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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Tengo un problema con esto, ahElectricBlue13 escribió:dhkjhfshkj realmente creo que tenes una adiccion a subir adaptaciones,pero es una bonita adiccion(?
Okay me encanta esto de que sean amigos y despues se van a dar cuenta que se aman es demasiado djfhkjsdhk
La sigo:)
Invitado
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Ah, harry enfermero.Debby1D escribió:Aww, es como un enfermero todo tierno y dedicado.
Y se ata el pelo, eso es un plus! ah JAJAJ
Seguila pronto por favor!
Adios ♥
La sigo:)
Invitado
Invitado
2
Louis estaba en la silla de su oficina con los pies arriba de su escritorio, casi dormido, y podía oír que su asistente se afanaba golpeando el teclado. Decidió que era mejor levantarse antes de que su espalda le doliera y empezó a moverse, pero sus pies se enredaron con el cordón del teléfono. Él empezó a caer….
Despertó, sacudió la cabeza y abrió los ojos. Louis gritó de dolor mientras intentaba sentarse, sus piernas se enredaron en los cobertores.
Tan pronto como Louis empezó a moverse. Harry dejó su pluma y libreta y trató de calmarlo.
—Louis. Hey, estás bien — él dijo, tratando de quitarle el cobertor que Louis tenia bien apretado alrededor de él. Harry sostuvo su laptop con una mano tratando de evitar que se deslizara por sus muslos.
«¿Harry?» «¿Qué jodidos hace Harry en mi oficina?»
Los dos hombres eran amigos desde hacía años, pero desde que trabajaban en periódicos rivales ellos nunca visitaban al otro en su trabajo.
—¿Harry? ¿Qué? ¿Por qué?
—Louis — Harry dijo pacientemente —. Vamos. Despierta.
Tomaste medicamento para el dolor.— Apretó suavemente el hombro de Louis.
Louis parpadeó, sus ojos enfocaron el ligeramente iluminado cuarto. Harry estaba medio inclinado sobre él.
—Oh, no le encantaría a ‘El Mirror’ tener una fotografía de esto: Corresponsales de periódicos en guerra encontrados…«En la cama juntos.» Puedo ver los encabezados. Katherine podría tener sus pantis en un serio giro— Louis dijo, las palabras salieron un poco confusas —. Joder, estoy sediento. Me siento como si tuviera la caravana de un circo viajando a través de mi boca.— Giró la cabeza a un lado, golpeando contra el fuerte muslo de Harry en lugar de en la almohada que usualmente estaba ahí, y gritó y maldijo cuando el dolor se disparó causándole una ola de mareo.
—Cuidado — Harrt advirtió ayudándole a estabilizarse —. Te ves como el infierno. Aguanta. Iré a traerte algo de beber.
Dejó la laptop en la cama y se movió cuidadosamente tratando de no mover la cama. —Quédate aquí — le ordenó señalándole con el dedo antes de dejar el cuarto.
—Como si tuviera elección — Louis murmuró, acomodándose suavemente contra las almohadas. Vio el reloj despertador arriba de la cómoda a los pies de la cama, e hizo cálculos mentalmente. Estaba en el pico más alto del efecto del medicamento y aun le dolía la cabeza; no tan malo, pero seguía fuerte. Esa no era buena señal. El medicamento funcionaba pero no por las siguientes seis horas antes de que pudiera tomar otra dosis. Y en las dos o dos horas y media siguientes los síntomas podrían regresar a vengarse. Necesitaba tratar de comer mientras pudiera mantener la comida en su estómago, y era realmente un tonto si pensaba que podría tener algo de equilibrio pero realmente quería tomar un baño.
Harry regresó a la recámara llevando un vaso del té helado que Louis mantenía en su refrigerador. —Prueba con esto — sugirió sentándose en el borde de la cama junto a él. En algún momento durante las pasadas dos horas Harry se había quitado la banda de su cabello y usaba lentes, algo que odiaba usar delante de la gente. Pero Louis ya los había visto antes.
Louis le sonrió, una medio divertida sonrisa. Harry sabía que era otro aguijón a su descuidada apariencia. Él tenía su propio estilo, elegante y pegado a la moda que se vivía en el momento. Era una de las cosas que habían hecho de su relación genuina: Harry mostraba su desaliñada apariencia alrededor de Louis.
Tomando el vaso, Louis tomó la mitad de un solo trago antes de que su estómago protestara. Lo dejó cuidadosamente en la mesita de noche. —Gracias.
Asintiendo, Harry apoyó una mano en el colchón. —Las pastillas no ayudaron, ¿huh?— Harry seguía su mirada mientras Louis veía su reflejo en el espejo frente a la cama.
Normalmente su castaño cabello se veía saludable. La cara de Louis se veía gris y sus ojos nublados. Ese era un gran cambio.
Louis cerró los ojos. —Oh, ayudan pero con un ataque tan malo solo disminuyen el dolor. No lo matan.
—¿Qué otra cosa ayuda?— Harry preguntó, viendo al suelo cuando su pie chocó con algo. Se acomodó distraídamente los lentes, y vio el lío alrededor de la mesita de noche. —Veo que volcaste el cajón buscando las pastillas — dijo, levantando la revista que había pisado.
—¿Oí que ayuda si frotas mis hombros y quizás mi cabeza?
Harry vio a Louis antes de girarse a ver la portada de la revista. Él frunció ligeramente el ceño. —Tienes dolor, Louis. Si eso puede ayudar, no hay problema.
Louis retiró las almohadas para acostarse en la cama tan plano como le fuera posible. —Gracias, Harry. En este punto incluso puedes tomarme el pelo. Te debo una.
Hary guardó la revista ‘American Journalism’ en el cajón deteniéndose lo suficiente para levantar el resto de las cosas también, levantó una ceja ante algunas de las cosas: plumas, libretas, claro condones y lubricante; no se sorprendió de eso; una bolsa medio vacía de dulces de menta, un encendedor y una cajetilla cigarrillos. Harry frunció el ceño. Pensaba que Louis lo había dejado. Guardó todo en el cajón antes de notar otra cosa debajo de la mitad de la cama, se inclinó un poco más para recuperarlo.
Los dedos de Harry rodearon algo frió y suave como plástico, pero cilíndrico y… Parpadeó cuando sacó el dildo de debajo de la cama. Sus ojos fijos en Louis, sorprendido, pero el otro hombre estaba acostado boca abajo con los ojos cerrados.
Harry estaba tentado; realmente, realmente tentado; a empezar a tomarle el pelo ahora. Lo vio de nuevo, era pesado y grueso, de unos veinte centímetros de largo, lo dejó en el cajón y luego lo cerró.
Se giró en la cama y se puso de rodillas, Harry deslizó sus dedos por el cabello de Louis y empezó a frotarlo suavemente con una mano antes de agregar la otra y darle un suave masaje. Entretanto pensaba en lo que había encontrado. Eso era fácil de responder, seguro. Eso era también más… interesante… de responder, conocía a Louis. Entonces, no. Probablemente no era momento de bromear, al menos no ahora. Harry mantuvo sus reflexiones en silencio para sí mismo y sonrió, divertido por la dirección de sus pensamientos.
Louis gimió haciendo un sonido de sublime placer en lugar de dolor por primera vez desde que el dolor de cabeza lo golpeó.
—Dios, eso es bueno. Solo un poco más duro.
Ahora que su mente estaba en cosas eróticas, Harry no pudo evitar interpretar el tono en la voz de Louis en ese contexto. Mientras él seguía frotando, ahogaba una risa. Imaginaba que Louis tenía una saludable vida sexual, pero eso era una de las cosas de las que ellos no habían hablado en años, especialmente desde que sus gustos no engranaban. La vida social de Hary era un constante tema de rumores alrededor de la ciudad. Así que no era de sorprenderse que Louis pudiera estar familiarizado con lo que sucedía en la cama de su amigo. Harry había asumido que Louis era privado con respecto a sus amoríos. Nada más equivocado que eso.
Los ruidos que venían del otro hombre eran muy buenos para Harry; no es que él alguna vez hubiera oído a otro hombre durante el sexo, con la excepción de en una película. Él mantenía sus dedos en el cráneo de Louis, con una mano retiró el castaño cabello de David del cuello y empezó a darle masaje con sus fuertes dedos.
Los hombros de Louis se levantaron con el toque y el ronroneo. Entre la medicina y el ligero toque, él se sentía mejor de lo que había estado en horas. —Tienes manos jodidamente brillantes.
—Eso es lo que me han dicho — Harry siguió trabajando en el cuello de Louis.
Louis tomó una profunda respiración, relajándose ante las atenciones físicas y el silencio que los rodeaba. Mientras el masaje aliviaba más y más el dolor, su cuerpo comenzó a reaccionar de una manera diferente, su pene quedó atrapado entre su cuerpo y la cama. Louis se tensó y el dolor regresó ligeramente disuadiendo a su pene del interés; él sabía que era lo mejor. Un buen amigo era raro de encontrar. Y Harry era el mejor. Él y Harry habían sido amigos por años sin un tinte de atracción sexual. Ellos eran compañeros, y Louis estaba absolutamente seguro de que Harry era totalmente hetero. Ellos hablaban de política y deportes pero no de sexo, y su amigo tenía una gran reputación social que hablaba por sí misma. De cualquier manera, Louis no estaba interesado en perder a su mejor amigo por un rápido rollo en el proverbial pajar. —Creo que quizás debería de tomar una ducha mientras aun me sienta medio decente— murmuró dentro de las sábanas.
Las manos de Harry dejaron su masaje. —¿Qué quieres decir con ‘aun’?— preguntó frunciendo el ceño —. ¿Es que la migraña se va a poner peor?— preguntó preocupado, regresando al masaje suavemente. Le molestaba ver a su mejor amigo con tanto dolor.
—Sí, si desaparece en la primera hora, algunas veces el dolor se aleja, pero cuando es tan fuerte como el de hoy usualmente dura veinticuatro horas. El problema es que el medicamento debe tomarse cada seis horas y el alivio al dolor dura cuatro en el mejor de los casos.— Louis se decía que debía de moverse, pero los dedos de Harry se sentían tan bien que él no podía decirle que se detuviera.
—¿Qué tipo de mierda de medicamento es entonces?— Harry preguntó exasperado —. Bien. Ve a tomarte una ducha. ¿Seguro que encontraré algo de comer?— Lentamente soltó el cabello de su amigo, no queriendo accidentalmente causarle más dolor a Louis.
—Sí, debo de intentar comer. Revisa la despensa y ve si hay alguna sopa. Necesito que sea caldo, no crema.— Louis sonrió mientras salía de la cama —. Voy a dejar la puerta abierta. Entre el dolor de cabeza y los medicamentos estoy un poco inestable.
—Ten cuidado, Louis. No necesitamos un brazo quebrado o algo así— Harry dijo, viendo a Louis cuidadosamente llegar al cuarto de baño.
Una vez dentro del cuarto de baño verde pálido y arena, Louis se quitó sus bóxers y se sentó en la orilla de la tina mientras abría la regadera. Se puso de pie y entró en el chorro caliente, deteniéndose con las manos en la fría pared y dejando que el agua se deslizara por su cuerpo. Entre la medicina, las manos de Harry y la ducha, él realmente se sentía casi normal.
Cuando empezó a sentir un pequeño temblor, Louis finalmente cerró el agua y salió de la tina, tomó una toalla y se secó la parte superior de su cuerpo. Incluso su castaño vello del pecho y abdomen. Estaba asombrado de cuán sensible hacía la migraña las cosas.
Estaba secándose las piernas cuando el cuarto empezó a girar. —Joder — eso fue todo lo que logró decir y el mundo se volvió negro.
Harry estaba en la cocina preparando la sopa cuando oyó un fuerte golpe. Abrió los ojos más, dejó la cuchara y corrió por el pasillo, llegó a la recámara y al cuarto de baño. —¡Mierda!— maldijo, cuando vio a Louis inconsciente en el suelo. Se arrodilló y lo jaló en una postura más sentada, palpó la parte de atrás de su cabeza, aliviado de no encontrar sangre.
El corazón se aceleró de miedo. Harry maldijo y sostuvo a Louis contra su pecho. —¿Louis? ¿Louis?— Palmeó ligeramente la mejilla del otro hombre, inseguro de llamar al 911.
—¿Harry?— Louis murmuró.
Puntos luminosos brillaban como los fuegos artificiales del cuatro de julio en la oscuridad de los ojos cerrados de Louis. Su cabeza pulsaba de nuevo y su hombro. Podía oír la voz de Harry, pero se oía demasiado lejos. —¿Harry?
—¿Louis? Regresa, abre los ojos. ¿Por favor? Me asustaste como el infierno.
Louis habló y su voz estaba arenosa. —Estoy bien. La cabeza me duele como el infierno. Lo último que recuerdo es que estaba en la ducha.
—Sí, bueno, ahora estás en el piso. ¿Te duele algo más? ¿Te golpeaste la cabeza?— Harry veía la cara de ansiedad de Louis.
