Enamorada de un criminal. Harry Styles y ___ ___.

Capitulo 29.

— Solo causo problemas y expongo tu vida al peligro, todo es por mí. — Continuó diciendo.

— Por favor Harry... no digas más. — Harry inhaló haciendo salir de su boca un largo suspiro y no dijo nada más hasta después de un par de minutos.

— Yo — Lo miré a los ojos, me dejó de abrazar y se hizo a un lado. — Yo.... — trataba de decir algo pero no continuaba. Me quedé sin poder creer lo que estaba a punto de decir... no... no puede ser. ¡Solo lo he visto por menos de 3 horas! ¿Qué le estaba pasando? ¿Por qué había tomado una decisión tan rápido?

— Estaba a punto de irme antes de que te despertaras, me iba a ir sin dejar evidencias de que estuviera vivo. — Me quedé anonadada, el rostro de Harry me dijo cómo se veía mi rostro: destrozado.

— ¿Por qué .... Por qué siempre llegas y desapareces tan fácil? ¡Estoy cansada de que siempre sea así Harry! — le dije, más bien, casi le gritaba.

Traté de calmarme un poco, no quería ver a mis padres en mi puerta viendo qué pasaba, Harry miró a lo lejos siendo incapaz de mirar mis ojos.

— Debí dejarte ir cuando tuviste la oportunidad de hacerlo... — Dijo en tono frio. Yo estaba casi temblando, Harry se arrepintió.

— Por favor... Harry... — Traté de decirle que no se fuera, pero me interrumpió.

— Haré parecer como si yo nunca hubiese existido, te lo prometo. Ahora puedes vivir tu vida normal... — Dijo entrecortadamente. Harry desapareció de mi habitación en segundos. Lo miré correr hacia lo lejos... lejos de mí.

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Corrí lejos de ella, como debí haberlo hecho desde hace antes. Era un cobarde. Fue extraño, cómo tuve la oportunidad de que pasara y alejarme, cuando sabía que tenía que hacerlo de alguna manera.

Corrí por el camino que me llevaba fuera de la ciudad a las afueras de la autopista, podía escuchar los autos pasar mientras el viento soplaba fuerte, de repente un auto llegó rápidamente, ensuciando la carretera... era mi viaje. Me subí en el asiento del copiloto y cerré la puerta sin pronunciar una palabra, después de 15 minutos... él finalmente habló.

— Tenías que hacerlo Harry... mierdas como ésas solo descomponen tu mente, créeme. — comenzó a decirme.

— ¡Ja-Ja! Mira quién habla.

— ¡Vete a la mie'rda! En primer lugar, probablemente lo único que quería ella era coger contigo, es lo que todas quieren hoy en día, follar... ¿entiendes?

Justo en ese momento lo golpeé en la boca mientras conducía, él era la causa de todo lo que estaba pasando. Se sacudió un poco hacia y discutió en voz baja mientras yo me salía del auto. Me lancé hacia afuera y me puse de pie, caminando en la calle, el auto se detuvo en seco...

Eso es todo, bastardo. Sigue jodiendome, estoy harto de tus órdenes.
Aún era de noche. Lo vi salir de su auto, completamente furioso, me reí mientras caminaba hacia mí.

— Deberías ver tu rostro ahora, una perfecta obra maestra — lo decía sarcásticamente, por supuesto, su rostro estaba tan fastidiado que parecía un estúpido mono. Me reí en su cara atormentada hasta que se acercó hacia mí y me jaló del cabello. Estaba harto de él.

— Harás lo que yo te diga, a menos que quieras que la policía haga lo mismo. — me dijo. De repente dejé de reirme.

— ¡¿Tú... tú me estas amenazando?! — Me soltó del cabello y me tiró al suelo.

— Solo te digo lo que tienes que hacer, ahora sigue mis instrucciones. — lo dijo, en un tono mortal, muy enserio. Él caminó de nuevo hacia su auto y me llamó. — ¡Mejor mueve ese trasero y camina a la casa, necesitas una lección! — Gritó mientras conducía hacia lo lejos.

Me quedé tirado en el suelo, era una hora de distancia hacia su casa, entonces me levanté y caminé de regreso tomándome mi tiempo. Él era un completo idi'ota si creía que iba a hacer lo que me dijo por teléfono. Pero... lo había hecho. Me dijo que la dejara, y yo sabía que si no lo hacía, ella estuviera muerta.

Tiré mi teléfono con fuerza en el suelo rompiéndolo en pedazos, las piezas salieron volando. Ésa maldita llamada estaba mandando mi vida a la mie'rda. Me llamó al celular, justo cuando ___tn había bajado las escaleras. ¿Cómo supo mi hermano que estaba con ella?

Mi hermano era completamente diferente ahora... no era el hermano que quería, no era más mi hermano... el que yo conocía.

Estaba en mi habitación, una habitación que me habían dado hace casi 6 semanas. Miré hacia el cielo por un largo rato, en verdad quisiera que mi hermano me hubiese matado en vez de amenazarme, yo no puedo vivir sin ___tn, todo lo estaba haciendo por ella. Sabía que si lo ignoraba, la mataría en un instante, probablemente en mi presencia. Quería matarlo, por haberla metido en este lío. -Aléjate o tu chica muere- recuerdo sus palabras. ¿Cómo diab'los supo que estaba con ella? ¿Cómo la conoce?

Me quedé encerrado en mi habitación viendo el sol en el cielo, viendo las nubes pasar... una tenía forma de un... ¿pato?. Otra, de un ojo... de un ojo que tenía la misma forma que los de...
Mi puerta se abrió, no volteé a mirar.

— Sal ahora de la habitación. — Me gritó Alex, lo ignore. De repente me tomó de las piernas, me dio la vuelta y me azotó contra la pared. — ¡Me agradecerás por mantener viva a tu querida perra porque puedo aventarle una bomba cuando quiera! — Me estaba gritando, otra vez — ¿Crees que no me di cuenta que todo el día estabas afuera acechándola? ¡Te dejé ir por más de un mes y eso es todo lo que has estado haciendo, siguiéndola como perro a cualquier lugar Harry! Eres un completo... — Lo empujé lejos de mí antes de que terminara.

— ¡No tienes derecho de llamarme así cuando no tienes la más mínima idea de lo que estás diciendo Alex! — Le contesté con el mismo tono que él a mí.

Caminaba hacia la puerta, él me alcanzó, me empujó contra el suelo, yo simplemente me reí mientras lo veía sacar su pistola. Seguí riéndome mientras preparaba el gatillo. — ¡Adelante, hazlo! Acabemos con esto de una vez por todas — Le grité. Bajó el arma, me llevó hacia la sala, que al parecer ya estaba preparada.

— Mejor dedícate a tu trabajo, idi'ota. — Me dijo Alex.

Seguí riéndome, Alex me golpeó en la mandíbula, haciéndome casi ver estrellas. Aún así no dejé de reír hasta que salió de la sala. Era mejor que se cuidara, no sé cómo se sienta matar a alguien cercano.

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Capitulo 30.

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No iba a ir a practicar hoy, caminaba hacia mi casa después de la escuela, sentía el peso de mi pistola de electrochoque golpeando mi espalda mientras mi mochila se movía al yo caminar, la llevaba conmigo desde que mis padres se enteraron de una 'supuesta' pandilla rondando en las calles.
Caminé por la esquina de la escuela y de repente vi el nuevo y brillante Dodge negro de Niall estacionado en la entrada para estudiantes. Su nuevo auto, era un regalo de sus padres.

