Malik, you are a trouble

-¡No puedo más! – grité riendo a la vez que me tiraba al suelo haciendo reír a todos a mi alrededor

-Vamos ______ arriba, queda la última coreografía – me retó Danielle risueña, esta chica hacía que sacáramos brillo al suelo bailando

-Bueno, aquí vamos – me levanté con ayuda de Chris, uno de mis bailarines

-¿More than friends? – preguntó Danielle

-Te gusta hacerme sufrir – la miré retadora, esa era una de las coreografías más complicadas

-Te quiero – me tiró un beso, y le hizo un gesto al sonidista para que empezará la canción - ¡1, 2 y 3!

Y empezaba una nueva coreografía. Estábamos desde las nueve de la mañana ensayando una y otra vez las coreografías para la gira. Dentro de tres días empezaba mi gira por Inglaterra, Irlanda y luego de un descanso, Europa. Estaba emocionada por montones por esta gira, ya que visitaría muchos lugares que en mi gira anterior no visite, estaba ansiosa de conocer a la mayor cantidad de fans posible y lo más importante darles un show de calidad, y que ellas se sientan orgullosas. Es por eso que me he esforzado mucho en que todo salga perfecto.

-¡Genial, simplemente genial! – nos felicitó Danielle cuando terminamos de montar la coreografía con los saltos los cambios de ropa, todo. En verdad estaba amando el show que estábamos armando todos en conjunto.

Mañana por la noche era mi fiesta de cumpleaños, y luego de dos días partía con mi primer show en Londres. Dentro de los próximos meses estaría sumamente ocupada, entre la gira, algunas entrevistas, y además pequeñas presentaciones con los chicos de One Direction por el single que teníamos a beneficio de Comic Relief. Dentro de pocos días saldría al aire en una de las radios más importantes y estábamos en plenas grabaciones del video el cual estaba quedando genial.

-Nos vemos mañana en mi fiesta chicos, los quiero a todos ahí – les grité para luego salir del lugar dónde nos encontrábamos ensayando.

Tome mi auto y me fui directo a mi departamento, tenía que ducharme y dentro de una hora tenía que estar con los chicos, para grabar algunas escenas del video de One Way or Another. Mientras me duchaba pensaba en todo lo que había pasado en el último mes, desde que había conocido a ese moreno. Mi vida simplemente había dado un giro rotundo, jamás había sentido una atracción por alguien como la sentía por Zayn. Pero era una atracción prohibida, él estaba de novio con una chica realmente genial, y no se merecía todo lo que habíamos estado haciendo Zayn y yo.

Tal como había dicho ese día que me encerró en el baño, yo también sabía jugar, el problema es que me estaba implicando mucho en el juego. Los encuentros entre los dos habían seguido, los besos, las caricias en los lugares más especiales y extraños. Nadie sospechaba nada, ya que nuestras peleas seguían como siempre pero en el momento que podíamos encontrar desprevenido al otro, nos tomábamos y nos besábamos, pero esto ya no estaba siendo un juego, por lo menos ya no para mí, por que mi corazón se empezaba acelerar cada vez que sus labios rozaban los míos, sus caricias, nuestros encuentros, cada una de las cosas hacían que mi corazón vibrara por él y que empezara a sentir sentimientos que no debería.

Tomé mi pelo húmedo en una cola y fui en busca de mi celular, cuando apreté el botón de al medio típico de los Iphones mi pantalla se iluminó avisándome que tenía tres mensajes en whatssap de “JM” ese ere Zayn, lo tenía guardado por su segundo nombre para que nadie sospechara si es que llegara a tomar mi celular.

JM: ¿Dónde demonios estás?

JM: ¡Apúrate, quiero verte demonio!

JM: De seguro no has llegado por que te estas acostando con otro, zorra.

Sep, ese era Zayn Malik. Podía ser un hermoso hombre cuando quería, pero cuando no podía ser lo más hiriente. Sus palabras dolían pero tampoco es que yo me quedara callada, siempre se las contestaba y esta no fue la excepción, no dejaría que nadie pasara por sobre mí.

Estaba ocupada imbécil, y no soy como tú que vas de cama en cama, puto.

Tiré mi celular dentro del bolso y me dispuse a salir del departamento, en menos de 20 minutos estuve en el parque de Londres dónde grabaríamos las partes finales del video que consistía en la canción cantada en distintas partes del mundo, los chicos habían viajado a EEUU así que habían grabado algunas partes allá mientras que yo grabe otras en Francia dónde estuve unos días promocionando mi gira.

