My Sweet Obsession (Adaptada) (Harry Styles y tú) |TERMINADA|

No podía creer lo que estaba leyendo, mi madre me había escrito una carta. Sentí como unas cuantas lágrimas corrían por mis ojos, no lo podía evitar, desde que mi mamá se fue aquél horrible día, nunca la había podido olvidar, y mucho menos su recuerdo. Ahora me siento impotente y triste: impotente porque el desgraciado que dice ser mi padre me olcultó todas las cartas que mi madre me había escrito, y triste, porque tengo mucho tiempo sin verla y ahora que sé que tengo una hermana, quisiera verlas a las dos y abrazarlas hasta el final del mundo. Sequé mis lágrimas y fui directo a Betty, me sentía muy mal como para seguir en la Universidad.
Apenas llegué a mi casa me tiré en el sofá a llorar larga y pesadamente. Antes era un niño sensible que se preocupaba por los demás y siempre andaba del lado de su madre, pero desde que ella se fue me convertí en una persona calculadora, en parte por la culpa de mi padre, y había olvidado por completo lo que era mar. Hasta que _____ (TN) apareció en mi vida, aunque no lo quería admitir, ella me devolvió las ganas de querer a alguien y de sentirme bien por ello. Lloro por todo, por lo idiota que he sido todos estos años, lloro porque mi mamá no está conmigo y no sé dónde buscarla, lloro porque _______ (TN) no quiere entender que podemos ser algo, no sólo amigos y lloro porque ahora me doy cuenta que mi vida siempre ha sido un desastre. Tomé la carta que mi madre me había escrito y la abracé contra mi pecho, es como si la sintiera a mi lado, aunque no lo está. Mi teléfono sonó y corrí a buscarlo en mi mochila, pero al ver el nombre de la persona que había llamado, lo tiré con todas mis fuerzas hacia una pared, descargando con él todo lo que sentía.

-MALDITO BASTARDO, TE ODIO POR SER MI PADRE- grité sin que nadie pudiera escucharme. Capaz el desgraciado de mi padre había llamado sólo para joderme la existencia, o lo más probable, se enteró que recibí una carta de mi madre.

Me lavé la cara y salí de mi apartamento. Tenía que buscar al mal nacido de mi padre para que me explicara todo esto y que me dijera el porqué de todas sus mentiras. Subí de nuevo a Betty y fui a buscarlo a su despacho. Cuando entré, la secretaría me dijo que en estos momentos no me podía atender, porque según ella estaba en una llamada muy importante con un inversionista, pues a mí me importaba un carajo lo que estuviera haciendo ese maldito, así que entré a la fuerza a su oficina.
Cuando entré pude verlo sentado tranquilamente en su silla, relajado, sin ningún tipo de preocupación, pero al verme sus ojos cambiaron de un completo aburrimiento, hasta una intriga y angustia.

-¿Qué pasa Harry?- me preguntó mientras volteaba su silla para dirigirme la mirada.

-¿A mí?, muchas cosas padre, pero quisiera que por una vez en tu miserable vida fueras sincero conmigo- le espeté mientras cerraba la puerta de la oficina.

-¿De qué hablas?, ¿Qué quieres saber hijo?- me preguntó.

-NUNCA MÁS EN TU MALDITA VIDA ME DIGAS HIJO, PORQUE DESDE HOY TE MORISTE PARA MI Y DESDE HOY NO ERES MI PADRE, JEREMY STYLES- le grité.

-¿Qué ocurre contigo niño? A mí no me vienes a hablar en ese tono petulante, y exigo que me digas que es lo que te pasa- dijo severo pero tranquilo.

-¿QUÉ ME PASA? !PUES QUE ME ESCONDISTE TODAS LAS CARTAS QUE MI MADRE ME HABIA ESCRITO, ME ESCONDISTE QUE ELLA NO ME QUISO DEJAR, QUE SE FUE PORQUE ERES UN MALDITO LOCO Y ME OCULTASTE TODA LA VIDA QUE TENÍA UNA HERMANA Y QUE MI MADRE ERA FELIZ! !ERES UN MALDITO DESGRACIADO QUE MERECE MORIR!- le grité con todas mis fuerzas acercándome hacia su cara. Él parecía no molestarle mi actitud, sino más bien le molestaba otra cosa, porque él nunca se inmutaba con lo que yo dijera, es más, era como si yo no existiera.