— Se siente mejor de lo que parece. — Escuché de repente, vi a Niall tomando sus llaves.

— ¿En serio? — Pregunté.

— Sip. — Me contestó sonriendo. Abrió la puerta del copiloto esperando a que yo entrara, negué con mi cabeza.

— Me iré caminando Niall, gracias. — Él cerró la puerta y caminó a un lado mío.

— Caminaré contigo entonces. — Me dijo de nuevo con una gran sonrisa. Hice una pequeña mueca de desagrado.

— ¡___tn! — Alargo. Suspiré y caminé con él.

Niall me acompañó hasta mi casa, no sentía la necesidad de que me 'escoltara' pero fue algo dulce, lo admito. Pero, si lo hubiera hecho... borré aquel pensamiento y continué caminando.

— Gracias Niall, pero de verdad también pude haber llegado a salvo estando sola. — Le dije. Él se encogió de hombros, oh... ya entiendo, quería estar más cerca de mí.

— Qué bueno... — Fue una respuesta a medias. No supe que decir, entonces se me vino la idea de hacer algo, pero no estaba segura. Oh bueno, lo haría de todas formas.

— ¿Quieres entrar... por una botana o algo así? — Le propuse, él sonrió enseguida.

— Claro.

Saqué mis llaves de mi mochila, abrí la puerta y entramos. Dejé mi mochila en el sofá y fui hacia la cocina.

— Oh valla, tienes un gran surtido de chatarra. — Me dijo mientras yo abría el gabinete de la cocina, me reí.

— ¿Se te apetece algo? — Pregunté

— Uhm... — se rascó la barbilla — Doritos estaría bien. — Le di la bolsa, tomé un plato y él me pasó los doritos, saqué el queso del refrigerador.

— Uy, qué bonito collar ___tn. — Traté de no estremecerme al recordarlo... ¿Porqué aún traigo puesto esto? Él no me quiere, me dejó.... de nuevo.

— Está lindo ¿no? — Niall asintió con la cabeza y hundió un dorito en el queso derretido. Traté de que las lágrimas no llegaran a mis ojos, me senté a su lado y le di una soda.

— ¿Y… cómo está tu hermano? — oh... mi hermano.

— Estará fuera en un mes... o eso creo. — Niall asintió de nuevo y sacó su celular, comí un dorito.

— ¿Estás bien? — Me preguntó, se porque lo decía… cambiaba mi expresión al recordar a Harry, en ese momento, lo hacía. Yo solo asentí y no lo miré, sentí de repente su mano sobre la mía, levanté mi mirada. — Yo sé que su muerte te afecta mucho ___tn, pero no estás sola, no tienes que hundirte en el dolor. — me dijo Niall con suaves palabras, traté de sonreír.

— No te preocupes. — quité lentamente mi mano que estaba debajo de la suya. Niall suspiró y me soltó, sabía que no quería hablar de eso. Comimos en silencio y luego se levantó.

— Mejor me voy, gracias por los doritos ___tn, tengo que recoger mi auto.

— Cuando quieras Niall, adiós. Te veo mañana.

— Claro, adiós.

Escuché sonar la puerta cerrarse cuando se fue, subí las escaleras y tiré mi mochila sobre mi cama. Me miré en el espejo, veía cómo el diamante en el collar brillaba con intensidad bajo el sol. Mis cortinas estaban recorridas hacia un lado para que la luz del sol entrara. Caminé hacia la ventana y miré hacia afuera, luego me acerqué hacia mi joyero, mis manos temblaban mientras me quitaba el collar, no dejé de agarrarlo, lo veía con nostalgia. Harry me lo había dado, me quedé ahí peleando con migo misma, si tenerlo aún o no. ¿Harry aún me amaba? Entonces conseguí la respuesta, sí, me amaba.

Pero, ¿por qué cambió de idea justo cuando regresé a mi habitación anoche? Esa pregunta desató muchas otras que no podía responder yo misma. Suspiré y me puse de nuevo el collar. Tenía que encontrar a Harry y conseguir las respuestas cueste lo que cueste

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Sentía como si me hubiera estado muriendo por una semana. Mi mente seguía regresando a ___tn, recordando su rostro. Había hecho lo que mi hermano me había dicho, me tomó una semana planear un bombardeo cerca de la estación de policías en Los Angeles.

No podía evitar temblar mientras tomaba unas pequeñas pinzas tratando de poner un delicado chip dentro de la caja, puse el chip a un lado y respiré, esto se ponía cada vez más difícil.

— ¿Qué diablos esperas? — Me gritaba Alex para que me diera prisa, yo lo ignoré y me levanté.

— Falta el cloro, iré por él.

Salí, él no dijo nada, lo que significaba que tal vez me seguiría, no me dio importancia. Me subí a la camioneta, la encendí y me dirigí hacia el súper mercado que había cerca. El kilometraje de la camioneta era una basura, comparado con el del auto de ___tn. Me di un golpe en la mejilla.

Aparque la camioneta en el estacionamiento y salí, me puse mi gorra negra, para evitar ser reconocido, entonces entré. Camine hacia la sección de limpieza y tomé 2 galones de cloro y algo de ...

— ¿Harry Styles?— escuché detrás de mí.

Me quedé frío por un momento, luego me di la vuelta rápidamente.
Oh Dios mío, esto no puede ser posible.

Una de las personas que más odiaba estaba de pie muy cerca de mí, con un limpiador de ventanas en las manos y una bolsa de jabón. Era... El profesor Adams. Mi antiguo maestro de Literatura quien había hecho de mi vida en la escuela una mie'rda. Cuando me di la vuelta vi su cara completamente congelada y sus ojos abiertos con asombro, por supuesto, se suponía que yo estaba muerto, y ahora me estaba viendo. Rápidamente me di la vuelta de nuevo y comencé a caminar rápido.

— ¡Espera! — Gritó.

Yo continué caminando y puse a un lado las cosas que se suponía que iba a comprar, no tenía la menor idea de lo que me estaba diciendo, de repente lo escuché caminar detrás de mí. Perfecto. Salí de la tienda y me subí a mi camioneta, la encendí y me fui. Como lo suponía, el prof. Adams fue detrás de mí en su suburban blanca.

Conduje hacia una calle solitaria, donde algunas casas habían sido evacuadas para crear un centro comercial, lo que significaba que no había nadie ahí, lo vi por el espejo retrovisor, estaba sacando su teléfono celular.

Mie’rda. Conduje más rápido y entonces lo vi colgar la llamada. Fue detrás de mí mientras me bajaba del coche, me escondí en un pasillo vacío cerca de un callejón, saqué mi pistola y la cargué. Lo siento mucho profesor pero, me tenía que vengar tarde o temprano.

Observe a Adams bajar del auto, comenzaba a buscarme.

— ¡Styles sal de ahí! — Grito.

Dio la vuelta, al parecer no vio nada, siguió buscando alrededor. Lo vi caminar en dirección al callejón donde estaba mi auto, comencé a acercarme.

— Hey profe, creo que es hora de la venganza. — Dije, me pareció divertido.
Antes de que pudiese decir algo, cayó al suelo, le dispare en la espalda. Me quede de pie apuntando hacia el.

— Creo que fue mala idea tratar de llamar a la policía, Adams. — Le dije en tono desafiante.

— No... no lo hice. ¡Lo juro! Le estaba llamando a mi esposa.

¡BAM, BAM, BAM! Adios Adams.

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hazza malo! ._. sfafdgsdf y sexy.

Capitulo 31.

