Enamorada de un criminal. Harry Styles y ___ ___.

Capitulo 20.

Estallé en mi interior, y fui hacia la sala de espera. Cuando entré, Louis, Zayn y Harry ya estaban ahí, y algunos miembros del equipo de Niall.
Corrí hacia ellos para que me dijeran lo que ya sabían.

— ¿Qué paso? — Pregunté asustada.

— Dicen que Niall está en serias condiciones, lo encontraron en un callejón cercano a su casa, alguien lo apuñaló. — Me dijo Zayn. Comencé a alterarme, imaginando la escena. De alguna manera sentía que todo eso había sido mi culpa.

— Fue algo horrible.

— ¿Porqué alguien haría una cosa así? — Pregunto Fernanda.

Me senté en un sofá y bajé la mirada hacia mis rodillas, estaba llorando. No estaba escuchando realmente su conversación, pero pude escuchar a Liam decir la parte más dolorosa de todas.

— Lo apuñalaron ocho veces, en todo su cuerpo.

Eché mis manos a mi cara, no pude contener mi llanto. Mis amigos me dieron una palmada para consolarme, sentía sus manos sobre mis hombros.

Fui la última persona que lo vio bien, en verdad sabía quién lo había herido, yo era la causa por lo que todo eso había pasado.
Pero, ¿qué podía hacer? ¿Debería regresar con Harry?

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Miré la televisión en mi sofá, tenía algo de sueño. Sostenía una botella de licor en mis manos, me reía de las cosas más estúpidas.

Aquel 'chico bonito' tuvo su merecido. Recuerdo la manera en la que gritaba y gritaba mientras lo lastimaba con mi navaja. Qué momento tan magnífico, qué risa.

Tuvo suerte de no estar muerto, tuvo suerte de que no lastimé su cara bonita. Tuvo suerte de que no terminé de asesinarlo ahí mismo.

___tn, es solo mía.

Bebí de mi botella de whisky hasta dejarla ya casi vacía. Qué día había sido ese. Le cambie los canales de la televisión hasta que di con las noticias, tenía un título en grande que llamó mi atención.

“Adolescente de 16 años fue apuñalado a medio día"

Mis ojos brillaron con anticipación, amaba la manera en que la gente gritaba, por lo asustada que estaba. Amaba la forma en que pensaban que iban a seguir viviendo... que gente más estúpida.
Tenia la idea de visitar a ___tn en la mañana. Mi hermano se había quedado en las afueras de Londres mientras yo iba a disfrutar de tres días de descanso.

Y aquí estaba, agotado, agotado, demasiado agotado. Agotado sobre mi sofá... sobre el sofá gris en el que alguna vez tuve a ___tn en mis brazos.

¿A quién quiero engañar? Jamás en mi vida voy a cambiar.

Tomé otro trago y dejé mis ojos caer en el sueño.

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Mamá me recogió en hospital tres horas después. En esas tres horas me la pasé en la sala de espera, preguntándole a cada doctor o enfermera que pasaba si Niall estaba bien, pero no obtuve respuesta alguna. Aún estaba llorando cuando mi mamá llegó.

— Cariño, siento mucho lo de Niall. — Me dijo mamá, en un tono suave.

Asentí, no podía hablar, o rompería en llanto de nuevo.

Llegué a mi casa y subí por las escaleras, jamás había subido tan lento. Caminé hacia mi habitación, me sentía tan ligera y transparente como un fantasma. Me dejé caer en mi cama.

¿Por qué lloraba? ¿Estaba llorando por Niall? ¿O tal vez por Harry?

De pronto me estrelle en la realidad, estaba llorando por ambos.

Todos esos pensamientos se enredaban en mi mente de una manera terrible. Todo tenía que ver conmigo, todo era mi culpa.

Escuché a alguien dejar algo sobre mi mesa, después cerraron la puerta. Mi madre me había llevado comida, un emparedado y una malteada de chocolate. Pero no había algo que pudiera comer ahora.

Un extraño pensamiento quedó atrapado en mi cabeza. Ir a ver a Harry.

Eran casi las diez p.m. aún tenía tiempo. Coloque dos almohadas bajo una manta, formando un bulto que simularía ser mi cuerpo dormido. Me salí por la ventana y me trepé al árbol. Tome la misma ruta que había tomado la vez anterior, cuando los policías estaban en mi casa.

Salté hacia el jardín y me arrastré entre las plantas para salir. Cuando estuve lista, comencé a correr. Corrí por aquellas calles como un fantasma. Llegué hacia las calles que sabía que me llevarían hacia su casa.
¿Por qué estaba tan desesperada por verlo? No... No era desesperación, era enojo. Quería reclamarle por lo que le paso a Niall.

Corrí aún más rápido cuando mi coraje se convirtió en energías. Minutos después llegué a su casa. Estaba igual como la recordaba, silenciosamente miré por la ventana de su habitación ya que él siempre la dejaba abierta. Eche un vistazo hacia dentro, todo estaba obscuro pero la luz de la luna hacía que pudiese ver algo.

Harry no estaba ahí. Caminé hacia la puerta y entré silenciosamente de puntitas, no escuché nada. Cuidadosamente entré por su vestíbulo y llegué a la sala.
¿Qué demonios estaba haciendo? ¿Porqué mi*erda estaba en esa casa? ¿Qué hará Harry? De algo estaba segura... no le tenía miedo.

Con ese último pensamiento en mi cabeza lo vi. Estaba dormido con su camiseta negra y sus jeans obscuros. Las líneas blancas de sus converse brillaban contra la luz.

Estaba dormido boca abajo en el sofá con una almohada bajo su cabeza. Sus pies colgaban del sofá, su mano izquierda colgaba también como si hubiera estado agarrando una botella que ahora estaba en el suelo, a un lado de él.


Se veía tan tranquilo... tan pacífico, todo lo contrario a lo que era. Después el arrepentimiento llegó a mi mente, una idea de último minuto comenzaba a quemarme la cabeza. Tal vez no había sido Harry.

Me acerqué y vi hacia la botella que estaba en el suelo, había estado bebiendo. Caminé después hacia la cocina. Me paralicé, su navaja estaba cerca del lavabo, llena de sangre.

Sí, definitivamente fue él.

El miedo se apoderó de mí, los latidos de mi corazón se aceleraron a un ritmo increíble. Por primera vez tenía miedo de estar ahí.

En ese momento escuché a alguien caminar detrás de mí.

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Capitulo 21.

Escuché pasos detrás de mí. Me di la vuelta y quedé totalmente perpleja. Era él, Harry Styles.

También se veía impresionado, ambos estábamos anonadados uno frente al otro. Luego dio un paso hacia adelante, la luz de la luna que entraba por la ventana me alumbró para ver su rostro, se veía inseguro.

Cuando dio un paso adelante, yo retrocedí. Harry se quedó perplejo por mi respuesta. Retrocedí un paso más. ¡Qué estúpida era! ¿Por qué estaba ahí? Me tenía que ir. Tenía que correr. Retrocedí mas esta vez, toqué la pared y comencé a correr, pasé por una puerta y corrí hacia su habitación. Cerré fuertemente la puerta detrás de mí. Luego salí por su ventana y lo escuché abrir la puerta de su habitación, salté y corrí. Me di la vuelta para ver que no saliera por la ventana también. De repente escuché que abrió su puerta principal.

Maldita sea, ___tn.

Corrí lo más rápido que pude, hasta sentir un par de brazos invisibles jalarme por detrás. Un par de manos se entrelazaron alrededor de mí, él me abrazó con fuerza.

— ¡Suéltame! — Logre gritar, luego sentí una mano cubrir mi boca.

Luché contra sus brazos, tratando de zafarme. ¿Por qué? Estaba realmente asustada. Me apretó con más fuerza y me llevó de nuevo por el mismo camino que habíamos venido. Sentí lagrimas resbalarse por mi rostro. Iba a morir.

— ___tn. — susurró mi nombre a mi oído mientras cerraba la puerta por detrás.

