Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 4 de 10. • Comparte
Página 4 de 10. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
jdmelanyprincess escribió:Yo quierooooooooo, mejor dicho, los necesitoooooo, por favoooor
Perdón por no responderte preciosa, aquí estoooooooooooooy.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Andrea de Bieber escribió:Yo quiero maratón :D siiiiiiiii llupiiii porfa sube cap pliiis :sad:
PREPÁRENSE PARA MORIIIIIIIIIIIIR.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
angelly vanee escribió:siii yo quieroo maratonnn wooooooooowwwwwwwww !!!!!!!!! :P
Y aquí están los caps más hots de la historia.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
alis1313 escribió:OK!!!! matame!! x no haberme pasado pero es ke o tenia internet yo kuando no me conecte es xq no tengo inter 100pre es x eso encerio perdonadme!!!!!!!
P.D: MORI con estos caps y aun falta x leer? hay no aki me va a dar algo encerio Marii seguila!!!!!! kiero leer esos caps :twisted: me estan llaman2 me dicen "Mariieta *.* subio caps!! :twisted: leeeeeelooos" y kuan2 veo no hay :( SEGUILA!!!!!!!!!
P.D2:soyunangelitocaidodelcieloynotengolaculpadekemimenteseasexy!!!!!! :twisted:
Me tenias preocupada mujer, ya sabia que pasaba algo porque no te veía comentando. Pero bueno estas aquí para disfrutar de los mejores capítulos de la histora de Jus.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Javiera♥ escribió:Siguela! *nueva lectora* me encanto la adaptacion *-+
BIENVENIDA, DISFRUTA.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Catalina.De.Biebs escribió:Siguela Por El Amor de dios La AMO
Muxooooooooooooooooooooooooooo Siguela o Sino Are un escandalo en mi casa y llorare mas o menos asi :lloro: Plissss La E Leidooooo Tiditita Y E Estado Mas O Menos Asi
iwhsnfoadhfjioasdkfnvsdkacvnxzav con eso te lo digo todo ;)
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Cαρíтυℓσ 8
—Justin, seamos razonables —jadeé, mi sexo apretando sobre el dedo dentro de mi, temblando por las profundas caricias que la yema de su dedo me proporcionaba. —Tu miembro no cabrá ahí. Deja de intentar asustarme.
Él sonrió. Yo sabía bien que debía creer en esa sonrisa. Sus labios se curvaron lentamente, las esquinas de sus ojos se arrugaron. Mirándome atentamente, él deslizó su dedo hasta lo más profundo de mi empapado y caliente canal y luego se movió para acostarse al lado mio.
Justin me miró con cuidado, como a una bestia salvaje mientras él apoyaba su cabeza en su brazo y me miraba por entre sus ojos entrecerrados. Entonces su mirada cambió, dirigiéndola a mis pezones, mis ojos siguiéndolo mientras movía su mano.
—¡No! —grité defensivamente mientras él alzaba su mano.
Me erguí. Él movió su cabeza, sus labios se lanzaron sobre mi duro, puntiagudo pezón un segundo antes de que él me propinara otro punzante golpe a los mojados labios de mi sexo.
Grité, placer y dolor obligando a mis labios a emitir un desvalido sonido de confuso deseo mientras mi cuerpo se doblaba y empujaba contra el de él. Su lengua raspó mi pezón mientras él la chupaba, y el siguiente golpe a mi sexo fue sobre la carne que protegía mi hinchada clítoris. Mi grito fue fuerte, mi cuerpo estirándose, arqueado, luchando tanto contra el dolor como el placer mientras que yo me esforzaba por separar los dos. Estaba en llamas, mi cabeza tambaleándose en una confusa ciénaga de sensaciones. Quería rogar por más, suplicar piedad.
Otro golpe llegó a mi, su palma ubicada para golpear desde mi clítoris a mi feminidad mientras él tomaba mi pezón entre sus dientes. El dolor punzante, caliente y feroz tenía mi clítoris palpitando mientras gritaba cerca del clímax.
—Por favor —supliqué, mi cabeza refregándose contra la almohada mientras sentía su brazo alzarse otra vez. —Por favor, Justin...
Un grito estrangulado abandonó mi garganta cuando un golpe más duro aterrizó sobre mi, golpeando con fuerza y fuego, haciendo arder mi clítoris, mi orgasmo alcanzando su punto máximo contra mi voluntad. Un estremecimiento atravesó mi cuerpo mientras su palma golpeaba en mi clítoris con presión suficiente para disparar mi liberación.
Entonces los labios de Justin cubrieron los mios con un gemido, su lengua entrando en mi boca con avaricia y hambre. Luché para acercarme, mis brazos y piernas protestando contra mi confinamiento mientras salía al encuentro de su beso con la misma voracidad, mi lengua enredada a la de él, nuestros gemidos, un áspero chirrido contra mi garganta mientras sentía mi feminidad latir, mi feminidad muriéndose por más.
