Re: Una Cita Sorprendente.(Nick y Tu) [Terminada.]

por **Sunny** Jue 26 Jul 2012, 11:53 am

chelis escribió:GUUUUAAAUUUUUU!!!
POBRE DE NIIICCK CREO QUE TENDRAAAAA MUCHAS PESADILLLAAASSS!!!!
JAJAJAJAJAJAJAJAJA
PERO LUUUEGOOOO CREOO QUE TENDRA SUEÑOS MAS PLACENTEROOOSS

Cierto, sueños muy placenteros........

por **Sunny** Jue 26 Jul 2012, 11:56 am

taescaab escribió:Hola Luciana
Hace un rato lei. :)
Me encanta! Es que lily penso en eso junto con Mandy y ahora se viene lo mejor. El encuentro.
SIGUELA PRONTO.

Bienvenida!
jajajaj Me alegro que te guste!
Gracias por pasarte...

por **Sunny** Jue 26 Jul 2012, 11:58 am

mell_jonatik escribió:olaaa nueva lectora!!!
me ha enkntado!"!!
ya quiero saber como van a ser las cosas entre
la rayis y nick :D

siguelaaa

Bienvenida!Gracias por pasarte!

por **ama-jonatik** Jue 26 Jul 2012, 1:45 pm

yyyyyyyyyyyyyyyyyyeahhhhhhhhhhh plis siguela

por **Sunny** Jue 26 Jul 2012, 3:09 pm

ama-jonatik escribió:yyyyyyyyyyyyyyyyyyeahhhhhhhhhhh plis siguela

Ya la sigo!

por **Sunny** Jue 26 Jul 2012, 3:12 pm

Capitulo Tres.

Una Cita Sorprendente.(Nick y Tu) [Terminada.] - Página 4 Blackandwhitequotesword

Sentada en el coche frente a la impresionante fachada de la residencia de Nick Jonas, TN Simmons comenzó a preguntarse si no habría cometido un tremendo error.
Cuando su amiga Tori le había propuesto poner su foto y sus datos en una página Web para solteros, ¡TN había protestado. Pero a pesar de sus objeciones, y sin su consentimiento, Tori las había incluido en la página. Luego llegaron los correos de Nick Jonas, que en un principio TN trató de ignorar. Pero había sido incapaz de no hacer caso a los que le había mandado su hija, Amanda.
Nick resultó ser un interlocutor interesante, y TN fue dejándose envolver por sus palabras y las de su hija. Y sin embargo, ni en sus más locos pensamientos se hubiera podido imaginar que conocería a alguien a través de Internet, ni mucho menos que accedería a un compromiso con él. Pero aún no era demasiado tarde pan cambiar de opinión.
TN le echó un vistazo a la copia del correo electrónico que tenía sobre el asiento del copiloto.

Querida TN:
No puedo esperar a mañana para verte. Eres muy guapa, y pareces una mamá. Papá necesita una esposa. Si vienes te prometo que seré buena.
Con cariño, Amanda.