Harry me soltó y me aparté de él, el miedo recorría todo mi rostro, Harry fijó su mirada en mí.

— ¿Porqué lo hiciste? — Me aleje un poco más de él. — ¡___tn! — de nuevo dijo mi nombre pero ahora en un grito.

Me tomó por detrás y me volteó, tomó mis manos y me hizo mirarlo a los ojos.

— ¿Cómo pudiste ser tan frío? eres una bestia. — comencé a decirle, Harry quedó perplejo, yo temblaba. — ¿Porqué? ¿Porqué atacaste a Niall?. ¡Dímelo! ¿Qué chin*gados te ha hecho él? — Harry no esperaba que le gritara tan fuerte. Esperaba que por fin me dejara salir de ahí.

— Sí, yo lo hice. — Contestó con frialdad. Simplemente no podía creerlo. Quería golpearlo en la cara en ese preciso instante.

Lo miré enfurecida, obviamente él lo había hecho. Harry me miró y puso sus manos sobre mis mejillas húmedas. Retrocedí un paso pero él no me dejó ir.

— ¿Porqué regresaste? — Le pregunté, Harry se quedó quieto. — ¿Regresaste para matar a toda la gente que quiero?.

— No — No le creí.

— ¿Porqué dejaste ir todo tu coraje contra Niall? ¿Qué te ha hecho él? — Apreté los puños con fuerza.

— ¡Él te quiere!.

Me quedé congelada una vez más. Evidentemente, lo hizo porque sintió celos. Y en ese momento, supe que no podía continuar amándolo así, pensar en él, esperar a estar con él. Tenía que hacer lo que era mejor. Mejor no solo para mi, si no para todos. Traté de despejar mi garganta para que me saliera mejor mi voz.
Harry podría matarme por lo que estaba a punto de decir.

— ¿Y qué si yo también lo quiero? — Dije decidida pero sentí claramente la mentira entre mis palabras.

Era buena mintiendo, pero eso no significaba que después no sintiera culpa. Harry literalmente quedó como estatua, no esperaba eso, nunca pensó que podría decir eso. Su agarre se congeló, pero también se hizo débil. No podía respirar mientras veía el dolor reflejarse en sus ojos. Mis palabras le hicieron daño, lo sé.

Retiré sus frías manos de mi rostro mientras trataba de irme, Harry estaba tan paralizado como una escultura. Le mentí, y fue una de las peores mentiras que había dicho en mi vida. Liam comenzó a respirar aceleradamente, tomó mi rostro en sus manos de nuevo y se acercó a mí. Tan cerca que pensé que iba a juntar sus labios con los míos.

— Dime que lo quieres. — Me dijo con su ya típica frialdad.

Mi esófago bloqueó el aire que apenas sentía. Sus ojos... sus hermosos ojos miraban fijamente los míos. Su nariz tocaba la mía.

— ¡Dilo! — Exclamó fuerte.

Era lógico que no me dejaría ir sin pelear, eso era lo que sus ojos me mostraban.

No me creyó, tampoco yo.

Respiré profundamente, no podía decirlo, pero tenía que hacerlo. Abrí mi boca para decir aquellas dolorosas palabras que yo nunca podría pronunciar. Los ojos de Harry me hicieron todo mas difícil, los miré... estaban más hermosos de lo que recordaba.

¿Todo esto era por nuestro bien? ¿Podría vivir sin Harry? ¿Podría aceptarlo como él era?

Aún tenía mis labios entre abiertos para decir esas palabras. De nuevo sentí lágrimas resbalando por mis mejillas. No podía hacerlo. Cerré la boca y bajé la mirada, no podía hacerlo, lo peor era que él lo sabía.

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— ¿Y qué si yo también lo quiero?.

Dolió, si, me ardió por dentro. Esas palabras me destrozaron. Ella se preguntaba qué haría si... si ella también lo quería. Debí haberlo visto venir, más bien, ya lo veía venir. ___tn era perfecta, cuántas veces había pensado que no era para mí. Paralicé mis pensamientos y miré sus hermosos ojos. Entonces me di cuenta de algo, estaba diciendo la verdad... o simplemente era buena mintiendo.

Había cambiado demasiado rápido, ___tn no me amaba tanto como yo a ella. Una pequeña luz llegó a mi mente, como una vela en la obscuridad. Nuestros recuerdos. Llegaron a mi cabeza rápidamente.

Ella me dio la única cosa que jamás le hubiera dado a nadie, no a cualquier persona. ___tn me entrego su virginidad, a mí. Sus ojos parecían tristes. Ella quería escuchar que no la amaba, así podría irse, y hacer todo más fácil. Entonces, sus labios se entreabrieron y trató de hablar, respiré profundo, tomé con mis manos su suave y delicado rostro, acercándolo más al mío, y la interrumpí.

— Dime que lo quieres. — Le dije.


En ese instante ___tn se congeló. También miraba al pasado, lo vi en sus ojos. Ella también me amaba. Esperé a que me mintiera, sabía que lo haría.
Pero si en realidad no quisiera estar con migo, lo diría simplemente.... yo no me opondría. Mis manos se tensaron.

— ¡Dilo! — Exclamé más fuerte.

Comenzó a temblar, y respiró. Abrió sus labios, inhaló aire. Estaba a punto de decirlo, esperé.

Nada aún.

Todavía tenía sus labios entreabiertos apunto de hablar. Entonces más lágrimas comenzaron a escaparse de sus hermosos ojos mientras veía los míos. Volvió a inhalar, ésta vez lo hizo con un largo suspiro.

Esperé... entonces lentamente cerró su boca. Sus lágrimas bajaban ahora más rápido por sus mejillas. Bajó la mirada, no lo dijo, no podía. No me quería lejos, me quería hay con ella. Mi cuerpo se relajó un poco mientras el suyo caía de rodillas. Hice lo mismo y la abrace de la mejor manera que pude... ___tn estaba llorando.

Sentí algunas de esas lágrimas mojando mi piel. La abrace fuertemente, estaba en ese estado por mí. Yo la hice sentirse así, la dejé y se sintió abandonada. Me prometí a mi mismo que me quedaría, hasta que ella me ordenara que me fuera.

— ___tn. — Susurré su nombre mientras su rostro aún estaba hundido en mi hombro. — Te prometo que no te dejaré, hasta que tú me lo digas.

— Debes cambiar primero. — Lo dijo lentamente en mi oído mientras respiraba. — Por favor. — ¿Cambiar? Yo no quería cambiar. Si no lo hice antes ¿ahora podre? La escuché sollozar, sí podía hacerlo.

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Capitulo 22.

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Lloré en su hombro, su fornido y fuerte hombro. Sus palabras... significaron tanto para mí.

¿Me estaba mintiendo? ¿Era enserio todo lo que me dijo? Mi mente daba vueltas mientras mi respiración se calmaba un poco. Me quedé aferrada a los brazos de Harry. Mi cabeza me hizo sentir más confundida de lo que ya estaba.

La respiración de Harry y los latidos de su corazón me regresaron a la realidad mientras peleaba con mi mente. Sí, sí lo amaba... más que cualquier cosa. Su abrazo me apretó mas fuerte mientras yo recargaba de nuevo mi cabeza en su cómodo hombro.

— Harry, yo...— Comenzaba a decirle. ¿Yo qué? Quería preguntarle pero... exacto, siempre hay un ‘pero’.´

— ¿Sí? — Su voz esta vez se escucho dulce y suave, extrañaba eso.

— Tú... — Me aparté de su cuerpo para mirarlo a los ojos. — ¿heriste a Niall, verdad? — Harry me miro unos segundos a los ojos, luego bajo la mirada.

— Sí. — Y otra vez ese tono de voz frio y seco que tanto odio. Lo mire con disgusto y acaricié su frente, enredando el cabello que tenía enfrente de ésta. — Lo siento mucho. — Podía reconocer que en verdad estaba arrepentido. Lo comprendí, por sus palabras. Comprendí todo en ese instante.

— Te perdono, Harry. Pero por favor... por favor no lo hagas de nuevo.

