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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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~Treacherous~ [Con Harry Styles]
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
que si me ha gustado me encanta te quiero seguila cuando puedas
vikki_directioners
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Madre mia me ha encantado el maraton por dios es que ha estado genial siguela no me dejes asi un beso :)
Alex Love
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Síguela por favor la verdad me encanta y quiero cortar le las pelotas al mendigo Alex de mierda, por favoooooor síguela y te amare mas de lo que te amo ahora por favor, por que si no Elmo Te Viola ¬¬ así que ya tu sabe si no la sigues
NialSeComioMiNombreAlexa
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
BUENISIMOS CAAPS!! Perdón x no haber comentado antes... SIGUELA PRONTO!!
kISSES XXOXO
kISSES XXOXO
Anna Tomlinson
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Holoooo! Yo aquí molestándote de nuevo :3 Lo sé, lo sé.. Soy re malota :c Ame toodoo!! Tu nove es PER-FECTA! Síguela ñ_ñ Mi Pony ya me dijo que no te amenace con él porque no te hará daño.. Así que.. ALÉGRATE! Okya :c Hablo mushio al dope asdhfhgf Síguela c: Beshotote !! (= :bye: :bye: :bye: :bye: :bye: :bye:
~PotatoSexy~
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Oooh! Vamos sube cap T_T Hace mucho que no subes, anda no seas malota :c Hace.. Hace.. Aguarda que me fijo en mi calendario..
Hace 9 días que no subes Cap :lloro: T_T Shoroo! Sube :C O le digo a Kevin que te haga popo encima :C Okno xdd Pero ya, en serio sube pronto T_T
Hace 9 días que no subes Cap :lloro: T_T Shoroo! Sube :C O le digo a Kevin que te haga popo encima :C Okno xdd Pero ya, en serio sube pronto T_T
~PotatoSexy~
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Y-Y-Y-Y-Y Te dejo otro mensajitu porque me gusta molestar *U* Okya ._.
~PotatoSexy~
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Te dejo mensajitus de todos colores.. Soy tan ruda (~*-*)~ ~(*-*~)
~PotatoSexy~
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
¡Me alegro de que te haya gustado!vikki_directioners escribió:que si me ha gustado me encanta te quiero seguila cuando puedas
Ahora mismo la sigo.
Un beso <3
¡Muchas gracias!Alex Love escribió:Madre mia me ha encantado el maraton por dios es que ha estado genial siguela no me dejes asi un beso :)
Ahora la sigo.
Otro beso para ti <3
¡Muchísimas gracias!flor-i escribió:MUUUUUUUUUUUUUUY PERO MUY BUENO!
SEGUILA ME ENCANTA!
Ahora subo capítulo.
Un beso <3
Awww... Muchas gacias, cielo.Nath C escribió:amo esta novela espero la sigas pronto :33333
Ahora la sigo :)
¡Matemos a Álex! OcnoNialSeComioMiNombreAlexa escribió: Síguela por favor la verdad me encanta y quiero cortar le las pelotas al mendigo Alex de mierda, por favoooooor síguela y te amare mas de lo que te amo ahora por favor, por que si no Elmo Te Viola ¬¬ así que ya tu sabe si no la sigues
Awww... Pues me vas a amar más porque voy a seguirla ahora mismo. Aleja a Elmo de mí xD
Un besazo
¡Te extrañé!Anna Tomlinson escribió:linson"][size=19]BUENISIMOS CAAPS!! Perdón x no haber comentado antes... SIGUELA PRONTO!!
kISSES XXOXO
Ahora mismo la sigo.
Un beso <3
No molestas cielo, never ever, like ever.~PotatoSexy~ escribió:Holoooo! Yo aquí molestándote de nuevo :3 Lo sé, lo sé.. Soy re malota :c Ame toodoo!! Tu nove es PER-FECTA! Síguela ñ_ñ Mi Pony ya me dijo que no te amenace con él porque no te hará daño.. Así que.. ALÉGRATE! Okya :c Hablo mushio al dope asdhfhgf Síguela c: Beshotote !! (= :bye: :bye::bye::bye::bye::bye:
Es PER-FECTA como Liam Ocno, ni en mis mejores sueños.
¡Bieeen! ¡Tu poni no me matará! Nah, habla lo que quieras.
Ahora subo.
Un besazo <33
Ahora subo, honey, me encanta que me acoses.~PotatoSexy~ escribió:Oooh! Vamos sube cap T_T Hace mucho que no subes, anda no seas malota :c Hace.. Hace.. Aguarda que me fijo en mi calendario..
Hace 9 días que no subes Cap :lloro: T_T Shoroo! Sube :C O le digo a Kevin que te haga popo encima :C Okno xdd Pero ya, en serio sube pronto T_T
~PotatoSexy~ escribió:Y-Y-Y-Y-Y Te dejo otro mensajitu porque me gusta molestar *U* Okya ._.
Ainss mi stalker favorita, ahora subo <13~PotatoSexy~ escribió:Te dejo mensajitus de todos colores.. Soy tan ruda (~*-*)~ ~(*-*~)
Alicia Swifty Lermánica
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
¡Heyy sensualonas!
Antes que nada muchísimas gracias, cielos. Sois lo mejor, me alegráis la vida con vuestros comentarios. Cada vez que me llega un comentario, me enamoro un poco más. Me emocionan todos y cada uno de ellos porque significan muchísimo para mí
Al final del capítulo verán que hice una descripción bastane pobre del vestido que usa Amy. Como no sabía qué vestido debería usar y no se me ocurría ninguno original, hice un poco de trampa y me puse a buscar vestidos, la descripción corresponde a Este vestido
A este capi le tengo especial cariño y no sé muy bien por qué, solo espero que lo dsifruten.
