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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
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Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
No hay problema, linda:). La espero con ansias. Beso xx.Future. escribió:e_é Perdón por no editar mi ficha estos últimos días, te prometo que de aquí a mañana lo hago C:
Invitado
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Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
AVISO
Chicas, creo que ya tengo varias fichas que son muy buenas y masomenos sé a quienes podría elegir, por ello quiero decirles que las audiciones cerrarán el día MIÉRCOLES 11 DE SEPTIEMBRE, y daré resultados al día siguiente. Bueno, eso es todo(? Las quiero, gracias por audicionar y suerte a todas.
Invitado
Invitado
Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
NataliaMarinP escribió:AVISOChicas, creo que ya tengo varias fichas que son muy buenas y masomenos sé a quienes podría elegir, por ello quiero decirles que las audiciones cerrarán el día MIÉRCOLES 11 DE SEPTIEMBRE, y daré resultados al día siguiente. Bueno, eso es todo(? Las quiero, gracias por audicionar y suerte a todas.
OMG.... no falta nadaaaaaa !!!
ok.. estare esperando ansiosa :)
Ciin :)
Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
NataliaMarinP escribió:AVISOChicas, creo que ya tengo varias fichas que son muy buenas y masomenos sé a quienes podría elegir, por ello quiero decirles que las audiciones cerrarán el día MIÉRCOLES 11 DE SEPTIEMBRE, y daré resultados al día siguiente. Bueno, eso es todo(? Las quiero, gracias por audicionar y suerte a todas.
¡Qué ganas de comenzar! Estoy demasiado nerviosa
No falta nada para el once de septiembre, uh (?
Zarry HorTomPay :)
Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
"No doy segundas oportunidades"
- Mi ficha fichosa:
- Azul Stephanie Romano► Azul Romano.► Azu, Stephy.► 18 años.► Heterosexual.► Argentina.► Jack Harries.► PB: Kylie Jenner.Descripción física.
Estatura promedio, mide apróximadamente 1.65. Su cabello es de color castaño, largo hasta un poco más debajo de la cintura y lacio desde las raíces y se va haciendo ondulado hasta las puntas. Sus ojos son de un color café oscuro acompañados de unas largas y rizadas pestañas, que resaltan más sus ojos cuando se coloca rimel. No posee un cuerpo de modelo pero está conforme con su físico. Pechos de tamaño normal, trasero redondo y levantado, una de las cosas más llamativas de su cuerpo, y una de las que más le gustan. Piernas torneadas, largas y bien cuidadas. Nariz recta y labios carnosos de un tono rosado natural que se potencia más cuando se muerte el labio, cejas no tan gruesas pero bien delineadas gracias a su tía. Su tono de piel es levemente bronceado, como la de su madre. Tiene un pequeño tatuaje en su dedo meñique, la frase 'Skycraper' en letra cursiva, se los hizo a los 16 años.Descripción psicológica.
Alocada y directa. Dos caracteristícas que más se destacan de la personalidad de Azul. Alocada porque siempre está bromeando, ya sea con sus amigas, hermanos o familia. La diversión nunca falta en su día al igual que la risa. Es alegre en todo momento y trata de alegrar a la gente aunque ella esté mal. Un sinónimo que las personas que la conocen dicen, es rara. Y es cierto, no se viste como una chica popular, no es tiene sentido de la moda, tampoco es que es cien por ciento sociable con la gente y a tampoco se comporta como una 'señorita', ya que tiene una sola hermana y es mayor de treinta años y no convivió mucho con ella, siempre tuvo que vivir entre hombres y se acostumbró a las cosas que sus hermanos hacían.
Directa debido a que es sincera y dice la verdad sin rodeos, puede ser fría, indiferente y hasta a veces cruel, pero ella no se da cuenta de cuanto sus palabras pueden lastimar. Orgullosa, grosera y peleadora. Sus virtudes más desagradables, no dará su brazo a torcer nunca, sería una humillación hacerlo. Insultos salen por su boca sin ningún remordimiento todos los días y no le importa decirlos, todos están acostumbrados a esa característica de ella. En una pelea, sabe conseguir la razón, porque si pelea es porque sabe que la tiene, también pelea si se meten con sus amigas, con su familia o con alguno de su círculo íntimo. Es muy leal a sus amistades y parentescos.
Se le hace difícil hacer nuevas amistades, más con las chicas, es muy insegura a la hora de conocer a alguien nuevo, pues siempre tuvo su círculo íntimo en orden y siempre fueron los mismos.
Celosa como ninguna otra, con sus hermanos y con su novio. No soporta que ninguna se le acerque, con sus hermanos porque siempre fue ella la 'bebé' y no le gusta que otra y le quite la atención. Puede ser muy brava, ya que querrá deshacerse de ella, y de alguna u otra forma lo logrará. Es muy protectora en ese sentido. Tampoco soporta que su novio hable con otras mientras está con ella, o que otras chicas le coqueteen fingiendo como que ella no existe. Cuándo un chico realmente le gusta, sabe ocultarlo muy bien y ni siquiera su mejor amiga puede darse cuenta, es una virtud para ella ya que es muy fácil atraer su atención, según como sea el chico.Les contaré una historia...
Fernando Romano era uno de los más reconocidos empresarios de todo Reino Unido y del mundo, su nuevo proyecto era asociarse con Mike Harries, dueño de Harries Corporation, para agrandar el comercio y ambas empresas obtener beneficios económicos. Todo el mundo periodístico hablaba de esa nueva unión entre dos empresas, por lo que la familia Romano y la familia Harries tuvieron una cena para conocerse en la casa de los Romanos. Si iban a trabajar juntos, debían saber uno más del otro.
