Re: The Adventure | Saga Harry Potter

por **fckinjoker** Sáb 30 Nov 2013, 9:20 am

Realmente amo este fan-fic. Me gusta cada capitulo que subes, ¡te felicito por escribir tan bien! en mi opinión deberías tener mas lectoras, enserio.

por **Xio** Sáb 30 Nov 2013, 9:29 am

fckinjoker escribió:Realmente amo este fan-fic. Me gusta cada capitulo que subes, ¡te felicito por escribir tan bien! en mi opinión deberías tener mas lectoras, enserio.

¡Oh! Me alegra y me encanta que ames mi fan-fic :}. Gracias, pero no creo que escriba ''tan'' bien :/ También, gracias por tu opinión, hay otra chica ~~mi prima~~ que también opina lo mismo que tú, jajajajj

por **Mina ♡** Lun 02 Dic 2013, 9:51 am

Holiiiii.

Aquí nueva lectora. Empecé a leerme tu novela este medio día y me fui a clase deseando que al volver hubiese algún capítulo. He visto que no había y he decidido comentarte para que así te animaras a escribir un poco kahdkasd. La novela me encanta y espero que puedas continuarla pronto.

Un beso enorme, nos leemos<3.

por **Xio** Lun 02 Dic 2013, 6:57 pm

Mina ♡ escribió:
Holiiiii.
Aquí nueva lectora. Empecé a leerme tu novela este medio día y me fui a clase deseando que al volver hubiese algún capítulo. He visto que no había y he decidido comentarte para que así te animaras a escribir un poco kahdkasd. La novela me encanta y espero que puedas continuarla pronto.
Un beso enorme, nos leemos<3.

¡OMG! Otra lectora más... ¡Qué hermosoooo! jajajaj, ahora que leo esto, me anime un poco a seguirla! Aw, me alegro de que te encantase mi novela, que bonito.
xx, nos leemos.
♡♡

por **Xio** Dom 08 Dic 2013, 9:29 am

Capítulo 4

The Adventure | Saga Harry Potter - Página 2 Nd94

''Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo.''

Sirius la abrazo como si no la hubiera visto en más de un mes, ella sintió una mirada en su espalda, era la mirada de Harry. Fue incomodo para ella. Su padre empezó a dejar de abrazarla y le acarició la mejilla izquierda.

—Me tienes que contar todo lo que paso allá afuera, te ves muy mal, pequeña —dijo Sirius, muy preocupado—, ve a tu habitación y cámbiate, ya vamos a comer —le sonrió.

Emily asintió y empezó a subir nuevamente las escaleras, y fue a su habitación en el último piso. Aunque en realidad, la habitación de ella, no era la anterior en la que estaba. Su habitación una que estaba al lado de lo que era la antigua de Regulus, su tío, ya muerto.

Se bañó, se vistió lo más rápido posible y bajo hasta ver una cabellera pelirroja y una castaña, sonrió y fue corriendo hacia ellos y los abrazo por atrás.

Su ánimo ya no era malo, era uno bueno y con mucha alegría, y todo por ver a sus amigos, en la mejor condición como lo estaba ahora, ya que, cuando llego, no tenía ánimos de nada, encerrada en su mundo de enojo.

La castaña y el pelirrojo voltearon y la vieron, estaba con una de esas sonrisas sinceras. Ellos también sonrieron y correspondieron el abrazo, felices. Ellos pasaron a la base de la cocina, pero ella se quedó en la puerta, viendo a todos lados, en busca de su padre y por casualidad, vio a la larga mesa de madera que estaba de pie frente a ella, cubierta con rollos de pergamino, copas, botellas de vino vacías, y un montón de algo que parecía ser trapos, debía ser Mundungus, y sentados al Sr. Weasley y su hijo mayor, Bill, quienes hablaban silenciosamente con sus cabezas juntas en el final de la mesa.

La señora Weasley estaba en la cocina, y Emily lo notó, la mujer limpió su garganta. Su marido, un hombre delgado pelirrojo, que llevaba gafas, miró alrededor y brincó a sus pies.

—¡Emily! —Dijo el Sr. Weasley apresurándose para saludarla y sacudió su mano muy nervioso—. ¡Nos preocupamos de ti! ¿Dónde estabas?

—¿Por qué llegas a esta hora pequeña? —Preguntó Bill y ella sonrió aún más al verlo, él todavía llevaba su largo pelo en una cola de caballo. Y que a toda prisa enrollaba las longitudes de pergamino que habían sobre la mesa.

—¡Pequeña pelinegra! —dijo alguien atrás de ella, era Tonks, que estaba dando un salto para ayudar a Bill y derribando una vela sobre el último trozo de pergamino.

—Perdón Bill, no quería…—empezó a decir Tonks.

—No te preocupes —dijo Bill.

—No le pregunten a Emily nada—dijo la Sra. Weasley—Ven, siéntate querida —añadió llevando a la chica a sentarse, sonaba exasperada.

Luego volvió a donde estaba su hijo y Tonks, y reparó el pergamino con una onda de su varita mágica. En el destello de luz causada por el encanto de la Sra. Weasley.

Emily vio entrar a Sirius y a Harry a la base de la cocina, ella quiso no desvanecer su sonrisa, y así fue.

Bill sacó su varita mágica, murmurando, ‘‘¡Evanesco!’’ Y los rollos desaparecieron.

