Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
ALAN Y SU RÁPIDA MUERTE
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
Página 1 de 1. • Comparte
ALAN Y SU RÁPIDA MUERTE
Nombre: Alan Halanger
Autor: Anne Hale
Adaptación: No
Género: Misterio
Advertencias: No
Otras páginas: No
Esta es una pequeña idea que se me ocurrió... Bueno en realidad tuve un sueño similar y le agregue unas cosas y quedo como resultado esto:
Casi a punto de comer el primer bocado de cereal, Alan Halanger se detuvo con la cuchara en la mano. Le pareció que había algo diferente. Para empezar, su pequeño departamento olía mejor. A veces el olor a jabón después de varios días de suciedad se mete en la nariz con el mismo dolorcillo con que se desacalambra una pierna, y eso lo sabía muy bien.
Entre paréntesis, no es que fuera sucio, sino que su horario estaba demasiado saturado. Alan sobre trabajaba para no acordarse de que al dejar de hacerlo la vida sonaba más vacía. Algo así como el silencio ahora en la mesa de la cocina. Un enorme hueco en el aire que dejaba la ausencia de ruidos de claxon y camiones, los rasguños de patitas de insecto en el aluminio del fregador, el griterío de los vecinos porque el niño no se quiere levantar. Ausencia después reemplazada por lo que tardó en reconocer como trinos de pájaro.
Alan se asustó un poco. Fue a lavarse los dientes y en el espejo su rostro no estaba manchado de pasta. A lo mejor hizo limpieza y se le olvidó. Fue a buscar sus calmantes y tal vez por puro masoquismo abrió la puerta del refrigerador, donde los anaqueles llenos de botellas de vino le sugirieron un desvío de la rutina que lo alteraba un poco.
Aun así se tranquilizó al ver que en el reloj casi daban las siete. El mismo reloj, el mismo viejito en bicicleta allá abajo en la calle; eran cosas que tenían para él un no sé qué de salvavidas. Cogió el control del televisor y lo prendió, en un leve reflejo de rata abandonando el barco. Pensaba en las conocidas imágenes de robos y matanzas para que de alguna forma le indicaran que todo iba normal, sin cambios de programación ni de horario.
Las siete uno. De no haber sido por los conciertos de piano y violín en vez de las noticias matutinas, ya estaría tomando el camión. Pero ahí estaba, todavía parado frente a la tele. Negándose a creer que lo estaban bombardeando con imágenes del sol entre las ramas de un pino y Claro de Luna de Beethoven como fondo.
Salió de su casa. El camión se detuvo poco antes de llegar él a la parada y no arrancó hasta que estuvo sentado en los (nuevos) asientos acojinados.
El chofer silbaba la melodía favorita de Alan, que pensaba en varias cosas. Por ejemplo en su novia, trabajando. En su propio trabajo: ¿Cómo un administrador de empresas terminó de cantinero en un bar de vampiros?, incluso era tan ridículo que al principio le añadió un poco de variación a la flojera de vivir todos los días -después todo fue igual-. A veces imaginaba (este vendría a ser el caso) que había sido creado a propósito. Nada que ver con lo que venimos a hacer en la tierra, sino una especie de comodín o edición especial. Y esto no lo pensaba con orgullo, más bien le hacía sentir una presión sobre los hombros.
Alan desvariaba un poquito en ocasiones. Se perdía en la ventana de un camión e imaginaba cosas como esta, porque eran mucho más interesantes que llegar a la barra de un lugar donde un montón de locos presumían su rareza. Como si afilarse los colmillos y practicar ritos masoquistas los convirtieran en una nueva especie o en dioses inmortales. Hoy no desvariaba. Hoy parecía como si el mundo real que a diario se vestía de gris hubiera decidido por una sola vez presentarse de blanco y azul cielo.
Alan temía todo esto: los árboles cuidados y frondosos en la calle, la gente caminando despacio y sonriendo en las aceras (la que no estaba sentada a la mitad de la avenida con una canasta de pic-nic), el camión deteniéndose exactamente a la puerta del remodelado y recién pintado bar donde trabajaba. El caminar por la banqueta le recordaba la imagen de la espada de Damocles que vio en una revista a los diez años. Algo así como una amenaza flotando en el aire, que tenía que ver con la idea de haber sido creado con un propósito específico.
Específico quedó repitiéndose en su mente mientras el camión se iba. La puerta del bar parecía retarlo a tocarla y pasar. Le decía lo mismo que las escenas obvias en las películas de terror. Un saber desde antes que lo de adentro iba a ser algo así como un kínder o un manicomio (ya ves, los giros en las historias) y aun así tener la mano temblando al empujarla.