Faltaban apenas unos minutos para que la familia Harries llegara al hogar de la familia Romano, los hijos de Fernando estaban todos reunidos en la sala de la casa para escuchar a su padre, quién les estaba dando indicaciones y consejos para que la cena sea un éxito. Todos vestidos elegantemente, la que más destacaba era Azul, quién estaba vestida con un hermoso vestido negro con detalles de encaje.
Cuándo el timbre suena, el hijo mayor, Christian, unos años mayor que Azul, abre la puerta encontrándose con la familia Harries, conformada por un matrimonio y tres hijos, un par de gemelos y una chica que aparentaba la misma edad de Azul. El mundo se detuvo en el momento que uno de los gemelos y ella cruzaron miradas, algo muy dentro de ellos cambió pero no imaginaron que sería atracción por el otro. Durante la cena, él la miraba muy a menudo en busca de su mirada, pero desgraciadamente esta se encontraba en su hermanito menor la mayoría del tiempo.
Luego de la cena, los jóvenes fueron retirados hacía la sala, su intención era hablarle, pero su hermano le había ganado. Finn comenzó a hablar con Azul y ambos se veían muy risueños juntos, por un pequeño minuto, a Jack se le cruzó la idea que Finn estuviera interesado en Azul, pero fue erróneo y ridículo ya que Finn solamente quería ser su amigo. Y así fue, con el pasar del tiempo, ella y Finn se convirtieron en grandes amigos, andaban todo el tiempo juntos, él iba a la casa de ella y ella a la de él. Eran los mejores amigos, Jack con el tiempo se acercó a Azul, desde la cena ninguno de los dos había admitido que algo dentro de ellos había cambiado y era un extraño sentimiento, un sentimiento llamado amor.
Él la amaba a ella y ella a él. Finn, conciente de lo que su hermano y su amiga sentían mutuamente, decidió jugar a “Cupido” y tratar de unirlos, con suerte funcionó. Azul y Jack estaban más relacionados.
Un día, Jack invitó a Azul a cenar a su casa, no había nadie salvo ella y él. El nerviosismo que él sentía al momento de confesarle todo lo que sentía era increíble, para alivio suyo Azul le confesó que ella sentía lo mismo y desde esa noche fueron más que amigos, esa noche establecieron oficialmente su relación.
Todo era de color de rosa, salían a menudo y su relación era más y más fuerte.
Por desgracia, ese mundo perfecto se derribó cuando después de dos años de relación. Mientras salía con su mejor amigo, Azul descubrió la razón por la cuál Jack había estado muy distante los últimos meses... Le estaba siendo infiel con una rubia ojos celestes, muy bonita. Finn no podía creerlo, ¿cómo era posible que su hermano le estuviera haciendo eso a su mejor amiga?
Los intentos fallidos de Jack para disculparse no fueron suficientes, el corazón de Azul ya estaba roto y no había forma de repararlo...Datos extras.
Gustos:
✖ Leer.
✖ La música.
✖ Comer.
✖ Ver la lluvia caer.
✖ La playa.
✖ El verano.
✖ Bailar.
✖ Dibujar.
✖ La navidad.
✖ Hacer locuras con sus hermanos.
Disgustos:
✖ La gente superficial y engreída.
✖ Qué se metan con su familia.
✖ Qué la critiquen sin conocerla.
✖ Qué la defrauden.
Enfermedades:
✖ Ninguna.✖Codes by Kitty Sykes.Codes by Kitty Sykes ☀ 2013 SC
- Cazadores de Sombras:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
- Simplemente no te quiere ♔:
- Capítulo CuatroJack Harries[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
El irritante sonido de la alarma de mi celular me despertó, obviamente no quería despertarme ya que estaba soñando algo hermoso y no quería que el puto despertador lo interrumpiera justo en la mejor parte. Así que suspendí la alarma para dentro de cinco minutos, tan sólo necesitaba cinco minutos y al fin podría terminar ese bendito sueño en el que obviamente, Leah aparecía. Pero cómo mi suerte es pésima, pero pésima, llegó mi hermano a los gritos y encima comenzó a saltar en mi cama. ¿Infantil? Eso le quedaba corto a Finn.
De mal humor, me senté en mi cama y lo observé, él tenía una sonrisa de oreja a oreja, como todas las mañanas, mientras que yo, estaba que parecía un muerto viviente, cosa que mi gemelo no tardó en notar y lo tomó como un chiste. Me vengué, obviamente, ¿cómo? Con mi pie, lo empujé cosa de que cayera de la cama, ahora el que reía era yo, así era nuestra relación de gemelos. Uno disfrutaba el sufrimiento del otro. ¿Demasiado tierno, no? Al levantarse del suelo, mi hermano estaba sobándose el trasero, fue lo primero que chocó contra el suelo. Mañanas así eran las que ponían en duda nuestra madurez y normalidad. Y no solo mañanas, hay tardes en las que a Finn se le ocurre andar solamente con un bóxer o noches en las que yo decido ver películas de Disney. Nuestros padres siempre nos regañaron por hacer cosas por el estilo, por eso es que Finn siempre duda de ser de esta familia, ya que ellos son muy... maduros y nosotros unos pendejos que casi están por terminar la secundaria pero tienen la edad mental de un niño de seis años. Igual, no somos los únicos, nuestros amigos no están muy lejos de la palabra "infantil".