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Caminaba por las calles, buscando alguna señal de Harry, lo había buscado por un largo rato, desde hace días, pero no había encontrado nada. Me di por vencida, miré hacia arriba, el sol estaba desapareciendo en el cielo, lo buscaría de nuevo el día siguiente.

Estaba cerca del parque, caminaba hacia mi casa, vi a varios chicos jugar basketball, me detuve un rato y vi entre ellos un rostro familiar....Niall... Sonreí y seguí caminando.

Llegué a mi casa, entré sintiéndome decepcionada... en verdad pensé que podría encontrarlo. Caminé hacia la sala y me senté en el sofá, encendí la televisión y le cambié varias veces de canal.

Sabía que Harry no me seguía más, lo hubiera sentido.

- "Un hombre, Robert Adams, desapareció desde hace dos días. La policía afirma que la última vez que lo vieron fue en un supermercado de Los Angeles, y su última llamada fue a su esposa"- Dijo el reportero.

Su fotografía apareció de repente en la pantalla. Era... ¿mi profesor de literatura? Habíamos tenido maestros suplentes los últimos dos días, y esto lo explicaba. ¿El profesor Adams desaparecido?

De repente mi mente regresó hacia Harry... no. Trate de convencerme de que él no tenía nada que ver en eso. Pero todo encajaba, Harry estaba en Los Angeles, Harry mató al profesor Adams. Sentí que mi corazón se desgarraba, Harry no había cambiado ni un poco. Pero... ¿por qué asesinar a un profesor? ¿Solo porque lo odiaba? ¿O fue un tipo de venganza? ... probablemente.

Seguí viendo la televisión, tenía ahora un nuevo objetivo, buscarlo en todo L.A.

Caminé hacia la cocina y me preparé algo de cenar, cené y terminé mi tarea. Mientras la hacía seguía pensando en todo lo que había pasado, era muy difícil para mí aceptar que Harry era un asesino, suspiré.

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— ¡Maldita sea! ¡Ya entendí, Alex! — Le grité en la cara. Que ya me tenía harto era poco. Estaba muy enojado, estúpido Alex, seguía echándome toda la culpa a mí.

— Imb'écil, ¿Eso es todo lo que me dices después de que yo mismo me deshice de tu error?

— No tengo tiempo para esto. — Caminé saliéndome de la habitación.

Salí de ahí y caminé hacia mi habitación, una vez dentro, azote fuertemente la puerta. Le di un gran golpe con mi puño a la pared, haciendo que me doliera hasta el alma. Jalé mi cabello hacia atrás y me senté en mi cama sosteniendo mi cabeza.

Desde que dejé a ___tn, mi vida había sido un completo infierno. Miré fijamente hacia mis puños, estaban rojos. Me miré en el espejo, se me vino la idea de que tenía que cambiar mi apariencia, no quería que pasara de nuevo algo como lo que ocurrió con el profesor Adams, me arriesgaría mucho si sigo así. Me miré más cerca, era un monstruo disfrazado de humano, negué con mi cabeza, sabía que la vida me preparaba algo malo.

Tenía que hacer algo con mi cabello, tal vez cambiarlo de color o algo así. Busque mi armario un tinte que tenía guardado, lo había comprado hace tiempo preparándome para que algún día decidiera cambiar de 'look', era café realmente claro, casi rubio. Me metí al baño y cerré la puerta por detrás. Todo lo que pensaba era... ¿Qué pensaría ___tn cuando me viera?

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Dos semanas... creo que ya había pasado algo de tiempo desde que Harry me dejó y descubrí que estaba vivo, bueno solo han pasado un poco más de dos semanas pero se siente como una eternidad para mí. Busque a Harry por todo Los Angeles dos veces y no encontré nada, busqué por aquél brillante cabello Castaño que ya era tan familiar para mi vista. Aquél que había pasado por entre mis dedos varias veces. Comenzaba a pensar que, de nuevo... me dejó, me dejó haciéndome saber que no me quiere más en su vida.

Intenté continuar leyendo el capítulo de un libro en mi clase de literatura, pero ahora era imposible. Me sentaba hasta al fondo yo sola, cada vez que miraba hacia mi lado, pretendía que Harry apareciera de la nada y me sonriera como solía hacerlo de vez en cuando, pero el escritorio de al lado siempre permanecía vacío.

Era jueves y, de nuevo, teníamos un maestro suplente. Él era joven, alrededor de unos veinte años. Recuerdo cuando nos dijo lo joven que era cuando se graduó de la universidad, ya que estaba en clases avanzadas. Era guapo, pero lo digo de nuevo, yo solo tengo ojos para mi Harry. Tenía cabello marrón que apenas alcanzaba a cubrir sus ojos, y era un poco más alto que yo. Dejé de mirarlo y me enfoqué en la lectura de nuevo, después de un largo rato, el timbre sonó finalmente.

— De acuerdo, jóvenes, pueden salir. — Nos dijo el nuevo profesor.

Salimos del salón de clases, alguien me golpeó levemente el brazo. Era Niall que apenas se estaba acercando a mí.

— ¡___tn! — Me saludó con una gran sonrisa. Le sonreí, luego intente golpearlo también, pero el esquivó mi puño. — Mejora tu puntería. — Rio.

Mis ojos se encontraron con los de un chico que estaba afuera, era nuevo y ya tenía una multitud de chicas alrededor de él. Era el típico 'conquistador' del colegio, y vestía como tal, traía puestos unos Jordan, una camiseta blanca de cuello en V y jeans grises. Su cabello negro estaba ligeramente despeinado casi llegando a sus cejas honestamente para mi solo era un engreído. De nuevo miró hacia mí y me sonrió sin dejar de mirar mis ojos. Él siguió mirándome mientras las chicas alrededor de él me veían y se susurraban cosas entre ellas. Niall y yo pasamos por donde él estaba, sentí su mirada aún sobre mí.

— Es un cretino. — Me dijo Niall al oído.

Me di la vuelta para mirar el rostro de Niall, se escuchaba celoso, al voltear, me di cuenta de que nunca había mirado su rostro tan cerca. Su cabello rubio estaba creciendo, estaba por sus ojos y algunos mechones eran más largos que otros, haciendo que pareciera que traía flequillo. Sus ojos miraron hacia mí de una forma muy linda, yo sólo le llegaba al hombro... igual que Harry. Negué con mi cabeza.

— Niall, yo no lo veía con la misma intención — Niall sonrió y me dio un golpe en el brazo.

— Pero sabes que te gusta algo... ¿o no? — Me contestó en tono pícaro. Yo lo golpeé en las costillas. — A menos que seas del otro lado — Se rio, de nuevo.

En ese momento Niall desapareció entre los pasillos mientras se burlaba de mí. ¿Que pretendía? No soy
Bisexual o lesbiana. Me reí, y corrí detrás de él para alcanzarlo.

— Hey, señorita. — Salió no sé de donde, sonriendo, y de repente… ¡MUACK! Me besó lentamente la mejilla.

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Capitulo 32.

Me quedé inmóvil. ¿Acaso me acaba de besar? Tenía ya la costumbre de que siempre que uno de mis amigos me besaba en la mejilla, borrarlo con mi mano, pero temía que eso dañara sus sentimientos. Niall miró a lo lejos y después me miró de nuevo. Yo dirigí mi mirada hacia donde él había mirado. Era el mismo chico que había estado afuera mirándome, ahora estaba parado en las escaleras, me estremecí... cretino.