El siguiente capítulo va a ser muy especial porque todo va a cambiar y por fin sabrán el pasado de Amy así que os recomiendo leerlo cuando lo suba.
Solo repetirles que las quiero. Mucho. Y que si me dejaran algún comentario me harían un pocito más feliz.
¡Un beso cielines!
Las quiero xoxo
Capítulo 18: Don't let me go cause I'm tired of feeling alone
Dos horas después mi padre se pone en pie y se dirige a la puerta.
—Ha sido maravilloso verte de nuevo, Amelia —mi padre me da un cariñoso y torpe abrazo y se aleja de mí.
—Igualmente papá.
—Tu madre me ha dicho que le gustaría pasarse a verte dentro de unas dos o tres semanas.
Palidezco enseguida y mi mundo empieza a dar vueltas. La simple mención de mi madre hace que me den arcadas pero que encima esa mención incluya una visita hace que me quiera morir, literalmente.
Mi hermano lo sabe así que corre a situarse a mi lado y me agarra firmemente por la cintura.
—No —susurra cortante y decidido.
—Es su madre, Maximilian, no puedes negarle que la vea —mi padre cuadra sus hombros, listo para pelear.
—Sí, sí puedo y lo haré. No pienso dejar que esa bruja se acerque a ella. Eres perfectamente consciente de lo que le ha hecho y tú sabes tan bien como yo que no deberían ni estar en el mismo Estado —la voz de mi hermano es gélida como el hielo.
Muchísimos recuerdos invaden mi mente y amenazan con derrumbarme. Max toma mi mano y me la aprieta. Intento calmarme. Max está ahí y no va a dejar que esa mujer que tengo por madre me haga daño otra vez. Sé que el se encargará de eso.
—Todos cometemos errores, tú el primero.
—Lo que hizo esa mujer no es un error, Frank, lo sabes. No intentes justificarla.
—No pienso discutir contigo, jovencito. Su madre vendrá si quiere venir, no es de tu incumbencia.
—Te repito que sí lo es. Cuando Amy estaba en el peor momento de su vida ella la hundió aún más en la miseria, como a mí, y no pienso dejar que lo haga otra vez. Amy está conmigo, no voy a dejar que nada la hiera de nuevo y, ¡Maldita sea! También sabes que ella constituye la mayor parte de mi mundo y lo último que quiero es que sufra si puedo evitarlo —las lágrimas amenazan con abandonar mis ojos y deslizarse por mi rostro pero las contengo. No pienso demostrar debilidad frente a mi padre.
—Maximilian, lo hablaré con tu madre y que ella decida qué hacer. Ya nos veremos —y sin decir una palabra más, abre la puerta y la cierra con firmeza tras salir.
Suspiro y tomo aire. Intento relajarme pero no puedo. Doy un par de pasos y me dejo caer pesadamente sobre el mullido sofá. Harry sigue sentado en su sitio, no se ha movido de ahí por lo que alarga la mano y me acaricia la mejilla.
—Amy, no la dejaré. No volveremos a pasar por eso —mi hermano se sienta junto a mí y yo cierro los ojos y niego con la cabeza.
—No, Max, está bien. Algún día tenía que llegar ese momento. Solo... Cuando llegues no me dejes sola con ella ¿Vale? Es lo único que pido.
—¿Estás segura? —mi hermano alza una ceja mientras escruta mi rostro.
—Sí. Tengo que dejar atrás mi pasado de una vez por todas y la mejor manera de hacerlo es enfrentándome a uno de los problemas más fuertes: Mamá.
—Está bien, lo haremos a tu manera pero si te hace algo, Amy, yo...—le pongo un dedo en los labios y le interrumpo.
—Chist. No, Max, tú nada. Ya has sacrificado mucho, muchísimo por mí y ya es hora de que yo sea capaz de enfrentar mis propias batallas. Haré esto sola pero contigo respaldándome, como siempre.
—De acuerdo. Te quiero, pequeñaja —me da un tierno beso en la frente que hace que me sienta como si todo fuese a estar bien —. Os dejo a solas un poco —me sonríe tiernamente y se va a su habitación.
—Hey —digo volviéndome hacia Harry.
—Hey —me responde mientras me acomoda entre sus brazos y yo apoyo mi cabeza en su pecho — Eso ha sido intenso —murmura contra mi pelo.
—Bienvenido a mi familia —respondo con malicia y noto cómo sonríe.
—Tu hermano y tu padre...—busca las palabras adecuadas aunque yo ya sé lo que va a decir — no se llevan bien ¿Verdad?
—Es mucho más que eso. Desde que tengo memoria siempre se han odiado. En cuanto pudo, Max se fue de casa y a mi padre no le importó. Yo no tuve la misma suerte y...—se me quiebra la voz y Harry me abraza.
—No sé qué es lo que te atormenta, ranita, pero sea lo que sea no me asustará. No me iré de tu lado, no pienso dejarte. Lo prometo —me besa el pelo y sonrío tristemente —. Cuando estés lista me lo contarás, sin prisas.
—Gracias.
—Por cierto, ese cabrón de Álex Germain se va a cagar en los pantalones —le doy un ligero codazo y ambos reímos.
—Sí, sí que lo hará.
