas, contesté que si. También si sabía de la Aceleración Molecular. A lo que respondí con un “no” rotundo.
Tomó una piedra del suelo y la puso a la altura de mis ojos.
—Cierra los ojos, concéntrate en las moléculas y luego vuélvelos a abrir. Piensa en la forma, el color y todo lo que puedas acerca de ellas.
Lo único que podia pensar era en bolas azules flotando por el aire, al abrirlos mi equilibrio logró desbalanzarse, lo único que podia ver eran las moléculas flotando por el aire girando varias vueltas sobre si, permitiendo correr los segundos con normalidad.
—Por tu cara de confusión, me imagino que ahora ves muchas cosas girando sobre si de distintos colores, justo como el símbolo de Jimmy Neutron. Ahora, mira la piedra que tengo entre mis manos.
La mire, asentí.
—Ahora enfócate en sus moléculas.

Entrecerré los ojos tratando de controlarlas mentalmente. Comenzaron a moverse un poco más rápido, luego su velocidad incrementó, ascendió y creció hasta explotar.
La piedra... Había explotado.
—Santa mierda.
—Aquí no se usan palabras antísonantes, Stella. —Cerré los ojos tratando de volver a mi vista normal. Miré a Edward al recuperar mi visión.

—Tendremos tanta diversión Stella. ¿Quieres ser igual de poderosa que Joan? Es hora de que uses más tu cerebro. —Ouch, eso dolió.
—¿Ya me dirás como recuperar mi energía? —Volví mi vista a su estado natural y me crucé de brazos.
—¿Crees que con una sola lección vas a aprender todo? Contigo tengo planeado muchas sesiones.
—¿Por qué?
—Tu poder es el que puede crecer más que los poderes de las demás, tienes muchos pequeños poderes secundarios que con, el trato correcto puedes ser la más poderosa de las cinco. Eso ya depende de ti. —Sonreí de medio lado, estaba claro que no iba a descansar hasta lograrlo. —Pero si crees que estás lista para enseñarte más cosas, hagámoslo.
—Por fin que dices algo con sentido.
—Róbame la energia entonces. —Extiendió sus brazos y me miró fijamente, fruncí el ceño ya que no tenía ni la menor idea de como hacer eso. —Tienes que mirar el aura de las personas, y una vez que lo hagas, entonces haces contacto físico y ta-dá. Recuperas un porciento de energía, mientras la otra persona no lo nota. Vamos.

¿Me está jodiendo? ¿Cómo quiere que mire su aura cuando no me ha dicho como hacerlo? Se muchas cosas, pero no de esa magnitud. ¿Quién se cree que soy?
—Estoy esperando, Stella. —Se mantiene en la misma posición.
Suspiró frustrada.
—Pensé que eras de las personas que no se rendían, Stella. Por favor, no cambies la perspectiva que tengo sobre ti. —Moví mi cabeza de lado a lado y tomé aire. Mirar el aura, ¿cómo chingados se supone que iba a hacer eso? ¿Por arte de magia? Lástima que tengo un poder sobrenatural.
Esto no es concentrarse, Stella. ¡Lo sé! Pero no sé que es lo que tengo que hacer, lo que se supone que debo hacer.
—¿Quieres una pista? Te doy una pista..., usa tu color.
—No entiendo.
—¿Qué te dije acerca de usar tu cerebro? —Gritó. —¡Úsalo! No lo tienes en la cabeza por nada.

Agradecería mucho que Helenna estuviera aquí para hacerlo llorar de dolor. Odio que me traten estrictamente, pero es el tipo de trato que necesito para poder entender las cosas.
Color, mi color... ¡Oh! ¡El color de los elementos! Mi color es el... ¡Blanco! Listo, tengo mi mente en blanco.
Cerré los ojos, tomé aire y los abrí. Mi vista se veía distorsionada, no podía encontrar la forma a nada, sólo sabía que era cada cosa porque había memorizado el paisaje a mi alrededor.
Edward seguía con los brazos extendidos, o eso parecía. No..., si seguía asi. Había una fina línea blanca a su alrededor, que cubría todo su cuerpo, de pies a cabeza.
—Toca cualquier parte de mi cuerpo. Anda. —Di dos pasos con cuidado de no caerme, mi visión todavía no mejoraba mucho. Extendí mi brazo, lo toqué y la línea blanca se cortó en su brazo, y se volvía a unir momentos después.
—Como ahorita no estás cansada, es obvio que no notas la ganancia de energía. Vuelve tu visión normal. —Cerré los ojos y todo volvió a la normalidad. —¿Sabes como me he dado cuenta?
—¿Cómo?
—Tus ojos..., se pusieron blancos. —Justo cuando las cosas no podían ser más raras. —Mañana aprenderás a hacer un terremoto.
—¿Qué?