Harry besó mi mano y yo inmediatamente lo abracé fuerte. Su suave respiración me hizo sentir mucho mejor. Tomé su rostro, lo acerqué hacia el mío y... lo besé. Sus labios... los extrañé mucho, lo amaba. Su abrazo se hizo aún más fuerte mientras me besaba.

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Toqué su rostro, sus brazos, mis nervios pulsaban. Mis manos sentían descargas eléctricas cuando la tocaba. La besé tan... suave, tan dulce. Ella era mi todo. La tomé de la cintura y la acerqué a mí. Ella era mi ángel después de todo. Me alejé un poco de sus labios y comencé de nuevo a acariciar su rostro con mis dedos.
Acaricié sus cejas, su nariz, boca, ojos, cuello. No había cambiado ni un poco, seguía tan hermosa como antes. Sus ojos se abrieron, los mire.

— Te amo ___tn — le dije suavemente. Ella sonrió y me abrazó nuevamente.

— También te amo Harry... siempre te he amado.

— Yo cambiare, por ti. Si me pierdo en el intento...

— Yo te ayudaré. — interrumpió. Me hizo sonreír.

Después de ésas palabras, todo pasó muy rápido. Se quedó dormida 20 minutos después. La cargué en mis brazos y la llevé a mi habitación, la dejé caer con cuidado sobre mi cama, me senté en el borde de ésta para verla dormir. Acariciaba su cabello.

Me levanté, fui hacia la sala. Miré fijamente hacia el sofá, donde horas antes estaba celebrando mi gran trabajo con licor, me senté ahí, con las manos detrás de mi cabeza.
___tn siempre había hecho mi vida mejor, haciéndome creer que podía ser un buen Harry. Sonreí, caminé hacia la mesa y revisé mi teléfono, tenía 3 llamadas perdidas, de mi hermano. Lo llamaría después.

Regresé hacia el sofá y recordé la navaja que estaba en el lavabo, me levanté de nuevo y la lavé. Eso fue lo que tanto asustó a ___tn. Revisé la cocina para que no quedaran evidencias. Todo estaba bien. Regresé otra vez al sofá.

Cuando volví a ver a ___tn enserio pensé que había caído un ángel, para castigarme por todas las cosas malas que alguna vez había hecho. No lo resistí, me quedé dormido a su lado.

Desperté, sentí un par de brazos tratar de cargarme. Abrí mis ojos… policías, en toda la habitación. ¡*******!

— Harry Styles, estas bajo arresto. — Exclamó uno de ellos.

Desperté completamente y empujé al sujeto que intentaba cargarme, lo golpeé en el rostro. Sólo había cuatro policías en mi casa. Podía con ellos.

Golpeé a otros dos dejándolos inconscientes, el más grande se acercaba a mí con rapidez. Saqué mi navaja.

Entonces comenzó a cargar su pistola cuando de repente me congelé. La puerta de mi habitación comenzó a abrirse.... era ___tn.

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Desperté, me encontraba en una cama muy familiar para mí, también con un olor muy familiar... el olor de Harry.

Abrí los ojos, estaba en la casa de Harry. Aún estaba obscuro afuera, miré hacia su reloj… 3:00 am.

En realidad, no fue su aroma lo que me despertó, había escuchado algo en el otro cuarto, probablemente en la sala. Me levanté y caminé lentamente hacia la puerta, entonces escuché una voz, pero no era la de Harry… escuché golpes y cosas romperse.

Abrí la puerta, tenía que saber que estaba sucediendo. No podía ver desde ahí la sala así que caminé, luego escuché las pisadas de alguien. Corrí hacia la esquina y vi entonces a Harry tomando de la cabeza a un... a un policía.

Había cuatro en la sala, tres de ellos inconscientes. Harry tenía al policía agarrado del cuello mientras el sujeto colgaba de él debajo del codo de Harry.

Muy bonito, ___tn. Hubiese preferido escapar por la ventana de la habitación de Harry a estar presenciando eso.

Harry se estremeció al verme pero no lo dejó ir, el policía trató de lanzarse contra la pared, intentado que Harry lo soltara. Harry reaccionó rápido y lo llevó hacia una esquina, y lo golpeó contra ella. El policía cayó al suelo, inconsciente.

Miré la escena, Harry sostenía una pistola, finalmente me miró y corrió hacia mí. Soltó el arma, me abrazó. Me di cuenta entonces que su respiración era agitada, demasiado agitada.

— Lo siento, ___tn. — Me dijo tratando de tranquilizarme. Lo miré de arriba abajo, estaba bien. Harry estaba tan sorprendido por lo que había pasado, lo abracé fuertemente. — No sé qué hacer. — Se escuchaba temor en su voz.

— Harry... — Algo me interrumpió. Escuché sirenas, Harry suspiraba fuerte. Se apartó un poco de mí.

— ___tn, escúchame. Quiero que corras ¿Entendido? — Sus ojos reflejaban impaciencia.

— ¿Qué hay de los policías?

— Ellos no te vieron, estoy seguro.

Tomó entonces mis manos y me apretó hacia él, yo lo abracé. Esto no podría estar pasando. Soltó mis manos y tomó mi rostro, me acercó al suyo.

— Te veré pronto, ___tn. Lo prometo. — Entonces supuse lo que iba a pasar.

— ¡No! ¡No, Harry! Por favor... ¡Por favor no te vayas! — Trataba de contener las lágrimas, pero ¿Qué creen?, intento fallido.

— Voy a regresar, te lo prometo. Te amo, por eso... si esto tiene que ser... así será.

Acercó mi rostro hacia el suyo, juntamos nuestros labios. Me aferré desesperadamente a él, no lo iba a dejar ir. Las sirenas de las patrullas se acercaban, me alejó de él y me llevó hacia el otro cuarto. Me llevó hacia la habitación, siguió guiándome hasta que estuvimos frente a la ventana.

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Capitulo 23.

-Ven conmigo Harry, vámonos de aquí. — Le decía desesperadamente.

— No, no puedo. Escúchame bien ___tn. — Inhaló y después prosiguió — Sal de aquí y una vez que estés fuera de peligro, trepa por aquella barda y camina hacia el éste. Encontrarás un gran árbol de Arce y das vuelta en esa esquina, estarás pronto en tu calle. — Me dijo, él tenía una mano sobre mi boca, para que no hiciera ruido. La quitó y de nuevo me aferré a él — Por favor.

Me miró fijamente a los ojos, y sabía entonces que tenía que escucharlo. Me aparté de él y mis ojos comenzaban a derramar lágrimas de nuevo, Harry sacó el collar del joyero, me lo dio.

— Es para ti. — Sonrió. Luego extendió su mano para que tomara el collar.

Lo agarré y después me ayudó a salir por la ventana. Me besó en los labios una última vez y cerró la ventana. Después corrió hacia la sala y lo perdí de vista.

Me di la vuelta para comenzar a correr como él me dijo. Me trepé y salté sobre la barda, salté y corrí. Era casi un milagro cómo es que aún podía ver la noche con mis ojos llenos de lágrimas, no podía mirar hacia atrás. Confiaba en Harry, él sabía lo que estaba haciendo. Corrí como Harry me había explicado y cuando me di cuenta, ya estaba en mi habitación.

Miré hacia el reloj, solamente habían pasado quince minutos desde que había despertado en la cama de Harry. Me senté en mi cama y lloré hasta quedar seca.

En mi mano aún seguía aquel collar. Me lo puse mientras me hundía en mi almohada, y me quedaba dormida.

Desperté y lo único que escuché fue silencio. Aún estaba viva, pero no había posibilidad de que Harry lo estuviera. Tal vez estaba... muerto. No quería pensar en eso, la sola idea me erizara la piel.

Eran alrededor de las diez a.m. Caminé hacia mi vestíbulo y me quedé ahí parada mirando hacia el horizonte, hacia una pacifica casa... algo que Harry nunca podrá tener. Tenía miedo de lo que le pudo haber pasado, probablemente lo arrestaron, entonces, otro horrible pensamiento vino a mí, uno que no honestamente no quiero recordar.