Y es que, tras dos horas de una acalorada discusión entre los tres hombres presentes, han llegado a la decisión de que mi padre hablaría con la junta directiva del Estado y echarían al padre de Álex del instituto y le inhabilitarían para trabajar en cualquier centro de este Estado, por lo que, si quiere volver a trabajar con adolescentes, se va a tener que mudar. Álex Germain va a ir a parar a un reformatorio en la otra punta del país. Es de los más estrictos del continente y a mi padre se la ha metido entre ceja y ceja encerrarle ahí. Piensa hablar con todas las chica que ha violado y obligarla a que cuenten la verdad, pagándoles si es necesario. Por supuesto que él también intervendrá de otras formas para que haya más pruebas, aunque sean falsas. Sobre este tema ni yo he querido saber mucho, ni él ha querido contarme. Mejor para todos.
He de decir que Harry ha mantenido la compostura durante todo la conversación. Ha participado y no se ha acongojado o asustado en ningún momento y es bueno, muy bueno. A mi padre le gusta la gente decidida que no le teme pero que sí le respeta y Harry ha sido todo eso y más. Creo que en ese aspecto mi padre se ha ido contento aún sabiendo la mala fama que tiene, pero supongo que mientras a mí no me involucre o yo manche su preciado apellido, está bien para él.
—¿Te apetece hacer algo? —me pregunta cariñosamente y yo me siento a horcajadas en su regazo pasando mis brazos alrededor de su cuello.
—Esto —susurro antes de presionar mi labios contra los suyos y dejarme llevar.
Quiero olvidarme de todo y de todos., de mi madre y mi miedo hacia ella, de mi padre y su frialdad, de todos los que alguna vez me hicieron daño. Quiero olvidar y Harry es la mejor manera que conozco de hacerlo.
Él no protesta y me envuelve con sus protectores y varoniles brazos.
—Por mucho que me guste esto, no creo que debamos. Tu hermano está en su habitación —beso su mejilla y me alejo un poco, sofocada y seguramente sonrojada.
—En caso de que mi hermano decidiera bajar y honrarnos con su presencia, haría ruido para que supiéramos que está bajando y así no encontrarse con algo que no quisiera ver y que le forzaría a actuar de hermano mayor, serio y responsable —beso ligeramente sus labios y rozo mi nariz con la suya. Eso produce un agradable y dulce escalofrío que me deja sin aliento —. Pero supongo que tienes razón, no podemos pasarnos el día así —me levanto y le tiendo una mano —. Ven, te quiero enseñar mi habitación —la coge sin vacilar y subimos por las escaleras — La última vez que entré estaba bastante ordenada así que... —abro despacio la puerta y él entra.
Mi habitación no es nada fuera del otro mundo, es más bien pequeñita. Está pintada de un azul cielo con dibujos de nubes. Sí, de nubes. No son exactamente dibujos, son... Nubes, en serio, las paredes de mi cuarto parecen el cielo, lo imitan a la perfección. La pintamos Max y yo y nos costó muchísimo que quedara así, pero, sin duda, valió la pena, totalmente. Enfrente de la puerta hay un gran ventanal y una cama pequeña. En la pared de la izquierda tengo dos estanterías llenas de libros y cuadernos y en la de la derecha hay un armario, una pequeña cómoda y un escritorio. En una esquina de mi habitación está mi guitarra metida en su funda.
—Es preciosa —susurra Harry observando las paredes y le entiendo perfectamente.
—Gracias.
—No me esperaba esto para nada pero la verdad es que es genial.
—Gracias... Otra vez.
—¿Puedes tocar algo para mí? —dice señalando la guitarra.
—Eh...—estoy muy nerviosa. No suelo tocar para nadie.
—Si no quieres no pasa nada. Solo pensé que sería genial escucharte —me lanza una mirada un poco tímida y sonríe de lado. Creo que me acabo de derretir.
—Tocaré —digo sin dudar y cojo mi guitarra. Me acomodo en mi cama y la saco de su funda — ¿Alguna sugerencia? —pregunto mientras compruebo que está afinada.
—Sorpréndeme.
Lo pienso un poco pero de repente mi dedos empiezan a tocar solos y yo sonrío mientras canto Two Pieces de Demi Lovato. La escuché hace poco y simplemente me fascinó, me recordó Harry y a mí. Aunque eso seguramente sean paranoias mías porque, interiormente, no tengo problema en admitir que estoy loca y peligrosamente enamorada de Harry. O casi. Pero él no lo está, es obvio. Él es él y yo soy... Bueno, solo hay que mirarme para ver que lo nuestro no funcionaría porque yo la acabaría jodiendo de una manera u otra.
Rasgueo mi guitarra mientras los últimos acordes suenan y miro a Harry por primera vez desde que empecé a cantar.
—Otra —chilla con entusiasmo y en su voz noto algo de admiración lo que hace que mi corazón se hinche de orgullo y amor.
—A su gusto —sonrío ampliamente y empiezo otra canción.
Y así pasamos la tarde, acomodado en mi cama mientras toco la guitarra y canto de todo. De todo. Desde Cry o Echo de Jason Walker (lo que hace que Harry me mire con el ceño fruncido y se preocupe por mí) a algunas canciones de The Civil War, The Fray o incluso Britney Spears, Justin Timberlake y Katy Perry.
Hacía mucho que no tocaba tanto y encima para alguien, me siento extraña pero me divierte ver cómo Harry se lo toma muy en serio y me mira como si fuera una cantante de pop mundialmente famosa.
—Guau, Amy. Solo puedo decir eso —me da un beso y yo me río.
—Exagerado —pongo los ojos en blanco pero sonrío —. Algún día tendrás que tocar tú el piano para mí.
—Por supuesto, el próximo día que vengas tocaré —sonrío ante la idea de Harry sentado frente a un piano y tocando.
—¡Pero si no tienes ningún piano!
—Lo conseguiré —me guiña un ojo y me tira a la cama junto a él —. Ha sido precioso, Amy, alucinante.
