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Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Crossroad {resultados}
O W N :: Novelas colectivas :: Novelas colectivas :: Novelas Colectivas :: Inscripciones / audiciones
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Re: Crossroad {resultados}
paulis,.... puedo dejar una sinopsis?? xq, pos como ya sabes cómo escribo...
no, olvidalo, ahora que lo pienso si tengo un capítulo que puedo subir... mm bueno, ya te dejo mi ficha ;)
no, olvidalo, ahora que lo pienso si tengo un capítulo que puedo subir... mm bueno, ya te dejo mi ficha ;)
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I'm just not sure whether my heart is working. And yours is beating double time. Cole & Ro. New Rules
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Kida
---------
Re: Crossroad {resultados}
Magda. escribió:[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]● Nombres: Anastasia Fields | Zac Kahn.
● Representantes: Alexandra Daddario | Theo James.
● Escritos de tu autoría:
- Spoiler:
— Oh, oh —susurré para mi misma.
— Justo a tiempo —dijo Annie—. Megan quiere hablar contigo.
— ¿Conmigo? —Logan me miró con sus ojos brillantes.
— Si, contigo. Quiere hacerte una especie de propuesta, o trato, que sé yo. Eres bastante afortunado para tener una linda charla con esta perfecta muchacha. Sólo, no le hagas daño, ¿Bien? —Annie parecía burlarse de mí.
— Seguro, Annie. Si quieres, la protejo de todo peligro que haya. De todas formas, ¿Por qué deseas hablar conmigo? No es por nada, pero, no creo tener alguna cosa pendiente contigo. Se supone que yo venía a hablar contigo, aunque, ahora que dices querer platicar conmigo, supongo que ambos podemos decirnos las cosas que queríamos conversar, ¿No? —estaba nervioso, demasiado. Sentí la risa de Mary—. Marilyn, no es necesario que te rías. Sabes que me coloco nervioso cuando estoy por hablar con una bella chica. Es como cuando tú comienzas a hablar con tu madre acerca de los chicos —ahora fui yo la que soltó una risa—. Bien, si me permiten…
— No es necesario que digas como me siento cuando hablo de chicos con mi madre, Logan —dijo Mary, sonrojada.
— Oh, bueno, en ese caso —Logan parecía estar bromeando—, lo siento mucho por entrometerme en tu vida, Marilyn. Sigues siendo mi mejor amiga, ¿No? Porque si te niegas a serlo, lo entenderé, claro.
— Hemos entendido, Romeo. Vamos a otro lado, Marilyn.
Ambas se fueron en silencio, como si ninguna de las dos tuviera la intención de romper aquel momento. Logan se sentó a mi lado y me miró, expectante. Me pregunté si debía ser tan atrevida, pero al mismo tiempo me pregunté qué pasaría cuando le dijera. Sentí un revoltijo en mi estómago, pero no eran exactamente aquellas mariposas de amor.
Recordé la mirada que mi madre había hecho cuando dijo que necesitaba un novio. Recordé la expresión de Logan al verme. Recordé a Annie diciéndome que no jugara con el amor. Recordé a Mary opinando que mi hermana tenía la razón.
Simplemente me sentía horrible ser tan falsa. Quizá no lo estaba siendo, pero me sentía una completa y total falsa. Estaba en ese momento de película, donde la chica debe elegir una decisión definitiva. Vivir o morir, aunque en este caso era decirle, o traicionarlo hasta el final. Debía elegir ahora, no después.
Si elegía la opción de proponerle que fuera mi novio falso hasta que mis padres estuvieran orgullosos de mí, podía perder muchas cosas. Su amistad, el hecho de que quizás mis padres se enteraran de la farsa, y podía hasta perder la amistad de Mary. La otra opción, era algo más cruel. Si prefería la opción de traicionarlo hasta el final de todo, perdería su amistad, la amistad de Mary, y me ganaría el odio de Logan.
Ahora que lo pensaba, era mejor proponerle. Si lo traicionaba, iba a perder aún más, pues sería su amiga por más tiempo, lo cual significaba que le tendría más cariño. Era mucho mejor la primera opción.
— Logan, tengo un problema, y necesito tu ayuda. No sé cómo vayas a reaccionar ante esto, y puede que suene como una locura, pero quiero tu apoyo. Si no quieres aceptar, por favor, sigue siendo mi amigo, ¿Está bien?
— Está bien. ¿Qué tipo de problema es el que tienes? Puedo ayudar en lo que sea, no importa si es una locura.
Sentí una especie de llamas ardiendo dentro de mí. Eran los famosos nervios.
— ¿Prometes que no te enojarás conmigo?
— Lo prometo, pero debes decirme ahora. Mis nervios están aumentando, no quiero llegar al punto de comerme los dedos.
— Mira, Logan…—miré alrededor en busca de ayuda—. Mis padres desean que tenga un novio. Debo ser un ejemplo para mi hermana menor, Luce. Annie podría serlo, pero mis padres ya no confían en ella.
— Ve al punto.
— Necesito que seas mi novio falso —susurré, él me miró de inmediato. Trágame tierra.
— ¿Qué?
— No me hagas repetirlo —murmuré.
— Lo entiendo —Logan parecía algo decepcionado, y entendía perfectamente por qué lo estaba—. Quieres que sea tu novio falso, deseas que actúe en frente de tus padres. ¿Es eso lo que quieres, Megan?
Mordí mi labio, y sentí frío a mí alrededor.
— Sé que suena estúpido y como una locura —dije mirando al suelo de la cafetería, aún nerviosa—, pero en verdad necesito esto. Mis padres son muy perfeccionistas, y no quieren que Annie sea el ejemplo de los Fields.
— ¿Por cuánto tiempo sería esto?
— No lo sé. Solo unas semanas, luego inventaré algo.
— Megan, te encuentro muy simpática y tierna, pero…
— No vengas con la típica historia de “no creo que sea lo correcto”. Si no quieres hacerlo, te entenderé.
— No he dicho eso.
— Pero deseas hacerlo.
Me miró, algo pensativo. Tenía sus manos juntas encima de la mesa, y sus labios estaban juntos, formando una sola línea. Suspiró y giró su cara para ver hacia el frente, sin un punto fijo. Movió sus manos, y me sentí culpable, ¿Razón exacta? No la tenía. No sabía si era por ser atrevida, o por decepcionar a un bello y simpático muchacho. Mi celular vibró, y al sacarlo vi en el identificador el nombre de mi hermana. Corté, pero al minuto después volvió a llamarme. Nuevamente, corté.
