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Después de las once
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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1, 2
Re: Después de las once
por Tattoo Dom 03 Ago 2014, 3:24 pm
Señoritas les haré un spoiler y ando trabajando en la otra parte del cap. Quiero más lectoras.
Tattoo
Re: Después de las once
por Tattoo Mar 05 Ago 2014, 1:38 pm
Capitulo Dos
Allison
Sengunda parte
Allison
Sengunda parte
Cuando julia regreso a la habitación con el vestido de seda negra, encontró a la niña ahogada en el llanto. –Cariño- la nana tuvo que llevarse la mano al pecho, asustada por su estado de ánimo que había tenido un cambio tan repentino. Lo único que la mujer logro hacer fue abrazarla sin pregunta que ocurría, porque ella ya sabía que ocurría. -¡Alice!- exclamo su hermano de manera desgarradora, el llanto era tan lacerante y como no, si al fin y en cuenta se trataba de su hermana.
---
Las gemelas Mons se despertaron a la par, dormían en la misma habitación pero en camas individuales. Grace y Hope, las gemelas más guapas de Inglaterra, las jóvenes más deseadas y sostificadas de aquella ciudad, tenían belleza, clase, educación y una increíble fortuna de parte de su padre, todos querían casarse con una de ellas, los hombres pelaban por una de sus miradas. Grace y Hope eran amantes de los vestidos de época colonial y vintage, su recamara tenía un tapiz de flores y habían colgado en el techo un perfecto candelabro, lo cual resultaba muy peligroso, ya que si ocurría algún movimiento inoportuno las pequeñas piedras que colgaban como adorno en el caerían en la cama de Hope. –Buenos días- saludo una a la otra ¿Cómo saber quién? Grace y Hope compartían el mismo físico pero ambas eran muy diferentes. Con diecinueve años y en unos meses veinte las gemelas Mons estaban en busca de un buen marido y es que con aquella melena rubia y ojos castaños ambas tenías las misma oportunidades. –Parece que afuera ocurre un alborto- comento una de ellas mientras se dirigía al armario.
---
Miguel por otra parte era el hermano mayor de Allison y Alice, aunque menor para los demás. El parecido de él y Alice era sumamente impresionante, para ellos no existía duda de que eran hermanos. Miguel contaba con catorce primaveras, era un joven de cabello negro y los mismos ojos azules que los de Alice, pestañas largas y con una mirada tan seductora y peligrosa, de seguro cuando fuera mayor no tendría problemas en conseguir una novia. Aquella mañana de invierno el mayordomo despertó a al pequeño Miguel. –Joven Mons- lo llamo de manera delicada y sumisa. En cuanto el chico abrió los ojos puro percatar cierta tensión en el rostro de Alexander. -¿Qué sucede?- pregunto el hijo de la casa con un tono seguro y lleno de confianza. –Temo que debe vestirse lo más pronto posible- el mayor domo tenía la cara pálida y ojos rojos, como si no hubiera dormido la noche anterior. –y de negro- Miguel abrió tanto los ojos que parecía que le iban a salir, entendía a la perfección lo que pasaba. Su corazón se detuvo por unos segundos y la boca se le quedo sin saliva, aun así pregunto. -¿Quién?- Alexander bajo la mirada y sus ojos cafés se perdieron en un terrible dolor antes de comunicarle la tragedia a él joven – Alice- y el mundo se detuvo para siempre, Miguel se rompió en un llanto lleno de pesar. -¡No!- Sus cuerdas vocales desentonaron y mostraron su agonía. Alexander inmóvil frente a él solo pudo pensar en la dulce Elena. Las tragedias todavía no terminaban. Todavía quedaba una persona con sangre de Alice... Allison seria la próxima victima.
- Spoiler:
- lalalala por favor comenten chicas. Quiero sensuales lectoras.
Tattoo
Re: Después de las once
por Meenah.P. Miér 06 Ago 2014, 8:48 am
¡OMFG! te juro que he quedado mas que impresionada, escribes GENIAL, amo la historia y trama que tiene.
¡SÍGUELA MUJER!
¡SÍGUELA MUJER!
Meenah.P.
Re: Después de las once
por Tattoo Miér 06 Ago 2014, 11:31 am
unitatoRyM. escribió:¡OMFG! te juro que he quedado mas que impresionada, escribes GENIAL, amo la historia y trama que tiene.
¡SÍGUELA MUJER!