—No sé.— Louis abrió los ojos e hizo un gesto de dolor e inmediatamente los cerró de nuevo —. Mi hombro me duele también.
El rápido movimiento de los ojos de Louis no fue suficiente para que Harry juzgara su condición de una manera u otra. —¿Cuál hombro? ¿Sobre el que te apoyas?— Harry deslizó su mano sobre el hombro derecho de Louis presionando ligeramente.
—¡Ow! Joder, sí, es ese. Apaga las luces, así puedo arrastrarme de regreso a la cama.
—Te voy a ayudar esta vez. Mierda, Louis. Puedes estar quebrado o algo peor.— La voz de Harry era de preocupación mientras medio levantaba a Louis del suelo y lo ayudaba a ponerse de pie. Ser unos cinco centímetros más alto que el metro ochenta y tres de Louis ayudó. No fue hasta que pasó su brazo por la cintura de Louis y sus dedos tocaron la desnuda cadera que se dio cuenta que Louis seguía desnudo. «Bueno, eso no importa una vez que esté bajo las sábanas.»
Agradecido por la ayuda, Louis se apoyó en la fuerza de Harry, la fricción de la ropa de su amigo ponía de manifiesta la falta de la suya. —Joder — murmuró una silenciosa oración para que su relación pudiera sobrevivir ese día.
—¿Qué?— Harry preguntó con preocupada voz mientras cruzaban la alfombra verde oscuro hacia la cama —. ¿Estás bien? ¿Te duele algo más?
—No, solo que me acabo de dar cuenta que estoy tan desnudo como un cuervo. Deberías recibir sueldo por esta visita.— Sentándose en la cama, Louis señaló con la cabeza la cómoda —. ¿Quieres darme unos bóxers así no ofendo tu delicada sensibilidad?
Harry bufó. —Ahora sé que la droga hizo que perdieras la cabeza. ¿Yo? ¿Delicada sensibilidad? Tengo el mismo equipo. Creo que sobreviviré a la vergüenza.— Retiró los cobertores, esperando que Louis se acomodara debajo de ellos. Entonces tomó tres de las cuatro almohadas y se las acomodó a Louis.
Muy satisfecho con la segura posición de Louis, Harry dijo: —Voy a traer la sopa, si no está quemada para ahora. Solté la cuchara y corrí.
—Bien — Louis dijo débilmente mientras Harry dejaba la recámara.
La sopa estaba arruinada, así que Harry la tiró en el fregadero y comenzó a preparar una nueva. Solo le llevó unos diez minutos, y regresó con dos tazones y un paquete de galletas.
—Aquí, listo. Servicio de primera clase — dijo graciosamente, dejando el tazón en la mesa de noche cerca de Louis. Florence Nightingale no era un papel en el que él se hubiera metido, pero imagino que estaba haciendo un buen trabajo. «Aparte de haber dejado que se cayera en el piso del cuarto de baño.»
Rodeó la cama y se sentó en el otro lado, cuidadosamente abrió el paquete de galletas, y las dejó en la cama entre ellos.
—No puedo creer que tus amantes te dejen comer galletas en la cama — Louis exclamó, soplando el vapor de su sopa.
Harry se encogió de hombros, mordiendo la crujiente y salada galleta. —Usualmente es mi cama, así que yo hago lo que quiera, ¿correcto?— Le dio un trago a su sopa antes de cuidadosamente darle galletas a Louis —. Además, tú no eres mi amante, así que todo esto está de más. No es el punto tratar de impresionarte con mis modales si no voy a anotar.—
Él veía el desnudo cuerpo de Louis por la única razón de que estaba enfermo, la fácil camaradería que ellos tenían, podría desembocar en una relación más íntima. Harry casi escupe su sopa ante la imagen y se rió consigo mismo en silencio.
Louis sintió una momentánea pena que hizo a un lado el efecto de la migraña. Su inicial frívola respuesta murió en su lengua. —No….No soy tu amante y basado en tu acostumbrado tipo, no me gustaría que cambiaras— respondió, su voz un poco quebrada.
Viendo a Louis a su lado, Harry tomó otra galleta para él mismo. —Entonces, faltan tres horas para que tomes otra pastilla. Trata de dormir, yo te despierto cuando sea la hora — sugirió, pensando en los progresos que podía hacer en su reporte del impacto de los espectáculos de medio tiempo en los centros de arte.
Dejando el tazón medio lleno a un lado, Louis se deslizó bajo la cama y jaló la fría sabana. —Sí. Creo que trataré de hacer eso. Amante o no, no dejes migajas en mi cama, Styles.
Harry vio a Louis acomodarse y entonces regresó a su sopa sin comentarios. No pasó mucho tiempo antes de que Louis se quedara dormido. Unos minutos después dejó su tazón vacío a un lado, Harry veía a Louis, seguía preocupado por él.
Entonces tomó la laptop y regresó a su trabajo, sin conectarla.
Lo siguiente que supo, fue oír un suave ‘beep’ y despertó lentamente.
Frunció el ceño, tratando de imaginar por qué estaba tan incómodo. Él amaba su suave y cómoda cama. Harry abrió los ojos. Su enfoque estaba perdido porque sus lentes estaban a la mitad de su cara. Los acomodó y vio alrededor.
—Oh. Sí— murmuró. Estaba con Louis; en la cama de Louis de hecho. Se acomodó contra la brillante cabecera totalmente vestido y ahora totalmente arrugado. La lámpara en la mesa de al lado iluminaba ligeramente el cuarto, y el ‘beep’ era de su laptop que anunciaba que la batería estaba baja; la deslizó fuera de su pierna, dejándola en una posición más estable y vio hacia su paciente.
Louis estaba acurrucado a su lado y su castaña cabeza usaba el muslo de Harry como almohada. Harry pasó su brazo alrededor de él, su palma en la espalda de Louis, prácticamente sosteniéndolo en su lugar.
Harry estaba de algún modo sorprendido de cómo la cabeza de Louis en su regazo había hecho que su cuerpo se interesara, él lo descartó. Él siempre había sido una persona realmente táctil, y llevaba una activa vida sexual. Era genial para salir del estrés, y él lo disfrutaba. Había hecho las paces con su tendencia a sentirse tocado, hace mucho tiempo.
Aturdido, tomó una profunda respiración, tratando de despertar y bostezó ampliamente. Una mirada al reloj de la laptop le indicó que eran las primeras horas de la noche.
Debió de haberse quedado dormido mientras trabajaba en el reporte.
Incómodo por el ‘beep’, guardó el documento, cerró la laptop y cuidadosamente trató de dejarla en la mesita de noche, solo que no era posible sin mover la cama. Así que la dejó abajo, al lado de él y se giró hacia Louis.
Louis se veía más relajado, y con mejor color en su cara que antes. Muchas de las líneas de dolor habían desaparecido, dejando solo líneas alrededor de sus ojos y boca de todas sus sonrisas. Los rasgos de Louis usualmente se suavizaban mientras dormía, y sin pensarlo, Harry frotó la espalda de Louis suavemente. Bostezó de nuevo y pensó en regresar a dormir; decidió que no había razón para no permitirse dormir de nuevo. Después de acomodarse un poco, levemente pensó en lo cálido que Louis se sentía contra él.
Despertó, sacudió la cabeza y abrió los ojos. Louis gritó de dolor mientras intentaba sentarse, sus piernas se enredaron en los cobertores.
Tan pronto como Louis empezó a moverse. Harry dejó su pluma y libreta y trató de calmarlo.
—Louis. Hey, estás bien — él dijo, tratando de quitarle el cobertor que Louis tenia bien apretado alrededor de él. Harry sostuvo su laptop con una mano tratando de evitar que se deslizara por sus muslos.
«¿Harry?» «¿Qué jodidos hace Harry en mi oficina?»
Los dos hombres eran amigos desde hacía años, pero desde que trabajaban en periódicos rivales ellos nunca visitaban al otro en su trabajo.
—¿Harry? ¿Qué? ¿Por qué?
—Louis — Harry dijo pacientemente —. Vamos. Despierta.
Tomaste medicamento para el dolor.— Apretó suavemente el hombro de Louis.
Louis parpadeó, sus ojos enfocaron el ligeramente iluminado cuarto. Harry estaba medio inclinado sobre él.
—Oh, no le encantaría a ‘El Mirror’ tener una fotografía de esto: Corresponsales de periódicos en guerra encontrados…«En la cama juntos.» Puedo ver los encabezados. Katherine podría tener sus pantis en un serio giro— Louis dijo, las palabras salieron un poco confusas —. Joder, estoy sediento. Me siento como si tuviera la caravana de un circo viajando a través de mi boca.— Giró la cabeza a un lado, golpeando contra el fuerte muslo de Harry en lugar de en la almohada que usualmente estaba ahí, y gritó y maldijo cuando el dolor se disparó causándole una ola de mareo.
—Cuidado — Harrt advirtió ayudándole a estabilizarse —. Te ves como el infierno. Aguanta. Iré a traerte algo de beber.
Dejó la laptop en la cama y se movió cuidadosamente tratando de no mover la cama. —Quédate aquí — le ordenó señalándole con el dedo antes de dejar el cuarto.
—Como si tuviera elección — Louis murmuró, acomodándose suavemente contra las almohadas. Vio el reloj despertador arriba de la cómoda a los pies de la cama, e hizo cálculos mentalmente. Estaba en el pico más alto del efecto del medicamento y aun le dolía la cabeza; no tan malo, pero seguía fuerte. Esa no era buena señal. El medicamento funcionaba pero no por las siguientes seis horas antes de que pudiera tomar otra dosis. Y en las dos o dos horas y media siguientes los síntomas podrían regresar a vengarse. Necesitaba tratar de comer mientras pudiera mantener la comida en su estómago, y era realmente un tonto si pensaba que podría tener algo de equilibrio pero realmente quería tomar un baño.
Harry regresó a la recámara llevando un vaso del té helado que Louis mantenía en su refrigerador. —Prueba con esto — sugirió sentándose en el borde de la cama junto a él. En algún momento durante las pasadas dos horas Harry se había quitado la banda de su cabello y usaba lentes, algo que odiaba usar delante de la gente. Pero Louis ya los había visto antes.
Louis le sonrió, una medio divertida sonrisa. Harry sabía que era otro aguijón a su descuidada apariencia. Él tenía su propio estilo, elegante y pegado a la moda que se vivía en el momento. Era una de las cosas que habían hecho de su relación genuina: Harry mostraba su desaliñada apariencia alrededor de Louis.
Tomando el vaso, Louis tomó la mitad de un solo trago antes de que su estómago protestara. Lo dejó cuidadosamente en la mesita de noche. —Gracias.
Asintiendo, Harry apoyó una mano en el colchón. —Las pastillas no ayudaron, ¿huh?— Harry seguía su mirada mientras Louis veía su reflejo en el espejo frente a la cama.
Normalmente su castaño cabello se veía saludable. La cara de Louis se veía gris y sus ojos nublados. Ese era un gran cambio.
Louis cerró los ojos. —Oh, ayudan pero con un ataque tan malo solo disminuyen el dolor. No lo matan.
—¿Qué otra cosa ayuda?— Harry preguntó, viendo al suelo cuando su pie chocó con algo. Se acomodó distraídamente los lentes, y vio el lío alrededor de la mesita de noche. —Veo que volcaste el cajón buscando las pastillas — dijo, levantando la revista que había pisado.
—¿Oí que ayuda si frotas mis hombros y quizás mi cabeza?
Harry vio a Louis antes de girarse a ver la portada de la revista. Él frunció ligeramente el ceño. —Tienes dolor, Louis. Si eso puede ayudar, no hay problema.
Louis retiró las almohadas para acostarse en la cama tan plano como le fuera posible. —Gracias, Harry. En este punto incluso puedes tomarme el pelo. Te debo una.
Hary guardó la revista ‘American Journalism’ en el cajón deteniéndose lo suficiente para levantar el resto de las cosas también, levantó una ceja ante algunas de las cosas: plumas, libretas, claro condones y lubricante; no se sorprendió de eso; una bolsa medio vacía de dulces de menta, un encendedor y una cajetilla cigarrillos. Harry frunció el ceño. Pensaba que Louis lo había dejado. Guardó todo en el cajón antes de notar otra cosa debajo de la mitad de la cama, se inclinó un poco más para recuperarlo.
Los dedos de Harry rodearon algo frió y suave como plástico, pero cilíndrico y… Parpadeó cuando sacó el dildo de debajo de la cama. Sus ojos fijos en Louis, sorprendido, pero el otro hombre estaba acostado boca abajo con los ojos cerrados.
Harry estaba tentado; realmente, realmente tentado; a empezar a tomarle el pelo ahora. Lo vio de nuevo, era pesado y grueso, de unos veinte centímetros de largo, lo dejó en el cajón y luego lo cerró.
