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CAPITULO 7

CAPITULO 0.7

¡Malditos, Nanana!
Apago el radio mientras voy rumbo a mi casa, no puede ser posible que luego de soportarlos durante toda la noche, tenga que también soportarlos cuando ya me he librado de ellos por unas horas. Lo único bueno de la noche ha sido la broma que le jugamos; o mejor dicho yo le jugué a Louis y a Niall, ya que Coraline no estaba enterada de la idea de las chicas para cobrar el favorcito de las locas, esquizofrénicas, directioners que le han dado el vestido a Ellie. Ya quiero llegar a casita…

Ese chico, Sheeran; me agrada, no lo sé, él es distinto a los monos cuqueros del viejo Cowell, se ve bastante agradable; y Ellie y Jay estaban tan felices de verlo. Fue el único momento de la noche donde me sentí bien; Zayn se veía enojado cuando Michelle le sonreía a Ed, eso fue sensacional. Todo lo que sea joderle la vida a los Monos cuqueros del viejo, es bienvenido. Aunque eso produciría que Cora me odie, ¡Joder!

- ¿Por qué no se da cuenta de lo mierda que son?- me quejo hablando conmigo misma mientras me detengo en el frente de mi casa. Busco el control del portón del estacionamiento, en mi bolso y una vez abierto acomodo mi coche detrás de la camioneta de mama.

Tomo mi bolso y con un suspiro profundo y lleno de una jodida exasperación, me bajo del auto. Camino por el pasillo del estacionamiento y soy recibida por mis perros Ren y Stimpy, mis dos cerditos.
Me aproximo a entrar al Hall trasero de la casa, donde papa tiene su mini bar, acompañara por los perrillos traviesos que me pisan los talones. Veo a mi padre sentado en el sofá grande, entre sus manos se encuentra un pequeño vaso lleno de un líquido amarillento, lo tintinea unas cuantas veces y luego se da cuenta que estoy a un lado de él, sonríe apenas. Yo lo imito y camino a paso tranquilo hasta la barra para servirme algo del ron de coco que tengo guardado en el mini bar.

- ¿Dónde anduviste? – me pregunta luego de unos segundo, me sirvo el trago y me siento en el sillón frente a él.
- Estaba cenando con las chicas.- digo mientras me tomo un sorbo, siempre he sido buena mentirosa, pero no sé si esta vez mi exasperación me gane y papa se dé cuenta de que le miento. Aunque en parte no lo hago.
- ¿Cómo están ellas?
- Bien, en especial Coraline, esta radiante estos últimos días.- El sarcasmo en mi voz es tan obvio pero papa no lo nota. Pinpinea su Whisky unas dos veces, algo le pasa, creo que no soy la única con problemas.
- Me alegra mucho, siempre está algo callada.- Dice de pronto, sin mirarme, sus ojos solo están concentrados en el suelo. Suspira profundo y acaricia a Stimpy- Me he dado cuenta que todas las noches llegas primero aquí, que a tu cuarto. Estas bebiendo mucho, Em.- Me quedo fija viéndolo unos segundos y se encuentra con mis ojos, papa siempre tan sereno incluso cuando quiere regañarme.
- Suena a reproche, viejo.- le digo con una risa tonta; el me imita y luego niega con la cabeza.- He estado con algo estresada con la universidad, Papa. – Miento de nuevo, la universidad no me ha dado tanto problema como lo han hecho los inventos de Coraline.
- Todo te saldrá bien, siempre es así. Tú amas la carrera.
- Sí, es mi vida, lo sabes ya.- Genial, la actitud rara de papa, el alcohol, Coraline, las chicas y esos… Bichos, me está pegando la melancolía. No quiero descuidar mis estudios, ni mi vida personal.- Creo que hoy solo tomare una copa y a dormir, debo ir a clases temprano. Tú deberías hacer lo mismo- De nuevo sus ojos me observan y sonríe cariñosamente.
- Como usted diga, Jefa.- Asiente divertido y baja a Stimpy de sus piernas- a dormir, perro.- le da unas nalgaditas y Stimpy corre hasta mí y se acuesta junto a Ren en mis piernas. Veo a papa de nuevo y como de un sorbo se lanza lo último de su whisky; lo imito y acabo con mi copa en un momento.