Muchas gracias linda, estoy trabajando mucho en esta novela y lo que tengo preparado es aun mejor. Sino puedo seguirla hoy mismo la sigo en unos dos días. Gracias por comentar eso me anima mucho.
Tattoo
Re: Después de las once
por ~Susie ∞Wallflower∞ Miér 06 Ago 2014, 12:26 pm
¡Hola!
Que dolor es el enterarse que alguien de tu misma sangre ha muerto, y ademas de que la próxima victima podría ser Allison, ojala que que Cheppy haga algo al respecto para poder salvar a la familia, muchas gracias por subir, escribes muy bien y siempre me dejas con ganas de seguir leyendo pero tomate tu tiempo n.n
¡Besos!
Que dolor es el enterarse que alguien de tu misma sangre ha muerto, y ademas de que la próxima victima podría ser Allison, ojala que que Cheppy haga algo al respecto para poder salvar a la familia, muchas gracias por subir, escribes muy bien y siempre me dejas con ganas de seguir leyendo pero tomate tu tiempo n.n
¡Besos!
~Susie ∞Wallflower∞
Re: Después de las once
por Tattoo Miér 06 Ago 2014, 1:07 pm
~Susie ∞Wallflower∞ escribió:¡Hola!
Que dolor es el enterarse que alguien de tu misma sangre ha muerto, y ademas de que la próxima victima podría ser Allison, ojala que que Cheppy haga algo al respecto para poder salvar a la familia, muchas gracias por subir, escribes muy bien y siempre me dejas con ganas de seguir leyendo pero tomate tu tiempo n.n
¡Besos!
Cheppy claro que cuidara de ella, que bueno que te guste el cap y gracias por esperar, intentare ser más responsable con esta novela y subir más seguido 
besos.
besos.
Tattoo
Re: Después de las once
por Tattoo Dom 10 Ago 2014, 2:29 pm
Bien chicas voy a cambiar un poco la mecánica de esta novela, explico; subiré capítulos los viernes o sábado, una vez por sena e intentare hacer maratones de 3 a 4 capítulos. Espero les agrade la idea y en un rato subo un cap.
Tattoo
Re: Después de las once
por Tattoo Dom 10 Ago 2014, 2:40 pm
Capitulo Tres
La caprichosa Holly
La caprichosa Holly
Y así, como una enredadera el escandalo se apodera de los muros de la mansión, crece el silencio y el dolor entre los familiares de Alice. Como una telaraña que está bien organizada para aguantar a la araña, de esa misma manera estaba construida la familia Mons, aunque los cimientos eran en realidad secretos e hilos flojos, ya que muchos de los integrantes se perdían entre locuras y venganzas. Carroll tenía muy poco tiempo de muerto pero aun así su cuento se extendía por todo el mundo, “Alicia en el país de las maravillas” una obra tan popular como intrigante que dejaba abierta la puerta de la imaginación para todos.
Unos zapatos de muy buen calzados se deslizaban a paso veloz entre los corredores de la mansión. Una joven de cabellos dorados y ojos cafés como los de su padre, una dama de noble corazón. Saluden entonces a la resplandeciente y maravillosa Anis, otra hermana de Alice. ¿eh? ¿Parece que Anis ya está al tanto de la situación? ¿A dónde se dirige? Los zapatos de tacón y tela cubierta caminaban a pasos agigantados. Anis tenía lágrimas en los ojos, pero un profundo odio había comenzado a nacer al enterarse de que la policía sospechaba que esto no era más que un asesinato. Bajo escaleras hasta el segundo piso, dirigiéndose a la zona norte de su hogar. Una falda de campana que le cubría hasta parte de los zapatos, un corcel de s y unas mangas caídas. Aquel conjunto era totalmente negro, especial para la ocasión. Llevaba el cabelle recogido en un moño alto que soltaba algunos rizos. -¡Lucas!- grito la joven de apenas diecisiete años mientras golpeaba la puerta de la habitación de su hermano. -¡Abrir enseguida!- fue una orden directa. Aunque en ese año las mujeres no tenían permitido hablar de semejante manera hacia un hombre. Lucas tuvo que hacer un gran esfuerzo para abrir la puerta y no tirarle semejante golpe a su hermana. -¡¿Qué demonios…?!- la exclamación se perdió en el aire al ver a su hermana con la cara roja y llena de lágrimas. -¿Anis?- sus ojos verde gelatina se calmaron y la preocupación lo invadió –Hermana- hablo tranquilamente, intentando mantener la cordura -¿Qué sucede?- fue cuando la chica lo abrazo y hundió su cara en el pecho de su hermano. Lucas era mayor que Anis por cinco años, era un hombre que entendía mejor que nadie las situaciones de gravedad. –Anis por favor cálmate y dime que paso- le susurro a su hermana mientras le acareaba la cabellera. Nada más fuerte que el amor fraternal. –¡Alice!- fue cuando la chicuela reacciono y miro directo a los ojos de su hermano -¿Qué pasa con ella?