-All I wanna see you in is just skin {Zayn & Tú} HOT

CAP II. Parte 3.

Zayn se dirigió al interior de las casa de los Tomlinson, Invitado estaba consciente que lo peor que pudo haber hecho había sido ese baile, ahora debía atenerse a las consecuencias. Entró a la casa, buscó rastro de la chica en la cocina y no había encontrado. Se dirigió a la sala y tampoco. No podía desvanecerse así como así. Fue cuando encontró la primera pista: La chaqueta que cargaba la chica, colgada en el barandal de la escalera. Subió estas de dos en dos y se encontró con los zapatos que llevaba, perfectamente acomodados en la entrada del pasillo. Tomó estos y siguió caminando en busca de más pistas. Se topó con el sujetador colgado en la manilla de la puerta de la oficina del padre de Louis, y una sonrisa traviesa atravesó sus labios.

-¿A qué juegas, pequeña?.

El chico abrió la puerta y se encontró con una habitación con la luz tenue. Benditos sean los reguladores de luces, fue lo que pasó por el pensamiento del chico. Llevó la mirada hacia sus pies y se encontró con el vestido de Invitado. Levantó la mirada y se encontró con la silla de la computadora de espaldas a él; esta no permitía ver más que brazo de la chica apoyado en el posabrazos. Se acercó a ella y le dio vueltas a la silla. Ahí estaba ella. A semi vestir delante de él, con una sonrisa en sus labios, con sus ojos brillando en deseo, su cabello despeinado, y su pecho subiendo y bajando lentamente.

-Quiero que tengas algo muy claro, Malik, no me gusta que me ignoren – El chico se encontraba embelesado al escucharla. Definitivamente la inocencia de la pequeña Styles se había ido hacía mucho.

-Y ¿Dónde quedó el ocultarnos? – Preguntó el chico encarnando una ceja; no podía evitarlo, no podía aguantar mucho teniéndola así.

-¿Eso es lo que quieres? – La chica lo empujó con sutileza por el pecho y se hizo a un lado para recoger sus cosas. Fue cuando el moreno la tomó por un brazo y la llevó contra la pared.

-¿Haz escuchado eso salir de mis labios, preciosa? – Preguntó mientras se apegaba al cuerpo de la chica, y rozaba sus labios junto a los de él.

-Entonces ¿Qué es lo que quieres? – No podía verlo, pero podía jurar que una sonrisa ocupaban el rostro del chico.

-Quiero escucharte gemir mi nombre, quiero que me supliques por más, quiero dejarte tan cansada que no te puedas mover luego, quiero poseerte, hacerte mía una y otra vez… -No lo había dejado terminar, escuchar ese casi ronroneo por parte del chico le había excitado más de lo que hubiera pensado.

CAP II. Parte 4.

Zayn devoraba los labios de su compañera. Aquellos dulces labios en los cuales encajaba a la perfección. ¿Cuándo aquellos labios habían adquirido tanta experiencia?. El tan sólo pensar en el hecho que aquella chica besando los labios de alguien más, le molestaba, y lo demostraba al besarla con fiereza. No la soltaba ni para tomar un descanso, quería que la chica supiera a quién le pertenecían esos labios. ¿Pertenecer?. Seguro era el alcohol que jugaba una mala pasada en su consciencia.

Las manos del chico recorrían el cuerpo de Invitado, su piel era suave, pero ardía del deseo. Se situó en uno de los senos y sintió como dejaba de besarlo para soltar un suave jadeo.

-Te gusta que te toque ahí? – Preguntó. Poco a poco iba conociendo las debilidades de la chica. Donde tocar para que esta se retorciera de placer.

-Sí – Gruñó la chica.

-Y aquí? – Su mano bajó despacio y se situó encima del clítoris de la chica. Y con el pulgar comenzó a hacer movimientos circulares sobre este. La chica no respondió, y es que fue un gemido el que se escapó de sus labios – Entonces esto te va a encantar – Murmuró el chico mientras levantaba la pierna deInvitado , a la altura de su cadera, movió sus bragas a un lado y comenzó a penetrarla con dos dedos, muy lentamente.

-Demonios! – Jadeó la chica – Zayn…

-Sí? –Debía admitirlo, le encantaba ver a la chica gozar.

-Más rápido…

-Más rápido, qué? – Preguntó Zayn murmurando en su oído, para luego morder el lóbulo de su oreja.

-Por favor, Zayn – Suplicó la chica.

-Tus deseos son órdenes.

Se deshizo de las bragas de la chica y comenzó a besar su cuello mientras que sus dedos se movían cada vez más fuerte dentro de ella. Escucharla gemir cada vez más fuerte le excitaba tanto que comenzaba a doler, pero no se iba a detener hasta llevarla a lo más alto. La sujetaba con fuerza, sabía que no se encontraba en una cómoda posición y la chica podía llegar a caerse si la soltaba. Tuvo que hacer un esfuerzo para no dejar marcas en el cuello de la chica, y eso era lo que más deseaba. Volvió a los labios de la chica para que esta ahogara sus gemidos cada vez más altos en los suyos.

-Oh, Zayn – Gimió la chica al echar la cabeza hacia atrás, y soltar un grito al sentir como su entrepierna se contraía dándole paso al orgasmo.

No pasó mucho tiempo cuando el moreno cargó a la chica y la depositó sobre el mueble que adornaba aquel lugar. Invitado sacó con rapidez la camisa del chico y la lanzó al suelo. Lo miró deseosa y se relamió los labios antes de hacer un camino de besos que comenzaban en el cuello del chico y continuaban a lo largo de todo su abdomen, mientras que se encargaba de sacar sus pantalones.

Empujó al moreno contra el mueble y se situó encima de él. Capturó sus labios al mismo tiempo que su entrepierna hacía contacto con el miembro erecto del chico; ambos soltaron un jadeo ante aquel roce. La chica comenzó a moverse encima de este, que aún se encontraba cubierto con la tela del boxer. Sus movimientos eran cada vez más rápido y esto mantenía al moreno en una continua tortura. Finalmente se deshizo del boxer del chico y se volvió acomodar sobre él.

-Hazme toda tuya Zayn - Murmuró en su oído.