The Final |N.C|

torment of our demons

Capitulo 001

❝—¿Que está pasando? —Mi voz era entrecortada. Todo el mundo corría, alarmaban, pero no decían nada.
—Leya... N-no pasa nada e-es solo... —Dijo mientras se frotaba las manos una y otra vez.
—Emma, no te atrevas a decirme que no pasa nada. No soy una niña. —Mi voz sonaba desesperada, en cierto punto colerizado.
—Startup... Ha fallado. Lo hemos empeorado. Todo.❞


Caigo de la cama, aturdida, en el segundo que se abre la puerta dejando ver a una rubia muy furiosa. Me grita que soy una tonta, que por una vez en su vida no podía deshacerse de mí y que me odia. Rutina matutina. Me levanto del suelo frotando mi brazo, en el cual caí encima. La chica frente a mí me mira con desaprobación, ira y si odio. Lo había hecho desde un par de días después de que nos conociéramos.

— ¡Si me dejaras dormir! Pero, no. ¡Todas las mañanas gritas, te caes y no me dejas dormir! Estoy harta del comportamiento de la florecita... —Me pare frente a ella, tratando de enviarle todo el deprecio y veneno que le tenía guardado.
— ¡Quieres callarte, Lorraine! ¡Si tú cerraras la boca para siempre creo que dejaría de tener pesadillas! —Le grite. Estaba cansada de la misma rutina. Ella me miro sin, por primera vez hace mucho, decir ni una sola palabra. Pase junto a ella, saliendo al pasillo frio descalza. — Pero, lamentablemente, aun así quedaría el reto de tu triste existencia.

Camino por los pasillos descalza, o cual es nuevo. Por lo natural sigo la aburrida rutina. Me levanto, grito, Lorraine me insulta, me quedo callada y con la cabeza gacha apenada hasta que se valla, me levanto, me aseo y me visto. Eso solo es el comienzo. Tomo alguna de las conservas que —en un principio pensé que los superiores estaban un poco paranoicos— son prácticamente del tamaño de la mitad de un pequeño pueblo. Los superiores, los más —por así decirles— viejos de nosotros, tanto trabajando con el gobierno como en edad. Aun no puedo creer que hayan muerto todos. Cierro los ojos fuertemente. No me agrada ese recuerdo. Ellos corriendo de un lado a otro, alterados. El gobierno amenazándolos, algunos suicidándose.  Una mano me jala hacia un lado, y por un pequeño momento creo que es Emma. Atormentándome, vino por mí. Porque no la pude salvar.

—Leya… —Su saco carmesí está húmedo, pero recuerdo que era blanco, al igual que el resto de su ropa. Que igual tiene de aquel líquido escarlata, que humedece su saco y debería estar todo en sus venas con su corazón bombeando. —Leya… ¿Cataleya, me escuchas? —Emma se vuelve borrosa, aunque aún puedo ver muy bien sus ojos.  Azules. Llenos de melancolía, arrepentimiento y, lo que más me duele, traición. —Cataleya, mírame. —Emma ya no está. Se ha desvanecido. Ha sido remplazada. Ya sus ojos son marrones, su piel sigue siendo igual de blanca. Pero su cabello ya no es rubio, ahora es de un marrón oscuro al igual que sus cejas que parecen ser un poco más pobladas. Me tiene sostenida por los hombros. Su mirada es de preocupación y examina cada centímetro de mi rostro. Alzo mis manos y toco el suyo. Es un atrevimiento lo sé, pero tengo que confirmar que no es una alucinación. No lo es. Su rostro es suave, al igual que se vuelve su mirada al momento del contacto.
—Eres real. —Susurro. Su mirada se entristece. Él sabe lo que ha estado pasando, también le pasa a él. Nos está pasando a todos aunque no lo queramos aceptar. La culpa ya está comenzando a acabar con nosotros.
—Sí. —Susurra de vuelta. Su agarre se suaviza, pero no aparta sus manos y yo tampoco. No quiero.
— ¿Dónde estamos?
—Como a un piso de la azotea… —Iba a continuar, lo sé por la forma en que pronuncio azotea. Pero nos apartamos el uno del otro a oír unos golpes y gritos. — ¿Qué es eso? —No digo nada. No puedo responder ya que no lo sé. Así que hago lo único que puedo hacer. Corro hacia las escaleras, y bajo corriendo. No me hace falta voltear para saber que Dylan está corriendo tras de mí, ni siquiera hace falta escuchar sus pasos y su respiración que comienza a sonar un poco agitada. Uno de los instintos del ser humano, te hace sentir si alguien te sigue. No es solo de los seres humanos. También es animal. De algunas plantas. Es un sentido de vida.

