#Addicted To Love {Harry, Zayn & Tú}

ADDICTED TO LOVE (Harry, Zayn & Tú)

Capítulo 6 (maratón 1/3)

—Tienes problemas mentales. —dijo _________, riendo y luego dándole una mordida a su galleta de chispas de chocolate que había comprado en subway.
Zayn sonrió. Y, antes de que piensen que esa cara de bobo orangután babeando es por culpa de __________ y su bonita sonrisa, déjenme decirles que no. Es porque ahora estaba más seguro que nunca de que Harry no ganaría la apuesta ni aunque pusiera todo su encanto en ello. Sobre todo después de que le dijera “esa chica es más fría que un témpano de hielo. Y es insoportable” porque, bueno, __________ estaba siendo absolutamente adorable con él.
—No, ya verás, algún día de estos probarás la galleta de chocolate blanco con m&m’s y te darás cuenta de que soy el rey de todas las galletas.
—Ajá. Nada le gana a las chispas de puro, oscuro, amargo chocolate.
—No me creas, pero es la verdad.
Estaban sentados en una banca en el centro de la plaza de comida, refugiándose de la estruendosa tormenta eléctrica que había fuera. Después del segundo periodo, Zayn le había dicho a __________ que si lo acompañaba por algo de comer y, sorpresivamente, ella no se negó.
Llevaban ahí desde las dos de la tarde, hablando de tonterías, cosas sin sentido, y riéndose, hasta que habían dado las 6… y ahí todo se vino abajo.
—Uh… _________, de hecho, quería preguntarte algo.
__________ lo miró esperando a que dijera algo.
—¿Qué cosa?
—Pues… uhm… quería preguntarte si te gustaría-
—¡Zaaayyynnnnnnn! —gritó Miranda con su extremadamente nasal e irritante voz. ¿Dónde estaba Harry para entretener a estas mujeres cuando se necesitaba?
—Miranda. —contestó él a su vez, educadamente. Aunque en realidad quería gritarle que se largara. El baile de invierno estaba mucho más cerca de lo que se había dado cuenta y, aunque no quería aceptarlo, Harry tenía muy buenos trucos con las chicas.
Todas las animadoras lo rodearon y empezaron a tocarle el pelo, los brazos, la cara, y a reírse como tontas frente a él.
—Eh… te veo luego, ¿vale, Zayn? —_________ se incorporó y se alejó de toda la bolita.
—¡No, espera!
—Tú te sientas, bonito. —le dijo alguna de las animadoras en el oído.
Zayn se sentó.
Ah, el día en que las chicas dejaran de ser su debilidad sería el fin del mundo.