Niall me hizo una seña con su cabeza para dirigirnos hacia la cafetería, pasamos por un lado de él, ambos estábamos muy cerca, nuestros brazos rozaban. Por un minuto me sentí protegida de la mirada de aquél idi’ota, pero Niall lentamente pasó su mano alrededor de la mía. Se me fue el aliento por un momento, su mano era suave y cálida, la de Harry era firme y también suave, justo como a mí me gustaba. Entramos a la cafetería, nos acercamos hacia donde estaban nuestros amigos. Fernanda, Jane y Lucy estaban hablando entre ellas y pronto me vieron.

— ¡___tn, adivina que pasó! Vimos a ....— Se detuvo al ver la mano de Niall y la mía juntas.

Jane y Fernanda miraron hacia nosotros y comenzaron a hacernos burla. Se acercaron a nosotros con risitas y abrazándose una a la otra.

— ¡Lo sabía! Tenía que pasar tarde o temprano. — Dijo Jane con gran entusiasmo en su voz. — Me alegro mucho por ustedes chicos.

— Hacen muy linda pareja. — Agregó Fernanda.

Traté de hablar, pero ellas me interrumpían cada vez que intentaba negarlo. Niall estaba mirando hacia mí sorprendido y con una gran sonrisa. Negué con mi cabeza, no era lo que parecía.

— Iré por tu almuerzo. — Me dijo Niall.

Caminamos hacia las mesas mientras mucha gente nos veía con curiosidad, y con miradas algo raras. Luego hubo un rato en que el equipo de basketball de Niall nos miraba y reían, hacían sus típicos apretones de manos. Me hizo sentir como si fuera un trofeo.

Después de ir por nuestro almuerzo nos sentamos afuera, al aire libre, en una mesa que estaba debajo de un árbol. Niall aún estaba tomando mi mano y cortésmente la soltó para comer. Me sentía algo perdida... ¿desde cuándo salía con Niall? Hice a un lado mi ensalada y lo miré a él picando sus uvas con un tenedor, él notó que lo miraba y dejó salir un largo suspiro.

— Debí hacer esto antes de aparentar ser algo más... ¿Quieres salir con migo ___tn? — me dijo de repente.

Se quedó ahí mirándome con su cabello moviéndose con el viento, agitándolo de manera que podía ver claramente sus ojos. Su piel brillaba en la sombra haciendo ver su tonificado cuerpo debajo de su camiseta gris. Sus ojos se clavaron en los míos, me pregunto qué era lo que veía en ellos.

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Fue un poco irrespetuoso de mi parte haber tomado su mano sin pedirle permiso, pero no me gustaba la manera en que aquél cretino miraba hacia ella. Ahora, finalmente había tenido el coraje para pedirle que fuera mi chica, mi única chica, porque la quería desde que descubrí que Jasmine no era para mí. Amé la manera en que ella estuvo ahí ayudándome justo cuando nadie más entendía mis sentimientos. Además, ella era hermosa.

Le pregunté entonces si quería salir conmigo. La miré fijamente a los ojos, y vi un brillo familiar en ellos, aquél que siempre encuentro cuando la miro a los ojos. El viento soplaba contra su cabello, el cual golpeaba ligeramente contra su rostro, sabía que ella necesitaba tiempo, y yo estaría ahí por ella, así como lo estoy ahora.

— Está bien ___tn. No tienes que responderme ahora. — Le dije mientras sonreía cortésmente. Miré hacia abajo. Era evidente que ella no sentía lo mismo que yo.

— Niall... yo...— La vi queriendo comenzar a llorar, respiró lentamente y continuó. — Necesito tiempo Nialler, pero te responderé, solo que no ahora... tengo que pensarlo. — Dijo, yo solo asentí con mi cabeza.

—Está bien, solo recuerda que yo siempre estaré aquí, por ti ___tn ... porque te quiero. — Le contesté con la mayor sinceridad posible. Estaba siendo muy cursi, nunca decía mis sentimientos en voz alta. Me levanté y miré hacia el cielo.— Te veo luego.

Me aleje, sintiendo un dolor en mis entrañas mas profundo que el océano.

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Sentí mis pulmones romper mi respiración mientras lo veía levantarse e irse con los hombros caídos. ¿Qué había hecho? ¿Por qué me sentía así con Niall? ¿Estaría enamorándome de él?

Literalmente, hubiera golpeado en la cara a cualquier chico que me besara la mejilla, me tomara la mano o pretendiera salir con migo. ¿Por qué era diferente con él?

Sentí el viento torturarme, ya que soplaba hacia el lado de derecho de mi rostro, haciendo que me estremeciera y sintiera mis ojos quemarse de nuevo. ¿Qué diablos pasaba conmigo? ¿Por qué estaba tan confundida? ¿Por qué me dolía el corazón por no encontrar respuestas?

Miré hacia su plato, hacia las uvas que no se había terminado. Niall había estado sentado aquí conmigo hace un minuto picando su comida, ahora está dolido. ¿Acaso sabía que no siento nada por él? Exhalé y sentí una lagrima bajar por mi mejilla. Me levanté, sabía que tenía que decirle lo que sentía. Tenía que ser honesta.

Caminé por los alrededores buscándolo, pero no lo encontré. No estaba en su casillero, tampoco con su equipo ni en ningún lugar que pudiera recordar. El timbre sonó, tenía que irme a clase. Entré a mi clase de historia, ahí estaba la misma multitud de chicas, ugh, justo lo que necesitaba... el cretino. Entré y me senté alado de Lucy y Zayn, agaché mi cabeza.

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Capitulo 33.

— Hey, ___tn ¿irás? — Me pregunto Lucy.

— ¿Eh? — Fue muy inesperada su pregunta, me agarro distraída.
— A la fiesta, es éste sábado, en la casa de Steven. — Oh, Steven. Era un amigo muy cercano a nosotros.

— ¿En dónde? — Pregunté.

— En su casa, sus padres saldrán ese día. — Me dijo Zayn sonriendo. Lo pensé.

— Tal vez.

— Ahs, ¡___tn! ¡Tú nunca vas!

Suspiré. En ese momento toda la clase se sentó en silencio cuando nuestro maestro de historia entró y trató de animarnos asignándonos las tareas para hoy, entenderán que eso no anima a nadie. Me levanté para tomar un paquete de hojas que tenía que resolver el fin de semana, y vi a aquél cretino a mi lado. Me sonrió coqueto mientras le pasaba sus hojas de trabajo. Estaba a punto de irme y mirar hacia lo lejos cuando me habló.

— Eres ___tn, ¿verdad? — Me preguntó, miré hacia un lado y asentí con la cabeza. — Soy Jake. — Continuó, ¿A quién le interesa su nombre?

— Un placer. — Le respondí fríamente.

Me alejé un poco de él y me senté en mi silla, sintiendo sus ojos clavarse en mí. Me encogí en mi asiento, gire mi cabeza y él me guiñó el ojo desde su lugar. No necesitaba otro problema como ése tipo.

— ___tn, ¿Aquél tipo esta ligando contigo? — Me preguntó Zayn apuntando hacia.. ¿Cuál era su nombre?

— No que yo sepa, es un cretino. — Le respondí. Cretino, no podía encontrar una mejor palabra que encajara con su personalidad mejor que esa.

— Pero míralo, es tan sexy. — Me decía Lucy. Puse mis ojos en blanco, suspiré. — Escuché que está en el equipo de Futbol, ¡Oh Dios! Me acaba de sonreír. — Dijo emocionada.

— No pondría mis ojos en ésa cosa, Lucy, no se ve confiable. — Le dije.´

— Bah, como tú digas… ___tn — Me contestó burlándose de la manera en que Niall decía mi nombre, Zayn se rió.

