Airplanes (Harry Styles & tú) Parte I

Tú puedes hacerlo, tú puedes hacerlo…me repetía una y otra vez enfrente de la puerta cerrada de Harry. Levanté la mano temblorosa hacia arriba y toqué con los nudillos.

- Adelante – dijo desde dentro.

Cogí el pomo de la puerta y la abrí, entrando dentro de la habitación cerrando tras de mí. Harry me miró fijamente mientras yo me apoyaba en la puerta ya cerrada.

- Hola – dijo con una leve sonrisa.
- Hola – dije tratando de sonreír aunque no me salía.

Durante el resto de la tarde había estado dando vueltas a todo lo que Cler me había dicho cuando me llamó por teléfono, y debía de aclarar todo ese asunto con Harry. Yo no era una mala persona y me sentía mal pero es que cuando Harry me besaba llegaba a perder de tal manera el control que no me acordaba ni de cómo me llamaba. Por eso había decidido durante la cena que cuando mi hermano se fuera a dormir iría a la habitación de Harry y hablaría seriamente con él.

- Me miró confundido mientras se acercaba a mí - ¿Pasa algo? – me preguntó ya estando cara a cara, muy cerca. Yo negué con la cabeza perdida en sus ojos. Como siguiera así olvidaría de que había venido a hablar con él- ¿Quieres más? – me dijo con una voz divertida mientras comenzaba a besar mi cuello – no sabía que eras tan salvaje e insaciable _____ pero me encanta. – dijo mordiéndome en lóbulo de la oreja.

¡Madre mía! Que sensación tan jodidamente increíble. ¿Cómo podía estar separada de él? Era como una maldita droga. Pero no podía ser, yo había venido con un objetivo y no debía desviarme de él.

- No para Harry – le dije en un susurro nada convencible. – Tenemos que hablar…
- Hablamos luego, lo prometo. – dijo besando mi mandíbula.
- Por favor – dije mientras subía a mis labios y se apoderaba de mi labio inferior – es importante – dije mientras tiraba de mi labio con los suyos – Necesito hablar – dije y el paró.
- ¿Qué pasa? – dijo separándose de mí.
- Solo necesito hablar de una cosa que es realmente importante para mí – le dije aún acorralada entre su cuerpo y la puerta.
- Dime – dijo él.
- Suspiré – No, dime tú, Harry. ¿A dónde quieres llegar con todo esto? – le dije y él me miró extrañado. - ¿Qué es lo que quieres de mí?
- Te quiero a ti _____, toda tú. – dijo él.
- Pero, ¿y tu novia? – dije y noté como se cristalizaban mis ojos.

En ese momento, me di cuenta de que sentía por Harry mucho más de lo que había llegado a imaginar. Y que me moría de miedo de oír lo que dijera sobre su novia, no quería perderlo.

- Suspiró fuertemente – Sé que es un tema delicado, pero lo he estado pensando y ya lo tengo decidido. – dijo él.
- ¿Qué has decidido? – dije sintiendo como los nervios recorrían mi cuerpo y mi corazón a punto de salirse de mi pecho.
- Voy a dejarla – me soltó de repente – Voy a dejarla _____ - dijo mientras me mirada a los ojos.
- ¿La vas a dejar? – pregunté incrédula – ¿Vas a abandonar años de relación a punto de casarte por mí?
- Sí ______. Y ya no solo por ti, sino por mí; ya no siento lo mismo que antes por ella. - dijo. – He sido más feliz este mes, que en los tres años que llevo con ella. No puedo dejarte escapar. – me dijo. Yo estaba anonadada por sus palabras, solté un sollozó de felicidad.
- ¿Estás seguro? – pregunté mientras lágrimas caían sobre mis mejillas.
- No he estado más seguro en mi vida ____ - dijo secándome las lágrimas con sus dedos y me acunó la cara con sus dos manos. – Contigo me siento más joven, más vivo.
- No puedo creer lo que me estás diciendo Harry, ¿hablas enserio?
- Claro que hablo enserio. – dijo con una sonrisa besándome los labios.

Harry capturó mis labios con los suyos y me dio un beso lleno de pasión. No cabía en mí de tanta felicidad. No me lo podía creer. Cuando fui a hablar con él no pensaba que sentía tanto, pero cuando el miedo se apodero de mi cuerpo al tener que oí su respuesta entendí todo. Me estaba enamorando de él.


- Espera, espera, para un segundo – le dijo separándome de sus labios. – no le puedes decir nada a mi hermano por favor, sino me matará.
- ¿Estás loca? Quieres que me corte los huevos, les tengo mucho cariño como para perderlos – dijo y yo no pude evitar reírme. – Además así lo hace más emocionante. – dijo para volver a besarme.


[Narrador omnisciente]

Zayn se levantó de la cama con buen humor, porque sería su último día de trabajo. A partir de ese día estaría oficialmente de vacaciones, un mes de vacaciones merecidas. Que no pensaba desaprovecharlas, ya tenía todo planeado para hacer con su hermana, su novia y su mejor amigo. ¿Qué mejor que unas vacaciones con la gente que te importa y a la que quieres?