__________ ya estaba dentro del ascensor, toda empapada por la tormenta, cuando su móvil sonó. Dio un saltito y luego lo empezó a buscar en su bolsa.
Mientras lo hacía, con el tono de “One More Night” sonando en sus oídos, se puso a pensar en la tarde con Zayn. El “chico malo” de la academia en realidad no era tan malo, de hecho, le parecía mucho más aceptable que Harry. Aunque no le convencía del todo y tampoco iba a saltar a la conclusión de que era un pan de Dios sin antes conocerlo bien, ¿verdad?
Pero esas pestañas… y esos ojos… y básicamente todo él…
Y estaba baboseando igual que Vicky.
Suspiró y sacó el móvil, librándose de sus pensamientos por un segundo.
—¿Bueno?
—¿_________?
—¿Vicky? —preguntó extrañada— Ya voy para la habitación, ¿qué pasa?
—¿Crees que puedas ir por mi bolsa? La dejé en el último piso, cuando fui a la piscina.
__________ rodó los ojos. Sólo llevaba conociendo a Vicky dos días, pero era obvio que la chica perdería la cabeza si no la tuviera pegada a su cuerpo.
—Claro. Te veo en la habitación.
Colgó y su móvil se apagó en seguida. Ya no tenía pila. Presionó el botón del último piso y esperó pacientemente. El elevador se detuvo en el piso cuatro, y ________ miró confundida el pasillo vacío… hasta que vio a la persona que había presionado el botón del elevador.
Harry entró y, en cuanto los dos se vieron, pusieron cara de asco.
—¿También vas al último piso? —le preguntó el ojiverde a _________. Ella asintió.
—A Vicky se le olvidó algo.
—A mí se me olvidó mi móvil.
___________ asintió con la cabeza. Realmente le importaba un rábano si se le había olvidado su móvil, la herencia familiar, o todas las neuronas de su cerebro (lo que era lo más probable).
Entonces, como si los aliens, el cielo, Dios, los ángeles, Satanás, los demonios, Obama, la Reina de Inglaterra, y todas las personas en el mundo estuvieran en contra de ella… la luz se apagó dentro del elevador y se escucharon grititos.
—¿Qué está pasando? —__________ presionó el botón del último piso frenéticamente. No obtuvo resultados. Harry hizo lo mismo, pero tampoco ocurrió nada.
Al fin, después de algunos minutos, una voz se escuchó por todo el campus.
—Tenemos un apagón debido a la tormenta eléctrica. Lamentamos los inconvenientes.
__________ y Harry maldijeron por lo bajo.
¿Iban a pasarse quién sabe cuánto tiempo con la persona que más odiaban en todo el mundo, en un elevador, encerrados, completamente solos?
__________ y Harry rogaron silenciosamente porque la luz volviera cuanto antes. Pero, como si les leyeran el pensamiento, la voz por los altavoces volvió a hacer un anuncio, y está vez supieron que estaban completamente perdidos.
—Calculamos que la electricidad vuelva mañana por la mañana.

ADDICTED TO LOVE (Harry, Zayn & Tú)

Capítulo 7 (maratón 2/3)