**

—¿Qué aprendiste con Edward? —Harry se sentó en el sofá con la pierna izquierda arriba y la otra abajo, estaba de lado. Soplé al café y luego bebí, Edward me había dicho que no revelara mucho de mi entrenamiento.
—Nada interesante, lo mismo de siempre.
—Si lo mismo de siempre se refiere a congelar a Edward... Está bien. —Sonreí sin mostrar los dientes y noté de reojo que Harry lo hizo también. El papá de Elise me había enseñado una cosa llamada Inhibición molecular, podía bajar la energía de las moléculas con mi mente al tal grado de congelar objetos o seres vivos por la poca fuerza de atracción (resulta que entre más fuerza haya, más calientes se ponen las moléculas). Fue divertido quitarle el hielo a Edward cuando logré congelarlo por completo.
—Si, ya no quiere utilizar a Helenna como anzuelo por miedo, me dijo como ésta lo amenazó después de los atentados con los cocodrilos y también como ha crecido con sus poderes.
—Ahora tendré miedo de mi mujer. —Fruncí el ceño ante sus palabras. ¿Me había llamado su mujer?
—¿Desde cuándo Helenna es tu mujer?
—No, no. Me refería a ti.

Preferí no contestar y cambiar el tema inmediatamente.
—Debimos de quedarnos con Perrie de anzuelo. Sería divertido ver como fallamos en nuestras tarea y ver como muere. Se lo merece.
—Nadie merece la muerte de esa manera, Stella.
—¿Por qué la defiendes, después de todo lo que ha hecho? —Se encogió de hombros.
—Porque no. Es mi amiga al final de todo.
—Es bueno saber que llamas “una amiga” a la persona que casi te mata. Entonces si te mato y logro revivirte, ¿que seré?
Y el que no contestó ahora, fue él.

Me levanté del sillón y me dirigí a la cocina, me encontré a Joan leyendo el libro de la familia de Elise.
—¿Algo nuevo?
—Mucho, hay cosas que ni siquiera puedo imaginarlas sin confundirme en el intento. Necesitaremos mucho de la ayuda de Edward.
Me puse a un lado de ella y comenzamos a leer el libro juntas. Decía algo de un sacrificio para no se que cosa.
—¿Han visto a mi padre? —Preguntó Elise. Ambas negamos con la cabeza sin siquiera voltear a verla, escuché sus pasos alejarse de la cocina.
—Éste libro es más interesante que el tuyo.
—Viene más completo, ayer leí de nuevo el que se supone que es mío y tiene unas hojas arrancadas. Antes no me había dado cuenta porque no había analizado bien.
—¿Enserio no han visto a mi padre? —Volvió preguntar Elise, con una cara de terror. Negamos de nuevo.
—No te preocupes. —Le dijo Joan. —Se ha ido de caza el solo.
—Ese es el problema. Nunca sale de la casa cuando es de noche. —Joan y yo nos miramos confundidas, fuimos detrás de Elise y llegamos a la sala junto a los demás.
—Elise, los chicos y yo vamos a dar una vuelta alrededor de la casa para ver si encontramos a tu padre. —Dice Liam, la mascota de Joan le gruñó cuando comenzó a hablar. —Regresaremos cuando tengamos algo.
—Gracias chicos. —Y se fueron con unas linternas en mano y cantimploras llenas de agua.

Pasaron veinte minutos y los chicos aun no regresaban. Después otros 20 y al final se convirtió en una hora, no recibimos ninguna señal de los chicos ni de Edward. Ahora Elise no era la única nerviosa en la sala, estar en una casa alejada de la civilización no era un buen plan de refugio, pensándolo dos veces.
—¿Y si vamos a ver que pasa? —Dijo Helenna, pero antes de que Joan le respondiera, la puerta se abrió dejando ver a los chicos con las mejillas enrojecidas. Estaba haciendo frío afuera.
—Por favor que sean buenas noticias.
Ninguno le afirmó nada.