Emily rió al ver la cara de Harry cuando vio a esos montones de trapos convertirse en Mundungus y él empezó a hacer preguntas acerca de la reunión.

—La reunión ha terminado Dung —dijo Sirius, todos los demás que ya habían entrado a la sala y se sentaron alrededor de él en la mesa— Mi hija y Harry han llegado.

—¿Cómo? —Dijo Mundungus, mirando detenidamente a Emily y a Harry entre su pelo enmarañado pelirrojo—. ¿Están bien?

—Sí —dijeron Harry y ella en unísono.

Mundungus hurgaba nerviosamente en sus bolsillos, todavía mirando fijamente a los dos, y sacó un tubo mugriento negro. Él lo pegó en su boca, lo encendió en la punta con su varita mágica y tomó una profunda bocanada. Unas grandes nubes de humo verdoso lo oscurecieron en unos segundos.

—¡Por última vez, Mundungus —grito la Sra. Weasley—, por favor no fumes aquella cosa en la cocina, especialmente no cuándo nosotros estamos dispuestos a comer!

—Ah —dijo Mundungus—. Tienes razón. Perdón, Molly. —La nube de humo desapareció mientras Mundungus guardaba su tubo en el bolsillo, pero un olor acre como de calcetines quemados permaneció.

—Y si quieren la cena antes de la medianoche necesitaré una mano —dijo la Sra. Weasley. Emily se paró de la silla pero Molly se lo impidió—. No, tu puedes quedarte donde estás, Emily querida, has tenido una larga y horrible noche, según me entere.

Lentamente, la pelinegra se fue sentando despacio otra vez, y soltó un bufido, y escucho unas risas, miró de dónde venían y vio a los gemelos riendo por su reciente acción.

—¿De qué tanto se ríen ustedes dos? —preguntó ella arqueando una ceja.

—De ti —dijeron los dos al unísono—, eres muy divertida, Ems.

—Uhm, nadie me había dicho Ems hasta ahora, que tiernos, gemelos —sonrío ella—, y no me importa que se rían de mí, me acostumbre con la risa burlona de mi primo.

—¿Malfoy? —preguntó alguien sentándose a su lado.

—Sí, y no menciones su… estúpido apellido, Rony —dijo ella frunciendo el ceño.

Ron empezó a reír y dijo:

—Está bien, pero no me digas Rony, Ems.

—Extraño que me digan así… ¿saben? —dijo mirando a los tres pelirrojos.

—Pues, pensamos que no te gustaba que te dijeran así, pequeña… —dijo Fred.

—Pero ahora que sabemos que no, te diremos así…—siguió George.

—¡Para siempre! —dijeron los gemelos en unísono, y los cuatro rieron.

Empezaron a hablar y Emily vio a Hermione junto a Ginny hablar con Tonks, les sonrió y ellas hicieron lo mismo.

Ella escucho la conversación de Harry, Dung y Sirius junto a los demás, luego sintió algo cepillar contra sus rodillas, pero era sólo Crookshanks, el gato pelirrojo de Hermione, quien se enrolló de una vez alrededor de las piernas de la chica, ronroneando, para luego brincar sobre al regazo de Ron y enroscarse.

—Aléjate de mí, gato estúpido —dijo él, intentando sacar a Crookshanks de su regazo.

—Ron, Crookshanks solo quiere que le hagas cariño —dijo Hermione desde donde estaba sentada.

Emily y los gemelos rieron al ver la cara que puso Ron, luego todos guardaron silencio, la comida ya estaba en la mesa. Empezó a comer y a escuchar nuevamente lo que su padre y Harry ‘‘San Potter’’ decían.

—Conozco personalmente de lo que te quejas —dijo Sirius, y ella dudo de lo que había dicho.

—¿Qué? —Dijo Harry con incredulidad.

En ese momento, Emily recordó lo que había pasado con su padre, todavía lo buscaba el Ministerio de la Magia, Voldemort sabe que es un Animago, ya que el traidor —Colagusano— le debe haber contado.

Todos empezaron a hablar con Harry y Emily solo lo miró contestar a todo lo que preguntaban. Minutos después, se escuchó un chillido.

—¡Fred, George! ¡NO, SOLO LLEVENLOS! —Chilló la Sra.Weasley

Emily miro a su alrededor y vio a Fred y George, quienes habían encantado una caldera grande de guisado, un botellón de hierro de cerveza de mantequilla y una pesada tabla de cortar el pan de madera, completa con el cuchillo, lanzarse por el aire hacia Harry, Sirius y Mundungus. El guisado patinó por la mesa y vino a detenerse justo antes de del final, dejando una larga marca negra de quemado sobre la superficie de madera; el botellón de cerveza de mantequilla se cae con un choque, derramando su contenido por todas partes; el cuchillo de pan se escabulló de la tabla y aterrizó, en el punto exacto donde la mano derecha de Sirius había sido retirada segundos antes.

—¡POR EL BIEN DEL CIELO! —Gritó la Sra. Weasley—. ¡NO HABÍA NINGUNA NECESIDAD…! ¡HE TENIDO BASTANTE, NO NECESITABA ESTO…! ¡NO PORQUE PUEDAN USAR LA MAGIA AHORA, TIENE QUE SACAR DE REPENTE SUS VARITAS MÁGICAS PARA CADA PEQUEÑA COSA DIMINUTA!