Me estremecí con la palpitante intensidad de mi clímax, una distante parte de mi estaba sobresaltada, asombrada de que yo pudiera responder de este modo. Fieros estremecimientos atravesaban mi cuerpo, lamían mi matriz, dejándome ansiosa, hambrienta por más.. No era suficiente, necesitaba más. Mucho más.
— ¿Necesitas más, ________(tn)? —gruñó él mientras se retiraba y bajaba la vista hacia mi.
Sus ojos ya no eran pacientes, estaban ardientes y hambrientos, mirándome atentamente.
—Más. Por favor, Justin. Te necesito —Gemí mirándolo mientras mi cuerpo se agitaba, necesitándolo, deseando tanto su miembro que hasta apenas podía respirar, mi excitación era así de intensa.
Él se movió hacia atrás, su mano subiendo entre mis muslos, un voraz gemido saliendo de mi garganta mientras sentía la espesa capa cremosa que volvía a cubrir mi carne.
—Tu sexo es tan caliente, _________(tn) —. Su voz sonó torturada. —Tan caliente y dulce, yo podría comerte ahora mismo.
—Justin, seamos razonables —jadeé, mi sexo apretando sobre el dedo dentro de mi, temblando por las profundas caricias que la yema de su dedo me proporcionaba. —Tu miembro no cabrá ahí. Deja de intentar asustarme.
Él sonrió. Yo sabía bien que debía creer en esa sonrisa. Sus labios se curvaron lentamente, las esquinas de sus ojos se arrugaron. Mirándome atentamente, él deslizó su dedo hasta lo más profundo de mi empapado y caliente canal y luego se movió para acostarse al lado mio.
Justin me miró con cuidado, como a una bestia salvaje mientras él apoyaba su cabeza en su brazo y me miraba por entre sus ojos entrecerrados. Entonces su mirada cambió, dirigiéndola a mis pezones, mis ojos siguiéndolo mientras movía su mano.
—¡No! —grité defensivamente mientras él alzaba su mano.
Me erguí. Él movió su cabeza, sus labios se lanzaron sobre mi duro, puntiagudo pezón un segundo antes de que él me propinara otro punzante golpe a los mojados labios de mi sexo.
Grité, placer y dolor obligando a mis labios a emitir un desvalido sonido de confuso deseo mientras mi cuerpo se doblaba y empujaba contra el de él. Su lengua raspó mi pezón mientras él la chupaba, y el siguiente golpe a mi sexo fue sobre la carne que protegía mi hinchada clítoris. Mi grito fue fuerte, mi cuerpo estirándose, arqueado, luchando tanto contra el dolor como el placer mientras que yo me esforzaba por separar los dos. Estaba en llamas, mi cabeza tambaleándose en una confusa ciénaga de sensaciones. Quería rogar por más, suplicar piedad.
Otro golpe llegó a mi, su palma ubicada para golpear desde mi clítoris a mi feminidad mientras él tomaba mi pezón entre sus dientes. El dolor punzante, caliente y feroz tenía mi clítoris palpitando mientras gritaba cerca del clímax.
—Por favor —supliqué, mi cabeza refregándose contra la almohada mientras sentía su brazo alzarse otra vez. —Por favor, Justin...
Un grito estrangulado abandonó mi garganta cuando un golpe más duro aterrizó sobre mi, golpeando con fuerza y fuego, haciendo arder mi clítoris, mi orgasmo alcanzando su punto máximo contra mi voluntad. Un estremecimiento atravesó mi cuerpo mientras su palma golpeaba en mi clítoris con presión suficiente para disparar mi liberación.
Entonces los labios de Justin cubrieron los mios con un gemido, su lengua entrando en mi boca con avaricia y hambre. Luché para acercarme, mis brazos y piernas protestando contra mi confinamiento mientras salía al encuentro de su beso con la misma voracidad, mi lengua enredada a la de él, nuestros gemidos, un áspero chirrido contra mi garganta mientras sentía mi feminidad latir, mi feminidad muriéndose por más.
Me estremecí con la palpitante intensidad de mi clímax, una distante parte de mi estaba sobresaltada, asombrada de que yo pudiera responder de este modo. Fieros estremecimientos atravesaban mi cuerpo, lamían mi matriz, dejándome ansiosa, hambrienta por más.. No era suficiente, necesitaba más. Mucho más.
— ¿Necesitas más, ________(tn)? —gruñó él mientras se retiraba y bajaba la vista hacia mi.
Sus ojos ya no eran pacientes, estaban ardientes y hambrientos, mirándome atentamente.
—Más. Por favor, Justin. Te necesito —Gemí mirándolo mientras mi cuerpo se agitaba, necesitándolo, deseando tanto su miembro que hasta apenas podía respirar, mi excitación era así de intensa.