-¿Ocultártelo?, !Pues claro que si!, ¿es qué acaso no te haz dado cuenta que tu madre es una perra mentirosa que prefirió irse con un hombre y dejarte solo?- dijo.

-A MI MADRE NO LE DIGAS PERRA, NI EN TUS SUEÑOS Y ELLA JAMÁS QUISO DEJARME, SE FUE PORQUE TU ERAS UN EGOÍSTA MAL NACIDO Y CELOSO, QUE CREÍA QUE ELLA SALÍA CON TODO EL MUNDO, Y ¿SABES QUÉ?, ELLA AHORA ES FELIZ, Y LA BUSCARÉ, HASTA EN LAS PIEDRAS SI ES NECESARIO Y NO ME VOLVERÁS A VER A MI NI A ELLA, NUNCA MÁS EN TU PUTA VIDA- grité mientras salía de su despacho.

-Pues... si te vas ahora mismo de ésta oficina estarás muerto para mi Harry, y tú y tu madre pagarán por todo esto, te lo advierto- me dijo desafiante.

-Vete a la mierda loco desquiciado, ya entiendo el porqué mi madre huyó de tí, no sirves para nada y además crees que eres el único de éste mundo, y te digo una cosa: le agradecería a Dios que estuviera muerto para ti desde hoy Jeremy, me harías un favor- y salí corriendo de ese despacho.

Bajé hasta la planta baja de aquel edificio y me monté en Betty, ahora iría a buscar cómo fuera a mi madre.
Fui de nuevo hacia mi apartamento y pude ver a mi prima Sarah en la cocina, y estaba acompañada de Pamela, al parecer se estaban contando unas cosas referentes a _____ (TN), que sincermente no me interesaban en estos momentos.

-Primito de mi vida, se nota que andas apurado, ¿quisieras venir a hablar conmigo y con Pamela sobre ____ (TN)?- dijo mi prima tratando de hacerme molestar.

-No me interesa nada ahorita Sarah y discúlpame, pero no tengo tiempo para tus estupides- le dije mientras me dirigía a mi cuarto.

-!Eres un insolente Harry!, andas muy raro hoy, deberías de buscar un spa o algo así y por cierto... ¿qué haces entrando en mi cuarto?- preguntó la fastidiosa de mi prima.

-¿Tú cuarto?, perdóname pero éste siempre ha sido mi cuarto y tú eres la única intrusa que está en mi casa, así que no me digas qué hacer ni cómo hacerlo por favor Sarah- le dije subiendo el tono de mi voz para que me escuchara desde el cuarto.

-Está bien... no te molestaré más porque veo que no estás de humor, pero luego no vengas a preguntarnos a Pamela y a mí sobre _______ (TN)- dijo.

-Lo que sea Sarah, lo que sea... Adiós- le dije y cerré la puerta de MI cuarto.

Comencé a buscar entre todas mis cosas tratando de conseguir algo que me recordara algo de mi madre, papeles, fotos, lo que fuera que me diera una pista de dónde podría conseguir mi madre. Hasta que decidí buscar en las pocas fotos que había podido esconder desde aquél día que mi madre se fue, porque según mi... Jeremy, había que botar todo lo que recordara algo de ella porque había sido mala y nos había dejado a los dos. Encontré una foto donde salíamos ella y yo en una cabaña alejada de la ciudad, creo que en Homes Chapel si recuerdo bien, y al lado había un hermoso lago y un jardín. Recordé que esas fueron las mejores y las últimas vacaciones que pasamos juntos. No pude evitar que salieran algunas lágrimas, porque esa foto me hacía recordar muchas cosas buenas que viví. La saqué del portaretrato donde se encontraba y me di cuenta, despues de todos estos años, que en la parte de atrás de la foto había una leyenda.