- pregunto el hijo varón más grande de los Mons. Y mientras la duda se sembraba en los hemisferios de su cerebro el dolor interno de Anis culmino de manera que se quedó sin aliento y con un aire de frio y que lograba helar la sangre finalizo la terrible narración –Está muerta- y se dejó caer entre los brazos de Lucas, como si de repente ya no aguantara su propio peso, como si sus piernas ya no fueran lo suficientemente fuerte como para sostenerla. Como una muñeca se perdió entre la protección de los brazos de su hermano que solo fue capaz de caer al suelo de rodillas arrastrando a su hermana a esa posición. Y ya ahí en el suelo ambos demostraron su terrible dolor, provocada por una pérdida poco comprendida.
Venganza; en ese momento aquella palabra y acción se acumuló contra una sola persona, el asesino de Allison. Lo que nadie sabía era que el mismo habitaba entre esa oscura y tenebrosa casa, digna de una película de terror. Las mentiras se acumulaban, los secretos que ocultaban, las infidelidades parecían algo normal y en algún momento desconocido toda la ética se había visto perdida entre los muros, el mármol y los escalones. Las cosas en este punto ya no se podían arreglar ni muchos menos emendar.
La mañana de aquel noviembre las cosas tenían un aspecto muy tétrico en la casa de los Mons. Las mujeres estaban algo desaliñadas y no les había importado mucho el vestirse y peinarse de manera adecuada y es que, y perdonen mi expresión, ¡A la mierda todo eso! Alice había perdido la vida.
El investigador Edgar Canels miraba de frente al cuerpo de la niña. Este tendido en el suelo en la puerta del laberinto que llevaba al jardín trasero, por alguna extraña razón la señora de la casa le prohibió entrar ahí, ya que nadie tenía permiso –El asesino si- fue lo que le comento y por lo cual ella callo. Edgar no encontraba una forma de resolver el caso sin entrar en el lugar, exigió la llave con pocos modales y amenazo que si no lo hacían así el saltaría sobre el césped de paredes. Cuando le comentaron que nadie tenía la llave porque esta jamás había existido quedo perplejo y en un trance de pocos minutos que fue interrumpido por una dama de encantos únicos. Nada más que Holly la primogénita de los Mons, la hermana mayor y la prometida de un medico muy rico de Londres. –Buenos días- Le saludo la joven de melena castaña, con un tono de respeto que ocultaban una profunda agonía. –Buenos días- Edgar era treintañero y Holly aun poseía una belleza sin igual e intacta. –Soy Holly Mary Mons- se presentó con un aspecto natural. Holly no vestía de negro, sino de un celeste de tonalidad pastel. Llevaba un escote en S tan apretado que le impedía respirar correctamente, aunque se le veían muy bien resultados sus pechos. Un vestido con falda tan larga que le cubría los zapatos, de tal manera que al caminar se veía como si volara o no tocara el verdadero suelo. Mary Mons llevaba en su vestido un corte en V que muchos hombre le agradecían con miradas morbosas y debo mencionar también el sombrero de plumas que hacia juego, ya que estaba en el jardín no quería luego tener una piel monera y que pensaran que era una obrera. -¿La hermana de de Alice?- pregunto Edgar intentando apartar la vista de los redondos pechos de Holly, eso no era propio de un caballero pero a la mujer no le molestaba. La hija de los Mons nunca le había importado mostrar de más su seductivo cuerpo y la moda de entonces estaba ayudándola mucho. –Así lo temo- con una voz seca continuo –Mi madre esta indispuesta y los sirvientes la han llevado a sus aposentos para que logre descansar- miro con desconfianza al hombre atractivo que tenía en frente. –Me ha pedido que me encargue de esta lamentable situación- y Holly así lo haría y claro con la mayor madurez que pudiera y es que a sus veinticuatro años estaba más que preparada para sobrellevar algo así, o eso creía. El cuerpo de Alice estaba a un metro de ellos, cubierto por una sábana blanca que ya se había ensuciado con algo de sangre. –Entenderá que también quiero ver a mi hermana- y sin esperar respuesta camino con porte y elegancia hacía el cadáver de la pequeña Alice. Edgar que era de un piel de tez algo morena se atrevió a tomarla del brazo y antes de que ella pudiera quejarse hablo –Temo que no es recomendable- hizo un gran esfuerzo por hablarle como un caballero. Holly era en realidad una mujer demasiado caprichosa y cuando las cosas no salían como ella quería perdía la paciencia fácilmente. -¿Por qué no?