Regresaría, el lo prometió.

Después de lavarme los dientes, bajé las escaleras. ¿Debería estar en la escuela?

Revisé mi calendario, no, para mi suerte era sábado. Caminé por la sala frente a la televisión, Harry y yo alguna vez estuvimos ahí sentados. Caminé hacia la cocina, me paralice de nuevo, él había cocinado ahí. Todo, absolutamente todo, me recordaba a Harry en ese momento. Una vez más las lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos. Regresé y encendí la televisión.

Le cambié de canal varias veces, nickelodeon, disney, mtv, me detuve en CNN noticias. Estaban las noticias de último minuto, mi corazón dejó de latir... la casa de Harry.

- “La policía confirmo que el joven criminal atacó a cuatro policías en cuestión de segundos y acecino a otros cuatro antes de esconder sus cuerpos en los armarios, haciéndoles creer a los demás que se habían ido. Un simple adolescente de 17 años de edad, quien ha sido culpable de varios delitos.” - Dijo el reportero.

Las fotos de su casa estaban en la pantalla, después de un minuto, finalmente, su rostro apareció.

- “Hace unos algunos minutos, la policía visito una vez más la casa de Styles. Se sorprendieron al entrar en la primera habitación, el joven no había escapado, y desafortunadamente, sostenía un arma.”- continuó diciendo el reportero, entonces hizo una pausa y miró hacia la casa donde en el momento no se permitía el paso de nadie.

- "Styles lucho contra todos y falló, le dispararon cerca de su hombro derecho. Desafortunadamente, Harry Styles murió. Era un chico menor de edad, pero que realmente marcó historia en las investigaciones de la policía, culpable también del misterioso caso del adolescente apuñalado hace dos días. Regresamos al estudio con Claudia. "- No quise seguir escuchando.

Entonces, otro reportero comenzó a hablar, pero todo alrededor de mí estaba en silencio, mi cuerpo estaba temblando. Mi cabeza no tenía nada dentro, no podía pensar nada, estaba vacía.

Mis latidos eran lentos. El peso del collar que me había dado Harry había incrementado unas veinte veces mientras bajaba mi mirada para verlo.

Todo era silencio... Harry estaba muerto.
— Lo prometiste. — Dije entre susurros.

Miré a mí alrededor salvajemente, me levanté y me azoté contra la pared, me golpeaba y pateaba la pared. Me culpaba a mí misma.
Me detuve y me quedé perpleja, me dolía todo el cuerpo. Mis manos y mis puños estaban rojos, casi sangrando. Caí al suelo y lloré hasta que el corazón me dolió.

Lloré por horas, no sé cuantas. Esperaba a que Harry tocara mi puerta y me dijera que todo estaría bien, pero eso nunca iba a pasar. Jamás iba a volver.

Estaba en el hospital. Ya habían pasado cinco semanas desde que Niall estaba hospitalizado. Hoy sería el día en que lo daban de alta y se iría a casa.

Sus heridas se estaban mejorando, estaba vivo, era un milagro. Lo visitaba tres veces a la semana, con mis amigos o a veces sola. Niall siempre se veía feliz de verme, lo visitaba mucho ya que de cierta forman, me sentía culpable, como si hubiera sido mi culpa lo que había sucedido.

Había tratado de bloquear cualquier pensamiento de mi último amor. No quería recordar todo lo que habíamos pasado sabiendo que lloraría un río, yo ya no quería eso. No había progresado en nada, los momentos juntos regresaban por sí mismos a mi mente.

Me senté en la sala de espera con mis amigos, Liam, Louis, Zayn, Fernanda, Jane y Lucy. Estábamos felices y emocionados de que Niall estaba de regreso, teníamos la sala de boliche reservada para convivir con Niall dentro de dos horas. Era sábado.

No me hice la idea de asistir al funeral de Harry, y no fui. No hubiera podido soportarlo.

Miraba hacia alrededor, Fernanda y Lucy hablaban sobre esto y aquello, Jane estaba enviando mensajes de texto y leyendo una revista. Louis, Liam y Zayn hablaban sobre el partido de la noche anterior.

Lucy y yo casi ya no éramos cercanas, lo supe desde que no quise hablar con ella sobre Harry. Recuerdo todos esos días que visitaba a Niall, él sabía algo sobre Harry y yo, y estaba eternamente agradecida con él ya que nunca tocamos el tema.


— ¿___tn? — Me llamó Fernanda.

Volteé y la miré. Evidentemente estaba hablando conmigo, pero no estaba prestando atención, hasta que parpadeé.

— ¿Quieres apostar? —Me preguntó Lucy.

— ¿En qué?

— En que si crees que Zac Efron y Vanesa Hudgens volverán a estar juntos.

— "Wow... me importa una mie'rda".- Me encogí de hombros.

— ___tn no habla de esmaltes de uñas y extensiones de cabello, chicas, es mas como uno de nosotros — Les dijo Zayn.

-sii! Eso es cierto chicas- lo apoyo Louis.

-no ___tn?- dijo Liam enseñándome el puño, para que lo choque con el...simplemente forcé una sonrisa, pero no lo choque -no? Ok-bajo la cabeza .

Se rieron todos, menos yo, simplemente puse una sonrisa falsa para complacerlos. Justo entonces, escuché a alguien caminando hacia nosotros, me levanté y ahí estaba él. Niall.

Caminaba lentamente, y con su típica sonrisa dulce, a un lado de sus padres y su hermano menor. Tan pronto lo vieron los demás fueron a recibirlo, todos alrededor de él. se reía y pronto él ya estaba caminando hacia mí. Lo abrasé con cuidado, sintiendo las vendas debajo de su camisa.

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Capitulo 24.

— Bienvenido al mundo, Nialler. — Le dije en tono de broma, con una amplia sonrisa en mi rostro. Tenía la intención de animarlo.

— Se siente genial volver a estar con ustedes. — Dijo Niall. Me hice a un lado, las chicas se acercaron para abrazarlo de nuevo.

— ¿Quién está listo para ir al boliche? — Dijo Louis entusiasmado.

— Oh, vas a perder amigo. — Le contestó Liam.

— Voy a dejar que me pateen el trasero solo por hoy, solo una vez en la vida. — Les dijo Niall refiriéndose a que aún estaba algo débil.

— No digas niñerías Niall, estás mejor que nunca.

Los padres de Niall lo veían sonreír y sonreían ellos, les daba gusto volver a verlo feliz. Su hermano menor tenía como diez años, su nombre era Michael, era tan adorable y tierno. Caminé hacia él.

— Entonces... ¿estás listo para ir al boliche, Michael? — Le pregunté. Michael me miró por unos segundos y después sonrió ampliamente.

— Claro. — Dijo de una forma que a mí me pareció increíblemente adorable.

Sonreí también y salimos del hospital, íbamos en camino hacia las salas de bolos. Pasamos el cementerio, no pude hacer otra cosa más que ver hacia allá, y pensar en el. Harry, como lo extrañaba. Luché contra las lágrimas, entonces lo decidí, iría al cementerio otro día.

— Wooow, eso fue, fue mejor que mi tiro. — Dijo Louis, refiriéndose al tiro de Niall.

Ya estábamos en la sala de boliche, después del hospital. Ahora nosotros, bueno, ellos, estaban pasando un buen rato. Michael había fallado varios tiros y se estaba volviendo loco.

Yo estaba sentada a un lado de Jane y Liam, viéndolos jugar. No tenía ánimos de hacer nada, solo me senté y pretendía que la estaba pasando bien por el regreso de Niall. Lo mejor del boliche es que estaba a un lado del centro comercial y tenía una barra de bebidas al otro lado de la sala.

Sonreía y me reía entre dientes cuando estaba con mis amigos, trataba de que el día fuera perfecto, pero llegó un momento en el que quise estar sola

— Iré por algo de beber. — Le dije a Jane.

— Bien, yo me quedaré viendo a los chicos.