—¡Finn y Jack, vengan a desayunar ahora mismo! —gritó nuestra hermosa madre, nótese el sarcasmo. Mi hermano rió y se dirigió a su habitación para cambiarse ya que todavía estaba en pijamas. Una vez que salió, me levanté y me dirigí hacía el baño. Me lavé la cara y cepillé mis dientes, al fin y al cabo tan mal no estaba. Volví a mi habitación y me vestí con unos jeans ajustados, una remera negra y encima una camisa azul a cuadros arremangada hasta los codos, unas zapatillas de marca DC negras y un gorro de lana bordo. Una vez listo, tomé mi mochila y bajé encontrándome con mi gemelo vestido casi igual que yo solamente que con una camisa roja y sin el gorro, y mi hermana menor de trece años, toda una dulzura cuando quiere—.
—Buenos días. —saludé a mi madre con un beso en la mejilla y despeiné el cabello de mi hermana, quien como venganza, chilló algo que me no me gustó para nada—.
—Buenos días, Jack. ¿Leah todavía te sigue ignorando gracias a su sexy novio? —retiro lo dicho, nunca es una dulzura. ¡Es una bruja!—.
—¿Y tú Lou? ¿Andy te sigue tratando para el culo? —golpe bajo. Le había ganado, tenía que admitirlo—.
—¡Jack y Lou! Dejen de pelear. Siempre ustedes se tienen que pelear.
—Si, porqué Finn siempre está comiendo.
—Entiéndelo. Amo la comida. —mencionó el susodicho con la boca llena de su desayuno, rodé los ojos y palmeé su espalda—.
—Claro, Finny. Claro… —al sentarme para desayunar, Finn ya había terminado el suyo y como Lou había dejado empezó a comer el de ella—.
—Qué estómago tienes, hijo —comentó mi madre riendo. De pronto sentimos una bocina, era Grant de seguro—.
—¡Vamos, Finn!
—¡Ya voy, ya voy! Listo, vamos —dicho esto, saludamos a nuestra madre y salimos para encontrarnos con el auto de Grant. Harry venía de acompañante y Justin en el asiento trasero, yo quedé entremedio de mi hermano y Bieber. Una vez listos emprendimos rumbo hacía el colegio—.
En el camino estuvimos hablando animadamente entre nosotros, haciendo bromas y toda la cosa. Yo a cada rato miraba mi celular, hasta que recibí un mensaje de Niall, diciéndome que estaba con Louis y Logan en la casa de Zayn, se los comuniqué a los chicos pero solamente recibí un grito de Harry y la sugerencia de Justin, “mejor diles que llamen a Ian o Liam y que alguno vaya por ellos”. Y así lo hice, le respondí el mensaje a Niall diciéndole las palabras de Justin.
Al llegar al colegio, bajamos todos inmediatamente. Estábamos ansiosos por verlas, yo por ver a mi hermosa Leah… Es que… Era hermosa. Más que hermosa, ¡perfecta! Sus ojos marrones, su piel levemente morena, su cabello castaño oscuro pero con la mitad de rubio. La hacía más bella, tenía que admitirlo, el rubio le asentaba demasiado bien pero su castaño oscuro natural me podía.
—Oigan, Harry, Grant, miren quienes vienen por ahí —susurré al ver venir a Rachel y Michelle. Con Justin y Finn nos dirigimos adentro ya que esos dos se fueron como imbéciles enamorados detrás de ellas—.
—¿Qué tanto piensas, Jack? —Preguntó Justin mirándome curioso, Finn rió y se apresuró a responder por mí—.
—¿En qué más va a pensar? En Leah.
Mi mirada solamente se dirigió automáticamente a la chica que me roba los sueños cada noche, iba con Amelia, la enamorada de Ian. Iban riendo animadamente, iba vestida como ella solo sabe, con unos jeans negros ajustados, una blusa mangas cortas de color gris con un triángulo en el centro, una chaqueta negra estilo roquera, unas zapatillas negras de marca Supra y un gorro de lana negro. Estaba hermosa. Amelia entró al baño mientras que Leah siguió camino hacía el jardín, debía hablar con ella.
—Chicos, ya vengo. —dije antes de irme corriendo detrás de ella, al estar casi cerca mencioné su nombre y ella volteó—. Hola Leah, ¿cómo estás?
—Hola Jack, bien gracias por preguntar —sonrió, por primera vez era amable conmigo—. Oye, tengo que irme, ¿si? Nos vemos. —dio media vuelta y comenzó a caminar, yo la seguí— Harries, ya basta.
—¿Basta de qué? ¿De quererte? Imposible —dije en tono coqueto y tierno a la vez, suspiró cansada, hacía eso cuando comenzaba a enojarse—.
—Hablo de seguirme a todos lados, ya basta. No saldré contigo ni pienso hacerlo. No quiero nada contigo ¿así o más claro te lo digo? —retomó su marcha pero no me rendí a pesar de sus palabras y seguí caminando junto a ella—.
—¿Por qué eres así conmigo? Yo solamente quiero hablarte, pero tú siempre me esquivas. ¿Te he hecho algo? ¿Me odias acaso?
—Soy así porqué no quiero problemas con Christian. No, no me has hecho nada solamente me estás cagando la relación con mi novio. Y no te odio, solamente me molesta que hagas esto.
—¿Hacer qué? ¿Querer estar contigo? ¿Quererte más que ese imbécil que tienes por novio? Te quiero, Leah. ¿Por qué no puedes entender eso?