Me levanto junto a papa, el paso su brazo por mis hombros y me acuna contra el. Las dos ratas vienen detrás de nosotros y hacen que papa medio se tropiece cuando pasan por entre sus piernas, yo comienzo a reírme de el y comienza reírse también. Subimos las escaleras, ambos riendo. Me quedo callada una vez que estamos frente a su habitación.
- Descansa, viejo- beso su mejilla y me doy vuelta para caminar a mi habitación.
- Emma- Me llama, me vuelvo para verlo y el me acerca con un abrazo.- Te amo hija, aunque a veces este tan distante. Me sentí muy agobiado cuando vi las botellas vacías en el estante, no me gusta que tomes tanto Emma.- Me quedo entre los brazos de papa escuchándolo, hacía mucho que no me decía esas cosas. Por eso se quedó a esperar a que llegara, sabe que hay algo que me tiene inquieta; Perdóname papa…
- Estoy bien papa, sabes que te amo- le aseguro, otra mentira para el lote Em, me regaño a mí misma, pero ¿Qué más puedo hacer? No quiero contarle sobre la locura que estoy viviendo por cumplir el sueño de Cora, es mi amiga y se lo debo, ella me cuido cuando enferme; no puedo ser tan malagradecida. Y si se lo digo se enojara y se pondrá como loco, no quiero que pase eso.
- Creo que te he malcriado mucho Emma.- suelta de pronto apretándome con más fuerza.
- Me gusta que me malcríes.- murmuro con cierta inocencia y él se ríe.
- Claro que te gusta. – se separa de mí y sonríe- Vete a dormir.- me pide luego me palmea el trasero y yo asiento divertida. Por un momento pienso que papa, esta asi porque se siente culpable de mi actitud, debería darle aliento.
- Eres mi hombre perfecto, Viejo.- Le aseguro sonriente y el asiente con la cabeza sonriendo cariñoso.
- Ve a dormir, hija.

Una vez en mi  habitación, camino hasta el baño para hacer pis, creo que es producto de la copa que tome con papa. Ren y Stimpy entran al baño conmigo y mientras estoy sentada haciendo del uno; ellos saltan hasta mis piernas y yo los empujo, Perros Birriondos, necesitan novia. Los sacudo de un manotón y sigo con lo mío mientras pienso en la jornada de mañana; Debo ir a la universidad y luego a la empresa de papa. Tengo que hacer la jornada de revisión mensual a las secretarias regaladas que contrata la tipa de recursos humanos. No quiero a ninguna prostituta trabajando cerca de papa. Ahora que lo pienso, este es el plan si el viejo verde de Cowell no me lo arruina como lo hizo con Carrie, quien tendrá que salir con Styles, a solas; Buena suerte amiga. Salgo del cuarto de baño en ropa interior, y me encamino al closet para sacar la pijama y largarme a dormir. Los dos monstruos ya están mas que cómodos en la cama cuando yo me tiro sobre ellos.Cojo el teléfono que está guardado en mi cartera, tengo tres mensajes, uno de Coraline, otro de Jay y el último es de un número desconocido. Abro el de Coraline primero:




Agradece Coraline, Agradece que la bestia se mantuvo dormida en la noche. Decido no contestarle, ya debe estar dormida, soñando con lo fascinantes que has sido estos dias desde que "Ganamos el premio máximo a la felicidad"; yo lo unico que gane fue mas tarea. -Te amo Cora- Eso me repito cada vez que Liam se me acerca. Abro el siguiente mensaje:



Este mensaje es algo emocionante, la ultima vez que estuve en ese bar me embriague con unos excelentes Daiquiri de fresa; Por supuesto que iré. Le envió mi respuesta positiva, si tengo éxito mañana no tendré que ver a los Monos cuqueros; ¡Yeeei! Celebro para mi misma, Bailando un trancadito de caderas en la cama. Veo el ultimo mensaje mientras Ren, se entretiene mordiendo mis dedos por en cima de la sabana. ¡Mierda, y yo que pensaba que seria feliz mañana!:


¡Por la virgen de Fatima y los enanitos de blancanieves! ¿Es en serio? A la mierda. Que aberración tan jodida, de nuevo me lo tendré que aguantar al pelado, encopetado este. Y ¿De donde saco mi numero?, esa era la única cosa feliz que aun no se había arruinado.- Te amo, Cora, Te amo, Cora-. Me lo repito varias veces, pero entre la molestia y lo cansada, mis ojos pesan y la lengua de Stimpy en mi brazo ya esta dando su efecto.


Mi despertador suena, son las 7:30 am; tengo clases, Tengo tanto sueño, quiero arrechochinarme de nuevo y dormir. Pero la maldita alarma suena y suena, mis perros están uno sobre mi trasero y el otro a mis pies, por el peso, deduzco que el de mi trasero es Stimpy. Quiero seguir durmiendo; -¡Levanta el trasero, Emma!- me regaña mi subconsciente, quien parece estar mas despierto que yo justo ahora. -Muévete, debes irte a la universidad antes de que llegue, Liam-. Cierto, abro los ojos de golpe y me levanto casi corriendo; mi pie se enreda con la sabana y caigo al piso de manera estúpida y torpe; pero no tengo tiempo para acariciarme la rodilla, debo correr al baño he irme antes de las nueve de la mañana. Escucho chillar a Ren, quien sin querer lo traje conmigo al suelo; pobre estaba en mis pies cuando lo arrastre. Entro al baño, dando grandes pisotones y los pervertidos de mis perros me siguen el paso; los echo del lugar y me desnudo para entrar a la ducha, Este es el colmo; mis perros tienen fantasías sexuales conmigo, que anormal. Anoche en el inodoro y ahora quieren en la ducha, En serio necesitan novia.

Me doy un baño rápido y salgo de la ducha, me seco tan rápido como puedo y coloco una toalla al rededor de mi cuerpo. Me detengo frente al espejo, conecto el secador y le abro la puerta a los perros; Ya pueden pasa, pervertidos. Seco mi cabello y lo peino mientras lo hago para que queden mis hondas naturales, no tengo muchos ánimos de hacerme un peinado a lo grande, con estar bien desgreñada me basta; ademas, no hay tiempo, Krilin puede llegar antes. Apago el secador una vez que mi cabello esta seco y me veo en el espejo, me gusta estar con la melena desordenada y rizada. Camino hasta la mesita al lado de mi cama, enciendo el radio y tomo mi teléfono para volverme al baño y maquillarme un poco.


La canción de "Step up 3", Bueno la que es en español; Me encanta, tiene un ritmito delicioso que me hace mover las caderas, aunque la pronunciación me sale del asco, eso no me detiene me gusta la canción y es mil veces mejor que escuchar los desgraciados "na,na,nas" de One Dream. Me maquillo suave y natural, hoy tengo un día largo así que nada extravagante. Salgo del baño y camino hasta el closet; pero me detengo horrorizada por lo que mis ojos están viendo, mis perros están teniendo un acto Homosexual, Ren esta violando a mi gordote. Shokeada, bajo a Ren de un manotazo de encima de mi otro bebe.

-Te buscare una novia.- refunfuño. Me pongo unos pantalones negros ajustados, una camiseta azul con rayas blancas holgada, El sostén me lo dejo negro así resalta con el pantalón. Saco una de mis americanas negras, unos botines de tacón negros y un collar largo con la cara de un tigre plateado. Una vez que estoy vestida me entra un caloron insoportable, me saco la américa y me quedo solo con la camiseta. Me echo un poco de perfume y veo el reloj, son las 8:15, tomo mi bolso y corro escaleras abajo. Mama esta desayunando, le arranco una tostada de la mano y salgo corriendo hasta llegar a la cochera. Escucho a mama de lejos -¡Emma!- Pero no me devuelvo, solo le grito desde la cochera que "Voy tarde a la universidad"; Krillin dijo que vendría por mi a las 9:45 am, así que mejor corro a la universidad.