***

El olor del tocino me despertó, mi estómago estaba rugiendo y recordé que no había cenado nada la noche anterior, así que tenía mucha hambre. Al abrir los ojos noté que no estaba en el mismo cuarto en dónde me había dormido, si no que estaba en mi cuarto en mi casa de LA. El cima me pudo confirmar que si estaba en California, el calor se hacía presente en todo el lugar, eso me agradaba y me tranquilizaba. Pero estar en ese lugar se me hacía un poco raro, era como si estuviera en una visión donde nada de esto fuera real.
Me levanté de la cama y abrí la puerta, el aroma se intensifico aun más. Bajé las escaleras con miedo y preparada ante cualquier posible ataque. Pero lo único que veo en la cocina es a mi madre haciendo el desayuno y a mi padre leyendo el periódico en la mesa de la cocina.
—Buenos dias. —Me dijo mi madre. —Te has levantado justo para el desayuno.

Sonrió y asiento, me acerqué a ella para darle un abrazo pero tan pronto abrí los brazos e intenté estrecharla contra mi, se desapareció en miles de partículas, como si nunca hubiera estado allí en primer lugar.
—Se ha ido. —La voz ronca de mi padre llegó a mis oídos, había estado bebiendo. —Y si no haces nada, se habrá ido para siempre.
—¿Qué estás diciendo?
—Y te odiaré más si no la encuentras.

Mi corazón se encuentra latiendo rápidamente, mi frente está mojada, mi espalda y pecho también lo estan. He tenido una pesadilla.
Traté de tranquilizarme respirando hondo y cambiando mis pensamientos a cosas bonitas, había tenido una visión..., como la última que había tenido estando con Harry. Sólo que ésta vez se sintió más real, todavía tenía la sensación de oler tocino en mi nariz.

Me levanté del suelo en dónde dormía y caminé hacia la puerta, esquivando los cuerpos de Alexa y Lenna, abrí la puerta y salí del cuarto. Tomé mi celular de la barra de la cocina y había seis mensajes, mandados hace más de dos horas.

“¿En dónde estas? Necesito que me hables con urgencia”.
“¡Stella! Enserio necesito que me hables. Urgente”.
“No lo quería escribir pero esta bien, no me dejas otra opción. Tu madre desapareció.”
“¿Edward ya les dijo acerca del Anti-Círculo? Me ha llegado una carta muy sospechosa”.
“Stella, querida. No estoy bromeando acerca de tu madre.”
“¡STELLA!”.

Me llevé una mano a mi boca inconscientemente, sollozando por los mensajes que mi padre me ha mandado. La visión que tuve con Harry se había vuelto realidad, mi madre había desaparecido y no sabía como sentirme al respecto. Me quedé observando al celular, sintiendo como las lágrimas caían por mi rostro silenciosamente, ¿debía despertar a las chicas para decir las nuevas noticias? Porque no es nada normal que el padre de Elise y ahora mi madre hayan desaparecido.
—¿Stella? —, escuché la voz quebrada de mi padre, ahogué un sollozo. —Ya era hora que recibieras mis mensajes, ¿estabas dormida?
—Si, y el horario de Australia con el de Los Ángeles no es el mismo, debo recordarte.
—Me acabo de dar cuenta. ¿Ya has descubierto algo?
—No, pero el padre de Elise también está desaparecido, no estamos muy seguros.
—Seguiré buscando desde aquí, por mientras..., haz algo y encuentra a tu madre. —Y colgó. Al levantar la mirada me encuentro con los ojos verdes de Harry, su cara se encuentra pálida y tiene un leve temblor en sus manos.

—Lo vi, todo.
—Ayúdame a despertar a los demás. —Y así lo hace.

***

Dos días después, descubrimos que el padre de Joan y el abuelo de Alexa también estaban desaparecidos. Desaparecieron día a día, como si estuvieran siguiendo un patrón.
—Si estuvieran siguiendo uno, era obvio que yo lo tenía que romper. Mi madre murió a manos de mi padre y mi padre..., bueno sinceramente no me interesa una mierda en donde está, si lo están torturando o no. Me alegraría mucho esa noticia, para ser honesta.
—Lo sabemos, Lenna. —Responde Alexa. —Pero por una vez, por favor, pon nuestras necesidades primero que las tuyas. Nuestros padres han sido secuestrados por quién sabe quién y no podemos estar tranquilas. Hazlo por nosotros una vez.
Sé que Lenna no va a aceptar tan fácilmente, es tan predecible de leer que pedirá un favor para aceptar la propuesta de Alexa. Aunque parece ser que la morena está tan frágil que ni siquiera parece notarlo.
Lenna se aprovechará de ella, lo sé.

—Digamos que... —, se queda pensando, aumenta el nerviosismo en mi. Tengo un mal presentimiento. —Lo haré, pero después te daré el precio de mi aportación a esta aventura, misión, como se llame. —Alexa se alegra y escucho el respiro de alivio por parte de Joan y Elise. Yo simplemente entrecierro los ojos a Hel y ella me guiñe el ojo.
Yo no estaría tan feliz de estar en el lugar de Alexa.
—Eres una máquina dura de convencer, mira que pensé que iban a tardar un día en hacerlo. —Dijo Niall, a la vez que le tendía veinte dólares a Liam.
—Gracias Lenna. —El castaño le guiñó un ojos, ella solo atino a asentir con la cabeza.

Harry llega a mi lado y pone una mano en mi cintura, acercándolo más a él.
—¿Estás bien? —Susurra a mi oído. Lo veo a los ojos y le respondo que si.
Pero realmente no lo estoy, con mi madre desaparecida y mi padre llamándome cada hora para ver si ya tengo una solución, me pone los nervios de punta. No tenemos ninguna pista y por lo último que sé, es que somos seres sobrenaturales.
No unos putos detectives.

Después de ayudare a romper las muchas neuronas que Joan tiene -o tenía- en su cerebro, hemos terminado en el principio del asunto. En cero, totalmente.
Toda esta situación nos tiene estresadas, sinceramente. Sobrecargar nuestros cerebros para tener nada, no es algo que deseábamos en primer lugar. Estamos a unos momentos de atacarnos y matarnos entre los diez si no resolvemos algo ahora.
—¿Y no has pensado en hablarle a Jane? —Louis preguntó.
—Dado que estamos en medio de la nada, la recepción de teléfono es muy buena para poder comunicarme con ella. —Gruñió. Cerré los ojos en un intento por recuperar la paz, intento pensar en otra cosa que no sea a mi madre siendo torturada.

Edward me dijo que usara mi cerebro, lo estoy haciendo, pero no hay una respuesta positiva en todo esto. No puedo comunicarme mentalmente con mi madre, aunque quisiera hacerlo. Deben de tenerla dentro del polvo mágico para que no reciba alguna señal por parte de nosotros.
—Dame el libro. —No le doy tiempo de responder a Elise y se lo quité. Empecé a hojear las páginas y veo más dibujos que el libro de Joan y más información. Me senté en el sofá y cada página es más interesante que la anterior, pero no me sirven de mucho en esos momentos.
—No hay nada allí, Stella. Ya le he dado la vuelta a ese libro tres veces y no viene nada que nos pueda servir. —Decido ignorarla y ver si es verdad. Llegué al las últimas hojas del libro y veo cuatro páginas en blanco exactamente. Toqué la esquina de la primera y la información comenzó a aparecer, era acerca de como el poder de Alexa podía ser transmitido de una persona a un objeto. Fue casi como si tuviera un encantamiento encima.

—Se revelo una página. —Dijo Liam. —Lo acabo de ver. —Momentos después tengo a las chicas alrededor de mi.
—¿Será posible que cada una de nosotras revele una nueva página? —Me hice unos centímetros a mi derecha para que Lenna se sentara a mi lado, le di el libro y tocó una de las páginas en blanco y se comienza a revelar como con mi poder puedo cambiar la forma de objetos inanimados, seres vivos e incluso mi propia forma. Los impulsos de tomar el libro para leer se apoderan de mi pero los rechazo, hice mis manos en forma de puño antes de tomar de nuevo el libro. Elise tomó el libro, ella se encontraba parada así que no pude ver de que se trataba la nueva hoja. Le dio el libro a Alexa y la castaña menor lo tomó, se quedó helada por unos momentos.
—Creo que ya tenemos la solución al problema. —Pero a juzgar por la cara que puso, no eran buenas noticias.

***

Habíamos acordado en dormir un poco antes de hacer el ritual para poder darnos en sacrificio y así encontrar a nuestros padres. Realmente no era un sacrificio, si no que era ponernos en estado de coma de forma voluntaria. Volteé mi cara hacia el reloj, eran las tres de la mañana, no podía dormir. El sacrificio no iba a ser hasta la noche de ese nuevo día, pero debíamos de estar preparadas mentalmente para lo que iba a suceder.