— Hey, por lo menos no me llamo como uno de los personajes de 'snoopy'. — Recordé a 'Lucy Van Pelt', amaba a snoopy. Zayn se rió más fuerte, Lucy me golpeó en el brazo.

— ¿Señoritas? — Lucy levantó su mirada, y yo... ya suponía quien era. — ¿Saben en donde puedo tomar un libro? — Nos dijo el imb… Jake, quise decir Jake. Lucy sonrió, se levantó y lo llevó hasta un armario que se encontraba en una esquina.

— Ese chico me da mala espina. — Me dijo Zayn, asentí. ¡Por fin alguien con cerebro!

— Diles eso a todos.

Note cómo Jake le dedicaba a Lucy otra sonrisa coqueta, y ella volvía a derretirse, literalmente; casi saltaba de felicidad. Rodé los ojos y terminé mi trabajo acerca de la 2da Guerra Mundial.

Después de clases busqué el auto de Niall, no estaba ahí. Suspiré. Me dí la vuelta y caminé hacia los casilleros, tenía práctica de soccer. Escuché a alguien azotando un balón de basketball. Me detuve y eché un vistazo al gimnasio. Niall.

Antes de abrir la puerta me detuve, estaba solo y no tenía su camiseta puesta. Traía puesto sus shorts de basketball negros y sus Jordan's negros también. Aventaba el balón desde cualquier punto donde estuviera parado, y nunca fallaba. Él trabajaba duro y se enfocaba demasiado, me recordaba a mí cuando estaba cerca de la portería, casi anotando un gol.
Me mordí el labio y lentamente entré, tratando de no hacer ruido con mis converse. Me acerqué dejando mi mochila caer al suelo, estaba más cerca, tanto que podía escucharlo trabajar sus músculos. Me detuve justo en la salida de la línea del límite de la cancha, y crucé mis brazos. Lo miré mientras aventaba de nuevo el balón, y entonces me vio. Se detuvo de inmediato y me miró fijamente. Mantuve mi expresión neutra, él se acercó, dejó caer el balón y se paró delante de mí. No sé cómo me veía yo pero Niall me abrazó tan pronto como estuvo enfrente. Yo también lo abrasé sintiendo su piel bajo mis brazos... me recordó a Harry. Sonreí mientras escuchaba los latidos de su corazón.

— Lo siento ___tn. — Deshizo el abrazo y se acercó un poco más a mí hasta que nuestras frentes se tocaban entre sí. — No puedo hacer que me quieras. — Continuó.

— Niall... — Esperó a que continuara. — Creo que siento algo por ti, pero estoy confundida, no sé qué pensar. -Deje que las palabras salieran de mí.

Algo nos interrumpió... el flash de una cámara. Volteamos y vimos a la chica encargada del periódico escolar. Recuerdo que su nombre era Marisol, o algo parecido. Ella nos vio y nos sonrió.

— Oigan, ustedes dos estarán en el periódico escolar como la nueva pareja... bueno, si no les importa. — No pude hacer otra cosa más que reírme. — ¡Se ven totalmente lindos! Sabía que éste era un gran momento para una foto, les deseo lo mejor. — y con eso último se alejó de nosotros saliendo del gimnasio.

— ¡Ops!, no traigo mi camiseta puesta. — Me dijo Niall. Se veía feliz, radiante, mientras buscaba su camiseta.

— Me tengo que ir Niall. — Él sonrió y me alcanzó para abrazarme.

— ¡Ve por ellos tigre! — Contestó, con una gran sonrisa yo solo me rei.

Reí, me acarició el cabello y me soltó, entonces me alejé. Caminé hacia los casilleros, me cambie de ropa. ¿Que acababa de hacer? Me quede inmóvil, aún no me había puesto mi camiseta, mi sostén era negro, saqué mi camiseta y me la puse. Mi entrenadora llegó de repente, ella esperó hasta que me pusiera los zapatos y unos guantes que siempre usaba yo no era la portera eran como esos guantes que la gente usa en invierno pero yo me sentía cómoda usándolos en los juegos eran negros con líneas rosas.

— Tenemos que eliminar a ese equipo para el juego de mañana, ___tn. — Me dijo la entrenadora, se llamaba Wendy.

Salí escuchando nuestra rutina, corrí para encontrarme con mi equipo. Me sentía feliz, sonreí mientras llamaba al equipo para la formación.

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Estaba en el campo con ésta chica que era tremendamente sexy, sonreí. La estaba… seduciendo detrás de un árbol, lejos de la vista de todos. Obtuve lo que quería en menos de 15 minutos. La chica gemía y se apretaba a mí por mi cintura.

— ¿Así que… te gusta esto no? — Le pregunté.

Ella gimió más y cuando por fin terminamos la hice a un lado para que se fuera, se subió sus jeans y me besó. La empujé hacia un lado, sonreí.

— Lárgate, zorra. — Le grité.

— Pero... ¿Qué?

— ¿Acaso no me escuchaste? Ya obtuviste lo que querías.

Se perdió en mis palabras por un minuto y después se acercó para darme una bofetada. Pretendí que me dolió. Luego vi su enorme trasero correr hacia la escuela, fue una presa fácil, tengo que admitirlo, pero olvidé su nombre. Caminé por la escuela, me dirigía hacia mi convertible, de repente vi a ___tn corriendo con un grupo de chicas. Ella era la capitana del equipo de soccer. La miré patear el balón dentro de la portería... nada mal. Después de todo qué podía esperar, era la capitana. Se acercó al equipo, yo seguía viéndola. Era una criatura realmente hermosa. Me sonreí mientras la veía inclinarse para atrapar el balón. Me alejé de ahí mirándola, la conseguiría pronto.

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Capitulo 34.

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Después de la práctica de soccer tomé un baño en las regaderas, salí y me sequé el cabello dejándolo caer por mis hombros. Leí mis mensajes de texto. Todos los días de práctica eran como éstos, cansados y... sudorosos.

Pasé por el gimnasio y salí de la escuela, ya estaba en camino a casa.

Caminaba por la banqueta cuando de repente escuché un carro estacionarse cerca de mí, me di la vuelta para ver aquel dodge negro, sonreí. Niall me abrió la puerta, yo entré.

— Hola campeona. — Me saludó.

Llegamos a mi casa en un par de minutos, le sonreí y él me tendió su mano, yo le di la mía, me acercó hacia él para besar mi mejilla, me quedé inmóvil y sentí mis mejillas enrojecer. Él sonrió, su rostro estaba muy cerca del mío, lentamente me alejé de él.

— Gracias.

— Por el aventón ¿verdad? — Alzo levemente las cejas. Yo me reí, él sonrió juguetonamente.

— Sí, por eso ¬¬.

— Cuando quieras ___tn.

Me bajé del auto y él esperó hasta que estuviera dentro de mi casa, entonces lo escuché irse. Me sentí un poco mareada, fue como sentir culpa dentro de mí.


Caminé hacia la cocina y saqué una manzana, subí las escaleras. El sentimiento de culpa que sentía... era porque que aún quería a Harry, y... también quería a Niall. Me dejé caer en la cama y golpeé mi almohada. ¿Por qué? ¿Por qué estaba actuando así? No me sentía así seguido pero era como sentirse... bueno, sucia. No puedo obtener siempre lo que quiero o necesito. Me levanté mientras me murmuraba a mí misma y terminaba de hacer mi tarea. Tiré lo que sobró de mi manzana mientras seguía pensando las respuestas para todas esas preguntas que me asaltaban. ¿Eso estaría bien? ¿Por qué me sentía tan diferente a mí misma? ¿Es porque Harry se había ido? Si Harry regresara.... ¿Dejaría a Niall? En primer lugar... ¿Por qué hacia esto?