Me levanté. Ya estaba casi fuera de la sala de juego, cuando escuché un "Espérame ___tn".

Era Niall. Lo esperé y sonrió mientras se acercaba.

— Apesto en el boliche, y creo no seré capaz de patear traseros en el basketball nunca más. — Me dijo simpáticamente.

— No te preocupes Niall, te dedicaré un un gol en mi próximo juego. — Sonreí.

— Eso suena genial, gracias. — Su sonrisa se ensanchó.

Nos sentamos en los bancos y ordenamos. Niall esperó a que yo ordenara primero.

— Uhmm, quiero una malteada de fresa y banana, gracias. — Ordene, con la mejor sonrisa que pude lograr en el momento.

— Yo… un helado de chocolate con vainilla, por favor. — Ordeno mi amigo.

Miramos al sujeto haciendo las malteadas con tanta facilidad, lo hacía tan rápido y con mucha gracia.

— Quiero preguntarte algo, ___tn. — Comenzó a decir Niall. Miré hacia él. “Por favor, que no sea sobre Harry”. Esperé a que prosiguiera.— ¿Qué… piensas sobre mí? — “Uhg, no. No estoy de humor para esto” – fue lo primero que pensé. El prosiguió rápidamente, me agarró completamente desprevenida, estaba confundida, ¿qué pensaba realmente de él? — Solo tengo curiosidad. — Agrego después.

Bajé la mirada y pensé, - ¿Qué creerá que siento yo por él? -... Oh bueno, en realidad sí había hecho parecer como si él me gustara, lo visitaba mucho en el hospital, siempre había sido agradable con él, le había dado 'esperanzas'.

— Eres un chico asombroso Niall, en verdad. — Le contesté a medias.

Él se limitó a asentir con el cabeza inseguro de qué hacer. Pero era la verdad, él era un chico genial, muy lindo, pero no un patán como los chicos ''lindos'' de hoy en día. Era inteligente, hacía cosas buenas en la escuela, era un excelente jugador de Basketball y... tenía un buen cuerpo. Chicos como él había muy pocos en la tierra.

— ¿Puedo decirte lo que pienso de ti? — Me paralicé un momento, mis labios se abrieron un poco, de repente miré hacia otro lado, estaba colorada. - Grrr, no puede ser.-

— Bueno, solo quiero que sepas, que me gustas mucho ___tn. Desde que estuviste ahí para mí cuando Jasmine rompió conmigo. No sé qué hubiera hecho sin ti.

Recordé entonces, Jasmine era una... una pu'ta completamente. Era la típica chica sexy y zorra. Yo había estado ahí por Niall, desde que descubrí lo que pasaba un día en el baño cuando Jasmine les decía a sus plásticas amigas porqué dejó a Niall, estaba saliendo con otro chico. Recuerdo que no podía creerlo, me salí del baño, le grité "zorra" y me fui.

Ella nunca fue agradable conmigo, y por eso ahora había estado buscando una manera de hacer mi vida miserable, pero Jasmine no estaba en ninguna de mis clases, por suerte. Difícilmente la vería.

— ¿___tn?. — Reaccioné de repente, alejándome de mis pensamientos.

— Awww Nialler, gracias. — No supe qué contestarle. No fue un 'awww' sincero, fue mas bien como un ''Oh no, ¿por qué?'' disfrazado. Le sonreí, otra sonrisa falsa. — Necesito pensar esto Niall, y necesito tiempo. Mi vida no ha ido muy bien últimamente. — Le dije, no quería que se hiciera más ‘ilusiones’. Lo menos que quería era lastimarlo. Niall asintió con la cabeza y suspiró.

— Es por Harry. — Me quedé paralizada cuando mencionó su nombre. Miré a lo lejos de Niall, sentí mis ojos cristalizarse. Niall se inclinó hacia mí y trató de alcanzar mi mano, yo lentamente se la di, y comenzó a acariciarla. — Te entiendo ___tn, yo sé cómo te has sentido, lo veo en tus ojos, veo lo mucho que te duele y cómo aún así pones una buena cara para todos. No estoy molesto por todo esto, sé cómo te sientes, y te puedo esperar.

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Capitulo 25. (ultimo maratón)

Finalizó con un largo suspiro, lo miré a los ojos con una sonrisa, ésta vez, una sonrisa real.

— Gracias Niall, en verdad no sabes lo mucho que aprecio que no me juzgues, siento mucho lo que te pasó, todo fue mi culpa. — Niall sacudió su cabeza, negándolo.

— No, no te preocupes, no lo fue. — Me respondió.

Sonreímos y de repente nos llevaron lo que ordenamos. Niall no me soltó la mano, sonreía, su sonrisa me hacía feliz. Tomé un trago de mi malteada, estaba deliciosa.

Salimos del boliche alrededor de las 4:00 p.m. Me iban a dejar a mi casa. Niall me había comprobado que podía hablar con él de lo que fuera, y que él siempre estaría ahí.

— Te veo el lunes, ___tn. — Me dijo Niall

— Claro, adiós. Gracias por traerme.

Niall y su familia me decían adiós con la mano mientras entraba a mi casa. Cuando entré mis padres estaban en la sala, viendo un partido de futbol.

— ¿Cómo estuvo tu día, ___tn? — Pregunto mi mamá.

— Fue divertido, Niall ya está bien.

— Que bueno escuchar eso. — Dijo mi papá.

Asentí y subí las escaleras, hacia mi habitación. Iba a visitar la tumba de Harry mañana.

De repente me pregunte si en verdad conocí a Harry Styles, si todo lo que pasó con él fue cierto. Fue tan mágico.

Coloqué el collar de diamantes sobre mi cuello. Sí fue verdad, conocí a Harry de una manera única, de una manera en que nadie pudo conocerlo. Lo entendía bien, y él a mí. Iría a la florería y le compraría rosas blancas.

Flashback.

— Te veré pronto, ___tn. Lo prometo.— Entonces supuse lo que iba a pasar.

— ¡No! ¡No,Harry! Por favor... ¡Por favor no te vayas! — Trataba de contener las lágrimas, pero ¿Qué creen?, intento fallido.

— Voy a regresar, te lo prometo. Te amo, por eso... si esto tiene que ser... así será.

Acercó mi rostro hacia el suyo, juntamos nuestros labios. Me aferré desesperadamente a él, no lo iba a dejar ir.
______________

Desperté al escuchar el sonido de la lluvia... ¿Lluvia?

Me levanté, eran las 9 a.m. Estiré mis huesos, sentí un hormigueo. Miré hacia mi ventana, estaba lloviendo.

Ni siquiera una tormenta me iba a impedir ir a visitar a Harry, así que me vestí con un abrigo negro, pantalón obscuro, blusa de cuello en V negra, y unos zapatos negros. Dejé mi cabello caer naturalmente ondulado hacia abajo, ya lo tenía más largo, tenía que cortarlo pronto.

Bajé las escaleras y vi un papel doblado en cuatro sobre la mesa. Lo desdoble para leerlo.

" ___tn, buenos días. Fuimos a visitar a tu hermano, y después iremos al supermercado. Si necesitas algo, llámanos. Regresaremos antes de las tres.
Te amamos
Mamá y papá."

Suspiré. Me habían dejado desayuno, aún estaba caliente. Desayuné huevos con tocino y un vaso de jugo de naranja.

Harry... él me había cocinado hace tiempo. El sabor de este desayuno jamás iba a ser el mismo. Terminé y subí de nuevo a mi habitación por mi sombrilla. Tomé mi bolso y lo colgué por encima de mi hombro.

Decidí llevar el auto, ya había sacado mi permiso, lo obtuve un poco antes de conocer a Harry. Oh bueno, la policía no iba a revisar si soy menor o no, lo que checaban era si iba a exceso de velocidad.

No me maquillé ni nada. En primer lugar ¿Por qué lo haría? Casi no lo hacía, y además estaba lloviendo.