- levanto la voz ofendida. –Porque el cuerpo de su hermana ha sufrido terribles alteraciones- Edgar se mordió la lengua para no soltar una ofensa o una que otra maldición. –!Tonterías!- exclamo Holly y soltándose del agarre del Edgar corrió y se arrodillo para poder levantar la sábana blanca que cubría a su pequeña hermana. Pude escuchar desde aquí el latido de su corazón y como logro detenerse ante el horror de ver a Alice sin ojos, ocupados en su lugar por una soledad negra y vacía. Huecos sin sentido, como los de Edipo el rey. -¡Ahhh!- se escuchó un grito de mujer aterrada. –Señorita Holly- Edgar se apresuró a volver a cubrir el cuerpo de la víctima y en esa misma postura inclinada le dirigió una mirada llena de desprecio a la mujer, odiaba que lo desobedecieran. Aunque al ver una Holly con lágrimas en los ojos se le ablando el corazón. –Era la más pequeña- lloriqueo la dama y se sorbió los mocos. –Y la más dulce- le miro con esos ojos azules, tan claros y magníficos. Edgar se agacho a su altura y de su saco café saco un pañuelo de tela con sus iniciales. Ya luego ofreciéndolo a su acompañante le hizo un juramento –Le prometo- la miro directo a los ojos –que encontrare al asesino de su hermana- aunque podía ser que Edgar muriera en el intento. Holly tomo el pañuelo y se secó las lágrimas para luego abrazar al hombre de cabellos oscuros. –Es usted un noble señor- y le beso la comisura del labio en forma de agradecimiento. Esa era la caprichosa Holly, la mujer que manipulaba a más de uno y que siempre obtenía lo que quería, había heredado la vulgaridad de su querida madre, quizás estaba en los genes ser infiel. Edgar era un hombre sencillo y sin compromisos pero también era muy listo y estaba totalmente seguro de que lograría resolver este enigma.
Unos zapatos de muy buen calzados se deslizaban a paso veloz entre los corredores de la mansión. Una joven de cabellos dorados y ojos cafés como los de su padre, una dama de noble corazón. Saluden entonces a la resplandeciente y maravillosa Anis, otra hermana de Alice. ¿eh? ¿Parece que Anis ya está al tanto de la situación? ¿A dónde se dirige? Los zapatos de tacón y tela cubierta caminaban a pasos agigantados. Anis tenía lágrimas en los ojos, pero un profundo odio había comenzado a nacer al enterarse de que la policía sospechaba que esto no era más que un asesinato. Bajo escaleras hasta el segundo piso, dirigiéndose a la zona norte de su hogar. Una falda de campana que le cubría hasta parte de los zapatos, un corcel de s y unas mangas caídas. Aquel conjunto era totalmente negro, especial para la ocasión. Llevaba el cabelle recogido en un moño alto que soltaba algunos rizos. -¡Lucas!- grito la joven de apenas diecisiete años mientras golpeaba la puerta de la habitación de su hermano. -¡Abrir enseguida!- fue una orden directa. Aunque en ese año las mujeres no tenían permitido hablar de semejante manera hacia un hombre. Lucas tuvo que hacer un gran esfuerzo para abrir la puerta y no tirarle semejante golpe a su hermana. -¡¿Qué demonios…?!- la exclamación se perdió en el aire al ver a su hermana con la cara roja y llena de lágrimas. -¿Anis?- sus ojos verde gelatina se calmaron y la preocupación lo invadió –Hermana- hablo tranquilamente, intentando mantener la cordura -¿Qué sucede?- fue cuando la chica lo abrazo y hundió su cara en el pecho de su hermano. Lucas era mayor que Anis por cinco años, era un hombre que entendía mejor que nadie las situaciones de gravedad. –Anis por favor cálmate y dime que paso- le susurro a su hermana mientras le acareaba la cabellera. Nada más fuerte que el amor fraternal. –¡Alice!- fue cuando la chicuela reacciono y miro directo a los ojos de su hermano -¿Qué pasa con ella?- pregunto el hijo varón más grande de los Mons. Y mientras la duda se sembraba en los hemisferios de su cerebro el dolor interno de Anis culmino de manera que se quedó sin aliento y con un aire de frio y que lograba helar la sangre finalizo la terrible narración –Está muerta- y se dejó caer entre los brazos de Lucas, como si de repente ya no aguantara su propio peso, como si sus piernas ya no fueran lo suficientemente fuerte como para sostenerla. Como una muñeca se perdió entre la protección de los brazos de su hermano que solo fue capaz de caer al suelo de rodillas arrastrando a su hermana a esa posición. Y ya ahí en el suelo ambos demostraron su terrible dolor, provocada por una pérdida poco comprendida.