Él se movió hacia atrás, su mano subiendo entre mis muslos, un voraz gemido saliendo de mi garganta mientras sentía la espesa capa cremosa que volvía a cubrir mi carne.
—Tu sexo es tan caliente, _________(tn) —. Su voz sonó torturada. —Tan caliente y dulce, yo podría comerte ahora mismo.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Cαρíтυℓσ 9
—Sí.— Me retorcí contra él, necesitando que me tocara, que me penetrara, llenando el enorme hoyo de exquisita necesidad palpitando dentro de mi.
—No aún —se negó él, haciéndome lloriquear. —No aún, nena. Pero pronto. Realmente pronto.
Yo miré mientras él se alejaba de mi, arrodillándose y acomodando las almohadas bajo mis hombros y cabeza.
—Tu sabes lo que quiero, _________(tn) —me dijo, su voz ruda, su miembro apuntando a mis labios. —Abre tu boca, nena, dame lo que quiero.
Cualquier cosa. Cualquier cosa para convencerlo de aliviarla del dolor que palpitaba en su estómago. Abrí mis labios, y gemí mientras la gruesa cabeza empujaba pasando, estirando dolorosamente. El miembro de Justin era enorme, tan largo y grueso que quise gritar de miedo.
—Oh sí, que boquita tan pequeña y caliente —gimió él, envolviendo sus dedos alrededor de la base mientras penetraba mi boca, parando sólo cuando mis ojos comenzaron a ensancharse por el miedo de que me ahogara. —Relaja tu garganta, _________(tn) —me urgió él. —Sólo unos centímetros más, nena. Toma un poco más para mí y te mostraré que bueno puedo hacerte sentir lo que sigue.
Mi sexo zumbaba su respuesta. Sí, toma más, nena. Tómalo todo, y entonces él me cogerá. La criatura voraz que era mi feminidad exigía su obediencia con tanta ferocidad como Justin lo hacía. Respirando por mi nariz, mis ojos en los de él, relaje lentamente los músculos de mi garganta, sintiendo como él, con lentos empujes, conseguía los centímetros finales que exigía que yo tomara.
Su mano apretaba sobre su miembro, y su dedo acariciando mi boca mientras él marcaba su límite, y aún así, había tanto más. Él se retiró mientras yo chupaba la gruesa longitud, mi lengua acariciándolo, raspando el lado de abajo de su miembro mientras él lo sacaba casi totalmente de mi boca.
Entonces él comenzó a penetrar otra vez. Un lento y mesurado empuje que hundió su miembro a la profundidad por él marcada, su expresión endureciéndose con tal extremo placer que luché por acariciar la ancha cabeza que intentaba ahogarla. Dejé a mi garganta hacer un intento de tragar, un movimiento tentativo como probando su capacidad para hacerlo.
Justin gimió, su miembro sacudiéndose en mi boca mientras se retiraba, metiéndola otra vez. Yo solo repetía el movimiento, mirando su cara, nunca dejando de ver su expresión mientras él comenzaba a coger mi boca. Él estaba jadeando, sus dientes apretados, su duro estómago apretado.
—Sí, trágalo —gruñó él cuando repetía el movimiento. —Trágalo, nena. Muéstrame que deseas mi miembro.
Él estaba cogiendo mi boca más duro ahora, mis labios tan estirados que los sentía lastimados, pero a me gustó el sentimiento, amaba ver su entusiasmo, la extrema lujuria que cruzaba su cara cada vez que mi garganta acariciaba la cabeza de su miembro. Sus caderas botaban contra mi, su voz un gruñido mientras él penetraba mis labios, empujando su miembro tan profundamente como podía ir, gimiendo mientras mi carne tensaba, se apretaba más.
—Sí. Voy a correrme ahora, ________(tn). Voy a correrme en tu pequeña boca caliente justo como voy a correrme bien dentro de ese pequeño trasero apretado. Tómalo, nena, toma mi miembro.—Justin empujó con fuerza, y yo tragué, sus caderas bombeando, entonces yo sentí la primera dura, caliente explosión de semen contra el fondo de mi garganta. Esta fue seguida por más. Espesos chorros de cremoso semen bajando por mi garganta mientras él gritaba encima de mi.
Yo estaba estática, temblando de anticipación mientras sentía su miembro, todavía duro, salir de mi boca. Él me follaría ahora.
—Eres tan hermosa, __________(tn) —susurró él mientras se alejaba de mi, bajando la vista, sus ojos amables una vez más. —Tan condenadamente caliente y hermosa, me vuelves loco.
—Bien —gemí. — métemelo ahora, Justin. Por favor.
Él sonrió, y sus ojos se ensancharon mientras sacudía la cabeza.
— ¿Qué? —escupí, incrédula. —Maldito seas, Justin, no puedes dejarme de esta forma.
—Sí.— Me retorcí contra él, necesitando que me tocara, que me penetrara, llenando el enorme hoyo de exquisita necesidad palpitando dentro de mi.
—No aún —se negó él, haciéndome lloriquear. —No aún, nena. Pero pronto. Realmente pronto.
Yo miré mientras él se alejaba de mi, arrodillándose y acomodando las almohadas bajo mis hombros y cabeza.
—Tu sabes lo que quiero, _________(tn) —me dijo, su voz ruda, su miembro apuntando a mis labios. —Abre tu boca, nena, dame lo que quiero.
Cualquier cosa. Cualquier cosa para convencerlo de aliviarla del dolor que palpitaba en su estómago. Abrí mis labios, y gemí mientras la gruesa cabeza empujaba pasando, estirando dolorosamente. El miembro de Justin era enorme, tan largo y grueso que quise gritar de miedo.
—Oh sí, que boquita tan pequeña y caliente —gimió él, envolviendo sus dedos alrededor de la base mientras penetraba mi boca, parando sólo cuando mis ojos comenzaron a ensancharse por el miedo de que me ahogara. —Relaja tu garganta, _________(tn) —me urgió él. —Sólo unos centímetros más, nena. Toma un poco más para mí y te mostraré que bueno puedo hacerte sentir lo que sigue.
Mi sexo zumbaba su respuesta. Sí, toma más, nena. Tómalo todo, y entonces él me cogerá. La criatura voraz que era mi feminidad exigía su obediencia con tanta ferocidad como Justin lo hacía. Respirando por mi nariz, mis ojos en los de él, relaje lentamente los músculos de mi garganta, sintiendo como él, con lentos empujes, conseguía los centímetros finales que exigía que yo tomara.
Su mano apretaba sobre su miembro, y su dedo acariciando mi boca mientras él marcaba su límite, y aún así, había tanto más. Él se retiró mientras yo chupaba la gruesa longitud, mi lengua acariciándolo, raspando el lado de abajo de su miembro mientras él lo sacaba casi totalmente de mi boca.
Entonces él comenzó a penetrar otra vez. Un lento y mesurado empuje que hundió su miembro a la profundidad por él marcada, su expresión endureciéndose con tal extremo placer que luché por acariciar la ancha cabeza que intentaba ahogarla. Dejé a mi garganta hacer un intento de tragar, un movimiento tentativo como probando su capacidad para hacerlo.
Justin gimió, su miembro sacudiéndose en mi boca mientras se retiraba, metiéndola otra vez. Yo solo repetía el movimiento, mirando su cara, nunca dejando de ver su expresión mientras él comenzaba a coger mi boca. Él estaba jadeando, sus dientes apretados, su duro estómago apretado.
—Sí, trágalo —gruñó él cuando repetía el movimiento. —Trágalo, nena. Muéstrame que deseas mi miembro.
Él estaba cogiendo mi boca más duro ahora, mis labios tan estirados que los sentía lastimados, pero a me gustó el sentimiento, amaba ver su entusiasmo, la extrema lujuria que cruzaba su cara cada vez que mi garganta acariciaba la cabeza de su miembro. Sus caderas botaban contra mi, su voz un gruñido mientras él penetraba mis labios, empujando su miembro tan profundamente como podía ir, gimiendo mientras mi carne tensaba, se apretaba más.
—Sí. Voy a correrme ahora, ________(tn). Voy a correrme en tu pequeña boca caliente justo como voy a correrme bien dentro de ese pequeño trasero apretado. Tómalo, nena, toma mi miembro.—Justin empujó con fuerza, y yo tragué, sus caderas bombeando, entonces yo sentí la primera dura, caliente explosión de semen contra el fondo de mi garganta. Esta fue seguida por más. Espesos chorros de cremoso semen bajando por mi garganta mientras él gritaba encima de mi.
Yo estaba estática, temblando de anticipación mientras sentía su miembro, todavía duro, salir de mi boca. Él me follaría ahora.
—Eres tan hermosa, __________(tn) —susurró él mientras se alejaba de mi, bajando la vista, sus ojos amables una vez más. —Tan condenadamente caliente y hermosa, me vuelves loco.
—Bien —gemí. — métemelo ahora, Justin. Por favor.
Él sonrió, y sus ojos se ensancharon mientras sacudía la cabeza.
— ¿Qué? —escupí, incrédula. —Maldito seas, Justin, no puedes dejarme de esta forma.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Cαρíтυℓσ 10
— ¿Yo dije que te estaba dejando? —me preguntó él, arqueando su ceja en signo de pregunta. —No, _________(tn), estaré aquí contigo, toda la noche, cada noche. Pero tú no estás preparada para ser penetrada aún.
—Te juro que lo estoy —exclamé —En serio lo estoy, Justin —. Si estuviera más lista, estallaría en llamas.
Él rió en silencio, aunque el sonido fue tenso.
—No aún, __________(tn) —susurró él. —Pero pronto.
Él se movió a través del cuarto, y luego noté la pequeña bandeja que había sobre la carpeta de mi cómoda empotrada en la pared. Él lo recogió y al volverse, mis ojos se ensancharon con aprehensión.
Había varios artículos sexuales yaciendo sobre la bandeja de plata, así como un gran tubo de lubricante. El que más me asustó, fue el grueso consolador anal apoyado sobre su ancha base. Temblé al verlo, sacudiendo mi cabeza con miedo mientras él se acercaba hacia mi. Si sólo estuviera lo bastante asustada, pensé fríamente. Que Dios me ayudara, mi feminidad estaba en fuego, mi cuerpo tan sensible que creía que una suave brisa me produciría un orgasmo. Y ver esos juguetes, el grueso invasor anal y el gran consolador, me hacían temblar, no sólo de miedo, sino de entusiasmo.
Justin puso la bandeja sobre mi mesa de noche, luego se sentó sobre mi cama, mirándonos fijamente.
—Si no te mantienes excitada, necesitándome a mí y a lo que te daré, entonces me alejaré —me dijo él, con una voz tan suave. —Pero yo te empujaré, _______(tn), veré lo que te gusta, veré lo que puedes tomar. No sólo esta noche, sino toda la semana. Tú eres mía hasta la noche de la fiesta de tu padre. No importa qué, no importa como, siempre y cuando lo que haga te excite.
— ¿Y si no lo logras? —pregunté con ira. — ¿Qué vas a hacerme, lastimarme hasta que no pueda soportarlo más?
—Sólo puedo darte lo que quieres, lo que necesitas —dijo él entre dientes apretados. —Estás tan malditamente caliente por ser dominada que no puedes soportarlo. ¿Tú piensas que no conozco eso? ¿Crees que te contaron los rumores sobre mis preferencias innecesariamente? Si no estuvieras excitada por ellas, _________(tn), no hubieras estado tan mojada como para empapar mi mano hace dos años cuando te arrinconé en el pasillo. Sólo estás asustada. Y te deseo demasiado como para dejar que sigas asustada de lo que ambos necesitamos más.
— ¡No lo haré! —. Pero la excitación estaba electrificando mi cuerpo, haciendo latir cada célula en anticipación.
— ¿No lo harás? —gruñó él. —Sé sobre los libros que tu madre encontró en tu cuarto cuando ibas al colegio, ___________(tn). Las historias que lees, para satisfacer esas ansias que no puedes explicar.
Mi cara se enrojeció. Mi madre había estado enfurecida sobre los libros porno que había encontrado en mi cuarto ese año.
— ¿Alguna vez cogiste tu trasero, ________(tn)? —me preguntó suavemente él, inclinándose hacia mi, mirándome fijamente. — ¿Mientras acariciabas tu feminidad, luchando por un orgasmo, tu dedo alguna vez entró en ese pequeño, caliente, oscuro pasaje sólo para ver cómo se sentía?
Yo lo había hecho, gemí humillada. Pero no había sido mi dedo, había sido el delgado, redondeado vibrador que yo tenía escondido. La oleada de oscuro placer que se había extendido por mi había sido aterradora. Incluso peor había sido el duro, espantoso temblor de un orgasmo que casi me hizo gritar, subiendo por mi cuerpo, y haciendo que de mi sexo chorreara un fluido suave, pegajoso. Recordar el dolor de la penetración, la humillación de lanzar aquel chorro de líquido, había hecho que nunca volviera a intentar tal cosa, excepto con mis dedos. Incluso ahora, años más tarde, el recuerdo de ese acto era suficiente para hacerme ruborizar de vergüenza.
— ¿Eso dolió, _________(tn)? —. Y desde luego, ese malvado reconoció el rubor de la admisión sobre mi piel. — ¿Te hizo desear más?
—No —escupí, temblando de nervios, excitada.
—Yo creo que sí —. Él tocó mi mejilla, sus dedos acariciando mi carne, su voz apacible. —Creo que te dejó dolorida, necesitada y demasiado malditamente asustada para intentar hacerlo. Creo, _________(tn), que me necesitas tanto como yo te necesito.
—Y yo creo que tu estás loco —lo ataqué, rechazándolo, preguntándome por qué lo hacía cuando lo necesitaba tanto.
Su pulgar me acarició los hinchados labios, sus ojos oscuros, brillando en la luz de la vela.
— ¿Lo estoy? —me preguntó Justin suavemente. —Vamos a ver, __________(tn), cómo de chiflado estoy.
— ¿Yo dije que te estaba dejando? —me preguntó él, arqueando su ceja en signo de pregunta. —No, _________(tn), estaré aquí contigo, toda la noche, cada noche. Pero tú no estás preparada para ser penetrada aún.
—Te juro que lo estoy —exclamé —En serio lo estoy, Justin —. Si estuviera más lista, estallaría en llamas.
Él rió en silencio, aunque el sonido fue tenso.