— Perdón —dijo Logan en un susurro, lo miré confundida por su disculpa—. Enserio, perdóname. No quise ser tan… Brusco. Pero, acepto. Seré tu novio falso hasta que decidas terminarlo.
Sus palabras me sorprendieron. Había aceptado… pero algo me tenía aún más confundida. Él no había sido brusco, es más, había sido dulce, ¿Por qué se disculpaba, entonces?
— ¿Aceptas? ¿Es…? ¿Es enserio? —aún no estaba consciente de lo que me había dicho—. Gracias, Logan.
— No te preocupes, es un honor ser el novio de una bella dama —susurró, acercándose a mí—. ¿Cuándo empezamos, princesa?
— Novio falso —le corregí, haciendo una sonrisa que mostraba mis nervios—. Por cierto, necesito que vengas hoy por la tarde a mi casa. Diré que eres un chico que conocía hace mucho, y que llevamos saliendo un mes a escondidas, ¿Está bien?
Soltó una risa mientras asentía, y sonreí. Cuando sonó el timbre, me paré y le di un beso en la mejilla. Salí de la cafetería con una sonrisa inmensa, pero se desvaneció cuando choqué con un cuerpo fornido. Era Edward.
— ¡Megan! Que sorpresa más bella —dijo Edward, sonriendo—. ¿Ha ocurrido algo allá dentro? Te ves preocupada.
— No ha ocurrido nada, solo, estoy algo preocupada por… —busqué una excusa—, por no acostumbrarme. Ya sabes, soy nueva aquí, y me cuesta acostumbrarme a nuevas cosas.
— ¿Acostumbrarte? Si quieres puedo ayudar a que te acostumbres.
— Eres muy gentil pero, enserio, no es tu obligación hacerlo —susurré—. Te doy las gracias, de todas formas.
Edward parecía no rendirse, pues colocó un papel en mi mano con su número de celular. Suspiré, lista para responderle, cuando llegó un chico moreno. Era Spider. Él me miró fijamente, y luego me sonrió. ¿Era una forma de seducir? Sacudí la cabeza y me concentré en mi objetivo. Debía llegar a clases. No sabía con quién me tocaba en la tarde, solo sabía el aula a la cual debía ir.
— Edward, ¿Por qué no te vas? Al parecer te están buscando.
— Eres un imbécil —le susurró—. Bien, dama, nos veremos en otra instancia. Fue un gusto conocerla.
Él se retiró, y yo comencé a caminar. Lamentablemente Spider me seguía.
— Lo que dicen de mi es mentira —me dijo, caminando a mi lado—. No he tocado a ninguna chica en mi vida, y tampoco las he dejado embarazadas. Fue solo una chica, Annie Fields, la cual explotó de ira porque no la quería como novia, e hizo todo aquel chisme.
— ¡Spider! —grité al recordar lo que mi hermana había mencionado de él—. Si, te conozco, Annie es mi hermana. Ella habló sobre ti, e incluso me dijo algo de un chisme.
— Sabía que era tu hermana. ¿Lo ves? No soy un monstruo.
— Annie es bastante mala a veces.
— Si, es muy mala. No quise hacer nada en contra de ella, porque no quería dañarla. A pesar de todo seguía siendo mi amiga.
— Annie me contó sobre tus salidas por la tarde… ¿Es cierto?
— ¿Piensas que saldría todas las tardes a follarme chicas? No. Diablos, no. Es más, soy voluntario en una organización que se preocupa de los cachorros abandonados.
— ¿Enserio? Siempre he querido participar en algo así. Puede que no tenga mucho tiempo con los estudios, las prácticas de natación, y demás, pero me encantaría formar parte de alguna organización. ¿Crees que pueda haber alguna posibilidad de que logre formar parte de eso?
— ¡Por supuesto! Puedes ir conmigo mañana —exclamó alegremente. Sus ojos cafés miel se iluminaron, como si alguien hubiera colocado linternas en ellos.
— Muchas gracias —dije parando en mi aula.
— ¿Tienes clase aquí, no? —preguntó, sus ojos aún seguían brillando.
— Si —asentí—. Creo que nos veremos luego.
— Seguro, nos vemos luego.
Entré en el aula, sonriendo. Me dirigí al lado de Cam, pues era el único conocido que había en la sala.
— Hey —saludó, mientras yo me sentaba.
— Hey —saludé, para luego reír fuertemente.
— ¿Por qué llevas una sonrisa tan grande? ¿Es por lo de Logan? —preguntó, y yo lo miré con sorpresa. ¿Cómo sabía eso?—. Ya todos lo saben, es increíble ver como los rumores corren rápidamente.
— Se supone que nadie debía saberlo —dije, recordando lo que Mary me había dicho sobre Logan—. Nadie sabe de sus salidas, conversaciones, o relaciones.
— Pues, ya sabes, eres Megan Fields —le miré, confundida—. ¿No sabes nada? Eres muy popular aquí por tu hermana.
— Lo suponía —susurré, pensando en Annie—. Annie siempre ha sido popular y todo eso, era obvio que me conocerían por ella. De todas formas, no me gusta serlo, es irritante ver que todos están pendientes de ti.
— Puede que tengas razón. Ya sabes, llevo un día aquí y las chicas aman mis ojos —yo reí—, también mi cabello, y quizá mi sonrisa.
— Está bien, he entendido perfectamente. Te aman más que nada en el mundo. Eres el muchacho de los ojos verdes —el asintió, aguantando la risa—. Si te digo la verdad, tus ojos son muy lindos. Pero no eres mi tipo, tranquilo —yo reí junto a él—. Una pregunta, ¿Te gusta mi hermana? Porque quizá… Tan solo quizá, ella está enamorada de ti. Está como loca, solo habla de ti —el me miró, con una sonrisa pícara—. Estaba pensando, que harían una bonita pareja. Ojos azules y verdes, linda combinación, ¿No crees?
— Quizá podemos darle de su propio merecido. He visto cómo te trata, Megan.
Yo sonreí con alegría. Me agradaba tener un amigo como Cam, él sí sabía jugar sucio.
Aceptada
Me encanta como escribes, tu ship es hermoso, y no tienes faltas. Ya estas audicionando.
Invitado
Invitado
Re: Crossroad {resultados}
aun no tengo nada especifico. No hay fecha aun.Drama♥Queen escribió:Cuándo cierran las audiciones?