¿Qué más se podría agregar? Lo hizo. Abrió la puerta, encontró cualquier cosa. Por qué cualquier cosa es mejor que un bar de vampiros. Porque Alan va a ser feliz para siempre, porque vivirá para siempre y tal vez con eso baste.
Con eso, el Alan de este lado (este Alan con una soga al cuello y subido en una silla. Este que sí va a descansar), se consuela de no haber interrumpido jamás su desayuno y puede, con la libertad de la tinta -la única libertad-, sonreír un poco antes de dejarse caer.
******************
El porque lo hice con ''Alan''? Por que ese nombre tiene un significado especial para mi!!! Ojala les guste. Y en un momento les dejo el link de otra idea que se le ocurrió a mi mejor amiga!! Besos
Autor: Anne Hale
Adaptación: No
Género: Misterio
Advertencias: No
Otras páginas: No
Esta es una pequeña idea que se me ocurrió... Bueno en realidad tuve un sueño similar y le agregue unas cosas y quedo como resultado esto:
Casi a punto de comer el primer bocado de cereal, Alan Halanger se detuvo con la cuchara en la mano. Le pareció que había algo diferente. Para empezar, su pequeño departamento olía mejor. A veces el olor a jabón después de varios días de suciedad se mete en la nariz con el mismo dolorcillo con que se desacalambra una pierna, y eso lo sabía muy bien.
Entre paréntesis, no es que fuera sucio, sino que su horario estaba demasiado saturado. Alan sobre trabajaba para no acordarse de que al dejar de hacerlo la vida sonaba más vacía. Algo así como el silencio ahora en la mesa de la cocina. Un enorme hueco en el aire que dejaba la ausencia de ruidos de claxon y camiones, los rasguños de patitas de insecto en el aluminio del fregador, el griterío de los vecinos porque el niño no se quiere levantar. Ausencia después reemplazada por lo que tardó en reconocer como trinos de pájaro.
Alan se asustó un poco. Fue a lavarse los dientes y en el espejo su rostro no estaba manchado de pasta. A lo mejor hizo limpieza y se le olvidó. Fue a buscar sus calmantes y tal vez por puro masoquismo abrió la puerta del refrigerador, donde los anaqueles llenos de botellas de vino le sugirieron un desvío de la rutina que lo alteraba un poco.
Aun así se tranquilizó al ver que en el reloj casi daban las siete. El mismo reloj, el mismo viejito en bicicleta allá abajo en la calle; eran cosas que tenían para él un no sé qué de salvavidas. Cogió el control del televisor y lo prendió, en un leve reflejo de rata abandonando el barco. Pensaba en las conocidas imágenes de robos y matanzas para que de alguna forma le indicaran que todo iba normal, sin cambios de programación ni de horario.
Las siete uno. De no haber sido por los conciertos de piano y violín en vez de las noticias matutinas, ya estaría tomando el camión. Pero ahí estaba, todavía parado frente a la tele. Negándose a creer que lo estaban bombardeando con imágenes del sol entre las ramas de un pino y Claro de Luna de Beethoven como fondo.
Salió de su casa. El camión se detuvo poco antes de llegar él a la parada y no arrancó hasta que estuvo sentado en los (nuevos) asientos acojinados.
El chofer silbaba la melodía favorita de Alan, que pensaba en varias cosas. Por ejemplo en su novia, trabajando. En su propio trabajo: ¿Cómo un administrador de empresas terminó de cantinero en un bar de vampiros?, incluso era tan ridículo que al principio le añadió un poco de variación a la flojera de vivir todos los días -después todo fue igual-. A veces imaginaba (este vendría a ser el caso) que había sido creado a propósito. Nada que ver con lo que venimos a hacer en la tierra, sino una especie de comodín o edición especial. Y esto no lo pensaba con orgullo, más bien le hacía sentir una presión sobre los hombros.
Alan desvariaba un poquito en ocasiones. Se perdía en la ventana de un camión e imaginaba cosas como esta, porque eran mucho más interesantes que llegar a la barra de un lugar donde un montón de locos presumían su rareza. Como si afilarse los colmillos y practicar ritos masoquistas los convirtieran en una nueva especie o en dioses inmortales. Hoy no desvariaba. Hoy parecía como si el mundo real que a diario se vestía de gris hubiera decidido por una sola vez presentarse de blanco y azul cielo.
Alan temía todo esto: los árboles cuidados y frondosos en la calle, la gente caminando despacio y sonriendo en las aceras (la que no estaba sentada a la mitad de la avenida con una canasta de pic-nic), el camión deteniéndose exactamente a la puerta del remodelado y recién pintado bar donde trabajaba. El caminar por la banqueta le recordaba la imagen de la espada de Damocles que vio en una revista a los diez años. Algo así como una amenaza flotando en el aire, que tenía que ver con la idea de haber sido creado con un propósito específico.