Saqué el BMW negro de la cochera, lo encendí y arranqué. Ya tenía algo de tiempo desde la última vez que lo había manejado, no es que tuviera miedo, era solo que no había tenido oportunidad para hacerlo.

Pasé por la florería y compré un ramo de rosas blancas, el precio no me importó. Tenía suficiente gasolina, el tanque estaba lleno. Conduje fuera de la ciudad hacia el cementerio, en la lluvia. Era buena conduciendo, también rápida. Solo tenía que revisar si no había policías que me detuvieran por ir rápido.

Finalmente llegué al cementerio, estacioné el auto. Caminé entre las calles llenas de piedras, mi sombrilla se quedó rígida a pesar de la lluvia, gracias a Dios. Busqué alguna señal de dónde se encontraba su tumba, caminé y caminé buscándola por casi 35 minutos. Finalmente, la encontré. Estaba cerca de algunos árboles.

Me acerqué y la toqué... Mi Harry estaba enterrado ahí, bajo aquella tumba de madera de cedro, tal vez no muy elegante como las demás, eso me recordaba mucho a él.
Me pregunto... ¿quién habrá venido a su funeral? El único del que estaba segura de que había ido era su hermano. Caí sobre mis rodillas.

HARRY STYLES. Un joven que fue encontrado en el camino de la vida- 1-2-1994 - 20-5-2012
Mi vista se nublo por completo, escondí mi rostro entre mis manos, mientras bajaba mi sombrilla. No me podía ir de ahí, Harry era todo para mí. Lloré hasta que sentí que estaba seca de lágrimas. Pensé entonces que no podía llorar más.

Miré de nuevo su lapida, no podía decirle adiós. Finalmente, me levanté. Sentía que había pasado una eternidad, antes de que me diera cuenta, la lluvia ya había cesado.

Le dediqué unas palabras, cortas, pero significativas, para luego terminar con un corto y sincero - Te amo, Harry Styles–

Tomé de nuevo mi sombrilla, la cerré. Me quedé ahí parada un rato más hasta que el sol finalmente apareció.

Muy lejos de ahí, hacia mi derecha, unos árboles que se alborotaban aún sin que hubiera viento.

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aca la cosa se pone salvaje. :3

3 comentarios, y hago maraton. :)

Pd: las amo, y gracias por leer la nove.

SIGUELAAAA ME ENCANTA PORFIIIII

SiGueLaa...Me Enktoo...Besos...♥

SIGUELA SIGUELA no se si cuenta como tercer comentario pero es para que veas que la amo y quiero que la sigas pronto gracias

haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa no puede ser me hace llorar y el ultimo capitulo me da una esperanza'!!!!!!!!!!!!!!!!!! siguela!!!!!
3 comentario !!!!!!
o cuarto???????? xdd

nueva lectora :O
amoo la nove!! es tan intensa y diferente a todas las que he leido!:-D
De verdad es genial!! tienes que seguuirla!!
pff de verdad harry murio?? .__.
juro que llore! es Tan hermosa la nove...
Siguela! Saludos :) x

QUE TE PASA?!!

NOOO!!!

No la puedes dejar asiii!!!!!!

AAAAAAAAAAAHHHH

Perdon por hablarte asi, entre en panico

En fin, ame el maraton

Estuvo increible

HAZZA NO MURIO!!!

PINCHE HAZZA TODO UN PILLO

AAAAAH

Sapero con ansias el capitulo

Asi que solo queda escribir:

S
I
G
U
E
L
A

P
R
O
N
T
O

Capitulo 26.

<<>>

La amaba mucho... pero tenía que mantenerla a salvo, a salvo de mí.

Flashback.

Entonces, supe que era tiempo de darle mi más preciada posesión, ella la cuidaría por mí, sabía que lo haría.

— Es para ti. — Le dije y puse el collar en sus manos.

Ella lo tomó fuertemente, la ayudé a salir de la ventana y con cuidado pasó hacia el otro lado, me acerqué a ella, por última vez, besé sus hermosos labios sabiendo que siempre los iba a recordar. La besé lentamente, muy suave, no quería alejarme de ella.

Las sirenas se escuchaban cada vez más cerca, la alejé de mí manteniendo nuestras miradas mientras yo lentamente cerraba la ventana. Corrí saliendo de la habitación, sabiendo que ellos estaban enfrente de mi puerta ahora, tuve que darle tiempo a ___tn para que corriera.

Me escondí en el pequeño armario del baño esperando a mi siguiente víctima. Estiré mi brazo y encontré mi pistola en el borde superior del armario. Esperaba poder llegar al armario de mi habitación, me quedé quieto y los escuché caminar alrededor, muy rápido.

Cerré la puerta de mi habitación para que los policías vinieran y la derribaran primero.

Escuché un ruido afuera mientras alguien entraba al baño abriendo el panel detrás del espejo buscando cosas. Después escuché sus pisadas acercarse, no esperé a que abrieran la puerta así que me le eché encima al policía para apuñalarlo, le cubrí la boca.

Lentamente caminé y me escondí detrás de otro policía que estaba revisando otra habitación. Él había visto a ___tn, y había estado hablando por su walkie talkie mientras ella estaba alterada, respirando rápido. Tenía que acabar con el.

Cuando termine mi trabajo, escondí su cuerpo rápidamente en el armario y saqué el cajón donde tenía mis otras armas punzantes, cuchillos, navajas, etc. Las tomé y lentamente regresé a mi habitación para matar a otro estúpido policía. Habían estado revisando el joyero de mi mamá, acabé con él rápidamente.

Me tomó solamente dos minutos acabar con tres policías. Escondí las donas que comían los policías en el armario, y abrí el estuche de un arma especial.

La llamaba 'Sweet Rose', la saqué del estuche y lo cerré. Me gustaría poder tener esta arma por siempre. De repente, recordé aquél escudo antibalas que había durado casi un año entero para terminar de hacerlo, entonces caminé lentamente y cubrí mi cuerpo con aquel escudo, me haría sangrar mucho cuando me dispararan, esperaba no morir.

Vamos... un chico que puede hacer increíbles bombas atómicas obviamente también puede hacer un escudo ultra genial. Me reí.

Entonces salí del armario, sabía que había otro policía cerca. Escuchaba los latidos de su corazón como podía escuchar los míos...muy cerca. Entraron varios y les disparé, Uno-dos-tres-cuatro. Les disparé a los cuatro, pero entonces... ¡BAM! Me quedé paralizado, me habían disparado en las costillas. Sentí de repente otro disparo cerca de mi hombro, caí al piso, boca arriba primero, mi cabeza golpeó contra la alfombra.
El sentimiento de sangre brotando de mí, de repente, todo se volvió negro.
Desperté, me encontraba cubierto con una tela delgada, semi-transparente. No me moví, estaba en una vagoneta que olía a muerto. Me asomé lentamente ya que la puerta de la vagoneta estaba abierta. Vi a los ocho policías que había matado, la culpa me inundó.
Presté atención por si escuchaba algún movimiento... ninguno. Me levanté sintiendo el dolor repugnante en todos mis sentidos, tuve que aguantar. La vagoneta estaba desierta. Sabiendo que tenía un límite para salir de ahí, caminé hacia afuera y no vi nada, estaba afuera de un laboratorio, al parecer privado. Estiré mi brazo para alcanzar la pistola de uno de los policías muertos.

Algo de lo mucho que había aprendido de ___tn, era que ella estaba llena de fe, nunca he sido religioso o algo por el estilo, pero en estos momentos necesitaba un sustituto, algo así como si estuviera pidiendo un milagro, ya que no había nadie ahí. Comencé a rezar.

Corrí por una calle cercana y me mezclé entre una multitud de personas que aparecieron cerca, había un desfile. Si, era el desfile que se hacía cada año en ésa ciudad, en Abril. Todo iba perfecto.

Y el milagro que esperaba, apareció. No muy lejos de ahí, vi un sujeto, un vagabundo.

Tenía casi mi mismo color de cabello, se veía de mi estatura, y talla. Solo que no tenía mi edad, era un hombre, le calculaba unos 35 o más. Aún así me servía.