—Nosotros solamente intentábamos ahorrar un poco de tiempo —Dijo Fred, sacando el cuchillo de pan de la mesa—, perdón Sirius.

Emily se reía ya que Mundungus se había caído hacia atrás de su silla, se puso de pies; Crookshanks habían dado un silbido enfadado y habían desaparecido debajo del aparador, de donde sus ojos grandes amarillos brillaban en la oscuridad.

—¡Muchachos! —dijo el Sr. Weasley, colocando el guisado en el medio de la mesa—, su madre tiene razón, se supone que deben tener un poco de responsabilidad ahora, comportarse un poco más de acuerdo con su edad…

—Ninguno de sus hermanos causó este tipo de problemas! —Rabió la Sra. Weasley a los gemelos colocando de golpe un botellón fresco de cerveza de mantequilla sobre a la mesa, y derramando casi tanto otra vez.

—¡Bill no sintió la necesidad de usar magia cada pocos pasos! ¡Charlie no encantó todo lo que se encontró! Percy...

Ella se paró de golpe, recobrando su aliento mientras veía como su marido la miraba asustado, cuya expresión parecía de madera. Emily se levantó de su silla y abrazo a Molly ‘‘Tranquila, Percival es un idiota, Molly’’ le decía.

—Vamos a comer —dijo Bill rápidamente.

—Esto se ve maravilloso, Molly —dijo Lupin, vaciando el guisado sobre a un plato para ella y dándoselo a través de la mesa.

Durante unos minutos se produjo un silencio, pero el ruido de platos y la cuchillería y el raspar de sillas cuando cada uno se instaló frente a su comida.

Emily se sentó en su silla y empezó a comer lo más rápido posible, tenía demasiada hambre. Vio a Tonks, quien entretenía a Hermione y Ginny transformando su nariz entre bocado. Su nariz aumentada con una protuberancia parecida a un pico que se parecía a la nariz de Snape, encogiéndose al tamaño de una seta y luego brotado mucho pelo de cada ventana de la nariz. Al parecer esto era un entretenimiento regular en la hora de reposo, porque Hermione y Ginny pronto solicitaban que pusiera sus narices favoritas.

—Ponte un hocico de cerdo, Tonks —Tonks obligada lo hizo y Emily sonreía abiertamente en la mesa.

El Sr. Weasley, Bill y Remus tenían una discusión intensa sobre trasgos. Ella escucho algo que le impresiono a decir verdad.

—"Estoy seguro que ellos nunca se acercarían a "quien ustedes saben", sacudiendo su cabeza. Ellos han sufrido pérdidas también; ¿recuerdan la familia de trasgo, él asesinó la última vez, en algún sitio cerca de Nottingham?"

Ella lo pensó, si hubiese asesinado a alguien últimamente, es porque regreso. La chica no le creyó a Harry el año anterior, cuando Cedric Diggory fue atacado por el señor Tenebroso y había muerto. Pensó que Harry solo había mentido, pero no fue así, Él si había vuelto y él sí mato a Diggory.

Cuando él dejó su cuchara se hizo un silencio en la conversación general: el Sr. Weasley se inclinaba en su silla, viéndose satisfecho y relajado; Tonks bostezaban extensamente, su nariz ahora era normal; y Ginny, quien había atraído a Crookshanks de bajo el aparador, estaba sentada con las piernas cruzadas en el suelo, haciendo rodar corchos de cerveza de mantequilla para que las persiguiera.

—Se acerca la hora de irse a la cama, pienso, ' dijo la Sra. Weasley con un bostezo.

—No todavía, Molly —dijo Sirius, apartando su plato vacío y girando para mirar a Harry—. Sabes, estoy sorprendido contigo. Pensé que la primera cosa que harías cuando llegaras sería preguntar sobre Voldemort.

La atmósfera en el cuarto cambió con la rapidez, Harry lo asoció con la llegada de los Dementores. Segundos antes estaban relajados, ahora estaban en alerta, incluso tensos. Un hielo había recorrido la mesa con la mención del nombre de Voldemort.

Lupin, quien había estado dispuesto a tomar un sorbo de vino, bajó su copa despacio, mirando cauteloso.

—¡Lo Hice! —Dijo Harry con indignación—. Pregunté a Ron y Hermione pero ellos dijeron que no lo permiten en la Orden.

—Y ellos tienen toda la razón, —dijo la Sra. Weasley—. Tú eres demasiado joven —ella se sentaba muy erguida en su silla, sus puños apretados sobre sus brazos, y el rastro de somnolencia desapareció.

—¿Desde cuándo alguien tuvo que estar en la Orden del Fénix para hacer preguntas? —Dijo Sirius —, Harry estuvo atrapado en esa casa Muggle durante un mes. ¡Él tiene el derecho de saber qué ha pasado…

—¡Detente! —Interrumpió George fuertemente

—¿Cómo es que Harry consigue que sus preguntas sean contestadas? —Dijo Fred con ira.

—¡Hemos intentado conseguir la información de ustedes durante un mes y no nos han dicho sola cosa! —Dijo George.

—Tú eres demasiado joven, tú no estás en la Orden —dijo Fred, con una voz aguda que sonó increíblemente como la de su madre—. ¡Harry no está en edad!

—¡Estoy de acuerdo con los gemelos! —dijo de repente Emily—, Harry no está en edad y no puede saber nada de lo que pasa en las reuniones ni en la Orden.