Bajé las escaleras y encendí la televisión, apreté los puños con mucha fuerza cuando en las noticias mostraron el cuerpo del Profesor Adams, lo habían encontrado. Había otras dos desapariciones ocurridas en Los Ángeles, Harry estaba detrás de todo esto. Yo lo amaba, pero algo me estaba acercando a Niall, y yo sabía muy bien por qué. Apagué el televisor, no quería escuchar más historias deprimentes.

Que estaba pasando con mi vida. ¿Por qué está pasando todo tan lento? Se siente como si hubiera pasado una eternidad desde que Harry dijo que me amaba. Tal vez yo estaba bien al principio, él solo me había usado, usó sus buenas mentiras para conseguir lo que quería... negué con mi cabeza. No. Harry me había demostrado varias veces que en verdad me amaba.


Fui hacia la cocina, me preparé una ensalada, y entonces escuché a mis padres llegar a casa. Les sonreí mientras entraban a la cocina. Por lo menos mis padres no confundían mis pensamientos.

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— ¡Ve, ahora! — Me gritó Alex.

Corrí hacia la camioneta y nos fuimos a la máxima velocidad. Casi nos atrapaba el FBI y ahora estábamos corriendo por nuestras vidas. Cuando llegábamos a la casa, un pensamiento repentino se estrelló en mi realidad, y supe que tenía que tomar medidas. Salí de la camioneta antes que Alex detuviera el auto, sus ''amigos'' salieron de la casa de Alex mientras él estacionaba la camioneta en la cochera. Corrí hacia mi habitación y tomé mi maleta y comencé a meter ropa en ésta. No estaba dispuesto a seguir haciendo esto por el resto de mi vida.

—Ha... ¿¡Qué m¡erda crees que estás haciendo!? — Alex entro en la habitación, gritándome. Yo lo ignoré y de repente sentí que me tomó de los brazos y comenzó a sacudirme.

— ¿¡Quién te crees que er.... — Seguía gritándome, pero lo interrumpí.

— ¿¡Quién coño crees que tú eres!? — Casi quería golpearlo ahí mismo. Alex me tomó de los hombros.

— Harry, no vas a ir a ningún lado. — Dijo, luego lo golpeé en la barbilla, él calló gritando de dolor. Me colgué mi maleta por mis hombros y lo dejé tirado en el suelo.

— Cómo me gustaría matarte. — Dije entre dientes mientras bajaba la mirada hacia él.

Me alejé del dolor de hacer cosas fuera de mi voluntad. Yo no quería esto, me reí a mí mismo mientras caminaba sobre el césped. Solía ser completamente opuesto, caminé por cuatro cuadras y de repente vi aquél grupo de grandes maricas hablando por teléfono. Varios de ellos colgaron y se me quedaron viendo. Continué caminando y negociando con migo mismo, los vi seguirme. Comencé a correr, vi a más chicos fornidos enfrente de mí antes de doblar la calle. Me subí a una cerca y salté, llegué a la otra calle, vi una sombra.

Todo era negro.

Sentí un trapo cubrir mi rostro, gruñí por el dolor de mi cabeza. Era la primera vez que alguien me hacía eso. Mis ojos se abrieron y me di cuenta de que me había quedado dormido. Alex estaba mirando hacia mí, él tenía un ojo negro... iba a morir otra vez. Se puso de pie enfrente de mí apuntando con un cuchillo hacia mi pecho. Frunció el ceño.

— Debiste haber pensado mejor, Harry. No puedes dejar las cosas a las que te entregaste por mucho tiempo. — Presionó el cuchillo contra mi pecho, sentí su punta afilada rasgar mi camiseta. — Haré que te arrepientas, Harry.

— Mátame. — Le dije, sabía que no iba a hacerlo. Alex se paralizó ante mis palabras, miró hacia lo lejos y respiró profundo.

— No, sé que matarte será mejor para ti que para mí. Pero... — Miro hacia mis ojos de nuevo. — Creo que... mejor tendré que lastimar a alguien que te lastime más a ti.

Me golpeó el pecho una vez y se fue. Entonces, mi cerebro captó todo. Alex iba a ir detrás de ella.

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dsdfadfdfgadfgadfgadfg. Espero les gusten los caps. Si para mañana tengo 5 comentarios, subo maraton como hoy, y bueno, como los otros dias. :3

Pd: las amoooooooooooooooo. :)

AAAAAAAAAAHHH

MORI

S
I
G
U
E
L
A

matara a rayitaaa :O
que miedo!!! yo mejor le hacia caso a Niall, es un amor
...
SIGUELA LA AMO<3
Besos n_n

Capitulo 35.

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Finalmente, era viernes.

Me sentía feliz y entusiasmada, por alguna razón. Estaba soleado afuera, sentía como si el sol golpeara mi ventana tal cual una bomba. Me puse unos shorts y una blusa color azul cielo, me gustaba mucho, combinaba con los shorts; en mis pies, supras azules. Tomé mi mochila saliendo de mi habitación. Llegué a la cocina y tomé una barra de granola y algo de leche. Cogí una bolsa de unas papas fritas mientras salía.

Caminaba por la banqueta cuando vi a Niall de pie frente a su auto, esperándome.

– Hola ___tn. Te ves muy linda hoy. – Me dijo mientras se acercaba a abrazarme. Aspiré el dulce aroma de esa colonia que era tan típica de Niall. Él me abrió la puerta – Después de ti.

Me subí a su auto, él cerró la puerta mientras se daba la vuelta para entrar e irnos a la escuela. Me quedé callada un minuto, después suspiré y hablé.

– Niall, sé que te dije ayer que estaba confundida. – Comencé a decirle, él me miró en espera para que continuara. – ¿Crees que puedas darme más tiempo? Bueno, es que necesito sentirme mejor. – Proseguí.

Él miró a lo lejos y le dio la vuelta al volante para estacionarlo en el espacio para estudiantes de la escuela, detuvo el auto. Lentamente giró su cabeza para mirarme.

– Yo te entiendo, de verdad. Y no te preocupes por mí, yo esperaré, y por alguna razón... – Se acercó a mí. – Sabía que necesitarías tiempo – Era un gran chico, mejor que cualquiera que conocía.

– Nialler, – Le dije en voz baja, no le había dicho a nadie esto – sabes, a veces siento que me pierdo sola, siento que mi cabeza me vuelve loca, siento que no sé qué hacer... a veces, me siento asustada. – Le dije, me refería a que me sentía asustada por lo que podría pasar. Niall tomó mi mano y la apretó, miré sus lindos ojos.

– Si pierdes la cabeza, entre todos tus pensamientos, yo te ayudaré a encontrarla. No quiero que te sientas así, para eso estoy yo.

Recargué mi cabeza en su hombro, era tan cómodo. Había aislado mis pensamientos de todo mundo excepto de Harry, pero Harry no estaba aquí porque... me dejó, de nuevo. Suspiré y Niall acarició mi cabello con sus dedos, vi a un chico tocar la ventana del auto del lado de Niall haciéndole pulgares hacia arriba, Niall sonrió un poco y después me miró

– De verdad me importas ___tn. – Me dijo en tono delicado, sonreí.

Me dije a mi misma en mi mente que también él me importaba.