Invitado
Invitado
Re: Crossroad {resultados}
La espero <33333Allizaesc escribió:paulis,.... puedo dejar una sinopsis?? xq, pos como ya sabes cómo escribo...
no, olvidalo, ahora que lo pienso si tengo un capítulo que puedo subir... mm bueno, ya te dejo mi ficha ;)
Invitado
Invitado
Re: Crossroad {resultados}
Confianza Cami, confianza joder.CamiiBeliberStyles escribió:Joder que ni de coña quedo xDD, audicionen.
Invitado
Invitado
Re: Crossroad {resultados}
Cassie Hampthon
º Nombre: Noah Phillips | Cassandra Hampthon
º Representante: Matt Lanter | Molly C. Quinn
º Capítulo:
- Troubles N.C:
- →Capítulo 2.→Alice Jenner | Liam Payne.Las gotas de lluvia golpeteaban con la ventana de su habitación. Ese simple sonido llamaba la atención de la castaña, que desde hacía varios minutos su mirada se encontraba fija en el grisáceo cielo, olvidándose del cuaderno en sus piernas y del dibujo aún incompleto. Olvidándose de la música que aún era reproducida a través de los audífonos, todo lo que escuchaba eran las palabras susurradas de una canción que no lograba reconocer y el suave instrumental que llenaba los espacios vacíos de su mente, pero no de su corazón. Permaneció inmóvil, aún no tenía consciencia de sí habían pasado segundos, minutos o incluso horas, pero la lluvia lograba ser un distractor de todo lo demás. Esos cortos momentos donde podía alejarse de sus pensamientos, eran la poca fuerza que necesitaba para seguir adelante.
Dos golpes trajeron a Alice de vuelta. Fijó su mirada en la puerta de caoba que restringía el paso a su habitación. Dos golpes se escucharon de nuevo sobresaltándola. Removió los audífonos y guardó el cuaderno junto con la tiza de carbón en la primera gaveta de su mesa de noche. Se levantó de su cama y alisó el vestido que su madre le había obligado a utilizar esa misma mañana. Se acercó con pasos lentos y abrió la puerta. Su madre la miraba con una sonrisa altanera, una que se desvaneció al ver la mejilla y ambas manos de la muchacha.
-¿Qué te he dicho sobre esos dibujos?- su madre tomo ambas de sus manos y las alzó, dejando a la vista las manchas de carbón.
-Es un arte callejero que no debe ser practicado por personas de alta sociedad.
-¿Por qué me desobedeces Alice? – la castaña murmuró un ‘lo siento’ intimidada por la mirada de su madre- No balbucees. Lávate las manos y te esperamos abajo, los invitados llegan en cinco minutos. –sin decir más se retiró.
Alice todavía no se movía de su lugar, no entendía como su madre lograba encontrar su felicidad en el dinero y en la sociedad, y aún peor, como la obligaba a ella a interesarse en eso también. Se alejó de la puerta y caminó al baño de su habitación, encendió la luz, y abrió la llave del lavamanos para dejar caer el agua. Luego de lavar sus manos levantó la vista, mirándose en el espejo. Otra mancha de carbón adornaba su mejilla, no sabía en qué momento sus manos habían hecho contacto con ella, pero sabía que eso le había causado un problema. Tomó una toalla y removió esa mancha también. Igual que veces anteriores miró por unos segundos su reflejo, uno que no reconocía. Sus marrones ojos se encontraban apagados y ninguna sonrisa se encontraba en sus labios, cosa que no era sorpresa para la muchacha, pero tampoco hacía que sintiera orgullosa.(**)
Presentaciones, negocios, falsas sonrisas y falso interés, en eso había consistido la cena de sus padres. Cumplir órdenes, asentir a las palabras de su madre y hablar sólo cuando requerían que lo hiciera, esa había sido la noche de Alice. Los invitados recién se habían ido y su madre le había permitido a la castaña subir a su habitación.
En el momento de cerrar la puerta de su habitación tras ella, el cansancio la invadió por completo. Caminó hasta sentarse en el borde de su cama, retiró los zapatos de tacón y por unos segundos se dedicó a frotar suavemente sus pies, tratando de aliviar el dolor, pero, por experiencia, sabía que no se iría fácilmente. Se levantó y entró al armario. Se quitó el vestido y lo dejó reposando en uno de los muebles para colocarse la piyama. Salió del armario y se dirigió al baño, se removió el maquillaje y amarró su cabello en una coleta, para luego salir y sentarse nuevamente en su cama, abriendo la gaveta para sacar el cuaderno y la tiza de carbón.
Dejar de dibujar era en lo único en lo que no escuchaba a su madre, era una forma de distraerse y aunque ya no alejaba la soledad que sentía muy adentro, si alejaba los pensamientos que la atormentaban tanto en el día como en la noche. Buscó la página del último dibujo y continuó con los trazos de la rosa que había comenzado en la mañana.
Todos los días, la rutina de Alice era la misma. Levantarse al sonido de la alarma, bañarse, vestirse con la ropa que su madre haya elegido mientras la castaña se duchaba, bajar a desayunar con sus padres, pretender que la conversación es de su agrado, ir de nuevo a su habitación continuar con un viejo dibujo o comenzar uno nuevo sólo para distraer a su mente. Lavar sus manos, ir a la biblioteca de la casa, tomar uno de los libros, guardarlo en su bolso y bajar a almorzar con sus padres, haciendo lo mismo de la mañana y luego dirigiéndose al jardín para leer. En la noche, volver a la biblioteca a colocar el libro en su lugar, subir a su habitación y arreglarse para los invitados que nunca faltan a la cena y cubrir con una falsa sonrisa el cansancio y el dolor que oprimen diariamente su pecho, para luego subir a su habitación, terminar el dibujo y acostarse en su cama, esperando tener un sueño tranquilo pero fallando en el intento.
Alice guardó el cuaderno al terminar el dibujo, lavó sus manos y caminó a la ventana, apoyando el costado derecho de su cuerpo en el vidrio. Seguir la rutina era lo único que cubría su dolor, movimientos mecánicos y preciosos eran los únicos que la muchacha tenía la voluntad de realizar, ya que cualquier movimiento genuino o pensamiento propio requería mucho más esfuerzo del que la castaña estaba dispuesta a realizar.