—¡Ya basta! ¡Déjame en paz, Jack! Tú y yo sabemos bien que solo seré otra más en la lista. Y Christian no es un imbécil, es mi novio y lo amo. ¿Por qué no puedes entender eso?
—¡Porqué puedo ser mejor que él!
—A ver si te queda claro de una puta vez, ¿okay? Tengo novio y lo amo. —no pude decir nada, solamente apreté los labios tratando de esconder la bronca que tenía. Asentí triste y me di media vuelta para volver con los chicos—.
La amo más que a ninguna otra, es la única a la que quiero conmigo, no quiero a ninguna otra. Pero me rechaza, no me habla, me ignora, me humilla, soporto todo de ella, pero las ganas de conquistarla se me van con cada mal gesto de ella, pareciera como si me odiara… Por ella bajaría la luna, pero sé que es capaz de rechazarme igual. Podría gritarle al mundo que la amo, regalarle todas las flores, los bombones y regalos del mundo pero no, prefiere a ese imbécil de Christian Beadles que solo la usa, ¿qué no se da cuenta? La está usando para hacerse más popular, pero no, ella prefiere a uno que no la valora y la toma como un objeto antes que un tipo que la ame de verdad.
Miles de veces traté de conquistarla, miles de veces fracasé. Traté de ser su amigo pero fracasé en eso también, intento ser un pendejo calentón pero fallo peor que antes, intento ser un completo romántico pero fracaso. No hay oportunidad, fracaso de cualquier manera, de ninguna forma logro obtener un poquitito de su amor.
Ese idiota la humilla, la ignora y la trata mal, pero claro, a ese si le da su amor.
Si supiera cuanto estoy sufriendo al saber que ni siquiera tengo un poco de su amor, si supiera cuanto me duele verla llorar por él cuando yo me muero por hacerla feliz, si supiera como me siento al saber que para él es una entre un millón mientras para mí ella es mi mundo. Pero no, soy invisible para ella. Sus ojos no me ven.
Si tan solo supiera cuanto la amo, que quiero casarme con ella, tener hijos con ella y planear un futuro junto a ella, quizá tendría algo de su atención.
Faltaban pocos metros para llegar hacía dónde estaba mi hermano cuando todo el edificio se inunda de un irritante sonido, el timbre. Me tocaba historia junto a Justin, Ian, Logan y Finn. No tenía ánimos de ir a esa clase, en especial porque el profesor era un maldito viejo amargado que me tenía entre ceja y ceja. Pero no tenía opción, si no iba a clases dejaría en claro que sus palabras me habían afectado. Aunque así sea…
Al llegar junto a los chicos decidí olvidarme de ella un rato y disfrutar de los maravillosos amigos que tenían. Okay, eso sonó algo cursi, pero es que solamente ella me convertía en un idiota enamorado. Me senté en mi respectivo lugar junto a Brian, mellizo de Leah. Él sabe lo que yo siento por su hermana, pero trata de evitar el tema, según él le es incómodo estar con nosotros cuando hablan sobre su hermana melliza.
—Hola, Brian —saludé a mi compañero de banco, él sonrió y me devolvió el saludo. El salón era un caos, gritos y más gritos. Gente parada encima de las mesas, cantando y otros simplemente —como nosotros— que estaban mirando divertidos todo la escena—.
Estuvimos mirando todo ese caos un rato mientras hablábamos entre nosotros tranquilamente, hasta que sentimos que un compañero grita “ahí viene el profesor” y todos rápidamente se acomodan en sus respectivos asientos —incluyéndonos— para luego parecer inocentes adolescentes que estaban tranquilos charlando entre ellos mientras esperaban al profesor.
—Los gritos se escuchaban hasta dirección. No pretendan ser ángeles, demonios vivientes —comentó divertido el profesor de historia, todos reímos ante su comentario. Siempre nos llamaba “demonios vivientes”, pero es muy buena onda cuando quiere. Casi todos los viernes nos da hora libre mientras él corrige exámenes—. De acuerdo, chicos aún no he corregido los exámenes de ayer, pero eso no quiere decir que tendrán hora libre. Leerán las páginas 260 y 261, y luego realizarán las actividades de la página 261 para la próxima clase, si es que no llegan. Pero de terminar, me las dejan encima del escritorio. Pueden trabajar con el compañero...
Fue lo último que escuchamos decir al profesor ya que todos sacamos nuestros libros y empezamos a leer los textos sobre el descubrimiento de la conquista de América. Era demasiado aburrido el tema, Brian decidió hacerlo solo, por lo que no me quedó otra opción que hacerla individualmente.
Luego de casi cuarenta y cinco minutos, terminé las actividades, que eran cuatro preguntas. Cuatro míseras preguntas que pedían una respuesta completa.
Al terminarlas, las revisé para ver si tenía que corregir algo y no, estaba todo bien, entonces me paré y dejé las hojas sobre el escritorio. Brian, aún no terminaba por lo que me senté al fondo de todo para no distraerlo ya que cuando termino me pongo insoportable y empiezo a hablar de cualquier cosa. El segundo en terminar fue mi hermano, quién al notar que estaba sentado detrás de él y no delante como siempre, me sentó conmigo. Comenzamos a charlar sobre la cena que teníamos con unos socios de papá. Al querer darnos cuenta, todo el salón había terminado. Mucho tiempo libre no pudimos tener, apenas quince minutos y luego tocó el timbre. Todos salieron desperados, menos yo, no tenía prisa y sorprendentemente, ni ánimos de ver a Leah, realmente las ganas se me estaban agotando cada vez más. Creo que eso es lo que ella quiero, ¿no? Que la deje de molestar. No prometo nada, pero presiento que si bien la seguiré amando, no la perseguiré tanto como vengo haciendo. Quizá así, puedo tener aunque sea un poquito de su amor, con un poquito me conformo.