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Sonreí mientras ___tn ponía su mano sobre la mía. Entonces escuchamos el timbre de la escuela sonar, ella se alejó un poco de mí y ambos nos bajamos del auto. Ignoré los comentarios que hacían algunos chicos de la escuela a nuestras espaldas. La acompañaba a su clase, nos soltamos de la mano, me miró y sonrió, amaba eso de ___tn.

Ella no era cualquier chica, era inteligente, dulce, agradable, y no era una zorra. Ella sabía siempre lo que estaba bien o lo que estaba mal, siempre se preocupaba por cosas que la demás personas de hoy en día les da igual. La conocía desde hace mucho tiempo, recordaba casi cada expresión y recuerdos de la infancia de ella.

Miré hacia las escaleras, ahí estaba aquel cretino. El nuevo cretino de la escuela. Por supuesto, estaba con su ya tradicional tripulación de chicas alrededor de él, me sentía mal por aquellas chicas. Había algo que odiaba de él. Me estremecí... odio no era la palabra correcta. Sentía unas ansias de golpearlo fuerte en la cara.

___tn se acercó más a mí y no se dio cuenta de que ahí estaba el chico nuevo, bueno, parecía que no se había dado cuenta. Fuimos hacia su clase y vi entonces que él la miraba de una manera... divertida. Él continuaba viéndola y eso me sacaba de quicio. Sonrió hacia donde yo estaba, de una manera que me decía "La conseguiré pronto".

Me dirigí hacia él, con la sangre hirviendo y mis puños apretados. Sentí a ___tn correr hacia mí y agarrarme del brazo.

– ¡Hey, tú. Imbécil! ¿Qué estás viendo? – Le grité, estaba muy molesto.

– ¡Niall...!

El chico se acercaba con una sonrisa en su rostro.

– ¡Estabas viendo a mi chica! ¡Imbéc¡l!

– Claro que la veía, está ahí parada. ¿Cómo no verla? – Me respondió el bastardo.

Miró hacia ___tn, y le guiñó el ojo, en ese momento le tiré un puñetazo en la cara. Lo tomé de nuevo y lo azoté contra la pared, de repente sentí unas manos sobre mí. Ignoré todas las voces y el drama que había alrededor de nosotros, sabía que él quería algo de ___tn. Le haría algo que la lastimaría. Lo presentía. Entonces, alguien me estaba separando de aquél imbécil, lo fulmine con la mirada.

El director González, era un hombre alto y de 30 años, tenía cabello obscuro y ojos verdes. Apenas y me di cuenta de que me estaba gritando justo en mi cara.

– ¡Esto no tiene nombre! ¡Es nuevo en esta escuela, y ¿lo recibes con puñetazos?!

Me llevó a su oficina. Puse una cara aburrida, pensé: ''¿no tienes otra cosa mejor que hacer?'' Estúpido director. Finalmente el director se detuvo y tomó un vaso de agua. Bueno, él no era muy viejo, pero cuando desató su ira sobre mí, podía ver su cabello blanco crecer detrás de sus orejas. No me molesté en explicar ni defenderme ya que él no había hablado. Tal vez no quería escucharlo.

– Te dejaré salir de ésta, Horan. – Miré a sus ojos sorprendido, él me sonrió gentilmente. – Con una condición. – Agrego. – Quiero que tú y tu equipo ganen el juego que habrá dentro de dos días. – Parpadeé sorprendido, esperé, pensando que era una broma. ¿Estaba bromeando, verdad? – Ya te puedes ir Horan.

Me levanté y sonreí, caminé hacia la puerta. Me di la vuelta para verlo, seguía sentado en su escritorio.

– La victoria está de nuestro lado, profesor. – Sus labios se extendieron para formar una amplia sonrisa.

Salí de su oficina, pretendía tener una cara de depresión mientras caminaba en medio de la multitud de chicos y chicas que estaban de metiches para ver qué me decía el director, caminé entre ellos mientras me hacían caras y gestos extraños.

Me detuve. Justo ahí estaba aquel imbécil, caminé hacia él hasta que me di cuenta de lo que estaba haciendo. El cretino estaba discutiendo con una chica, y también la estaba maltratando, insultándola. Los miré por un largo rato, definitivamente ése tipo no se acercaría a ___tn, no mientras yo estuviese cerca.

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fgsgsfgfsg. Hoy no tengo mucho tiempo, asi que subo este y otro cap nomas. :c

Pd: holiiiiiiiii.

Capitulo 36.

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Seguía mirando hacia todos lados mientras estaba en mi lugar. ¿Qué estaba pasando con Niall? ¿Se metió en problemas por golpear a Jake? Me sentía mal por todo eso. Estaba en la clase anterior al almuerzo, miré hacia el reloj, las manecillas corrían muy lento. Suspiré y me agarre la cabeza con ambas manos, repetía la escena en mi cabeza. La manera en que Niall corría inmediatamente hacia él, y cómo Jake trataba de hacerlo enojar, me estremecía. Era como si... él hubiera querido causar eso. Parpadeé. Niall iba a tener malos momentos ahora que Jake había entrado al colegio.

— ¿Señorita ___tn? — Levanté la mirada, toda la clase miraba hacia mí.

— ¿Sí? — Contesté. El profesor me miró fijamente a los ojos.

— Ponga atención, por favor. — Asentí y miré hacia el pizarrón.

Un siglo después, el timbre sonó. Tomé mis cosas y ya estaba en camino hacia la oficina del director. Me di la vuelta y caminé por el edificio de en medio, donde estaban todas las oficinas. Estaba por la esquina cuando casi tropiezo con una chica. Sus grandes ojos me hicieron detenerme, de repente escuché que le gritaban a sus espaldas, ella se dio la vuelta y comenzó a correr. La seguí con la mirada por un momento, después desapareció de mi vista. Un grupo de chicos reían muy cerca de mí, haciendo malos y groseros comentarios sobre la chica.

— ¡Perra! ¡Nos las diste muy fácil! — Gritó uno de ellos, tratando de controlar su risa. Los miré con enojo, me miraron a mí de la misma forma.
Lucy caminando hacia mí por el pasillo.

— Hey, ___tn ¿Qué pasó? — Me dijo y miró hacia aquél grupo. — ¿Qué está pasando?

— Aquellos sujetos estaban acosando a ésa chica — Le dije señalando la dirección por la que la chica desapareció corriendo.

— Oh, sí. ¿Es Angélica, verdad? — Me encogí de hombros, no conocía a la chica. — Dicen que ella estuvo con un chico ayer detrás de la escuela. — Continuó. La miré con asombro.

— ¿Cómo? ¿Con quién? — Le pregunté. Lucy dirigió la mirada a la punta de sus zapatos.

— Jake... — Murmuró. Comenzamos a caminar por el pasillo.

— Y... Ahora, ¿Cómo te hace sentir eso hacia él? — Le pregunté, ella miró a lo lejos. No me pareció que mi pregunta fuese lo suficientemente clara.

— Trataré de olvidar lo que dije de él. — Le sonreí, ella me devolvió. Se acercó a una mesa para atar los cordones de sus zapatos.

— ¿Qué pasó hace rato? — Me preguntó de repente. Solté un suspiro, me senté a un lado de ella.

— Niall se aventó hacia Jake porque me estaba viendo. — Sus ojos se hicieron tan grandes como dos platos. — No estoy bromeando, es enserio.

— Escuché que Jake tiene un ojo morado. — Reí. Si hubiera sido Harry..., me detuve. Sacudí mi cabeza. Sabía que Harry lo hubiera matado y después arrojarlo al océano.

