Tú eras mí juguete... Y tú un hombre de la noche [Larry Stylinson]

Lo siento D: Dos semanas, lo sé. Pero todas las vacaciones hemos estado de allá para acá, cómo nos cambiaremos de casa, pues..
así estamos. Aparte, cómo me quedé sin computadora, es más difícil qué mí madre me preste su celular :( Enserio, sé qué no tengo perdón, pero aquí les dejo el capítulo:

Capítulo 2
Aceleró hasta lo máximo, tenía el riesgo de chocar, pero no le importaba. Giro bruscamente, desacelerando cuando estaba a unos cuantos metros de su casa.
Sé recargo en el volante, las lágrimas bajaban rápidamente por sus mejillas, pero él no hacia nada para detenerlas.
Estaba cansado de hacerse el fuerte, estaba cansado de tener que aguantar a idiotas todas las noches, estaba cansado de que su propio padre lo vendiera. Simplemente, estaba cansado de su vida.
Suspiro, logrando calmarse. Comenzó a limpiarse las lágrimas, bajando del auto y abriendo la puerta de la casa.
- ¿No sé supone qué estás en la escuela? - Mierda, su padre estaba en casa -
- Sí, sé supone. Me quieres decir ¿Por qué mierda me vendiste a Louis Tomlinson? -
- No me vuelvas a hablar en ese tono -
- Ah ¿Y sí no quiero? Hoy tengo cita con el idiota de Tomlinson, y no creo que le gusté que le entreges la mercancía en ma estado ¿O me equivoco? - Estaba usando un tono amenazador y lo sabia, sé estaba aprovechando la situación y lo sabia, pero no le importaba -
- No, estás en todo lo correcto. Pero mañana no tienes compromisos, y puedo hacer lo qué quiera contigo -
- Ajá. ¿Y después? ¿Qué pasará sí me vendes a alguien más? -
- Puedo usar a James - Respondió él, con una sonrisa - Los demás no saben qué tú tienes ese tatuaje, da por seguro qué ni siquiera sé fijan en eso, así qué puedo usar a James -
- ¡No te atrevas a tocarlo! - Gritó Harry -
- Tenemos un trato, así qué o me empiezas a hablar bien, o usare a James en tú lugar -
Harry lo fulmino con la mirada, mascullando un “Bien“ y subiendo a su habitación.
Sé dejo caer en su cama, tapandose completamente con las mantas, simplemente esperando a qué llegara la noche, sólo quería qué este horrendo día terminara.
Las horas pasaron y la noche llegó, dando pasó a los nervios de Harry. Tenía qué admitirlo, estaba asustado. Temía qué Louis le contara a todo el colegio qué lo vendian.
Sé arreglo, subió al auto, su padre siempre le alquilaba la misma habitación a todos los imbéciles con los qué lo hacía meterse.
Llegó a aquel viejo hotel destartalado, pidiendo la llave y subiendo las escaleras, qué cómo siempre, no quería qué terminarán nunca. Metió la llave en la cerradura, dandole un giro y abriendo la puerta, teniendo suficiente tiempo para entrar pero no para moverse, ya qué un ansioso Tomlinson sé abalanzo hacia el y comenzó a besar su cuello, mientras Harry. sé encargaba de repetir lo mismo de siempre.
Louis estaba ansioso y excitado, pero él no. Él solamente quería qué la maldita noche terminara.
Ambos comenzaron a desabotonarse las camisas, mientras Louis le daba besos forzados en los labios. Harry sólo lo soportaba. Rápidamente Harry sé encontraba sin pantalones ni boxers, completamente desnudo; Louis sé desabrocho la cremallera, para después quitarse el pantalón y los boxers lentamente.
- ¿Sabes? Espere esto por mucho tiempo... y ya no pienso esperar más - Susurro, ya estaba detrás del Styles. Entro de una sola estocada, sacando un gritó de dolor por parte del ojiverde. -
Una, dos, tres, Harry perdió la cuenta de cuantas embestida había dado. Simplemente miraba por la ventana, esperando qué todo eso terminara o qué amaneciera. Lo primero sucedio, y cómo lo único qué él quería era irse, simplemente sé cambio lo más rápido qué pudo, y sé largo de ahí. Todo había terminado... al menos por esa noche.