Me emocioné a más no poder y escondí la foto en el bolsillo de mi pantalón, ya tenía una idea de dónde comenzar a buscar a mi madre. Me despedí de Pamela y de prima escusándome de que tenía que hacer unas cosas y volví a montarme en Betty, esta vez directo a Homes Chapel.
Sabía que estaba un poco lejos de aquel lugar, pero si era necesario pararía en algún lugar a dormir y seguiría al día siguiente hasta llegar a esa cabaña. Corrí y corrí muchos kilómetros hasta que se hizo muy de noche y no podía seguir por la ruta. Paré en un hotel que estaba muy cerca de Homes Chapel e hice una reservación para una noche.

-Muchas gracias- le dije al botones que muy amablemente me acompañó hasta mi habitación para saber donde quedaba. Me quité las botas que llevaba y me acosté en una cámada muy cómoda, de sábanas blancas con edredón de colores y ahí quedé hasta la mañana siguiente.
Cuando se hizo de día, a eso de las 9 de la mañana, vi mi celular y tenía alrededor de 10 mensajes, todos de mis amigos y de Sarah, inclusive hasta uno de _____ (TN), a lo mejor todos estarán preocupados por mí.

-¿Aló?- dije al llamar a mi prima Sarah para que supiera que todo estaba bien.

-¿Harry?, ¿Dónde demonios haz estado?- me gritó desde el otro lado.

-No grites, estoy bien, tranquila. Llamaba para avisarte que voy a tardar unos días en llegar a casa, no te asustes ni nada, me voy unos días a la casa de un amigo, es que... últimamente estoy muy tenso y me quiero relajar - mentí.

-Sabes que no te creo ¿verdad?, pero bueno, no te voy a fastidiar pero por favor mantenme al tanto, quiero saber cómo estás y ... por cierto, el tío Jeremy a llamado para preguntar por ti- me
dijo.

-Pues dile que ando bien, y por favor, si te pregunta dile que estoy yendo normalmente a la Universidad, NI SE TE OCURRA decirle que no estoy yendo- le advertí.

-Está bien, no le diré nada, pero ven antes de que se de cuenta que todo es mentira, sabes como es él contigo Harry, y no quiero que te metas en problemas primito- me dijo dulcemente.

-Tranquila primita de mi corazón, no me meteré en problemas, en todo caso, el que estará en problemas será él..- le dije, me despedí y le colgué. Tenía que ponerme en camino para tratar de llegar lo más rápido posible a Homes Chapel.
Despedí al gerente y al botones del pequeo hotel y tomé a Betty para partir camino a Homes Chapel, así me costara toda la vida. Llegué a eso de las 4:00 pm, a la cabaña en la que salía en la foto con mi madre y me emocioné muchísimo. Sabía que cada vez estaba más cerca de mi madre. Decidí tocar la puerta de la entrada hasta que una pequeña abuelita atendió a ella y me sonrió.

-¿Qué deseas cariño?- me preguntó muy amablemente la señora.

-Em... me preguntaba si usted conociá a una señora llamada Lucy Styles - pregunté.

-!Claro que sí! conozco a una mujer mucho más joven que yo que se llama Lucy cariño, pero no Styles, sino Richardson, y...¿para qué la busca un chico tan apuesto como tú?- me dijo la pequeña abuelita. Sonreí alegremente.

-Pues... la busco porque es una conocida de mi madre, y ella me mandó a preguntarle algunas cosas y a recoger algo en su casa, pero estoy perdido porque tengo mucho tiempo sin venir para acá y no recuerdo bien- le dije poniendo una cara de ángel.

-Bueno, tendrías que recorrer desde acá como 2 horas más en tu adorable moto cariño, hasta que llegues a una casa que está apartada, la reconocerás porque es la única en el camino- me dijo.

-!Muchas gracias señora!, es usted un amor- le dije y le di un beso en la mejilla.

-Y tu eres un niño muy educado y guapo, si no fuera tan vieja coquetearía contigo- y los dos reímos al unísono. Me despedí y tomé el camino hasta la casa de mi madre. La madre que tenía muchos años sin ver.