Venganza; en ese momento aquella palabra y acción se acumuló contra una sola persona, el asesino de Allison. Lo que nadie sabía era que el mismo habitaba entre esa oscura y tenebrosa casa, digna de una película de terror. Las mentiras se acumulaban, los secretos que ocultaban, las infidelidades parecían algo normal y en algún momento desconocido toda la ética se había visto perdida entre los muros, el mármol y los escalones. Las cosas en este punto ya no se podían arreglar ni muchos menos emendar.
---
La mañana de aquel noviembre las cosas tenían un aspecto muy tétrico en la casa de los Mons. Las mujeres estaban algo desaliñadas y no les había importado mucho el vestirse y peinarse de manera adecuada y es que, y perdonen mi expresión, ¡A la mierda todo eso! Alice había perdido la vida.
El investigador Edgar Canels miraba de frente al cuerpo de la niña. Este tendido en el suelo en la puerta del laberinto que llevaba al jardín trasero, por alguna extraña razón la señora de la casa le prohibió entrar ahí, ya que nadie tenía permiso –El asesino si- fue lo que le comento y por lo cual ella callo. Edgar no encontraba una forma de resolver el caso sin entrar en el lugar, exigió la llave con pocos modales y amenazo que si no lo hacían así el saltaría sobre el césped de paredes. Cuando le comentaron que nadie tenía la llave porque esta jamás había existido quedo perplejo y en un trance de pocos minutos que fue interrumpido por una dama de encantos únicos. Nada más que Holly la primogénita de los Mons, la hermana mayor y la prometida de un medico muy rico de Londres. –Buenos días- Le saludo la joven de melena castaña, con un tono de respeto que ocultaban una profunda agonía. –Buenos días- Edgar era treintañero y Holly aun poseía una belleza sin igual e intacta. –Soy Holly Mary Mons- se presentó con un aspecto natural. Holly no vestía de negro, sino de un celeste de tonalidad pastel. Llevaba un escote en S tan apretado que le impedía respirar correctamente, aunque se le veían muy bien resultados sus pechos. Un vestido con falda tan larga que le cubría los zapatos, de tal manera que al caminar se veía como si volara o no tocara el verdadero suelo. Mary Mons llevaba en su vestido un corte en V que muchos hombre le agradecían con miradas morbosas y debo mencionar también el sombrero de plumas que hacia juego, ya que estaba en el jardín no quería luego tener una piel monera y que pensaran que era una obrera. -¿La hermana de de Alice?- pregunto Edgar intentando apartar la vista de los redondos pechos de Holly, eso no era propio de un caballero pero a la mujer no le molestaba. La hija de los Mons nunca le había importado mostrar de más su seductivo cuerpo y la moda de entonces estaba ayudándola mucho. –Así lo temo- con una voz seca continuo –Mi madre esta indispuesta y los sirvientes la han llevado a sus aposentos para que logre descansar- miro con desconfianza al hombre atractivo que tenía en frente. –Me ha pedido que me encargue de esta lamentable situación- y Holly así lo haría y claro con la mayor madurez que pudiera y es que a sus veinticuatro años estaba más que preparada para sobrellevar algo así, o eso creía. El cuerpo de Alice estaba a un metro de ellos, cubierto por una sábana blanca que ya se había ensuciado con algo de sangre. –Entenderá que también quiero ver a mi hermana- y sin esperar respuesta camino con porte y elegancia hacía el cadáver de la pequeña Alice. Edgar que era de un piel de tez algo morena se atrevió a tomarla del brazo y antes de que ella pudiera quejarse hablo –Temo que no es recomendable- hizo un gran esfuerzo por hablarle como un caballero. Holly era en realidad una mujer demasiado caprichosa y cuando las cosas no salían como ella quería perdía la paciencia fácilmente. -¿Por qué no?