____________ empezó a entrar en pánico.
No había tenido un ataque como ese desde los 6 años cuando a sus primos les pareció buena idea encerrarla en el armario bajo llave. Y ahora estaba en una situación igual, y no por doce minutos como aquella vez, sino hasta las 10 de la mañana, con un chico que odiaba, y encima su móvil había muerto y Harry había dicho que él iba a buscar el suyo.
—¿Qué tienes? —preguntó Harry, repentinamente alarmado.
____________ estaba respirando agitadamente. Aunque la única luz que había en el elevador provenía de unos foquitos diminutos en los espejos del ascensor que proyectaban una luz verde, podía ver con perfecta claridad como sus hombros se agitaban y su pecho subía y bajaba irregularmente.
—Yo… tengo claustro- —ni siquiera pudo terminar de hablar. Se llevó las manos a la garganta, porque sentía que se estaba sofocando.
—¡____________! —gritó Harry, sin quererse acercar para no incomodarla, pero preocupado.
Empezó a sollozar y las lágrimas caían de sus mejillas apresuradamente. Sacó fuerzas para gritar.
—¡AYUDA! ¡SÁQUENME DE AQUÍ! ¡AYUDA! —golpeó la puerta del elevador con todas sus fuerzas, aunque sabía que nadie la escucharía. Sollozó con más fuerza y trató de buscar aire, lo que sólo le provocó un ataque de tos severo.
El sonido de asfixia fue lo que hizo que Harry reaccionara del shock. Dio los únicos tres pasos que los separaban y, sin pensárselo dos veces, la abrazó. La abrazó con tal fuerza que temió hacerle daño, pero eso no importaba.
—Shhh, tranquila. Todo está bien. Estoy contigo, respira profundo. Inhala y exhala. —_____________ seguía llorando, aunque ya estaba más calmada. Ya no parecía que se estuviera asfixiando y su respiración estaba volviendo a la normalidad— Ya está, ya pasó. —Harry pasó sus manos por el cabello de ____________ y ella enterró la cara en el hueco entre su hombro y su cuello, abrazándolo también, aferrándose a él— Vamos a sentarnos, ¿sí? No te va a pasar nada, estoy contigo. —____________ se separó a penas unos centímetros para verlo a los ojos. Con la pálida luz verde, pudo distinguir la dulce y perfecta sonrisa de Harry. Asintió con la cabeza.
Se sentaron en silencio y ___________ se acurrucó junto a Harry. Él le paso un brazo por los hombros y la atrajo más hacia sí. Olía a vainilla y canela. Sonrió.
—Entonces, ¿tienes claustrofobia? —preguntó Harry, haciendo círculos con su dedo pulgar sobre la piel del hombro de ___________.
—Lo descubrí a los seis años. —suspiro, abrazándolo por el torso. Odiaba los lugares cerrados.
No hablaron por un buen rato. Harry se limitaba a escuchar la respiración de ___________ y ella, recargada en el pecho de Harry, se tranquilizaba a su vez con el latido constante de su corazón.
Finalmente, ella habló.
—Cuéntame de ti. —pidió, alzando un poco la cabeza para verlo a los ojos. Harry sonrió.
—¿Qué quieres saber?
—Todo. Tenemos bastante tiempo y dudo que alguien nos saque de aquí.
—Bueno, pero después tú tienes que contarme, ¿sí? —_____________ asintió con la cabeza. Harry tomó aire— Bien. Soy de Cheshire… vivía en Holmes Chapel. —____________ dio un respingo— ¿Qué?
—Yo soy de Durham. Vivía en Chapel Hill. —dijo con una sonrisa distraída. Harry rió.