Ella había entendido tiempo atrás que lo que ella quisiera no era de la importancia de las demás personas, por lo que vivir complaciendo a los demás sin importar sus propias exigencias era lo que había aprendido a hacer.
Las lágrimas rogaban por salir de sus ojos, pero ella no creía tener el derecho de desahogar su dolor a través de las lágrimas, ella merecía sentirse vacía, sentirse sola, si hubiera escuchado a su madre desde un principio y no hubiera confiado ciegamente en ese muchacho, si no se hubiera dejado engañar por sus mentiras, no se sentiría así, ya que no sabría lo que es ser amado. Aunque todo hubiera sido un juego para él, para ella fue real, pero al final, ese muchacho que decía que la amaba, había sido igual que todos los demás que la rodean, no quería su amor, sólo querían el dinero y la fama que adornaba falsamente su vida.
Nadie jamás la querría por algo más que el dinero, y él se lo había terminado de demostrar. Ahora, todas sus acciones carecían de sentimiento, de alegría, y sus esperanzas se habían desvanecido en su crecimiento. ¿Para qué esperar un buen futuro, cuando las personas se empeñan en demostrarte lo poco que vales en el presente?
- “Pau’s girl”:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Paulis, no pude usar a liam...
es que en serio no lo veo como alguien que deje plantado a la esposa
entonces uso mi otro sexy ship
espero que te guste!!
besos hermosa :aah:
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I'm just not sure whether my heart is working. And yours is beating double time. Cole & Ro. New Rules
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Kida
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Re: Crossroad {resultados}
Paaauuuuuliiiissss<333 ¿Todavía se puede audicionar? Es que me encantó la idea, ¿cómo le haces para crear ideas tan increíbles? En serio. Te felicito. Yo sé que no voy a quedar bc escribo horrible *se pone a llorar en posición fetal*, pero aún así haré el intento. Es que todas son súper escritoras y no puedo competir contra eso :'c Todavía no sé con quién quiero participar. Dame ideas, ah xdd. Bueno, saludos<333.
- Pau’s girl:
holiscrayolis
Re: Crossroad {resultados}
Allizaesc escribió:
Cassie Hampthon
º Nombre: Noah Phillips | Cassandra Hampthon
º Representante: Matt Lanter | Molly C. Quinn
º Capítulo:
- Troubles N.C:
→Capítulo 2.
→Alice Jenner | Liam Payne.Las gotas de lluvia golpeteaban con la ventana de su habitación. Ese simple sonido llamaba la atención de la castaña, que desde hacía varios minutos su mirada se encontraba fija en el grisáceo cielo, olvidándose del cuaderno en sus piernas y del dibujo aún incompleto. Olvidándose de la música que aún era reproducida a través de los audífonos, todo lo que escuchaba eran las palabras susurradas de una canción que no lograba reconocer y el suave instrumental que llenaba los espacios vacíos de su mente, pero no de su corazón. Permaneció inmóvil, aún no tenía consciencia de sí habían pasado segundos, minutos o incluso horas, pero la lluvia lograba ser un distractor de todo lo demás. Esos cortos momentos donde podía alejarse de sus pensamientos, eran la poca fuerza que necesitaba para seguir adelante.
Dos golpes trajeron a Alice de vuelta. Fijó su mirada en la puerta de caoba que restringía el paso a su habitación. Dos golpes se escucharon de nuevo sobresaltándola. Removió los audífonos y guardó el cuaderno junto con la tiza de carbón en la primera gaveta de su mesa de noche. Se levantó de su cama y alisó el vestido que su madre le había obligado a utilizar esa misma mañana. Se acercó con pasos lentos y abrió la puerta. Su madre la miraba con una sonrisa altanera, una que se desvaneció al ver la mejilla y ambas manos de la muchacha.
-¿Qué te he dicho sobre esos dibujos?- su madre tomo ambas de sus manos y las alzó, dejando a la vista las manchas de carbón.
-Es un arte callejero que no debe ser practicado por personas de alta sociedad.
-¿Por qué me desobedeces Alice? – la castaña murmuró un ‘lo siento’ intimidada por la mirada de su madre- No balbucees. Lávate las manos y te esperamos abajo, los invitados llegan en cinco minutos. –sin decir más se retiró.
Alice todavía no se movía de su lugar, no entendía como su madre lograba encontrar su felicidad en el dinero y en la sociedad, y aún peor, como la obligaba a ella a interesarse en eso también. Se alejó de la puerta y caminó al baño de su habitación, encendió la luz, y abrió la llave del lavamanos para dejar caer el agua. Luego de lavar sus manos levantó la vista, mirándose en el espejo. Otra mancha de carbón adornaba su mejilla, no sabía en qué momento sus manos habían hecho contacto con ella, pero sabía que eso le había causado un problema. Tomó una toalla y removió esa mancha también. Igual que veces anteriores miró por unos segundos su reflejo, uno que no reconocía. Sus marrones ojos se encontraban apagados y ninguna sonrisa se encontraba en sus labios, cosa que no era sorpresa para la muchacha, pero tampoco hacía que sintiera orgullosa.(**)
Presentaciones, negocios, falsas sonrisas y falso interés, en eso había consistido la cena de sus padres. Cumplir órdenes, asentir a las palabras de su madre y hablar sólo cuando requerían que lo hiciera, esa había sido la noche de Alice. Los invitados recién se habían ido y su madre le había permitido a la castaña subir a su habitación.
En el momento de cerrar la puerta de su habitación tras ella, el cansancio la invadió por completo. Caminó hasta sentarse en el borde de su cama, retiró los zapatos de tacón y por unos segundos se dedicó a frotar suavemente sus pies, tratando de aliviar el dolor, pero, por experiencia, sabía que no se iría fácilmente. Se levantó y entró al armario. Se quitó el vestido y lo dejó reposando en uno de los muebles para colocarse la piyama. Salió del armario y se dirigió al baño, se removió el maquillaje y amarró su cabello en una coleta, para luego salir y sentarse nuevamente en su cama, abriendo la gaveta para sacar el cuaderno y la tiza de carbón.
Dejar de dibujar era en lo único en lo que no escuchaba a su madre, era una forma de distraerse y aunque ya no alejaba la soledad que sentía muy adentro, si alejaba los pensamientos que la atormentaban tanto en el día como en la noche. Buscó la página del último dibujo y continuó con los trazos de la rosa que había comenzado en la mañana.