—No aún, __________(tn) —susurró él. —Pero pronto.
Él se movió a través del cuarto, y luego noté la pequeña bandeja que había sobre la carpeta de mi cómoda empotrada en la pared. Él lo recogió y al volverse, mis ojos se ensancharon con aprehensión.
Había varios artículos sexuales yaciendo sobre la bandeja de plata, así como un gran tubo de lubricante. El que más me asustó, fue el grueso consolador anal apoyado sobre su ancha base. Temblé al verlo, sacudiendo mi cabeza con miedo mientras él se acercaba hacia mi. Si sólo estuviera lo bastante asustada, pensé fríamente. Que Dios me ayudara, mi feminidad estaba en fuego, mi cuerpo tan sensible que creía que una suave brisa me produciría un orgasmo. Y ver esos juguetes, el grueso invasor anal y el gran consolador, me hacían temblar, no sólo de miedo, sino de entusiasmo.
Justin puso la bandeja sobre mi mesa de noche, luego se sentó sobre mi cama, mirándonos fijamente.
—Si no te mantienes excitada, necesitándome a mí y a lo que te daré, entonces me alejaré —me dijo él, con una voz tan suave. —Pero yo te empujaré, _______(tn), veré lo que te gusta, veré lo que puedes tomar. No sólo esta noche, sino toda la semana. Tú eres mía hasta la noche de la fiesta de tu padre. No importa qué, no importa como, siempre y cuando lo que haga te excite.
— ¿Y si no lo logras? —pregunté con ira. — ¿Qué vas a hacerme, lastimarme hasta que no pueda soportarlo más?
—Sólo puedo darte lo que quieres, lo que necesitas —dijo él entre dientes apretados. —Estás tan malditamente caliente por ser dominada que no puedes soportarlo. ¿Tú piensas que no conozco eso? ¿Crees que te contaron los rumores sobre mis preferencias innecesariamente? Si no estuvieras excitada por ellas, _________(tn), no hubieras estado tan mojada como para empapar mi mano hace dos años cuando te arrinconé en el pasillo. Sólo estás asustada. Y te deseo demasiado como para dejar que sigas asustada de lo que ambos necesitamos más.
— ¡No lo haré! —. Pero la excitación estaba electrificando mi cuerpo, haciendo latir cada célula en anticipación.
— ¿No lo harás? —gruñó él. —Sé sobre los libros que tu madre encontró en tu cuarto cuando ibas al colegio, ___________(tn). Las historias que lees, para satisfacer esas ansias que no puedes explicar.
Mi cara se enrojeció. Mi madre había estado enfurecida sobre los libros porno que había encontrado en mi cuarto ese año.
— ¿Alguna vez cogiste tu trasero, ________(tn)? —me preguntó suavemente él, inclinándose hacia mi, mirándome fijamente. — ¿Mientras acariciabas tu feminidad, luchando por un orgasmo, tu dedo alguna vez entró en ese pequeño, caliente, oscuro pasaje sólo para ver cómo se sentía?
Yo lo había hecho, gemí humillada. Pero no había sido mi dedo, había sido el delgado, redondeado vibrador que yo tenía escondido. La oleada de oscuro placer que se había extendido por mi había sido aterradora. Incluso peor había sido el duro, espantoso temblor de un orgasmo que casi me hizo gritar, subiendo por mi cuerpo, y haciendo que de mi sexo chorreara un fluido suave, pegajoso. Recordar el dolor de la penetración, la humillación de lanzar aquel chorro de líquido, había hecho que nunca volviera a intentar tal cosa, excepto con mis dedos. Incluso ahora, años más tarde, el recuerdo de ese acto era suficiente para hacerme ruborizar de vergüenza.
— ¿Eso dolió, _________(tn)? —. Y desde luego, ese malvado reconoció el rubor de la admisión sobre mi piel. — ¿Te hizo desear más?
—No —escupí, temblando de nervios, excitada.
—Yo creo que sí —. Él tocó mi mejilla, sus dedos acariciando mi carne, su voz apacible. —Creo que te dejó dolorida, necesitada y demasiado malditamente asustada para intentar hacerlo. Creo, _________(tn), que me necesitas tanto como yo te necesito.
—Y yo creo que tu estás loco —lo ataqué, rechazándolo, preguntándome por qué lo hacía cuando lo necesitaba tanto.
Su pulgar me acarició los hinchados labios, sus ojos oscuros, brillando en la luz de la vela.
— ¿Lo estoy? —me preguntó Justin suavemente. —Vamos a ver, __________(tn), cómo de chiflado estoy.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Cαρíтυℓσ 11 4/4.
Observaba a Justin, intentando aquietar la difícil y áspera respiración que sacudía mi cuerpo. Parecía no poder conseguir suficiente oxígeno, parecía no poder normalizar el fuerte estremecimiento de su palpitante corazón.