—Coincidencias de la vida, mi pequeña ___________ —suspiró—. En fin… mi papá se fue cuando tenía 7 años. No era muy popular en la escuela —ello lo miró como si estuviera loco— ¿qué? No me mires así, es la verdad. Era feo.
—Sigues siendo.
—Arruinas el momento —ambos rieron—. Trabajé en una panadería desde los trece. Total, era un rechazado social, nadie me quería y blablá… cuando tenía quince mi mamá conoció a Joe, mi padrastro. Le propuso mudarnos a Sussex y… aquí estamos.
—¿Por qué no vives con ellos y te quedas en el internado?
—Porque viajan mucho. Joe tiene mucho dinero, de ahí todo lo que tengo ahora —se encogió de hombros—. Así que cuando nos mudamos a Sussex… parecía la opción más fácil —hizo una pausa. No podía creer que le hubiera contado todo eso a ___________ en tan poco tiempo de conocerla. Nadie más aparte de Louis lo sabía—. Pasemos a las cosas más básicas. Mi color favorito es el naranja. Mi comida favorita son las palomitas de caramelo… aunque ni siquiera sean comida. Mi banda favorita es Coldplay, aunque también me gusta The Fray.
—Amo The Fray. Y Coldplay.
—Entonces tienes buenos gustos. ¿Qué hay de ti?
—Uhm… —___________ odiaba hablar de su pasado. Se aclaró la garganta—. Mi mamá vive en Estados Unidos y no he sabido nada de ella desde que tengo once años. Desde ese día… he sido un completo desastre. Me han expulsado de todas las escuelas en las que he estado y me enviaron aquí por contactos de mi papá… que se casó con una niña que podría ser mi hermana mayor. Ya te dije de dónde soy. Me mudé aquí sólo por la Academia, ya que mi papá esta en Ámsterdam por lo que quede de mis años de preparatoria. Y lo básico es… mi color favorito es azul cielo, mi comida favorita son las hamburguesas con mucho, muchísimo queso y mi banda favorita es He Is We.
—He Is We es increíble.
—Ah, vamos, te apuesto a que ni siquiera sabes quiénes son.
—No, pero te aseguro que investigaré.
—Más te vale.
____________ soltó una risita y en ese momento la pequeña luz verde se apagó. Dio un saltito y su respiración empezó a hacerse pesada de nuevo. Las lágrimas volvieron a descender por sus mejillas y los sonidos sofocantes que salían de su garganta se hicieron notablemente audibles.
—No, no, no. ___________, ____________, mírame. —Harry se acomodó para quedar frente a ella. Tomó su rostro entre sus manos— Aquí estoy. Vas a estar bien, vamos a salir. Inhala y exhala, recuerda. —le dijo, tratando de sonar calmado, aunque había desesperación en su voz.
¿Por qué se preocupaba tanto por esa chica que apenas acababa de conocer y que además era su pase para el volvo?
_____________ tardó unos minutos, pero al final se tranquilizó. Cerró los ojos y Harry hizo lo mismo. Pegó su frente con la de ella y suspiró con alivio.
—Aquí estoy. No me voy a ir a ninguna parte —susurró él, aún con ambas manos en el rostro de ____________.
Ella abrió los ojos al mismo tiempo que él.
—Odio estar encerrada. —murmuró en voz muy baja.
—Todo va a estar bien. Lo prometo. Estás conmigo. —esbozó una media sonrisa, aunque no se podía ver en la oscuridad. Sólo se distinguían levemente sus siluetas. Harry distinguió sus labios, entreabiertos. Acercó un poco más el rostro al suyo… y se alejó—. Lo siento, ya sé que me odias y eso estuvo mal…
No terminó la frase.
___________ estampó sus labios contra los de él y lo besó como si su vida dependiera de eso.