Específico quedó repitiéndose en su mente mientras el camión se iba. La puerta del bar parecía retarlo a tocarla y pasar. Le decía lo mismo que las escenas obvias en las películas de terror. Un saber desde antes que lo de adentro iba a ser algo así como un kínder o un manicomio (ya ves, los giros en las historias) y aun así tener la mano temblando al empujarla.
¿Qué más se podría agregar? Lo hizo. Abrió la puerta, encontró cualquier cosa. Por qué cualquier cosa es mejor que un bar de vampiros. Porque Alan va a ser feliz para siempre, porque vivirá para siempre y tal vez con eso baste.
Con eso, el Alan de este lado (este Alan con una soga al cuello y subido en una silla. Este que sí va a descansar), se consuela de no haber interrumpido jamás su desayuno y puede, con la libertad de la tinta -la única libertad-, sonreír un poco antes de dejarse caer.
******************
El porque lo hice con ''Alan''? Por que ese nombre tiene un significado especial para mi!!! Ojala les guste. Y en un momento les dejo el link de otra idea que se le ocurrió a mi mejor amiga!! Besos
Última edición por Anne Hale el Miér 16 Ene 2013, 2:28 pm, editado 1 vez
Anne Hale
Re: ALAN Y SU RÁPIDA MUERTE
https://onlywn.activoforo.com/t26162-la-humedad#1465593
Esta es la otra!! LÉANLA POR FAVOR Y CUENTENMEN QUE LES PARECE
Esta es la otra!! LÉANLA POR FAVOR Y CUENTENMEN QUE LES PARECE
Anne Hale
Re: ALAN Y SU RÁPIDA MUERTE
* Para ti mismo di el nombre de la única persona del sexo opuesto con quien quieras estar (tres veces...)...
* Piensa en algo que quieras lograr dentro de la próxima semana y repítelo para ti mismo(a) (seis veces)...
* Piensa en algo que quieras que pase entre tú y la persona especial (que dijiste en el no. 1) y dilo a ti mismo/a (doce veces)...
* Ahora haz un último y final deseo acerca del deseo que escogiste.
* Después de leer esto tienes 1 hora para mandarlo a 15 temas y lo que pediste se te hará realidad en 1 semana.
A la mayor cantidad de gente a quien lo mandes más fuerte se hará tu deseo. Si tu escoges ignorar esta carta lo contrario del deseo te sucederá, o esto no sucederá jamás...
* Piensa en algo que quieras lograr dentro de la próxima semana y repítelo para ti mismo(a) (seis veces)...
* Piensa en algo que quieras que pase entre tú y la persona especial (que dijiste en el no. 1) y dilo a ti mismo/a (doce veces)...
* Ahora haz un último y final deseo acerca del deseo que escogiste.
* Después de leer esto tienes 1 hora para mandarlo a 15 temas y lo que pediste se te hará realidad en 1 semana.
A la mayor cantidad de gente a quien lo mandes más fuerte se hará tu deseo. Si tu escoges ignorar esta carta lo contrario del deseo te sucederá, o esto no sucederá jamás...
Silvias1D
Re: ALAN Y SU RÁPIDA MUERTE
Oh!! me encanta! tus historias nunca me defrauda! SON TODAS SUPER BUENAS!!! aunque hay vocabulario que no entiendo,pero es porque soy española y supongo que eres argentina;por ejemplo,antes de entrar en esta paguina no sabia lo que era ''prender el televisor'' aqui en españa decimos ''encender el televisor'' o ''el control del televisor''aqui es mando a distancia,o ''carro'' aca es coche,en fin...hay cosas que entiendo y algunas me parece super rara,pero en fin,lo que tengo que decirte es que AMOO TUS NOVELAS! sigue escribiendo,eres BUENISIMA! :)
blackandwhite
Re: ALAN Y SU RÁPIDA MUERTE
blackandwhite escribió:Oh!! me encanta! tus historias nunca me defrauda! SON TODAS SUPER BUENAS!!! aunque hay vocabulario que no entiendo,pero es porque soy española y supongo que eres argentina;por ejemplo,antes de entrar en esta paguina no sabia lo que era ''prender el televisor'' aqui en españa decimos ''encender el televisor'' o ''el control del televisor''aqui es mando a distancia,o ''carro'' aca es coche,en fin...hay cosas que entiendo y algunas me parece super rara,pero en fin,lo que tengo que decirte es que AMOO TUS NOVELAS! sigue escribiendo,eres BUENISIMA! :)
Gracias! Me alegra que no te defraude... No nena, no soy argentina, soy Colombiana! Gracias (de nuevo) Seguiré cuando pueda. Love u :)
Anne Hale
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.