—Harry, solo he tocado la guitarra. No he hecho nada especial.
—Para mí lo ha sido —me besa lentamente y si antes no me había derretido ahora definitivamente sí que lo hago.
—¿Puedo preguntarte algo?
—Siempre.
—¿Por qué empezaste a tocar? No te ofendas pero conozco a más pianistas de lo que me gustaría y no das el perfil —el ríe entre dientes y me da un beso en los nudillos. Me estremezco y tengo que contener un gemido.
—Mi madre era una excelente pianista y siempre trató de enseñarme aunque yo no quise. Después de que falleciera empecé a tomar clases, eso me hacía sentirme más unida a ella, la mantenía viva junto a mí y estoy seguro de que, esté en el lugar maravilloso que esté, cada vez que me oye tocar, sonríe. Aunque no toco mucho, la verdad —sonríe con tristeza y yo solo puedo abrazarle con fuerza y dejar que apoye su cabeza en mi pecho intentando tranquilizarse —. No me dejes —susurra de repente.
—¿Cómo?
—No me dejes Amy, yo... No sé lo que haría sin ti —sus palabras derriten aún más mi corazón y le abrazo con más fuerza.
—Nunca.
—¿Nunca nunca?
—Nunca jamás.
—Bien.
—Bien —beso su pelo y el me abraza con más fuerza.
—Creo que debería ir yéndome. Es la hora de la cena y tu hermano querrá pasar algo de tiempo contigo, lo comprendo.
—No tienes por qué, puedes quedarte.
Pero él niega con la cabeza y se pone en pie. Le acompaño a la puerta y encontramos a mi hermano en la cocina, preparando la cena. O algo parecido a la cena.
—Adiós, Harry —se despide mi hermano.
—Adiós, Max —mi hermano asiente y vuelve a lo que sea que está intentando cocinar sin éxito —. Nos vemos el Viernes ¿Vale? —asiento y él recorre mi mejilla con su áspero pulgar —. Te recogeré a las 8 —me besa castamente y se va. Cierro la puerta y me dejo caer en uno de los taburetes altos.
—¿Estáis saliendo? —pregunta mi hermano intentando cortar las verduras. Niego con la cabeza y él enarca una ceja.
—Es complicado.
—El amor es complicado.
—¡Oye! ¡Está filosófico hoy! ¿Te pregunto yo por esa chica misteriosa? No. Pues haz tú lo mismo —se sonrojo brutalmente y yo sonrío triunfal.
—Entendido —alza las manos en un gesto de paz y la olla empieza a arder. Nos miramos por un segundo y él sale disparado al fregadero. Llena rápidamente un par de vasos de agua y los tira sobre el recipiente a la vez que apaga los fogones. Ya tenemos práctica en este tipo de accidentes domésticos.
Me mira, le miro y... Estallamos en sonoras carcajadas que hacen que se nos salten las lágrimas. Amo estos pequeños momentos con mi hermano.
—¿Comida china? —sugiere.
—¡Por favor!
Los siguientes dos días y medio los paso en casa. Voy al instituto y Álex me sigue mirando con suficiencia por lo que deduzco que mi padre todavía no ha entrado en acción y eso me frustra ¿A qué está esperando? Aún así decido no entrometerme, mi padre sabe lo que hace.
Y ahora mismo es Viernes y faltan exactamente dos horas para que Harry venga a buscarme y yo sigo sin saber qué ponerme y estoy nerviosa y creo que me va a dar algo y tengo toda mi ropa tirada por la habitación y estoy divagando y repitiendo mucho “y” y eso no me gusta y... ¡Arg!
Sé que la fiesta no va a ser ni de cerca formal pero tampoco puedo ir en vaqueros. Sigo probándome combinaciones por la siguiente hora hasta que grito de exasperación y mi hermano viene a ver qué pasa. Por suerte llevo una bata y no estoy en ropa interior.
—¿Problemas con el vestuario? —enarca una ceja y se abre paso entre los montones de ropa. No sé cómo consigue sentarse en la silla de mi escritorio.
—Nah, qué va —replico sarcástica y mordaz. Él ríe entre dientes y eso me exaspera aún más.
—Um... A ver... Yo me pondría este —y, tras examinar todas las prendas, saca un vestido que ni sabía que tenía —. Es bonito, demasiado sexy para que tengas el visto bueno de un hermano mayor responsable y controlador...
—Pero...
—Pero yo no soy eso así que no te voy a decir cómo vestirte. Quiero que dejes a todos boquiabiertos y que ese imbécil de Styles te pida salir de una vez por todas —cojo el vestido y lo examino ¿Esto es mío?
—No creo, él... Supongo que el compromiso no es lo suyo.
—Créeme, ranita, he visto cómo te mira. Puede que el compromiso no sea lo suyo, pero tampoco es lo tuyo. Sin embargo, estoy seguro de que él hará ese intento por ti. ¡Oh, vamos! ¡Por favor! Si no, ¿Por qué habría aguantado a Frank como lo hizo! Venga ya, Amy, está hasta los huesos por ti. Es obvio, ya te darás cuenta.
—Si tú lo dices... Voy probarme esto —salgo de mi habitación reflexionando y me meto en el cuarto de baño.
Me quito la bata y deslizo la suave tela del vestido. Vaya, es muy bonito.
El vestido es blanco, de un blanco porcelana que contrasta un poco con mi piel aunque apenas estoy morena. Es de tirantes fijos y con un escote de corazón que deja bastante poco a la imaginación pero que aún así cubre todo lo que tiene que cubrir. Es ajustado por la parte del estómago pero no demasiado. Antes de llagar a la cadera, empieza una falda blanca con un poco de vuelo que llega hasta la mitad de mis muslos. El vestido está atravesado por una raya gruesa y gris que pasa justo por el centro.