Llegamos al primer piso donde están algunos más de nuestros compañeros. Son reconocibles, por la ropa. Se nos catalogaba por la ropa. Se suponía que los que llegaban a totalmente blanco eran superiores. De resto eran colores claros. Pero absolutamente todos teníamos una camisa o blusa blanca. El resto era por lo que nos especializamos hasta llegar a ser superiores. Rojo, químicos extremadamente peligrosos. Verde, es cuando manipulamos cosas de la naturaleza. Gris, era un poco complicado y difícil de explicar, pero era cuando estábamos a unos cuantos pasos de casi superiores. La mayoría estábamos en ese punto cuando todo comenzó.
Lo que llamo mi atención en la escena de este momento. Era los individuos que estaban frente a nosotros. Jóvenes, vestidos con ropa corriente, pero estaban armados. Parecían que se habían llevado una buena sorpresa al encontrar a un grupo grande de personas. Pero lo más interesante era que estaban dispuestos a atacar, si alguno hacia un movimiento brusco. Los sonidos de golpes y gritos se habían detenido. No sabía que había pasado y no quería quedarme con la incógnita. Baje rápidamente lo que me faltaba de escaleras, lo que alarmo a los intrusos y eso alarmo a el resto.

— ¿Quiénes son ustedes? —Pregunte frunciendo el ceño. Mi sentido común trata de esconderlo, pero la idea de que estos jóvenes rompieran la aburrida rutina me llena de alegría.

Matame:

The Night is dark and full of terrors.

Capitulo 002

^___ Ha fallado, Startup, ha fallado, Kylie. ^___ susurró aquella mujer de largos cabellos castaños. ^___ Corremos peligro, tenemos que irnos. ^____ susurró, esa idea me asuataba, mire a mi madre. Ella lucia completamente aterrada. ^___ Hija recuerda que te amo, y siempre te amaré, al igual que tu padre, y tu hermano.


^___ ¡Kylie, detrás de ti! ^___ una voz gruesa me hizo salir de mi trabce, solté el cadaver de la cosa amorfa, y horrorosa que había reconocido como mi madre y me giré con cuchillo en mano dispuesta a asesinar cualquier cosa que estuviese a mi espalda. El corazón me latia a mil por hora, la adrenalina controlaba mi cuerpo, y las lágrimas de haber visto en lo que se había convertido mi madre, picaban en mis ojos. Un solo corte en la garganta y la cosa esa cayó en un golpe sordo al suelo.

^___ ¡Vamos, que esperas corre! ^___ aún medio atontada por lo que había visto senti a Max jalarme por el brazo, arrastrandome hacía nuestro escondite. al entrar a aquella bodega abandonada, los rostros de los demás miembros de la resistencia nos recibieron, Max me soltó. ^___ ¡Qué mierda sucede contigo, casi haces que nos maten! ^___ exclamé furioso, bajé la mirada y mordí mi labio, tratando de reprimir mis lágrimas. ^___ ¡Cómo mierda se te ocurre quedarte ahí parada como una estúpida mientras los infectados nos rodeaban! ^___ la primera lágrima rodó por mi mejilla, y alcé mi rostro hacía él, frunciendo mi ceño, mi puño se cerró sobre la empuñadura de mi cuchillo y estaba por sacarlo, cuando sentí que me tomaron la mano.

^___ Ya basta. Lo que sea que sucedió allá aduera, olvídenlo. No necesitamos peleas  entre nosotros. ^___ puntualizó el moreno en tono serio, me miro y sus ojos mieles me reprocharon, yo bufé. ^___ Este lugar ya no es seguro. Deberíamos partir. ^___ dijo en un tono más alto, para que todos pudieran escucharle, y absolutamente todos le miraron.

^___ ¿Y adónde pretendes que vayamos, genio? ^___ pregunté de mala gana, y el frunció el ceño. ^___ No lo sabes ¿Verdad? ¡Toda la ciudad está infestada, no hay lugar en el que no haya de esas malditas cosas! ¿A dónde mierda crees que vamos a ir? ^___ grité ofuscada, sí, nunca nos quedabamos más de cinco o seis noches en un mismo lugar pero, en estos precisos momentos teníamos a varios heridos, estabamos casi sin comida, ni agua, necesitabamos repornernos antes de partir.