Se giró en la cama y se puso de rodillas, Harry deslizó sus dedos por el cabello de Louis y empezó a frotarlo suavemente con una mano antes de agregar la otra y darle un suave masaje. Entretanto pensaba en lo que había encontrado. Eso era fácil de responder, seguro. Eso era también más… interesante… de responder, conocía a Louis. Entonces, no. Probablemente no era momento de bromear, al menos no ahora. Harry mantuvo sus reflexiones en silencio para sí mismo y sonrió, divertido por la dirección de sus pensamientos.
Louis gimió haciendo un sonido de sublime placer en lugar de dolor por primera vez desde que el dolor de cabeza lo golpeó.
—Dios, eso es bueno. Solo un poco más duro.
Ahora que su mente estaba en cosas eróticas, Harry no pudo evitar interpretar el tono en la voz de Louis en ese contexto. Mientras él seguía frotando, ahogaba una risa. Imaginaba que Louis tenía una saludable vida sexual, pero eso era una de las cosas de las que ellos no habían hablado en años, especialmente desde que sus gustos no engranaban. La vida social de Hary era un constante tema de rumores alrededor de la ciudad. Así que no era de sorprenderse que Louis pudiera estar familiarizado con lo que sucedía en la cama de su amigo. Harry había asumido que Louis era privado con respecto a sus amoríos. Nada más equivocado que eso.
Los ruidos que venían del otro hombre eran muy buenos para Harry; no es que él alguna vez hubiera oído a otro hombre durante el sexo, con la excepción de en una película. Él mantenía sus dedos en el cráneo de Louis, con una mano retiró el castaño cabello de David del cuello y empezó a darle masaje con sus fuertes dedos.
Los hombros de Louis se levantaron con el toque y el ronroneo. Entre la medicina y el ligero toque, él se sentía mejor de lo que había estado en horas. —Tienes manos jodidamente brillantes.
—Eso es lo que me han dicho — Harry siguió trabajando en el cuello de Louis.
Louis tomó una profunda respiración, relajándose ante las atenciones físicas y el silencio que los rodeaba. Mientras el masaje aliviaba más y más el dolor, su cuerpo comenzó a reaccionar de una manera diferente, su pene quedó atrapado entre su cuerpo y la cama. Louis se tensó y el dolor regresó ligeramente disuadiendo a su pene del interés; él sabía que era lo mejor. Un buen amigo era raro de encontrar. Y Harry era el mejor. Él y Harry habían sido amigos por años sin un tinte de atracción sexual. Ellos eran compañeros, y Louis estaba absolutamente seguro de que Harry era totalmente hetero. Ellos hablaban de política y deportes pero no de sexo, y su amigo tenía una gran reputación social que hablaba por sí misma. De cualquier manera, Louis no estaba interesado en perder a su mejor amigo por un rápido rollo en el proverbial pajar. —Creo que quizás debería de tomar una ducha mientras aun me sienta medio decente— murmuró dentro de las sábanas.
Las manos de Harry dejaron su masaje. —¿Qué quieres decir con ‘aun’?— preguntó frunciendo el ceño —. ¿Es que la migraña se va a poner peor?— preguntó preocupado, regresando al masaje suavemente. Le molestaba ver a su mejor amigo con tanto dolor.
—Sí, si desaparece en la primera hora, algunas veces el dolor se aleja, pero cuando es tan fuerte como el de hoy usualmente dura veinticuatro horas. El problema es que el medicamento debe tomarse cada seis horas y el alivio al dolor dura cuatro en el mejor de los casos.— Louis se decía que debía de moverse, pero los dedos de Harry se sentían tan bien que él no podía decirle que se detuviera.
—¿Qué tipo de mierda de medicamento es entonces?— Harry preguntó exasperado —. Bien. Ve a tomarte una ducha. ¿Seguro que encontraré algo de comer?— Lentamente soltó el cabello de su amigo, no queriendo accidentalmente causarle más dolor a Louis.
—Sí, debo de intentar comer. Revisa la despensa y ve si hay alguna sopa. Necesito que sea caldo, no crema.— Louis sonrió mientras salía de la cama —. Voy a dejar la puerta abierta. Entre el dolor de cabeza y los medicamentos estoy un poco inestable.
—Ten cuidado, Louis. No necesitamos un brazo quebrado o algo así— Harry dijo, viendo a Louis cuidadosamente llegar al cuarto de baño.
Una vez dentro del cuarto de baño verde pálido y arena, Louis se quitó sus bóxers y se sentó en la orilla de la tina mientras abría la regadera. Se puso de pie y entró en el chorro caliente, deteniéndose con las manos en la fría pared y dejando que el agua se deslizara por su cuerpo. Entre la medicina, las manos de Harry y la ducha, él realmente se sentía casi normal.
Cuando empezó a sentir un pequeño temblor, Louis finalmente cerró el agua y salió de la tina, tomó una toalla y se secó la parte superior de su cuerpo. Incluso su castaño vello del pecho y abdomen. Estaba asombrado de cuán sensible hacía la migraña las cosas.
Estaba secándose las piernas cuando el cuarto empezó a girar. —Joder — eso fue todo lo que logró decir y el mundo se volvió negro.
Harry estaba en la cocina preparando la sopa cuando oyó un fuerte golpe. Abrió los ojos más, dejó la cuchara y corrió por el pasillo, llegó a la recámara y al cuarto de baño. —¡Mierda!— maldijo, cuando vio a Louis inconsciente en el suelo. Se arrodilló y lo jaló en una postura más sentada, palpó la parte de atrás de su cabeza, aliviado de no encontrar sangre.
El corazón se aceleró de miedo. Harry maldijo y sostuvo a Louis contra su pecho. —¿Louis? ¿Louis?— Palmeó ligeramente la mejilla del otro hombre, inseguro de llamar al 911.
—¿Harry?— Louis murmuró.
Puntos luminosos brillaban como los fuegos artificiales del cuatro de julio en la oscuridad de los ojos cerrados de Louis. Su cabeza pulsaba de nuevo y su hombro. Podía oír la voz de Harry, pero se oía demasiado lejos. —¿Harry?
—¿Louis? Regresa, abre los ojos. ¿Por favor? Me asustaste como el infierno.
Louis habló y su voz estaba arenosa. —Estoy bien. La cabeza me duele como el infierno. Lo último que recuerdo es que estaba en la ducha.
—Sí, bueno, ahora estás en el piso. ¿Te duele algo más? ¿Te golpeaste la cabeza?— Harry veía la cara de ansiedad de Louis.
—No sé.— Louis abrió los ojos e hizo un gesto de dolor e inmediatamente los cerró de nuevo —. Mi hombro me duele también.
El rápido movimiento de los ojos de Louis no fue suficiente para que Harry juzgara su condición de una manera u otra. —¿Cuál hombro? ¿Sobre el que te apoyas?— Harry deslizó su mano sobre el hombro derecho de Louis presionando ligeramente.
—¡Ow! Joder, sí, es ese. Apaga las luces, así puedo arrastrarme de regreso a la cama.
—Te voy a ayudar esta vez. Mierda, Louis. Puedes estar quebrado o algo peor.— La voz de Harry era de preocupación mientras medio levantaba a Louis del suelo y lo ayudaba a ponerse de pie. Ser unos cinco centímetros más alto que el metro ochenta y tres de Louis ayudó. No fue hasta que pasó su brazo por la cintura de Louis y sus dedos tocaron la desnuda cadera que se dio cuenta que Louis seguía desnudo. «Bueno, eso no importa una vez que esté bajo las sábanas.»
Agradecido por la ayuda, Louis se apoyó en la fuerza de Harry, la fricción de la ropa de su amigo ponía de manifiesta la falta de la suya. —Joder — murmuró una silenciosa oración para que su relación pudiera sobrevivir ese día.
—¿Qué?— Harry preguntó con preocupada voz mientras cruzaban la alfombra verde oscuro hacia la cama —. ¿Estás bien? ¿Te duele algo más?
—No, solo que me acabo de dar cuenta que estoy tan desnudo como un cuervo. Deberías recibir sueldo por esta visita.— Sentándose en la cama, Louis señaló con la cabeza la cómoda —. ¿Quieres darme unos bóxers así no ofendo tu delicada sensibilidad?
Harry bufó. —Ahora sé que la droga hizo que perdieras la cabeza. ¿Yo? ¿Delicada sensibilidad? Tengo el mismo equipo. Creo que sobreviviré a la vergüenza.— Retiró los cobertores, esperando que Louis se acomodara debajo de ellos. Entonces tomó tres de las cuatro almohadas y se las acomodó a Louis.
Muy satisfecho con la segura posición de Louis, Harry dijo: —Voy a traer la sopa, si no está quemada para ahora. Solté la cuchara y corrí.
—Bien — Louis dijo débilmente mientras Harry dejaba la recámara.
La sopa estaba arruinada, así que Harry la tiró en el fregadero y comenzó a preparar una nueva. Solo le llevó unos diez minutos, y regresó con dos tazones y un paquete de galletas.
—Aquí, listo. Servicio de primera clase — dijo graciosamente, dejando el tazón en la mesa de noche cerca de Louis. Florence Nightingale no era un papel en el que él se hubiera metido, pero imagino que estaba haciendo un buen trabajo. «Aparte de haber dejado que se cayera en el piso del cuarto de baño.»
Rodeó la cama y se sentó en el otro lado, cuidadosamente abrió el paquete de galletas, y las dejó en la cama entre ellos.
—No puedo creer que tus amantes te dejen comer galletas en la cama — Louis exclamó, soplando el vapor de su sopa.
Harry se encogió de hombros, mordiendo la crujiente y salada galleta. —Usualmente es mi cama, así que yo hago lo que quiera, ¿correcto?— Le dio un trago a su sopa antes de cuidadosamente darle galletas a Louis —. Además, tú no eres mi amante, así que todo esto está de más. No es el punto tratar de impresionarte con mis modales si no voy a anotar.—
Él veía el desnudo cuerpo de Louis por la única razón de que estaba enfermo, la fácil camaradería que ellos tenían, podría desembocar en una relación más íntima. Harry casi escupe su sopa ante la imagen y se rió consigo mismo en silencio.
Louis sintió una momentánea pena que hizo a un lado el efecto de la migraña. Su inicial frívola respuesta murió en su lengua. —No….No soy tu amante y basado en tu acostumbrado tipo, no me gustaría que cambiaras— respondió, su voz un poco quebrada.
Viendo a Louis a su lado, Harry tomó otra galleta para él mismo. —Entonces, faltan tres horas para que tomes otra pastilla. Trata de dormir, yo te despierto cuando sea la hora — sugirió, pensando en los progresos que podía hacer en su reporte del impacto de los espectáculos de medio tiempo en los centros de arte.
Dejando el tazón medio lleno a un lado, Louis se deslizó bajo la cama y jaló la fría sabana. —Sí. Creo que trataré de hacer eso. Amante o no, no dejes migajas en mi cama, Styles.
Harry vio a Louis acomodarse y entonces regresó a su sopa sin comentarios. No pasó mucho tiempo antes de que Louis se quedara dormido. Unos minutos después dejó su tazón vacío a un lado, Harry veía a Louis, seguía preocupado por él.
Entonces tomó la laptop y regresó a su trabajo, sin conectarla.
Lo siguiente que supo, fue oír un suave ‘beep’ y despertó lentamente.
Frunció el ceño, tratando de imaginar por qué estaba tan incómodo. Él amaba su suave y cómoda cama. Harry abrió los ojos. Su enfoque estaba perdido porque sus lentes estaban a la mitad de su cara. Los acomodó y vio alrededor.
—Oh. Sí— murmuró. Estaba con Louis; en la cama de Louis de hecho. Se acomodó contra la brillante cabecera totalmente vestido y ahora totalmente arrugado. La lámpara en la mesa de al lado iluminaba ligeramente el cuarto, y el ‘beep’ era de su laptop que anunciaba que la batería estaba baja; la deslizó fuera de su pierna, dejándola en una posición más estable y vio hacia su paciente.
Louis estaba acurrucado a su lado y su castaña cabeza usaba el muslo de Harry como almohada. Harry pasó su brazo alrededor de él, su palma en la espalda de Louis, prácticamente sosteniéndolo en su lugar.
Harry estaba de algún modo sorprendido de cómo la cabeza de Louis en su regazo había hecho que su cuerpo se interesara, él lo descartó. Él siempre había sido una persona realmente táctil, y llevaba una activa vida sexual. Era genial para salir del estrés, y él lo disfrutaba. Había hecho las paces con su tendencia a sentirse tocado, hace mucho tiempo.
Aturdido, tomó una profunda respiración, tratando de despertar y bostezó ampliamente. Una mirada al reloj de la laptop le indicó que eran las primeras horas de la noche.
Debió de haberse quedado dormido mientras trabajaba en el reporte.
Incómodo por el ‘beep’, guardó el documento, cerró la laptop y cuidadosamente trató de dejarla en la mesita de noche, solo que no era posible sin mover la cama. Así que la dejó abajo, al lado de él y se giró hacia Louis.