Una vez que llego, ya son las nueve y quince, apago mi teléfono así no me localiza. -¡Muajaja!- Canturreo triunfante, esta vez no me lo voy a aguantar. Saco mi ipod de la cartera y coloco los audífonos en su lugar. Busco alguna canción que me suba mas el ego y la bailoteo mientras camino por los pasillos de la universidad. Me estoy dando cuenta que últimamente estoy muy atada a la música, a toda situación le busco una canción; Que me convenga claro.



Y si también me doy cuenta de algo, Justin Bieber esta mejorando, me gustan mas sus canciones luego de la marihuana que se fumo. Aunque estuvo rudo que unas locas empezaran a cortase por eso. Que aburrido venir a una universidad distinta que a la de las chicas. La universidad seria mas perfecta si ellas estudiaran aquí conmigo, pero no, las muy antojosas escogieron universidades distintas, Enfadosas. Cuando entro al aula correspondiente, todos los ojos se concentran en mi; mierda, ¿De nuevo?. Jade, una compañera, me extiende el periódico; No estoy en primera plana, estoy en medio, al menos tuvieron un poquito de considerada esta vez. Leo el titular o encabezado, "Woodhouse, Gastando el dinero de papi", a la mierda con ellos, la foto es del día del concierto de los perros; Primera fila, pases a camerino y bebidas caras. Si supieran que me han obligado a ir a esa tontería, no gastaría dinero en semejante estupidez, si en los tragos, no en lo demás.

-Ignora eso Jade, son patrañas. Solo fui con las chicas por Coraline.
-¿Que opina tu padre de los ataques que te hacen en los periodicos?- pregunta curiosa, Jade es una chica linda, cariñosa y muy timida; pero no es ninguna de las chicas, por lo tanto hay cosas que prefiero reservarme con ella. Me encojo de hombros y le resto importancia.
-No le importa, sabe que no soy ninguna Barbie atolondrada.



Ya ha llegado la hora de la salida, ya puedo prender el teléfono. Subo al auto y lo dejo tirado en el puesto de copiloto; son exactas las 11:30 am, tengo que irme a la empresa de papa. Me pregunto si Krilin, habrá ido a la casa; No tengo mensajes suyos. Avanzo en el trafico y la curiosidad puede mas que yo, así que tomo el teléfono y marco el numero de la casa, este repica dos veces y nadie contesta, y no es hasta la cuarta repicada que alguien atiende.

- Familia Woodhouse, buenos días.- La voz formal de Abigail atiende.
- Abi, soy Emma.
- Señorita Emma, ¿Todo bien?- pregunta la mujer con un deje de preocupación, yo nunca llamo al teléfono de la casa.
- Si, quería preguntarte si no ha ido nadie a buscarme a la casa.
- Ehm… Si, vino un chico, Alto, blanco, con lunares y tenía cabello corto. No recuerdo su nombre.
- Sí, es Krilin- le digo pero me tiro a reír cuando lo presento con ese nombre.- ¿Qué dijo?
- Pues, le dije que usted había salido temprano para la universidad. El chico se vio enojado, pero dijo que ya la vería luego.-¡Ja! Se enojó. La luz cambia y el tráfico comienza  a andar.
- Bien. Muchas gracias por la información Abi, nos vemos luego.
- Hasta luego señorita, Emma.- Cuelgo el teléfono y voy en línea recta por el camino a la empresa de papa.  Debo cumplir con el rol que más me gusta de trabajar de vez en cuando en su empresa; Votar a las perras. Aunque, si lo pienso mejor, yo ando muy Happy por lo que le he hecho a Liam, ¿Y si me denuncian?, Maldito viejo. Mejor no pienso en eso, mejor pienso en que deje a Liam votado en mi casa y en que voy a botar perras de la empresa de papa.