—Hija, tú tampoco tienes que saberlo, ya que, tú tampoco estas en edad —dijo Sirius con tono burlesco.

—Lo sé padre, no soy como Potter, no soy una necia.

—Pero bueno, esto no es mi culpa, no le han dicho lo que la Orden hace —dijo Sirius con algo de calma—, es la decisión de tus padres, Harry, además…

—No está bajo tu protección para decidir qué es bueno para Harry. —Dijo la Sra. Weasley bruscamente. La expresión sobre su cara normalmente amable cambio a peligrosa.

—¿No has olvidado lo que Dumbledore dijo, supongo? —Sirius pregunto correctamente, pero con el aire de un hombre que se pone a punto para una lucha.

—La idea es no decirle a Harry más de lo necesario —dijo la Sra. Weasley, colocando un énfasis pesado sobre las tres pasadas palabras. Las cabezas de Ron, Emily, Hermione, Fred y de George giraban de Sirius a la Sra. Weasley como si ellos siguieran un partido de tenis. Ginny se arrodillaba entre un montón de corchos abandonados de cerveza de mantequilla, mirando la conversación con su boca ligeramente abierta. Los ojos de Remus Lupin estaban fijos en Sirius.

—No tengo la intención de decirle más de lo que tiene que saber, Molly —dijo Sirius—. ¡Pero como él es el que vio a Voldemort volver, él tiene más derecho que nadie!

—¡Él no es un miembro de la Orden del Fénix! —Dijo la Sra. Weasley

—Sólo tiene quince años y él es tratado con el más en la Orden —dijo Sirius—, y más de unos.

—¡Eso es injusto, padre! —dijo Emily parándose de su silla—, Este puede ser parte de la orden —apunto a Harry—,pero yo no, ¿No es así? ¡Injusto! —dijo alejándose de todos para subir las escaleras.

—Hija, no es injusticia, él tiene que saber todo lo que está pasando y para eso, tiene que ser parte de la Orden —dijo Sirius mirando a su hija alejarse.

Ella estaba subiendo las escaleras, enojada con todo lo que escucho. Estaba claro que ella no quería entrar a la Orden, pero tampoco quería que Harry si lo hiciera. Minutos después, ella se sentó en la escalera y vio a Ron y Hermione, quienes iban a subir junto a Fred y George, pero los dos últimos discutían con sus padres.

—¡Somos mayores de edad! —Fred y George bramaron juntos.

—¿Si Harry lo tiene permitido, por qué no puedo yo? —Dijo Ron gritado.

Ron y Hermione reclamaban y Emily los miraba con una mirada confusa.

—¡Bien! —Gritó la Sra. Weasley—. ¡Bien! ¡Ginny a la CAMA!

Ginny iba a subir las escaleras con una cara muy enojada y cuando ella alcanzó el vestíbulo la Sra. Black emitió chillidos estridentes que se agregaron al alboroto. Emily se acercó rápidamente al retrato de la señora para calmarla, y lo hizo, la Sra. Black ‘‘amaba’’ a su nieta, ya que ella era diferente a su padre.

Escucho algo que hizo que subiera a su habitación rápidamente.

—Les quiero en la cama, ahora, a todos ustedes —dijo Molly, seguramente dirigiéndose a Fred, George, Ron y Hermione.

La Sra. Weasley llamó imperiosamente a sus hijos y Hermione. Uno por uno ellos se levantaron y ‘‘San Potter’’, viendo que no podía preguntar más ya que no recibiría respuestas, los siguió. Emily estaba en el último piso, viendo como todos subían y entraban a una puerta, rio y empezó a bajar lentamente, pero vio a Molly subir también y se escondió, vio a Kreacher en su escondite y le dijo que se quedará callado, lo hizo, y cuando vio hacia las escaleras, estaba Molly con los brazos cruzados viéndola.

—Ve a acostarte Emily, no es hora de jugar a las escondidas—dijo Molly, mostrándose seria.

La pelinegra asintió y Molly bajo las escaleras, ella no subió, fue a la habitación en donde estaban todos, quería saber de lo que hablaban.

por **fckinjoker** Dom 08 Dic 2013, 11:07 am

♡♡♡♡♡-solo le puede dar amor al fan-fic, ♡ya que le gusta demasiado xD-♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡

por **Xio** Dom 08 Dic 2013, 11:11 am

fckinjoker escribió:♡♡♡♡♡-solo le puede dar amor al fan-fic, ♡ya que le gusta demasiado xD-♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡

♡♡♡♡♡
¡Oh, fckinjoker... que bueno ver tu comentario!
lol, me di cuenta ya de que amas y le darás amor al fan-fic...
muchos corazones...
wow.
♡♡♡♡♡

por **Mina ♡** Lun 09 Dic 2013, 7:46 am

Asdfghjkl me encantó el capítulo, me encantó Emily me encantaron los gemelos, ¡todo! Solo te pido que subas pronto el siguiente capítulo. Besis<3.

por **Xio** Lun 09 Dic 2013, 7:01 pm

Mina ♡ escribió:
Asdfghjkl me encantó el capítulo, me encantó Emily me encantaron los gemelos, ¡todo! Solo te pido que subas pronto el siguiente capítulo. Besis<3.