De acuerdo al libro, mientras estábamos todas en coma, podíamos encontrar exactamente dónde estaban nuestros padres después de unas horas en ese estado. Nunca pensé que iba a sacrificarme por alguien, menos por mi madre.
La amo, es uno de los pocos seres humanos que se ha ganado mi gratitud y mi amor por el paso de los años (tal vez, el único), así que siempre crecí creyendo que mi madre era un superhéroe al que nunca le iba a pasar algo malo. Siempre supo como defenderse y como pelear a quién le buscaba pelea, bueno a todos excepto a mi padre. Ella siempre se derretía cuando mi padre empezaba a maltratarla, o a hacerle cumplidos. Cualquiera de las dos formas, se convertía en su sumisa, en la persona que él podía manipularla como fuera y que nadie a su alrededor sabía de todo aquello. Creo que no hay ninguna otra persona que sepa acerca de los abusos que mi padre cometía -y sigue cometiendo- hacia mi madre.

Y ahora..., sacrificarme para salvarla no era que estaba en mis planes cuando creciera. Siempre creí que al cumplir los 19 y vivir sola en la otra parte del mundo iba a cambiar la forma en la que veía la vida. Que iba a poder liberarme finalmente y encontrar el amor de mi vida a mis treinta años después de intentarlo muchas veces

Pero no me esperaba despertar un día en un callejón a las afueras de Londres con un señor que nos decía que teníamos poderes y que juntas formábamos a un círculo secreto, perseguido por muchos enemigos que no teníamos tiempo de descansar de un ataque a otro. Y es que no me imagino que vayamos a tener un tiempo tranquilo en mucho tiempo.
Muchísimo, tiempo.

Salí del cuarto y también salí de la casa, el frío recorrió mi cuerpo y traté de abrazarme para darme un poco de calor. Cosa que falló totalmente.
—No puedo dormir. —Escuché una voz grave detrás de mi, se trataba de Liam. Encendió un cigarrillo y se abrazó a si mismo también.
—La que se va a sacrificar seré yo, no hay razón para que no puedas dormir, Liam.
—Lo sé, pero hay algo en esto que no me da muy buena espina. —Ni a mi, siendo sincera. —¿Confías en Harry? —Cambia el tema rápidamente, lo que me desconcerta un poco; sigue fumando su cigarrillo.
—Ehm, no.
—¿Entonce porque se besan? —Se acercó unos pasos a mi, logré encogerme de hombros.
—Él es que me besa, realmente.
—Y tú te dejas besar, porque...
—Besa bien. Además, ¿a ti que te interesa? —Gruñí, Liam levantó las manos en forma de defensa.
—Solamente preguntaba, de amigo a amiga.
—¿Desde cuándo somos amigos? —La puerta se abrió y Harry salió, ambos dirigimos nuestra atención a él.
—¿Interrumpí algo? —Preguntó.
—No. —Contestamos al mismo tiempo.

Después de un tiempo callados, Liam tiró el cigarrillo al suelo.
—Sigue con el mismo criterio respecto a Harry, ¿quieres? —Se fue, no sin antes dedicarle una larga y fría mirada a Harry.
—¿Está bien?
—Que se yo. —Tiró las comisuras de sus labios hacia abajo y asintió.
—¿Quieres ir a caminar?

El camino es algo tedioso. Tener que fijarse en el piso para no caer en las trampas para lobos, zorros y cualquier cosa-que-se-puede-comer, que Edward ha puesto en el camino no es el concepto que yo tenía por “caminar” a un lado de Harry. El chico hizo detenerme, al poner sus dos manos en mis hombros.
—Creo que aquí es un buen lugar para detenerse. —Y no podría estar más de acuerdo.

Nos sentamos en un tronco y veíamos a la luna. Estaba llena, y se veía hermosa porque estaba más cerca de lo normal. De pequeña me gustaba mirar la luna por las noches en mi patio. Siempre que estaba a la mitad le decía a mi padre que parecía que el gato de Alicia en el País de las Maravillas sonreía en el cielo.
< —Probablemente una de las cosas más tontas que has dicho > Pero eso nunca me quitó la idea de la cabeza.
La luna me trae paz, algo que necesito con urgencia en esos momentos.
—Te veo muy pensativa.
—Lo estoy.
—También algo seca conmigo.
—Lo sé. —Realmente no tengo ganas de platicar, ¿por qué tendría ganas de platicar cuándo voy a ser sacrificada en unas horas? Harry debería de estar de broma en estos momentos.
De un momento a otro, Harry pasó su brazo a mis hombros, abrazándome y acercándome a él. Fruncí el ceño ante su acción.
—¿Qué estás haciendo? —Pregunté indirectamente para que quitara su brazo de mis hombros, pero no lo hizo.
—Disfrutarte por las últimas horas. —¿Enserio cree que me voy a morir, de verdad?
—Gracias por tus buenos deseos.
—De nada.