Louis se veía más relajado, y con mejor color en su cara que antes. Muchas de las líneas de dolor habían desaparecido, dejando solo líneas alrededor de sus ojos y boca de todas sus sonrisas. Los rasgos de Louis usualmente se suavizaban mientras dormía, y sin pensarlo, Harry frotó la espalda de Louis suavemente. Bostezó de nuevo y pensó en regresar a dormir; decidió que no había razón para no permitirse dormir de nuevo. Después de acomodarse un poco, levemente pensó en lo cálido que Louis se sentía contra él.
Última edición por lizethstylinson el Dom 19 Ene 2014, 3:01 pm, editado 1 vez
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Wassaap!!! ponre lucho esta bien mal, y ese harold perver e-e ahahhahhahah y ya estaba pensando en tirarse al lucho ñ.ñ e-e y que lindo lucho durmiendo en su muslo :3 me lo imagine todo cute :3 pobre lucho hasta se cayo en el baño, al menos se habia secado a tiempo, ojala se mejore, bueh byee cuidatee y siguela pronto :DD byee
pattyguzman
Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
omg JAJAJ encontro el dildo de Lou. ¿Ni lo sospechaba no? que raro que nunca hablaran de esas cosas, enterarse asi puede ser muy gracioso xD
Pobre Lou, esta arruinadisimo, entre la migraña y el golpe. Aunque sigue teniendo suerte de tener a Harry cuidandolo.
Seguila pronto por favor!
Adios ♥
Pobre Lou, esta arruinadisimo, entre la migraña y el golpe. Aunque sigue teniendo suerte de tener a Harry cuidandolo.
Seguila pronto por favor!
Adios ♥
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Que lastima que Louis se sintiera tan mal,me hubiera gustado ver a Harry molestarlo por lo del dildo xD ay son demasiado tiernos,durmiendo juntos y calentitos *-* Creo que Louis deberia ir al doctor o algo no puede dolerle tanto D: creo que se va a morir(? ok espero que no :c
ElectricBlue13
Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Seguilaaaaaaa
Harry y Louis tienen que usar ese dildo YA!
Harry y Louis tienen que usar ese dildo YA!
I'mLarryShipper
Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Me encanta*-*
sigue pronto, besos xx
sigue pronto, besos xx
bethlasforh0ran
Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Si, es lindo imaginárselos así.pattyguzman escribió:Wassaap!!! ponre lucho esta bien mal, y ese harold perver e-e ahahhahhahah y ya estaba pensando en tirarse al lucho ñ.ñ e-e y que lindo lucho durmiendo en su muslo :3 me lo imagine todo cute :3 pobre lucho hasta se cayo en el baño, al menos se habia secado a tiempo, ojala se mejore, bueh byee cuidatee y siguela pronto :DD byee
El probé de Louis se dios tremendo fregaso en el baño.
Lo siento por tardar un montón, la sigo:)
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Esa fue una linda forma de deducir que louis es gay.Debby1D escribió:omg JAJAJ encontro el dildo de Lou. ¿Ni lo sospechaba no? que raro que nunca hablaran de esas cosas, enterarse asi puede ser muy gracioso xD
Pobre Lou, esta arruinadisimo, entre la migraña y el golpe. Aunque sigue teniendo suerte de tener a Harry cuidandolo.
Seguila pronto por favor!
Adios ♥
Y si, esta fregadisimo el pobre.
pero bueno tiene a Harry cuidandolo.
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Hubiera sido genial!!ElectricBlue13 escribió:Que lastima que Louis se sintiera tan mal,me hubiera gustado ver a Harry molestarlo por lo del dildo xD ay son demasiado tiernos,durmiendo juntos y calentitos *-* Creo que Louis deberia ir al doctor o algo no puede dolerle tanto D: creo que se va a morir(? ok espero que no :c
Son lindos, son tiernos, son ellos:)
Ah, bien exagerada no?
hahaha, la sigo
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
La sigo!!I'mLarryShipper escribió:Seguilaaaaaaa
Harry y Louis tienen que usar ese dildo YA!
Esa seria una buena escena:)
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Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
La sigo;)bethlasforh0ran escribió:Me encanta*-*
sigue pronto, besos xx
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2
Louis despertó dentro de la calidez, confundido y medio adormilado a causa de las pastillas. Recordó despertar varias horas antes cuando el dolor regresó, Harry le había dado otra pastilla y apoyado mientras tomaba el agua. Afortunadamente la segunda dosis lo había noqueado más rápidamente.
Tomando un breve inventario de su cuerpo, descubrió que su hombro le dolía más que su cabeza. Él se movió a una posición más cómoda y presionó y…
Repentinamente alerta, Harry rozó su mejilla contra la suave tela, y algo firme que no era su almohada. Abrió los ojos cuidadosamente. «Mierda. La pierna de Harry.» Trataba de imaginar cómo salir graciosamente de la situación de estar en el regazo de su mejor amigo cuando vio que Harry lo veía.
—Hey — Harry saludó suavemente —. ¿Cómo te sientes?
—Ah, hey — Louis contestó, su voz seca y rasposa, otro de los efectos de la medicina —. Parece que te he usado como almohada.— Se empujó para levantarse lentamente.
Harry sonrió. —Está bien — él dijo, sin moverse del lugar —. Te ves mucho mejor.
—Lo estoy. Creo que incluso tengo hambre — Louis admitió con una sonrisa —. Seguro como el infierno que estoy harto de esta cama. Si puedo llegar a la cocina, ¿crees que puedes calentar algo de sopa?
—Claro, solo no vayas al baño sin supervisión — Harry agregó con naturalidad. Necesitaba el cable de su laptop de cualquier forma. Podría salir al carro por el cable eléctrico —. ¿Alguna otra cosa, su majestad?— bromeó saliendo de la cama y estirándose.
Louis se giró con una arrogante respuesta que se evaporó al ver a Harry. El largo cuerpo de su amigo parecía seguir por siempre, extendiéndose como estaba, sus anchos hombros y estrecha cadera. Los dos últimos botones de su camisa de vestir gris pálido estaban abiertos, revelando un triángulo de piel pálida dividida por escaso vello. Louis tragó saliva. Su boca estaba seca por una razón completamente diferente.
Harry bostezó mientras se estiraba y movía su cabeza de un lado al otro, gruñó cuando su cuello tronó audiblemente. Estiraba un brazo jalándolo con su otra mano por sobre su cabeza y cuello. —Dormir sentado apesta — murmuró antes de acomodar con la punta de sus pies los zapatos y ponerse uno y después el otro. Levantó la laptop y la dejó a los pies de la cama.
Mudo, Louis lo vio irse. Necesitaba sacar a Harry de aquí. No podía imaginar el haber atravesado las pasadas ocho horas sin él, pero la inusual proximidad estaba haciendo un obvio lío en su cabeza. Sacó las piernas fuera de la cama con un gesto de dolor mientras se sostenía el hombro, trató de no pensar en el dolor y cuidadosamente tomó un par de bóxers y metió una pierna a la vez. Sus piernas seguían débiles cuando salió para seguir a Harry.
Harry estaba lavando la olla que había dejado en la estufa y se giró al estante de las latas, buscando una o dos latas de sopa. Más fideo con pollo. Tomate, brócoli con queso, Carne con vegetales. «Yum.» Él saco la lata y se inclinó más para ver la selección en el estante inferior.
Louis entró en la cocina que estaba pintada de rojo vino con molduras de coronas blancas, el área de trabajo y los gabinetes cubrían tres paredes. Él se sentía listo para seguir adelante. —Harry.— Las palabras salían de su boca tartamudeando. «Harry tiene un culo absolutamente asombroso.»
Inclinado, un pie ligeramente levantado para el balance, su camiseta se estiraba sobre sus anchos hombros mientras él giraba el gabinete abajo del mostrador. Louis tendría que ser un santo heterosexual para resistir esa imagen, y él no lo era. Su ingle se tensó, y sintió a su pene ponerse duro. « Joder.»
—¿Hmmm?— Harry contesto antes de tomar otra lata de sopa, se acomodó su cabello detrás de su oreja —. ¿Quieres carne con vegetales o champiñón dorado?— pregunto, cerrando el gabinete giratorio de las latas.
Louis tragó el nudo de su garganta, inseguro de si estaba pensando en la comida o en el abrupto reconocimiento de la apariencia de Harry. La mano de Harry en su cabello atraía la atención de Louis al rizado y castaño cabello. Disfrutaba molestar a su amigo con eso, pero por primera vez se preguntaba cómo se sentiría. ¿Era suave o grueso? Él no lo recordaba de las veces que se lo había jalado mientras lo molestaba.
Deslizándose en una silla frente a la pequeña mesa bajo la ventana, Louis permitió que la mesa lo escondiera hasta la parte baja de su pecho.
—Eww…. Asqueroso. No hagas los champiñones. Esa lata debe de estar ahí desde que me visitó mi madre hace tres años. Ella la usa para hacer gravy. Carne con vegetales, por favor.— Harry asintió y se giró hacia la olla, y Louis vio su trasero de nuevo.
Louis suspiró. «Pensar en el trasero de Harry no es buena idea.» Trató de pensar en algo de qué hablar mientras se repetía a si mismo que Harry no era gay. —Entonces, ¿qué sucedió con la Annemarie de hace un par de semanas? ¿Sigue alrededor?— Louis preguntó.
Harry se giró a ver a Louis. —Eso no es serio — él dijo —. Ella no… quiero decir, no está pegada alrededor. Y no quiero que esté pegada — dijo con una impertinente sonrisa.
Louis se rió. —Una chica diferente cada semana. Play boy — bromeó.
Harry se encogió de hombros. —Nada mal con eso. Nunca prometí nada más.
Louis trató de pensar en la última vez que él había tenido sexo y tenía problemas para recordarlo. —Creo que me estoy volviendo viejo. Todas esas reuniones y lograr conocer a alguien es demasiado esfuerzo, y no soy mucho de las persona de sexo casual.
Harry dejó la cuchara al borde de la olla y tiró la lata vacía antes de girarse y darle a Louis una incrédula mirada. —¿Viejo? Louis, ¿qué edad tienes? ¿Cuarenta y dos? ¿Cuarenta y tres? Eso no está ni cerca de la vejez. Y no hay nada de malo en el sexo casual — agregó cruzando los brazos y apoyándose en el mostrador —. Mientras ambas personas lo acepten.
—No estoy en contra de eso, y estoy de acuerdo contigo, pero…bueno…— ¿Cómo decirle a su mejor amigo que él francamente estaba asustado de morir de SIDA? en los días antes del SIDA, Louis podía haberse considerado promiscuo, pero después de ver a más de un amigo deteriorarse y morir, él no podía permitirse correr el riesgo. Estaba limpio, pero eso era pura suerte. En la década pasada, él no había sido un monje, pero había usado condones religiosamente y encontrado que quería conocer más y más a sus amantes antes de dormir con ellos. Veía a Harry. ¿Cómo podía decirle?
Levantando una ceja cuando Louis se detuvo, Harry solo inclinó la cabeza y se giró de regreso a la sopa.
Louis frunció el ceño mientras estudiaba la espalda de Harry. Él estaba muy seguro de que Harry sabía que él era gay. Ellos se habían encontrado de vez en cuando en los eventos de la ciudad con sus respectivas citas, pero el sexo no era un tema del que ellos hablaran. Ahora Louis extrañamente se preguntaba por qué. Gay o hetero, eso era algo que los chicos usualmente abordaban, comparando experiencias y amantes y lo que les gustaba y lo que no les gustaba, ¿no es así? Así era cuando Louis se encontraba con el círculo de sus amigos, y él asumía que de la misma manera debería de suceder con Harry y sus otros amigos. Pero no sucedía así entre ellos dos.
Veía cómo Harrry revolvía la sopa lentamente. Louis sintió la falsedad del silencio que se formaba entre ellos. Se sentía diferente. Pero ahora ellos no hablaban específicamente de eso. Ahora él sentía como si estuviera escondiendo algo a su mejor amigo.
—Soy gay — Louis lo soltó antes de poderlo pensar de nuevo y detenerlo —. He visto a demasiados amigos convertirse en unos pálidos reflejos de los hombres que solían ser a causa del SIDA. Supongo que eso me volvió en extremo cauteloso.— Manteniendo los ojos en la espalda de Harry, se abrazó a sí mismo, esperando la reacción.
La mano de Harry detuvo el movimiento de la cuchara antes de regresar al movimiento. Louis podía imaginar lo que Harry pensaba. «¿Gay?» «¿Louis?» Ellos habían sido uno para el otro durante cinco años. Ahora Louis había llegado a este momento, solo porque estaba seguro que Harry lo sabía.
Sosteniendo el aliento, Louis se mordió la lengua. Él no iba a defender su estilo de vida ante nadie. Si Harry no podía tratar con él de la manera que era, estaría triste y probablemente enojado, pero no sería la primera vez que alguien lo juzgara.