Invitado
Invitado
Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
FatiiDirectioner escribió:"No doy segundas oportunidades"
- Mi ficha fichosa:
Azul Stephanie Romano
► Azul Romano.► Azu, Stephy.► 18 años.► Heterosexual.► Argentina.► Jack Harries.► PB: Kylie Jenner.
Descripción física.
Estatura promedio, mide apróximadamente 1.65. Su cabello es de color castaño, largo hasta un poco más debajo de la cintura y lacio desde las raíces y se va haciendo ondulado hasta las puntas. Sus ojos son de un color café oscuro acompañados de unas largas y rizadas pestañas, que resaltan más sus ojos cuando se coloca rimel. No posee un cuerpo de modelo pero está conforme con su físico. Pechos de tamaño normal, trasero redondo y levantado, una de las cosas más llamativas de su cuerpo, y una de las que más le gustan. Piernas torneadas, largas y bien cuidadas. Nariz recta y labios carnosos de un tono rosado natural que se potencia más cuando se muerte el labio, cejas no tan gruesas pero bien delineadas gracias a su tía. Su tono de piel es levemente bronceado, como la de su madre. Tiene un pequeño tatuaje en su dedo meñique, la frase 'Skycraper' en letra cursiva, se los hizo a los 16 años. Descripción psicológica.
Alocada y directa. Dos caracteristícas que más se destacan de la personalidad de Azul. Alocada porque siempre está bromeando, ya sea con sus amigas, hermanos o familia. La diversión nunca falta en su día al igual que la risa. Es alegre en todo momento y trata de alegrar a la gente aunque ella esté mal. Un sinónimo que las personas que la conocen dicen, es rara. Y es cierto, no se viste como una chica popular, no es tiene sentido de la moda, tampoco es que es cien por ciento sociable con la gente y a tampoco se comporta como una 'señorita', ya que tiene una sola hermana y es mayor de treinta años y no convivió mucho con ella, siempre tuvo que vivir entre hombres y se acostumbró a las cosas que sus hermanos hacían.
Directa debido a que es sincera y dice la verdad sin rodeos, puede ser fría, indiferente y hasta a veces cruel, pero ella no se da cuenta de cuanto sus palabras pueden lastimar. Orgullosa, grosera y peleadora. Sus virtudes más desagradables, no dará su brazo a torcer nunca, sería una humillación hacerlo. Insultos salen por su boca sin ningún remordimiento todos los días y no le importa decirlos, todos están acostumbrados a esa característica de ella. En una pelea, sabe conseguir la razón, porque si pelea es porque sabe que la tiene, también pelea si se meten con sus amigas, con su familia o con alguno de su círculo íntimo. Es muy leal a sus amistades y parentescos.
Se le hace difícil hacer nuevas amistades, más con las chicas, es muy insegura a la hora de conocer a alguien nuevo, pues siempre tuvo su círculo íntimo en orden y siempre fueron los mismos.
Celosa como ninguna otra, con sus hermanos y con su novio. No soporta que ninguna se le acerque, con sus hermanos porque siempre fue ella la 'bebé' y no le gusta que otra y le quite la atención. Puede ser muy brava, ya que querrá deshacerse de ella, y de alguna u otra forma lo logrará. Es muy protectora en ese sentido. Tampoco soporta que su novio hable con otras mientras está con ella, o que otras chicas le coqueteen fingiendo como que ella no existe. Cuándo un chico realmente le gusta, sabe ocultarlo muy bien y ni siquiera su mejor amiga puede darse cuenta, es una virtud para ella ya que es muy fácil atraer su atención, según como sea el chico.Les contaré una historia...
Fernando Romano era uno de los más reconocidos empresarios de todo Reino Unido y del mundo, su nuevo proyecto era asociarse con Mike Harries, dueño de Harries Corporation, para agrandar el comercio y ambas empresas obtener beneficios económicos. Todo el mundo periodístico hablaba de esa nueva unión entre dos empresas, por lo que la familia Romano y la familia Harries tuvieron una cena para conocerse en la casa de los Romanos. Si iban a trabajar juntos, debían saber uno más del otro.
Faltaban apenas unos minutos para que la familia Harries llegara al hogar de la familia Romano, los hijos de Fernando estaban todos reunidos en la sala de la casa para escuchar a su padre, quién les estaba dando indicaciones y consejos para que la cena sea un éxito. Todos vestidos elegantemente, la que más destacaba era Azul, quién estaba vestida con un hermoso vestido negro con detalles de encaje.
Cuándo el timbre suena, el hijo mayor, Christian, unos años mayor que Azul, abre la puerta encontrándose con la familia Harries, conformada por un matrimonio y tres hijos, un par de gemelos y una chica que aparentaba la misma edad de Azul. El mundo se detuvo en el momento que uno de los gemelos y ella cruzaron miradas, algo muy dentro de ellos cambió pero no imaginaron que sería atracción por el otro. Durante la cena, él la miraba muy a menudo en busca de su mirada, pero desgraciadamente esta se encontraba en su hermanito menor la mayoría del tiempo.