-He llegado – avise a David el director saludándolo con un beso en la mejilla

-Que bien _______, súmate a Niall y a Louis – me indicó al frente de él, nos maquillaron rápidamente a los tres, la ropa no importaba mucho ya que era algo “casual” y nos pusimos en escena

La parte que cantábamos los tres empezó  sonar y empezamos hacer nuestras típicas estupideces, así pasamos un buen rato, repitiendo algunas tomas y sacándonos fotos con algunas fans que pasaban. Harry y Liam estaban grabando en otra parte de Londres, del idiota de Zayn ni siquiera había preguntado.

-Listos chicos, quedan libre por hoy – nos avisó David - _______ Tu chaqueta del otro día está en el último remolque, ahí te la guardo Lou.

-Muchas Gracias David, voy por ella – tomé mis cosas y partí hacia el remolque. El cual estaba bastante lejos, uno de mis tacos se enterró en la tierra, así que decidí sacármelos y caminar descalza, me encantaba estar así. Entre en el remolque y deje mi bolso con mi celular en la mesita que encontré y empecé a revisar en los percheros para encontrar mi chaqueta. Me encontré con bastante ropa de los chicos, algunas de sus chaquetas, poleras e incluso algunos gorros de Harry.

-¿Dónde habrás dejado mi chaqueta Lou? – me pregunté a mi misma, mientras seguía corriendo los colgadores en busca de ella

-¿Será esta por si acaso? – preguntó una voz masculina por detrás de mí haciéndome pegar un salto del susto. Me di vuelta rápidamente con una mano en mi pecho dónde se encontraba mi corazón acelerado. Ahí vi a Zayn parado unos metros más allá con mi chaqueta en la mano mirándome sospechosamente.

-Eres un imbécil, casi me matas del susto – le gruñí de vuelta a su pregunta, intente acércame para quitarle mi chaqueta pero la elevó por lo alto, ya que me sacaba algunos centímetro de altura - ¿Qué quieres Malik?

-¿Dónde has estado todo el día? ¿Por qué no contestas los mensajes? – me respondió nuevamente con preguntas. Yo lo volví a mirar desafiante.

-Que te importa, no tengo porque rendirte cuentas, pásame mi chaqueta – le exigí

-Quizás con que imbécil te andabas acostando – dijo con rabia.

Yo simplemente no me aguante en un segundo mi mano se estampo contra su mejilla haciendo que su cara girara completamente. El eco de la bofetada quedo resonando en todo el remolque. Estaba harta de sus insultos, y de que pensara que yo era una cualquiera. Tomé mi chaqueta de su mano y empecé a caminar hacia la salida.

-No vas a ningún lado – alcancé a escuchar antes de sentir como sus brazos rodeaban mis cintura tomándome desprevenida haciendo que la chaqueta cayera al suelo y yo quedara estampada contra su pecho mirándonos frente a frente con mi respiración agitada chocando contra sus labios.

-Suéltame – exigí, intentado deshacerme de sus brazos, pero era imposible, eran un candado imposible de abrir.

-Esto – indicó su mejilla que se encontraba roja por el golpe – te va a costar caro, demonio.

Y sin si quiera esperarlo sentí sus labios tomando con fuerza los míos, por un momento me quede congelada, negada completamente a devolver el beso, pero sus brazos me apretaron más fuerte y sus largos dedos empezaron a introducirse por debajo mi blusa. Y todas mis barreras se fueron al demonio, cruce mis brazos por detrás de su cuello y enganche mis piernas entorno a su cintura, sorprendiéndolo. Sus manos aferraron mi trasero y me estrecharon contra él haciendo que su erección se estampara contra mi parte más íntima. Un millón de sensaciones se esparcieron a través de mi cuerpo, simplemente no podía creer que con un solo toque o un roce este hombre me hiciera sentir tantas cosas. Sentía sus labios saboreando mi cuello, mientras sus manos subían más y más acariciando todo mi abdomen. Sus manos dejaban líneas de fuego marcadas en mi cuerpo.

-Zayn…-salió su nombre casi como un gemido de mi boca cuando me sentó sobre un mesón y su mano llego al borde de mi sostén con el cual empezó a jugar haciéndome perder el control.