Harry veía la olla e inclinó la cabeza a un lado antes de contestar. Esa había sido una gran declaración de parte de Louis, y Harry se alegraba de que confiara en su relación lo suficiente para compartirla. —Eso es inteligente, en mi opinión — dijo pensativamente —. No puedes ser demasiado cuidadoso en estos días.
Louis soltó el aire con un suspiro. —Gracias — dijo suavemente mientras se apoyaba en su silla. Ellos iban a estar bien. «Gracias Dios.» Debería de conocerlo, realmente.
Harry dejó la cuchara contra un lado, levantó la olla, mientras se enderezaba. Tomó dos tazones del estante en donde Louis guardaba su vajilla verde oliva con la otra mano y se giró a la mesa.
—Adelante — dijo tranquilamente sirviendo la sopa.
Comieron en silencio, Louis sentía algo que no había sentido en realmente mucho tiempo: se sentía completamente confortable.
Una vez que terminaron su tazón, Harry dejó la olla y los tazones para lavarlos. Recordando las tazas en la recámara, fue por ellas para lavar todo de una vez.
Louis lo vio salir de la cocina y entrar al pasillo. Suspiró y se levantó para ayudar con los platos. Se sentía débil y agotado, pero solo un poco mareado. Abrió el agua y tomó una de las ollas del fregadero, se movió al otro fregadero para tomar el jabón mientras la olla se llenaba de agua. —¡Ow! ¡Joder!— maldijo, cuando el dolor en su hombro que se corrió hacia su brazo lo hizo marearse. La olla cayó al fregadero con un fuerte ruido salpicando agua, y Louis se apoyó contra el mostrador.
Impactado por el alto y repentino ruido, Harry se apuró a llegar a la esquina con una taza en cada mano. —¿Louis? ¿Qué sucede?— Él dejó las tazas que había traído de la recámara en el mostrador sin siquiera notar que el frío caldo de pollo se había derramado a sus manos en sus prisas por ayudar.
Con la cabeza colgando hacia delante, sus ojos fuertemente cerrados, Louis tomó varias profundas respiraciones. —¡Joder, esto duele!— maldijo, trató de llegar a la silla con Harry junto a él, aparentemente preocupado acerca de dónde podía tocar al castal sin lastimarlo. —Iba a levantar la olla llena de agua y mi hombro….Mierda, temo que realmente me lo lastimé cuando caí. En el momento que quise usarlo, me duele, el tipo de dolor que causa-que-los-ojos-se-llenen-de lágrimas-y-te quita-el-aliento.
—Maldición. Temía que algo pudiera sucederte cuando insististe en la maldita ducha. Vamos. Ve a vestirte y te llevaré a emergencias — Harry insistió, presionando a Louis para ir a la recámara —. Puedes tenerlo quebrado o algo así.
Louis se puso de pie con su doloroso brazo sostenido con su otra mano. —Sabes, a cómo va este día, me asusta ir en carro. Nosotros nunca llegaremos en una pieza al hospital.— Él se rió irónicamente, fue el único que medio-bromeó. Con un débil suspiro, arrastró los pies hacia la recámara. Tomar unos jeans camiseta y tenis no sería problema, pero realmente entrar en ellos iba a probar ser una proeza de dolorosa ingeniería mecánica. Levantándose, se tragó su orgullo y le habló a Harry.
—Debería haber pensado en eso. Lo siento — Harry murmuró mientras entraba a la recámara. Tomó los jeans de Louis y se arrodilló, metió las piernas de Louis en ellos y los subió por sus muslos, cerró el botón y subió el cierre cuidadosamente antes de buscar la camiseta.
Mordiéndose el labio lo suficientemente fuerte para sangrar, Louis trató de controlar la reacción de su cuerpo a los inocentes toques de Harry. En cualquier lugar que los dedos de Harry lo rozaban, su piel se erizaba en respuesta. Cuando el dorso de su mano rozó su pezón mientras maniobraba con la camiseta sin lastimar su hombro, Louis jadeó apenas controlando un gemido.
Harry sonrió. —Lo siento, Louis — murmuró pensando que lo había jalado demasiado fuerte —. ¿Quieres pantuflas o tenis?— preguntó, viendo hacia abajo al piso del armario, y entonces se inclinó más para tomar los zapatos.
Louis realmente deseaba que Harry dejara de presentarle esa imagen de su trasero dentro de esos pantalones de vestir que se estiraban en sus muy musculosos y firmes muslos. Cerró los ojos y suspiró. —Sí, ese par negro de la esquina.
Louis descansó su mano en el hombro de Harry por balance mientras deslizaba sus pies en las sandalias. —Terminemos con esto.
….
—Seis horas. Seis jodidas horas. Algo bueno que mi vida no estuviera amenazada — Louis se quejaba, saliendo del carro de Harry, cuando finalmente llegaron frente a la casa de Louis.
Harry solo respondía con un —Mmm-hmmm — ni siquiera giró los ojos. Cuando él se quebró el brazo hace años, se quedó sentado en emergencias durante doce horas antes de que alguien lo atendiera —. Ya la tengo — dijo, tomando la bolsa de la farmacia y saliendo del carro antes de que Louis pudiera agacharse por ella —. No más agacharse para ti.
—¿Y exactamente cómo planeas que deje de hacer eso?— Louis bromeó, apoyándose en un lado del carro. Su brazo derecho y hombro vendados cerca de su cuerpo.
Mientras Harry le ponía llave a las puertas, Louis agregó —: Vivir tiende a involucrar algunas pequeñas agachadas.— Louis se rió con el doble significado de sus palabras, drogado por el medicamento que le habían dado en el hospital.
Sonriendo, Harry rodeó el frente del carro, sacudió un poco su cabeza. —Estás drogado, hombre. Vamos. Entraré contigo. Estarás en cama descansando algunos días.— Tomó el brazo bueno de Louis para asegurarse que subiera bien los escalones hacia la puerta trasera. Harry lo guió a través de la cocina, pasando por el gran comedor con su mesa redonda con cubierta de mármol, dieron la vuelta a la sala, y tomaron el pasillo hacia la recámara.
—Bueno, debo de decir que es refrescante que un hombre trate de meterme en la cama y no quiera que me agache.— Louis se rió, pateó las pantuflas se estiró en la cama suspirando —. Ahhh….Cansado….
Harry sonrió y colocó las piernas de Louis bajo las sábanas, jalando los cobertores sobre él. —Solo trata de no girar sobre tu hombro, ¿huh? No quiero que me despierte un chillido — él bromeó.
Louis murmuró algo ininteligible y se quedó dormido antes de que Harry dejara el cuarto. Con una pequeña sonrisa, Harry cerró la puerta y se dirigió a la sala haciendo una nota mental para llamar mañana al jefe de Louis y contarle lo que sucedía.
Se preguntaba en llamar a su jefe para trabajar medio día la siguiente semana; Harry tenía la computadora llena de pendientes. Él tenía que ir mañana; realmente hoy, dado que eran las tres de la mañana; a terminar su gran proyecto para el domingo.
Exhausto, Louis imaginó que podía lograr dormir algunas horas, así que apagó la luz, desabrochó el botón de su pantalón y bajó el cierre para estar más confortable y se acostó en el sofá a dormir.
La segunda vez que casi se cae del grueso sofá de piel, murmuró una maldición y se dirigió a la recámara. O lograba dormir o se le derretirían los sesos. Abrió la puerta y vio a Louis. Tenía una gran cama para él solo. Había mucho lugar para ambos. Demonios, Harry podría acostarse con los brazos y piernas estiradas y aun así no tocaría a Louis, era muy amplia. —¿Para qué diablos Louis necesitaba una cama tan grande?— murmuró mientras entraba en la recámara.
Se quitó su pantalón y camisa antes de meterse bajo las sábanas en bóxers de cadera baja negros y su camiseta blanca. Mientras se quedaba dormido, se le ocurrió preguntarse cuántos hombres habrían dormido en esa cama. Pero alejó el pensamiento antes de tener una opinión de eso.
Louis trató de girarse sobre su espalda y el dolor en su hombro lesionado lo despertó completamente. Gimió de dolor y maldijo en voz baja. El doctor había dicho que al menos necesitaba seis semanas para sanar, quizás ocho o nueve, con al menos una semana de reposo absoluto en cama. «Joder.» ¿Cómo iba a lograr eso? Al moverse un peso cortó la circulación de su pierna, golpeó contra algo sólido y caliente.
Vio sobre su hombro derecho, parpadeó para enfocar bien al ver un desordenado cabello rizado. Por un momento estaba totalmente desorientado. Oh. Correcto. Harry, estaba detrás de él, oía que dormía. Aparentemente se deslizó mientras dormía, y se había girado contra la espalda de Louis. «Bueno, al menos él se mantuvo lejos de mi hombro.»
Louis se decía a si mismo que se alejara, pero el sentir el peso dormido de Harry contra su espalda era muy confortable. Cerró los ojos y se quedó dormido.
Lo primero que Louis notó cuando despertó la siguiente vez era la ausencia de Harry. Él había despertado varias veces durante la noche, la cálida presencia de Harry le ayudaba a dormir de nuevo. Se empujó hasta quedar sentado, oía a Harry hablando en el siguiente cuarto pero no entendía las palabras. Bajando los pies al suelo, Louis se levantó lentamente, su mano izquierda agarrada al respaldo para mantener el equilibrio. Una vez que se sintió fuerte se dirigió hacia el olor del café y la voz de Harry deliberadamente baja.
—… Sí, seis a ocho semanas, quizás más. La oficina del doctor dijo que les enviarían la notificación de la incapacidad por fax. Seguro. Si, él tiene…un amigo que se queda con él. Ayudándolo en la casa y todo. Sí, se lo diré. Seguro.— Harry cerró el teléfono y levantó la vista desde donde estaba sentado ante la mesa de la cocina vistiendo sus bóxers y camiseta, y vio a Louis en el marco de la puerta—. Hey, hermoso. ¿Cómo te sientes?— preguntó con una cálida sonrisa.
Momentáneamente impactado por la sonrisa y la declaración, le tomó un momento entender toda la conversación de Harry. No era un riesgo asumir que Harry se refería a él, Louis se hacía más de una pregunta. —¿Estabas hablando con Lloyd?
—Sí. Él dijo que espera que te mejores, aunque aún puedes revisar los editoriales y escribir tu columna si estás levantado. Pero si él te ve en la oficina antes de las ocho semanas, va a hacer algo muy sucio e impublicable con tu cuerpo — Harry dijo con una sonrisa —. Siéntate, Louis. Se supone que ni siquiera deberías de levantarte de la cama.
Louis se estremeció con la idea de que Lloyd dijera algo como ‘impublicable’ —¡Sucio viejo! Es solo mi hombro. Si me quedo en la cama dos meses, eso será una locura.
—Se supone que estarás en la cama una semana y mantendrás tu hombro estabilizado. Es por eso que está envuelto como pavo de acción de gracias, tonto. Siéntate.— Harry se puso de pie y le sirvió a Louis una taza de café de gourmet, mezclado con crema y azúcar, la manera en que sabía que le gustaba. Girándose a la mesa vio la pálida cara de Louis—. ¿Quieres comer algo? Deberías tener algo de comida en tu estómago antes de tomarte las pastillas para el dolor.
—Me preguntaba si podía salir a la calle.— Louis reflexionó mientras se deslizaba en la silla —. Podría usar la nueva laptop.
Harry se rió. Riéndose le dio a Louis su taza en su mano buena, vio hacia el líquido café claro. Le dio un tentativo trago, y gimió en aprobación. Harry sabía la manera en la que a Louis le gustaba su café.
Mientras Harry abría el refrigerador y empezaba a sacar las cosas para preparar sándwiches, Louis recordó que tenía que ir al supermercado, o viviría de la insalubre comida a domicilio y los comentarios de Harry no tendrían fin. Levantó la vista cuando Harry sacaba un tarro con etiqueta roja y azul del refrigerador.
—Louis, ¿por qué tienes Miracle Whip5 en tu refrigerador si solo te gusta la mayonesa sin aditivos?— Harry preguntó mientras dejaba el tarro de condimentos y el paquete de queso en el mostrador —. ¿Y tomates? ¿No me digas que no te gustan los tomates en tus hamburguesas? ¿O eso es salsa de tomate?— Frunció el ceño mientras dejaba las rebanadas de carnes frías en el mostrador junto con el pan de grano.
Las preguntas de Harry dejaron a Louis en blanco, hasta que recordó la recepción a la que ambos habían acudido en el ‘Williston Hills Country Club’ después del torneo regional de polo, Harry trabajando como encargado de la sección social, Louis representando a la editorial de su periódico.
Tomando un pequeño camino bajo un gigantesco olmo, Louis se había quejado con Harry acerca de la ensalada de pollo hecha con Miracle Whip; un crimen del proveedor, pero sobre todo debido a la alta temperatura; y aparentemente Harry lo recordó.