Se levantó incluso antes de la hora a la que normalmente se despertaba pero tenía muchas ganas de que ese día acabara de una vez. Se duchó, se arregló y bajó a prepararse el desayuno.

Oyó unos ruidos en la segunda planta y pensó que sería Harry que se había levantado, porque obviamente su hermana no era, ella dormiría cual marmota. Se levantó de la silla y subió las escaleras volviendo a oír más ruidos para preguntarle a Harry si quería que le preparara su desayuno. Si su hermana no viviera allí parecerían una pareja de gays pensó Zayn riendo.

- Harry – le llamó mientras golpeaba la puerta. En ese momento cesaron los ruidos dentro de la habitación. Se extrañó porque no contestaba. - ¿Harry? – volvió a llamarle.
- ¿Sí? – por fin respondió su amigo desde dentro.
- ¿Quieres que te prepare algo para desayunar? – dijo apoyándose en la puerta.
- No, gracias Zayn… mmmm me daré una ducha primero, luego me lo preparo yo.
- Vale, estoy abajo – dijo Zayn separándose de la puerta y bajando de nuevo a la cocina.

[Narra _____]

Desperté por un leve cosquilleo en mi cuello y en mi pierna. ¿Qué cojones tengo en la pierna? pensé, las leves caricias aumentaron e hicieron que poco a poco abriera los ojos. ¿Quién osaba a despertarme de mi precioso sueño? Pero enseguida me di cuenta de quién era el causante de aquello.

- Mmmm… creo que podría acostumbrarme a esto cada mañana – dije con mi voz adormilada dándome la vuelta para mirarle con una sonrisa.
- Y yo podría acostumbrarme a que seas lo primero que vea cada mañana – dijo él mientras juntaba sus labios a los míos.

Me separé de él y miré el despertador que tenía en la mesilla. Las 8 de la mañana, ¡las 8 de la mañana! ¿Por qué se despertaba tan pronto? y lo más importante, ¿por qué me despertaba a mí? ¡Quería dormir!

- Creo que madrugar te vuelve más cursi Harry – dije riendo – necesitas una buena ducha.
- Solo si te la das conmigo – dijo mientras se ponía encima de mí.
- ¿Estás loco? – dije divertida. – está mi hermano.
- Bueno – me contestó mientras bajaba su boca a mi cuello para empezar a besarlo. – Entonces me la debes… quiero una ducha contigo.
- ¡Para, me haces cosquillas! – dije riéndome.
- ¿Así? – dijo él levantando un poco la cabeza para mirarme – Pues ya verás.
- No Harry, ¡ni se te ocurra! – dije, pero él ya estaba haciéndome cosquillas por todo el cuello. – Harry, mi hermano, va a oírnos. – dije intentando no hablar muy alto. Las cosquillas eran demasiado para mí, así que le pegué un manotazo haciendo que perdiera el equilibrio y cayera al suelo. Abrí los ojos por la sorpresa y me asomé por la cama. – Upss… - dije mirándole.
- ¿Upss…? – dijo con los ojos entrecerrados. – ¡¡Auuu...!! – se quejó.

No pude evitarlo y me reí a carcajada limpia. Me arrastré, bajando de la cama, colocándome a horcajadas encima de él. Con un movimiento rápido me agarró la espalda tirándome hacia él para juntar su boca con la mía.

- Harry – oímos como le llamaban desde a fuera.

Rápidamente separamos nuestros labios y nos miramos sorprendidos a los ojos sin poder reaccionar.

- ¿Harry? – volvimos a oír.
- Mierda mi hermano – le dije susurrando sin saber qué hacer.
- Shhh – dijo poniéndome un dedo en la boca. - ¿Sí? – dijo sin apartar su mirada de mis ojos.
- ¿Quieres que te prepare algo para desayunar? – le dijo mi hermano desde fuera.
- No, gracias Zayn… mmmm me daré una ducha primero – dijo mientras pasaba sus manos desde mi espalda hasta mi trasero. – Luego me lo preparo yo.
- Vale, estoy abajo – dijo y después escuchamos sus pasos alejándose.
- Dios, pensaba que nos iba a pillar – dije resoplando mientras dejaba caer mi cabeza en su pecho.
- Pues a mí no sabes lo que me ha puesto – dijo él apretándome el trasero con sus dos manos.
- ¡Harry! – le grite en un susurro y él se rio. - Shhh – le dije – será mejor que me vaya. – comencé a levantarme.
- Mmmm… no – dijo él tratando de retenerme.
- Si Harry – le respondí riendo. – Por favor, no quiero que nos pille mi hermano.
- Está bien – dijo mirándome con los ojos entrecerrados. Me dio un beso en los labios y me dejo levantarme.

Ambos nos levantamos del suelo. Cogí toda mi ropa, porque me encontraba en ropa interior, me vestí y salí a hurtadillas de su cuarto.

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