Uhm, Yo odio a Emily, siendo que yo la invente (?) es muy tonto, pero bueno. Es muy irritante escribir sobre ella siendo que casi siempre actuó en personaje para que salga bien un capítulo. Aw, los gemelos también me encantan.
¡EN TRES DÍAS MÁS SALGO DE VACACIONES! Y tendré todo el tiempo del mundo para subir capítulos.
xx <3

por **Mina ♡** Mar 17 Dic 2013, 10:43 am

¿Para cuándo cap? :C

por **Xio** Mar 17 Dic 2013, 11:52 am

Uhm, lo que pasa Mina es que HICE el capítulo, Lo SUBÍ pero tengo problemas con eso, ya que cuando lo publique y lo vi, el contenido estaba malo, osea, la letra estaba diminuta, y hubo mucho alboroto y lo tuve que eliminar, y ahora, no sé que hacer... Mil disculpas.

por **Mina ♡** Mar 17 Dic 2013, 1:36 pm

Xio escribió:Uhm, lo que pasa Mina es que HICE el capítulo, Lo SUBÍ pero tengo problemas con eso, ya que cuando lo publique y lo vi, el contenido estaba malo, osea, la letra estaba diminuta, y hubo mucho alboroto y lo tuve que eliminar, y ahora, no sé que hacer... Mil disculpas.

Sí, a mí me llegó un mensaje diciendo que habías actualizado, pero al ir a leer el capítulo, no encontré nada. De todas formas, no te preocupes. Tómate tu tiempo, al menos está escrito. Un beso.

por **Xio** Miér 18 Dic 2013, 4:47 pm

Capítulo 5

The Adventure | Saga Harry Potter - Página 2 006pa8xx

''Si obedeces todas las reglas, falta toda la diversión.''

Ella abrió la puerta, muy despacio, vio a Harry y a Ron conversando, iba a entrar pero alguien la detuvo.

—A tu habitación, pequeña.

Se volteó y vio a Remus. Le sonrió y él la tenía una mirada casi severa, a ella se le borro la sonrisa y se dirigió al último piso, se puso su pijama y se durmió, ese fue un día muy largo y agotador.

A la mañana siguiente ella despertó con bastante sueño, se levantó con dificultad, tenía puesto su pijama cómodo, no se cambió, se dirigió a la puerta de su habitación y al salir de allí, vio a Kreacher, a quien solo le sonrió. Siguió caminando y bajo las escaleras, tenía los ojos entre cerrados, pero se sabía las partes de su casa a la perfección. Al llegar al primer piso, vio a Crookshanks, quién la siguió hasta la cocina y desapareció por un rincón. Saludo a los presentes, quienes solo eran su padre, Remus y los señores Weasley.

—Buenos días.

Dijo con una de sus sonrisas adormiladas y se sentó en una silla, cerca de ellos. Empezó a desayunar al igual que los cuatro. Cuando termino el desayuno, Molly le pidió despertar a los demás, ya que Emily no se había dado cuenta pero, era muy temprano.

Fue a la habitación en donde Hermione y Ginny dormían, las iba a despertar pero Crookshanks se le adelanto. Fue donde los gemelos y vio que Fred y George ya estaban despiertos. Ellos y ella fueron donde Ron y Harry, quienes dormían como si nunca lo hubieran hecho. Ella se sentó en la cama de Ron y empezó a moverlo con delicadeza.

—Despierta Ronald... despierta —le susurró Emily.

—Así no se despierta a la gente, Ems. Nosotros te enseñaremos —dijo Fred—, pero ahora, George, hace los honores.

—Como tú digas, gemelo —dijo George—, ¡Despierten! ¡Es hora de levantarse! ¡Despierten! —Empezó a gritar moviendo con brusquedad a Harry y a Ron.

De momento, Ron ya estaba despierto, algo sobresaltado. Emily no pudo evitar reír. Harry se levantó de golpe, haciendo que hasta Ron riera junto a los demás.

—Eso no fue gracioso —dijo Harry poniéndose sus gafas.

—No seas amargado, Potter —rió Emily—, vayan a desayunar.

—Bueno… —dijo Ron restregándose los ojos—, buenos días —sonrió para Emily.

Ella espero a los gemelos y a los demás en las escaleras, luego de que se demorarán mucho, ella subió a cambiarse también, cuando bajo, todos estaban esperándola a ella, bajaron todos y vieron a Molly lavando los platos. Emily sonrió y fue a ayudarle.

El señor Weasley mando a todos, menos a Emily, al cuarto del dibujo.

Cuando la señora Weasley y ella terminaron de lavar los platos, también fueron a aquella habitación, la cuál era una habitación amplia, de alto techo en primer piso con paredes verde oliva cubiertas de sucios tapices. La alfombra exhalaba pequeñas nubes de polvo cada vez alguien caminaba sobre ella, las cortinas de terciopelo verde-musgo zumbaban como si pululara con abejas invisibles.

Alrededor de esto se agrupaban los señores Weasley, Emily, Hermione, Harry, Ron, Ginny, Fred y George, todos parecían bastante raros con una tela atada sobre su nariz y su boca. Cada uno de ellos sostenía también una botella grande de líquido negro con una boquilla al final.

—Cúbranse sus caras y cojan un spray —dijo la señora Weasley a Harry y a Ron en el momento que los vio, apuntando a dos botellas más de líquido negro que se encontraban en una de patas giratorias.