-______ … - susurró él conectando su mirada con la mía. El escuchar decir mi nombre de sus labios fue simplemente mágico. Jamás había dicho mi nombre de esa forma, y tampoco me había mirada así ¿Se podía ver cariño? Imposible, todo esto era un juego, dónde yo era el principal juguete de su función.

Sus labios se volvieron a estampar contra los míos y una de sus manos se introdujo por bajo mi sostén tomando de lleno uno de mis pechos, lo que me hizo suspirar. Empezó acariciarlo suavemente, sus dedos tocaban con delicadeza cada parte de él. Lo apretó con sumo cuidado mientras yo mordía su labio inferior.

Fue en ese momento que sentimos unas voces, era la voz de una chica y un chico. Nos separamos con nuestras respiraciones completamente agitadas. Las voces cada vez estaban más cercas, y mi corazón se empezó acelerar de una forma desenfrenada.

-Toma tus cosas y metete en el baño – me ordeno Zayn

-¿Qué? – lo miré desconcertada

-¡Rápido! – casi me gritó

Me tomo por el brazo a la vez que tomaba mis cosas rápidamente y me lanzó al baño y cerró la puerta fuertemente. Dejándome ahí encerrada completamente desconcertada. Me deje resbalar por la fría pared del baño y me acurruque en el suelo cuando sentí que alguien entraba al lugar.

-¡Amor! – fue un pequeño gritito de mujer, Perrie – Harry me ha traído aquí, me dijo que de seguro estabas durmiendo, ya que no contestabas tu celular

-Si amor, acabo de despertar, no sentí el celular perdón – le contestó Zayn con una voz bastante tranquila.

-Te he echado mucho de menos mi amor, te amo – se pudo escuchar el susurró de la rubia

-Y yo a ti mi amor – fueron las palabras de Zayn y luego todo quedo en silencio.

Un nudo se formó en mi garganta. Y sin siquiera imaginarlo, una pequeña lágrima corrió por mi mejilla. Yo no quería ser la otra, yo no quería ser un jueguete, pero ese maldito hombre me estaba volviendo loca ¿Qué tenía el, que otros no? Simplemente no lo sabía. Solo sabía, y podía asegurar de todas formas, es que Malik era un problema, un gran problema ¿El problema de eso? Es que me encantaba ese problema que empezaba con M y terminaba en alik.

No se cuánto tiempo llevaba ahí dentro, hasta que sentí vibrar mi celular dentro de mi bolso. Con bastante cuidado lo saque de ahí.

JM: ¿Sigues ahí?

Dudé un segundo en responderle.

Sigo aquí  - fue mi respuesta seca

JM: Ya puedes salir demonio, adiós.

No sé si ver ese mensaje había sido mejor o peor, su frialdad me mataba. Pero que íba hacer, él no era un hombre disponible para mí. El jamás podría ser mío, y yo jamás seré de él.

-¡Hermanita! – saltó Jo en cuanto me vio entrar en el departamento, con una sonrisa floja la salude

-¿Qué tal Jo? – pregunté cuando me separé de ella y colgué mi bolso en el perchero que teníamos al igual que mi chaqueta.

-Todo bien, Harry se ha quedado dormido en el sillón ¿No hay problema en que se quede? Ya es bastante tarde, y no quiero que maneje a estas horas – me explicó mi hermana

-¿Qué hora es? – pregunté algo desconcertada

-Son las 11 _______, ¿Dónde has estado? – preguntó esta vez más preocupada

Había pasado más de cuatro horas encerrada en ese puto baño, todo por culpa de Malik. Una rabia se formó dentro de mi ser, esta sí que me la pagaría ese maldito idiota. Al parecer no le quedo claro que con una Lightweight no se juega.

-Me quede escribiendo, ya sabes por ahí – tranquilice a Jo – Y tranquila, no hay problema en que Harry se quede, iré a dormir, Buenas Noches

-Buenas Noches – se despidió Jo, pero yo ya estaba a la mitad del pasillo.

Entre en mi pieza y me tiré tal como estaba sobre mi cama. Ese moreno no salía de mi mente, y tampoco salía de ella, el pensar en qué demonios me estaba metiendo y en que me estaba transformando.  

Malik, Malik, Malik… eres un problema, ¿Un maldito o bendito problema? Simplemente no lo sé.