^___ Hay un edificio a unos pocos kilómetros. Esta en condiciones habitables, podemos ir. ^___ comentó Logan, todos dirigieron su atención hacia él. ^___ Zayn tiene razón, ya no podemos quedarnos más tiempo aquí. ^___ habló, y como si él chico le hubiese dado el poder al moreno, este hablo, dando la última palabra.

^___ Partimos mañana, al amanecer, cuando el sol debilita a las criaturas. ^___ el chico me dirigió una ultima mirada, y yo resoplé furiosa. Me fuí a mi pequeña tienda y me cambie la ropa ensangrentada y mugrienta, tenía un par de cortes y laceraciones por distintas partes del cuerpo, producto de la pelea de hoy. Estaba por acostarme cuando escuche un par de golpes a la tienda. Alcé mi cabeza.

^___ Te toca hacer guardía. ^___ Max entró y prácticamente me sacó de una patada de la tienda que compartiamos, bufé y me armé nuevamente para cumplir mi turno.

La noche se alargaba, y los ojos se me cerraban solos, estaba cansada, pero tenía que resistir, entonces en medio de mi somnoliencia escuché un ruido, uno muy fuerte,  de cristales rompiendose.
El pánico creció en mi interior, y todos mis sentidos de alerta estaban en su punto máximo.

^___ ¡Todo el mundo arriba! ¡Se acabo la siesta reparadora, es hora de irse! ¡¡YA!! ^___ grité, y mientras casi todos los demás salían de sus tiendas, para ver que pasaba, yo escrutiñaba en la oscuridad tranto de ver lo que se acercaba. Otro ruido de cristal quebrandose, alerto a todos los que estaban ahí, y cuando se escucharon los quejidos que aquellas cosas producian, fue que empezó la carrera.

Sangre, muertos vivientes, gritos, súplicas, era todo lo que se escuchaba en ese momento, luchamos para sobrevivir en un mundo en el que el enemigo fue, alguna vez, familia y amigos nuestros. Los cuerpos y residuos se amontonaban en el suelo a medida que avanzábamos, la moyoría era de ellos, unos pocos de nosotros. Entonces caí, estaba desarmada y tenía una de esas cosas encima. Uno, dos, tres, cuatro... ya había perdido la cuenta de cuantos golpes le había dado, con tal de que no me mordiera, todo estaba perfecto. Mis gritos, eran opacados por los de la batalla, y entonces entre todos los escombros y residuos cogí una vara de metal y se la clavé por el pecho, la sangre putrefacta de aquella cosa, me bañó casi de pies a cabeza, solté una maldición y reprimí un chillido de asco. Esa cosa se desplomó sobre mí, aplastandome de manera asfixiante. No me di cuenta de que me había herido hasta que todo empezó a verse borroso. Pataleé tratando de salir de debajo de eso pero me era inútil, de pronto estaba demasiado débil como para mover hasta el dedo meñique del pie.

^___ Max, aquí esta ayudame con ella. ^___ sentí como de pronto la opresión en mi pecho disminuía, y entonces fui consciente de que parte de la sangre que había empapado mi abdomen no era solo de aquella cosa, sino también mía.

^___ Zayn está herida, no podemos llevarnosla. Ya tenemos suficientes heridos. ^___ La voz que dijo eso fue registrada en mi cerebro como la de Max, maldito.

^___ Cállate y ayudame a cargarla, si muere, aunque sea será enterrada. Además es tu amiga, no seas idiota. ^___ bufó el chico y sentí como mi cuerpo se elebaba lentamente por el aire. Me costaba respirar. No escuché más pues todo se volvió negro en ese momento, lo último que vi fueron los ojos mieles del chico que me llevaba en brazos.


.... "Kylie, ¡Corre!, Corre cariño yo estaré bien... ¡Mamá... Mamá...! ¿Mami dónde estás?... Sangre, y más sangre, muerte y más muerte, el cuerpo de mi madre en el suelo, moribunda, pidiendome que corriera por mi vida.... He visto morir a tantos, a los que amaba.... Mi hermana, mi padre, mi hermano, mi madre.... .... El rostro de mi madre se desvaneció y aquella figura deformada y moribunda a la cual había matado hacía poco apareció en su lugar"....