***

La fogata se enciende, nos colocamos alrededor formando una estrella de cinco puntas, cada una en la esquina correspondiente. Caen los últimos rayos de sol y nos preparamos para el primer rayo de la noche, en cuánto la luna toque la fogata, diremos una frase y cuando estemos lo suficientemente débiles los chicos deben de matarnos -dormirnos, para que no suene tan..., real- (los chicos no sufrirán la muerte, ya que con la frase separaremos por unos momentos los lazos de sangre) y tendremos unos pocos minutos para encontrarnos una vez que estemos en estado de coma. De allí, de acuerdo al libro, cada quién tendrá una visión diferente para poder encontrar a nuestros padres. Y después volvemos a la vida con ayuda de los chicos y unimos las piezas para hayar a nuestros papás.
Simple, sencillo.

El sol va desapareciendo, los nervios van aumentando.
—Si no nos despiertan, les cortaré los huevos a todos. —Advertí. —Y no estoy bromeando, además estoy segura que la chicas me apoyarán en eso.
—Si nos dejan como fantasma deambulando por el mundo, me encargaré de ser su fantasma personal. —Dijo Helenna, y no pudimos estar más de acuerdo.

Cerré los ojos y suspiré, mi cabeza comenzaba a doler pero traté de ignorarlo.
Comenzamos con la frase:

[center]Luna, ut sciamus quod si deessent animae insignitam .[/center]

Lo repetimos unas cinco veces más, comencé a sentirme un poco mareada. Al abrir los ojos nuestros colores internos salían de nuestro pecho y se quemaban al fuego, haciendo la llama aun más viva. Vimos como la luna se alineaba y alumbraba las cinco puntas de la estrella. Veía puntos negros, estaba a punto de desmayarme. Sentí como algo atravesaba mi estómago, un dolor surgió. Me acostaba al suelo, su mano estaba debajo de mi cabeza, una pequeña gota de agua cayó a mis mejillas.
Harry estaba matándome.
—No me odies por esto. —Escuché a lo lejos un susurro por parte de él, no sabía a lo que se estaba refiriendo. No quiero pensar más.

Pero estoy recolectando energía, lo puedo sentir. Ya no me sentía débil como hace unos momentos, si no que tenía la energía suficiente para poder abrir los ojos y levantarme del suelo, me sentia más viva que muerta.
—Stella... —Una voz suave me llamó, me volteó a Niall, está más pálido que de costumbre. —No estás muerta.
—¿Qué? —Mi voz sale grave, mi garganta se siente más seca de lo normal, algo no anda bien. —¿A qué te refieres que no estoy muerta? —Un golpe me sobresalta, Louis detiene a Harry y Liam lo está golpeando. No entiendo que está pasando, y estoy asustada.
—Harry te tenía poseída. —< Ninguna alma poseída podrá ser sacrificada. >
—¡¿Qué?! ¡¿Las chicas están realmente muertas?! —Grité. —¡¿Por qué golpean a Harry?!
—¡Él fue el que te poseyó! —Ahogué un grito. Siento como alguien me tomó por los codos, es Zayn. Harry nos dedica una sonrisa un tanto macabra.

El piso comienza a moverse, lo último que recuerdo es ver como Niall grita que no y viene corriendo hacia nosotros, después..., todo se hace negro.

por **indigo.** Vie 24 Oct 2014, 4:44 am

Aquí Kate en shock...
Comento bien mañana, ¡qué capítulo chica!

por Invitado Vie 24 Oct 2014, 2:33 pm

hooooooola<33 me llamo lucy, tengo trece y soy de arg. bueno, so... steph me llamo para cubrir a la chica de louis, y con muchas ganas lo haré sdgfsdjfgsfd (?) so.. no se muy bien que poner ah, solo gracias por dejarme estar en su nc chicas<33. leo todo y me pongo en marcha(?). gracias otra vez<33.

por **peralta.** Vie 24 Oct 2014, 2:43 pm

bienvenida Lucy, y de nuevo gracias por aceptar c: lamento responderte el mp tan tarde pero me olvidé realmente u_u

por **hange.** Vie 24 Oct 2014, 3:51 pm

BIENVENIDA LUCY <3
Gracias a ti por aceptar El Círculo {One Direction} |NC| - Página 38 1477071114

STEPH AUN NO LO SUPERO
COMENTARE HERMOSO CUANDO MIS FUERZAS VENGAN

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