—Hay una línea delgada que divide el placer del dolor —me dijo él mientras sacaba el invasor anal de la bandeja, y el tubo de lubricante. —Es tan delgada, que si todo va como debiera ir, el dolor se suma al placer, de una manera erótica y oscura.
Justin se corrió a los pies de la cama. Aflojó las cuerdas atadas al estribo, y tomó rápidamente mis piernas antes de que pudiera patearlo. Ignorando mis violentos esfuerzos y mis maldiciones acaloradas, en minutos él tenía mi cuerpo entero dando vuelta, con las cuerdas sosteniéndome nuevamente en posición mientras él metía varias almohadas bajo mis caderas.
—Bastardo —. Mi voz estaba estrangulada mientras una excitación enloquecedora se disparaba por mi cuerpo.
Mi trasero estaba arqueado hacia él. Yo estaba extendida, abierta para él, y los destellos de miedo y excitación que recorrían mi cuerpo me tenían aterrorizada.
—Dios, _______(tn), eres tan hermosa —gruñó él desde atrás, su voz áspera, llena de lujuria. —Tu pequeño trasero tan rosado y bonito. De ahora en adelante, me ocuparé de eso por ti.
Temblé, gritando, yo debería odiar esto. Debería estar gritando, pidiéndole que se detuviera, en cambio mi cuerpo pulsaba de necesidad y deseo, anticipándome.
—No deberías haber esperado tanto para volver, _________(tn) —susurró él mientras besaba la llena mejilla de mi trasero. —No deberías haberme hecho esperar tanto, nena, porque no seré capaz de ser tan gentil como lo hubiera sido. Y tendré que castigarte, pero de todos modos lo hubiera hecho, ________(tn). Porque necesito ver ese bonito trasero ponerse todo rojo y caliente por mi mano.
—¡No!—. A pesar de mi grito instintivo, la mano de Justin cayó sobre la mejilla redondeada de mi trasero.
El calor destelló a través de mi carne, entonces grité mientras un dedo se hundía en mi feminidad un segundo más tarde. Me doblé, me retorcía contra mis ataduras.
—Estás tan mojada —gimió él. —Tan apretada y caliente, _________(tn). Pero para cuando mi miembro se hunda en tu lindo trasero, vas a estar más apretada.
Su mano golpeó otra vez mi trasero mientras su ancho dedo se retiraba de mi temblorosa feminidad. Mientras el calor aumentaba en la carne de mis nalgas, su dedo se hundió otra vez. Gritaba de miedo y de una oleada de entusiasmo oscuro, erótico. Los golpes no eran crueles, sino bastante agudos y picantes, construyendo un calor constante en mi carne.
—Tan linda —. Justin golpeó el otro lado, entonces su dedo empujó dentro de mi otra vez.
Yo estaba tan mojada que goteaba. Él alternaba los golpes suaves con los picantes, lo que la mantenía estremeciéndome de anticipación. Mantenido mi carne acalorada, el dolor destellando por mi cuerpo. Un dolor que yo odiaba, lo odiaba porque el placer que venía de Justin me estaba volviendo loca, podía sentir mis jugos fluyendo de mi sexo, oír mis gritos resonando con necesidades a las que yo no quería nombrar.
Para cuando él terminó, yo sentía mi trasero encendido, mis caderas estaban rotando, mi sexo palpitando. Me moría de necesidad. Si Justin no me penetraba pronto, me volvería loca. Estaba que quemaba, por dentro y por fuera, una ola de lujuria ardiente atormentaba mis entrañas mientras luchaba contra los placeres depravados de los golpes.
—Tu trasero está ahora tan bonito y rojo —gimió él. —Maldición, __________(tn), me gustas así, nena, toda atada para mí, enrojecida, tu feminidad caliente y apretada y tan mojada que empapa mis dedos —. Dos dedos se hundieron en mi .
—¡Justin!—. mi grito era ronco y desesperado mientras mi orgasmo me hacía vacilar en el filo de una atormentada excitación.
Observaba a Justin, intentando aquietar la difícil y áspera respiración que sacudía mi cuerpo. Parecía no poder conseguir suficiente oxígeno, parecía no poder normalizar el fuerte estremecimiento de su palpitante corazón.
—Hay una línea delgada que divide el placer del dolor —me dijo él mientras sacaba el invasor anal de la bandeja, y el tubo de lubricante. —Es tan delgada, que si todo va como debiera ir, el dolor se suma al placer, de una manera erótica y oscura.
Justin se corrió a los pies de la cama. Aflojó las cuerdas atadas al estribo, y tomó rápidamente mis piernas antes de que pudiera patearlo. Ignorando mis violentos esfuerzos y mis maldiciones acaloradas, en minutos él tenía mi cuerpo entero dando vuelta, con las cuerdas sosteniéndome nuevamente en posición mientras él metía varias almohadas bajo mis caderas.
