Compañeros de la noche Zayn Malik

TEXTO EN LA PARED
La casa de los Nowicki estaba totalmente oscura, parecía casi amenazante, ___ sacó la llave de su mochila y tomó el camino de acceso, iluminado por los faros del auto de Zayn.
Puso la mano en el picaporte pero antes de meter la lleva la puerta se abrió de par en par. Qué raro que su papá no hubiera cerrado con llave; tal vez estaba con algún vecino y salió pensando que tardaría sólo unos minutos; tal vez no había previsto estar fuera después de que anocheciera.
____ buscó a tiendas el interruptor de la luz.
La sala era un caos.
No un caos como si no la hubiera limpiado en una semana: una caos porque los cuadros estaban torcidos, los muebles desordenados, los cojines destrozados.
____ se volvió justo a tiempo para ver que Zayn acababa de arrancar. “¡Espera!”, gritó. Dejó caer su mochila y atravesó corriendo el jardín.
Zayn dio marcha tras y se estacionó frente a la casa. La luz que salia por la puerta abierta alumbraba la escalerilla de la entrada. No había señales de movimiento.
-Aguarda aquí-le dijo a ___
Dejó la puerta del auto abierta y no apagó el motor.
____ miró aprensiva mientras Zayn cruzaba el camino.
Cuando ella llegó a la casa Zayn no había pasado de la sala.
Había tratado de no hacer ruido, por si acaso los intrusos se encontraban todavía en el interior, pero cuando vio lo que Zayn miraba, el texto escrito en rojo en la pared, emitió un grito sordo.
VAMPIRO, TENEMOS A TU FAMILIA, decía el texto: