Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
With Ur Love (Niall horan)
O W N :: Fanfiction :: Fanfiction :: Músicos :: One Direction
Página 25 de 25. • Comparte
Página 25 de 25. • 1 ... 14 ... 23, 24, 25
Re: With Ur Love (Niall horan)
no entiendo nada de nada el comportamiento de naill!!!.. es bipolar???
chelis
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 81
Subimos las escaleras hasta llegar al piso de Michelle, tras preguntar quién tocaba ella abrió la puerta, noté sorpresa en sus ojos pero no le presté atención pues ella también le quitó importancia. Ella llevaba una camisa a cuadros con unos pantalones color café ajustados, lo especial era que llevaba el cabello recogido en un tomate muy bien hecho.
-¿Pasando por acá?- preguntó ella mientras se miraba de nuevo en el espejo.
-Estábamos donde mi hermano- le respondí- ¿Vas a salir?- le pregunté.
-Si- dijo ella- ¿Qué tal estuvo el instituto hoy?- me preguntó, yo miré a Niall quien estaba distraído con el cojín del sofá donde ambos estábamos sentados.
-Bien, nada con lo que no puedas lidiar ¿Qué tal estuvo tu mañana?
-Menos ajetreada de lo que pense, ahora le llevare el cheque de pago a Luke- dijo Michelle.
-¿Cheque de pago?- preguntó Niall.
-Sí, trabaja en las mañanas en mi tienda- le respondió ella mirando el cheque.
-¿Luke Hemmings?- le preguntó él y ella asintió.
-¿De verdad? Luke está muy ocupado con su banda.
-Lo del productor- dijo Michelle pensando en su supuesto compromiso.
-La disquera- dijo Niall sin saber que se las estaba cagando.
-¿La disquera?- preguntó Michelle.
“¡Eyy!” se quejó Niall cuando le metí un codazo para que se callara pero lo capto.
-¿Eso que fue?- preguntó Michelle.
-Nada, ella que se le antojó enterrarme el codo- le respondió Niall.
-Ustedes son…- empezó a decir Michelle pero se distrajo con su reloj de mano.
-Ya nos vamos, solo estábamos pasando por aquí y se hace tarde- le dije a Michelle.
Nos despedimos de ella y salimos de su apartamento, en la puerta Niall y yo quedamos frente a frente.
-¿Por qué me diste un codazo? ¿Qué ocultas?- me pregunto él.
Yo me senté en las escaleras y él se sentó junto a mí.
-Michelle no sabe que la banda de Luke tiene disquera porque Luke cree que ella puede conseguirles un productor pero también es mentira- le dije.
-¿Qué?-me pregunto el-¿Luke trabaja en su tienda?
-Sí, pero ella no tiene idea que él y su banda están trabajando para un álbum- le dije.
-En Australia- me dijo Niall y yo me quedé viendo la forma como su boca se movía.
-¿Qué pasa con Australia?- le pregunté.
-Su disquera está en Australia, cuando termine este periodo de tiempo él y su banda viajarán a Australia por un largo tiempo a grabar su álbum- me explico.
-¿Crees que pase algo entre los dos?- le pregunté.
-No tengo ni la menor idea- me respondió el.
-Yo le prometí a Luke no decir nada y ni lo conozco bien- le dije.
-Yo si lo conozco y no le prometí nada- Me dijo Niall.
-Habla con el-le pedí, el me miró y asintió- Niall, gracias por traerme a ver a mi hermano.
-De nada- me respondió.
Mire a Niall de nuevo y respiré hondo al recordar los nervios que llegan a mi cuando él se me acerca. Recordé lo bonita que estaba la luna la noche de la fiesta en casa de Louis en que Niall y yo salimos a caminar hasta un restaurante de sándwiches.
-¿Te llevo al edificio?- me preguntó él.
-No, voy al supermercado- le dije.
Los dos estábamos hablando despacio y en un tono bajo que me resultaba dulce. Michelle salió de su apartamento cambiando el ambiente entre nosotros.
-¿Ustedes dos siguen aquí?- pregunto ella y ambos nos colocamos de pie.
Michelle agito su mano en forma de despedida y corrió bajando las escaleras.
-Celif, hazme un favor- me pidió Niall.
-¿Cuál?- le pregunté mirándolo, estábamos cerca pero no tanto como las otras veces.
-Llámame cuando llegues, dime como llegaste- me dijo Niall.
-Lo hare- le dije yo.
Bajamos las escaleras, al salir del edificio el subió en su camioneta y vi hasta cuando la camioneta se alejó, luego caminé un par de calles en sentido contrario hasta llegar a un súper mercado para hacer la compra.
-¡Sí!- le respondí dejando todo sobre la mesa.
Harry estaba tirado en el sofá hablando por teléfono así que empecé a desempacar las cosas de la cocina.
-¿Pero a donde vamos a ir?- pregunto Harry al teléfono- Ahí no me gusta… es muy aburrido ahí- decía él mientras yo metía las cosas en la nevera- tu siempre sabes, Niall… te estoy dando la oportunidad, elige tú.
Cuando terminé me senté junto a Harry y me puse a leer un libro para historia pero él seguía hablando con Niall. Hablaron durante un tiempo, Harry se reía y le seguía preguntado a donde ir, terminaron acordando su salida y Harry se despidió.
-¿Cómo te fue hoy?- me preguntó Harry.
-Bien, llegué a ver a mi hermano y después fui por la compra- le comente- ¿Cómo te fue a ti?
-Estuve libre, estuve durmiendo hasta tarde- me respondió.
-Voy a salir con Niall en la noche ¿nos acompañas?
-No, tengo que estudiar- le respondí.
-Si cambias de opinión me llamas y vengo por ti. Iré a bañarme- me dijo Harry.
- Yo igual- le dije y ambos nos dirigimos a nuestras habitaciones.
Cuando me cambie seguía con el cabello mojado, tomé mi celular y llame a Niall.
-Hola
-Hola ¿Cómo estás?- me dijo él.
-Bien, ya llegué
-¿Hasta ahora?
-No, llegué hace tiempo. Estabas hablando con Harry y por eso no te había llamado.
-Vamos a salir ¿vienes?- me preguntó Niall.
-No, mañana tengo que ir al instituto, tengo que escribir sobre un personaje famoso representativo, además tengo que arreglar porque por tu culpa tengo mi ropa en bolsas de basura y sé que yo no haría nada interesante allá- le argumenté.
-¿Sobre quién escribirás?- me preguntó.
-Charles Chaplin porque a mi abuelo le encantaba- le respondí.
-Termina y ve a dormir- me dijo en un tono dulce.
-Te daría las buenas noches pero supongo que no dormirás- le dije.
-Si voy a dormir, solo que no por ahora- sonreí sentándome en la orilla de mi cama.
-Bueno…- dije sonriendo, su voz se escuchaba bien.
-Celif, no te veré el sábado- me dijo Niall.
Las clases de guitarra, estaba cancelando.
-Te recuerdo que tenemos un acuerdo- me quité los zapatos.
-Pero yo soy el maestro- me respondió Niall.
-¿Eso que tiene que ver? ¿Por qué cancelas?
Teníamos un acuerdo, yo había dejado libre mis sábados en las mañana y me había levantado para evitar la penitencia.
-No estoy disponible.
-No quiero perder el tiempo como la última vez- insistí.
-La última vez fue la semana pasada y eso no contó- me dijo él.
-Dame una razón- le exigí.
-Piensa lo que quieras- me dijo Niall.
-Pensare en tu penitencia, fue lo que tú mismo acordaste- cerré la llamada y fui a cepillarme los dientes.
Estaba molesta, no me había querido dar razones, no tenía por qué exigirle pero él me cancelo sin tener la delicadeza de darme un simple motivo.
Cuando estaba cepillándome los diente Harry toco a mi puerta y le grite que pasara para que me escuchara. Harry entró hasta el baño, se había cambiado y llevaba las llaves del auto en las manos.
-Ya me voy, iré a turno y luego saldré con Niall- me dijo- me avisas si cambias de opinión.
-No iré, no puedo- le dije.
-Adiós- me dijo Harry y lo abrace.
-Cuídate- le dije- me llamas cuando vayas a venir para estar pendiente.
-Bueno- me dijo, termine de escribir sobre Charles Chaplin y me fui a dormir.
Los días siguientes fui al instituto cuando debía hacerlo y varios días me fui con Michelle después de clases a ayudarle con su tienda o a ir a almorzar en restaurantes que servían platos típicos de diferentes partes del mundo. En dos ocasiones Luke también estuvo en la tienda de Michelle y ellos se la llevaban bien. Harry llegaba tarde de sus turnos y por lo general cansado, pero de todas formas nos quedábamos viendo nuestras series hasta tarde, lo invite a caminar una noche y caminamos hasta estar lo suficientemente lejos como para tener que regresar en taxi. Estuve varias horas sola sentada en el sofá de la sala leyendo un libro de 684 hojas para escribir una crítica para la revista del instituto. Llamé a mi mamá cada noche antes de entrar a la cama y ella me dijo que todo estaba listo para mudarse pronto a su casa soñada en las afueras, sentí un poco de nostalgia al pensar en mi casa vacía. Una tarde Harry, Liam y yo fuimos a la casa de Louis, ahí estuve hablando con Louis y tocamos el tema de Dacotha.
-Salí con ella una noche, yo quería llevarla a recorrer la ciudad en mi auto pero ella prefirió que pasáramos la noche en el centro comercial- me comento Louis encogiéndose de hombros- Fue muy complicado tratar con ella, tanto que no lo volvería a intentar en mi vida. Ella es tan insegura consigo y con los demás, insiste en llenar su vida con cosas que no calen nada y son más efímeras que la vida misma. Es como si ella pensara que sus problemas son los más grandes del mundo e insiste en ahogarse en ellos como si fuese la única opción, vive en una burbuja que no está dispuesta a romper, vive en un mundo donde solo ella importa y los demás solo están ahí porque si, no existe equipo para ella, se conforma con poco o no se conforma con nada, no tiene ideales ni metas.
Cuando Louis me hablo de Dacotha sus ojos reflejaban desprecio.
-Es impresionante que afirmes todo eso de ella después de una noche que fueron al centro comercial- le dije a Louis y el trago hondo.
-Fueron dos noches, además ya había hablado con ella. ¿Recuerdas la noche que la llevamos borracha a su casa? La única vez que hable con ella y no quise tirarle un balde encima fue aquel día en la fiesta en mi casa hasta que empezó a hablarme de su ex y luego apareció borracha. Debo admitir que al principio pensé que podía pasar algo entre nosotros dos pero simplemente no combinamos, es como polos opuestos, estoy como en contra de la forma en la que actúa, piensa y simplemente me repele. Ella es diferente, pero diferente que no quieres saber de qué se trata, pero al mismo tiempo siento que la juzgo mal pues sé que no es tonta y que tiene un buen corazón pero esta tan bloqueada que intentar con ella sería un esfuerzo muy grande, una carga que no está hecha para mí. Quizás alguien pueda quererla tanto que sea capaz de ayudarla porque es lo que realmente necesita, pero ese no soy yo porque necesitaría paciencia, constancia, amor, comprensión y son cosas que no tengo. Esa noche acabo muy mal, ella término regresando a su casa en un taxi y yo conduciendo enojado a la mía, luego me llamo y me grito que la había hecho llorar y yo le dije que de saber que todo eso pasaría la hubiese dejado plantada y me colgó.
Escuche con atención a Louis, estuve pensando en que esa misma mañana había visto a Dacotha pero ella no me había comentado absolutamente nada, quizás es porque no vio necesario decirme algo sobre el asunto.
En las noches me tomaba un vaso de leche porque era una costumbre que había cogido de Harry. Los días estuvieron fríos pero soleados, en varias ocasiones me quedé mirando alrededor a la salida del instituto hasta que Michelle me insistía en que quería irse y nos íbamos.
Una noche Zayn llegó al apartamento porque Harry le había pedido que fuera ya que en la mañana había llegado el sobre con los resultados del programa de ingreso lo cual era necesario para que todo su plan del observatorio fuese posible. Harry estuvo nervioso en la mañana y Zayn se veía ansioso cuando llego, eso era muy importante para los chicos porque su meta era abrir el observatorio pero era necesario entrar en aquel programa y en varias ocasiones los habían rechazado. Zayn abrió el sobre y al tener la carta entre las manos empezó a gritar entre carcajadas de alegría, Harry se le tiró encima pidiéndole que le dejara ver, cuando le dio el papel Harry me gritó de emoción de que los había aceptado y no pude evitar gritar. Harry colocó el comunicado sobre la mesa y llamo a los chicos para contarle las buenas noticia, Harry le dijo a Zayn que no le había dicho a Niall que le comunicado había llegado esta mañana porque siempre se colocaba muy nervioso y ansioso así que había preferido esperado a abrir el comunicado para decirle. Esa misma noche Louis y Liam llegaron a festejar las buenas noticias, Liam dijo que Niall no podría venir porque tenía compromisos desde antes, esa noche los chicos compraron una botella de champaña para celebrar y cuando la terminaron se saciaron con agua. El día siguiente cuando llegué al apartamento Louis me abrió la puerta y me dijo que estaban trabajado en el cuarto de estudio, cuando pase de la sala a mi habitación vi a Zayn, Liam y a Niall concentrados en el computador del cuarto de estudio, Harry estaba saliendo de su cuarto, me preguntó si había almorzado le respondí que sí y me dijo que estaban trabajando en lo del programa. Los chicos apenas habían sido aceptados en la preselección del programa ahora estaban organizando los papeles que debían enviar para la segunda fase, ellos estaban muy motivados por haber sido aceptados en la primera fase. Estuvieron trabajando toda la tarde y yo estuve en mi habitación porque no quise interrumpirles, después de un rato Harry fue a comprar unas cosas que necesitaban y antes de irse me pidió que le llevara agua a Niall yo le pregunté que si Niall no sabía dónde quedaba la cocina el me miró y se fue. Yo entre al cuarto de estudio con un vaso de agua en las manos, se lo entregue a Niall, el me quedó mirando y me dijo gracias, yo salí de la habitación y ese fue el único día y momento en el que vi a Niall durante esos día.
En el instituto todo era paz y tranquilidad, me vi siete películas y estuve estudiando. Hoy me levante temprano a pesar de que no tenía que ir al instituto. Nunca organice mi ropa, preferí dejarla en las bolsas de basura. Ahora estaba sacando ropa de las bolsas de basura para guardarla en mi maleta, Harry viajaría hoy en la tarde y como había tenido la brillante idea de alquilar su apartamento mientras no estaba en la ciudad yo también tendría que estar fuera del apartamento por los días que él no estaría en la ciudad.
-¿Terminaste?- me preguntó Harry cuando entro a mi habitación, llevaba su equipaje de mano.
-No, termino de empacar cuando regrese- le respondí.
Acompañaría a Harry al aeropuerto, me quedaría en la pieza que Harry había rentado para mí a pesar de que cuando me dijo le dije que nunca me quedaría en esa pieza preferí descartar la opción de quedarme con Michelle porque ella empezaría a preguntar y preguntar y no quería decirle que no quería quedarme en esa pieza porque aquella casa quedaba en la misma calle de donde vivía Niall porque no lo aceptaría y mentirle a Michelle no era una opción, no quería incomodar a mi hermano porque había conocido a una chica y me contó que constantemente están en su apartamento, y Dacotha no era una opción pues su papá se la llevaría a España unos días.
Tomamos un taxi hasta el aeropuerto, el día estaba muy lindo, era diferente a los días anteriores. Harry se iría durante una semana entera y yo lo iba a extrañar.
-¿Te quedaras en la pieza que te rente?- me preguntó Harry.
-Creo que si- le respondí.
-Dile a Niall que te estarás quedando ahí, no le dije absolutamente nada porque tú no te desidias pero es importante que él sepa para que este pendiente- me dijo Harry.
-Bueno- le dije.
-Si necesitas algo llama a Niall- me dijo él- está cerca y te puede ayudar. si Niall no puede, llama a Liam.
-Bueno.
-Los inquilinos llegan al medio día, déjale las llaves del apartamento al portero- me dijo Harry.
-Bueno
Harry se colocó las gafas de sol, al llegar al aeropuerto compramos una bolsa de dulce como la primera vez solo que esta vez nos la terminamos en la sala de espera del aeropuerto porque él se iba y yo me quedaba. Una vez el avión de Harry se perdió en el cielo compre una hamburguesa para llevar y regrese al apartamento.
Tiré un par de camisas más y ropa interior en la maleta, pedí un taxi, cerré mi cuarto y el de Harry con seguro al igual que el cuarto de estudio. Las cosas de valor estaban bajo llave y Harry había conseguido dos camas para los inquilinos las cuales estaban en la sala. Baje en el ascensor con mi maleta, un morral en la espalda y mis libros en la mano. Le di la dirección al taxista y al llegar me paralice al darme cuenta de que la dirección no correspondía solamente a una casa cerca de la calle de Niall, la dirección correspondía a la casa que estaba junto a la casa de Niall.
Subimos las escaleras hasta llegar al piso de Michelle, tras preguntar quién tocaba ella abrió la puerta, noté sorpresa en sus ojos pero no le presté atención pues ella también le quitó importancia. Ella llevaba una camisa a cuadros con unos pantalones color café ajustados, lo especial era que llevaba el cabello recogido en un tomate muy bien hecho.
-¿Pasando por acá?- preguntó ella mientras se miraba de nuevo en el espejo.
-Estábamos donde mi hermano- le respondí- ¿Vas a salir?- le pregunté.
-Si- dijo ella- ¿Qué tal estuvo el instituto hoy?- me preguntó, yo miré a Niall quien estaba distraído con el cojín del sofá donde ambos estábamos sentados.
-Bien, nada con lo que no puedas lidiar ¿Qué tal estuvo tu mañana?
-Menos ajetreada de lo que pense, ahora le llevare el cheque de pago a Luke- dijo Michelle.
-¿Cheque de pago?- preguntó Niall.
-Sí, trabaja en las mañanas en mi tienda- le respondió ella mirando el cheque.
-¿Luke Hemmings?- le preguntó él y ella asintió.
-¿De verdad? Luke está muy ocupado con su banda.
-Lo del productor- dijo Michelle pensando en su supuesto compromiso.
-La disquera- dijo Niall sin saber que se las estaba cagando.
-¿La disquera?- preguntó Michelle.
“¡Eyy!” se quejó Niall cuando le metí un codazo para que se callara pero lo capto.
-¿Eso que fue?- preguntó Michelle.
-Nada, ella que se le antojó enterrarme el codo- le respondió Niall.
-Ustedes son…- empezó a decir Michelle pero se distrajo con su reloj de mano.
-Ya nos vamos, solo estábamos pasando por aquí y se hace tarde- le dije a Michelle.
Nos despedimos de ella y salimos de su apartamento, en la puerta Niall y yo quedamos frente a frente.
-¿Por qué me diste un codazo? ¿Qué ocultas?- me pregunto él.
Yo me senté en las escaleras y él se sentó junto a mí.
-Michelle no sabe que la banda de Luke tiene disquera porque Luke cree que ella puede conseguirles un productor pero también es mentira- le dije.
-¿Qué?-me pregunto el-¿Luke trabaja en su tienda?
-Sí, pero ella no tiene idea que él y su banda están trabajando para un álbum- le dije.
-En Australia- me dijo Niall y yo me quedé viendo la forma como su boca se movía.
-¿Qué pasa con Australia?- le pregunté.
-Su disquera está en Australia, cuando termine este periodo de tiempo él y su banda viajarán a Australia por un largo tiempo a grabar su álbum- me explico.
-¿Crees que pase algo entre los dos?- le pregunté.
-No tengo ni la menor idea- me respondió el.
-Yo le prometí a Luke no decir nada y ni lo conozco bien- le dije.
-Yo si lo conozco y no le prometí nada- Me dijo Niall.
-Habla con el-le pedí, el me miró y asintió- Niall, gracias por traerme a ver a mi hermano.
-De nada- me respondió.
Mire a Niall de nuevo y respiré hondo al recordar los nervios que llegan a mi cuando él se me acerca. Recordé lo bonita que estaba la luna la noche de la fiesta en casa de Louis en que Niall y yo salimos a caminar hasta un restaurante de sándwiches.
-¿Te llevo al edificio?- me preguntó él.
-No, voy al supermercado- le dije.
Los dos estábamos hablando despacio y en un tono bajo que me resultaba dulce. Michelle salió de su apartamento cambiando el ambiente entre nosotros.
-¿Ustedes dos siguen aquí?- pregunto ella y ambos nos colocamos de pie.
Michelle agito su mano en forma de despedida y corrió bajando las escaleras.
-Celif, hazme un favor- me pidió Niall.
-¿Cuál?- le pregunté mirándolo, estábamos cerca pero no tanto como las otras veces.
-Llámame cuando llegues, dime como llegaste- me dijo Niall.
-Lo hare- le dije yo.
Bajamos las escaleras, al salir del edificio el subió en su camioneta y vi hasta cuando la camioneta se alejó, luego caminé un par de calles en sentido contrario hasta llegar a un súper mercado para hacer la compra.
. . .
-¡La compra!- celebro Harry cuando entre al apartamento con las bolsas del mercado.-¡Sí!- le respondí dejando todo sobre la mesa.
Harry estaba tirado en el sofá hablando por teléfono así que empecé a desempacar las cosas de la cocina.
-¿Pero a donde vamos a ir?- pregunto Harry al teléfono- Ahí no me gusta… es muy aburrido ahí- decía él mientras yo metía las cosas en la nevera- tu siempre sabes, Niall… te estoy dando la oportunidad, elige tú.
Cuando terminé me senté junto a Harry y me puse a leer un libro para historia pero él seguía hablando con Niall. Hablaron durante un tiempo, Harry se reía y le seguía preguntado a donde ir, terminaron acordando su salida y Harry se despidió.
-¿Cómo te fue hoy?- me preguntó Harry.
-Bien, llegué a ver a mi hermano y después fui por la compra- le comente- ¿Cómo te fue a ti?
-Estuve libre, estuve durmiendo hasta tarde- me respondió.
-Voy a salir con Niall en la noche ¿nos acompañas?
-No, tengo que estudiar- le respondí.
-Si cambias de opinión me llamas y vengo por ti. Iré a bañarme- me dijo Harry.
- Yo igual- le dije y ambos nos dirigimos a nuestras habitaciones.
Cuando me cambie seguía con el cabello mojado, tomé mi celular y llame a Niall.
-Hola
-Hola ¿Cómo estás?- me dijo él.
-Bien, ya llegué
-¿Hasta ahora?
-No, llegué hace tiempo. Estabas hablando con Harry y por eso no te había llamado.
-Vamos a salir ¿vienes?- me preguntó Niall.
-No, mañana tengo que ir al instituto, tengo que escribir sobre un personaje famoso representativo, además tengo que arreglar porque por tu culpa tengo mi ropa en bolsas de basura y sé que yo no haría nada interesante allá- le argumenté.
-¿Sobre quién escribirás?- me preguntó.
-Charles Chaplin porque a mi abuelo le encantaba- le respondí.
-Termina y ve a dormir- me dijo en un tono dulce.
-Te daría las buenas noches pero supongo que no dormirás- le dije.
-Si voy a dormir, solo que no por ahora- sonreí sentándome en la orilla de mi cama.
-Bueno…- dije sonriendo, su voz se escuchaba bien.
-Celif, no te veré el sábado- me dijo Niall.
Las clases de guitarra, estaba cancelando.
-Te recuerdo que tenemos un acuerdo- me quité los zapatos.
-Pero yo soy el maestro- me respondió Niall.
-¿Eso que tiene que ver? ¿Por qué cancelas?
Teníamos un acuerdo, yo había dejado libre mis sábados en las mañana y me había levantado para evitar la penitencia.
-No estoy disponible.
-No quiero perder el tiempo como la última vez- insistí.
-La última vez fue la semana pasada y eso no contó- me dijo él.
-Dame una razón- le exigí.
-Piensa lo que quieras- me dijo Niall.
-Pensare en tu penitencia, fue lo que tú mismo acordaste- cerré la llamada y fui a cepillarme los dientes.
Estaba molesta, no me había querido dar razones, no tenía por qué exigirle pero él me cancelo sin tener la delicadeza de darme un simple motivo.
Cuando estaba cepillándome los diente Harry toco a mi puerta y le grite que pasara para que me escuchara. Harry entró hasta el baño, se había cambiado y llevaba las llaves del auto en las manos.
-Ya me voy, iré a turno y luego saldré con Niall- me dijo- me avisas si cambias de opinión.
-No iré, no puedo- le dije.
-Adiós- me dijo Harry y lo abrace.
-Cuídate- le dije- me llamas cuando vayas a venir para estar pendiente.
-Bueno- me dijo, termine de escribir sobre Charles Chaplin y me fui a dormir.
Los días siguientes fui al instituto cuando debía hacerlo y varios días me fui con Michelle después de clases a ayudarle con su tienda o a ir a almorzar en restaurantes que servían platos típicos de diferentes partes del mundo. En dos ocasiones Luke también estuvo en la tienda de Michelle y ellos se la llevaban bien. Harry llegaba tarde de sus turnos y por lo general cansado, pero de todas formas nos quedábamos viendo nuestras series hasta tarde, lo invite a caminar una noche y caminamos hasta estar lo suficientemente lejos como para tener que regresar en taxi. Estuve varias horas sola sentada en el sofá de la sala leyendo un libro de 684 hojas para escribir una crítica para la revista del instituto. Llamé a mi mamá cada noche antes de entrar a la cama y ella me dijo que todo estaba listo para mudarse pronto a su casa soñada en las afueras, sentí un poco de nostalgia al pensar en mi casa vacía. Una tarde Harry, Liam y yo fuimos a la casa de Louis, ahí estuve hablando con Louis y tocamos el tema de Dacotha.
-Salí con ella una noche, yo quería llevarla a recorrer la ciudad en mi auto pero ella prefirió que pasáramos la noche en el centro comercial- me comento Louis encogiéndose de hombros- Fue muy complicado tratar con ella, tanto que no lo volvería a intentar en mi vida. Ella es tan insegura consigo y con los demás, insiste en llenar su vida con cosas que no calen nada y son más efímeras que la vida misma. Es como si ella pensara que sus problemas son los más grandes del mundo e insiste en ahogarse en ellos como si fuese la única opción, vive en una burbuja que no está dispuesta a romper, vive en un mundo donde solo ella importa y los demás solo están ahí porque si, no existe equipo para ella, se conforma con poco o no se conforma con nada, no tiene ideales ni metas.
Cuando Louis me hablo de Dacotha sus ojos reflejaban desprecio.
-Es impresionante que afirmes todo eso de ella después de una noche que fueron al centro comercial- le dije a Louis y el trago hondo.
-Fueron dos noches, además ya había hablado con ella. ¿Recuerdas la noche que la llevamos borracha a su casa? La única vez que hable con ella y no quise tirarle un balde encima fue aquel día en la fiesta en mi casa hasta que empezó a hablarme de su ex y luego apareció borracha. Debo admitir que al principio pensé que podía pasar algo entre nosotros dos pero simplemente no combinamos, es como polos opuestos, estoy como en contra de la forma en la que actúa, piensa y simplemente me repele. Ella es diferente, pero diferente que no quieres saber de qué se trata, pero al mismo tiempo siento que la juzgo mal pues sé que no es tonta y que tiene un buen corazón pero esta tan bloqueada que intentar con ella sería un esfuerzo muy grande, una carga que no está hecha para mí. Quizás alguien pueda quererla tanto que sea capaz de ayudarla porque es lo que realmente necesita, pero ese no soy yo porque necesitaría paciencia, constancia, amor, comprensión y son cosas que no tengo. Esa noche acabo muy mal, ella término regresando a su casa en un taxi y yo conduciendo enojado a la mía, luego me llamo y me grito que la había hecho llorar y yo le dije que de saber que todo eso pasaría la hubiese dejado plantada y me colgó.
Escuche con atención a Louis, estuve pensando en que esa misma mañana había visto a Dacotha pero ella no me había comentado absolutamente nada, quizás es porque no vio necesario decirme algo sobre el asunto.
En las noches me tomaba un vaso de leche porque era una costumbre que había cogido de Harry. Los días estuvieron fríos pero soleados, en varias ocasiones me quedé mirando alrededor a la salida del instituto hasta que Michelle me insistía en que quería irse y nos íbamos.
Una noche Zayn llegó al apartamento porque Harry le había pedido que fuera ya que en la mañana había llegado el sobre con los resultados del programa de ingreso lo cual era necesario para que todo su plan del observatorio fuese posible. Harry estuvo nervioso en la mañana y Zayn se veía ansioso cuando llego, eso era muy importante para los chicos porque su meta era abrir el observatorio pero era necesario entrar en aquel programa y en varias ocasiones los habían rechazado. Zayn abrió el sobre y al tener la carta entre las manos empezó a gritar entre carcajadas de alegría, Harry se le tiró encima pidiéndole que le dejara ver, cuando le dio el papel Harry me gritó de emoción de que los había aceptado y no pude evitar gritar. Harry colocó el comunicado sobre la mesa y llamo a los chicos para contarle las buenas noticia, Harry le dijo a Zayn que no le había dicho a Niall que le comunicado había llegado esta mañana porque siempre se colocaba muy nervioso y ansioso así que había preferido esperado a abrir el comunicado para decirle. Esa misma noche Louis y Liam llegaron a festejar las buenas noticias, Liam dijo que Niall no podría venir porque tenía compromisos desde antes, esa noche los chicos compraron una botella de champaña para celebrar y cuando la terminaron se saciaron con agua. El día siguiente cuando llegué al apartamento Louis me abrió la puerta y me dijo que estaban trabajado en el cuarto de estudio, cuando pase de la sala a mi habitación vi a Zayn, Liam y a Niall concentrados en el computador del cuarto de estudio, Harry estaba saliendo de su cuarto, me preguntó si había almorzado le respondí que sí y me dijo que estaban trabajando en lo del programa. Los chicos apenas habían sido aceptados en la preselección del programa ahora estaban organizando los papeles que debían enviar para la segunda fase, ellos estaban muy motivados por haber sido aceptados en la primera fase. Estuvieron trabajando toda la tarde y yo estuve en mi habitación porque no quise interrumpirles, después de un rato Harry fue a comprar unas cosas que necesitaban y antes de irse me pidió que le llevara agua a Niall yo le pregunté que si Niall no sabía dónde quedaba la cocina el me miró y se fue. Yo entre al cuarto de estudio con un vaso de agua en las manos, se lo entregue a Niall, el me quedó mirando y me dijo gracias, yo salí de la habitación y ese fue el único día y momento en el que vi a Niall durante esos día.
En el instituto todo era paz y tranquilidad, me vi siete películas y estuve estudiando. Hoy me levante temprano a pesar de que no tenía que ir al instituto. Nunca organice mi ropa, preferí dejarla en las bolsas de basura. Ahora estaba sacando ropa de las bolsas de basura para guardarla en mi maleta, Harry viajaría hoy en la tarde y como había tenido la brillante idea de alquilar su apartamento mientras no estaba en la ciudad yo también tendría que estar fuera del apartamento por los días que él no estaría en la ciudad.
-¿Terminaste?- me preguntó Harry cuando entro a mi habitación, llevaba su equipaje de mano.
-No, termino de empacar cuando regrese- le respondí.
Acompañaría a Harry al aeropuerto, me quedaría en la pieza que Harry había rentado para mí a pesar de que cuando me dijo le dije que nunca me quedaría en esa pieza preferí descartar la opción de quedarme con Michelle porque ella empezaría a preguntar y preguntar y no quería decirle que no quería quedarme en esa pieza porque aquella casa quedaba en la misma calle de donde vivía Niall porque no lo aceptaría y mentirle a Michelle no era una opción, no quería incomodar a mi hermano porque había conocido a una chica y me contó que constantemente están en su apartamento, y Dacotha no era una opción pues su papá se la llevaría a España unos días.
Tomamos un taxi hasta el aeropuerto, el día estaba muy lindo, era diferente a los días anteriores. Harry se iría durante una semana entera y yo lo iba a extrañar.
-¿Te quedaras en la pieza que te rente?- me preguntó Harry.
-Creo que si- le respondí.
-Dile a Niall que te estarás quedando ahí, no le dije absolutamente nada porque tú no te desidias pero es importante que él sepa para que este pendiente- me dijo Harry.
-Bueno- le dije.
-Si necesitas algo llama a Niall- me dijo él- está cerca y te puede ayudar. si Niall no puede, llama a Liam.
-Bueno.
-Los inquilinos llegan al medio día, déjale las llaves del apartamento al portero- me dijo Harry.
-Bueno
Harry se colocó las gafas de sol, al llegar al aeropuerto compramos una bolsa de dulce como la primera vez solo que esta vez nos la terminamos en la sala de espera del aeropuerto porque él se iba y yo me quedaba. Una vez el avión de Harry se perdió en el cielo compre una hamburguesa para llevar y regrese al apartamento.
Tiré un par de camisas más y ropa interior en la maleta, pedí un taxi, cerré mi cuarto y el de Harry con seguro al igual que el cuarto de estudio. Las cosas de valor estaban bajo llave y Harry había conseguido dos camas para los inquilinos las cuales estaban en la sala. Baje en el ascensor con mi maleta, un morral en la espalda y mis libros en la mano. Le di la dirección al taxista y al llegar me paralice al darme cuenta de que la dirección no correspondía solamente a una casa cerca de la calle de Niall, la dirección correspondía a la casa que estaba junto a la casa de Niall.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 82
Nos arrepentiremos del hoy de hoy que será el ayer de mañana pero todos corresponden al mismo pero en diferentes tonos.
-Hola, soy Celif- dije tímidamente mientras sostenía mis maletas.
-Hola, mucho gusto- me dijo la mujer que me había abierto la puerta de la casa, tenía alrededor de cuarenta años pero irradiaba vida- Adelante- me dijo ella ayudándome con la maletas.
La casa era de dos pisos- igual que la de Niall- las paredes eran rojas y contrastaban con los muebles amarillos mostaza que estaban en la sala.
-Nena, toma asiento, te traeré té caliente- me dijo ella señalándome el comedor de seis puestos.
No le respondí y me senté como me lo pidió y en menos de nada regreso ella con el té caliente.
-Me llamo Carmen- me dijo con una sonrisa.
-Mucho gusto- le dije llevándome el recipiente a la boca pero estaba hirviendo.
-Primero que todo, el joven que vino a apartar tu cupo nunca me confirmo si vendrías, de todos modos yo ya te tenía preparado un cuarto. Quiero que te sientas cómoda.
-Muchas gracias.
-Querida, aquí hay reglas, unas pequeñas cositas para asegurar el bienestar y la convivencia. El desayuno se sirve a las 5:00 am, los baños deben permanecer aseados, debes tener en cuenta que hay tres jóvenes que viven aquí, probablemente no los veas porque dos de ellos son universitarios y la chica viaja a la casa de su madre. Me encanta colaborar, mi hijo se fue a estudiar hace diez años al exterior y no tenía a nadie, es por eso que hice de mi casa una residencia para estudiantes que no viven aquí pero que vienen a estudiar. Trato de hacer lo posible para asegurar el buen rendimiento académico de mis jóvenes, se llega a la casa temprano, se va a dormir temprano, no se puede escuchar música fuerte, las visitas no se reciben en las habitaciones y ojala que las visitas sean de carácter académico, no hay televisión en los cuartos y estoy segura de que eres una joven responsable. Sé que solo te quedaras una semana conmigo pero es muy importante para mí que te sientas augusto durante esta semana.
-Así será- le respondí.
-Si necesitas algo, lo que sea, no dudes en pedírmelo- me dijo Carmen.
-Muchas gracias- le dije terminándome el té.
-Tu habitación está en el segundo piso, lista para que te instales.
Carmen subió las escaleras de madera llena de energía mientras la seguía pensaba en que si salía temprano y regresaba temprano Niall no sé enteraría que estaba quedándome en la casa junto a la suya.
El corredor del segundo piso era muy acogedor y estrecho, las paredes eran de color naranja .
-El baño esta al fondo- me dijo Carmen señalándome la puerta de madera- el resto son habitaciones- me dijo ella refiriéndose a las demás puertas- esta es la tuya, llama si necesitas algo- me dijo y bajo las escaleras.
Mi habitación era la que estaba frente a las escaleras, no había visto la camioneta de Niall a la entrada de su casa por lo que deduje que no estaba. Abrí la puerta de mi habitación, lo primero que vi es que la sabana era blanca con estampados azules y que la habitación tenía una ventana que estaba geográficamente frente a una ventana de la casa de Niall. La ventana de la casa de Niall tenía una cortina blanca cerrada totalmente pero mi habitación no tenía cortina.
Deje mi maleta y mi bolso tirados en el piso y corrí escaleras abajo.
-¿Qué te pasó?- me preguntó Carmen un poco alterada al verme corriendo desde la habitación.
-Nada- le respondí- pero quería saber si tiene una cortina porque hay una ventana justo al frente de la ventana de la habitación- le dije.
-No tengo- me dijo en un tono dulce- cariño pero no te preocupes, en esa casa vive un joven respetuoso, prudente y amable. No te preocupes, él no llega a ese cuarto porque es un cuarto deshabilitado de su casa, lo utiliza para guardar cosas. Esa ventana nuca la abre y la cortina nunca la corre, solo la abren cuando hacen el aseo de la casa y siempre me manda a avisar.
Corrí escaleras arriba y regrese al cuarto, le creía a Carmen pero me sentía muy incómoda con solo pensar que esa ventana daba a la casa de Niall. Empecé a buscar entre mi ropa y colgué dos de mis camisas y mi toalla a la ventana para hacer las de cortina. Me cambiaria en el baño y pensaría en que podía hacer para solucionar el asunto de la ventana.
Estos últimos dos días habían sido agotadores, me había quedado despierta hasta la madrugada el día anterior, me sentía muy cansada, agradecía tanto no tener que ir al instituto el día de hoy porque hubiese sido mortal para mí (teniendo en cuenta lo agotada que estaba). Tomé mi celular y llamé a Harry.
-Hola princesa- me dijo el al teléfono.
-Hola ¿Qué hay de nuevo?- le pregunté tirándome en la cama.
La habitación era pequeña, tenía un pequeño baño interna, diminuto escritorio y el armario.
-Nada que no sepas, voy en un taxi para ver a mi mamá y mi hermana- me dijo.
-Me las saludas- le ped
-Claro ¿Qué tal tú? ¿Estas donde Michelle?- me preguntó Harry.
-No, estoy en la pieza que me rentaste, vine porque ya estaba pago- le respondí.
-¿Esta bien?
-Sí, sí. La señora Carmen es muy amable.
-Llama a Niall y dile que estarás ahí para que este al pendiente por si necesitas algo.
-No, no quiero molestarlo. Me iré temprano al instituto y no llegare hasta la noche, prácticamente no estaré aquí.
-¿Qué piensas hacer hasta tarde?
-Cosas, salir con los del instituto, ir donde mi hermano, salir a pasear y eso- le respondí.
-No llegues muy tarde- me pidió.
-No lo hare- le dije.
-Te llamo a la noche- me dijo Harry.
-Adiós- le dije.
Me desperté babeando, me había quedado dormida en la cama de lo cansada que estaba, miré el teléfono y llevaba tres horas y medio durmiendo lo cual era excesivo. Me levanté, caminé hacia la ventana y quité una de las camisas para asomarme; la camioneta de Niall no estaba en el parqueadero, todavía no había llegado.
Salí de mi habitación y baje las escaleras para ver televisión, Carmen me pidió que fuera al comedor para servirme la cena. Al regresar a la habitación me coloque el pijama y cuando iba a cepillarme los dientes escuche la risa de Niall desde lejos. Me asomé a la ventana y vi a la camioneta, a Niall y a una pelirroja delgada que lo acompañaba y juntos entraron a su casa. Cuando entraron me fui a cepillar los dientes, la única vez que lo había visto en estos últimos días fue cuando fue a trabajar en la segunda solicitud, me fui a dormir.
Nos arrepentiremos del hoy de hoy que será el ayer de mañana pero todos corresponden al mismo pero en diferentes tonos.
-Hola, soy Celif- dije tímidamente mientras sostenía mis maletas.
-Hola, mucho gusto- me dijo la mujer que me había abierto la puerta de la casa, tenía alrededor de cuarenta años pero irradiaba vida- Adelante- me dijo ella ayudándome con la maletas.
La casa era de dos pisos- igual que la de Niall- las paredes eran rojas y contrastaban con los muebles amarillos mostaza que estaban en la sala.
-Nena, toma asiento, te traeré té caliente- me dijo ella señalándome el comedor de seis puestos.
No le respondí y me senté como me lo pidió y en menos de nada regreso ella con el té caliente.
-Me llamo Carmen- me dijo con una sonrisa.
-Mucho gusto- le dije llevándome el recipiente a la boca pero estaba hirviendo.
-Primero que todo, el joven que vino a apartar tu cupo nunca me confirmo si vendrías, de todos modos yo ya te tenía preparado un cuarto. Quiero que te sientas cómoda.
-Muchas gracias.
-Querida, aquí hay reglas, unas pequeñas cositas para asegurar el bienestar y la convivencia. El desayuno se sirve a las 5:00 am, los baños deben permanecer aseados, debes tener en cuenta que hay tres jóvenes que viven aquí, probablemente no los veas porque dos de ellos son universitarios y la chica viaja a la casa de su madre. Me encanta colaborar, mi hijo se fue a estudiar hace diez años al exterior y no tenía a nadie, es por eso que hice de mi casa una residencia para estudiantes que no viven aquí pero que vienen a estudiar. Trato de hacer lo posible para asegurar el buen rendimiento académico de mis jóvenes, se llega a la casa temprano, se va a dormir temprano, no se puede escuchar música fuerte, las visitas no se reciben en las habitaciones y ojala que las visitas sean de carácter académico, no hay televisión en los cuartos y estoy segura de que eres una joven responsable. Sé que solo te quedaras una semana conmigo pero es muy importante para mí que te sientas augusto durante esta semana.
-Así será- le respondí.
-Si necesitas algo, lo que sea, no dudes en pedírmelo- me dijo Carmen.