Caminé hacia donde él estaba, lo llevé hacia un callejón cercano y lo golpeé hasta que quedó inconsciente, le disparé en el hombro y las costillas, los mismos lugares donde yo tenía las heridas. Traté de no derramar sangre, para no levantar sospechas, le puse mi ropa y con dificultad me puse las de él, me dolía mucho el pecho. Me quité el escudo antibalas y me sentí un poco mejor, las balas salieron en cuanto me lo quité, genial.

Lo cargué y corrí lo más que pude con él. Nadie me había visto mientras corrí a la calle en el desfile, sólo me había tomado 4 minutos, gracias a Dios.Dejé al sujeto en el lugar donde había despertado y lo puse en la misma posición.
Salí corriendo, dejando todo impecable, qué gran trabajo había hecho.


Me escondí entre los arbustos y vi entonces a 3 hombres llegar a la camioneta para tomar los cuerpos, no tenían cámaras por fuera... estúpidos. Los miré mientras tomaban los cuerpos y los metían, aún llevaba conmigo mi escudo antibalas en las manos, no podía dejar evidencia alguna dentro.

Me levanté, pasé a una ferretería cerca de ahí y me compré un encendedor, quemé el escudo en un callejón. Después tiré las cenizas al contenedor de basura, me puse lodo que había en el suelo, haciéndome ver sucio como mi ropa anterior, y entonces me fui, cojeando hasta llegar a mi segunda casa.

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okok. Me alegra que hayan cada vez mas lectoras, las amo a todas :3

Subire maratonnnn, ya que hay mas de 3 comentarios.

Gracias y las amo. :)

Capitulo 27.

Estaba viendo a ___tn, en mi "supuesta tumba".
Ella estaba empapada en lágrimas, millones de lágrimas... había estado llorando por un monstruo, la había estado observando. La había estado siguiendo y salvándola de cualquier peligro.

Por casi 5 semanas la había visto llorar y llorar, pero creo que estaba mejor así. Quería estar lejos de su vida pero... le prometí que regresaría, que viviría solo por ella. Pero esto era lo mejor para todos.

Comenzaba a pensar entonces, ¿podría cambiar por ella? Pero, yo soy como soy.

A quién engañaba. Había estado muy confundido últimamente, por cierto, había cambiado mi manera de pensar sobre 'cambiar' mi forma de ser.
Ella en un momento me hizo querer ser una mejor persona, pero mi mente cambiaba completamente cuando no estaba cerca de ella. Me acerqué un poco a donde ella estaba parada, estaba vestido de negro igual que ella. Vi como el viento soplaba su precioso cabello a un lado de su rostro. Me recargué contra un árbol cercano haciendo que se moviera y varias hojas cayeran al suelo.

Rápidamente me quité de ahí y me escondí, escuché sus pisadas más cerca. Contuve la respiración, no sabía si me podía encontrar o no. Pero de una cosa estaba seguro... no sería capaz de alejarme de ella si lo hacia.

La escuché acercarse más, conté los latidos de mi corazón - uno, dos, tres ...- a mi octavo latido, vi su rostro. Sus ojos se veían grandes y rojos y su cabello ligeramente rizado, pero ella no me había visto. Reaccioné y me alejé, me alejé aunque me doliera. La vi mirar a su alrededor, esperando a que apareciera, podía ver la esperanza en sus ojos mientras caminaba más cerca, me fui más lejos y no la dejé verme. Esperaría en su casa a que regresara.

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Sentía la presencia de Harry - me está viendo, donde quiera que esté.- me decía en mi mente. Se estaba obscureciendo, caminé sin rumbo por los árboles queriendo ver a Harry aparecer de repente, algo estúpido. Miré hacia atrás y me di cuenta de que estaba en... un ¿bosque? ¿Cómo llegué ahí?

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Esperé a que ___tn regresara en su casa, pero ya habían pasado horas, estaba preocupado. No pudo perderse intentando buscarme ¿verdad?.Entonces vi a sus padres llegar a su casa. Tenía que encontrarla antes de que le pasara algo.

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Hacía frío, vagué sin rumbo entre el bosque. Estaba completamente perdida, intenté caminar de regreso hacia donde empecé... pero no tuve suerte. Había pensado por un momento que vería a Harry. Pero qué absurdo, soy una estúpida. Harry estaba muerto. Él nunca regresaría, nunca. Me estremecí, había perdido mi paraguas antes de que me diera cuenta, caminé y choqué con varios estúpidos árboles que no pude ver ya que la luz de la luna no llegaba hacia donde yo estaba. Estaba casi empezando a llorar, era una completa idi'ota.

Caminé alrededor, escuchando ruidos de vez en cuando, pero era difícil no entrar en pánico. Me di por vencida unas horas después de que comencé a caminar. Me senté en lo que parecía ser el tronco de un árbol, puse mis manos sobre mi rostro y me quedé ahí muy quieta. Podía escuchar las hojas de los arboles moverse y el sonido del viento golpeándolas.

De repente, escuché pasos suaves después de 15 minutos de haberme sentado, se estaban acercando.

¿Y si es un criminal? ¿Un asesino? ¿Un violador? ¿Debería empezar a correr y gritar por ayuda?

Los pasos se acercaban, yo intenté esconderme de él. De repente, la figura de aquella persona me bloqueaba el paso de la luz de la luna, estaba justo enfrente de mí. Mis latidos del corazón fueron siendo cada vez más rápidos. ¿Por qué? Me quedé ahí quieta, estaba en shock y asustada.

Pude ver sus ojos... no.. Eran aquél dulce color verde, la misma forma, en un segundo vi su rostro completo. La misma forma de la nariz, cejas, labios, y su misma altura... No, me estaba volviendo loca.

Harry está muerto. Nunca veré su sonrisa otra vez.
Estiré lentamente mi brazo antes de darme cuenta de lo que estaba haciendo, me había puesto de pié y estaba deslizando mis manos por su pecho mientras me levantaba... era él. Era mi Harry...

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Estaba muy asustada al principio, sus ojos solo se hicieron cada vez más grandes y brillantes mientras los segundos pasaban, se había levantado y estiró sus brazos para tocar mi pecho, se quedó mirando fijamente. No creyó lo que estaba viendo, estaba completamente paralizada, no estaba respirando.

Levantó de nuevo sus brazos y tocó mi rostro con sus suaves manos, las cuales pasaron por mis mejillas, las llevó hacia mi frente tocándola lentamente y después bajó a mis labios, sus ojos parpadearon, finalmente aceptó que era yo.

Se relajó un poco, se veía algo triste por un minuto, sus ojos se cerraron. La fuerza con la que sostenía mi rostro se debilitó y calló inconsciente. Logré agarrarla a tiempo y suspiré... qué alivio.

La cargué en mis brazos, tenía que salir de ese lugar, sus latidos se estaban volviendo muy lentos, esperaba que no le diera un paro cardiaco.

La llevé entre los árboles. La quería, quería estar ahí por ella, quería ser su único hombre en el mundo, quería protegerla, quería amarla de la manera que no lo pude hacer antes.

Finalmente salí del bosque después de 20 largos minutos, llegué a su auto y tomé sus llaves mientras la acostaba en el asiento de atrás. Me subí al auto y lo encendí.

De vez en cuando echaba un vistazo para ver si ya había abierto los ojos... pero ella aún estaba inconsciente.

Llegamos a su casa, sus padres no estaban. Conduje hasta la cochera y estacioné el auto, colgué las llaves en donde estaban otras y saqué a ___tn del auto. La cargué y la llevé a su habitación, la recosté sobre su cama, le quité su abrigo y lo puse en su armario.

Me senté en una esquina de su habitación, en una silla, mientras dormía.
Verla dormir siempre era algo magnifico, ella dormía y su respiración era tan pacífica y tranquila... quisiera poder entrar en su sueño también.

La miré dormir por un largo rato y entonces llegó un momento en el que no podía seguir más ahí. Me levanté y caminé hacia su ventana, cuidadosamente la abrí y miré hacia ___tn por última vez.