Luego de la cena, los jóvenes fueron retirados hacía la sala, su intención era hablarle, pero su hermano le había ganado. Finn comenzó a hablar con Azul y ambos se veían muy risueños juntos, por un pequeño minuto, a Jack se le cruzó la idea que Finn estuviera interesado en Azul, pero fue erróneo y ridículo ya que Finn solamente quería ser su amigo. Y así fue, con el pasar del tiempo, ella y Finn se convirtieron en grandes amigos, andaban todo el tiempo juntos, él iba a la casa de ella y ella a la de él. Eran los mejores amigos, Jack con el tiempo se acercó a Azul, desde la cena ninguno de los dos había admitido que algo dentro de ellos había cambiado y era un extraño sentimiento, un sentimiento llamado amor.
Él la amaba a ella y ella a él. Finn, conciente de lo que su hermano y su amiga sentían mutuamente, decidió jugar a “Cupido” y tratar de unirlos, con suerte funcionó. Azul y Jack estaban más relacionados.
Un día, Jack invitó a Azul a cenar a su casa, no había nadie salvo ella y él. El nerviosismo que él sentía al momento de confesarle todo lo que sentía era increíble, para alivio suyo Azul le confesó que ella sentía lo mismo y desde esa noche fueron más que amigos, esa noche establecieron oficialmente su relación.
Todo era de color de rosa, salían a menudo y su relación era más y más fuerte.
Por desgracia, ese mundo perfecto se derribó cuando después de dos años de relación. Mientras salía con su mejor amigo, Azul descubrió la razón por la cuál Jack había estado muy distante los últimos meses... Le estaba siendo infiel con una rubia ojos celestes, muy bonita. Finn no podía creerlo, ¿cómo era posible que su hermano le estuviera haciendo eso a su mejor amiga?
Los intentos fallidos de Jack para disculparse no fueron suficientes, el corazón de Azul ya estaba roto y no había forma de repararlo...
Datos extras.
Gustos:
Leer.
La música.
Comer.
Ver la lluvia caer.
La playa.
El verano.
Bailar.
Dibujar.
La navidad.
Hacer locuras con sus hermanos.
Disgustos:
La gente superficial y engreída.
Qué se metan con su familia.
Qué la critiquen sin conocerla.
Qué la defrauden.
Enfermedades:
Ninguna.Codes by Kitty Sykes.Codes by Kitty Sykes 2013 SC
- Cazadores de Sombras:
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- Simplemente no te quiere ♔:
Capítulo CuatroJack Harries[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
El irritante sonido de la alarma de mi celular me despertó, obviamente no quería despertarme ya que estaba soñando algo hermoso y no quería que el puto despertador lo interrumpiera justo en la mejor parte. Así que suspendí la alarma para dentro de cinco minutos, tan sólo necesitaba cinco minutos y al fin podría terminar ese bendito sueño en el que obviamente, Leah aparecía. Pero cómo mi suerte es pésima, pero pésima, llegó mi hermano a los gritos y encima comenzó a saltar en mi cama. ¿Infantil? Eso le quedaba corto a Finn.
De mal humor, me senté en mi cama y lo observé, él tenía una sonrisa de oreja a oreja, como todas las mañanas, mientras que yo, estaba que parecía un muerto viviente, cosa que mi gemelo no tardó en notar y lo tomó como un chiste. Me vengué, obviamente, ¿cómo? Con mi pie, lo empujé cosa de que cayera de la cama, ahora el que reía era yo, así era nuestra relación de gemelos. Uno disfrutaba el sufrimiento del otro. ¿Demasiado tierno, no? Al levantarse del suelo, mi hermano estaba sobándose el trasero, fue lo primero que chocó contra el suelo. Mañanas así eran las que ponían en duda nuestra madurez y normalidad. Y no solo mañanas, hay tardes en las que a Finn se le ocurre andar solamente con un bóxer o noches en las que yo decido ver películas de Disney. Nuestros padres siempre nos regañaron por hacer cosas por el estilo, por eso es que Finn siempre duda de ser de esta familia, ya que ellos son muy... maduros y nosotros unos pendejos que casi están por terminar la secundaria pero tienen la edad mental de un niño de seis años. Igual, no somos los únicos, nuestros amigos no están muy lejos de la palabra "infantil".
—¡Finn y Jack, vengan a desayunar ahora mismo! —gritó nuestra hermosa madre, nótese el sarcasmo. Mi hermano rió y se dirigió a su habitación para cambiarse ya que todavía estaba en pijamas. Una vez que salió, me levanté y me dirigí hacía el baño. Me lavé la cara y cepillé mis dientes, al fin y al cabo tan mal no estaba. Volví a mi habitación y me vestí con unos jeans ajustados, una remera negra y encima una camisa azul a cuadros arremangada hasta los codos, unas zapatillas de marca DC negras y un gorro de lana bordo. Una vez listo, tomé mi mochila y bajé encontrándome con mi gemelo vestido casi igual que yo solamente que con una camisa roja y sin el gorro, y mi hermana menor de trece años, toda una dulzura cuando quiere—.
—Buenos días. —saludé a mi madre con un beso en la mejilla y despeiné el cabello de mi hermana, quien como venganza, chilló algo que me no me gustó para nada—.
—Buenos días, Jack. ¿Leah todavía te sigue ignorando gracias a su sexy novio? —retiro lo dicho, nunca es una dulzura. ¡Es una bruja!—.
—¿Y tú Lou? ¿Andy te sigue tratando para el culo? —golpe bajo. Le había ganado, tenía que admitirlo—.
—¡Jack y Lou! Dejen de pelear. Siempre ustedes se tienen que pelear.
—Si, porqué Finn siempre está comiendo.