^___ ¡No! ^___ el grtó que solté, estoy segura, pudo haberlo escuchado todo el campamento. Mire en donde estaba, tratando de reconocer algo pero no podía, estaba demasiado asustada y alterada como para que mi cerebro reaccionara, era consciente de que jadeaba y chillaba, era consciente de mis lagrimas y también era consciente de que parecía como si me estuviese dando un ataque de nervios. Pasos apresurados, y voces sehicieron presentes.

^___ Hay, hay, tranquila... Ya, todo esta bien, estás a salvo. ^___ sentí unos brazos rodearme fuertemente, impidiendo que me moviera, miré a la persona que hablaba y reconocí al moreno, mire entonces a quien me sostenía y vi a Max, fruncí mi ceño y sus palabras cuando estaba herida regresaron a mi mente, lo empujé fuerte mente.

^___ ¡Eres un maldito! ¡Me hubieses dejado ahí tirada, y que me combirtiese en una ifectada! ¡O peor que esas cosas me comieran! ^___ grité y le lance lo primero que vi, el chico se agachó con agilida, y cuando etaba por lanzare otra cosa, el moreno me detuvo.

^___ Lo siento Kylie, pensaba en el bien de todos. Sabes como es esto. ^___ se excusó el chico, yo lo fulminé con la mirada y batalle contra el agarre del moreno tratando de llegar hasta donde el castaño estaba.

^___ ¡Largate! ¡Vete, eres un maldito! No quiero verte Max largate o te juro que te mato aquí mismo. ^___ escupí con rabía y las lágrimas se cumularon en mis ojos, me sentía traicionada, yo había confiado en él, y lo había considerado mi amigo y el simplemente me hubiese dejado ahí tirada como basura. El chico salió rápidamente de la tienda con el ceño fruncido, por un minuto se me había olvidado el agarre del moreno, por un momento su prescencia se hizo tan familiar, que ni siquiera me di cuenta que segupia sosteniendome. Un par de lágrimas cayeron por mis mejillas.

^___ ¿Estás bien? ^___ preguntó en un susurro contra mi oido. Sentí un escalofrío recorrerme la espalda, y como pude sequé rapidamente mis lágrimas. Lo miré y sus ojos mieles estaban oscurecidos, por el cansancio y la preocupación. Me soltó. Yo me limité a asentir. Ahora que estaba más calmada fui consciente del enorme dolor en mi abdomen, trate de moverme y senti un templón que me dejó paralizada, solté un ligero chillido.

^___ ¿Qué ha pasado? ^___ pregunté. Con su ayuda logre recostarme de nuevo en la camilla, y mientras cambiaba mis vendajes y me ayudaba a comer, me fue contando todo lo que me había perdido durante los dos días que había estado inconsciente. Para estás alturas ya estabamos a poco menos de dos días del edificio del que había hablado Logan.  él chico suspiró.

^___ La noche es oscura Kylie... y está llena de terrores. ^___ murmuró y yo suspire comprendiendo lo que quiso decir. Las cosas no estaban para nada fáciles.

Dos días más, y ya estabamos ante las puertas de aquel gran edificio. Mi herida estaba bastante recuperda, por lo que ya podía caminar y para la resistencia eso significaba que también podía luchar. Con sigilo nos escabullimos por ventanas, y pasillos oscuros de las partes bajas de aquel lugar, serciorandonos que todo estuviese en orden, pero fue solo llegar a uno de los pisos superiores que nos encontramos con una gran sorpresa.

Gritos, golpes, sangre. Nuesro instinto es atacar, pero algo no estaba bien, esta gente estaba indefensa, y era gente.

^___ ¡Alto, Alto! ^___ chillé y miré a mi alrededor. Unos ojos azules llamaron mi atención. Y me distrageron por unos segundos. ^___ ¡No son infectados! ¡No son infectados! ^___  mis palabras, paralizaron a todos los demás, soltaron a los que tenían entre sus manos y miraron a su alrededor con más detalle. Fruncí mi ceño y los miré a todos, todas esta personas se veían limpias, como si hubiesen estado viviendo en una burbuja durante todo este tiempo. ^___ ¿Quiénes son ustedes? ^___ pregunté.