Sin duda, este es el vestido ideal. El problema es que no sé si tendré el valor de aparecer con esto en una fiesta llena de gente.
Vuelvo a mi habitación y Max casi se cae de la silla al verme.
—Endiabladamente caliente —susurra mirándome con ojos como platos.
—¡Max! ¡Se supone que los hermanos no dicen eso! —le regaño riéndome.
—Perdón, perdón. Lo intento pero... Joder, vas a matar a Styles.
—No sé qué decirte, no sé si estoy lista para algo cómo esto...—mi hermano me interrumpe antes de que pueda siquiera empezar a quejarme.
—No. Vas a llevar esto. Me da igual si tengo que obligarte. Estás preciosa, sexy sin dejar de ser elegante. Simplemente preciosa, como siempre, y que a nadie se le ocurra decirte lo contrario porque sabes que no es verdad. Hazlo por ti, lleva esto, te lo mereces. Y estoy seguro de que Styles cuidará de ti. Es tu primera fiesta en mucho tiempo, Disfrútalo y haz que sea una noche para recordar —mi hermano me besa tiernamente la mejilla y yo lucho contra las lágrimas.
—Está bien —susurro conmovida. No hay palabras para describir cuánto amo a mi hermano.
—Así me gusta. Ahora acaba de arreglarte —me sonríe y se va de la habitación, dejándome sola.
Me sitúo frente al espejo y comienzo a alisar mi cabello. No paro hasta que todos y cada uno de los mechones están igual de lisos que la pared. Me maquillo con precisión pero siempre lo justo, no me gusta el maquillaje. Completo mi vestuario con unos tacones blancos y un bolso de mano. Me miro en el espejo y decido que ya estoy lista.
Bajo las escaleras y mi hermano me mira con lo ojos desorbitados.
—Le vas a matar —y justo en ese momento el telefonillo suena.
—Es Harry —afirmo y le doy un beso a mi hermano —. Te veo luego.
—¡Llama a la ambulancia en cuanto te mire y deje de respirar! —alcanzo a oír mientras cierro la puerta y me monto en el ascensor.
Llego a la planta baja y salgo del edificio. Harry está apoyado en su coche y corre hacia mí en cuanto me ve. Me examina detalladamente, de los pies a la cabeza hasta detenerse en mis ojos.
—Joder, me vas a matar —susurra sin aliento mientras sus mandíbula cae.
Antes que nada muchísimas gracias, cielos. Sois lo mejor, me alegráis la vida con vuestros comentarios. Cada vez que me llega un comentario, me enamoro un poco más. Me emocionan todos y cada uno de ellos porque significan muchísimo para mí
Al final del capítulo verán que hice una descripción bastane pobre del vestido que usa Amy. Como no sabía qué vestido debería usar y no se me ocurría ninguno original, hice un poco de trampa y me puse a buscar vestidos, la descripción corresponde a Este vestido
A este capi le tengo especial cariño y no sé muy bien por qué, solo espero que lo dsifruten.
El siguiente capítulo va a ser muy especial porque todo va a cambiar y por fin sabrán el pasado de Amy así que os recomiendo leerlo cuando lo suba.
Solo repetirles que las quiero. Mucho. Y que si me dejaran algún comentario me harían un pocito más feliz.
¡Un beso cielines!
Las quiero xoxo
Dos horas después mi padre se pone en pie y se dirige a la puerta.
—Ha sido maravilloso verte de nuevo, Amelia —mi padre me da un cariñoso y torpe abrazo y se aleja de mí.
—Igualmente papá.
—Tu madre me ha dicho que le gustaría pasarse a verte dentro de unas dos o tres semanas.
Palidezco enseguida y mi mundo empieza a dar vueltas. La simple mención de mi madre hace que me den arcadas pero que encima esa mención incluya una visita hace que me quiera morir, literalmente.
Mi hermano lo sabe así que corre a situarse a mi lado y me agarra firmemente por la cintura.
—No —susurra cortante y decidido.
—Es su madre, Maximilian, no puedes negarle que la vea —mi padre cuadra sus hombros, listo para pelear.
—Sí, sí puedo y lo haré. No pienso dejar que esa bruja se acerque a ella. Eres perfectamente consciente de lo que le ha hecho y tú sabes tan bien como yo que no deberían ni estar en el mismo Estado —la voz de mi hermano es gélida como el hielo.
Muchísimos recuerdos invaden mi mente y amenazan con derrumbarme. Max toma mi mano y me la aprieta. Intento calmarme. Max está ahí y no va a dejar que esa mujer que tengo por madre me haga daño otra vez. Sé que el se encargará de eso.
—Todos cometemos errores, tú el primero.
—Lo que hizo esa mujer no es un error, Frank, lo sabes. No intentes justificarla.
—No pienso discutir contigo, jovencito. Su madre vendrá si quiere venir, no es de tu incumbencia.
—Te repito que sí lo es. Cuando Amy estaba en el peor momento de su vida ella la hundió aún más en la miseria, como a mí, y no pienso dejar que lo haga otra vez. Amy está conmigo, no voy a dejar que nada la hiera de nuevo y, ¡Maldita sea! También sabes que ella constituye la mayor parte de mi mundo y lo último que quiero es que sufra si puedo evitarlo —las lágrimas amenazan con abandonar mis ojos y deslizarse por mi rostro pero las contengo. No pienso demostrar debilidad frente a mi padre.
—Maximilian, lo hablaré con tu madre y que ella decida qué hacer. Ya nos veremos —y sin decir una palabra más, abre la puerta y la cierra con firmeza tras salir.