—Entiéndelo. Amo la comida. —mencionó el susodicho con la boca llena de su desayuno, rodé los ojos y palmeé su espalda—.
—Claro, Finny. Claro… —al sentarme para desayunar, Finn ya había terminado el suyo y como Lou había dejado empezó a comer el de ella—.
—Qué estómago tienes, hijo —comentó mi madre riendo. De pronto sentimos una bocina, era Grant de seguro—.
—¡Vamos, Finn!
—¡Ya voy, ya voy! Listo, vamos —dicho esto, saludamos a nuestra madre y salimos para encontrarnos con el auto de Grant. Harry venía de acompañante y Justin en el asiento trasero, yo quedé entremedio de mi hermano y Bieber. Una vez listos emprendimos rumbo hacía el colegio—.
En el camino estuvimos hablando animadamente entre nosotros, haciendo bromas y toda la cosa. Yo a cada rato miraba mi celular, hasta que recibí un mensaje de Niall, diciéndome que estaba con Louis y Logan en la casa de Zayn, se los comuniqué a los chicos pero solamente recibí un grito de Harry y la sugerencia de Justin, “mejor diles que llamen a Ian o Liam y que alguno vaya por ellos”. Y así lo hice, le respondí el mensaje a Niall diciéndole las palabras de Justin.
Al llegar al colegio, bajamos todos inmediatamente. Estábamos ansiosos por verlas, yo por ver a mi hermosa Leah… Es que… Era hermosa. Más que hermosa, ¡perfecta! Sus ojos marrones, su piel levemente morena, su cabello castaño oscuro pero con la mitad de rubio. La hacía más bella, tenía que admitirlo, el rubio le asentaba demasiado bien pero su castaño oscuro natural me podía.
—Oigan, Harry, Grant, miren quienes vienen por ahí —susurré al ver venir a Rachel y Michelle. Con Justin y Finn nos dirigimos adentro ya que esos dos se fueron como imbéciles enamorados detrás de ellas—.
—¿Qué tanto piensas, Jack? —Preguntó Justin mirándome curioso, Finn rió y se apresuró a responder por mí—.
—¿En qué más va a pensar? En Leah.
Mi mirada solamente se dirigió automáticamente a la chica que me roba los sueños cada noche, iba con Amelia, la enamorada de Ian. Iban riendo animadamente, iba vestida como ella solo sabe, con unos jeans negros ajustados, una blusa mangas cortas de color gris con un triángulo en el centro, una chaqueta negra estilo roquera, unas zapatillas negras de marca Supra y un gorro de lana negro. Estaba hermosa. Amelia entró al baño mientras que Leah siguió camino hacía el jardín, debía hablar con ella.
—Chicos, ya vengo. —dije antes de irme corriendo detrás de ella, al estar casi cerca mencioné su nombre y ella volteó—. Hola Leah, ¿cómo estás?
—Hola Jack, bien gracias por preguntar —sonrió, por primera vez era amable conmigo—. Oye, tengo que irme, ¿si? Nos vemos. —dio media vuelta y comenzó a caminar, yo la seguí— Harries, ya basta.
—¿Basta de qué? ¿De quererte? Imposible —dije en tono coqueto y tierno a la vez, suspiró cansada, hacía eso cuando comenzaba a enojarse—.
—Hablo de seguirme a todos lados, ya basta. No saldré contigo ni pienso hacerlo. No quiero nada contigo ¿así o más claro te lo digo? —retomó su marcha pero no me rendí a pesar de sus palabras y seguí caminando junto a ella—.
—¿Por qué eres así conmigo? Yo solamente quiero hablarte, pero tú siempre me esquivas. ¿Te he hecho algo? ¿Me odias acaso?
—Soy así porqué no quiero problemas con Christian. No, no me has hecho nada solamente me estás cagando la relación con mi novio. Y no te odio, solamente me molesta que hagas esto.
—¿Hacer qué? ¿Querer estar contigo? ¿Quererte más que ese imbécil que tienes por novio? Te quiero, Leah. ¿Por qué no puedes entender eso?
—¡Ya basta! ¡Déjame en paz, Jack! Tú y yo sabemos bien que solo seré otra más en la lista. Y Christian no es un imbécil, es mi novio y lo amo. ¿Por qué no puedes entender eso?
—¡Porqué puedo ser mejor que él!
—A ver si te queda claro de una puta vez, ¿okay? Tengo novio y lo amo. —no pude decir nada, solamente apreté los labios tratando de esconder la bronca que tenía. Asentí triste y me di media vuelta para volver con los chicos—.
La amo más que a ninguna otra, es la única a la que quiero conmigo, no quiero a ninguna otra. Pero me rechaza, no me habla, me ignora, me humilla, soporto todo de ella, pero las ganas de conquistarla se me van con cada mal gesto de ella, pareciera como si me odiara… Por ella bajaría la luna, pero sé que es capaz de rechazarme igual. Podría gritarle al mundo que la amo, regalarle todas las flores, los bombones y regalos del mundo pero no, prefiere a ese imbécil de Christian Beadles que solo la usa, ¿qué no se da cuenta? La está usando para hacerse más popular, pero no, ella prefiere a uno que no la valora y la toma como un objeto antes que un tipo que la ame de verdad.
Miles de veces traté de conquistarla, miles de veces fracasé. Traté de ser su amigo pero fracasé en eso también, intento ser un pendejo calentón pero fallo peor que antes, intento ser un completo romántico pero fracaso. No hay oportunidad, fracaso de cualquier manera, de ninguna forma logro obtener un poquitito de su amor.