-Muchas gracias- le dije terminándome el té.
-Tu habitación está en el segundo piso, lista para que te instales.
Carmen subió las escaleras de madera llena de energía mientras la seguía pensaba en que si salía temprano y regresaba temprano Niall no sé enteraría que estaba quedándome en la casa junto a la suya.
El corredor del segundo piso era muy acogedor y estrecho, las paredes eran de color naranja .
-El baño esta al fondo- me dijo Carmen señalándome la puerta de madera- el resto son habitaciones- me dijo ella refiriéndose a las demás puertas- esta es la tuya, llama si necesitas algo- me dijo y bajo las escaleras.
Mi habitación era la que estaba frente a las escaleras, no había visto la camioneta de Niall a la entrada de su casa por lo que deduje que no estaba. Abrí la puerta de mi habitación, lo primero que vi es que la sabana era blanca con estampados azules y que la habitación tenía una ventana que estaba geográficamente frente a una ventana de la casa de Niall. La ventana de la casa de Niall tenía una cortina blanca cerrada totalmente pero mi habitación no tenía cortina.
Deje mi maleta y mi bolso tirados en el piso y corrí escaleras abajo.
-¿Qué te pasó?- me preguntó Carmen un poco alterada al verme corriendo desde la habitación.
-Nada- le respondí- pero quería saber si tiene una cortina porque hay una ventana justo al frente de la ventana de la habitación- le dije.
-No tengo- me dijo en un tono dulce- cariño pero no te preocupes, en esa casa vive un joven respetuoso, prudente y amable. No te preocupes, él no llega a ese cuarto porque es un cuarto deshabilitado de su casa, lo utiliza para guardar cosas. Esa ventana nuca la abre y la cortina nunca la corre, solo la abren cuando hacen el aseo de la casa y siempre me manda a avisar.
Corrí escaleras arriba y regrese al cuarto, le creía a Carmen pero me sentía muy incómoda con solo pensar que esa ventana daba a la casa de Niall. Empecé a buscar entre mi ropa y colgué dos de mis camisas y mi toalla a la ventana para hacer las de cortina. Me cambiaria en el baño y pensaría en que podía hacer para solucionar el asunto de la ventana.
Estos últimos dos días habían sido agotadores, me había quedado despierta hasta la madrugada el día anterior, me sentía muy cansada, agradecía tanto no tener que ir al instituto el día de hoy porque hubiese sido mortal para mí (teniendo en cuenta lo agotada que estaba). Tomé mi celular y llamé a Harry.
-Hola princesa- me dijo el al teléfono.
-Hola ¿Qué hay de nuevo?- le pregunté tirándome en la cama.
La habitación era pequeña, tenía un pequeño baño interna, diminuto escritorio y el armario.
-Nada que no sepas, voy en un taxi para ver a mi mamá y mi hermana- me dijo.
-Me las saludas- le ped
-Claro ¿Qué tal tú? ¿Estas donde Michelle?- me preguntó Harry.
-No, estoy en la pieza que me rentaste, vine porque ya estaba pago- le respondí.
-¿Esta bien?
-Sí, sí. La señora Carmen es muy amable.
-Llama a Niall y dile que estarás ahí para que este al pendiente por si necesitas algo.
-No, no quiero molestarlo. Me iré temprano al instituto y no llegare hasta la noche, prácticamente no estaré aquí.
-¿Qué piensas hacer hasta tarde?
-Cosas, salir con los del instituto, ir donde mi hermano, salir a pasear y eso- le respondí.
-No llegues muy tarde- me pidió.
-No lo hare- le dije.
-Te llamo a la noche- me dijo Harry.
-Adiós- le dije.
Me desperté babeando, me había quedado dormida en la cama de lo cansada que estaba, miré el teléfono y llevaba tres horas y medio durmiendo lo cual era excesivo. Me levanté, caminé hacia la ventana y quité una de las camisas para asomarme; la camioneta de Niall no estaba en el parqueadero, todavía no había llegado.
Salí de mi habitación y baje las escaleras para ver televisión, Carmen me pidió que fuera al comedor para servirme la cena. Al regresar a la habitación me coloque el pijama y cuando iba a cepillarme los dientes escuche la risa de Niall desde lejos. Me asomé a la ventana y vi a la camioneta, a Niall y a una pelirroja delgada que lo acompañaba y juntos entraron a su casa. Cuando entraron me fui a cepillar los dientes, la única vez que lo había visto en estos últimos días fue cuando fue a trabajar en la segunda solicitud, me fui a dormir.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
Oooooohhh!!!.., que pasara cuando nail se entere de donde se esta quedando???... ya quiero saber!!!
chelis
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 83
Tenía el cuerpo pegado a la cama, apenas lograba abrir los ojos pero se me volvían a cerrar, tenía que levantarme e ir al instituto pero no podía conseguirlo. La noche me había parecido muy corta porque el dormir en una cama que no era la mía me había perturbado el sueño, tenía la almohada babeada pero eso no me evitaba querer permanecer con la cara pegada en ella. Coloque fuerza de voluntad para tomar impulso y logré levantarme, tomé mi teléfono para ver la hora y sentía arena en los ojos. Todavía tenía tiempo, tomé mi toalla, mi ropa y me fui al baño. Regrese a la habitación para dejar la ropa sucia y tomar mi mochila, mi cortina de prendas no era suficiente para tapar el sol; cuando iba a irme se calló la camisa que hacía de cortina (era muy difícil lograr tener ropa en una ventana que ni rejas tiene) me acerque para recogerlo y vi que la camioneta de Niall seguía estacionada en la entrada.
Al bajar las escaleras me encontré con Carmen sentada frente a un escritorio lleno de papeles.
-Buenos días, es tarde- me dijo.
-Buenos días- le respondí.
-¿Dormiste bien?
-Sí, gracias por preguntar.
Carmen se colocó de pie y se acercó al comedor a tomar un pequeño paquete.
-Te embace el desayuno, te pediré un taxi.
Tomé el paquetico caliente y espere a que llegara el taxi, comería en el camino.
-Yo se los dije- dijo Jesy
-No saben nada de nada- dijo Camila apoyándola.
-Lo que pasa es que fue diferente – justifico Zack.
-Cada quien ve lo que quiere, Zack- le dijo Michelle pasándole el embace de agua.
-Solo si es- les dije- ¿Dónde está Jenna?
-Con Mick en el jardín- me respondió Camila.
-Tengo que entregarle unos apuntes que me pidió.
-Acompáñame a comprar algo a la tienda y te acompaño a entregárselos- propuso Michelle.
Los alumnos estaban inquietos porque se acercaban los días de exámenes, la cafetería estaba parcialmente bacía porque algunos tomaban clases durante gran parte de los descansos para tener crédito extra (eso solo pasaba en este periodo del año según Michelle) así que compramos galletas y un Gatorade para ir al jardín a buscar a Jenna.
Jenna estaba tirada en el césped con Mick, ellos llevaban larga relación y ahora se besan aprovechando de que no había ningún tutor cerca.
-Ellos son muy lindos pero todavía no me acostumbro a verlos besándose cada segundo- me dijo Michelle y corrió hacia ellos.
Ella corrió tirándose encima de ambos, haciendo que Jenna gritara y Mick empezara a reírse.
-Ten Jenna- le dije entregándole los apuntes.
-Gracias, Celif- me dijo ella- ¿Irán con nosotros?- preguntó.
-Creo que sí, pero no estoy segura- le respondí levantando a Michelle.
-Avisen
-Vale- le respondió Michelle.
Empezamos a caminar por el corredor de los salones de spinning donde muchos estaban entrenando, al otro lado del pasillo estaba James, él nos vio y siguió caminando de largo. No quería que me saludara, ni que se ofreciera a acompañarnos, agradecía de alguna manera que decidiera ignorarme.
-Ya nunca te habla- comentó Michelle.
-No- le respondí- Quiero hablar contigo de algo que me tiene intranquila.
-¿Qué?
-Un día fui con James a comer y a la salida del restaurante me besó, puede que pienses que es una tontería pero quisiera que no hubiera pasado porque le doy más importancia de la que merece. Nunca he estado con nadie, nunca me he enamorado y no siento nada por James; luego quise actuar madura como si no me importara y le dije que todo estaba bien pero no, luego lo invite al apartamento porque demostrar que todo estaba bien pero salió mal. Ya no puedo hablar con el igual.
-Cálmate, cuando beses a alguien a quien que te haga sentir algo eso va a ser una anécdota muy tonta. No le hables si no tienes ganas- me dijo ella- Vamos con los demás.
Recordé cuando estaba con Niall en el Boliche y le conté que había dado mi primer beso en un juego de botella con un tipo que no conocía, él me dijo que no yo había dado mi primer beso porque lo tenía que dar con alguien a quien quisiera.
-Ha sido eterno- coincidió Michelle.
-¿Qué clase tienen?- nos preguntó.
Zack va un grado más debajo de nosotras es menor que yo y que todas las personas que conozco pero es hermano de Jessy así que siempre se ha juntado con la gente con la que anda ella, además Zack le agrada a todo el mundo.
-Historia- le respondió Michelle- ¿Tu que tienes?
-Calculo avanzado, soy un genio- dijo Zack y corrió hasta su salón.
-¿Qué harás después de clases?- le pregunté a Michelle.
-A mi casa y a la noche iré al local- me respondió.
-¿Sabes de rutas de autobuses?- le pregunté.
-No mucho- me respondió- ¿A dónde vas?
-A esta dirección- le dije sacando el papelito que estaba en mi bolsillo.
-Si quieres te llevo, no está muy lejos- me respondió ella devolviéndome el papelito.
-No, es que voy en la noche- le dije- ¿Sabes que bus me sirve?
-Creo que la ruta 6, mejor un taxi- me dijo ella.
-¿Qué tan lejos me deja la ruta?- le pregunté.
-No sé, nunca me he montado en esa ruta- me respondió- voy tarde a historia.
-Chao.
-No me dijiste si almorzabas en el instituto o no- me dijo Carmen al abrir- te prepare algo para no lamentar.
-No he almorzado- le dije.
-Perfecto, sírvete, hay jugo en la nevera- me dijo ella- ¿Cómo te fue hoy en el instituto?- me preguntó ella.
-Muy bien, gracias- respondí respetuosamente y fui a servirme el almuerzo a la cocina.
Comí sola en la mesa. Carmen salió durante toda la tarde y la casa estaba sola y completamente en silencio. Era una casa grande, nunca había estado tanto tiempo sola en una casa tan grade. No me sentía cómoda porque no era mi casa y solo llevaba un día ahí, lo único que era mío por ese tiempo era la habitación y la mesa para cuando fuera a comer. No escuche mi propia voz en todo ese tiempo porque no tuve la necesidad de hablar ni una sola vez, subí un rato a mi habitación y leí unos capítulos de mi libro de historia para luego bajar a tomar agua. Cuando baje las escaleras sentí que los colores calientes de la casa que me habían parecido acogedores ayer hoy me resultaban abrumadores. El vecindario era solitario y silencioso, los autos casi no pasaban por esta calle, no sabía cómo eran los vecindarios en Londres en general porque el apartamento de Harry está muy arriba como para sentirlo y además su vecindario es concurrido.
Me hice un café caliente y me antoje a caminar la casa antes de que Carmen o alguien llegara. Caminé entre los pacillos de la casa, cuarto de aseo, cuarto de cajas, dos baños en la primera planta, una foto del que supuse que es el hijo de Carmen, en el patio estaba una piscina, me sorprendió porque no me imaginé que esta casa tuviese piscina ni me imaginaba a Carmen disfrutando del sol en traje de baño en el patio de su casa. Me llamó la atención que Carmen tenía un piano de cola en el patio y sobre la cola del piano se reflejaban las ondas del agua de la piscina, el patio no concordaba con el resto de la casa ya que la casa era muy sencilla, Carmen debió invertir gran parte de su dinero en este patio porque era bastante lujoso, con luces cálidas, adornos en porcelana blanca y cristal, las paredes del patio estaban cubiertas por el color de la vegetación y unos sillones elegantes cubiertos con tela bordada blanca daban un toque delicado. Era su lugar y mi curiosidad había violado eso, yo había ignorado el hecho de que el patio estaba separado de la casa con una puerta polarizada y protegida por un candado, había visto que Carmen guardaba un llavero en un pequeño cofre sobre el televisor y había encontrado la llave que abría el patio.
Cerré el patio y regrese las llaves a su lugar, me senté frente al televisor y me quede viendo las noticias con el cuarto a oscuras. A medida que me informaba que estaba pasando en el mundo revisaba mi teléfono hasta que decidí llamar a Harry para saber cómo estaba y eso.
-Hola ¿Cómo te ha ido?
-Bien, dentro de un rato saldré a comer con mi familia- me dijo él.
-¿Qué has hecho?- le pregunté.
-Dormir y dormir, me encanta venir a casa a dormir en mi vieja cama- me dijo Harry-¿Qué has hecho tú?
-Instituto y estoy con Michelle, adelantaremos un trabajo y me quedare a dormir- le mentí porque le había dicho que prácticamente estaría toda la semana fuera porque no quería que insistiese con decirle a Niall que estaba quedándome en la casa junto a la suya.
-Entonces que tengan buena noche- me dijo Harry y fue cuando una luz entro por la ventana iluminado un poco el cuarto oscuro.
Eran las luces de la camioneta de Niall. Me asomé por la ventana al escuchar las voces y de la camioneta se bajó Niall con una castaña y un chico que llevaba una lata de Red Bull, los tres reían gritaban, la chica salto a la espalda de Niall mientras el chico gritaba animosamente mientras saltaba.
-Que la pases bien en la cena, Adiós Harry- me despedí.
-Chao, te llamo mañana.
Le dejé una nota escrita a mano a Carmen que decía que ya me había ido a dormir, porque quería ir a mi habitación y quería evitar que Carmen se preocupara. Estuve dando vueltas y vueltas hasta que escuche que alguien gritaba desde afuera.
-¡Me voy, me voy pendejos!- era el chico que había llegado con Niall, repetía lo mismo entre carcajadas hasta atravesar la calle y alejarse por la carretera.
Pensé en que podrían estar haciendo y pensé en que Niall tenía la agenda más apretada de lo que pensaba y su abanico social era más grande de lo que aparentaba. Al parecer la chica se había quedado, se me ocurrió la idea de molestarlo con alguna pendejada insignificante. Llamé a una pizzería y pedí una pizza gigante para la dirección de la casa de Niall, sabía que no era la gran cosa pero estaba muy aburrida y me moría de la risa imaginando la confusión en sus rostros al recibir una pizza que no habían ordenado. Pasé la noche en la ventana hasta que la moto del repartidor se apareció por la calle y como era de esperarse, Niall abrió la puerta cuando llego el repartido intercambiaron palabras, él se regresó a pagarle al repartidor y entró con la casa de pizza a la casa. Fue una estupidez pero durante este corto proceso fue muy divertido, había estado controlando mis carcajadas para que ni Carmen ni otra de las personas de la casa lo notaran.
Tenía el cuerpo pegado a la cama, apenas lograba abrir los ojos pero se me volvían a cerrar, tenía que levantarme e ir al instituto pero no podía conseguirlo. La noche me había parecido muy corta porque el dormir en una cama que no era la mía me había perturbado el sueño, tenía la almohada babeada pero eso no me evitaba querer permanecer con la cara pegada en ella. Coloque fuerza de voluntad para tomar impulso y logré levantarme, tomé mi teléfono para ver la hora y sentía arena en los ojos. Todavía tenía tiempo, tomé mi toalla, mi ropa y me fui al baño. Regrese a la habitación para dejar la ropa sucia y tomar mi mochila, mi cortina de prendas no era suficiente para tapar el sol; cuando iba a irme se calló la camisa que hacía de cortina (era muy difícil lograr tener ropa en una ventana que ni rejas tiene) me acerque para recogerlo y vi que la camioneta de Niall seguía estacionada en la entrada.
Al bajar las escaleras me encontré con Carmen sentada frente a un escritorio lleno de papeles.
-Buenos días, es tarde- me dijo.
-Buenos días- le respondí.
-¿Dormiste bien?
-Sí, gracias por preguntar.
Carmen se colocó de pie y se acercó al comedor a tomar un pequeño paquete.
-Te embace el desayuno, te pediré un taxi.
Tomé el paquetico caliente y espere a que llegara el taxi, comería en el camino.
-Yo se los dije- dijo Jesy
-No saben nada de nada- dijo Camila apoyándola.
-Lo que pasa es que fue diferente – justifico Zack.
-Cada quien ve lo que quiere, Zack- le dijo Michelle pasándole el embace de agua.
-Solo si es- les dije- ¿Dónde está Jenna?
-Con Mick en el jardín- me respondió Camila.
-Tengo que entregarle unos apuntes que me pidió.
-Acompáñame a comprar algo a la tienda y te acompaño a entregárselos- propuso Michelle.
Los alumnos estaban inquietos porque se acercaban los días de exámenes, la cafetería estaba parcialmente bacía porque algunos tomaban clases durante gran parte de los descansos para tener crédito extra (eso solo pasaba en este periodo del año según Michelle) así que compramos galletas y un Gatorade para ir al jardín a buscar a Jenna.
Jenna estaba tirada en el césped con Mick, ellos llevaban larga relación y ahora se besan aprovechando de que no había ningún tutor cerca.
-Ellos son muy lindos pero todavía no me acostumbro a verlos besándose cada segundo- me dijo Michelle y corrió hacia ellos.
Ella corrió tirándose encima de ambos, haciendo que Jenna gritara y Mick empezara a reírse.
-Ten Jenna- le dije entregándole los apuntes.
-Gracias, Celif- me dijo ella- ¿Irán con nosotros?- preguntó.
-Creo que sí, pero no estoy segura- le respondí levantando a Michelle.
-Avisen
-Vale- le respondió Michelle.
Empezamos a caminar por el corredor de los salones de spinning donde muchos estaban entrenando, al otro lado del pasillo estaba James, él nos vio y siguió caminando de largo. No quería que me saludara, ni que se ofreciera a acompañarnos, agradecía de alguna manera que decidiera ignorarme.
-Ya nunca te habla- comentó Michelle.
-No- le respondí- Quiero hablar contigo de algo que me tiene intranquila.
-¿Qué?
-Un día fui con James a comer y a la salida del restaurante me besó, puede que pienses que es una tontería pero quisiera que no hubiera pasado porque le doy más importancia de la que merece. Nunca he estado con nadie, nunca me he enamorado y no siento nada por James; luego quise actuar madura como si no me importara y le dije que todo estaba bien pero no, luego lo invite al apartamento porque demostrar que todo estaba bien pero salió mal. Ya no puedo hablar con el igual.
-Cálmate, cuando beses a alguien a quien que te haga sentir algo eso va a ser una anécdota muy tonta. No le hables si no tienes ganas- me dijo ella- Vamos con los demás.
Recordé cuando estaba con Niall en el Boliche y le conté que había dado mi primer beso en un juego de botella con un tipo que no conocía, él me dijo que no yo había dado mi primer beso porque lo tenía que dar con alguien a quien quisiera.
. . .
-¡Que día tan largo!- se quejó Zack.-Ha sido eterno- coincidió Michelle.
-¿Qué clase tienen?- nos preguntó.
Zack va un grado más debajo de nosotras es menor que yo y que todas las personas que conozco pero es hermano de Jessy así que siempre se ha juntado con la gente con la que anda ella, además Zack le agrada a todo el mundo.
-Historia- le respondió Michelle- ¿Tu que tienes?
-Calculo avanzado, soy un genio- dijo Zack y corrió hasta su salón.
-¿Qué harás después de clases?- le pregunté a Michelle.
-A mi casa y a la noche iré al local- me respondió.
-¿Sabes de rutas de autobuses?- le pregunté.
-No mucho- me respondió- ¿A dónde vas?
-A esta dirección- le dije sacando el papelito que estaba en mi bolsillo.
-Si quieres te llevo, no está muy lejos- me respondió ella devolviéndome el papelito.
-No, es que voy en la noche- le dije- ¿Sabes que bus me sirve?
-Creo que la ruta 6, mejor un taxi- me dijo ella.
-¿Qué tan lejos me deja la ruta?- le pregunté.
-No sé, nunca me he montado en esa ruta- me respondió- voy tarde a historia.
-Chao.
. . .
Al final de la jornada caminé hasta la esquina del instituto y pedí un taxi que me dejó en la puerta de la casa, noté que la camioneta de Niall no estaba estacionada en su casa y corrí a tocar el timbre para que Carmen me abriera.-No me dijiste si almorzabas en el instituto o no- me dijo Carmen al abrir- te prepare algo para no lamentar.
-No he almorzado- le dije.
-Perfecto, sírvete, hay jugo en la nevera- me dijo ella- ¿Cómo te fue hoy en el instituto?- me preguntó ella.
-Muy bien, gracias- respondí respetuosamente y fui a servirme el almuerzo a la cocina.