—Es Doxycide. Eso ayudara—explico Emily a Harry—, Kreacher es realmente viejo, probablemente él no ha podido ocuparse de los Doxys, aunque mi papá piensa que solo finge.

—Te sorprenderías de lo que Kreacher puede manejar cuando quiere, hija, y sigo pensado que ese finge, eso no cambiara —dijo Sirius, que acababa de entrar en la habitación llevando una ensangrentada bolsa de lo que parecían ser ratas muertas—, simplemente he estado alimentando a Buckbeak —añadió, en contestación a la inquisidora mirada de Harry y Ron—. Lo guardo arriba en la alcoba de mi madre, sin embargo... este escritorio...

Dejó caer la bolsa de ratas en un sillón, entonces se agachó y examinó el armario cerrado con llave que, Harry lo notó en ese momento por primera vez, se estaba agitando ligeramente.

—Es un boggart, estoy segura —dijo Emily examinando también el armario, el cual no había visto en su casa hace mucho.

—Tienes razón, hija —dijo Sirius, mirando a través del ojo de la cerradura—, pero quizá deberíamos dejar que Ojoloco le eche un vistazo antes de sacarlo de ahí, conociendo a mi madre, podría ser algo mucho peor.

—No lo creo... —susurró Emily.

—Tienes razón Sirius —dijo la señora Weasley. Y justo en ese momento sonó un campaneo escaleras abajo, seguido por la cacofonía de gritos y lamentos como los que habían sido provocados la noche anterior por Tonks.

Sirius salió con prisa del cuarto. Ellos le oyeron tronar escalones a bajo como los chillidos de la señora Black hizo eco una vez más a través de la casa:

—Manchas, de deshonor, los cochinos mestizos, los traidores de sangre, niños de suciedad.

—Cierra la puerta, por favor, Harry —dijo la Sra. Weasley.

Harry empleó tanto tiempo que pudo en cerrar la puerta del cuarto de dibujo, y luego se escucharon muchos pasos que subían y bajaban. El repiqueo de la cadena en la puerta delantera, y entonces una voz profunda hablo. Emily no alcanzo a escuchar lo que se dijo, pero supuso que fuese Kingsley Shacklebolt. Ella estaba mirando la puerta, pero luego vio a la señora Weasley agachada inspeccionando la página sobre Doxys en la Guía de las "Pestes de la casa de Gilderoy Lockhart" que estaba abierta sobre el sofá.

—De acuerdo, su trozo, necesitan ser cuidadosos, porque los Doxys muerden y sus dientes son venenosos. Yo tengo una botella de antídoto aquí, pero preferiría que nadie lo necesitase —se enderezó, se posicionó frente a las cortinas y los llamó a todos para que avanzasen—. Cuando de la señal, comenzaran inmediatamente a rociarlos —dijo ella—. Ellos saldrán hacia nosotros, espero, pero con un buen chorro de los sprays se paralizarán. Cuando se queden inmóviles, simplemente los tiráis en este cubo —la señora Weasley se colocó en posición—, de acuerdo, ¡El chorro!

Emily había estado rociando sólo unos segundo cuando un Doxy muy crecido salió volando de un pliegue del material, zumbando como las alas de un brillante escarabajo, mostrando los dientes afilados y diminutos como una aguja, su cuerpo como de hada cubierto de espeso pelo negro y sus cuatro patitas diminutas fijadas con furia. Ella lo miró unos segundos y le dio en la cara de lleno con una ráfaga de Doxycide. Se quedó helado en el medio del aire y se cayó, con un sorprendente ruido sobre la alfombra. Harry la miró y rió al ver que ella miraba atentamente al Doxy, lo recogió y lo tiró en el cubo.

Ella vio a Fred, quién estaba esforzándose en sostener un Doxy entre su dedo índice y dedo pulgar. Harry también vio lo mismo que ella, y reprimió una risa.

—Fred, ¿qué estás haciendo? —Dijo la Sra. Weasley molesta—, ¡Rocía eso en seguida y tíralo!

—De acuerdo —dijo Fred, rociando el Doxy rápidamente en la cara para que se desmallara, pero en el momento que la señora Weasley se giró él lo guardó en el bolsillo y le guiñó el ojo a Harry y a Emily.

—Queremos experimentar con veneno de Doxy para nuestro Skiving Snackboxes —le dijo George a Harry y Emily con un susurro.

Roció con destreza a dos Doxys cuando volaban directamente hacia su nariz, y Harry se acercó a George.

—¿Qué son Skiving Snackboxes murmuró él por una esquina de su boca. Pero Emily lo escucho aun así y se acercó a ellos.

—Surtido de dulces para ponerte enfermo —susurró George, manteniendo un ojo atento en la espalda de su madre—, no realmente enfermo, tranquilo, suficientemente enfermo para terminar una clase cuando tú lo desees. Fred y yo los hemos estado desarrollando este verano. Tienen dos extremos, codificados por color para masticarlos. Si te comes la mitad anaranjada de las Pastillas vomitivas, vomitas. Momento en el que sales de la clase para ir al hospital, luego tomas la mitad púrpura, que te repone, permitiéndote que sigas con la actividad de ocio que tu elijas durante una hora que se habrías ocupado por otra parte a un fastidio improductivo.