Una vez dentro del edificio, camino por los pasillos siendo vista por todos, algunos llevan el periódico en sus manos, más les vale que se comporten, hoy tengo ánimos de dejar gente sin trabajo. Creo que dentro de mi habitan dos ángeles, uno bueno y uno malo, ya que casi siempre mi subconsciente me dice que haga cosas o buenas y a veces malas; Que divertido, tengo dos conciencias. Llego hasta el despacho de la jefa de recursos humanos y ella se encuentra atendiendo a una chica. Espero en el umbral de la puerta hasta que ella se percate de mi y cuando lo hace, sus labios se fruncen, Así es sonsacadora de padres, soy yo de nuevo.

- Emma, bienvenida- sonríe mientras se levanta de su escritorio, que mujer tan hipócrita. Hago un asentimiento con la cabeza, a veces amor ser tan repugnante, Luego le dedico una mirada a la linda rubia frente a mí. Jelenna, me comprende de inmediato y se inclina para tocar el brazo de la chica- Emma, ella es Valentina.- señala a la muchacha y esta se da vuelta hasta toparse conmigo, parece tierna… No me agrada. – Es una de las nuevas pasantes. Ella es Emma, la hija del señor Connor.
- Muy linda- murmuro de manera despectiva y ruedo los ojos.- Para ti es el señor Woodhouse, Jelenna. Nada de Connor- Le recrimino a la mujer de cabello negro. No me gusta su exceso de confianza; que no me haga sacar a Sophie.-¿Qué edad tienes?- Le pregunto a la chica, quien me mira con los ojos muy abiertos, supongo sorprendida por cómo le he hablado a la pelinegra.
- Tengo veinte, Señorita Woodhouse- me responde educada
- Yo la voy a entrevistar, Jelenna. Adios.- avanzo dentro de la oficina y me siento en su escritorio, se siente rico hacer de mala un ratico. Ella frunce el ceño y sale de su oficina.- Bien niña bonita, cuéntame de ti.
- Ahm…- duda un poco, está nerviosa.-¿Qué quiere saber señorita?
- ¿Por qué quieres las pasantías aquí?
- De hecho, presente para dos empresas, esta fue mi segunda opción- responde apenada- en la primera no me aceptaron por ser muy joven, el jefe de recursos humanos quería algo extra para dejarme entrar- responde de forma tímida La mirada de Ellie está ahí unos momentos. Es como si le diera vergüenza en serio la cosa, por un momento la observo detalladamente, no tiene pinta de arrabalera; Esas son las peores, Escupe el angelito malo.
- Asi que no llegaste a nada con el hombre.
- No señorita, amo mi carrera y necesito las pasantías para que me den el título, pero no haría nada sucio.- El rubor en sus mejillas la delata, es una niña buena y estudiosa. Me recuerda a Carrie y a Jay, quiere llegar a ser grande sin caminos fáciles, eso me agrada.
- Estas dentro.- suelto con una sonrisa sincera y educada.-Bienvenida pues- su cara de felicidad me recuerda a Coraline, así de feliz estaba cuando ganamos a los One Dream. Genial ahora me siento fatal por lo que le hice a Liam, Cora se va a enojar.
- Muchas gracias, En serio muchas gracias.- Esta chica es una mezcla de mis amigas, supongo que por eso me agrada. Solo asiento con la cabeza y me levanto del escritorio.
- Te mostrare donde te vas a instalar y luego haremos un Tour por el edificio.- le explico mientras avanzamos, ella asiente de forma exagerada con la cabeza, Vaya que esta emocionada; Bravo Em, has hecho dos cosas buenas esta semana, Angelito bueno esta aplaudiendo feliz, veamos cuanto dura la magia antes de que el angelito malo aparezca de nuevo.


Luego de pasear a Valentina por todo el edificio y de deshacerme de dos pasantes, me dispongo a caminar hasta la oficina de papa acompañada por la rubia. Tengo que presentársela, ella parece fascinada, parece comprender porque he echado a esas dos zorras con mini falda y piernas gruesas y largas; No quiero pejelagartos cerca de papi, creo que lo dejo muy claro cuando entran aquí. Julietta, la asistente del Viejo, está sentada en su escritorio justo antes de la puerta para la oficina de mi papa. Ella sonríe dulcemente y se levanta.

- Emma, querida- se acerca y me da un abrazo, adoro a esta mujer.- ¿Cómo has estado?
- Bien, gracias- le respondo gentil.- Ella es Valentina, una de las nuevas pasantes.
- Hola- saluda tímida, julietta le toma la mano y le sonríe abiertamente como si la conociera de años.
- Soy Julietta, la asistente del señor Woodhouse. – se presenta y luego se vuelve hacia mí. – Linda, hay alguien que te andaba buscando, está adentro con tu padre.
- ¿A si?- pregunto extrañada. Por una milésima de segundo siento el estómago revuelto.
- Si, tu padre me pidió que en cuanto llegases aquí te hiciera entrar.- yo asiento con la cabeza, de pronto estoy nerviosa y si es Cowell que ha venido a papa con el chisme, ¿Qué hago?- Asi que entra, cuando salgas le presentamos a Valentina.

Asiento con la cabeza y camino hasta la puerta de madera obscura de la oficina de mi padre, toco dos veces y escucho el pase de la voz ronca de papa, esta enojado; la pone asi cuando esta enojado. Creo que mejor salgo corriendo, sea quien sea que este dentro con el, no le agrada. Abro la puerta lentamente con manos temblorosas y me encuentro con el rostro enojado de papi, y el Imbécil de Krilin sentado en el escritorio. ¡Mierda!, ¿Cómo coño llego aquí?

- Papi- digo con voz queda, y suena más como un jadeo que como algo firme. El hace una mueca con su mano izquierda, quiere que me siente en la silla al lado del mono cuquero. Quiero llorar de frustración y luego degollarlo. Estúpido calvito.
- ¿Quién es el?- Un estorbo, papi. Pero no puedo responderle, me siento como si estuviera por desmayarme, tengo las manos frías y creo que estoy más pálida que de costumbre. Papa se exaspera cuando ve que no le respondo nada. -¡Emma!
- Ya se lo dije señor, soy el novio de Emma.- Mis ojos se abren en grande, creo que se me van a salir; ¡Imbécil sin cerebro! A Papi no le gustan los novios, Bueno, no le gusta conocerlos. Te voy a matar pelado.
- Emma…- pide mi papa “Sonando más calmado” yo sé que no lo está.
- Es mi novio, pa. – murmuro entre dientes, claramente disgustada.




- ¡eres un imbécil sin sentido común!- Escupo una vez que estamos en el estacionamiento- ¿Cómo se te ocurre venir aquí, Estas loco? ¿A caso no tener pelo te afecta o qué? ¡Estúpido!- chirreo entre dientes, las ganas de poner mis manos en su cuello son enormes. Papa estaba más que enojado, estaba furioso, y no dudo que en unas dos horas luego que se le pase el shock emocional, mama me llame.
- Eso te enseñara a que no debes dejarme plantado.- Me reprende con el entre cejo fruncido; Sophie tiembla en mi bolso, Sácame, sácame, acabemos con esto de una vez. Angelito malo, en este momento no tengo tiempo para ti.
- Eres un idiota.- abro la puerta de mi coche, pero el me detiene cuando voy a subir.- Suéltame, Peine.
- Tu y yo iremos a comer te guste o no. Y no es Peine, es Payne.- Encima me corrige, este loco me va a matar.- Baja de ahí y sube a mi auto.
- No me gusta que me lleven, si tanto quieres que coma contigo, tu subes al mío.
- No seas tan terca, vamos a mi auto; se supone que yo soy quien debe llevarte.- está enojado, y yo estoy hirviendo de ira.
- Ya te dije que no. Es aquí o no voy.
- Te llevare cargada entonces.- de pronto veo cierto cambio, lleva aire de diversión en sus ojos y en su tono de voz, este puerco se está divirtiendo de mi mal humor.
- Si lo haces, puedes tener por seguro que esos matones de allá.- señalo hasta la izquierda, los guardias de papa son gigantes.- y aquellos de allá- señalo al otro lado.- Te harán puré, así que coge tu maldito ego y tus bolas, y sube al puto auto.- Me ve con los ojos abiertos en grande durante un segundo y luego niega con la cabeza con resignación.
- Tu padre no debería malcriarte tanto.
- Tú sube al auto, Krilin.- La diversión y la alegría de ganadora ha vuelto a mí.