Todos los días, la rutina de Alice era la misma. Levantarse al sonido de la alarma, bañarse, vestirse con la ropa que su madre haya elegido mientras la castaña se duchaba, bajar a desayunar con sus padres, pretender que la conversación es de su agrado, ir de nuevo a su habitación continuar con un viejo dibujo o comenzar uno nuevo sólo para distraer a su mente. Lavar sus manos, ir a la biblioteca de la casa, tomar uno de los libros, guardarlo en su bolso y bajar a almorzar con sus padres, haciendo lo mismo de la mañana y luego dirigiéndose al jardín para leer. En la noche, volver a la biblioteca a colocar el libro en su lugar, subir a su habitación y arreglarse para los invitados que nunca faltan a la cena y cubrir con una falsa sonrisa el cansancio y el dolor que oprimen diariamente su pecho, para luego subir a su habitación, terminar el dibujo y acostarse en su cama, esperando tener un sueño tranquilo pero fallando en el intento.
Alice guardó el cuaderno al terminar el dibujo, lavó sus manos y caminó a la ventana, apoyando el costado derecho de su cuerpo en el vidrio. Seguir la rutina era lo único que cubría su dolor, movimientos mecánicos y preciosos eran los únicos que la muchacha tenía la voluntad de realizar, ya que cualquier movimiento genuino o pensamiento propio requería mucho más esfuerzo del que la castaña estaba dispuesta a realizar.
Ella había entendido tiempo atrás que lo que ella quisiera no era de la importancia de las demás personas, por lo que vivir complaciendo a los demás sin importar sus propias exigencias era lo que había aprendido a hacer.
Las lágrimas rogaban por salir de sus ojos, pero ella no creía tener el derecho de desahogar su dolor a través de las lágrimas, ella merecía sentirse vacía, sentirse sola, si hubiera escuchado a su madre desde un principio y no hubiera confiado ciegamente en ese muchacho, si no se hubiera dejado engañar por sus mentiras, no se sentiría así, ya que no sabría lo que es ser amado. Aunque todo hubiera sido un juego para él, para ella fue real, pero al final, ese muchacho que decía que la amaba, había sido igual que todos los demás que la rodean, no quería su amor, sólo querían el dinero y la fama que adornaba falsamente su vida.
Nadie jamás la querría por algo más que el dinero, y él se lo había terminado de demostrar. Ahora, todas sus acciones carecían de sentimiento, de alegría, y sus esperanzas se habían desvanecido en su crecimiento. ¿Para qué esperar un buen futuro, cuando las personas se empeñan en demostrarte lo poco que vales en el presente?
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Paulis, no pude usar a liam...
es que en serio no lo veo como alguien que deje plantado a la esposa
entonces uso mi otro sexy ship
espero que te guste!!
besos hermosa :aah:
Aceptada
Amos como escribes, lo sabes. Nose que mas decir, asi que... ya estas audicionando.
Invitado
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Re: Crossroad {resultados}
Si se puede, creeme, falta mushoooooooooo pa' que se cierre.holiscrayolis escribió:Paaauuuuuliiiissss<333 ¿Todavía se puede audicionar? Es que me encantó la idea, ¿cómo le haces para crear ideas tan increíbles? En serio. Te felicito. Yo sé que no voy a quedar bc escribo horrible *se pone a llorar en posición fetal*, pero aún así haré el intento. Es que todas son súper escritoras y no puedo competir contra eso :'c Todavía no sé con quién quiero participar. Dame ideas, ah xdd. Bueno, saludos<333.
- Pau’s girl:
Tu escribes hermoso, so ¡callate!
Ve por Harry o Ian Somerhalder, casi nadie ha ido por Harry
Invitado
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Re: Crossroad {resultados}
- Pau's girl:
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¡Hola Pau!
Bueno, mi nombre es Fernanda, y déjame decirte que amé completamente tu idea, así que me decidí a audicionar.
Aquí deje el gif y en unos minutos subo mi ficha, ¿vale?
Kisses xx.
Bueno, mi nombre es Fernanda, y déjame decirte que amé completamente tu idea, así que me decidí a audicionar.
Aquí deje el gif y en unos minutos subo mi ficha, ¿vale?
Kisses xx.
Fery.
Re: Crossroad {resultados}
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Jessamine L. Miller
{/} Representantes: Jade Thirlwall y Colton Haynes.
{/} Personajes: Jessamine L. Miller y Michael J. Smith.
{/} Edades: Ella 22 y él 24.
- Capítulo de tu autoría:
- Insensitive:
Capítulo 003Estaba estacionada en una orilla de la avenida, con las ventanas cerradas y el rostro pálido. No podía pensar en otra cosa que no fueran los chicos con armas. Pero cuando menos lo esperé, una figura ya estaba junto al auto, mirándome fijamente. Intenté encontrar alguna respuesta en la expresión de su rostro, pero su cara era indescifrable. De pronto, me habló.
-Baja del auto -me dijo lentamente mientras sentía como mi cuerpo se paralizaba completamente-. Baja ahora mismo o romperé el vidrio y te bajaré yo mismo –amenazó.
Estaba completamente inmóvil, asustada. Quería hacer lo que él me pedía, quería salir de auto, pero mi cuerpo no estaba respondiendo. Lo único que pude hacer fue negar con la cabeza. Me di cuenta que al ver mi respuesta su mirada se encendía como si estuviese furioso, y al parecer, así era. Estaba más que furioso.
-Tienes una última oportunidad, ¿de acuerdo? -me miró fijamente y suspiró-. Baja del auto o te bajaré yo mismo. Supongo que no querrás ver el vidrio de tu lindo auto roto, ¿cierto?
Pero yo seguía inmóvil. ¡Muévete Kiara! Me gritaba a mí misma. ¡Sal ahora del auto! Pero seguía sin realizar movimiento.
Advertí que los chicos que había visto anteriormente -los de cabellos extraños, ropas raras y armas- se acercaban peligrosamente, eran alrededor de seis y no se veían nada contentos. Me sentí aún peor. También me di cuenta que Niall los miraba serio, y después su vista se volvió una vez más a mí. Su rostro estaba más blanco de lo que lo había visto hace unos minutos.
-Chica, ¿no entiendes que debes de bajar ya? -me gritó.
Sin esperar más tiempo, Niall se quitó la camiseta y pude apreciar cada detalle de su anatomía superior. Tenía un abdomen lindo, al parecer había dedicado un buen tiempo al gimnasio, su piel era blanca y aparentemente suave y... Antes de que pudiera seguir fantaseando con su cuerpo entendí porque se quitó la camiseta. Enredó la prenda en su puño y lo siguiente que vi fue el vidrio de mi puerta en mil pedacitos.