—Esto es lo que estamos poniendo en los anuncios, sin embargo —susurró Fred que se había puesto fuera de la línea de visión de Molly y estaba barriendo unos Doxys perdidos en el suelo y guardándolos en su bolsillo—, todavía necesitan un poco de trabajo, por el momento nuestros probadores están teniendo un pequeño problema para parar de vomitar el tiempo suficiente para tomarse el extremo púrpura.

—Eso es porque necesitan otra sustancia para que controle el vómito, puede que sean los Doxys... —dijo Emily, susurrando al igual que ellos—, y bueno, ¿Probadores? ¿Quiénes se tomarían esas cosas para ver qué pasa? Serían unos tontos...

—Nosotros —susurró Fred algo molesto—, y no somos tontos. Además, nos turnamos, George hizo el Desmayo Imaginario, nosotros dos probamos el Turrón sangra-narices.

—¡Mamá pensó que nos habíamos estado batiendo en duelo! —dijo George y Emily junto a Harry rieron, los demás los miraron y ellos se callaron al instante.

Emily se acercó a Hermione y Ginny para ver cómo iban y los gemelos con Harry, seguían hablando de lo mismo.

Ella no se dio cuenta pero la eliminación de los Doxys de las cortinas les ocupó la mayoría de la mañana. Era más tarde del mediodía cuando Molly se quitó por fin su pañuelo protector, se hundió en un sillón viejo y saltó de nuevo con un grito de disgusto, porque se había sentado en la bolsa de ratas muertas.

Las cortinas ya no zumbaban; colgaban húmedas y flojas después del intensivo rociado. Al pie de ellos, los inconscientes

Doxys descansaban en el cubo junto a un cuenco de sus huevos negros, que Crookshanks estaba olfateando en ese momento y al que Fred y George estaban lanzando miradas codiciosas.

—Pienso que nos dedicaremos a esos después del almuerzo —la señora Weasley apuntó a los polvorientos armarios de vidrio que están de pie a los lados de la repisa. Estaban llenos de un surtido de objetos: una selección de dagas mohosas, garras, una piel de serpiente enrollada, varias cajas de color plata empañadas con inscripciones en idiomas que Harry no podía entender y, una botella de cristal adornado con un ópalo grande puesto en el tapón, llena de lo que Harry estaba convencido, era sangre.

El timbre sonó de nuevo. Todos miraron a la Sra. Weasley.

—Quédense aquí —dijo ella firmemente dejando la bolsa de ratas ya que los chillidos de la señora Black empezaron de nuevo desde abajo—. Subiré algunos bocadillos —dejó el cuarto, cerrando la puerta cuidadosamente detrás de ella. En seguida, todos se pegaron a la ventana para mirar hacia abajo en el umbral de la puerta. Podían ver la parte de arriba de una despeinada y roja cabeza y una pila de calderos precariamente equilibrados.

Vio que era Mundungus quién traía los calderos, no le dio importancia, él era así. Traía cosas y llevaba cosas por todos lados. Y luego, él mismo desapareció con los calderos por otra puerta.

Se escucharon murmullos, gritos, de todo allá afuera. Fred y George querían usar las Orejas Extensibles pero fueron innecesarias ya que, se escuchó un grito demasiado fuerte.

—¡NOSOTROS NO ESTAMOS EJECUTANDO UN ESCONDITE PARA MERCANCÍAS ROBADAS! —gritaron, y según la voz, se dedujo que era Molly Weasley.

—Me encanta escuchar a mamá haciendo callar a alguien más—dijo Fred, con una sonrisa de satisfacción en la cara cuando él abrió la puerta un centímetro para permitir que la voz de la mujer penetrara bien en el cuarto —hacer un cambio es bueno.

—¡COMPLETAMENTE IRRESPONSABLE, COMO SI NOSOTROS NO TUVIÉRAMOS SUFICIENTE, COMO PARA PREOCUPARNOS AHORA EN TI, TIRANDO LOS CALDEROS ROBADOS DENTRO DE LA CASA! —Se escuchó gritar de nuevo.

Luego de que nadie gritará, Emily se sentó en el piso, agotada por una razón inexplicable. Pero luego, otra vez gritaron, su abuela y la señora Weasley discutiendo.

Entro Kreacher de repente a la habitación pero no notó la presencia ninguno, arrastraba los pies encorvado, despacio y obstinadamente, dirigiéndose hacia el extremo lejano del cuarto, murmurando todo el rato, suspirando roncamente y profundamente.

—... olía como un desagüe y un delincuente también, pero ella no es mejor, vieja sucia traidora con sus mocosos que desordenan la casa de mi señora, oh, mi pobre señora, si ella supiera, si ella supiera la escoria que ellos han permitido en su casa, lo que le diría al viejo Kreacher, oh, qué vergüenza, Mudbloods y traidores y ladrones, Kreacher viejo pobre, qué puede hacer él...

—Hola, Kreacher —dijo a Fred, cerrando la puerta con un chasquido, muy ruidosamente. El elfo doméstico se quedó quieto, dejó de murmurar, y fingió una muy marcada y muy poco convincente sorpresa.

—Kreacher no vio al amo joven —dijo, dándose la vuelta e inclinándose ante Fred. Todavía con la cara hacía la alfombra, añadió, absolutamente audiblemente—, pequeño mocoso de una sucia traidora…

—¿Disculpa? —dijo George

Kreacher no dijo nada, dijo el duende, con una segunda inclinación a George, agregando claramente en voz baja—, y ahí está su gemelo, son pequeñas bestias antinaturales.