— Hey, mira, ahí están Louis y Zayn. — Se acercaban a nosotras.

— Hola. — Saludo Louis.

— Escuché lo de Niall... — Me dijo Zayn, asentí con la cabeza. — Hubiera acabado con él si no hubiera llegado el director a separarlos.

— ¿Sera que ya podemos almorzar? Estoy hambrienta. — Lucy se levanto de la mesa, caminamos detrás de ella hacia la cafetería.


A lo lejos, el estaba sentado cerca de Jane, Fernanda y Liam. Caminé hacia ellos, abrasé a Niall. Me sorprendí de mí misma, lo abrasé con fuerza.

— Hola, Niña.

— Niall, lo que hiciste fue muy estu...

— Sí sí, fue estúp¡do. — Interrumpió — “No debiste hacerlo Niall” — Imito mi voz ¬¬, lo golpee en el brazo — Ya sé lo que me dirás.

— Por favor, no empiecen a hacer cosas enfrente de nosotros, estamos comiendo. — dijo Zayn, reímos y nos sentamos a comer con ellos.

Salí de clases, me dirigí hacia los casilleros, hoy tenía un partido. Tenía que encontrarme con mi equipo, una vez que estaba vestida, sentí vibrar mi teléfono. Contesté.

— Buena suerte, ___tn — Dijo Niall, al otro lado del teléfono — Estaremos ahí echándole porras al otro equipo. — Reí por su comentario, el también lo hiso. — Es broma, dedícame algún gol.

— Claro Horan.

— Te veo en un rato.

— Espero que pueda notarlos entre la gente, mejor ponte una falda de porrista. — Niall se reía, colgamos y guardé mi teléfono en mi mochila, y cerré el casillero.

— ¡Bien, Chicas! ¡Vengan todas! — Nos dijo la entrenadora.

Nos acercamos en grupo, ella nos coordinaba y nos repetía las reglas, de nuevo. Finalmente salimos de los casilleros y pasamos por los pasillos del gimnasio para entrar al campo de soccer. Nos echaban porras, aplaudían. Caminé hacia el final de la línea a un lado de la entrenadora, que me daba consejos. Vi al equipo contrario del otro lado, ellas vestían uniformes color verde y dorado, nosotras vestíamos azul y blanco representando los colores de nuestra escuela.

Mis amigos estaban en las gradas, en los lugares perfectos para apoyar a mi equipo. Caminamos y los saludé con la mano desde lejos, Niall y los demás hablaban y reían. Fernanda y Lucy me saludaban y gritaban cosas que no entendía, trataba de mantenerme sonriente. La entrenadora Wendy nos indicó que nos juntáramos. Hicimos un círculo y juntamos nuestros brazos en el centro mientras gritábamos: ¡Vamos equipo!

Entramos al campo y tomamos nuestras posiciones, Jane me deseó suerte, era media. Jane también estaba en el equipo. Le sonreí y entonces el juego comenzó. Todo fue normal al principio, de repente tocaron el medio tiempo.

Me acerqué hacia donde estaban las botellas de agua. Llevábamos cuatro goles. Me senté y saludé a Niall que me estaba sonriendo desde las gradas. Me sequé el sudor de mi cara y volví entrar al campo. El juego estaba yendo bien hasta los últimos diez minutos, el otro equipo se estaba poniendo agresivo, una de nuestras defensas había sido golpeada en su rodilla por una chica del otro equipo, haciendo que se colapsara. El silbato sonó y todas la ayudamos a pasarla al otro lado del campo.

— ¡Eso es falta! — Les reclamaban a las grandulonas del otro equipo.

Se quejaron con el árbitro, rodé mis ojos, no quería hacer una escena.



Más tarde, anoté otros dos goles, íbamos ganando por cuatro goles. Comenzaba a agitarme, la otra portera tomó el balón y lo pateó hacia el centro, donde yo estaba. Levanté mi pie y sin darme cuenta pateé a mi otra compañera del equipo que estaba enfrente.

Luego, cuando apenas iba a patear el balón hacia mi compañera, estaba a punto de topar el suelo cuando de repente ¡ZAS! Alguien me había golpeado por detrás, el dolor se esparcía por mi espina dorsal hacia mi cuello y después hacia mi cabeza. Sentía el colapso mientras el dolor se hacía más fuerte.

Caí de rodillas, me encorve hacia adelante y traté de contener las lágrimas que ya se hacían presentes en mis ojos. El silbato sonó y mi equipo se acercó a mí. Vi al árbitro levantar una tarjeta roja a aquella chica que me había golpeado, la entrenadora Wendy me ayudaba a levantarme. Traté de usar mis piernas pero mi columna hizo el trabajo imposible.

— ¡___tn! — Sentí sus brazos alrededor de mi cintura, mientras me cargaba en sus brazos.
— Estoy bien Niall. — Le contesté débilmente.

Él me sonrió preocupado, me llevó hacia una banca. Él se sentó a un lado, ayudándome.

— ¿En dónde te duele, cariño? — Me preguntaba la entrenadora.

— Mi columna.

Ella tocó mi espalda, abrí los ojos que mantenía apretados con fuerza, casi gritaba. Me ayudó a quitarme la camiseta del uniforme, le dijo a Niall que fuera a traer una bolsa de hielo. Cerré mis ojos tratando de no llorar, pero eso me dolía horrores.

Sentí el hielo en mi espalda, luego, sentí escalofríos. Niall hizo una mueca de desagrado al ver mi columna y luego volvió hacia mí. Me abrazó mientras la entrenadora ponía hielo en mi espalda.

— Lo hiciste genial, Niña. — Me susurraba al oído.

— Gracias, pero, no fui lo suficientemente buena.

— ___tn, creo que tendrás que ponerte algo de hielo antes de que te acuestes a dormir hoy. — Me dijo Wendy, la entrenadora. Asentí.

Me enfoqué en el juego, las anotaciones decían que íbamos ganando por 3 goles. Casi nos alcanzaban.

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Mañana hago maraton. :3 Adiossssssss, que mi mama me dijo que si no salia me iba a pegar el teclado en la caradasdfadfgdagfskafjbhgadgfadhfa. okya._.

Jajajajajaja tu madre

S
I
G
U
E
L
A

siguelaaaa! prontooo!!
la amooo <3 y niall es un amoor :3
Harry ,me sigue dando miedo
pff que pasara con el golpe??
siguela, no me dejes con la duuda...
besos ;-)

o dios mio, la he leido y me eh enamorado de la novela, pequeño resumen de ella:

1-Harry era callado y rebelde, un chico malo, tn___ le comenzaba a gustar el
2-Harry comienza a sentir cosas por ella, ya que nunca a amado

3-unos hijos de k***, trataron de golpear a tn___ y Harry la salvo

4-ella conocio su casa y se besaron y se rebelaron su AMOR

5-tn___ supo que harry es un asesino

6-tn___ y harry en la camita mjiibi

7-despues a Harry lo mataron, te juro que llore y mi hermana me tomo una foto bhuyvbuv
8-despues de un mes ¡PUM!, se sabe que Harry esta vivo

9-la dejo porque su hermano Alex lo amenazo en matar a tn____

10-tn___y Nialler, loamo pero mas a Hazza

11-Ahora Alex quiere matar a tn____

12-ERES LA MEJOR ESCRITORA, TU NOVELA ES AMAZING

SIQUELA QUE LA AMO

nueva lectora

atte: kathy

nonono por queee yo no quieroque pase algo con naill!!!!
bueno xddd
me encanta cada vez mas
siguela !!!!!!!!