Niall abrió la puerta y me jaló fuera del auto. Miré en dirección hacia donde había visto a los chicos y entonces me preocupé más. Venían todos corriendo en nuestra dirección y no se veían precisamente felices. Niall tiró de mí y empezamos a correr en dirección opuesta a ellos. Al pasar corriendo pude ver algunos de los edificios que había sobre esa calle. Bares, Prostíbulos, Moteles y más sitios abandonados, entonces entendí que me había ido a meter a un barrio de mala muerte. En ese instante, mi cuerpo comenzó a moverse.
Corrimos a través de algunas calles mientras los tipos de continuaban siguiéndonos. Agradecí haberme puesto mis converses en lugar de un par de tacones de aguja, ya que hubieran sido solamente un estorbo. Escuché que quienes nos seguían nos gritaban cientos de cosas para que nos detuviéramos pero no hicimos caso.
Encontramos un almacén abierto y entonces entramos en él. Niall cerró la puerta detrás de nosotros. Se quitó la camiseta del puño y la colocó nuevamente en su cuerpo. Ambos nos miramos fijamente por unos minutos y pude ver que en su rostro había cierta molestia.
-Ahora sí, ¿me puedes explicar que estás haciendo aquí? -me preguntó serio.
-Niall yo... –puso su mano frente a mi rostro y me interrumpió.
-¿Cómo es que sabes mi nombre? No recuerdo habértelo dicho.
-Porque no me lo dijiste -susurré mientras dirigía la mirada alrededor del lugar. Efectivamente era un almacén-. Yo misma lo... Descubrí.
-De acuerdo, mira niña... –esta vez fui yo quien interrumpió.
-No soy una niña, y mi nombre es Kiara. Ya te lo había dicho hoy en la escuela -dije algo alterada. ¿En realidad no recordaba mi nombre?
-Kiara -soltó de mala gana con algo de exasperación en su voz-, solamente te lo preguntaré una vez, y quiero que me digas la verdad -suspiró-, ¿qué estás haciendo aquí? ¿Me estabas siguiendo?
Me detuve antes de responder. ¿Tenía algún sentido no decirle la verdad?, ¿le diría que llegué ahí porque lo estaba siguiendo?, ¿le contaría que me sentía frustrada de que él no me hablara? Eso sonaba completamente estúpido y chiflado. Suspiré y entonces hablé, aunque me sorprendí de mi respuesta.
-¿Por qué viniste aquí? -Niall me miró directo a los ojos y después se apartó, caminó hacia una de las esquinas del almacén y exhaló lentamente.
-Vivo cerca –respondió con un encogimiento de hombros.
-¿Cerca? -pregunté horrorizada-. Niall, este lugar es muy feo, está lleno de gente mala y... -me detuve. Alcé la mirada y me vi que él estaba nuevamente frente a mí, examinando mi rostro lentamente con esa única mirada azul suya. De pronto, una esquina de su labio se curvó en una linda sonrisa.
-Discúlpeme princesa, pero como usted dice, éste es un barrio horrible, y sí, está lleno de gente mala, entonces... ¿Quién le asegura que yo no soy de esa gente mala? -me dijo con un tono tan firme que provocó que hasta las puntas del cabello se me levantaran.
-Porque lo veo en tu mirada, eres diferente a los demás, pero no eres malo -respondí más segura de lo que esperaba-, y no soy una princesa.
Esperaba que Niall me gritara o se molestara más de lo que ya estaba, pero para mi sorpresa, lo único que hizo fue soltar una pequeña y sexy risa.
-Aún no respondes la primer pregunta que te hice, ¿por qué me seguías? –repitió.
-Dijiste que solo me lo preguntarías una vez -dije desafiándolo.
-No me retes niña, no te gustará saber que encontrarás con eso, aunque según tú no lo parezca puedo llegar a ser muy peligroso y estoy seguro de que tú no quieres descubrir mi lado malo -dijo mientras sonreía siniestramente, pero aun así, se veía condenadamente sexy.
-¿Y qué te hace pensar que no quiero descubrirlo? -pregunté acercándome a él. ¿Qué rayos estaba haciendo? Me di cuenta en ese instante de que soy una maldita masoquista.
-Eres muy, muy testaruda -susurró en mi oído-. ¿Qué es lo que buscabas siguiéndome? -insistió y se apartó de mí.
-¿Por qué te alejaste de mí a la hora del almuerzo? -dije con cierta molestia en mi voz y evadiendo una vez más su pregunta-. Y no me digas que porque no te gusta hablar a la hora de la comida, eso no te lo cree ni tu gato.
-No tengo gatos.
-Niall, dime la verdad, ¿tan mal te caigo? -pregunté desesperada.
-¿Siempre eres así de directa? -sonrió divertido.
-¡Deja de darle la vuelta a mis preguntas y responde! –grité.
Su rostro se tensó. Por un momento creí que fue a causa de mi grito, pero después me di cuenta de que no era así. A fuera del almacén se escuchaban pasos y voces nada amigables. Miré a Niall, quien ya estaba acercándose para tomarme del brazo.
-Vámonos –espetó.
-¿A dónde?
-¿Podrías dejar de hacer preguntas por un instante?
-No, ¿a dónde vamos? -repetí mientras corríamos hacia el otro lado del almacén en donde había otra puerta.
-A mi departamento -me dijo y abrió la puerta arrastrándonos hacia otra habitación la cual estaba llena de motocicletas. Tomó un casco y me lo entregó, después me hizo una seña para que me subiera.
-No subiré a una motocicleta -dijo decidida.
-Entonces quédate aquí para que te maten -dijo haciendo una seña hacia la puerta donde habíamos entrado. La puerta se estaba abriendo.
Suspiré y me subí a la motocicleta. Niall la encendió y comenzó a moverse, llegamos a otra puerta y por suerte estaba abierta. Salimos a la calle y me topé con que aumentaba la velocidad, así que me vi obligada a aferrarme a Niall para impedirme caer de la moto.
-Entonces, ¿a tu departamento? -grité a través del viento.
-Sí, a mi departamento, niña.
- Half a Heart:
Capítulo 1—¡Mamá! –gritó la chica mientras bajaba corriendo las escaleras de su casa.