Ese idiota la humilla, la ignora y la trata mal, pero claro, a ese si le da su amor.
Si supiera cuanto estoy sufriendo al saber que ni siquiera tengo un poco de su amor, si supiera cuanto me duele verla llorar por él cuando yo me muero por hacerla feliz, si supiera como me siento al saber que para él es una entre un millón mientras para mí ella es mi mundo. Pero no, soy invisible para ella. Sus ojos no me ven.
Si tan solo supiera cuanto la amo, que quiero casarme con ella, tener hijos con ella y planear un futuro junto a ella, quizá tendría algo de su atención.
Faltaban pocos metros para llegar hacía dónde estaba mi hermano cuando todo el edificio se inunda de un irritante sonido, el timbre. Me tocaba historia junto a Justin, Ian, Logan y Finn. No tenía ánimos de ir a esa clase, en especial porque el profesor era un maldito viejo amargado que me tenía entre ceja y ceja. Pero no tenía opción, si no iba a clases dejaría en claro que sus palabras me habían afectado. Aunque así sea…
Al llegar junto a los chicos decidí olvidarme de ella un rato y disfrutar de los maravillosos amigos que tenían. Okay, eso sonó algo cursi, pero es que solamente ella me convertía en un idiota enamorado. Me senté en mi respectivo lugar junto a Brian, mellizo de Leah. Él sabe lo que yo siento por su hermana, pero trata de evitar el tema, según él le es incómodo estar con nosotros cuando hablan sobre su hermana melliza.
—Hola, Brian —saludé a mi compañero de banco, él sonrió y me devolvió el saludo. El salón era un caos, gritos y más gritos. Gente parada encima de las mesas, cantando y otros simplemente —como nosotros— que estaban mirando divertidos todo la escena—.
Estuvimos mirando todo ese caos un rato mientras hablábamos entre nosotros tranquilamente, hasta que sentimos que un compañero grita “ahí viene el profesor” y todos rápidamente se acomodan en sus respectivos asientos —incluyéndonos— para luego parecer inocentes adolescentes que estaban tranquilos charlando entre ellos mientras esperaban al profesor.
—Los gritos se escuchaban hasta dirección. No pretendan ser ángeles, demonios vivientes —comentó divertido el profesor de historia, todos reímos ante su comentario. Siempre nos llamaba “demonios vivientes”, pero es muy buena onda cuando quiere. Casi todos los viernes nos da hora libre mientras él corrige exámenes—. De acuerdo, chicos aún no he corregido los exámenes de ayer, pero eso no quiere decir que tendrán hora libre. Leerán las páginas 260 y 261, y luego realizarán las actividades de la página 261 para la próxima clase, si es que no llegan. Pero de terminar, me las dejan encima del escritorio. Pueden trabajar con el compañero...
Fue lo último que escuchamos decir al profesor ya que todos sacamos nuestros libros y empezamos a leer los textos sobre el descubrimiento de la conquista de América. Era demasiado aburrido el tema, Brian decidió hacerlo solo, por lo que no me quedó otra opción que hacerla individualmente.
Luego de casi cuarenta y cinco minutos, terminé las actividades, que eran cuatro preguntas. Cuatro míseras preguntas que pedían una respuesta completa.
Al terminarlas, las revisé para ver si tenía que corregir algo y no, estaba todo bien, entonces me paré y dejé las hojas sobre el escritorio. Brian, aún no terminaba por lo que me senté al fondo de todo para no distraerlo ya que cuando termino me pongo insoportable y empiezo a hablar de cualquier cosa. El segundo en terminar fue mi hermano, quién al notar que estaba sentado detrás de él y no delante como siempre, me sentó conmigo. Comenzamos a charlar sobre la cena que teníamos con unos socios de papá. Al querer darnos cuenta, todo el salón había terminado. Mucho tiempo libre no pudimos tener, apenas quince minutos y luego tocó el timbre. Todos salieron desperados, menos yo, no tenía prisa y sorprendentemente, ni ánimos de ver a Leah, realmente las ganas se me estaban agotando cada vez más. Creo que eso es lo que ella quiero, ¿no? Que la deje de molestar. No prometo nada, pero presiento que si bien la seguiré amando, no la perseguiré tanto como vengo haciendo. Quizá así, puedo tener aunque sea un poquito de su amor, con un poquito me conformo.
Ficha Aceptada.
Dios Fati, tu ficha me encantó en verdad ¡Y vás por Jack! asdfghjklñ, morí. Asumí que vas por la chica divertida, pero dime si estoy equivocada. Obviamente estás participando. Me encantó el capítulo, btw. Leeré la novela. ¿Es colectiva cierto? Creo que ya la había visto por allí. Bueno, eso es todo, suerte linda:).
Invitado
Invitado
Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
Chicas, si alguien tiene que editar algo o lo que sea, tienen hasta mañana porque el miércoles llegaré a cerrar audiciones. Sólo como recordatorio. Besos a todas:).
Invitado
Invitado
Re: Second Chances. | N.C. | Audiciones Cerradas.
Audicioones Oficialmente Cerradas.
Chicas, las audiciones están cerradas y mañana por ahí de las 6p.m. horario de México tendrán los resultados puestos. No sé bien cuantas chicas escogeré, quiero decir, podría escoger a alguien más a parte de las que coloqué en los personajes, pero eso dependerá de que tanto me gusten sus fichas. Suerte a todas y gracias por darse el tiempo de audicionar:) Besos xx
Invitado
Invitado
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