Me quedé congelado, sus ojos estaban abiertos mirando hacia mí, con sus labios entreabiertos.

Me quedé helado por la forma en que la luz de la luna se reflejaba en sus ojos haciéndolos ver... totalmente hermosos.

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Capitulo 28.

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Seguía repitiéndome a mi misma que abriera mis ojos... fue como un impulso, tenía que hacerlo. ¿Por qué me quede dormida en medio del bosque?

Lentamente los abrí... vi una silueta caminando hacia mi ventana, yo ya estaba en mi habitación, de repente, los sucesos anteriores llegaron a mi mente... Harry. Lo había visto en carne y hueso. La silueta caminó hacia mi ventana y lentamente la abrió, la luz de la luna entró y lo reflejó... era Harry. Los mismos rasgos faciales que amaba... se quedo congelado cuando sus ojos se encontraron con los míos. La luz de la luna hizo su tono de piel aún más blanco y brillante.

Entonces finalmente me di cuenta de que me había desmayado en el bosque porque él estaba vivo y era demasiado para un solo rato. Pero ahora... había tenido un impulso en mi corazón que me decía que era Liam en verdad, el que había estado en el bosque, lo sabía. Sabía que estaba vivo, todo el tiempo lo supe. La manera en la que no le pude decir adiós, todo tenía sentido ahora.

Mis piernas se deslizaron por debajo de las sabanas, me levanté, seguimos mirándonos mientras caminaba acercándome hacia él, me acerqué con mis pies caminando sin mi propia voluntad, como si se estuvieran moviendo solos. Mi mano se movió hasta quedar enfrente de mí, capturando el brillo de la luna en mi piel, haciendo que la piel de Harry y la mía lucieran idénticamente pálidas y blancas.

Avanzaba hacia él, estaba aguantando mi respiración, capturé su imagen en mi cabeza, no había error alguno... era Harry. Sus hermosos y angelicales ojos marrones eran los mismos, su cabello crespo color castaño claro era lo más suave que había sentido enredarse entre mis dedos. Sus labios, tenían la misma forma perfecta de siempre, sus ojos marrones ahora parecían ligeramente grises bajo la luna, finalmente estiré mi mano y lo toqué, aún sabiendo que en cualquier momento podría desaparecer en segundos como un fantasma.

Presioné mi mano sobre su pecho, estaba... sólido, Harry estaba completamente vivo, 100% segura de eso. El no se movió, y pronto, ya tenía mis dos manos en su pecho, Harry dejó salir un largo suspiro, me tomó la cara y se acercó hasta estar a escasos centímetros de mi rostro, sus suaves manos tomaron lentamente mi rostro, había extrañado sentir sus manos. Lentamente se acercó y nuestros cuerpos ahora estaban juntos.

Luego extendió su mano hacia mi cara, se acercó más y yo lentamente volví a respirar mientras su boca dibujo una de esas sonrisas que a mí me encantaban. Harry entonces, vio con sus hermosos ojos el collar que me había dado, y sonrió con tristeza. Abrió sus labios habló en un suspiro.

— ___tn... siento como si no lo hubiera dicho recientemente pero, te amo. — Me dijo, sus palabras fueron ciertas, sentí que mi corazón subía hasta mi garganta haciendo que sollozara.

— Harry... regresaste.

Lo abracé con fuerza mientras las lágrimas caían en mi rostro, Harry me abrazó aún con más fuerza, sentía su corazón latiendo a un lado mío.

— Claro que regresé — me besó la frente. — Mantengo mi promesa ___tn.

Dejé de llorar de tristeza, para llorar de felicidad. Sabía que él estaba ahí por mí, y yo también lo amaba, lo empujé hacia mí y besé sus labios antes de que se diera cuenta de que me aferraba a él cada vez más fuerte.

Entrelacé mis manos entre su cabello, él pasó sus manos sobre la parte baja de mi espalda, lentamente trató de apartarse pero no me dejó de besar, cerró la ventana y me llevó dando vueltas hasta que me dejó caer en mi cama, me acostó en ésta y me tomó del cuello, se apoderó de mí y yo me aferré a él.

Me besó con pasión, en ese momento lo deseaba. Lo empujé un poco mientras me movía encima de él y besaba su cuello, después de nuevo sus labios. Lo jalé de nuevo hacia mí, su abrazo se hacía cada vez más fuerte, besé de nuevo su cuello, nos besamos tan apasionadamente que podía sentir problemas para respirar, lo aparté un poco para inhalar aire y mientras, Harry besaba mi cuello. De nuevo volvimos a besarnos a un ritmo agitado.

Escuché a mis padres llegar, apenas y me había dado cuenta de que Harry ya no tenía su camisa puesta y yo también me la había quitado, Harry dejó de besarme con pasión para pasar a un beso dulce y suave, ahora nos besábamos lentamente, entonces escuché a mi mamá dejar las llaves del auto en una mesa.

— ¿___tn?

Harry se bajó de mi cama y se puso su camisa en cuestión de segundos, se metió a mi armario y lo cerró. Tomé mi bata de baño y pretendía leer un libro mientras mis padres entraban.

— Hola papá. — Sonreí.

— Te llamamos a tu celular, y no respondiste ¿Dónde estabas? — -en el cementerio- pensé.

— Estuve un rato con mis amigas, ya sabes cosas de chicas, y mi teléfono… no tenía señal. — Mi mamá apareció de repente en la escena.

— ¿Tienes hambre? — Me pregunto. Yo le sonreí, en verdad estaba hambrienta, y mucho. — Te traeremos de cenar aquí, parece que ya te ibas a dormir.

— Gracias.

Me metí al baño después de que mis padres se fueron, me duché rápidamente y regresé a mi habitación, la comida estaba sobre mi escritorio, sonreí. Harry lentamente abrió la puerta de mi armario y salió mientras yo cerraba la puerta de mi habitación. Le puse seguro.

— Recuerdo cuando ambos estábamos escondidos aquí en tu armario. — Me dijo Harry con una sonrisa.

— Yo también me acuerdo, pareciera como si hubiera sido hace una eternidad. — Harry se acercó y me abrazó.

— Tuve algunas dificultades para regresar a verte ¿sabes? — Me dijo.

— ¿Enserio?.. — Le pregunté, él asintió. — Siempre sentí como si me hubieran estado observando, y pensé que tal vez eras tú.

— Era yo, y aún lo soy. — Me acercó la comida. — come, sé que tienes hambre. — Tomé la comida y la acerqué a él.

— La compartiré contigo.

Tomé una cucharada de arroz y la llevé hacia su boca, estaba feliz, con una gran sonrisa en mi rostro, lo llené de comida hasta que sus mejillas se inflaron, haciéndolo lucir como una adorable ardilla.

— Bueno, bueno, deja de alimentarme como tu perro ¿está bien?, ahora tú come. — Me dijo apenas pudiendo hablar. Reí.

Me quitó la cuchara de mis manos e inmediatamente me dio de comer, tomé una pieza de pollo y la llevé a su boca. Terminamos de comer y él me estaba cargando sobre sus piernas, besé su mejilla. Me levanté y tomé los platos sucios.

— Llevaré esto al lavabo, no tardo.

Me dejó de cargar y tomó mi mano mientras caminaba fuera de la habitación, cuando nuestros brazos no alcanzaban, la soltó. Aún no terminaba de creerlo, Harry... Mi Harry estaba vivo.

Mientras bajaba las escaleras miraba alrededor por si mis padres estaban ahí, miré hacia la sala y cocina pero ellos no estaban abajo, dejé los trastos en el lavabo y volví hacia arriba. Lentamente entré para no hacer ningún ruido y vi a Harry mirando hacia afuera de mi ventana.

Me acerqué a él después de cerrar la puerta, caminé y lo abracé de hacia atrás, mirando con el la noche, Harry se giro, quedando frente a frente.

— Quería mantenerme lejos ___tn. — Dijo, no pude contestarle nada.

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