—¿No se te olvida nada, Styles? — Louis dijo, sacudiendo la cabeza —. La mayonesa está en la puerta. La Miracle Whip es para…aw, diablos…un tipo que veo en ocasiones. Tú deberías de conocerlo, él es un imbécil cuando dice que solo come Miracle Whip. Y que le gustan los tomates, pero no en los sándwiches. Lo desliza al plato con sal, pimienta y vinagre.
Harry se encogió de hombros y tomó el tarro de Miracle Whip y despreocupadamente lo lanzó al bote de la basura antes de tomar la mayonesa y el tomate. Louis se rió mientras el tarro caía.
—Solo me molestas, supongo — Harry dijo —. Tú no te quejas acerca de las cosas, entonces las recuerdo— él dijo, distraídamente mientras cortaba el tomate en la tabla.
Louis sonrió. —Gracias. Yo he tenido que evitar lanzarte en la noche. Hubiera sido demasiado fácil.
Ambas cejas de Harry se levantaron mientras hacía los sándwiches. —Eso no se oye bien, haberme lanzado fuera — observó —. Pero sí puedo ayudar.
—Sí, creo que puedes. ¿Te gustaría tomar el puesto de valet, cocinero y chofer? Creo que puedo afrontarlo.
—No sé…— La voz de Harry se detuvo dudando —. Tienes suficiente para mantener mi alto estilo de vida—dijo, guiñando un ojo mientras sacaba los platos del gabinete.
Louis se rió disimuladamente. Harry vivía en un estudio departamento de dos cuartos. En un elegante y alto edificio, pero nada de lo que Louis pudiera considerar ‘clase–alta’.
—Entonces, ¿qué vamos a comer?— Louis preguntó tomando las servilletas y cubiertos y colocándolos en la mesa junto con los platos.
—Pavo con queso suizo — Harry dijo, sacando una botella de vinagre del gabinete. Se movió al otro lado de la mesa dejando el plato de tomate, la sal y pimienta dentro del alcance de Louis —. ¿De tomar?— preguntó abriendo el refrigerador.
A Louis le golpeó repentinamente cuán cómodo se encontraba. Claro, ellos habían pasado juntos algunos sábados, generalmente asando carne o hamburguesas en la terraza de Louis y hablando de películas o algo así, así que él suponía que esto no era un gran cambio.
Louis recordó la pregunta de Harry. —Lo que realmente quiero beber, es cerveza, pero probablemente no sea buena idea con las pastillas para el dolor. Pepsi.— Sorpresivamente hambriento, Louis empezó a comer, llevaba tres cuartos de su sándwich, antes de que se diera cuenta. Vio a Harry que le servía tomates en su plato, ahora que tenía espacio —. Entonces, ¿cuándo necesitaras irte? Ese duro jefe tuyo probablemente vea esto como fraternizar con el enemigo.— George Hardin, el editor ejecutivo del periódico en el que trabajaba Harry, ‘El Sun-Herald’, era el jefe de Harry y era conocido por apoyar el asesinato, era competitivo con el periódico de Louis, ‘El Mirror’, y por natural asociación de su editor ejecutivo, Lloyd Morton, jefe de Louis, quien agradecía en sus oraciones que Lloyd fuera considerablemente calmado.
Harry levantó la vista de su sándwich esperando contestar hasta terminar de masticar. —No hay razón para decirle a quién ayudo— dijo encogiéndose de hombros —. A menos que tengas a alguien a quien llamar, estaré por aquí.
—Tengo un amigo o dos además de ti, Styles. Puedo hablar con los chicos para que se roten en revisarme — Louis reflexionó, silenciosamente reconociendo que la mayoría de sus amigos no eran del tipo cuidador. Aunque él estaba algo sorprendido de que Harry tuviera habilidades naturales de cuidador…e inclinación.
—Sí, eso suena prometedor. Tú realmente necesitas estar en la cama, Louis — Harry dijo, con preocupación marcada en su frente.—. Si mueves ese hombro aunque sea un poco, se va a salir de su ligamento y podrás requerir cirugía para recolocarlo. Creo que me quedaré por aquí.
—Tenemos un trato — Louis confirmó —. Regreso a la cama. Me das una de mis pastillas del dolor y estaré noqueado por horas. Tú ve a reportarte con tu editor y antes de regresar vas por algunas películas y comida china para cenar.
—Me parece bien. Ahora termina tu comida.— Harry sonrió y señaló al plato con los tomates antes de levantarse de su silla y abrir una de las botellas de medicamentos. Así era más fácil mantener a Louis en la cama durante algunas horas —. ¿Quieres res o cerdo?— le preguntó a Louis sabiendo que eran de sus favoritos —. Traeré también vegetales al vapor.
—¿Por qué no traes ambos y compartimos?— Louis sugirió, conocía bien el hábito de Harry de echarle la mano a la comida de su plato. Terminando su sándwich y tomates, tomó las pastillas con lo último de su soda. Se movía obviamente deteniéndose. Él quería pedir algo.
Harry llevó los platos al fregadero y los apiló para lavarlos después. Cuando se giró, vio a Louis esperando. —¿Necesitas algo?— Harry preguntó preocupado. Louis no parecía verse del todo bien, pero se veía mejor de lo que había estado en horas. Harry inclinó la cabeza a un lado, su cabello se deslizó de sus hombros sobre la camiseta con la que había dormido.
—Puedes…. Esto… puedes… erm.— Louis se congelaba —. ¿Puedes ayudarme a bajar mis jeans?— lo soltó. El botón estaba muy duro y era casi imposible de abrir con una sola mano.
Riéndose, Harry colocó sus manos en sus caderas. —¿Sabes? Nunca hubiera imaginado que fueras un tipo tan fácil — bromeó —. ¿Qué tipo de línea es esa?— preguntó desabrochándole el botón —. No puedo imaginar que los tipos sean tan fáciles — dijo mientras bajaba el cierre.
Louis veía los largos dedos de Harry desabotonar sus jeans. Su respiración atorada en su garganta, haciendo que la cabeza le diera vueltas, y podía sentir su pene a escasos centímetros de los dedos de Harry empezar a hincharse. «Joder.» Forzando al aire de sus pulmones a salir, vio con culpa la cara de Harry. Su amigo estaba sonriendo, relajado, bromeando.
Harry no tenía idea del efecto que tenía en él. «Gracias Dios.»
—Sí, bueno, entonces no conoces a los hombres tan bien. Somos una pandilla de fáciles cuando de bajarse los pantalones se trata.
Harry se rió y deslizó sus dedos dentro de los ojales del pantalón de Louis, jalándolo suavemente lo movió hacia la recámara.
—Bueno, supongo que debería de saberlo, ya que me incluye a mí. Pero sigo manteniendo que debería decidir expandir mis horizontes.
Algo se agitó en el estómago de Louis. Las bromas de Harry de ser bi-curioso6, no ayudaban en nada a calmar su libido. Esperaba que las pastillas funcionaran pronto y lo noquearan.
Después de seguir a Harry obedientemente por el pasillo, Louis empujó los jeans al suelo, cruzó la recámara y cayó inmediatamente en la cama. No abrió la boca por miedo a que su cerebro pudiera decir algo de lo que no pudiera retractarse.
Acomodando las sábanas y los cobertores, Harry se sentó en la orilla de la cama al lado de Louis y acomodó cuidadosamente una almohada bajo el hombro lesionado de Harry. —Quédate aquí — murmuró, acomodando mejor la almohada antes de ver a Louis —. ¿Crees que estarás bien? Me tengo que ir por un momento.
Louis sintió la calidez del cuerpo de Harry acercarse y se resistió a la urgencia de acercarlo más. —Estaré bien, Ve. Antes de que Hardin te despida y tengas que mudarte aquí cuando pierdas ese departamento de alta-clase.
Harry se rió. —Bien. Me voy. Tienes mi celular.— Apagó la lámpara, y caminó al cuarto de baño, encendió la luz y dejó la puerta entreabierta, y entonces suspiró suavemente. Al menos Louis iba a estar bien. Verlo adolorido realmente molestaba a Harry. Sonrió cariñosamente al dejar a Louis dormido.
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Hola, hola.
Lo siento, lo siento, soy asquerosamente floja, por eso no actualizaba. Y cuando llegue a hacer algo, el maldito no se aguardo y me frustre mande todo a la mierda.
Bueno, prometo actualizar mas seguido!
Espero que les guste el capitulo:)
Y muchas gracias por leerla!
Bye!:)
Tomando un breve inventario de su cuerpo, descubrió que su hombro le dolía más que su cabeza. Él se movió a una posición más cómoda y presionó y…
Repentinamente alerta, Harry rozó su mejilla contra la suave tela, y algo firme que no era su almohada. Abrió los ojos cuidadosamente. «Mierda. La pierna de Harry.» Trataba de imaginar cómo salir graciosamente de la situación de estar en el regazo de su mejor amigo cuando vio que Harry lo veía.
—Hey — Harry saludó suavemente —. ¿Cómo te sientes?
—Ah, hey — Louis contestó, su voz seca y rasposa, otro de los efectos de la medicina —. Parece que te he usado como almohada.— Se empujó para levantarse lentamente.
Harry sonrió. —Está bien — él dijo, sin moverse del lugar —. Te ves mucho mejor.
—Lo estoy. Creo que incluso tengo hambre — Louis admitió con una sonrisa —. Seguro como el infierno que estoy harto de esta cama. Si puedo llegar a la cocina, ¿crees que puedes calentar algo de sopa?
—Claro, solo no vayas al baño sin supervisión — Harry agregó con naturalidad. Necesitaba el cable de su laptop de cualquier forma. Podría salir al carro por el cable eléctrico —. ¿Alguna otra cosa, su majestad?— bromeó saliendo de la cama y estirándose.
Louis se giró con una arrogante respuesta que se evaporó al ver a Harry. El largo cuerpo de su amigo parecía seguir por siempre, extendiéndose como estaba, sus anchos hombros y estrecha cadera. Los dos últimos botones de su camisa de vestir gris pálido estaban abiertos, revelando un triángulo de piel pálida dividida por escaso vello. Louis tragó saliva. Su boca estaba seca por una razón completamente diferente.
Harry bostezó mientras se estiraba y movía su cabeza de un lado al otro, gruñó cuando su cuello tronó audiblemente. Estiraba un brazo jalándolo con su otra mano por sobre su cabeza y cuello. —Dormir sentado apesta — murmuró antes de acomodar con la punta de sus pies los zapatos y ponerse uno y después el otro. Levantó la laptop y la dejó a los pies de la cama.
Mudo, Louis lo vio irse. Necesitaba sacar a Harry de aquí. No podía imaginar el haber atravesado las pasadas ocho horas sin él, pero la inusual proximidad estaba haciendo un obvio lío en su cabeza. Sacó las piernas fuera de la cama con un gesto de dolor mientras se sostenía el hombro, trató de no pensar en el dolor y cuidadosamente tomó un par de bóxers y metió una pierna a la vez. Sus piernas seguían débiles cuando salió para seguir a Harry.
Harry estaba lavando la olla que había dejado en la estufa y se giró al estante de las latas, buscando una o dos latas de sopa. Más fideo con pollo. Tomate, brócoli con queso, Carne con vegetales. «Yum.» Él saco la lata y se inclinó más para ver la selección en el estante inferior.
Louis entró en la cocina que estaba pintada de rojo vino con molduras de coronas blancas, el área de trabajo y los gabinetes cubrían tres paredes. Él se sentía listo para seguir adelante. —Harry.— Las palabras salían de su boca tartamudeando. «Harry tiene un culo absolutamente asombroso.»
Inclinado, un pie ligeramente levantado para el balance, su camiseta se estiraba sobre sus anchos hombros mientras él giraba el gabinete abajo del mostrador. Louis tendría que ser un santo heterosexual para resistir esa imagen, y él no lo era. Su ingle se tensó, y sintió a su pene ponerse duro. « Joder.»
—¿Hmmm?— Harry contesto antes de tomar otra lata de sopa, se acomodó su cabello detrás de su oreja —. ¿Quieres carne con vegetales o champiñón dorado?— pregunto, cerrando el gabinete giratorio de las latas.
Louis tragó el nudo de su garganta, inseguro de si estaba pensando en la comida o en el abrupto reconocimiento de la apariencia de Harry. La mano de Harry en su cabello atraía la atención de Louis al rizado y castaño cabello. Disfrutaba molestar a su amigo con eso, pero por primera vez se preguntaba cómo se sentiría. ¿Era suave o grueso? Él no lo recordaba de las veces que se lo había jalado mientras lo molestaba.
Deslizándose en una silla frente a la pequeña mesa bajo la ventana, Louis permitió que la mesa lo escondiera hasta la parte baja de su pecho.
—Eww…. Asqueroso. No hagas los champiñones. Esa lata debe de estar ahí desde que me visitó mi madre hace tres años. Ella la usa para hacer gravy. Carne con vegetales, por favor.— Harry asintió y se giró hacia la olla, y Louis vio su trasero de nuevo.
Louis suspiró. «Pensar en el trasero de Harry no es buena idea.» Trató de pensar en algo de qué hablar mientras se repetía a si mismo que Harry no era gay. —Entonces, ¿qué sucedió con la Annemarie de hace un par de semanas? ¿Sigue alrededor?— Louis preguntó.
Harry se giró a ver a Louis. —Eso no es serio — él dijo —. Ella no… quiero decir, no está pegada alrededor. Y no quiero que esté pegada — dijo con una impertinente sonrisa.
Louis se rió. —Una chica diferente cada semana. Play boy — bromeó.
Harry se encogió de hombros. —Nada mal con eso. Nunca prometí nada más.
Louis trató de pensar en la última vez que él había tenido sexo y tenía problemas para recordarlo. —Creo que me estoy volviendo viejo. Todas esas reuniones y lograr conocer a alguien es demasiado esfuerzo, y no soy mucho de las persona de sexo casual.
Harry dejó la cuchara al borde de la olla y tiró la lata vacía antes de girarse y darle a Louis una incrédula mirada. —¿Viejo? Louis, ¿qué edad tienes? ¿Cuarenta y dos? ¿Cuarenta y tres? Eso no está ni cerca de la vejez. Y no hay nada de malo en el sexo casual — agregó cruzando los brazos y apoyándose en el mostrador —. Mientras ambas personas lo acepten.
—No estoy en contra de eso, y estoy de acuerdo contigo, pero…bueno…— ¿Cómo decirle a su mejor amigo que él francamente estaba asustado de morir de SIDA? en los días antes del SIDA, Louis podía haberse considerado promiscuo, pero después de ver a más de un amigo deteriorarse y morir, él no podía permitirse correr el riesgo. Estaba limpio, pero eso era pura suerte. En la década pasada, él no había sido un monje, pero había usado condones religiosamente y encontrado que quería conocer más y más a sus amantes antes de dormir con ellos. Veía a Harry. ¿Cómo podía decirle?
Levantando una ceja cuando Louis se detuvo, Harry solo inclinó la cabeza y se giró de regreso a la sopa.
Louis frunció el ceño mientras estudiaba la espalda de Harry. Él estaba muy seguro de que Harry sabía que él era gay. Ellos se habían encontrado de vez en cuando en los eventos de la ciudad con sus respectivas citas, pero el sexo no era un tema del que ellos hablaran. Ahora Louis extrañamente se preguntaba por qué. Gay o hetero, eso era algo que los chicos usualmente abordaban, comparando experiencias y amantes y lo que les gustaba y lo que no les gustaba, ¿no es así? Así era cuando Louis se encontraba con el círculo de sus amigos, y él asumía que de la misma manera debería de suceder con Harry y sus otros amigos. Pero no sucedía así entre ellos dos.
Veía cómo Harrry revolvía la sopa lentamente. Louis sintió la falsedad del silencio que se formaba entre ellos. Se sentía diferente. Pero ahora ellos no hablaban específicamente de eso. Ahora él sentía como si estuviera escondiendo algo a su mejor amigo.
—Soy gay — Louis lo soltó antes de poderlo pensar de nuevo y detenerlo —. He visto a demasiados amigos convertirse en unos pálidos reflejos de los hombres que solían ser a causa del SIDA. Supongo que eso me volvió en extremo cauteloso.— Manteniendo los ojos en la espalda de Harry, se abrazó a sí mismo, esperando la reacción.
La mano de Harry detuvo el movimiento de la cuchara antes de regresar al movimiento. Louis podía imaginar lo que Harry pensaba. «¿Gay?» «¿Louis?» Ellos habían sido uno para el otro durante cinco años. Ahora Louis había llegado a este momento, solo porque estaba seguro que Harry lo sabía.
Sosteniendo el aliento, Louis se mordió la lengua. Él no iba a defender su estilo de vida ante nadie. Si Harry no podía tratar con él de la manera que era, estaría triste y probablemente enojado, pero no sería la primera vez que alguien lo juzgara.
Harry veía la olla e inclinó la cabeza a un lado antes de contestar. Esa había sido una gran declaración de parte de Louis, y Harry se alegraba de que confiara en su relación lo suficiente para compartirla. —Eso es inteligente, en mi opinión — dijo pensativamente —. No puedes ser demasiado cuidadoso en estos días.
Louis soltó el aire con un suspiro. —Gracias — dijo suavemente mientras se apoyaba en su silla. Ellos iban a estar bien. «Gracias Dios.» Debería de conocerlo, realmente.
Harry dejó la cuchara contra un lado, levantó la olla, mientras se enderezaba. Tomó dos tazones del estante en donde Louis guardaba su vajilla verde oliva con la otra mano y se giró a la mesa.
—Adelante — dijo tranquilamente sirviendo la sopa.
Comieron en silencio, Louis sentía algo que no había sentido en realmente mucho tiempo: se sentía completamente confortable.
Una vez que terminaron su tazón, Harry dejó la olla y los tazones para lavarlos. Recordando las tazas en la recámara, fue por ellas para lavar todo de una vez.
Louis lo vio salir de la cocina y entrar al pasillo. Suspiró y se levantó para ayudar con los platos. Se sentía débil y agotado, pero solo un poco mareado. Abrió el agua y tomó una de las ollas del fregadero, se movió al otro fregadero para tomar el jabón mientras la olla se llenaba de agua. —¡Ow! ¡Joder!— maldijo, cuando el dolor en su hombro que se corrió hacia su brazo lo hizo marearse. La olla cayó al fregadero con un fuerte ruido salpicando agua, y Louis se apoyó contra el mostrador.
Impactado por el alto y repentino ruido, Harry se apuró a llegar a la esquina con una taza en cada mano. —¿Louis? ¿Qué sucede?— Él dejó las tazas que había traído de la recámara en el mostrador sin siquiera notar que el frío caldo de pollo se había derramado a sus manos en sus prisas por ayudar.
Con la cabeza colgando hacia delante, sus ojos fuertemente cerrados, Louis tomó varias profundas respiraciones. —¡Joder, esto duele!— maldijo, trató de llegar a la silla con Harry junto a él, aparentemente preocupado acerca de dónde podía tocar al castal sin lastimarlo. —Iba a levantar la olla llena de agua y mi hombro….Mierda, temo que realmente me lo lastimé cuando caí. En el momento que quise usarlo, me duele, el tipo de dolor que causa-que-los-ojos-se-llenen-de lágrimas-y-te quita-el-aliento.
—Maldición. Temía que algo pudiera sucederte cuando insististe en la maldita ducha. Vamos. Ve a vestirte y te llevaré a emergencias — Harry insistió, presionando a Louis para ir a la recámara —. Puedes tenerlo quebrado o algo así.
Louis se puso de pie con su doloroso brazo sostenido con su otra mano. —Sabes, a cómo va este día, me asusta ir en carro. Nosotros nunca llegaremos en una pieza al hospital.— Él se rió irónicamente, fue el único que medio-bromeó. Con un débil suspiro, arrastró los pies hacia la recámara. Tomar unos jeans camiseta y tenis no sería problema, pero realmente entrar en ellos iba a probar ser una proeza de dolorosa ingeniería mecánica. Levantándose, se tragó su orgullo y le habló a Harry.
—Debería haber pensado en eso. Lo siento — Harry murmuró mientras entraba a la recámara. Tomó los jeans de Louis y se arrodilló, metió las piernas de Louis en ellos y los subió por sus muslos, cerró el botón y subió el cierre cuidadosamente antes de buscar la camiseta.
Mordiéndose el labio lo suficientemente fuerte para sangrar, Louis trató de controlar la reacción de su cuerpo a los inocentes toques de Harry. En cualquier lugar que los dedos de Harry lo rozaban, su piel se erizaba en respuesta. Cuando el dorso de su mano rozó su pezón mientras maniobraba con la camiseta sin lastimar su hombro, Louis jadeó apenas controlando un gemido.
Harry sonrió. —Lo siento, Louis — murmuró pensando que lo había jalado demasiado fuerte —. ¿Quieres pantuflas o tenis?— preguntó, viendo hacia abajo al piso del armario, y entonces se inclinó más para tomar los zapatos.
Louis realmente deseaba que Harry dejara de presentarle esa imagen de su trasero dentro de esos pantalones de vestir que se estiraban en sus muy musculosos y firmes muslos. Cerró los ojos y suspiró. —Sí, ese par negro de la esquina.
Louis descansó su mano en el hombro de Harry por balance mientras deslizaba sus pies en las sandalias. —Terminemos con esto.
….
—Seis horas. Seis jodidas horas. Algo bueno que mi vida no estuviera amenazada — Louis se quejaba, saliendo del carro de Harry, cuando finalmente llegaron frente a la casa de Louis.
Harry solo respondía con un —Mmm-hmmm — ni siquiera giró los ojos. Cuando él se quebró el brazo hace años, se quedó sentado en emergencias durante doce horas antes de que alguien lo atendiera —. Ya la tengo — dijo, tomando la bolsa de la farmacia y saliendo del carro antes de que Louis pudiera agacharse por ella —. No más agacharse para ti.
—¿Y exactamente cómo planeas que deje de hacer eso?— Louis bromeó, apoyándose en un lado del carro. Su brazo derecho y hombro vendados cerca de su cuerpo.
Mientras Harry le ponía llave a las puertas, Louis agregó —: Vivir tiende a involucrar algunas pequeñas agachadas.— Louis se rió con el doble significado de sus palabras, drogado por el medicamento que le habían dado en el hospital.
Sonriendo, Harry rodeó el frente del carro, sacudió un poco su cabeza. —Estás drogado, hombre. Vamos. Entraré contigo. Estarás en cama descansando algunos días.— Tomó el brazo bueno de Louis para asegurarse que subiera bien los escalones hacia la puerta trasera. Harry lo guió a través de la cocina, pasando por el gran comedor con su mesa redonda con cubierta de mármol, dieron la vuelta a la sala, y tomaron el pasillo hacia la recámara.
—Bueno, debo de decir que es refrescante que un hombre trate de meterme en la cama y no quiera que me agache.— Louis se rió, pateó las pantuflas se estiró en la cama suspirando —. Ahhh….Cansado….
Harry sonrió y colocó las piernas de Louis bajo las sábanas, jalando los cobertores sobre él. —Solo trata de no girar sobre tu hombro, ¿huh? No quiero que me despierte un chillido — él bromeó.
Louis murmuró algo ininteligible y se quedó dormido antes de que Harry dejara el cuarto. Con una pequeña sonrisa, Harry cerró la puerta y se dirigió a la sala haciendo una nota mental para llamar mañana al jefe de Louis y contarle lo que sucedía.
Se preguntaba en llamar a su jefe para trabajar medio día la siguiente semana; Harry tenía la computadora llena de pendientes. Él tenía que ir mañana; realmente hoy, dado que eran las tres de la mañana; a terminar su gran proyecto para el domingo.
Exhausto, Louis imaginó que podía lograr dormir algunas horas, así que apagó la luz, desabrochó el botón de su pantalón y bajó el cierre para estar más confortable y se acostó en el sofá a dormir.
La segunda vez que casi se cae del grueso sofá de piel, murmuró una maldición y se dirigió a la recámara. O lograba dormir o se le derretirían los sesos. Abrió la puerta y vio a Louis. Tenía una gran cama para él solo. Había mucho lugar para ambos. Demonios, Harry podría acostarse con los brazos y piernas estiradas y aun así no tocaría a Louis, era muy amplia. —¿Para qué diablos Louis necesitaba una cama tan grande?— murmuró mientras entraba en la recámara.
Se quitó su pantalón y camisa antes de meterse bajo las sábanas en bóxers de cadera baja negros y su camiseta blanca. Mientras se quedaba dormido, se le ocurrió preguntarse cuántos hombres habrían dormido en esa cama. Pero alejó el pensamiento antes de tener una opinión de eso.
Louis trató de girarse sobre su espalda y el dolor en su hombro lesionado lo despertó completamente. Gimió de dolor y maldijo en voz baja. El doctor había dicho que al menos necesitaba seis semanas para sanar, quizás ocho o nueve, con al menos una semana de reposo absoluto en cama. «Joder.» ¿Cómo iba a lograr eso? Al moverse un peso cortó la circulación de su pierna, golpeó contra algo sólido y caliente.
Vio sobre su hombro derecho, parpadeó para enfocar bien al ver un desordenado cabello rizado. Por un momento estaba totalmente desorientado. Oh. Correcto. Harry, estaba detrás de él, oía que dormía. Aparentemente se deslizó mientras dormía, y se había girado contra la espalda de Louis. «Bueno, al menos él se mantuvo lejos de mi hombro.»
Louis se decía a si mismo que se alejara, pero el sentir el peso dormido de Harry contra su espalda era muy confortable. Cerró los ojos y se quedó dormido.