ADDICTED TO LOVE (Harry, Zayn & Tú)

Capítulo 8 (maratón 3/3)

Las manos de __________ se enredaron en aquellos rizos que había querido tocar desde la primera vez que los vio. Harry tardó un poco reaccionar. Pero cuando lo hizo, reaccionó de la mejor manera posible. Bueno, es obvio, tenía bastante experiencia y sabía exactamente qué hacer. Mordió el labio inferior de ____________ y le rodeó la cintura con los brazos, aprovechando que ya estaban de pie gracias al reciente ataque de pánico de ____________.
Podrías ganar la apuesta sin acostarte con ella, le recordó una voz en su mente, ya que la odias y la encuentras completamente desagradable, ¿recuerdas? Tienes que enamorarla, no llevártela a la cama.
Calló a la voz y la mandó al rincón más alejado de su mente. Quería esto. La tentación era simplemente demasiada y los labios de __________ sabían a menta y chocolate, eran adictivos.
Bajó las manos un poco hasta el trasero de __________. Ella soltó un sonido de sorpresa. Harry esperó… ¿iba a golpearlo? ¿A decirle que era un cerdo asqueroso y que se alejara? No sería la primera vez que alguien lo hacía.
Pues no. ___________ se pegó incluso más al cuerpo de él. Harry apretó su trasero con fuerza, provocando que ella soltara algo parecido a un gemido. Se miraron a los ojos en aquella oscuridad por un segundo… y ahí fue cuando las cosas se calentaron de verdad.
____________ saltó y envolvió la cintura de Harry con sus piernas, y se volvieron a besar, esta vez más profundamente. El aire era lo de menos. Harry caminó hasta escuchar como la espalda de ___________ topaba con la pared. Ambos jadearon.
Harry descendió por la clavícula de ___________, dejando besos hasta llegar a su cuello. Ella echó la cabeza hacia atrás para darle más espacio. Los besos en el cuello eran su debilidad. __________ le recorrió el pecho a través de la camisa con las manos, y él se estremeció de placer. La camisa era un obstáculo, Harry no quería que nada se interpusiera entre su piel y la de ella. ___________ hizo el trabajo por él.
Se separaron una milésima de segundo, en la que ella le quitó la playera de cuello v que él llevaba y él le quitó la fina blusa de algodón que ella estaba usando. Presionó sus manos contra sus pechos.
—Me estás matando, Styles. —jadeó ella contra los labios de Harry. Harry sonrió.
Desabrochó su sujetador y lo tiró al suelo junto con la otra ropa. Sentir las manos calientes de Harry en sus senos envió un nuevo ataque de necesidad a través del cuerpo de __________. Se frotó contra la erección dura que tenía Harry. Él soltó un gemido leve.
—Quién está matando a quién. —musitó Harry, casi gruñendo.
Un lado de __________ que ni ella misma conocía salió a la luz. Se despegó de Harry y desenroscó sus piernas de su cintura. Harry la miró entre asustado y confundido. ¿Se había arrepentido?
Entonces, lo que hizo ____________ lo dejó totalmente fuera de sus cabales. Se arrodilló frente a él y le sacó el cinturón. Luego le bajó los pantalones y los boxers de un jalón.
—¿__________? ¿Estas segu- —se cortó a la mitad de la frase cuando sintió su lengua recorrer la cabeza de su miembro. Gimió.
Era lo mejor que había sentido en toda su vida. Ella no era como las demás, que lo hacían brusco… era delicada, lo miraba con aquellos ojos grandes mientras lo hacía, y recorría cada centímetro con la lengua y la mano. Mientras relajaba la garganta, se lo metió cada vez más profundo. Quería saborearlo todo, chuparle toda la longitud con la boca.
—Te necesito. Ahora. —dijo él por lo bajo, casi sin aliento. __________ esbozó una media sonrisa.
—Esperaba que dijeras eso.
Harry la levanto y la ayudó a quitarse los jeans. Ella volvió a enroscar sus piernas en su cintura, y Harry volvió a apoyarse en apretar su trasero para levantarla.
—El preservativo… —musitó Harry, repentinamente frustrado. No llevaba ninguno, y dudaba que __________ llevara. Quiso darse de golpes contra la pared… ¿y ahora?
—¿Podemos mandar al carajo el puto preservativo? —contestó ___________, frotándose contra Harry. Él tragó saliva con dificultad y, finalmente, cedió. La embistió tan fuerte que temió haberle hecho daño. Pero ella sólo soltó un grito de placer que podría haberse escuchado hasta China. Menos mal que el elevador estaba aislado de sonido— ¡DIOS! —gritó, clavando las uñas con fuerza en la espalda de Harry.
—¡MIERDA, ___________! —gritó a su vez Harry, embistiendo con fuerza una y otra vez.
Cada embestida mandaba descargas eléctricas por todo su cuerpo. La espalda de __________ chocaba contra el espejo, aunque por alguna extraña razón eso le gustaba. Nunca antes había estado tan excitada en toda su vida. Soltaba gemidos como loca mientras Harry la embestía cada vez más fuerte. Distinguió a la perfección la elevación de sus senos y la larga columna de su cuello. La expresión de éxtasis en el rostro de _________ fue total.
Harry recién estaba empezando.
—Será mejor que te agarres. —susurró al oído de __________. Eso fue mucho para ella. Su voz era ronca y a la vez profunda. Jadeó.
Agarró a _________ por el trasero de nuevo y la hizo ascender y descender por todo su miembro con una rapidez y una fuerza impresionantes. Los gritos que emitía __________ eran como música para sus oídos y lo excitaban más.
Luego paró. Hizo que ___________ quitara las piernas de su cintura y luego le dio la vuelta para que quedara de espaldas a él, quizá con mucha brusquedad. Empujó su espalda y ella entendió perfectamente. Se reclinó y recargó las manos contra el espejo. Harry la embistió de nuevo.
—¿Todavía quieres salir de aquí? —preguntó Harry en su voz ronca.
—NO. QUE SE TARDEN TODO LO QUE QUIERAN. —Harry embistió con fuerza— ¡OH, DIOS!
Ella misma se movió hacia adelante y hacia atrás para provocar más fricción. Harry, fuera de sí mismo, le dio una nalgada, lo que provocó un gemido de inmenso placer de parte de __________.
—ME VUELVES LOCO. —confesó Harry entre jadeos, aumentando la velocidad.
—OH, DIOS, HARRY. ERES INCREÍBLE. —volvió a darle una nalgada, esta vez mientras embestía con todas sus fuerzas. Ella gritó— Voy a-
—Yo también —la interrumpió. Estaba a punto de salirse de ella cuando ___________ habló entre gritos.
—¡NO! NO PARES.
—¿Segura? __________, no tenemos preservativo…
Ella se restregó contra él como respuesta.
—Quiero todo dentro, Hazza. —susurró con la voz más seductora que Harry le había escuchado a nadie en toda su vida. Nadie le decía Hazza, pero el apodo nuevo, en ese momento, y además oírlo de los labios de _________... fue demasiado.
Los músculos de ___________ se apretaron contra él y le ordenaron el orgasmo que de todas formas ya había estado anunciándose. La adrenalina le quitó la respiración a Harry. Reprimió un grito mientras escupía su semen, todo, dentro de ella. Justo como lo había pedido.