Suspiro y tomo aire. Intento relajarme pero no puedo. Doy un par de pasos y me dejo caer pesadamente sobre el mullido sofá. Harry sigue sentado en su sitio, no se ha movido de ahí por lo que alarga la mano y me acaricia la mejilla.
—Amy, no la dejaré. No volveremos a pasar por eso —mi hermano se sienta junto a mí y yo cierro los ojos y niego con la cabeza.
—No, Max, está bien. Algún día tenía que llegar ese momento. Solo... Cuando llegues no me dejes sola con ella ¿Vale? Es lo único que pido.
—¿Estás segura? —mi hermano alza una ceja mientras escruta mi rostro.
—Sí. Tengo que dejar atrás mi pasado de una vez por todas y la mejor manera de hacerlo es enfrentándome a uno de los problemas más fuertes: Mamá.
—Está bien, lo haremos a tu manera pero si te hace algo, Amy, yo...—le pongo un dedo en los labios y le interrumpo.
—Chist. No, Max, tú nada. Ya has sacrificado mucho, muchísimo por mí y ya es hora de que yo sea capaz de enfrentar mis propias batallas. Haré esto sola pero contigo respaldándome, como siempre.
—De acuerdo. Te quiero, pequeñaja —me da un tierno beso en la frente que hace que me sienta como si todo fuese a estar bien —. Os dejo a solas un poco —me sonríe tiernamente y se va a su habitación.
—Hey —digo volviéndome hacia Harry.
—Hey —me responde mientras me acomoda entre sus brazos y yo apoyo mi cabeza en su pecho — Eso ha sido intenso —murmura contra mi pelo.
—Bienvenido a mi familia —respondo con malicia y noto cómo sonríe.
—Tu hermano y tu padre...—busca las palabras adecuadas aunque yo ya sé lo que va a decir — no se llevan bien ¿Verdad?
—Es mucho más que eso. Desde que tengo memoria siempre se han odiado. En cuanto pudo, Max se fue de casa y a mi padre no le importó. Yo no tuve la misma suerte y...—se me quiebra la voz y Harry me abraza.
—No sé qué es lo que te atormenta, ranita, pero sea lo que sea no me asustará. No me iré de tu lado, no pienso dejarte. Lo prometo —me besa el pelo y sonrío tristemente —. Cuando estés lista me lo contarás, sin prisas.
—Gracias.
—Por cierto, ese cabrón de Álex Germain se va a cagar en los pantalones —le doy un ligero codazo y ambos reímos.
—Sí, sí que lo hará.
Y es que, tras dos horas de una acalorada discusión entre los tres hombres presentes, han llegado a la decisión de que mi padre hablaría con la junta directiva del Estado y echarían al padre de Álex del instituto y le inhabilitarían para trabajar en cualquier centro de este Estado, por lo que, si quiere volver a trabajar con adolescentes, se va a tener que mudar. Álex Germain va a ir a parar a un reformatorio en la otra punta del país. Es de los más estrictos del continente y a mi padre se la ha metido entre ceja y ceja encerrarle ahí. Piensa hablar con todas las chica que ha violado y obligarla a que cuenten la verdad, pagándoles si es necesario. Por supuesto que él también intervendrá de otras formas para que haya más pruebas, aunque sean falsas. Sobre este tema ni yo he querido saber mucho, ni él ha querido contarme. Mejor para todos.
He de decir que Harry ha mantenido la compostura durante todo la conversación. Ha participado y no se ha acongojado o asustado en ningún momento y es bueno, muy bueno. A mi padre le gusta la gente decidida que no le teme pero que sí le respeta y Harry ha sido todo eso y más. Creo que en ese aspecto mi padre se ha ido contento aún sabiendo la mala fama que tiene, pero supongo que mientras a mí no me involucre o yo manche su preciado apellido, está bien para él.
—¿Te apetece hacer algo? —me pregunta cariñosamente y yo me siento a horcajadas en su regazo pasando mis brazos alrededor de su cuello.
—Esto —susurro antes de presionar mi labios contra los suyos y dejarme llevar.
Quiero olvidarme de todo y de todos., de mi madre y mi miedo hacia ella, de mi padre y su frialdad, de todos los que alguna vez me hicieron daño. Quiero olvidar y Harry es la mejor manera que conozco de hacerlo.
Él no protesta y me envuelve con sus protectores y varoniles brazos.
—Por mucho que me guste esto, no creo que debamos. Tu hermano está en su habitación —beso su mejilla y me alejo un poco, sofocada y seguramente sonrojada.
—En caso de que mi hermano decidiera bajar y honrarnos con su presencia, haría ruido para que supiéramos que está bajando y así no encontrarse con algo que no quisiera ver y que le forzaría a actuar de hermano mayor, serio y responsable —beso ligeramente sus labios y rozo mi nariz con la suya. Eso produce un agradable y dulce escalofrío que me deja sin aliento —. Pero supongo que tienes razón, no podemos pasarnos el día así —me levanto y le tiendo una mano —. Ven, te quiero enseñar mi habitación —la coge sin vacilar y subimos por las escaleras — La última vez que entré estaba bastante ordenada así que... —abro despacio la puerta y él entra.
Mi habitación no es nada fuera del otro mundo, es más bien pequeñita. Está pintada de un azul cielo con dibujos de nubes. Sí, de nubes. No son exactamente dibujos, son... Nubes, en serio, las paredes de mi cuarto parecen el cielo, lo imitan a la perfección. La pintamos Max y yo y nos costó muchísimo que quedara así, pero, sin duda, valió la pena, totalmente. Enfrente de la puerta hay un gran ventanal y una cama pequeña. En la pared de la izquierda tengo dos estanterías llenas de libros y cuadernos y en la de la derecha hay un armario, una pequeña cómoda y un escritorio. En una esquina de mi habitación está mi guitarra metida en su funda.