Lo primero que Louis notó cuando despertó la siguiente vez era la ausencia de Harry. Él había despertado varias veces durante la noche, la cálida presencia de Harry le ayudaba a dormir de nuevo. Se empujó hasta quedar sentado, oía a Harry hablando en el siguiente cuarto pero no entendía las palabras. Bajando los pies al suelo, Louis se levantó lentamente, su mano izquierda agarrada al respaldo para mantener el equilibrio. Una vez que se sintió fuerte se dirigió hacia el olor del café y la voz de Harry deliberadamente baja.
—… Sí, seis a ocho semanas, quizás más. La oficina del doctor dijo que les enviarían la notificación de la incapacidad por fax. Seguro. Si, él tiene…un amigo que se queda con él. Ayudándolo en la casa y todo. Sí, se lo diré. Seguro.— Harry cerró el teléfono y levantó la vista desde donde estaba sentado ante la mesa de la cocina vistiendo sus bóxers y camiseta, y vio a Louis en el marco de la puerta—. Hey, hermoso. ¿Cómo te sientes?— preguntó con una cálida sonrisa.
Momentáneamente impactado por la sonrisa y la declaración, le tomó un momento entender toda la conversación de Harry. No era un riesgo asumir que Harry se refería a él, Louis se hacía más de una pregunta. —¿Estabas hablando con Lloyd?
—Sí. Él dijo que espera que te mejores, aunque aún puedes revisar los editoriales y escribir tu columna si estás levantado. Pero si él te ve en la oficina antes de las ocho semanas, va a hacer algo muy sucio e impublicable con tu cuerpo — Harry dijo con una sonrisa —. Siéntate, Louis. Se supone que ni siquiera deberías de levantarte de la cama.
Louis se estremeció con la idea de que Lloyd dijera algo como ‘impublicable’ —¡Sucio viejo! Es solo mi hombro. Si me quedo en la cama dos meses, eso será una locura.
—Se supone que estarás en la cama una semana y mantendrás tu hombro estabilizado. Es por eso que está envuelto como pavo de acción de gracias, tonto. Siéntate.— Harry se puso de pie y le sirvió a Louis una taza de café de gourmet, mezclado con crema y azúcar, la manera en que sabía que le gustaba. Girándose a la mesa vio la pálida cara de Louis—. ¿Quieres comer algo? Deberías tener algo de comida en tu estómago antes de tomarte las pastillas para el dolor.
—Me preguntaba si podía salir a la calle.— Louis reflexionó mientras se deslizaba en la silla —. Podría usar la nueva laptop.
Harry se rió. Riéndose le dio a Louis su taza en su mano buena, vio hacia el líquido café claro. Le dio un tentativo trago, y gimió en aprobación. Harry sabía la manera en la que a Louis le gustaba su café.
Mientras Harry abría el refrigerador y empezaba a sacar las cosas para preparar sándwiches, Louis recordó que tenía que ir al supermercado, o viviría de la insalubre comida a domicilio y los comentarios de Harry no tendrían fin. Levantó la vista cuando Harry sacaba un tarro con etiqueta roja y azul del refrigerador.
—Louis, ¿por qué tienes Miracle Whip5 en tu refrigerador si solo te gusta la mayonesa sin aditivos?— Harry preguntó mientras dejaba el tarro de condimentos y el paquete de queso en el mostrador —. ¿Y tomates? ¿No me digas que no te gustan los tomates en tus hamburguesas? ¿O eso es salsa de tomate?— Frunció el ceño mientras dejaba las rebanadas de carnes frías en el mostrador junto con el pan de grano.
Las preguntas de Harry dejaron a Louis en blanco, hasta que recordó la recepción a la que ambos habían acudido en el ‘Williston Hills Country Club’ después del torneo regional de polo, Harry trabajando como encargado de la sección social, Louis representando a la editorial de su periódico.
Tomando un pequeño camino bajo un gigantesco olmo, Louis se había quejado con Harry acerca de la ensalada de pollo hecha con Miracle Whip; un crimen del proveedor, pero sobre todo debido a la alta temperatura; y aparentemente Harry lo recordó.
—¿No se te olvida nada, Styles? — Louis dijo, sacudiendo la cabeza —. La mayonesa está en la puerta. La Miracle Whip es para…aw, diablos…un tipo que veo en ocasiones. Tú deberías de conocerlo, él es un imbécil cuando dice que solo come Miracle Whip. Y que le gustan los tomates, pero no en los sándwiches. Lo desliza al plato con sal, pimienta y vinagre.
Harry se encogió de hombros y tomó el tarro de Miracle Whip y despreocupadamente lo lanzó al bote de la basura antes de tomar la mayonesa y el tomate. Louis se rió mientras el tarro caía.
—Solo me molestas, supongo — Harry dijo —. Tú no te quejas acerca de las cosas, entonces las recuerdo— él dijo, distraídamente mientras cortaba el tomate en la tabla.
Louis sonrió. —Gracias. Yo he tenido que evitar lanzarte en la noche. Hubiera sido demasiado fácil.
Ambas cejas de Harry se levantaron mientras hacía los sándwiches. —Eso no se oye bien, haberme lanzado fuera — observó —. Pero sí puedo ayudar.
—Sí, creo que puedes. ¿Te gustaría tomar el puesto de valet, cocinero y chofer? Creo que puedo afrontarlo.
—No sé…— La voz de Harry se detuvo dudando —. Tienes suficiente para mantener mi alto estilo de vida—dijo, guiñando un ojo mientras sacaba los platos del gabinete.
Louis se rió disimuladamente. Harry vivía en un estudio departamento de dos cuartos. En un elegante y alto edificio, pero nada de lo que Louis pudiera considerar ‘clase–alta’.
—Entonces, ¿qué vamos a comer?— Louis preguntó tomando las servilletas y cubiertos y colocándolos en la mesa junto con los platos.
—Pavo con queso suizo — Harry dijo, sacando una botella de vinagre del gabinete. Se movió al otro lado de la mesa dejando el plato de tomate, la sal y pimienta dentro del alcance de Louis —. ¿De tomar?— preguntó abriendo el refrigerador.
A Louis le golpeó repentinamente cuán cómodo se encontraba. Claro, ellos habían pasado juntos algunos sábados, generalmente asando carne o hamburguesas en la terraza de Louis y hablando de películas o algo así, así que él suponía que esto no era un gran cambio.
Louis recordó la pregunta de Harry. —Lo que realmente quiero beber, es cerveza, pero probablemente no sea buena idea con las pastillas para el dolor. Pepsi.— Sorpresivamente hambriento, Louis empezó a comer, llevaba tres cuartos de su sándwich, antes de que se diera cuenta. Vio a Harry que le servía tomates en su plato, ahora que tenía espacio —. Entonces, ¿cuándo necesitaras irte? Ese duro jefe tuyo probablemente vea esto como fraternizar con el enemigo.— George Hardin, el editor ejecutivo del periódico en el que trabajaba Harry, ‘El Sun-Herald’, era el jefe de Harry y era conocido por apoyar el asesinato, era competitivo con el periódico de Louis, ‘El Mirror’, y por natural asociación de su editor ejecutivo, Lloyd Morton, jefe de Louis, quien agradecía en sus oraciones que Lloyd fuera considerablemente calmado.
Harry levantó la vista de su sándwich esperando contestar hasta terminar de masticar. —No hay razón para decirle a quién ayudo— dijo encogiéndose de hombros —. A menos que tengas a alguien a quien llamar, estaré por aquí.
—Tengo un amigo o dos además de ti, Styles. Puedo hablar con los chicos para que se roten en revisarme — Louis reflexionó, silenciosamente reconociendo que la mayoría de sus amigos no eran del tipo cuidador. Aunque él estaba algo sorprendido de que Harry tuviera habilidades naturales de cuidador…e inclinación.
—Sí, eso suena prometedor. Tú realmente necesitas estar en la cama, Louis — Harry dijo, con preocupación marcada en su frente.—. Si mueves ese hombro aunque sea un poco, se va a salir de su ligamento y podrás requerir cirugía para recolocarlo. Creo que me quedaré por aquí.
—Tenemos un trato — Louis confirmó —. Regreso a la cama. Me das una de mis pastillas del dolor y estaré noqueado por horas. Tú ve a reportarte con tu editor y antes de regresar vas por algunas películas y comida china para cenar.
—Me parece bien. Ahora termina tu comida.— Harry sonrió y señaló al plato con los tomates antes de levantarse de su silla y abrir una de las botellas de medicamentos. Así era más fácil mantener a Louis en la cama durante algunas horas —. ¿Quieres res o cerdo?— le preguntó a Louis sabiendo que eran de sus favoritos —. Traeré también vegetales al vapor.
—¿Por qué no traes ambos y compartimos?— Louis sugirió, conocía bien el hábito de Harry de echarle la mano a la comida de su plato. Terminando su sándwich y tomates, tomó las pastillas con lo último de su soda. Se movía obviamente deteniéndose. Él quería pedir algo.
Harry llevó los platos al fregadero y los apiló para lavarlos después. Cuando se giró, vio a Louis esperando. —¿Necesitas algo?— Harry preguntó preocupado. Louis no parecía verse del todo bien, pero se veía mejor de lo que había estado en horas. Harry inclinó la cabeza a un lado, su cabello se deslizó de sus hombros sobre la camiseta con la que había dormido.
—Puedes…. Esto… puedes… erm.— Louis se congelaba —. ¿Puedes ayudarme a bajar mis jeans?— lo soltó. El botón estaba muy duro y era casi imposible de abrir con una sola mano.
Riéndose, Harry colocó sus manos en sus caderas. —¿Sabes? Nunca hubiera imaginado que fueras un tipo tan fácil — bromeó —. ¿Qué tipo de línea es esa?— preguntó desabrochándole el botón —. No puedo imaginar que los tipos sean tan fáciles — dijo mientras bajaba el cierre.
Louis veía los largos dedos de Harry desabotonar sus jeans. Su respiración atorada en su garganta, haciendo que la cabeza le diera vueltas, y podía sentir su pene a escasos centímetros de los dedos de Harry empezar a hincharse. «Joder.» Forzando al aire de sus pulmones a salir, vio con culpa la cara de Harry. Su amigo estaba sonriendo, relajado, bromeando.
Harry no tenía idea del efecto que tenía en él. «Gracias Dios.»
—Sí, bueno, entonces no conoces a los hombres tan bien. Somos una pandilla de fáciles cuando de bajarse los pantalones se trata.
Harry se rió y deslizó sus dedos dentro de los ojales del pantalón de Louis, jalándolo suavemente lo movió hacia la recámara.
—Bueno, supongo que debería de saberlo, ya que me incluye a mí. Pero sigo manteniendo que debería decidir expandir mis horizontes.
Algo se agitó en el estómago de Louis. Las bromas de Harry de ser bi-curioso6, no ayudaban en nada a calmar su libido. Esperaba que las pastillas funcionaran pronto y lo noquearan.
Después de seguir a Harry obedientemente por el pasillo, Louis empujó los jeans al suelo, cruzó la recámara y cayó inmediatamente en la cama. No abrió la boca por miedo a que su cerebro pudiera decir algo de lo que no pudiera retractarse.
Acomodando las sábanas y los cobertores, Harry se sentó en la orilla de la cama al lado de Louis y acomodó cuidadosamente una almohada bajo el hombro lesionado de Harry. —Quédate aquí — murmuró, acomodando mejor la almohada antes de ver a Louis —. ¿Crees que estarás bien? Me tengo que ir por un momento.
Louis sintió la calidez del cuerpo de Harry acercarse y se resistió a la urgencia de acercarlo más. —Estaré bien, Ve. Antes de que Hardin te despida y tengas que mudarte aquí cuando pierdas ese departamento de alta-clase.
Harry se rió. —Bien. Me voy. Tienes mi celular.— Apagó la lámpara, y caminó al cuarto de baño, encendió la luz y dejó la puerta entreabierta, y entonces suspiró suavemente. Al menos Louis iba a estar bien. Verlo adolorido realmente molestaba a Harry. Sonrió cariñosamente al dejar a Louis dormido.
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Hola, hola.
Lo siento, lo siento, soy asquerosamente floja, por eso no actualizaba. Y cuando llegue a hacer algo, el maldito no se aguardo y me frustre mande todo a la mierda.
Bueno, prometo actualizar mas seguido!
Espero que les guste el capitulo:)
Y muchas gracias por leerla!
Bye!:)
Invitado
Invitado
Re: El único que huyo (Larry Stylinson) Terminada.
Wassaap!! haroldo durmio con lucho e-e y lucho le dijo que es gay *O* y ojala el hardin despida a harold y este se tenga que ir a vivir con lucho e-e nah mejor no pobre :c pero algo asi e-e xdd, y pobre lucho el harold tan inocente que no veia las reacciones que causaba en lucho al tocarlo o cuando este le miraba e-e, cuantos años tiene lou? 43? O_O ahhahahaha y no te preocupes porque la subiste tarde :DD, byee cuidatee y siguela cuando puedas :DD
pattyguzman
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