—¿Sí? –gritó su madre de vuelta desde la cocina.
—Voy a casa de Zayn, vuelvo más tarde –dijo mientras abría la puerta principal de la casa.
—De acuerdo, solo no llegues tarde.
—¡No lo haré! –dijo y salió de su casa.
El día estaba nublado, pero aun así se podía sentir un aire caluroso.
Alice sonrió y cruzó corriendo la calle, para después entrar al jardín de sus vecinos, sin embargo en cuanto pisó el césped, se resbaló y cayó al suelo ya que estaba recién regado el jardín.
La puerta de entrada se abrió y una sonora carcajada resonó, provocando que Alice mirara en dirección del sonido.
Zayn estaba parado en la puerta mirándola mientras intentaba contener su risa. Después de unos segundos salió y le tendió la mano a la chica. Alice la tomó agradecida.
—¿Acaso tembló en la ciudad, Al? Te llevaste un muy buen golpe –dijo él sonriente mientras ella se ponía de pie. Comenzó a limpiarse la ropa con las manos pero había una gran mancha de lodo en su trasero.
—Muy gracioso Zayn, deberías de pensar en ser comediante.
—Me han dicho eso antes, pero realmente lo que me gusta es la música –la chica le dedicó una mirada asesina y él volvió a reír-. Tranquila, era solo un chiste. Vamos, entremos a la casa.
Ambos caminaron hacia la casa y se dirigieron a la habitación del chico.
Muchas personas ven mal el hecho de que dos adolescentes –hombre y mujer- se encierren en un cuarto solos, pero ellos no le tomaban importancia. Habían sido amigos desde que ambos estaban en el Jardín de niños y su relación nunca había dado para más.
Malik cerró la puerta y ambos se tumbaron en la cama mirando hacia el techo.
Estuvieron en silencio durante un par de minutos, pero no era un silencio incómodo, el silencio para ellos siempre era agradable, sin embargo fue Alice quien se decidió a romperlo.
—¿Listo para el primer día mañana?
Él la miró y sonrió.
Mañana comenzarían el primer día en la Universidad. Ambos irían a la Facultad de Música, aunque con diferentes enfoques.
Ella quería ser directora de una gran orquesta, en cambio él sería maestro de coros en las escuelas para niños especiales.
Desde que eran pequeños habían acordado estudiar ahí. Ambos cumplieron el acuerdo.
—Listo y emocionado –dijo él-. ¿Qué tal tú?
—Nerviosa.
—¿Por qué? –preguntó Zayn y ella se encogió de hombros.
—Nueva escuela, nuevos maestros, nuevas materias… No sé cómo serán las cosas ahora.
—Tranquila, sé que te irá bien. Siempre es así.
Ella se levantó y miró a su amigo. Zayn siempre sabía qué decir para hacerla sentir mejor, él era su punto de apoyo y su fortaleza. Sin él, ella estaría completamente perdida.
—Igual que a ti –dijo Alice y una vez más hubo silencio.
Por su cabeza pasaron cientos de cosas. En cada escena importante de su vida, Zayn había estado con ella y sabía que el paso a la Universidad no sería la excepción.
—No iré a Julliard –comentó de pronto Zayn.
—¿Qué?
—Solamente eso. No iré a Julliard.
—¿Por qué? –preguntó ella sorprendida-. Eres genial Zayn, quizás más tarde te llamarán, yo sé que lo harán, no te desanimes.
—Tú no quieres ir ahí, y no me iré sin ti.
—Oye –dijo ella mientras lo miraba fijamente-, yo no puedo ir porque mis doctores jamás me dejarán salir del país para ir a Julliard, pero no quiero que eso te frene a ti.
La idea de dejarlo partir le dolía, pero sí a Zayn se le presentaba esa oportunidad, Alice jamás se perdonaría si por su culpa él no iba.
Cuando ella tenía 12 años y su desarrollo estaba comenzando cayó en una fuerte anemia. Nadie sabía por qué, pero ella la tenía.
Después de un tiempo, los doctores descubrieron que era a raíz de su menstruación y que necesitaba estar ante constantes cuidados. A pesar de que su alimentación cambió, la anemia nunca abandonó por completo su cuerpo y ella tuvo que aprender a sobrellevarlo. Sin embargo, no podían quitar la alerta ya que si se descuidaba, la anemia podría provocar leucemia, y el cáncer sería su perdición.
—Tranquila –dijo Zayn en un intento de calmarla-. Además, ni siquiera me han llamada. Tal vez no lo hagan.
—Nunca pierdas la esperanza –le susurró la chica.
Zayn la miró fijamente por unos segundos. Ambos se fundieron en un gran abrazo y él le susurró al oído: —Jamás la he perdido.
- They Don't Know About Us:
- They Don't Know About USHarry estaba bajando las escaleras con sus maletas entre las manos, cuando de pronto la voz autoritaria de su padre lo detuvo.
—¿A dónde crees que vas? –preguntó su papá interponiéndose entre él y la puerta. El ojiverde se detuvo y contuvo el aliento. Su padre lo descubrió justo cuando huía.
—Me voy, padre –respondió en voz baja pero firmemente. Harry había estado muchos años bajo la sombra de aquél hombre, pero había llegado el fin. Él estaba dispuesto a ser libre esta vez.
—¿Y a dónde? Si se puede saber –le espetó el hombre desafiante. Era más que lógico que esperaba una respuesta congruente de parte de su hijo pero éste evadió el punto central de la pregunta.
—Me voy, y no pienso volver jamás –su papá le interrumpió.
—Sabes perfectamente a qué me refiero, Harry. ¿Con quién te vas?
—Me voy con Sky –dicho esto, el rostro de su padre palideció, pero no cambió su expresión de dureza, estaba muy molesto y jamás permitiría que Harry se fuera de la casa, y más aun sabiendo que se iría para estar con su novia Sky.
—Déjate de juegos hijo –dijo mientras se dejaba caer en un pequeño sofá-. Sabes muy bien que nunca te permitiré marcharte y mucho menos si es para irte con esa… –la voz de Harry resonó en toda la casa cuando interrumpió a su padre.
—¡No te atrevas a insultarla! –Le gritó mientras se acercaba a él para quedar frente a frente-. Sabes muy bien que nada de lo que hagas impedirá que esté con ella, porque la amo con todo mi corazón, la amo como jamás he amado a nadie, y nada podrá cambiar eso, ni siquiera tú –Harry dio dos pasos hacia atrás y tomó sus maletas una vez más, después comenzó a caminar hacia la puerta.