—Es preciosa —susurra Harry observando las paredes y le entiendo perfectamente.
—Gracias.
—No me esperaba esto para nada pero la verdad es que es genial.
—Gracias... Otra vez.
—¿Puedes tocar algo para mí? —dice señalando la guitarra.
—Eh...—estoy muy nerviosa. No suelo tocar para nadie.
—Si no quieres no pasa nada. Solo pensé que sería genial escucharte —me lanza una mirada un poco tímida y sonríe de lado. Creo que me acabo de derretir.
—Tocaré —digo sin dudar y cojo mi guitarra. Me acomodo en mi cama y la saco de su funda — ¿Alguna sugerencia? —pregunto mientras compruebo que está afinada.
—Sorpréndeme.
Lo pienso un poco pero de repente mi dedos empiezan a tocar solos y yo sonrío mientras canto Two Pieces de Demi Lovato. La escuché hace poco y simplemente me fascinó, me recordó Harry y a mí. Aunque eso seguramente sean paranoias mías porque, interiormente, no tengo problema en admitir que estoy loca y peligrosamente enamorada de Harry. O casi. Pero él no lo está, es obvio. Él es él y yo soy... Bueno, solo hay que mirarme para ver que lo nuestro no funcionaría porque yo la acabaría jodiendo de una manera u otra.
Rasgueo mi guitarra mientras los últimos acordes suenan y miro a Harry por primera vez desde que empecé a cantar.
—Otra —chilla con entusiasmo y en su voz noto algo de admiración lo que hace que mi corazón se hinche de orgullo y amor.
—A su gusto —sonrío ampliamente y empiezo otra canción.
Y así pasamos la tarde, acomodado en mi cama mientras toco la guitarra y canto de todo. De todo. Desde Cry o Echo de Jason Walker (lo que hace que Harry me mire con el ceño fruncido y se preocupe por mí) a algunas canciones de The Civil War, The Fray o incluso Britney Spears, Justin Timberlake y Katy Perry.
Hacía mucho que no tocaba tanto y encima para alguien, me siento extraña pero me divierte ver cómo Harry se lo toma muy en serio y me mira como si fuera una cantante de pop mundialmente famosa.
—Guau, Amy. Solo puedo decir eso —me da un beso y yo me río.
—Exagerado —pongo los ojos en blanco pero sonrío —. Algún día tendrás que tocar tú el piano para mí.
—Por supuesto, el próximo día que vengas tocaré —sonrío ante la idea de Harry sentado frente a un piano y tocando.
—¡Pero si no tienes ningún piano!
—Lo conseguiré —me guiña un ojo y me tira a la cama junto a él —. Ha sido precioso, Amy, alucinante.
—Harry, solo he tocado la guitarra. No he hecho nada especial.
—Para mí lo ha sido —me besa lentamente y si antes no me había derretido ahora definitivamente sí que lo hago.
—¿Puedo preguntarte algo?
—Siempre.
—¿Por qué empezaste a tocar? No te ofendas pero conozco a más pianistas de lo que me gustaría y no das el perfil —el ríe entre dientes y me da un beso en los nudillos. Me estremezco y tengo que contener un gemido.
—Mi madre era una excelente pianista y siempre trató de enseñarme aunque yo no quise. Después de que falleciera empecé a tomar clases, eso me hacía sentirme más unida a ella, la mantenía viva junto a mí y estoy seguro de que, esté en el lugar maravilloso que esté, cada vez que me oye tocar, sonríe. Aunque no toco mucho, la verdad —sonríe con tristeza y yo solo puedo abrazarle con fuerza y dejar que apoye su cabeza en mi pecho intentando tranquilizarse —. No me dejes —susurra de repente.
—¿Cómo?
—No me dejes Amy, yo... No sé lo que haría sin ti —sus palabras derriten aún más mi corazón y le abrazo con más fuerza.
—Nunca.
—¿Nunca nunca?
—Nunca jamás.
—Bien.
—Bien —beso su pelo y el me abraza con más fuerza.
—Creo que debería ir yéndome. Es la hora de la cena y tu hermano querrá pasar algo de tiempo contigo, lo comprendo.
—No tienes por qué, puedes quedarte.
Pero él niega con la cabeza y se pone en pie. Le acompaño a la puerta y encontramos a mi hermano en la cocina, preparando la cena. O algo parecido a la cena.
—Adiós, Harry —se despide mi hermano.
—Adiós, Max —mi hermano asiente y vuelve a lo que sea que está intentando cocinar sin éxito —. Nos vemos el Viernes ¿Vale? —asiento y él recorre mi mejilla con su áspero pulgar —. Te recogeré a las 8 —me besa castamente y se va. Cierro la puerta y me dejo caer en uno de los taburetes altos.
—¿Estáis saliendo? —pregunta mi hermano intentando cortar las verduras. Niego con la cabeza y él enarca una ceja.
—Es complicado.
—El amor es complicado.
—¡Oye! ¡Está filosófico hoy! ¿Te pregunto yo por esa chica misteriosa? No. Pues haz tú lo mismo —se sonrojo brutalmente y yo sonrío triunfal.
—Entendido —alza las manos en un gesto de paz y la olla empieza a arder. Nos miramos por un segundo y él sale disparado al fregadero. Llena rápidamente un par de vasos de agua y los tira sobre el recipiente a la vez que apaga los fogones. Ya tenemos práctica en este tipo de accidentes domésticos.