—Kreacher, pídele disculpas a Fred y a George —dijo de repente Emily mirando fríamente al elfo.

El elfo se enderezó, la miro y dijo:

—Pero ama Black, ellos son unos traidores...

—Estoy esperando. —Dijo otra vez, fríamente.

—Perdonen, amos jóvenes… —dijo Kreacher arrastrando las palabras, luego vio a los demás y murmuró— aquí está la sangre sucia, resistiendo allí vigorosa como latón, oh, si mi señora supiera, oh, como lloraría, y aquí hay un chico nuevo, Kreacher no sabe su nombre, ¿qué está haciendo aquí?, Kreacher no lo sabe...

—Este es Harry, Kreacher —dijo Hermione tentativamente—, Harry Potter.

—¡La sangre sucia le está hablando a Kreacher como si fuera mi amiga! Si la mujer de Kreacher lo viera con esta compañía, oh, que diría ella…

—No llames sangre sucia a Hermione, Kreacher. Ya hablaremos… —le dijo Emily al elfo, con el ceño fruncido.

En ese momento, Sirius había regresado; estaba mirando ceñudo al elfo desde la puerta. El ruido en el vestíbulo había descendido al fin.

—¡Sigue murmurando y seré un asesino! —Dijo Sirius irritablemente cuando él cerró de golpe la puerta.

—¡Papá! —lo reprocho Emily—, ¡Que te dije de lo que dices sin saber!

—Esto lo digo sabiendo, hija. —Dijo mirando a Kreacher.

Emily empezó a acercarse a Fred y a George, viendo que todos hablaban con Sirius.

—¿Qué pasa, Ems? —dijo George sonriendo.

—Ningún gracias de parte de ustedes, ¿en serio? —dijo arqueando una ceja.

—Un gracias, ¿Qué hiciste para que te las demos? —preguntó Fred.

—Hice que Kreacher se disculpara con ustedes, por como los trato —dijo algo molesta.

—Oh, entonces… —dijo Fred.

—¡Gracias! —exclamaron los gemelos al unísono.

—Antes de que nos vallamos a Hogwarts, le haremos una broma a Kreacher —dijo Fred guiñándole él dijo a Emily, y ella rió.

Siguieron hablando y se les paso los minutos o quizás horas, de lo que hablaban era de las bromas de los gemelos, a veces de los hermanos de los pelirrojos, pero cuando tocaban el tema de Percy, Emily lo evadía. Luego de todo, empezaron de nuevo a hablar de bromas.

—Tal vez te hagamos bromas a ti o a otra persona en este día —bromeó Fred.

—Sí, tal vez tú seas nuestra primera víctima este día —le siguió el juego George.

—Bueno, digan lo que digan, no caeré en ninguna de sus bromas, gemelos.

—Eso lo dices ahora, Ems —dijo Fred riendo.

Luego, vieron a su alrededor, y no había nadie, se quedaron solos conversando, lo que les pareció muy cómico. Al rato después, ellos la acompañaron a su habitación para cambiarse de ropa, porque el spray le cayó a la ropa cuando un Doxy estuvo a punto de llegar allí.

Ella no se demoró nada, y bajo las escaleras con ellos. Luego, recordó que tenía unas cosas de Hermione en la habitación suya, iba a volver a subir, y los gemelos le dedicaron una sonrisa traviesa, ella dudo en subir, pero lo hizo igual.

Al subir y estar en los últimos escalones para llegar a su habitación empezó a sentir algo viscoso en su cabeza, la tocó y descubrió lo que había pasado.

—¡Fred! —gritó Emily viendo que otra vez, cayó en una de sus bromas, luego empezó a caminar a su habitación y ¡PAM! un montón de arañas -aparentemente falsas- cayeron encima de ella y, volvió a gritar— ¡George!

Los gemelos, sabían que Emily le temía a las arañas lo que les causo más gracia la cara de ella, una de espanto, Emily bajo rápidamente las escaleras y gritó:

—¡Los voy a matar, idiotas!

Ellos corrieron por toda la casa, riendo y ella también, todos miraban a Emily y reían, se veía sumamente graciosa así, con algo viscoso en la cabeza y una que otra araña en su ropa o en alguna parte de su cabello. Iba a saltar encima de ellos, pero algo los detuvo, o mejor dicho alguien, quien los miraba con una mirada severa y fría, muy fría. De seguro iban a recibir algún reclamo.

por **Xio** Miér 18 Dic 2013, 5:20 pm

¡Listo!

Hice lo que pude, pero por lo menos es algo.

Espero que les guste, xx.

Las quiero.

por **Mina ♡** Jue 19 Dic 2013, 1:52 pm

¡Ow, subiste al fin! Me alegro de que se pudiera publicar después del problema que tuviste. Estuvo bastante bien. Me reí mucho con los gemelos. Por cierto, ¿Emily se enamorará de Harry o de quién? Es que eso no me queda claro. Puede ser una fic sin romance, pero lo común es poner al personaje algún tipo de pareja o así, no sé. Solo que si me dices que es Harry me muero de un ataque al corazón. Sería tan tierno asdfghjklñ.
Gracias por subir el capítulo, vuelvo a decir que me ha encatado. Espero el siguiente con ansias. Mil besos, chau<3.

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