—Bastardo —. Mi voz estaba estrangulada mientras una excitación enloquecedora se disparaba por mi cuerpo.
Mi trasero estaba arqueado hacia él. Yo estaba extendida, abierta para él, y los destellos de miedo y excitación que recorrían mi cuerpo me tenían aterrorizada.
—Dios, _______(tn), eres tan hermosa —gruñó él desde atrás, su voz áspera, llena de lujuria. —Tu pequeño trasero tan rosado y bonito. De ahora en adelante, me ocuparé de eso por ti.
Temblé, gritando, yo debería odiar esto. Debería estar gritando, pidiéndole que se detuviera, en cambio mi cuerpo pulsaba de necesidad y deseo, anticipándome.
—No deberías haber esperado tanto para volver, _________(tn) —susurró él mientras besaba la llena mejilla de mi trasero. —No deberías haberme hecho esperar tanto, nena, porque no seré capaz de ser tan gentil como lo hubiera sido. Y tendré que castigarte, pero de todos modos lo hubiera hecho, ________(tn). Porque necesito ver ese bonito trasero ponerse todo rojo y caliente por mi mano.
—¡No!—. A pesar de mi grito instintivo, la mano de Justin cayó sobre la mejilla redondeada de mi trasero.
El calor destelló a través de mi carne, entonces grité mientras un dedo se hundía en mi feminidad un segundo más tarde. Me doblé, me retorcía contra mis ataduras.
—Estás tan mojada —gimió él. —Tan apretada y caliente, _________(tn). Pero para cuando mi miembro se hunda en tu lindo trasero, vas a estar más apretada.
Su mano golpeó otra vez mi trasero mientras su ancho dedo se retiraba de mi temblorosa feminidad. Mientras el calor aumentaba en la carne de mis nalgas, su dedo se hundió otra vez. Gritaba de miedo y de una oleada de entusiasmo oscuro, erótico. Los golpes no eran crueles, sino bastante agudos y picantes, construyendo un calor constante en mi carne.
—Tan linda —. Justin golpeó el otro lado, entonces su dedo empujó dentro de mi otra vez.
Yo estaba tan mojada que goteaba. Él alternaba los golpes suaves con los picantes, lo que la mantenía estremeciéndome de anticipación. Mantenido mi carne acalorada, el dolor destellando por mi cuerpo. Un dolor que yo odiaba, lo odiaba porque el placer que venía de Justin me estaba volviendo loca, podía sentir mis jugos fluyendo de mi sexo, oír mis gritos resonando con necesidades a las que yo no quería nombrar.
Para cuando él terminó, yo sentía mi trasero encendido, mis caderas estaban rotando, mi sexo palpitando. Me moría de necesidad. Si Justin no me penetraba pronto, me volvería loca. Estaba que quemaba, por dentro y por fuera, una ola de lujuria ardiente atormentaba mis entrañas mientras luchaba contra los placeres depravados de los golpes.
—Tu trasero está ahora tan bonito y rojo —gimió él. —Maldición, __________(tn), me gustas así, nena, toda atada para mí, enrojecida, tu feminidad caliente y apretada y tan mojada que empapa mis dedos —. Dos dedos se hundieron en mi .
—¡Justin!—. mi grito era ronco y desesperado mientras mi orgasmo me hacía vacilar en el filo de una atormentada excitación.
Mariieta *.*
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
O..MG! o..m..g! OMG!!!!!!!!!!!!! marii eres mala e.e tenes una mente vos donde sacas estas novelas? AHHH!!!! ke lokera si esto solo es el komienzo wow no kiero saber el descenlase :oops: ...na mentira seguila!!!! wow esta nove la lee una persona normal y se corrompe jajja seguila!!!
alis1313
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
Nueva lectora!!!!!!! Plis seguila!!!!!! No puedo esperar a ver que sigue!!!!
CamiSelenatika
Re: La tentación. (Justin y tú) HOT. ADAPTADA. TERMINADA.
MARIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!!!!!!!!!! DA SEÑALES DE VIDAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!! DONDE ESTAS!? :(
alis1313
Página 4 de 10. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10
Temas similares
» Mi vecino es un vampiro. (Justin Bieber & tu) ADAPTADA. [TERMINADA]
» Ardiente Tentación -ADAPTADA- Terminada
» La Tentación. Louis Tomlinson & Tu. HOT. ADAPTADA. {TERMINADA}
» Búsqueda Implacable [Justin y tú] [Adaptada] [Terminada]
» dιe ιɴ yoυr αrмs|Justin & Tú|Adaptada| TERMINADA
» Ardiente Tentación -ADAPTADA- Terminada
» La Tentación. Louis Tomlinson & Tu. HOT. ADAPTADA. {TERMINADA}
» Búsqueda Implacable [Justin y tú] [Adaptada] [Terminada]
» dιe ιɴ yoυr αrмs|Justin & Tú|Adaptada| TERMINADA
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 4 de 10.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.