- levanto la voz ofendida. –Porque el cuerpo de su hermana ha sufrido terribles alteraciones- Edgar se mordió la lengua para no soltar una ofensa o una que otra maldición. –!Tonterías!- exclamo Holly y soltándose del agarre del Edgar corrió y se arrodillo para poder levantar la sábana blanca que cubría a su pequeña hermana. Pude escuchar desde aquí el latido de su corazón y como logro detenerse ante el horror de ver a Alice sin ojos, ocupados en su lugar por una soledad negra y vacía. Huecos sin sentido, como los de Edipo el rey. -¡Ahhh!- se escuchó un grito de mujer aterrada. –Señorita Holly- Edgar se apresuró a volver a cubrir el cuerpo de la víctima y en esa misma postura inclinada le dirigió una mirada llena de desprecio a la mujer, odiaba que lo desobedecieran. Aunque al ver una Holly con lágrimas en los ojos se le ablando el corazón. –Era la más pequeña- lloriqueo la dama y se sorbió los mocos. –Y la más dulce- le miro con esos ojos azules, tan claros y magníficos. Edgar se agacho a su altura y de su saco café saco un pañuelo de tela con sus iniciales. Ya luego ofreciéndolo a su acompañante le hizo un juramento –Le prometo- la miro directo a los ojos –que encontrare al asesino de su hermana- aunque podía ser que Edgar muriera en el intento. Holly tomo el pañuelo y se secó las lágrimas para luego abrazar al hombre de cabellos oscuros. –Es usted un noble señor- y le beso la comisura del labio en forma de agradecimiento. Esa era la caprichosa Holly, la mujer que manipulaba a más de uno y que siempre obtenía lo que quería, había heredado la vulgaridad de su querida madre, quizás estaba en los genes ser infiel. Edgar era un hombre sencillo y sin compromisos pero también era muy listo y estaba totalmente seguro de que lograría resolver este enigma.
Tattoo
Re: Después de las once
por ~Susie ∞Wallflower∞ Lun 18 Ago 2014, 9:21 am
¡Hola! Siento desaparecer por tanto tiempo, termine de leer el capítulo y lo comentare de inmediato.
Holly se ve que es una chica muy atractiva, pero eso de que sea infiel y caprichosa, ademas de que que fuese a ver el cuerpo directamente de su pequeña hermana, ella simplemente debió de haber obedecido pero dado eso pudimos saber como esta la querida Alice, la imagen fue demasiado horrible, ver a su hermana sin sus ojos, yo no lo habría podido soportar ni menos olvidarlo tan rápidamente. Y todos en aquella casa están sufriendo tanto, ademas de que el mismo asesino esta allí mismo sin que ellos logren darse cuenta.
Ojala que subas pronto, me gusto este capítulo ademas de mostrarse como estaba Alice, ya sin sus ojos que fue tétrico pero interesante.
PD: Tienes un Gif de Ao Haru Ride, ese Anime es muy bonis n.n ¡y felicidades por pasar de pagina!
¡Besos!
Holly se ve que es una chica muy atractiva, pero eso de que sea infiel y caprichosa, ademas de que que fuese a ver el cuerpo directamente de su pequeña hermana, ella simplemente debió de haber obedecido pero dado eso pudimos saber como esta la querida Alice, la imagen fue demasiado horrible, ver a su hermana sin sus ojos, yo no lo habría podido soportar ni menos olvidarlo tan rápidamente. Y todos en aquella casa están sufriendo tanto, ademas de que el mismo asesino esta allí mismo sin que ellos logren darse cuenta.
Ojala que subas pronto, me gusto este capítulo ademas de mostrarse como estaba Alice, ya sin sus ojos que fue tétrico pero interesante.
PD: Tienes un Gif de Ao Haru Ride, ese Anime es muy bonis n.n ¡y felicidades por pasar de pagina!
¡Besos!
~Susie ∞Wallflower∞
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