Comí sola en la mesa. Carmen salió durante toda la tarde y la casa estaba sola y completamente en silencio. Era una casa grande, nunca había estado tanto tiempo sola en una casa tan grade. No me sentía cómoda porque no era mi casa y solo llevaba un día ahí, lo único que era mío por ese tiempo era la habitación y la mesa para cuando fuera a comer. No escuche mi propia voz en todo ese tiempo porque no tuve la necesidad de hablar ni una sola vez, subí un rato a mi habitación y leí unos capítulos de mi libro de historia para luego bajar a tomar agua. Cuando baje las escaleras sentí que los colores calientes de la casa que me habían parecido acogedores ayer hoy me resultaban abrumadores. El vecindario era solitario y silencioso, los autos casi no pasaban por esta calle, no sabía cómo eran los vecindarios en Londres en general porque el apartamento de Harry está muy arriba como para sentirlo y además su vecindario es concurrido.
Me hice un café caliente y me antoje a caminar la casa antes de que Carmen o alguien llegara. Caminé entre los pacillos de la casa, cuarto de aseo, cuarto de cajas, dos baños en la primera planta, una foto del que supuse que es el hijo de Carmen, en el patio estaba una piscina, me sorprendió porque no me imaginé que esta casa tuviese piscina ni me imaginaba a Carmen disfrutando del sol en traje de baño en el patio de su casa. Me llamó la atención que Carmen tenía un piano de cola en el patio y sobre la cola del piano se reflejaban las ondas del agua de la piscina, el patio no concordaba con el resto de la casa ya que la casa era muy sencilla, Carmen debió invertir gran parte de su dinero en este patio porque era bastante lujoso, con luces cálidas, adornos en porcelana blanca y cristal, las paredes del patio estaban cubiertas por el color de la vegetación y unos sillones elegantes cubiertos con tela bordada blanca daban un toque delicado. Era su lugar y mi curiosidad había violado eso, yo había ignorado el hecho de que el patio estaba separado de la casa con una puerta polarizada y protegida por un candado, había visto que Carmen guardaba un llavero en un pequeño cofre sobre el televisor y había encontrado la llave que abría el patio.
Cerré el patio y regrese las llaves a su lugar, me senté frente al televisor y me quede viendo las noticias con el cuarto a oscuras. A medida que me informaba que estaba pasando en el mundo revisaba mi teléfono hasta que decidí llamar a Harry para saber cómo estaba y eso.
-Hola ¿Cómo te ha ido?
-Bien, dentro de un rato saldré a comer con mi familia- me dijo él.
-¿Qué has hecho?- le pregunté.
-Dormir y dormir, me encanta venir a casa a dormir en mi vieja cama- me dijo Harry-¿Qué has hecho tú?
-Instituto y estoy con Michelle, adelantaremos un trabajo y me quedare a dormir- le mentí porque le había dicho que prácticamente estaría toda la semana fuera porque no quería que insistiese con decirle a Niall que estaba quedándome en la casa junto a la suya.
-Entonces que tengan buena noche- me dijo Harry y fue cuando una luz entro por la ventana iluminado un poco el cuarto oscuro.
Eran las luces de la camioneta de Niall. Me asomé por la ventana al escuchar las voces y de la camioneta se bajó Niall con una castaña y un chico que llevaba una lata de Red Bull, los tres reían gritaban, la chica salto a la espalda de Niall mientras el chico gritaba animosamente mientras saltaba.
-Que la pases bien en la cena, Adiós Harry- me despedí.
-Chao, te llamo mañana.
Le dejé una nota escrita a mano a Carmen que decía que ya me había ido a dormir, porque quería ir a mi habitación y quería evitar que Carmen se preocupara. Estuve dando vueltas y vueltas hasta que escuche que alguien gritaba desde afuera.
-¡Me voy, me voy pendejos!- era el chico que había llegado con Niall, repetía lo mismo entre carcajadas hasta atravesar la calle y alejarse por la carretera.
Pensé en que podrían estar haciendo y pensé en que Niall tenía la agenda más apretada de lo que pensaba y su abanico social era más grande de lo que aparentaba. Al parecer la chica se había quedado, se me ocurrió la idea de molestarlo con alguna pendejada insignificante. Llamé a una pizzería y pedí una pizza gigante para la dirección de la casa de Niall, sabía que no era la gran cosa pero estaba muy aburrida y me moría de la risa imaginando la confusión en sus rostros al recibir una pizza que no habían ordenado. Pasé la noche en la ventana hasta que la moto del repartidor se apareció por la calle y como era de esperarse, Niall abrió la puerta cuando llego el repartido intercambiaron palabras, él se regresó a pagarle al repartidor y entró con la casa de pizza a la casa. Fue una estupidez pero durante este corto proceso fue muy divertido, había estado controlando mis carcajadas para que ni Carmen ni otra de las personas de la casa lo notaran.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPIYULO 84
-¿Hoy es el turno de Mexico?- le pregunté a Michelle.
Era la hora de la salida y nos decidíamos en qué “país” comer porque se había convertido en una costumbre muy agradable y hoy iríamos con Zack.
-Mejor Japón- dijo Zack.
-No, Italia- dijo Michelle.
Michelle condujo hasta un restaurante muy apartado para poder comer las mejores pastas italianas de la ciudad y yo pedí pizza para llevar pues me habían dicho en alguna ocasión que la pizza italiana era diferente a la de los puestos de comida rápida.
-El auto huele a pizza- se quejó Michelle- las ratas vendrán a comerse los asientos.
-Abre a la ventana para que salga el olor- le dije.
-Eres una egoísta, me tienes sentado cuidando tu pizza y ni siquiera me vas a dar- se quejó Zack.
-Abre la ventana, Zack- le dije y lo hizo de mal humor.
-No vuelves a subir tu comida para llevar en mi carro, creo que pasaran tres meses para que salga esa penetración- me dijo Michelle.
-Para aquí- le pidió Zack a ella- caminare hasta el gimnasio.
Michelle hizo lo que le pidió, Zack se despidió de ambas y bajo del auto.
-¿Iras conmigo a la tienda?- me preguntó Michelle cuando el carro estuvo otra vez en marcha.
-Sí, iré un rato pero tengo que volver temprano- le respondí.
-Solo llegare a ver cómo está la tienda y hablar con Luke, en estos días fui a ver ensayar a su banda y me fascinan, suenan muy bien. De verdad se merecen firmar con una disquera, estaba pensando que podíamos juntar dinero entre los del último grado para que la banda de Luke toque en instituto para la fiesta de pre grado. Sería estupendo y ellos recibirían algo de dinero.
-Es buena idea, tendrías que convencer a todos en el instinto de que vale la pena- le dije.
-Lo vale, son muy buenos- me dijo Michelle.
-Yo estoy de acuerdo contigo, hay que convencer al instituto de eso- le dije.
Michelle estaciono frente a la tienda, Luke estaba en el mostrador entregándole un CD a un par de chicas.
-Luke aumenta las ventas porque está muy bueno- Me dijo ella antes de bajarse del carro.
Yo me baje después de ella y ambas entramos al local.
-Hola chicas- nos saludó Luke.
-Hola ¿Cómo va todo?- le preguntó Michelle.
-Muy bien, acabaron de llegar 20 copias del nuevo álbum de una banda de California- le dijo Luke.
-¿En serio?- dijo Michelle emocionada- ¿Cuántas canciones trae?- le preguntó.
-Trece pero no he leído ningún título, te estaba esperando- le respondió el.
-¿De qué banda es?- pregunté porque no entendía cuál era el interés.
-Ni idea- me dijo Michelle- Tenemos un juego
-¿Un juego?- pregunté.
-Sí, cada vez que llega un álbum nuevo, sin importar de quien sea, vemos los títulos de las canciones antes de escucharlas y tratamos de adivinar si es una canción lenta o rápida- me explicó Luke.
-Y según el título suponemos de que puede tratar la canción y cuál fue la inspiración para escribirla- agregó Michelle.
-Voy por una copia del álbum y jugamos todos ¿Tenemos tiempo?- dijo Luke.
-Tengo la caja de pizza en el carro, vamos por ella y jugamos todos- dije yo.
-Ve tú por ella, no quiero volver a salir- dijo Michelle y me lanzo las llaves.
-Yo la acompaño. El CD está en el segundo estante, es rojo con naranja- le dijo Luke, ella nos miró a ambos y se dirigió a buscar el CD.
Luke y yo salimos del local y rodeamos el carro de Michelle.
-Celif, necesito renunciar- me dijo Luke.
-¿A trabajar a la tienda?-le pregunté mientras metía la llave.
-Sí, es un enredo muy grande. Los chicos me sermonean porque estoy descuidando la banda por tener este empleo, los chicos se molestan mucho conmigo y tienen razones- me explicó.
-Dile a Michelle que no puedes seguir con el empleo- le dije.
-No quiero que se confunda o crea que no quiero ayudarla con la tienda- me dijo.
-Si no quieres que mal interprete entonces háblale claro, dile que tienes un banda que tiene una firma con un sello discográfico y que te iras a Australia en poco tiempo- le dije mientras tomaba la caja de la pizza.
-Ella me cae muy bien y nos llevamos muy bien, no quiero dañarlo todo de un solo- me dijo el recibiéndome la caja de pizza.
-Ella jura que te está ayudando dándote empleo y todo lo demás y la verdad es que se te esta enredando todo y no vas a poder manejarlo.
-¿Todo lo demás?- me preguntó.
-Michelle piensa que se merecen una disquera pero como no la puede conseguir se ha empeñado en hacer todo lo posible para sacarlos adelante. En el instituto harán una fiesta de pre grado y quiere que ustedes toquen y que les paguen por ello, me lo acabo de decir camino acá.
-No, prometiste que no dejarías que se esforzara en eso- me reclamó.
-Te dije que lo intentaría y además no es la gran cosa, solo tocaran en un instituto.
-No, no es eso. En el contrato dice que no podemos hacer ningún tipo de negocios externos, ni hacer ningún tipo de presentaciones previas- me explicó Luke.
-¿Cómo la voy a convencer? Dile la verdad ¿Qué excusa le vas a dar para no tocar?- le pregunté.
-No tengo excusa- me dijo.
-Exacto, no vas a poder con ella, habla con ella y dile que necesitas dejar el trabajo y que tu banda firmo con una disquera reconocida en Australia.
Niall me había prometido que hablaría con Luke sobre este asunto pero al parecer no lo había hecho.
-No lo sé- me dijo él.
-Pueden seguir siendo amigos, ella odia las mentiras- le dije.
-Se lo diré mañana, tengo que pensar bien cómo hacerlo- me dijo y yo cerré la puerta del carro.
-Está bien. Vamos, nos estamos tardando.
Cuando regresamos a la tienda Michelle estaba sentada en el piso con el pequeño estuche entre sus manos, Luke y yo nos sentamos para colocar la pizza en el piso.
-Yo empiezo- pidió Luke y Michelle le entregó el CD.
-El álbum se llama “Plato de rosas”- dijo el- yo digo que se llama así porque creyeron que era exótico pero en realidad no significa nada, unieron palabras al azar.
-Puede ser, yo digo que le colocaron así porque a una chica le regalaron rosas y no tenía florero así que puso las flores en un plato porque no quería ensuciar los vasos- dijo Michelle.
-Yo creo que querían hacer una metáfora pero terminaron inventando significados- propuse yo.
-Quizas alguien no tenía floreros para sus rosas así que las coloco en un plato y pensó que sería una buena metáfora para su álbum y le colocaron “Plato de rosas” para hacerlo más exótico- dijo Luke.
Luke tomó un pedazo de pizza y le entregó en CD a Michelle.
-La primera canción se titula “En un mar de rosas”- dijo Michelle.
-De ahí el nombre del álbum- dijo Luke con la pizza embutida- ni idea de que tratara.
-Llego a mi mente la imagen de un motón de rosas apiñadas en un arroyo- dijo Michelle- creo que es otro título puesto por que si.
-Yo también, sigamos con el siguiente- dijo Luke.
-Segundo título : “No se puede ni siquiera ver”
-Habla de una chica, él la quiere pero ella esta con otro y le dice que lo que ella sinte por el otro no se puede ni siquiera ver asi que debe dejar al otro e irse con él- afirmo Luke.
-¿Por qué?- le pregunté con una sombra de carcajada.
-Porque si- me respondió.
-Yo pienso que él le dedica la canción y sigue con el otro- dijo Michelle.
-Yo también- dijo Luke.
-La que sigue- pendí yo.
-“Ella lo sabe”
-¿Qué sabe?
-Quien sabe
-Yo trato, él dice que ella sabe que él es el que es pero que solo está probando a ver si él no lo sabe- dijo Michelle.
-Me gusta tu trama- le dije
-Es un buen título- dijo Luke.
-Quizás puedas escribir una canción sobre eso- le propuso Michelle.
-Sí, me gusta inventar historias y hacer canciones de ellas- dijo Luke.
-Siguiente título- dijo Michelle- “Hola Bonita”
-Tiene un ritmo Pop, es rápida y repite mucha lasa palabras baile, tarde y canté- dijo Luke.
-¿En qué partes?- le preguntó Michelle.
-canté en la primera estrofa, Baile y tarde en el coro- dijo Luke en un tono serio pero después se echó a reír.
Michelle empezó a reírse de la ocurrencia de Luke. Cada vez las suposiciones se volvían mas abstractas, más específicas y menos probables por parte de los tres, hasta llegar a la canción número trece.
-Regresare el CD a su lugar e iré a buscar un dinero que tengo guardado aquí- dijo Michelle colocándose de pie.
Ella se dirigió a un cuartico quedaba junto a los baños del local, lo cual estaba bastante alejado de donde estábamos. Entonces Luke y yo escuchamos un estruendo que vino del cuarto del cuartico.
-Ve a ver qué pasó- le dije y Luke reacciono y corrió al cuartico.
-¡Esta bien!- gritó Luke desde el cuartico.
Yo mire mi reloj y me di cuenta que era tarde y debía irme si quería llegar antes del toque de queda.
-¡Vengan! ¡Ya me tengo que ir!- grité para que viniesen a despedirme pero no escuche ninguna respuesta- ¡Oigan!- grité nuevamente después de unos segundos pero nada.
Cuando me estaba colocando de pie Luke salió corriendo entre carcajadas.
-¡Adios!- Gritó Luke sin dejar de correr y salió del local.
Michelle llego en ese instante y se colocó de pie junto a mí.
-Luke me beso, no duro ni un segundo- me dijo ella en un tono tan bajo que apenas la escuché.
-¿En serio?- dije emocionada pero no quería presionarla.
-Se me calló en cofre donde guardo el dinero, el llego me beso me dijo que me llamaría y salió corriendo- me dijo ella.
-¿Ahora qué?- le pregunté.
-No lo sé- dijo ella encogiéndose de hombros- él es mi tipo, me gusta mucho.
-Hablamos mañana, ya me voy- le dije.
-Dale, adiós.
-¿Hoy es el turno de Mexico?- le pregunté a Michelle.
Era la hora de la salida y nos decidíamos en qué “país” comer porque se había convertido en una costumbre muy agradable y hoy iríamos con Zack.
-Mejor Japón- dijo Zack.
-No, Italia- dijo Michelle.
Michelle condujo hasta un restaurante muy apartado para poder comer las mejores pastas italianas de la ciudad y yo pedí pizza para llevar pues me habían dicho en alguna ocasión que la pizza italiana era diferente a la de los puestos de comida rápida.
-El auto huele a pizza- se quejó Michelle- las ratas vendrán a comerse los asientos.
-Abre a la ventana para que salga el olor- le dije.
-Eres una egoísta, me tienes sentado cuidando tu pizza y ni siquiera me vas a dar- se quejó Zack.
-Abre la ventana, Zack- le dije y lo hizo de mal humor.
-No vuelves a subir tu comida para llevar en mi carro, creo que pasaran tres meses para que salga esa penetración- me dijo Michelle.
-Para aquí- le pidió Zack a ella- caminare hasta el gimnasio.
Michelle hizo lo que le pidió, Zack se despidió de ambas y bajo del auto.
-¿Iras conmigo a la tienda?- me preguntó Michelle cuando el carro estuvo otra vez en marcha.
-Sí, iré un rato pero tengo que volver temprano- le respondí.
-Solo llegare a ver cómo está la tienda y hablar con Luke, en estos días fui a ver ensayar a su banda y me fascinan, suenan muy bien. De verdad se merecen firmar con una disquera, estaba pensando que podíamos juntar dinero entre los del último grado para que la banda de Luke toque en instituto para la fiesta de pre grado. Sería estupendo y ellos recibirían algo de dinero.
-Es buena idea, tendrías que convencer a todos en el instinto de que vale la pena- le dije.
-Lo vale, son muy buenos- me dijo Michelle.
-Yo estoy de acuerdo contigo, hay que convencer al instituto de eso- le dije.
Michelle estaciono frente a la tienda, Luke estaba en el mostrador entregándole un CD a un par de chicas.
-Luke aumenta las ventas porque está muy bueno- Me dijo ella antes de bajarse del carro.
Yo me baje después de ella y ambas entramos al local.
-Hola chicas- nos saludó Luke.
-Hola ¿Cómo va todo?- le preguntó Michelle.
-Muy bien, acabaron de llegar 20 copias del nuevo álbum de una banda de California- le dijo Luke.
-¿En serio?- dijo Michelle emocionada- ¿Cuántas canciones trae?- le preguntó.
-Trece pero no he leído ningún título, te estaba esperando- le respondió el.
-¿De qué banda es?- pregunté porque no entendía cuál era el interés.
-Ni idea- me dijo Michelle- Tenemos un juego
-¿Un juego?- pregunté.
-Sí, cada vez que llega un álbum nuevo, sin importar de quien sea, vemos los títulos de las canciones antes de escucharlas y tratamos de adivinar si es una canción lenta o rápida- me explicó Luke.
-Y según el título suponemos de que puede tratar la canción y cuál fue la inspiración para escribirla- agregó Michelle.
-Voy por una copia del álbum y jugamos todos ¿Tenemos tiempo?- dijo Luke.
-Tengo la caja de pizza en el carro, vamos por ella y jugamos todos- dije yo.
-Ve tú por ella, no quiero volver a salir- dijo Michelle y me lanzo las llaves.
-Yo la acompaño. El CD está en el segundo estante, es rojo con naranja- le dijo Luke, ella nos miró a ambos y se dirigió a buscar el CD.
Luke y yo salimos del local y rodeamos el carro de Michelle.
-Celif, necesito renunciar- me dijo Luke.
-¿A trabajar a la tienda?-le pregunté mientras metía la llave.
-Sí, es un enredo muy grande. Los chicos me sermonean porque estoy descuidando la banda por tener este empleo, los chicos se molestan mucho conmigo y tienen razones- me explicó.
-Dile a Michelle que no puedes seguir con el empleo- le dije.
-No quiero que se confunda o crea que no quiero ayudarla con la tienda- me dijo.
-Si no quieres que mal interprete entonces háblale claro, dile que tienes un banda que tiene una firma con un sello discográfico y que te iras a Australia en poco tiempo- le dije mientras tomaba la caja de la pizza.
-Ella me cae muy bien y nos llevamos muy bien, no quiero dañarlo todo de un solo- me dijo el recibiéndome la caja de pizza.
-Ella jura que te está ayudando dándote empleo y todo lo demás y la verdad es que se te esta enredando todo y no vas a poder manejarlo.
-¿Todo lo demás?- me preguntó.
-Michelle piensa que se merecen una disquera pero como no la puede conseguir se ha empeñado en hacer todo lo posible para sacarlos adelante. En el instituto harán una fiesta de pre grado y quiere que ustedes toquen y que les paguen por ello, me lo acabo de decir camino acá.
-No, prometiste que no dejarías que se esforzara en eso- me reclamó.
-Te dije que lo intentaría y además no es la gran cosa, solo tocaran en un instituto.
-No, no es eso. En el contrato dice que no podemos hacer ningún tipo de negocios externos, ni hacer ningún tipo de presentaciones previas- me explicó Luke.
-¿Cómo la voy a convencer? Dile la verdad ¿Qué excusa le vas a dar para no tocar?- le pregunté.
-No tengo excusa- me dijo.
-Exacto, no vas a poder con ella, habla con ella y dile que necesitas dejar el trabajo y que tu banda firmo con una disquera reconocida en Australia.
Niall me había prometido que hablaría con Luke sobre este asunto pero al parecer no lo había hecho.
-No lo sé- me dijo él.
-Pueden seguir siendo amigos, ella odia las mentiras- le dije.
-Se lo diré mañana, tengo que pensar bien cómo hacerlo- me dijo y yo cerré la puerta del carro.
-Está bien. Vamos, nos estamos tardando.
Cuando regresamos a la tienda Michelle estaba sentada en el piso con el pequeño estuche entre sus manos, Luke y yo nos sentamos para colocar la pizza en el piso.
-Yo empiezo- pidió Luke y Michelle le entregó el CD.
-El álbum se llama “Plato de rosas”- dijo el- yo digo que se llama así porque creyeron que era exótico pero en realidad no significa nada, unieron palabras al azar.
-Puede ser, yo digo que le colocaron así porque a una chica le regalaron rosas y no tenía florero así que puso las flores en un plato porque no quería ensuciar los vasos- dijo Michelle.
-Yo creo que querían hacer una metáfora pero terminaron inventando significados- propuse yo.
-Quizas alguien no tenía floreros para sus rosas así que las coloco en un plato y pensó que sería una buena metáfora para su álbum y le colocaron “Plato de rosas” para hacerlo más exótico- dijo Luke.
Luke tomó un pedazo de pizza y le entregó en CD a Michelle.
-La primera canción se titula “En un mar de rosas”- dijo Michelle.
-De ahí el nombre del álbum- dijo Luke con la pizza embutida- ni idea de que tratara.
-Llego a mi mente la imagen de un motón de rosas apiñadas en un arroyo- dijo Michelle- creo que es otro título puesto por que si.
-Yo también, sigamos con el siguiente- dijo Luke.
-Segundo título : “No se puede ni siquiera ver”
-Habla de una chica, él la quiere pero ella esta con otro y le dice que lo que ella sinte por el otro no se puede ni siquiera ver asi que debe dejar al otro e irse con él- afirmo Luke.
-¿Por qué?- le pregunté con una sombra de carcajada.
-Porque si- me respondió.
-Yo pienso que él le dedica la canción y sigue con el otro- dijo Michelle.
-Yo también- dijo Luke.
-La que sigue- pendí yo.
-“Ella lo sabe”
-¿Qué sabe?
-Quien sabe
-Yo trato, él dice que ella sabe que él es el que es pero que solo está probando a ver si él no lo sabe- dijo Michelle.
-Me gusta tu trama- le dije
-Es un buen título- dijo Luke.
-Quizás puedas escribir una canción sobre eso- le propuso Michelle.
-Sí, me gusta inventar historias y hacer canciones de ellas- dijo Luke.
-Siguiente título- dijo Michelle- “Hola Bonita”
-Tiene un ritmo Pop, es rápida y repite mucha lasa palabras baile, tarde y canté- dijo Luke.
-¿En qué partes?- le preguntó Michelle.
-canté en la primera estrofa, Baile y tarde en el coro- dijo Luke en un tono serio pero después se echó a reír.
Michelle empezó a reírse de la ocurrencia de Luke. Cada vez las suposiciones se volvían mas abstractas, más específicas y menos probables por parte de los tres, hasta llegar a la canción número trece.
-Regresare el CD a su lugar e iré a buscar un dinero que tengo guardado aquí- dijo Michelle colocándose de pie.
Ella se dirigió a un cuartico quedaba junto a los baños del local, lo cual estaba bastante alejado de donde estábamos. Entonces Luke y yo escuchamos un estruendo que vino del cuarto del cuartico.
-Ve a ver qué pasó- le dije y Luke reacciono y corrió al cuartico.
-¡Esta bien!- gritó Luke desde el cuartico.
Yo mire mi reloj y me di cuenta que era tarde y debía irme si quería llegar antes del toque de queda.
-¡Vengan! ¡Ya me tengo que ir!- grité para que viniesen a despedirme pero no escuche ninguna respuesta- ¡Oigan!- grité nuevamente después de unos segundos pero nada.
Cuando me estaba colocando de pie Luke salió corriendo entre carcajadas.
-¡Adios!- Gritó Luke sin dejar de correr y salió del local.
Michelle llego en ese instante y se colocó de pie junto a mí.
-Luke me beso, no duro ni un segundo- me dijo ella en un tono tan bajo que apenas la escuché.
-¿En serio?- dije emocionada pero no quería presionarla.
-Se me calló en cofre donde guardo el dinero, el llego me beso me dijo que me llamaría y salió corriendo- me dijo ella.
-¿Ahora qué?- le pregunté.
-No lo sé- dijo ella encogiéndose de hombros- él es mi tipo, me gusta mucho.
-Hablamos mañana, ya me voy- le dije.
-Dale, adiós.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 85
El taxi se estacionó frente a la casa de Carmen, Niall estaba en su casa y esta vez no solo lo sabía porque su camioneta estaba estacionada en la entrada sino que lo veía. Niall estaba sentado en la ventana del primer piso de su casa, él no me veía porque estaba sentado de tan forma que le daba la espalda a la calle sin tener en cuenta que estaba muy concentrado teniendo una conversación con una chica de cabello liso, largo y negro. Dudé en salir del taxi, no quería que Niall me viese, pero ella se colocó de pié y a pesar de la distancia no tarde en darme cuenta que era Jade, se veía muy hermosa, tomó a Niall y ambos se alejaron de la ventana y de mi vista. Antes de salir del taxi me subí la capucha de mi jumper porque quería evitar que alguno de los dos me llegara a reconocer, caminé rápido y con la cabeza baja hasta llegar a la puerta de la casa de Carmen.
-Celif, me tenías preocupada- me dijo Carmen al abrirme la puerta- No soy tu mamá pero me tenía angustiada, en quince minutos es tu toque de queda.
-Lo siento me distraje- me disculpé con ella.
-Ya no importa, avisa la próxima vez ¿Quieres tomar leche?
-Sí, por favor
Cuando terminé el vaso de leche subí a mi habitación y me acosté en la cama pero me quedé mirando el techo, la luz de la lámpara me cegaba un poco. Llamé a mi mamá y me preguntó del instituto y por Harry, luego llamé a Harry quien me habló de su hermana. Cuando se hizo más tarde sentí la necesidad de quitar mi ropa de la ventana para ver que estaba haciendo Niall, pero no podría saberlo, las paredes son de concreto y no podría ver nada. Pensé en Jade, estaba con Niall sin su prometido, sé que ellos eran amigos pero recordé aquel día en la casa de Louis después de la fiesta que bajé las escaleras y vi a Niall y a Jade besándose mientras el prometido de Jade la esperaba en su auto, pero Niall me aclaró que había sido el quien la había besado. Recordé ese día que Jade estaba llorando y había ido a buscar consuelo con Niall, pensé en el día que Niall me dijo que Jade estaba en Milán con su prometido y pensé que si Niall sentía algo por Jade debía encontrarse en un dilema al ver que ella se casaría pronto. Pensé en una vez que Niall estuvó cerca de mí pero no pude recordad con exactitud el azul de sus ojos y me acurruqué en la cama hasta quedarme dormida. Esa noche soñé conmigo misma caminando por una bahía con uno de mis ex compañeros de América y empezamos a huir de la policía, lo impresionante del sueño era que yo corría sin sentir cansancio y era veloz pero al mismo tiempo sentía temor de que nos alcanzaran, de pronto ya no estábamos en la bahía, corríamos como gacelas por las calles grises y oscuras hasta llegar a un edificio donde subimos eternamente las escaleras hasta llegar al último piso donde estábamos con dos o tres personas más, desde ahí vi a la policía que desistía de seguirnos pero un poco más atrás estaba una mujer sentada en un muro y miraba a una joven que veía su reflejo en una ventana. Me desperté con el ritmo cardiaco acelerado porque a pesar de que esa mujer no lucia ni en lo más mínimo como mi mamá, era mi mamá y esa joven era su hija pero no era yo, era mi hermana. Me senté en la cama, nunca había llegado a imaginar cómo hubiese sido mi hermana cuando tuviera mi edad pero en el sueño esa era ella y la mujer era mi mamá, decidí dejar a un lado el asunto y bajar por agua para distraer mi mente.
Salí de mi habitación con mucho cuidado para evitar despertar y/o incomodar a alguien en la casa, mis ojos se adaptaban a la oscuridad, cuando iba bajando las escaleras escuché como la puerta de la habitación de Carmen se abría.
-¿Celif?- preguntó ella al verme.
-Si
-¿A dónde vas? Es tarde y mañana madrugaras- me dijo ella.
-Por agua, tengo sed- le dije confundida, había hecho el mínimo ruido.
-Te acompaño para que no bajes sola- me dijo y bajó las escaleras junto a mí.
La misma Carmen fue la que me sirvió el vaso de agua y se sentó en el comedor conmigo hasta que lo terminé, solo me preguntó cómo iba en el instituto, cuando termine con el agua ella guardó el baso en la repisa, apagó las luces de la sala y me acompaño hasta la puerta de mi habitación.
Al día siguiente llegué tarde del instituto porque estuve terminado un proyecto en la casa de Jullie, una compañera de historia. Al llegar almorcé sola porque Carmen ya había almorzado. Cuando estaba en la mesa vi por primera vez a uno de los chicos de la casa, era muy flaco y alto, me dijo buenas tardes y yo se lo respondí. Más tarde subí a la habitación a leer artículos para el instituto, miré varias veces por la ventana y en todo el día no vi ni llegar, ni salir a Niall, no supe nada de él
La mañana siguiente salí muy temprano porque tenía que llegar antes que empezaran las clases, en la tarde llegué y le pedí el televisor a Carmen, extrañaba ver las series que veía con Harry así que estuve viendo todo lo que pasaban por cualquier canal, así estuve hasta que se hizo tarde. Cuando llegó la hora en la que Carmen pedía ir a dormir, respeté su norma y subí las escaleras. En la habitación estuve un rato molestando con mi celular porque no tenía sueño, llamé a Dacotha porque desde que se había ido a pasar tiempo con su papá en España no había sabido mucho de ella.
-Hola ¿Cómo estás?- la saludé entusiasmada.
-Hola C, aburrida- me dijo Dacotha.
-¿Cómo estas con tu papá?- quise saber.
-Bien, normal- me dijo ella.
-¿Tienes sueño?- le pregunté porque la escuchaba cansada.
-No, acá he comido mucho. Estoy saliendo con un vecino de mi papá- me dijo ella.
-¿Qué tal es?- le pregunté.
-Trabaja para mi papá- me dijo.
-Ah ya- le dije pensando en Louis.
-No me gusta mucho, pero es muy lindo y me lleva diez años así que mi papá nunca me dejaría estar con él y eso hace interesante el estar aquí- me explico.
-No te precipites- le advertí.
-Tratare, adiós C.
En eso un alboroto que venía de fuera llamó mi atención.
El taxi se estacionó frente a la casa de Carmen, Niall estaba en su casa y esta vez no solo lo sabía porque su camioneta estaba estacionada en la entrada sino que lo veía. Niall estaba sentado en la ventana del primer piso de su casa, él no me veía porque estaba sentado de tan forma que le daba la espalda a la calle sin tener en cuenta que estaba muy concentrado teniendo una conversación con una chica de cabello liso, largo y negro. Dudé en salir del taxi, no quería que Niall me viese, pero ella se colocó de pié y a pesar de la distancia no tarde en darme cuenta que era Jade, se veía muy hermosa, tomó a Niall y ambos se alejaron de la ventana y de mi vista. Antes de salir del taxi me subí la capucha de mi jumper porque quería evitar que alguno de los dos me llegara a reconocer, caminé rápido y con la cabeza baja hasta llegar a la puerta de la casa de Carmen.
-Celif, me tenías preocupada- me dijo Carmen al abrirme la puerta- No soy tu mamá pero me tenía angustiada, en quince minutos es tu toque de queda.
-Lo siento me distraje- me disculpé con ella.
-Ya no importa, avisa la próxima vez ¿Quieres tomar leche?
-Sí, por favor
Cuando terminé el vaso de leche subí a mi habitación y me acosté en la cama pero me quedé mirando el techo, la luz de la lámpara me cegaba un poco. Llamé a mi mamá y me preguntó del instituto y por Harry, luego llamé a Harry quien me habló de su hermana. Cuando se hizo más tarde sentí la necesidad de quitar mi ropa de la ventana para ver que estaba haciendo Niall, pero no podría saberlo, las paredes son de concreto y no podría ver nada. Pensé en Jade, estaba con Niall sin su prometido, sé que ellos eran amigos pero recordé aquel día en la casa de Louis después de la fiesta que bajé las escaleras y vi a Niall y a Jade besándose mientras el prometido de Jade la esperaba en su auto, pero Niall me aclaró que había sido el quien la había besado. Recordé ese día que Jade estaba llorando y había ido a buscar consuelo con Niall, pensé en el día que Niall me dijo que Jade estaba en Milán con su prometido y pensé que si Niall sentía algo por Jade debía encontrarse en un dilema al ver que ella se casaría pronto. Pensé en una vez que Niall estuvó cerca de mí pero no pude recordad con exactitud el azul de sus ojos y me acurruqué en la cama hasta quedarme dormida. Esa noche soñé conmigo misma caminando por una bahía con uno de mis ex compañeros de América y empezamos a huir de la policía, lo impresionante del sueño era que yo corría sin sentir cansancio y era veloz pero al mismo tiempo sentía temor de que nos alcanzaran, de pronto ya no estábamos en la bahía, corríamos como gacelas por las calles grises y oscuras hasta llegar a un edificio donde subimos eternamente las escaleras hasta llegar al último piso donde estábamos con dos o tres personas más, desde ahí vi a la policía que desistía de seguirnos pero un poco más atrás estaba una mujer sentada en un muro y miraba a una joven que veía su reflejo en una ventana. Me desperté con el ritmo cardiaco acelerado porque a pesar de que esa mujer no lucia ni en lo más mínimo como mi mamá, era mi mamá y esa joven era su hija pero no era yo, era mi hermana. Me senté en la cama, nunca había llegado a imaginar cómo hubiese sido mi hermana cuando tuviera mi edad pero en el sueño esa era ella y la mujer era mi mamá, decidí dejar a un lado el asunto y bajar por agua para distraer mi mente.
Salí de mi habitación con mucho cuidado para evitar despertar y/o incomodar a alguien en la casa, mis ojos se adaptaban a la oscuridad, cuando iba bajando las escaleras escuché como la puerta de la habitación de Carmen se abría.
-¿Celif?- preguntó ella al verme.
-Si
-¿A dónde vas? Es tarde y mañana madrugaras- me dijo ella.
-Por agua, tengo sed- le dije confundida, había hecho el mínimo ruido.
-Te acompaño para que no bajes sola- me dijo y bajó las escaleras junto a mí.
La misma Carmen fue la que me sirvió el vaso de agua y se sentó en el comedor conmigo hasta que lo terminé, solo me preguntó cómo iba en el instituto, cuando termine con el agua ella guardó el baso en la repisa, apagó las luces de la sala y me acompaño hasta la puerta de mi habitación.
Al día siguiente llegué tarde del instituto porque estuve terminado un proyecto en la casa de Jullie, una compañera de historia. Al llegar almorcé sola porque Carmen ya había almorzado. Cuando estaba en la mesa vi por primera vez a uno de los chicos de la casa, era muy flaco y alto, me dijo buenas tardes y yo se lo respondí. Más tarde subí a la habitación a leer artículos para el instituto, miré varias veces por la ventana y en todo el día no vi ni llegar, ni salir a Niall, no supe nada de él
La mañana siguiente salí muy temprano porque tenía que llegar antes que empezaran las clases, en la tarde llegué y le pedí el televisor a Carmen, extrañaba ver las series que veía con Harry así que estuve viendo todo lo que pasaban por cualquier canal, así estuve hasta que se hizo tarde. Cuando llegó la hora en la que Carmen pedía ir a dormir, respeté su norma y subí las escaleras. En la habitación estuve un rato molestando con mi celular porque no tenía sueño, llamé a Dacotha porque desde que se había ido a pasar tiempo con su papá en España no había sabido mucho de ella.
-Hola ¿Cómo estás?- la saludé entusiasmada.
-Hola C, aburrida- me dijo Dacotha.
-¿Cómo estas con tu papá?- quise saber.
-Bien, normal- me dijo ella.
-¿Tienes sueño?- le pregunté porque la escuchaba cansada.
-No, acá he comido mucho. Estoy saliendo con un vecino de mi papá- me dijo ella.
-¿Qué tal es?- le pregunté.
-Trabaja para mi papá- me dijo.
-Ah ya- le dije pensando en Louis.
-No me gusta mucho, pero es muy lindo y me lleva diez años así que mi papá nunca me dejaría estar con él y eso hace interesante el estar aquí- me explico.
-No te precipites- le advertí.
-Tratare, adiós C.
En eso un alboroto que venía de fuera llamó mi atención.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 57
El alboroto venia de la calle, era música y sonaba cada vez más fuerte, era un auto que se estaciono frente a la casa pero de pronto, la música paro.
-¡¿Por qué quitas la música?!- escuché un reclamo de la calle.
Entonces colocaron la música de nuevo pero se escucharon unos gritos de desaprobación y volvieron a quitar la canción, finalmente se decidieron a colocarla con un volumen más bajo pero era lo suficientemente fuerte como para entrar por mi ventana e inundar mi cuarto con el sonido. Esta vez no me quise asomar por la ventana, me limite a preguntarme si aquello tendría algo que ver con Niall.
Al día siguiente olvide despertarme temprano así que llegue tarde al instituto, por eso salí más tarde de lo normal sanando mi deuda. Debía tener un historial intachable o de lo contrario perdería mi beca. Cuando termine todo en el instituto llamé a mi hermano para que me buscara porque lo invitaría a almorzar
-Déjame leerlo por favor- le pedí. Estaba en el auto de mi hermano rumbo a comer pastas.
Estaba muy feliz y animada, pues una revista local publicaría una columna escrita por mi hermano.
-Celif saldrá en la edición de este me- me dijo Alan.
-No soporto la espera, por lo menos dime de que trata- insistí.
-Sobre ti.
-¿Escribiste sobre mí?
-Si
-Juramelo
Alan alejó la vista de la carretera un segundo para mirarme a los ojos.
-Te lo juro- me dijo y supe que era verdad
-Esperare a que salga pero quiero que me pidas una copia- le dije.
En el restaurante, mientras esperábamos la comida, Alan me hablo de una chica con la que estaba saliendo.
-Quiero que la conozcas- me dijo.
-¿Tan rápido?- le pregunté.
-No, no tengo nada con ella. Solo quiero saber qué opinas tú de ella. Es varios años menos que yo- Yo lo miré sorprendida.
-No me mires así, tú vives con chico mayor que tú- me quiso recordar mi hermano.
-Es mi mejor amigo, no ejemplifica tu punto- me defendí.
-También llegaste con un chico mayor que tú a almorzar a mi casa- me dijo.
-Es un amigo de Harry.
-¿Qué es tuyo?
-No sé, supongo que amigo- dije dudando.
-¿Supones?
-Sí, no sé, es que casi siempre no nos llevamos bien.
-Se ve buena persona- agrego mi hermano.
-Lo es, es que me desespera, me hace perder la paciencia, me molesta y sencillamente no lo soporto.
-Ay celif- mi hermano se limitó a decir eso y luego sonrió.
Hablamos de nuestros padres, de la nueva casa, de lo que habíamos pasado en la vieja casa, hablamos del instituto, de mis maestros, de los problemas de Dacotha, de su nuevo trabajo, de lo rico que estaba el postre hasta que me despedí de Alan para volver a la casa de Claudia.
Al llegar a la casa Carmen no estaba y los demás huéspedes también habían salido, ya llevaba cinco días en la casa de Carmen. Era de noche y decidí pedir pizza a domicilio, entonces estuve toda la noche en pijamas comiendo pizza frente al televisor de la sala hasta que sentí como las luces del auto de Niall se colaban en mi oscuridad. Desde la ventana vi como Niall se bajó de su camioneta, llevaba su guitarra en el estuche, era tarde y se veía cansado, debía venir de su turno. Hace ya un buen rato no hablaba con él, no me había vuelto a llamar, ni a buscar, ni nada. Pensé en que se veía muy lindo con su guitarra y recordé lo melodiosas que sonaban las notas cuando él las tocaba, la picardía en su sonrisa y el corazón me empezó a palpitar con nerviosismo. Me coloqué a pensar en esa madrugada en la fiesta de Louis cuando caminamos por las calles solas y oscuras. Lo bien que hablamos, pensé en la primera vez que lo vi que fingí dormir porque me asusto estar a solas con él. Niall también era un idiota que me colmaba la paciencia. Apagué el televisor y subí a dormir.
Al día siguiente me desperté muy tarde, era sábado y había aprovechado para descansar. Me bañe porque saldría a hacer unas vueltas en la ciudad.
-Celif, me alegra tanto haberte tenido aquí. Espero que te hayas sentido muy cómoda. Llega temprano hoy, te preparare algo especial como despedida- me dijo Carmen muy contenta.
Quise decirle que no se molestara pero sonaba muy feliz, así que le prometí que volvería a tiempo. Harry regresaba mañana al medio día a la ciudad así que ya podía volver al apartamento.
Al salir miré por un segundo la casa de Niall y seguí de largo, camine un par de manzanas hasta una cafetería donde desayune. Ahí estuve un buen rato hasta que decidí ir a ver unas cosas que quería comprar al centro comercial. Así se me fue la mañana y parte de la tarde. Cuando me canse de caminar entre las tiendas tomé un taxi hasta la casa de Carmen pero al bajarme del mismo me quedé viendo la casa de Niall. La camioneta estaba estacionada, me dije a mi misma que llegara a verlo, no tendría nada que hacer y además ya me iba mañana.
Camine hasta la puerta de Niall y el corazón me empezó a palpitar fuerte, estaba un poquito nerviosa pero toqué el timbre.
El alboroto venia de la calle, era música y sonaba cada vez más fuerte, era un auto que se estaciono frente a la casa pero de pronto, la música paro.
-¡¿Por qué quitas la música?!- escuché un reclamo de la calle.
Entonces colocaron la música de nuevo pero se escucharon unos gritos de desaprobación y volvieron a quitar la canción, finalmente se decidieron a colocarla con un volumen más bajo pero era lo suficientemente fuerte como para entrar por mi ventana e inundar mi cuarto con el sonido. Esta vez no me quise asomar por la ventana, me limite a preguntarme si aquello tendría algo que ver con Niall.
Al día siguiente olvide despertarme temprano así que llegue tarde al instituto, por eso salí más tarde de lo normal sanando mi deuda. Debía tener un historial intachable o de lo contrario perdería mi beca. Cuando termine todo en el instituto llamé a mi hermano para que me buscara porque lo invitaría a almorzar
-Déjame leerlo por favor- le pedí. Estaba en el auto de mi hermano rumbo a comer pastas.
Estaba muy feliz y animada, pues una revista local publicaría una columna escrita por mi hermano.
-Celif saldrá en la edición de este me- me dijo Alan.
-No soporto la espera, por lo menos dime de que trata- insistí.
-Sobre ti.
-¿Escribiste sobre mí?
-Si
-Juramelo
Alan alejó la vista de la carretera un segundo para mirarme a los ojos.
-Te lo juro- me dijo y supe que era verdad
-Esperare a que salga pero quiero que me pidas una copia- le dije.
En el restaurante, mientras esperábamos la comida, Alan me hablo de una chica con la que estaba saliendo.
-Quiero que la conozcas- me dijo.
-¿Tan rápido?- le pregunté.
-No, no tengo nada con ella. Solo quiero saber qué opinas tú de ella. Es varios años menos que yo- Yo lo miré sorprendida.
-No me mires así, tú vives con chico mayor que tú- me quiso recordar mi hermano.
-Es mi mejor amigo, no ejemplifica tu punto- me defendí.
-También llegaste con un chico mayor que tú a almorzar a mi casa- me dijo.
-Es un amigo de Harry.
-¿Qué es tuyo?
-No sé, supongo que amigo- dije dudando.
-¿Supones?
-Sí, no sé, es que casi siempre no nos llevamos bien.
-Se ve buena persona- agrego mi hermano.
-Lo es, es que me desespera, me hace perder la paciencia, me molesta y sencillamente no lo soporto.
-Ay celif- mi hermano se limitó a decir eso y luego sonrió.
Hablamos de nuestros padres, de la nueva casa, de lo que habíamos pasado en la vieja casa, hablamos del instituto, de mis maestros, de los problemas de Dacotha, de su nuevo trabajo, de lo rico que estaba el postre hasta que me despedí de Alan para volver a la casa de Claudia.
Al llegar a la casa Carmen no estaba y los demás huéspedes también habían salido, ya llevaba cinco días en la casa de Carmen. Era de noche y decidí pedir pizza a domicilio, entonces estuve toda la noche en pijamas comiendo pizza frente al televisor de la sala hasta que sentí como las luces del auto de Niall se colaban en mi oscuridad. Desde la ventana vi como Niall se bajó de su camioneta, llevaba su guitarra en el estuche, era tarde y se veía cansado, debía venir de su turno. Hace ya un buen rato no hablaba con él, no me había vuelto a llamar, ni a buscar, ni nada. Pensé en que se veía muy lindo con su guitarra y recordé lo melodiosas que sonaban las notas cuando él las tocaba, la picardía en su sonrisa y el corazón me empezó a palpitar con nerviosismo. Me coloqué a pensar en esa madrugada en la fiesta de Louis cuando caminamos por las calles solas y oscuras. Lo bien que hablamos, pensé en la primera vez que lo vi que fingí dormir porque me asusto estar a solas con él. Niall también era un idiota que me colmaba la paciencia. Apagué el televisor y subí a dormir.
Al día siguiente me desperté muy tarde, era sábado y había aprovechado para descansar. Me bañe porque saldría a hacer unas vueltas en la ciudad.
-Celif, me alegra tanto haberte tenido aquí. Espero que te hayas sentido muy cómoda. Llega temprano hoy, te preparare algo especial como despedida- me dijo Carmen muy contenta.
Quise decirle que no se molestara pero sonaba muy feliz, así que le prometí que volvería a tiempo. Harry regresaba mañana al medio día a la ciudad así que ya podía volver al apartamento.
Al salir miré por un segundo la casa de Niall y seguí de largo, camine un par de manzanas hasta una cafetería donde desayune. Ahí estuve un buen rato hasta que decidí ir a ver unas cosas que quería comprar al centro comercial. Así se me fue la mañana y parte de la tarde. Cuando me canse de caminar entre las tiendas tomé un taxi hasta la casa de Carmen pero al bajarme del mismo me quedé viendo la casa de Niall. La camioneta estaba estacionada, me dije a mi misma que llegara a verlo, no tendría nada que hacer y además ya me iba mañana.
Camine hasta la puerta de Niall y el corazón me empezó a palpitar fuerte, estaba un poquito nerviosa pero toqué el timbre.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 87
Caminé hasta la puerta de Niall y el corazón me empezó a palpitar fuerte, estaba un tanto nerviosa pero toqué.
-¿Quién es?- escuché la voz de Niall detrás de la puerta.
-Celif- le grité y en unos segundos Niall abrió.
Niall me miró con cuidado pero sin expresar nada que yo pudiera leer en su rostro o su mirada, se veía muy bien en la camisa blanca que llevaba.
-Hola ¿Qué haces por acá?- me preguntó el.
-Resulta que a Harry le encanta tu vecindario e hizo que me quedaras ahí- le dije señalando la casa de Carmen.
-¿Te estas quedando ahí?- me preguntó Niall.
Me miró con esos ojos azules que ya casi no podía recordar.
-Sí, eso venía a decirte- el no respondió nada- Pero ya mañana me voy porque Harry regresa.
Niall me miró por más de un segundo como si estuviese perdido en sus pensamientos, me sentí muy incómoda y me arrepentí de haber llegado a su casa.
-¿Quieres entrar?-me preguntó Niall volviendo de su propio trance.
- ¿Estas con alguien?- quise saber antes de responder cualquier cosa.
-Estoy con Louis- me respondió frunciendo el labio.
-¿Qué hacen?- le pregunté.
-Veo como se termina mis cervezas- me dijo Niall rodando los ojos- ven- me pidió entrándose a su casa.
Yo lo seguí y cerré la puerta detrás de mí.
-Está borracho- me dijo como intentando que Louis no lo escuchara.
Louis estaba en el sofá principal con una sonrisa casi psicópata en el rostro y estaba rodeado de botellas de cervezas de diferentes marcas.
-¿Qué le paso?- le pregunté a Niall al verlo.
-Nada, está loco- me respondió el con cierta molestia hacia Louis.
-¡Celif, mi amor!- gritó Louis al verme y corrió a abrazarme- Estoy muy feliz de que estés aquí- me dijo él.
Yo lo abracé incomoda porque olía a alcohol y no quería llegar a donde Carmen apestando a alcohol.
-¿Viniste a ayudarme tú también?- me preguntó.
Yo miré a Niall sin entender.
-Quiere saber cuánto puede tomar sin perder la razón – me explico el- hizo un espectáculo hace poco y hoy se presentó en mi casa diciendo que le supervisara su borrachera- dijo Niall disgustado.
-Pero dos supervisores son mejor que uno- me dijo Louis.
-Tengo hora de llegada- me excusé con Louis anuqué faltaba mucho.
-¿Por qué?- me preguntó Louis y noté que Niall solo me miraba desde la esquina.
Coloqué mi maleta en el sofá.
-Porque así es, pero me puedo quedar un rato- le dije.
-Hay Coca-Cola en la nevera – dijo Niall y se retiró de la escena.
-Me la voy a tomar en tres tragos- me dijo Louis animado tomando una botella de alcohol.
Niall subió al segundo piso sin decir nada, Louis se llevó la cerveza a la boca pero no cumplió lo que dijo, coloco la botella después de un intento. Louis por segundos parecía tener la energía a mil y luego bajar a cero, era como una montaña rusa, debía ser el alcohol.
-¡Celif!- gritó Louis saltando en el sofá- Te voy a mostrar algo- dijo con una gran sonrisa en su rostro y me saco con fuerza del sofá y me llevo corriendo hasta subir las escaleras.
La única vez que había subido las escaleras de la casa de Niall fue cuando escuche a Jade llorando.
Louis me hace entrar a lo que claramente era la habitación de Niall, era bastante sencillo, más de lo que imagine. Tenía las paredes blancas como el resto de la casa, una cama doble con un espaldar en madera negra y fina con una colcha blanca, tenía dos nocheros en la misma madera a lado y lado de la cama, un escaparate inmenso, en la pared tenia colgada una guitarra eléctrica que brillaba y se llevaba la atención en la habitación, también tenía tres fotografías enmarcados, quise acercarme a ver las fotos pero me sentía cohibida con Louis ahí y además Niall no tardo en entrar a su habitación.
Louis camino hacia la guitarra y la empezó a descolgar, en eso Niall se alteró.
-¡Louis déjala!- le gritó Niall y se acercó a él agarrándolo con fuerza para que Louis dejara la guitarra.
-¡Niall vas a hacer que la tire!- le advirtió Niall zafándose de él.
-Louis si le pasa algo a mi guitarra no sé qué te hago- le advirtió Niall tratando de tranquilizarse.
-Celif ven, ayúdame- me llamó Louis, dudé en acercarme a él porque Niall estaba enojado y nunca lo había visto así pero sin embargo me acerque con cautela.
Niall no se acercó a nosotros estaba como atado por la impotencia o algo más, Louis descolgó la guitarra y me la entregó. La guitarra pesaba y tenía una firma al costado derecho.
-¿Quién la firmó?- le pregunté a Louis.
-Aaron Kamin- me respondió Niall quien seguía observando a la distancia.
-¿Quién es?- pregunté sosteniendo la guitarra con cuidado.
-El guitarrista de The Calling- me dijo Niall quien no había soportado más la angustia de que le pasara algo a su guitarra, se acercó y me extendió la mano para que le entregara la guitarra y así lo hice.
-Wow.
-Mira, mi arte- me dijo Louis cuando terminó de descolgar un soporte de la guitarra.
-¡¿Cuándo mierda hiciste eso?!- le preguntó Niall enojado.
En la pared había un pene gigante dibujado con marcador negro.
-Un día que estabas tomando- le respondió Louis tranquilamente.
Niall respiro hondo y fue a colocar la guitarra sobre su cama pero al darle el reverso notó algo más.
-¡¿En serio?!- se quejó Niall y trajo la guitarra de vuelta.
En la parte de atrás de la guitarra Louis había escrito en grande su nombre y dibujado otro pene.
-¿Sabes cuánto cuesta esta guitarra?- le preguntó Niall.
-No mucho porque Celif no sabía quién era- le respondió el- pero lo que sea, ahora vale más.
-Iré por algo para quitarlo- dijo Niall dándose por vencido.
Niall dejó la guitarra sobre su cama y salió de su habitación.
-Ven, escríbele algo- me dijo Louis dándome un marcador que saco de uno de los nocheros.
-No ¿para qué?- le pregunté.
-Bueno no escribas nada- dijo Louis y devolvió el marcador- ven acá- me acerqué y abrió el segundo cajón donde había una caja de condones- ¿sabes que sería interesante?- me preguntó y saco la caja de condones del nochero
Louis me dio la caja.
-No, toma. No quiero quedarme sus cosas- le dije.
-Escóndelos, es una broma- me dijo
-¿Por qué?- le pregunté y yo los metí debajo de mi camisa.
-Cuando los necesite no estarán ahí e imagínate eso- le advertí a Louis.
-Esa es la broma, se le arruinarían los planes- me dijo Louis.
-Siéntete responsable si le pasa algo por no tener condones- le dije.
-No le pasara nada, Niall es inteligente, sabrá que hacer solo se emputara- me dijo.
Louis tomó en marcador y escribió en la gaveta “Yo los tengo- Louis”.
Al cabo de pocos minutos Niall llegó con un líquido para limpiar la guitarra pero Louis se lo quitó e insistió en limpiarlo el mismo.
Coloqué la caja de condones debajo de la almohada porque resaltaba en mi camisa, me acosté en la cama, la cama tenía su olor impregnado, recordé el día que me coloqué la camisa de Niall y sentí su olor en mi cuerpo. Las almohadas eran suaves y cómodas, la cama estaba fría pero se sentía agradable, ahí me di cuenta que Niall me estaba mirando.
-Tengo que seguir- dijo Louis llevándose a la boca una cerveza que había subido, Niall sonrió ante la ocurrencia de Louis y se acercó a mí. Me hizo señas de que me corriera y así lo hice, él se recostó al espaldar de la cama.
-¿Cómo has estado?- me preguntó en un tono que Louis no alcanzo a escucharlo. Estaba concentrado restregando la guitarra.
-Bien- le respondí en el mismo tono.
Niall sonrió y se acostó para quedar mirando el techo de su habitación, yo aproveché y tiré la caja de condones debajo de la cama de Niall, no me interesaba esconderle su caja a Niall pero Louis me había enredado en el insignificante asunto pero no quería que Niall pensara que me interesaba esconder su caja así que preferí evitarlo.
Louis terminó de limpiar las marcas de la guitarra así que bajamos. Louis estaba en la punta inferior de las escaleras y Niall y yo veníamos bajando así que quise hablarle a Niall.
-¿Qué has hecho?- le pregunté pensando en estos últimos días que lo vi por las ventanas de la casa de Carmen.
-No mucho- me respondió el- ¿Qué has hecho tú?- me preguntó el a mí.
-Cosas- le respondí por responderle y de igual forma él estuvo poco interesado en la respuesta.
-¡Niall!- gritó Louis desde la sala.
-¡¿Qué quieres?!- le gritó Louis.
-¡Me voy a tomar un Red Bull!
-¡Estás loco!- le respondió Niall y corrió escaleras abajo.
Yo baje las escaleras y Niall y Louis estaban peleando en el piso dándose a golpes.
-No te vas a tomar ninguna mierda aquí- le dijo Niall
-¿No?- Louis lo retó, se empezaron a empujarse mientras ambos se reían.
Louis tiro a Niall y yo me senté en el mueble principal a esperar.
-¿No puedes con un borracho?- le preguntó Louis y Niall hizo que Louis se callera.
Desde el piso Louis se arrastraba con el fin de llegar a la cocina pero Niall se lo dificultaba, al final Niall soltó a Louis y este corrió victorioso hasta la nevera y regreso con una lata de Red Bull. Niall se sentó en uno de los sofás de los costados.
-El problema es que ahora toca aguantarlo- dijo Niall aunque no creo que fuera solo para mí, más bien se lo decía a Louis.
Louis sonrió, se acercó a Niall hasta tirársele encima.
-Te voy a contar la historia de cómo conocí a Niall- me dijo Louis, Niall lo miró confundido y Louis se bajó.
-Te escucho- le dijo Niall.
-Yo, era joven y llevaba dos meses viviendo por mi cuenta, me iban a correr del apartamento porque no tenía el dinero para pagar el alquiler. Nadie quería ser mi compañero y compartir conmigo los gastos, me fui directo al aeropuerto a conseguir un compañero, en un vuelo de la tarde llegó Niall asustado desde Irlanda.
-Yo tenía dos años menos que Celif y era mi primera vez en Londres, no concia a absolutamente nadie y tenía miedo de tener que volver arrepentido no sabía que me esperaba. Llegó Louis brincando de arriba abajo y haciéndome preguntas de todo tipo, luego me preguntó si tenía dinero y si tenía donde quedarme.
- Y amablemente lo llevé a quedarse en mi apartamento y le cobré la noche- me contó Louis mientras se preparaba a empinarse la lata.
-Tu apartamento era un desastre, estaba desordenado, sucio, era pequeño, me tocó dormir en el sofá, no había nada en la nevera y quedaba lejos de todo. – se quejó Niall.
-Sin embargo Niall disfrutó de la hospitalidad de mi hogar por un largo tiempo y pagábamos el alquiler junto, tuvo el privilegio de que le brindara mi grata amistad que hasta hoy conserva- me dijo Louis.
-Todo en ese apartamentico era tan simple- dijo Niall .
-Era más fácil de liderar en comparación de ahora, todo en general- le respondió Louis.
-Si- dijo Niall alargado su palabra en un suspiro.
-¿Cuál fue tu primera impresión de mí? – le preguntó Louis a Niall.
-Que estabas loco – le respondió Niall
-Yo pensé que eras una buena persona, un poco tonto pero buena persona- le dijo Louis y yo reí- Celif ¿Cuál fue tu primera impresión de mí? – me preguntó Louis.
-Harry ya me había hablado de ti pero cuando te conocí en el parque pensé que eras divertido- le dije y el sonrío.
- Bienn ¿De Niall que pensaste mi?- preguntó el.
No esperaba que Louis me hiciera esa pregunta así que me paralice, pensé en la primera vez que vi a Niall, mi corazón palpitó tan rápido, me había sentido tan intimidad y entorpecida que había fingido dormir.
-No sé- le respondí y me di cuenta que Niall me miraba atentamente.
-Estamos en confianza- me insistió Louis.
-Mi primera impresión de Niall fue que…- los miré a ambos pero no lograba colocarme de acuerdo en que decir- pensé que- balbucee otra vez y me mordí en labio.
-¡Miren esta congelado en el fondo!- gritó Louis de la nada. Louis se había distraído con el Red Bull y había olvidado que yo estaba en medio de responder algo- Niall termínatelo, yo iré por una cerveza.
Louis se colocó de pie y fue a la cocina por otra cerveza.
-¿Cuántas lleva? – le pregunté a Niall tratando de sentirme menos incomoda pero Niall me miro sin decir nada y me hizo sentir aún más incómoda
Después de eso Louis tomó tres cervezas más y empezaba a balbucear solo, estábamos viendo televisión y Louis se entretenía fácil cuando salían colores vivos.
- Hay que llevarlo a su casa antes de que empiece a vomitar- me dijo Niall colocándose de pie.
-Apúrate, llévame que tengo mucho dolor de cabeza- le dijo Louis dirigiéndose al segundo piso- Voy por una pastilla.
-Nunca había visto a alguien tomar tanto – comenté.
-No has visto nada, Celif- me dijo Niall sonriendo.
Mi vida era tan simple y tranquila que desde que llegue aquí todo era nuevo para mí y pretendía no sorprenderme.
-Esta consiente, ni tambalea, lo único es que esta mas hiperactivo que lo normal- dije refiriéndome a Louis.
-Sí, Louis raramente queda totalmente ebrio. No tengo ni idea como funciona eso- me dijo él.
- ¿Cuánto aguantas tú?-le pregunté y el sonrió.
-Menos que Louis pero casi siempre quedo ebrio- me dijo- ¿Vas a acompañarme a llevar a Louis?- me preguntó- Ya que estas quedándote al lado te puedo regresar.
Me quedé mirando a Niall antes de responderle.
-No puedo, tengo toque de queda- le dije.
-¿Por qué? – se quejó Louis que venía bajando las escaleras.
-Reglas- le respondí.
-Harry te dejo en una guardería- me dijo Niall y yo rodé los ojos.
-Celif – empezó a tararear Louis.
-¿Ya te tomaste la pastilla?- le interrumpí.
-No, voy a tomármela- me respondió y se fue a la cocina.
Niall tomó las llaves de su camioneta del murito.
-Vamos saliendo- me dijo y yo tomé mi mochila.
Ambos salimos de la casa para esperar a Louis en el jardín.
-Niall- quería hablarle pero ya la tarde se había acabado y algo me decía que era mejor que no le dijera nada.
-¿Qué?- me respondió el.
Ya estaba atardeciendo y el cielo se veía de la manera me gusta. Pensé en que durante los últimos días no había sabido nada de Niall.
-Llámame cuando lleguen- le dije.
-Bueno- me dijo mirándome con sus ojos azules.
Louis salió de la casa y cerró la puerta.
-Bueno, ya me voy- le dije y fui a darle un abrazo de despedida a Louis.
-Adiós- me dijo Niall, yo le sonreí y me aleje hasta llegar a la puerta de la casa de Carmen y seguido de eso Niall coloco en marcha su camioneta y ambos se fueron.
Caminé hasta la puerta de Niall y el corazón me empezó a palpitar fuerte, estaba un tanto nerviosa pero toqué.
-¿Quién es?- escuché la voz de Niall detrás de la puerta.
-Celif- le grité y en unos segundos Niall abrió.
Niall me miró con cuidado pero sin expresar nada que yo pudiera leer en su rostro o su mirada, se veía muy bien en la camisa blanca que llevaba.
-Hola ¿Qué haces por acá?- me preguntó el.
-Resulta que a Harry le encanta tu vecindario e hizo que me quedaras ahí- le dije señalando la casa de Carmen.
-¿Te estas quedando ahí?- me preguntó Niall.
Me miró con esos ojos azules que ya casi no podía recordar.
-Sí, eso venía a decirte- el no respondió nada- Pero ya mañana me voy porque Harry regresa.
Niall me miró por más de un segundo como si estuviese perdido en sus pensamientos, me sentí muy incómoda y me arrepentí de haber llegado a su casa.
-¿Quieres entrar?-me preguntó Niall volviendo de su propio trance.
- ¿Estas con alguien?- quise saber antes de responder cualquier cosa.
-Estoy con Louis- me respondió frunciendo el labio.
-¿Qué hacen?- le pregunté.
-Veo como se termina mis cervezas- me dijo Niall rodando los ojos- ven- me pidió entrándose a su casa.
Yo lo seguí y cerré la puerta detrás de mí.
-Está borracho- me dijo como intentando que Louis no lo escuchara.
Louis estaba en el sofá principal con una sonrisa casi psicópata en el rostro y estaba rodeado de botellas de cervezas de diferentes marcas.
-¿Qué le paso?- le pregunté a Niall al verlo.
-Nada, está loco- me respondió el con cierta molestia hacia Louis.
-¡Celif, mi amor!- gritó Louis al verme y corrió a abrazarme- Estoy muy feliz de que estés aquí- me dijo él.
Yo lo abracé incomoda porque olía a alcohol y no quería llegar a donde Carmen apestando a alcohol.
-¿Viniste a ayudarme tú también?- me preguntó.
Yo miré a Niall sin entender.
-Quiere saber cuánto puede tomar sin perder la razón – me explico el- hizo un espectáculo hace poco y hoy se presentó en mi casa diciendo que le supervisara su borrachera- dijo Niall disgustado.
-Pero dos supervisores son mejor que uno- me dijo Louis.
-Tengo hora de llegada- me excusé con Louis anuqué faltaba mucho.
-¿Por qué?- me preguntó Louis y noté que Niall solo me miraba desde la esquina.
Coloqué mi maleta en el sofá.
-Porque así es, pero me puedo quedar un rato- le dije.
-Hay Coca-Cola en la nevera – dijo Niall y se retiró de la escena.
-Me la voy a tomar en tres tragos- me dijo Louis animado tomando una botella de alcohol.
Niall subió al segundo piso sin decir nada, Louis se llevó la cerveza a la boca pero no cumplió lo que dijo, coloco la botella después de un intento. Louis por segundos parecía tener la energía a mil y luego bajar a cero, era como una montaña rusa, debía ser el alcohol.
-¡Celif!- gritó Louis saltando en el sofá- Te voy a mostrar algo- dijo con una gran sonrisa en su rostro y me saco con fuerza del sofá y me llevo corriendo hasta subir las escaleras.
La única vez que había subido las escaleras de la casa de Niall fue cuando escuche a Jade llorando.
Louis me hace entrar a lo que claramente era la habitación de Niall, era bastante sencillo, más de lo que imagine. Tenía las paredes blancas como el resto de la casa, una cama doble con un espaldar en madera negra y fina con una colcha blanca, tenía dos nocheros en la misma madera a lado y lado de la cama, un escaparate inmenso, en la pared tenia colgada una guitarra eléctrica que brillaba y se llevaba la atención en la habitación, también tenía tres fotografías enmarcados, quise acercarme a ver las fotos pero me sentía cohibida con Louis ahí y además Niall no tardo en entrar a su habitación.
Louis camino hacia la guitarra y la empezó a descolgar, en eso Niall se alteró.
-¡Louis déjala!- le gritó Niall y se acercó a él agarrándolo con fuerza para que Louis dejara la guitarra.
-¡Niall vas a hacer que la tire!- le advirtió Niall zafándose de él.
-Louis si le pasa algo a mi guitarra no sé qué te hago- le advirtió Niall tratando de tranquilizarse.
-Celif ven, ayúdame- me llamó Louis, dudé en acercarme a él porque Niall estaba enojado y nunca lo había visto así pero sin embargo me acerque con cautela.
Niall no se acercó a nosotros estaba como atado por la impotencia o algo más, Louis descolgó la guitarra y me la entregó. La guitarra pesaba y tenía una firma al costado derecho.
-¿Quién la firmó?- le pregunté a Louis.
-Aaron Kamin- me respondió Niall quien seguía observando a la distancia.
-¿Quién es?- pregunté sosteniendo la guitarra con cuidado.
-El guitarrista de The Calling- me dijo Niall quien no había soportado más la angustia de que le pasara algo a su guitarra, se acercó y me extendió la mano para que le entregara la guitarra y así lo hice.
-Wow.
-Mira, mi arte- me dijo Louis cuando terminó de descolgar un soporte de la guitarra.
-¡¿Cuándo mierda hiciste eso?!- le preguntó Niall enojado.
En la pared había un pene gigante dibujado con marcador negro.
-Un día que estabas tomando- le respondió Louis tranquilamente.
Niall respiro hondo y fue a colocar la guitarra sobre su cama pero al darle el reverso notó algo más.
-¡¿En serio?!- se quejó Niall y trajo la guitarra de vuelta.
En la parte de atrás de la guitarra Louis había escrito en grande su nombre y dibujado otro pene.
-¿Sabes cuánto cuesta esta guitarra?- le preguntó Niall.
-No mucho porque Celif no sabía quién era- le respondió el- pero lo que sea, ahora vale más.
-Iré por algo para quitarlo- dijo Niall dándose por vencido.
Niall dejó la guitarra sobre su cama y salió de su habitación.
-Ven, escríbele algo- me dijo Louis dándome un marcador que saco de uno de los nocheros.
-No ¿para qué?- le pregunté.
-Bueno no escribas nada- dijo Louis y devolvió el marcador- ven acá- me acerqué y abrió el segundo cajón donde había una caja de condones- ¿sabes que sería interesante?- me preguntó y saco la caja de condones del nochero
Louis me dio la caja.
-No, toma. No quiero quedarme sus cosas- le dije.
-Escóndelos, es una broma- me dijo
-¿Por qué?- le pregunté y yo los metí debajo de mi camisa.
-Cuando los necesite no estarán ahí e imagínate eso- le advertí a Louis.
-Esa es la broma, se le arruinarían los planes- me dijo Louis.
-Siéntete responsable si le pasa algo por no tener condones- le dije.
-No le pasara nada, Niall es inteligente, sabrá que hacer solo se emputara- me dijo.
Louis tomó en marcador y escribió en la gaveta “Yo los tengo- Louis”.
Al cabo de pocos minutos Niall llegó con un líquido para limpiar la guitarra pero Louis se lo quitó e insistió en limpiarlo el mismo.
Coloqué la caja de condones debajo de la almohada porque resaltaba en mi camisa, me acosté en la cama, la cama tenía su olor impregnado, recordé el día que me coloqué la camisa de Niall y sentí su olor en mi cuerpo. Las almohadas eran suaves y cómodas, la cama estaba fría pero se sentía agradable, ahí me di cuenta que Niall me estaba mirando.
-Tengo que seguir- dijo Louis llevándose a la boca una cerveza que había subido, Niall sonrió ante la ocurrencia de Louis y se acercó a mí. Me hizo señas de que me corriera y así lo hice, él se recostó al espaldar de la cama.
-¿Cómo has estado?- me preguntó en un tono que Louis no alcanzo a escucharlo. Estaba concentrado restregando la guitarra.
-Bien- le respondí en el mismo tono.
Niall sonrió y se acostó para quedar mirando el techo de su habitación, yo aproveché y tiré la caja de condones debajo de la cama de Niall, no me interesaba esconderle su caja a Niall pero Louis me había enredado en el insignificante asunto pero no quería que Niall pensara que me interesaba esconder su caja así que preferí evitarlo.
Louis terminó de limpiar las marcas de la guitarra así que bajamos. Louis estaba en la punta inferior de las escaleras y Niall y yo veníamos bajando así que quise hablarle a Niall.
-¿Qué has hecho?- le pregunté pensando en estos últimos días que lo vi por las ventanas de la casa de Carmen.
-No mucho- me respondió el- ¿Qué has hecho tú?- me preguntó el a mí.
-Cosas- le respondí por responderle y de igual forma él estuvo poco interesado en la respuesta.
-¡Niall!- gritó Louis desde la sala.
-¡¿Qué quieres?!- le gritó Louis.
-¡Me voy a tomar un Red Bull!
-¡Estás loco!- le respondió Niall y corrió escaleras abajo.
Yo baje las escaleras y Niall y Louis estaban peleando en el piso dándose a golpes.
-No te vas a tomar ninguna mierda aquí- le dijo Niall
-¿No?- Louis lo retó, se empezaron a empujarse mientras ambos se reían.
Louis tiro a Niall y yo me senté en el mueble principal a esperar.
-¿No puedes con un borracho?- le preguntó Louis y Niall hizo que Louis se callera.
Desde el piso Louis se arrastraba con el fin de llegar a la cocina pero Niall se lo dificultaba, al final Niall soltó a Louis y este corrió victorioso hasta la nevera y regreso con una lata de Red Bull. Niall se sentó en uno de los sofás de los costados.
-El problema es que ahora toca aguantarlo- dijo Niall aunque no creo que fuera solo para mí, más bien se lo decía a Louis.
Louis sonrió, se acercó a Niall hasta tirársele encima.
-Te voy a contar la historia de cómo conocí a Niall- me dijo Louis, Niall lo miró confundido y Louis se bajó.
-Te escucho- le dijo Niall.
-Yo, era joven y llevaba dos meses viviendo por mi cuenta, me iban a correr del apartamento porque no tenía el dinero para pagar el alquiler. Nadie quería ser mi compañero y compartir conmigo los gastos, me fui directo al aeropuerto a conseguir un compañero, en un vuelo de la tarde llegó Niall asustado desde Irlanda.
-Yo tenía dos años menos que Celif y era mi primera vez en Londres, no concia a absolutamente nadie y tenía miedo de tener que volver arrepentido no sabía que me esperaba. Llegó Louis brincando de arriba abajo y haciéndome preguntas de todo tipo, luego me preguntó si tenía dinero y si tenía donde quedarme.
- Y amablemente lo llevé a quedarse en mi apartamento y le cobré la noche- me contó Louis mientras se preparaba a empinarse la lata.
-Tu apartamento era un desastre, estaba desordenado, sucio, era pequeño, me tocó dormir en el sofá, no había nada en la nevera y quedaba lejos de todo. – se quejó Niall.
-Sin embargo Niall disfrutó de la hospitalidad de mi hogar por un largo tiempo y pagábamos el alquiler junto, tuvo el privilegio de que le brindara mi grata amistad que hasta hoy conserva- me dijo Louis.
-Todo en ese apartamentico era tan simple- dijo Niall .
-Era más fácil de liderar en comparación de ahora, todo en general- le respondió Louis.
-Si- dijo Niall alargado su palabra en un suspiro.
-¿Cuál fue tu primera impresión de mí? – le preguntó Louis a Niall.
-Que estabas loco – le respondió Niall
-Yo pensé que eras una buena persona, un poco tonto pero buena persona- le dijo Louis y yo reí- Celif ¿Cuál fue tu primera impresión de mí? – me preguntó Louis.
-Harry ya me había hablado de ti pero cuando te conocí en el parque pensé que eras divertido- le dije y el sonrío.
- Bienn ¿De Niall que pensaste mi?- preguntó el.
No esperaba que Louis me hiciera esa pregunta así que me paralice, pensé en la primera vez que vi a Niall, mi corazón palpitó tan rápido, me había sentido tan intimidad y entorpecida que había fingido dormir.
-No sé- le respondí y me di cuenta que Niall me miraba atentamente.
-Estamos en confianza- me insistió Louis.
-Mi primera impresión de Niall fue que…- los miré a ambos pero no lograba colocarme de acuerdo en que decir- pensé que- balbucee otra vez y me mordí en labio.
-¡Miren esta congelado en el fondo!- gritó Louis de la nada. Louis se había distraído con el Red Bull y había olvidado que yo estaba en medio de responder algo- Niall termínatelo, yo iré por una cerveza.
Louis se colocó de pie y fue a la cocina por otra cerveza.
-¿Cuántas lleva? – le pregunté a Niall tratando de sentirme menos incomoda pero Niall me miro sin decir nada y me hizo sentir aún más incómoda
Después de eso Louis tomó tres cervezas más y empezaba a balbucear solo, estábamos viendo televisión y Louis se entretenía fácil cuando salían colores vivos.
- Hay que llevarlo a su casa antes de que empiece a vomitar- me dijo Niall colocándose de pie.
-Apúrate, llévame que tengo mucho dolor de cabeza- le dijo Louis dirigiéndose al segundo piso- Voy por una pastilla.
-Nunca había visto a alguien tomar tanto – comenté.
-No has visto nada, Celif- me dijo Niall sonriendo.
Mi vida era tan simple y tranquila que desde que llegue aquí todo era nuevo para mí y pretendía no sorprenderme.
-Esta consiente, ni tambalea, lo único es que esta mas hiperactivo que lo normal- dije refiriéndome a Louis.
-Sí, Louis raramente queda totalmente ebrio. No tengo ni idea como funciona eso- me dijo él.
- ¿Cuánto aguantas tú?-le pregunté y el sonrió.
-Menos que Louis pero casi siempre quedo ebrio- me dijo- ¿Vas a acompañarme a llevar a Louis?- me preguntó- Ya que estas quedándote al lado te puedo regresar.
Me quedé mirando a Niall antes de responderle.
-No puedo, tengo toque de queda- le dije.
-¿Por qué? – se quejó Louis que venía bajando las escaleras.
-Reglas- le respondí.
-Harry te dejo en una guardería- me dijo Niall y yo rodé los ojos.
-Celif – empezó a tararear Louis.
-¿Ya te tomaste la pastilla?- le interrumpí.
-No, voy a tomármela- me respondió y se fue a la cocina.
Niall tomó las llaves de su camioneta del murito.
-Vamos saliendo- me dijo y yo tomé mi mochila.
Ambos salimos de la casa para esperar a Louis en el jardín.
-Niall- quería hablarle pero ya la tarde se había acabado y algo me decía que era mejor que no le dijera nada.
-¿Qué?- me respondió el.
Ya estaba atardeciendo y el cielo se veía de la manera me gusta. Pensé en que durante los últimos días no había sabido nada de Niall.
-Llámame cuando lleguen- le dije.
-Bueno- me dijo mirándome con sus ojos azules.
Louis salió de la casa y cerró la puerta.
-Bueno, ya me voy- le dije y fui a darle un abrazo de despedida a Louis.
-Adiós- me dijo Niall, yo le sonreí y me aleje hasta llegar a la puerta de la casa de Carmen y seguido de eso Niall coloco en marcha su camioneta y ambos se fueron.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
CAPITULO 88
Existen ciertas cosas que no entendemos cuando somos jóvenes. Necesitamos cierta experiencia y madures para entender el valor. Estaremos mucho tiempo de muestras vidas con miedo a fallar, no le tenemos miedo a la posibilidad de fallar, le tenemos miedo al hecho de fallar, de hacerlo mal, de no obtener lo que queramos, que no halla vuelta a atrás ni forma de solucionarlo.
Carmen me abrió la puerta de su casa y me hizo pasar azarosamente.
-Celif, te estabas demorando, me tengo que ir- me dijo tomando su cartera, Carmen estaba cambiada y lista para partir- mi sobrina está enferma y mi hermana tienen que trabajar esta noche, iré a cuidarle la fiebre pero estaré aquí para la mañana. Adiós, la cena está en la mesa.
Carmen se fue, pensé que estaba sola en la casa pero en la cocina estaba uno de los huéspedes de Carmen, le dije buenas noche y subí a comer a mi habitación aprovechando que Carmen no estaba, al terminar de comer baje los platos y subí de nuevo con un vaso de agua, lo había empezado a hacer desde la noche que Carmen se despertó porque baje por agua.
Estuve un rato tonteando con el celular en la cama, Niall no me había llamado, me asome a la ventana porque quería saber si Niall ya había llegado pero no veía su camioneta, me acosté a dormir.
No podía dormir, por la mente me pasaban todo tipo de pensamientos, unos más estúpidos que otros, lo positivo es el que no tendría que levantarme para ir al instituto mañana, finalmente me estaba quedado dormida cuando una luz se metió directamente por la ventana, me senté en la cama lo más rápido que puede. La luz venia de la casa de Niall, me coloqué de pie y me di cuenta que la ventana de la casa de Niall estaba abierta, la cortina estaba arriba y la luz estaba encendida, me acerque a la ventana y Niall se acercó al marco de su ventana, estábamos frente a frente solo que en casas diferentes.
-¿Buscabas algo?- le pregunté mientras quitaba la camisa que tenía colgada a un costado de la ventana, él se encogió de hombros.
-Venía a decirte que ya había llegado- me dijo Niall.
-¿Cómo sabias que me estaba quedando en este cuarto?- le pregunté.
-No sabía- me dijo y yo sonreí, él también lo hizo.
-Ayúdame a pasarme- me dijo subiéndose al marco de la ventana y sentí mi corazón palpitar.
-¡¿Estás loco?!- le dije alterada- Quédate allá, se supone que no puedo subir a nadie al cuarto.
-Yo no estoy subiendo al cuarto, ayúdame si me caigo tendrás que explicarle a todo el mundo porque me caí precisamente aquí- me dijo y yo al ver que Niall no estaba dispuesto a echarse para atrás abrí mi ventana y Niall paso del marco de su ventana al marco de la mía y salto dentro de mi cuarto cayendo en el piso.
-Estás loco- le dije extendiéndole la mano, él la tomó y se colocó de pie.
Quedamos frente a frente cerca de la ventana, la luz de su ventana se colaba por la mía y mi corazón latía muy fuerte y los nervios me dejaron inmóvil, el seguía con la misma ropa de esta tarde y yo estaba en pijamas.
-¿Qué haces aquí? ¿Estas borracho?- le pregunté.
-No he tomado una gota de alcohol.
Niall entrelazó sus dedos con los míos y se acercó más a mí, yo me aleje un poco y terminé acorralada a la pared por él, lo miré a los ojos y sus ojos brillaban, en ese momento juré que me iba a besar, mi corazón se aceleró más. El me besó, sus labios sobre los míos era una sensación indescriptible, tenía sus manos sobre mi cintura, se sentía mágico, sentía como si el beso encajara con cada una de las notas del solo de guitarra de Hotel California, sentía susto, miedo, placer, dulzura, ternura, calor, frio, todo al mismo tiempo; entrelace mi mano entre su cabello, yo tenía los ojos cerrados y sonreí tan cerca de sus labios y sentí como él sonreía en los míos, pensé que él me separaría pero mantenía la misma distancia y sus manos sobre mi cintura se sentían como electricidad.
-¿Esta bien?- me preguntó el en un tono muy dulce, llevó su mano hasta mi rostro haciendo que yo lo mirara y yo negué con la cabeza.
-No está bien- le dije y el me acarició el rostro.
-Todo el trayecto desde la casa de Louis estuve pensado en lo hermosa que te veías en mi sofá, en lo dulce que eres, en que eres inteligente y lista, en que tienes un carácter fuerte- me dijo él.
-Niall- alcance a susurrar, no podía sacar las palabras de mi pecho- no puedo hacer esto.
-El poder y el no poder están sobre estimados- me dijo el besándome el cuello, yo me estremecí.
Él me tomó ambas manos y yo me aferré a él con fuerza porque no quería que me dejara, era tan dulce y sexy a la vez. Me entorpecía.
-Esto está bien para ti, pero yo no podré con esto después- le dije recostada sobre su pecho mientras me acogía a la idea que si me dejaba llevar no podría liderar con lo que vendría después.
-Estaba pensando en que me habías prometido ir a ver las estrellas a las afueras de la ciudad- me dijo.
-¿Entonces pensaste en meterte por la ventana, proponérmelo y hacerme salir por la ventana?- le pregunté porque me hacía gracia.
-Estas sonriendo, es porque te gusta la idea- dijo Niall tomándome para verme mejor, él tenía una sonrisa grande en su rostro.
-Eres un idiota- le dije tratando de suprimir mi sonrisa y él se rio.
-Pero a ti no te importa- me dijo el sonriendo.
-Si me importa, pero contigo, se me es indiferente – dije sonriendo mientras me acercaba a la orilla de la cama.
- ohh, You can't hide your lyin' eyes- me dijo cantando.
-No estoy mintiendo- le aclare, nuestra conversación era en un tono tan bajo e íntimo- me encanta esa canción, mi papá siempre me decía que no le podía mentir porque a él no le podía esconder mis ojos mentirosos, así que siempre le conté toda hasta que me acostumbre.
-A mí tampoco me los puedes ocultar- me dijo el sentándose en la punta de la cama.
-A ti si puedo- le dije sentándome a su lado, Niall me tomó la mano nuevamente.
-Me gustan tus manos- me dijo y yo baje la cabeza- ¿Por qué no puedo quedarme esta noche contigo?- me preguntó.
-Porque no, no sé cómo acabe todo mañana, aparte no quiero- le dije.
-¿Entonces nos olvidamos de que te besé ahí?- me preguntó el acariciando mi rostro, trate de controlar mi respiración para que no sintiera lo acelerada que estaba.
-Si- le respondí.
Niall se rió llevándose las manos a la cara.
-¿De qué te ríes?- le dije pegándole pero no pude evitar sonreír.
Niall se acercó a mí tanto que nuestras narices rozaban y las respiraciones se mesclaban.
-Eres un idiota- le dije sonriendo sin alejarme de él.
-Me encantas- me dijo colocándome más nerviosa.
Hizo que nuestros labios se rozaran y dejo un beso sobre mis labios. Sin aliento.
-Hagamos un pacto- me propuso- esta noche todo se vale, no pienses en el pasado, ni en lo que va a pasar después, hagamos como si solo existiera esta noche y ya- me dijo mirándome a los ojos- Ambos prometemos no volver a hablar de lo que pase y hacemos como si no hubiera pasado. ¿Te parece? ¿Hasta que se acabe la noche?- me dijo extendiéndome su mano para cerrar el trato.
-Pero no voy a tener sexo contigo- le advertí colocándome de pie quedando frente a él.
-Ay Celif- dijo el llevándose las manos a la cara.
-¿Qué?- le pregunté indignada- yo solo quiero dejar las cosas claras.
-Está bien- me dijo tomándome de la cadera- ¿Es un sí?
-Si- le dije colocando mis dos brazos sobre sus dos hombros respectivamente, el sonrió y sin soltarme se dejó caer en la cama de modo que yo caí sobre él- Me gusta esto de entrar a escondidas por la ventana- le dije mirándolo a los ojos, lo veía por la luz que se colaba.
-Harry vive en un doceavo piso así que espero que no sea algún tipo de insinuación- me dijo él y yo me reí.
-No te preocupes, encontrare a alguien más- le dije y él sonrió.
Me incliné hacia él y el rodeó mi cintura con sus manos sintiéndose como electricidad.
-¿En qué piensas?- me preguntó.
-¿No sé nota?- le pregunté. Pensaba en que el me enloquecía, que me colocaba nerviosa y mi corazón no había dejado de latir fuertemente desde que lo vi en la ventana.
-Quería estar seguro- me dijo acercándose a mí para darme un beso.
-Tres besos- dije cuando nos separamos- soy una tonta, los estoy contando- dije riéndome y me aleje bruscamente de el para acostarme en la cama.
-Vas a perder la cuenta- me dijo y yo lo empujé ligeramente.
-Me empujaste- se quejó.
-Ligeramente- le corregí y él se sentó en la cama.
La cama era sencilla, por lo tanto pequeña y por eso era fácil estar cerca y difícil estar lejos.
-Me gusta porque estas sonriendo como loca- me dijo Niall acariciándome el cabello e intercalándolo con mi rostro.
-¿Sabes lo incomodo que sería si Carmen entra?- le dije pensando en que Carmen había dicho que estaría aquí para la mañana, así que podía pasar.
-Sería muy gracioso, yo soy su vecino- me dijo entre risas.
-Baja la voz- le dije sentándome para quedar a su altura, quería estar cerca de él.
Lo tomé del brazo e hice que se acostara conmigo, el me abrazaba, yo mantenía cabeza sobre su pecho y habíamos empezado a jugar con nuestras manos.
-¿Hace cuánto te estas quedando aquí?- me preguntó el mientras yo jugaba con sus dedos.
-Una semana- le respondí.
-¿Por qué no me habías dicho?- me preguntó acariciando mi cabello.
-No era necesario- le respondí- ¿Puedo preguntar sobre estos días?- le pregunté sin parar de jugar con sus dedos.
-¿A qué te refieres?- me preguntó en un tono dulce abrazándome con más fuerza.
-Estos días... Después de que cancelaras las clases de guitarra - le dije tímidamente.
-Estaba ocupado, he estado ocupado haciendo cosas, trabajo y eso, estaba organizando ciertas cosas en mi vida, pero mírame termine volándome una ventana en la noche porque quería verte- me dijo mirando el techo y luego dio un beso en la frente- Tengo tantas cosas que organizar en mi vida.
-¿Deberíamos dormir?- le pregunté, me acomodé mejor hasta quedar a su altura.
-No sé- me dijo el mirándome- Ojalá hubiese sabido antes que te estabas quedando aquí- me dijo Niall.
-No nos confundamos- le dije.
-No nos estamos confundiendo- me dijo y se acercó para darme un corto beso, yo coloqué las manos en su rostro y le acaricié. Al cabo de un rato ambos nos quedamos dormidos, el me abrazaba, yo me aferraba a él, su respiración rebotaba en mi cuello y su olor me envolvía hasta que me perdí en mis sueños y más allá del inconsciente donde todo es intangible y alejado de la realidad donde Niall me tenía abrazada con ternura entre sus brazos.
-Celif, despierta- sentí el calor de su voz en mi oído.
Abrí los ojos con dificultad y me encontré con la mirada de Niall sobre mí.
-Hola- le dije, él sonrió.
Niall estaba sentado en la cama junto a mí.
-¿Cómo estuvo el sueño?- me preguntó- te vez tan dulce dormida.
Me lo quedé mirando, se veía tan bien, sus ojos encantadores me veían, quería besarlo pero no era capaz de hacerlo.
-¿Qué hora es?- le pregunté recostándome a él.
-1 AM – me respondió el tomándome la mano- quería preguntarte algo.
-¿Qué?
-¿En esta casa hay una piscina?- me preguntó Niall.
-Sí, ¿Para eso me despiertas?
-Yo vi cuando estaban amoblando, pero no estaba seguro de que tuviera una piscina- me dijo él.
-Bueno, ya que sanaste tu duda vamos a dormir- dije.
-¿Has visto la piscina?- insistió.
-Si- le dije disgustada- deja la intensidad.
-Vamos- me dijo.
-¿Estás loco? No puedo entrar ahí, Carmen no sabe que yo sé que tiene una piscina, la tiene hasta escondida, con llave- le dije alterada.
-Te espero abajo- me dijo colocándose de pie.
-Niall no- le dije alterada colocándome de pie- que no se te valla ocurrir salir por esa puerta.
-Vamos Celif ¿Qué puede ser lo peor que pueda pasar?- me dijo acercándome a él tomándome por la cintura.
-Niall no- le dije mirándolo a los ojos esperando que desistiera- enserio no, una noche baje a tomar agua y Carmen se despertó, me acompaño a tomar el vaso de agua, espero a que lo terminara y me dejo de vuelta en la habitación.
Niall se rio sin soltarme.
-Será divertido- me dijo al oído.
-No podemos- le dije le dije rodeándole el cuello con mis brazos.
-Lo máximo que te puede pasar es que Carmen no te deje quedarte más en su casa y no importa porque esta es tu última noche en su casa- me dijo y me besó el cuello dejándome sin aliento.
-¿Con que ropa nos vamos a meter a la piscina?- le pregunté tímidamente, él se alejó de mí.
-Tú te puedes colocar mi camisa- me dijo y procedió a quitarse la camisa de franela y la tiro sobre la cama- Te espero abajo- me dijo y salió del cuarto.
Me mordí el labio y me deje caer en la cama abrazando su camisa entre mis brazos, mi mente no podía lidiar con el asunto con facilidad para decidir si bajaba o no.
Existen ciertas cosas que no entendemos cuando somos jóvenes. Necesitamos cierta experiencia y madures para entender el valor. Estaremos mucho tiempo de muestras vidas con miedo a fallar, no le tenemos miedo a la posibilidad de fallar, le tenemos miedo al hecho de fallar, de hacerlo mal, de no obtener lo que queramos, que no halla vuelta a atrás ni forma de solucionarlo.
Carmen me abrió la puerta de su casa y me hizo pasar azarosamente.
-Celif, te estabas demorando, me tengo que ir- me dijo tomando su cartera, Carmen estaba cambiada y lista para partir- mi sobrina está enferma y mi hermana tienen que trabajar esta noche, iré a cuidarle la fiebre pero estaré aquí para la mañana. Adiós, la cena está en la mesa.
Carmen se fue, pensé que estaba sola en la casa pero en la cocina estaba uno de los huéspedes de Carmen, le dije buenas noche y subí a comer a mi habitación aprovechando que Carmen no estaba, al terminar de comer baje los platos y subí de nuevo con un vaso de agua, lo había empezado a hacer desde la noche que Carmen se despertó porque baje por agua.
Estuve un rato tonteando con el celular en la cama, Niall no me había llamado, me asome a la ventana porque quería saber si Niall ya había llegado pero no veía su camioneta, me acosté a dormir.
No podía dormir, por la mente me pasaban todo tipo de pensamientos, unos más estúpidos que otros, lo positivo es el que no tendría que levantarme para ir al instituto mañana, finalmente me estaba quedado dormida cuando una luz se metió directamente por la ventana, me senté en la cama lo más rápido que puede. La luz venia de la casa de Niall, me coloqué de pie y me di cuenta que la ventana de la casa de Niall estaba abierta, la cortina estaba arriba y la luz estaba encendida, me acerque a la ventana y Niall se acercó al marco de su ventana, estábamos frente a frente solo que en casas diferentes.
-¿Buscabas algo?- le pregunté mientras quitaba la camisa que tenía colgada a un costado de la ventana, él se encogió de hombros.
-Venía a decirte que ya había llegado- me dijo Niall.
-¿Cómo sabias que me estaba quedando en este cuarto?- le pregunté.
-No sabía- me dijo y yo sonreí, él también lo hizo.
-Ayúdame a pasarme- me dijo subiéndose al marco de la ventana y sentí mi corazón palpitar.
-¡¿Estás loco?!- le dije alterada- Quédate allá, se supone que no puedo subir a nadie al cuarto.
-Yo no estoy subiendo al cuarto, ayúdame si me caigo tendrás que explicarle a todo el mundo porque me caí precisamente aquí- me dijo y yo al ver que Niall no estaba dispuesto a echarse para atrás abrí mi ventana y Niall paso del marco de su ventana al marco de la mía y salto dentro de mi cuarto cayendo en el piso.
-Estás loco- le dije extendiéndole la mano, él la tomó y se colocó de pie.
Quedamos frente a frente cerca de la ventana, la luz de su ventana se colaba por la mía y mi corazón latía muy fuerte y los nervios me dejaron inmóvil, el seguía con la misma ropa de esta tarde y yo estaba en pijamas.
-¿Qué haces aquí? ¿Estas borracho?- le pregunté.
-No he tomado una gota de alcohol.
Niall entrelazó sus dedos con los míos y se acercó más a mí, yo me aleje un poco y terminé acorralada a la pared por él, lo miré a los ojos y sus ojos brillaban, en ese momento juré que me iba a besar, mi corazón se aceleró más. El me besó, sus labios sobre los míos era una sensación indescriptible, tenía sus manos sobre mi cintura, se sentía mágico, sentía como si el beso encajara con cada una de las notas del solo de guitarra de Hotel California, sentía susto, miedo, placer, dulzura, ternura, calor, frio, todo al mismo tiempo; entrelace mi mano entre su cabello, yo tenía los ojos cerrados y sonreí tan cerca de sus labios y sentí como él sonreía en los míos, pensé que él me separaría pero mantenía la misma distancia y sus manos sobre mi cintura se sentían como electricidad.
-¿Esta bien?- me preguntó el en un tono muy dulce, llevó su mano hasta mi rostro haciendo que yo lo mirara y yo negué con la cabeza.
-No está bien- le dije y el me acarició el rostro.
-Todo el trayecto desde la casa de Louis estuve pensado en lo hermosa que te veías en mi sofá, en lo dulce que eres, en que eres inteligente y lista, en que tienes un carácter fuerte- me dijo él.
-Niall- alcance a susurrar, no podía sacar las palabras de mi pecho- no puedo hacer esto.
-El poder y el no poder están sobre estimados- me dijo el besándome el cuello, yo me estremecí.
Él me tomó ambas manos y yo me aferré a él con fuerza porque no quería que me dejara, era tan dulce y sexy a la vez. Me entorpecía.
-Esto está bien para ti, pero yo no podré con esto después- le dije recostada sobre su pecho mientras me acogía a la idea que si me dejaba llevar no podría liderar con lo que vendría después.
-Estaba pensando en que me habías prometido ir a ver las estrellas a las afueras de la ciudad- me dijo.
-¿Entonces pensaste en meterte por la ventana, proponérmelo y hacerme salir por la ventana?- le pregunté porque me hacía gracia.
-Estas sonriendo, es porque te gusta la idea- dijo Niall tomándome para verme mejor, él tenía una sonrisa grande en su rostro.
-Eres un idiota- le dije tratando de suprimir mi sonrisa y él se rio.
-Pero a ti no te importa- me dijo el sonriendo.
-Si me importa, pero contigo, se me es indiferente – dije sonriendo mientras me acercaba a la orilla de la cama.
- ohh, You can't hide your lyin' eyes- me dijo cantando.
-No estoy mintiendo- le aclare, nuestra conversación era en un tono tan bajo e íntimo- me encanta esa canción, mi papá siempre me decía que no le podía mentir porque a él no le podía esconder mis ojos mentirosos, así que siempre le conté toda hasta que me acostumbre.
-A mí tampoco me los puedes ocultar- me dijo el sentándose en la punta de la cama.
-A ti si puedo- le dije sentándome a su lado, Niall me tomó la mano nuevamente.
-Me gustan tus manos- me dijo y yo baje la cabeza- ¿Por qué no puedo quedarme esta noche contigo?- me preguntó.
-Porque no, no sé cómo acabe todo mañana, aparte no quiero- le dije.
-¿Entonces nos olvidamos de que te besé ahí?- me preguntó el acariciando mi rostro, trate de controlar mi respiración para que no sintiera lo acelerada que estaba.
-Si- le respondí.
Niall se rió llevándose las manos a la cara.
-¿De qué te ríes?- le dije pegándole pero no pude evitar sonreír.
Niall se acercó a mí tanto que nuestras narices rozaban y las respiraciones se mesclaban.
-Eres un idiota- le dije sonriendo sin alejarme de él.
-Me encantas- me dijo colocándome más nerviosa.
Hizo que nuestros labios se rozaran y dejo un beso sobre mis labios. Sin aliento.
-Hagamos un pacto- me propuso- esta noche todo se vale, no pienses en el pasado, ni en lo que va a pasar después, hagamos como si solo existiera esta noche y ya- me dijo mirándome a los ojos- Ambos prometemos no volver a hablar de lo que pase y hacemos como si no hubiera pasado. ¿Te parece? ¿Hasta que se acabe la noche?- me dijo extendiéndome su mano para cerrar el trato.
-Pero no voy a tener sexo contigo- le advertí colocándome de pie quedando frente a él.
-Ay Celif- dijo el llevándose las manos a la cara.
-¿Qué?- le pregunté indignada- yo solo quiero dejar las cosas claras.
-Está bien- me dijo tomándome de la cadera- ¿Es un sí?
-Si- le dije colocando mis dos brazos sobre sus dos hombros respectivamente, el sonrió y sin soltarme se dejó caer en la cama de modo que yo caí sobre él- Me gusta esto de entrar a escondidas por la ventana- le dije mirándolo a los ojos, lo veía por la luz que se colaba.
-Harry vive en un doceavo piso así que espero que no sea algún tipo de insinuación- me dijo él y yo me reí.
-No te preocupes, encontrare a alguien más- le dije y él sonrió.
Me incliné hacia él y el rodeó mi cintura con sus manos sintiéndose como electricidad.
-¿En qué piensas?- me preguntó.
-¿No sé nota?- le pregunté. Pensaba en que el me enloquecía, que me colocaba nerviosa y mi corazón no había dejado de latir fuertemente desde que lo vi en la ventana.
-Quería estar seguro- me dijo acercándose a mí para darme un beso.
-Tres besos- dije cuando nos separamos- soy una tonta, los estoy contando- dije riéndome y me aleje bruscamente de el para acostarme en la cama.
-Vas a perder la cuenta- me dijo y yo lo empujé ligeramente.
-Me empujaste- se quejó.
-Ligeramente- le corregí y él se sentó en la cama.
La cama era sencilla, por lo tanto pequeña y por eso era fácil estar cerca y difícil estar lejos.
-Me gusta porque estas sonriendo como loca- me dijo Niall acariciándome el cabello e intercalándolo con mi rostro.
-¿Sabes lo incomodo que sería si Carmen entra?- le dije pensando en que Carmen había dicho que estaría aquí para la mañana, así que podía pasar.
-Sería muy gracioso, yo soy su vecino- me dijo entre risas.
-Baja la voz- le dije sentándome para quedar a su altura, quería estar cerca de él.
Lo tomé del brazo e hice que se acostara conmigo, el me abrazaba, yo mantenía cabeza sobre su pecho y habíamos empezado a jugar con nuestras manos.
-¿Hace cuánto te estas quedando aquí?- me preguntó el mientras yo jugaba con sus dedos.
-Una semana- le respondí.
-¿Por qué no me habías dicho?- me preguntó acariciando mi cabello.
-No era necesario- le respondí- ¿Puedo preguntar sobre estos días?- le pregunté sin parar de jugar con sus dedos.
-¿A qué te refieres?- me preguntó en un tono dulce abrazándome con más fuerza.
-Estos días... Después de que cancelaras las clases de guitarra - le dije tímidamente.
-Estaba ocupado, he estado ocupado haciendo cosas, trabajo y eso, estaba organizando ciertas cosas en mi vida, pero mírame termine volándome una ventana en la noche porque quería verte- me dijo mirando el techo y luego dio un beso en la frente- Tengo tantas cosas que organizar en mi vida.
-¿Deberíamos dormir?- le pregunté, me acomodé mejor hasta quedar a su altura.
-No sé- me dijo el mirándome- Ojalá hubiese sabido antes que te estabas quedando aquí- me dijo Niall.
-No nos confundamos- le dije.
-No nos estamos confundiendo- me dijo y se acercó para darme un corto beso, yo coloqué las manos en su rostro y le acaricié. Al cabo de un rato ambos nos quedamos dormidos, el me abrazaba, yo me aferraba a él, su respiración rebotaba en mi cuello y su olor me envolvía hasta que me perdí en mis sueños y más allá del inconsciente donde todo es intangible y alejado de la realidad donde Niall me tenía abrazada con ternura entre sus brazos.
-Celif, despierta- sentí el calor de su voz en mi oído.
Abrí los ojos con dificultad y me encontré con la mirada de Niall sobre mí.
-Hola- le dije, él sonrió.
Niall estaba sentado en la cama junto a mí.
-¿Cómo estuvo el sueño?- me preguntó- te vez tan dulce dormida.
Me lo quedé mirando, se veía tan bien, sus ojos encantadores me veían, quería besarlo pero no era capaz de hacerlo.
-¿Qué hora es?- le pregunté recostándome a él.
-1 AM – me respondió el tomándome la mano- quería preguntarte algo.
-¿Qué?
-¿En esta casa hay una piscina?- me preguntó Niall.
-Sí, ¿Para eso me despiertas?
-Yo vi cuando estaban amoblando, pero no estaba seguro de que tuviera una piscina- me dijo él.
-Bueno, ya que sanaste tu duda vamos a dormir- dije.
-¿Has visto la piscina?- insistió.
-Si- le dije disgustada- deja la intensidad.
-Vamos- me dijo.
-¿Estás loco? No puedo entrar ahí, Carmen no sabe que yo sé que tiene una piscina, la tiene hasta escondida, con llave- le dije alterada.
-Te espero abajo- me dijo colocándose de pie.
-Niall no- le dije alterada colocándome de pie- que no se te valla ocurrir salir por esa puerta.
-Vamos Celif ¿Qué puede ser lo peor que pueda pasar?- me dijo acercándome a él tomándome por la cintura.
-Niall no- le dije mirándolo a los ojos esperando que desistiera- enserio no, una noche baje a tomar agua y Carmen se despertó, me acompaño a tomar el vaso de agua, espero a que lo terminara y me dejo de vuelta en la habitación.
Niall se rio sin soltarme.
-Será divertido- me dijo al oído.
-No podemos- le dije le dije rodeándole el cuello con mis brazos.
-Lo máximo que te puede pasar es que Carmen no te deje quedarte más en su casa y no importa porque esta es tu última noche en su casa- me dijo y me besó el cuello dejándome sin aliento.
-¿Con que ropa nos vamos a meter a la piscina?- le pregunté tímidamente, él se alejó de mí.
-Tú te puedes colocar mi camisa- me dijo y procedió a quitarse la camisa de franela y la tiro sobre la cama- Te espero abajo- me dijo y salió del cuarto.
Me mordí el labio y me deje caer en la cama abrazando su camisa entre mis brazos, mi mente no podía lidiar con el asunto con facilidad para decidir si bajaba o no.
ana_ana_ana
Re: With Ur Love (Niall horan)
Holaaaaaaaa Anaaaa! Lo siento nena, hace mucho que estaba ausente del foro, por problemas familiares y el colegio. Tengo mucho por leer. Pero leere todos los capitulos. Saludos.
franmcn
Re: With Ur Love (Niall horan)
hola corazon que buno verte por acafranmcn escribió:Holaaaaaaaa Anaaaa! Lo siento nena, hace mucho que estaba ausente del foro, por problemas familiares y el colegio. Tengo mucho por leer. Pero leere todos los capitulos. Saludos.
ana_ana_ana
Página 25 de 25. • 1 ... 14 ... 23, 24, 25
Temas similares
» The Vow of Love|Niall Horan|
» Empire State Of Mind♛
» I Still Love You {Niall Horan}
» Believe me, I love you (Niall Horan and you)
» New Love |Niall Horan|
» Empire State Of Mind♛
» I Still Love You {Niall Horan}
» Believe me, I love you (Niall Horan and you)
» New Love |Niall Horan|
O W N :: Fanfiction :: Fanfiction :: Músicos :: One Direction
Página 25 de 25.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Ayer a las 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.