—Sabes bien que nunca me ha gustado tu relación con esa chica –su padre tomó una copa de vino y la bebió completa mientras miraba con tristeza a su único hijo.
—Por eso me voy. Ni tú ni mi madre entienden lo que siento y mucho menos lo aceptan.
—Haz lo que quieras Harry, pero te advierto una cosa, si te atreves a salir por esa puerta, escúchame bien, te olvidas de esta casa, y no podrás volver nunca más. Mucho menos tendrás el derecho de llamarme padre –amenazó el hombro aún con una chispa de esperanza en los ojos. Él aún esperaba que su hijo cambiara de opinión.
Sin embargo su hijo no le respondió. Harry simplemente caminó hacia la puerta, la abrió y le dedicó una última frase a su padre. Una frase que el hombre nunca podría olvidar.
—Te amo, pero eso no es suficiente. Necesito vivir y mi vida está al lado de Sky y si la única forma de hacerlo es sin ti, estoy dispuesto a pagar el precio. Hasta nunca -dicho esto abrió su coche y manejó rumbo al lugar acordado con su amada.
(…)
Sky miraba por la ventana hacia la noche. Sus padres se encontraban dormidos, así que debía de darse prisa para salir de la casa sin llamar la atención. Le dolía mucho la idea de tener que dejar a su familia, pero nadie entendía su relación con Harry y por consiguiente tampoco la aceptaban.
Tomó un lápiz y una hoja de papel y se dispuso a escribir una carta para su familia. Una carta que muchas veces había repasado en su mente y que por fin, después de tanto tiempo podría plasmar en papel.
"Queridos mamá y papá:
En estos momentos sé que se estarán preguntado dónde estoy, pero la respuesta no la tendrán nunca, porque sé que si se los digo van a ir a buscarme, y eso es precisamente lo que quiero evitar. No se preocupen por mí, yo estoy bien, y espero que ustedes lo estén también. No se sientan culpables de mi repentina partida, ustedes son muy importantes para mí y los amo con todo mi corazón, pero necesito empezar una nueva vida, en la cual, yo tomaré mis propias decisiones y seré responsable de mis actos.
Quizás algún día recibirán noticias mías. Tengan por seguro que los echaré de menos.
Los ama con todo su corazón, Sky.”
Cuando terminó de escribir tomó sus maletas y dejó la pequeña carta sobre su cama. Salió de la casa y se limpió unas pocas lágrimas que comenzaban a rodear sus mejillas.
Tomó un taxi y le indicó al chofer que la llevara hacia la Torre Eiffel.
A los pocos minutos, ya se encontraba frente aquél bello monumento, y pudo divisar a lo lejos la silueta de su pareja. Cuando ambos hicieron contacto visual corrieron en busca de los brazos del otro.
—Sky, mi amor –susurró él mientras besaba tiernamente sus labios.
—Harry –dijo ella aferrándose a sus brazos e inhalando el aroma tan característico de él.
De pronto, la chica sintió una urgencia terrible de memorizar cada parte de su rostro, de sus brazos, todo de él. Como si fuera la última vez que lo podría hacer.
—Tranquila, linda –Harry tomó el rostro de Sky entre sus manos, quitó un mechón de cabello que le estorbaba en el contacto de sus miradas y la besó tierna pero apasionadamente en los labios-. Todo saldrá bien, te lo juro.
Duraron varios minutos fundidos en el beso, y se separaron para tomar aire, después de esto se abrazaron aferrándose el uno al otro.
El abrazo fue interrumpido debido a que el teléfono de Sky comenzó a sonar, ésta lo miró para verificar de quien era el número y suspiró con tristeza al ver que eran sus padres.
—¿Debería responder?
—No lo hagas, por favor.
Sky miró una vez más el teléfono, queriendo escuchar una vez más la voz de sus padres, pero sabía que después de eso sería aún más difícil decir adiós.
Las llamadas en el teléfono de la chica continuaron, sin embargo después de un par de horas cesaron por fin.
Ambos seguían debajo de la Torre Eiffel, hablando sobre lo que harían ahora que estaban juntos.
—Ya lo tengo pensado Sky, mañana saldremos en el primer vuelo rumbo a Londres, debemos de dejar Francia cuanto antes, sino lo hacemos podríamos ser encontrados.
—De acuerdo, pero, ¿dónde viviremos? –preguntó la castaña con un tono de melancolía en la voz mientras de sus ojos caían unas cuantas lágrimas. Harry lo notó y las limpió antes de que corrieran más abundantemente.
—Rentaremos un departamento, yo trabajaré, no sé cómo ni dónde, pero lo lograremos. Solamente debemos estar juntos mi amor –dijo atrayendo a Sky junto a él.
—Tienes razón, estaré contigo en todo momento, y te apoyaré en lo que necesites. Saldremos de esto juntos Harry –la chica se soltó de sus brazos y juntó sus labios en un pequeño beso-. Me siento mal por nuestras familias.
—Yo también. Pero ellos no nos entienden, no comprenden lo que sentimos.
—Ellos no saben sobre nosotros.
—No, pero eso no nos impedirá ni a ti ni a mí seguir con nuestra relación.
—Claro que no Harry, mi vida está a tu lado.
—Igual la mía, Sky –el ojiverde soltó un suspiro, besó la frente de su novia y tomó entre sus manos las maletas de ambos-. Ahora sube a mi auto, tenemos muchas horas para conducir –le dedicó una tierna sonrisa a Sky y ella asintió para después subir en el auto de Harry.
—Porque ellos no saben de nosotros –susurró Sky mientras le dedicaba una última mirada a la Torre Eiffel. Harry encendió su auto y comenzaron a viajar sin rumbo durante la noche, pero a pesar de eso Harry no se encontraba triste, ya que estaba junto a Sky, la mujer de su vida, y ahora nada ni nadie podría separarlos. Ambos comenzarían una nueva vida juntos y serían felices, sin prejuicios ni culpas. Serían solamente ellos y su amor, justo como lo habían soñado.
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Vale, espero que esté todo bien y no falte nada en la ficha, la hice en muy poco tiempo.
En realidad me encantó la idea y espero que pronto puedas subir resultados.
Kisses xx.
Vale, espero que esté todo bien y no falte nada en la ficha, la hice en muy poco tiempo.
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Fery.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.