Me mira, le miro y... Estallamos en sonoras carcajadas que hacen que se nos salten las lágrimas. Amo estos pequeños momentos con mi hermano.
—¿Comida china? —sugiere.
—¡Por favor!
*****
Los siguientes dos días y medio los paso en casa. Voy al instituto y Álex me sigue mirando con suficiencia por lo que deduzco que mi padre todavía no ha entrado en acción y eso me frustra ¿A qué está esperando? Aún así decido no entrometerme, mi padre sabe lo que hace.
Y ahora mismo es Viernes y faltan exactamente dos horas para que Harry venga a buscarme y yo sigo sin saber qué ponerme y estoy nerviosa y creo que me va a dar algo y tengo toda mi ropa tirada por la habitación y estoy divagando y repitiendo mucho “y” y eso no me gusta y... ¡Arg!
Sé que la fiesta no va a ser ni de cerca formal pero tampoco puedo ir en vaqueros. Sigo probándome combinaciones por la siguiente hora hasta que grito de exasperación y mi hermano viene a ver qué pasa. Por suerte llevo una bata y no estoy en ropa interior.
—¿Problemas con el vestuario? —enarca una ceja y se abre paso entre los montones de ropa. No sé cómo consigue sentarse en la silla de mi escritorio.
—Nah, qué va —replico sarcástica y mordaz. Él ríe entre dientes y eso me exaspera aún más.
—Um... A ver... Yo me pondría este —y, tras examinar todas las prendas, saca un vestido que ni sabía que tenía —. Es bonito, demasiado sexy para que tengas el visto bueno de un hermano mayor responsable y controlador...
—Pero...
—Pero yo no soy eso así que no te voy a decir cómo vestirte. Quiero que dejes a todos boquiabiertos y que ese imbécil de Styles te pida salir de una vez por todas —cojo el vestido y lo examino ¿Esto es mío?
—No creo, él... Supongo que el compromiso no es lo suyo.
—Créeme, ranita, he visto cómo te mira. Puede que el compromiso no sea lo suyo, pero tampoco es lo tuyo. Sin embargo, estoy seguro de que él hará ese intento por ti. ¡Oh, vamos! ¡Por favor! Si no, ¿Por qué habría aguantado a Frank como lo hizo! Venga ya, Amy, está hasta los huesos por ti. Es obvio, ya te darás cuenta.
—Si tú lo dices... Voy probarme esto —salgo de mi habitación reflexionando y me meto en el cuarto de baño.
Me quito la bata y deslizo la suave tela del vestido. Vaya, es muy bonito.
El vestido es blanco, de un blanco porcelana que contrasta un poco con mi piel aunque apenas estoy morena. Es de tirantes fijos y con un escote de corazón que deja bastante poco a la imaginación pero que aún así cubre todo lo que tiene que cubrir. Es ajustado por la parte del estómago pero no demasiado. Antes de llagar a la cadera, empieza una falda blanca con un poco de vuelo que llega hasta la mitad de mis muslos. El vestido está atravesado por una raya gruesa y gris que pasa justo por el centro.
Sin duda, este es el vestido ideal. El problema es que no sé si tendré el valor de aparecer con esto en una fiesta llena de gente.
Vuelvo a mi habitación y Max casi se cae de la silla al verme.
—Endiabladamente caliente —susurra mirándome con ojos como platos.
—¡Max! ¡Se supone que los hermanos no dicen eso! —le regaño riéndome.
—Perdón, perdón. Lo intento pero... Joder, vas a matar a Styles.
—No sé qué decirte, no sé si estoy lista para algo cómo esto...—mi hermano me interrumpe antes de que pueda siquiera empezar a quejarme.
—No. Vas a llevar esto. Me da igual si tengo que obligarte. Estás preciosa, sexy sin dejar de ser elegante. Simplemente preciosa, como siempre, y que a nadie se le ocurra decirte lo contrario porque sabes que no es verdad. Hazlo por ti, lleva esto, te lo mereces. Y estoy seguro de que Styles cuidará de ti. Es tu primera fiesta en mucho tiempo, Disfrútalo y haz que sea una noche para recordar —mi hermano me besa tiernamente la mejilla y yo lucho contra las lágrimas.
—Está bien —susurro conmovida. No hay palabras para describir cuánto amo a mi hermano.
—Así me gusta. Ahora acaba de arreglarte —me sonríe y se va de la habitación, dejándome sola.
Me sitúo frente al espejo y comienzo a alisar mi cabello. No paro hasta que todos y cada uno de los mechones están igual de lisos que la pared. Me maquillo con precisión pero siempre lo justo, no me gusta el maquillaje. Completo mi vestuario con unos tacones blancos y un bolso de mano. Me miro en el espejo y decido que ya estoy lista.
Bajo las escaleras y mi hermano me mira con lo ojos desorbitados.
—Le vas a matar —y justo en ese momento el telefonillo suena.
—Es Harry —afirmo y le doy un beso a mi hermano —. Te veo luego.
—¡Llama a la ambulancia en cuanto te mire y deje de respirar! —alcanzo a oír mientras cierro la puerta y me monto en el ascensor.
Llego a la planta baja y salgo del edificio. Harry está apoyado en su coche y corre hacia mí en cuanto me ve. Me examina detalladamente, de los pies a la cabeza hasta detenerse en mis ojos.
—Joder, me vas a matar —susurra sin aliento mientras sus mandíbula cae.
Alicia Swifty Lermánica
Re: ~Treacherous~ [Con Harry Styles]
Oiiiiiii tienes que seguirla porque ha quien vas a matar es ami como no la sigas un beso :)
Alex Love
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