Una vez que salimos del edificio, el calvo va callado. Mejor, asi no me lo aguanto hablando. Decido prender el equipo pero lo primero que suena por las cornetas son sus voces, Joder, ¿Por qué? Rápidamente le bajo el volumen y conecto mi ipod, Krilin me observa extraño frunciendo el ceño.
- ¿Qué?- le pregunto odiosa- No soy fanática de ustedes, ¿es eso?
- ¿Por qué no te agradamos?
- ¿Por qué son odiosos?- sueno tan obvia que yo misma me rio de lo sarcástica que puedo llegar a ser.
Conecto el Ipod y dejo que la música viaje por las cornetas, #ThatPower suena fuerte, me gusta esa canción. Y esta mañana me hizo sentir poderosa, sin embargo mira no más con la sorpresita que me salió Payne. Deberias dejarlo aquí tirado en el semáforo, Angelito malo al asecho, adoro este angelito. ¿Que sera de la vida de las chicas?, eso me recuerda que hoy saldre a tomar con Jay, bueno ella va a cantar y yo a tomar. ¿Que haré con este pelon? El no ira conmigo, claro que no. Veo la hora en el teléfono; son las dos de la tarde, se me ha ido volando el día con todo este drama. Me concentro en la multitud que va caminando por la calle mientras esta la luz roja, y me percato de una chica que se pavonea como si de una pasarela se tratara, Liam también la esta viendo, pero creo que el esta mas concentrada en sus piernas largas que en lo ridícula que se ve. De un momento a otro, la chica ha caído al suelo, un señor se ha tropezado con ella y la a tirado al piso; no lo puedo evitar y estallo en carcajadas, unas fuertes carcajadas. Liam me ve por uno segundos y no es hasta que se me salen las lagrimas que el comienza a reír también, Ambos estamos burlándonos de la escena exhibicionista de la chica. ¡Gracias Dios, por darme algo de que reir! La luz cambia y yo aun riendo avanzo entre los carros. Liam ha dejado de reír un poco, pero al menos ya no esta tan tenso como hace un rato.


- ¿Dónde comeremos, One Dream?
- Donde tu desees, y es One Direction- me corrige de nuevo, pero la caída de la chica me ha puesto de buen humor.
- Bien, tengo ganas de algo asqueroso- Respondo mientras doy vuelta para entrar al centro.- ¿Te apetece?
- Claro.- asiente el y por primera vez desde que lo conozco, está siendo… Decente.
- ¿No estarás conmigo todo el día o Si?- le pregunto con un tono esperanzado. El me ve ceñudo, como si supiera que tramo algo. Pongo los ojos en blanco y aparco el auto.
- No tenía pensado hacerlo, ¿Tu qué harás?
- Ehmm… no lo se.- respondo, mintiendo pero por primera vez en la vida, por alguna extraña razón; no encuentro que responderle a alguien. Lo veo durante unos segundos y veo que no me cree ni una palabra, ¡Carajo! Invéntate algo Emma. Sin embargo el no me da tiempo de agregar algo.
- Has despertado mi curiosidad, Cariño- Profundiza la palabra cariño y bajo del auto. Yo me quedo dentro unos segundos desconectando el ipod y pensando en cómo zafarme de ese bicho. De la nada abre la puerta de mi asiento y me ayuda a bajar. Yo me quedo en estado petrificada un segundo ¿Qué mosca le pico? Me toma la mano y de pronto somos el centro atracción en la avenida. -Ahora quiero pasar todo el día contigo, a donde tú vayas yo ire.- se inclina y me besa la mejilla. No digo nada y camino, fingiendo que lo que él ha hecho es normal. Así que él quiere jugar, Genial vamos a jugar. Lo único que me perturba es que tendré que llevármelo al bar con, Jay. Bueno démosle al niño lo que quiere, si me embriago mantendré a Sophie cerca.