¿Cómo podía resistirse a aquella llamada suplicante de una niña? De acuerdo, tal vez en algún rincón oculto de su corazón confiaba en que el padre de Amanda fuera el hombre de sus sueños. Parecía encantador en los correos, y tenía toda la pinta de ser alguien como ella, una persona sola en busca de una relación profunda. Y ella podía hablar mucho de soledad. Aunque apenas tenía veintisiete años, TN estaba cansada de quedar con hombres que solo tenían malas intenciones o venían cargados de mentiras. Y ahora había aceptado irse a vivir con una persona de la que no sabía absolutamente nada más allá de lo que había escrito en su correspondencia electrónica.
Vivir con él «temporalmente», se corrigió a sí misma. Si no salía bien, podía marcharse, aunque probablemente no regresaría a su Wisconsin natal. Si no cometía ninguna estupidez, como enamorarse perdidamente de Nick Jonas sin ningún signo que indican que en correspondida, no tendría por qué haber problemas. Pero si él era parecido al hombre que escribía los e-mails, TN tenía que reconocer que ya estaba un poco enamorada de él.
Tras optar por dejar en el maletero el resto de las maletas, se bajó del coche con su bolsa de mano y se dirigió hacia la entrada, con el miedo pisándole los talones. ¿De verdad quería hacer aquello? Lo cierto era que lo único que había hecho hasta el momento era acceder a vivir con Nick de prueba. Por no hablar de la pequeña labor de investigación que había llevado a cabo para averiguar si Nick Jonas era una persona decente. Para ello había contado con la inestimable ayuda del amigo policía de Tori, que le había asegurado que Nick no tenía antecedentes penales. No solo era una persona decente: era un hombre rico que había crecido en una de las familias más reputadas de Chicago. Y al parecer en también un hombre de éxito, a juzgar por el tamaño de su casa, un chalet construido en ladrillo rojo y rodea do de jardines bien cuidados, situado en un próspero vecindario.
Cuando llegó al porche, ¡TN apretó el timbre antes de que le diera por cambiar de opinión. Esperó durante un tiempo que se le hizo interminable a que alguien contestara a su llamada. El corazón le golpeaba con fuerza en el pecho y le habían comenzado a sudar las palmas de las manos.
Si al menos hubiera visto alguna foto de él... No se trataba de que su apariencia física fuera a inclinar la balanza hacia un lado o hacia otro. Dios sabía que los hombres siempre la habían juzgado a ella por ese rasero demasiadas veces. Había aprendido a convivir con su altura, que sobrepasaba la de la media, su casi inexistente cintura, sus caderas excesivas y sus rotundos pechos, aunque muchas veces a lo largo de su vida había suspirado por un cuerpo diferente. Pero había dejado de desear algo que era imposible y había comenzado a sentirse cómoda con el pensamiento de que tal vez alguien la aceptara por cómo era y no por su aspecto físico. Tal vez ese podría ser Nick Jonas. TN estaba dispuesta a pasar por alto su apariencia, cualquiera que esta fuese. Después de todo, lo que importaba era el hombre que es taba detrás de la fachada.
La puerta se abrió en aquel momento mostrando al exterior a un hombre vestido con una camisa de franela, pantalones flojos color caqui, ligeramente calvo y no muy alto. Si aquel anciano tenía veintisiete años, ella tenía la talla treinta y ocho.
Al menos tenía una sonrisa cálida y acogedora.
— Buenos días, señorita. ¿En qué puedo ayudarla?
— ¿Es esta la residencia Jonas? — preguntó ella con timidez.
— Sí, señorita. ¿La envía la agencia de niñeras?
— ¿Agencia? No, se supone que tengo que encontrarme con Nick Jonas. ¿Es usted?
— Ya me gustaría, pero creo que soy algo mayor que él — respondió el hombre soltando una sonora carcajada mientras le estrechaba la mano —. Soy Tobías Jonas, el abuelo de Nick.
— Encantada. Soy TN Simmons — saludó ella —. He quedado aquí con Nick.
— Muy bien, señorita Simmons — dijo el anciano haciendo un gesto con la mano —. Pase, por favor.
Era evidente que el abuelo no estaba al tanto del asunto del compromiso, y ¡TN pensó que sería mejor no hacerle partícipe de ello por el momento.
Lo que encontró en el vestíbulo cuando entró la dejó sin respiración. Una inmensa escalinata de mármol pulido llevaba hasta la segunda planta. A su derecha había un salón decorado con muebles exquisitos y lo que parecían ser auténticas piezas de museo. A su izquierda, una estantería repleta de libros y rodeada de confortables sofás de cuero. Delante de ella, un inmenso pasillo decorado con cerámica pintada a mano parecía extenderse hasta el infinito.
Aquel lugar era de una elegancia inigualable. Sería la casa de los sueños de cualquier persona.
Así que: ¿Qué diablos estaba haciendo allí ella, ¡TN Simmons la simple, de Oshkosh?
— ¡Nick, tienes compañía! — bramó Tobías ante una sorprendida TN.
— ¡Enseguida voy! — respondió una voz masculina con evidente irritación.
— Se está tomando un café — explicó el mayor de los Jonas con una mueca —. Es mejor que no hable usted con él hasta que lo haya terminado. Por las mañanas se comporta como un oso.
— Ya veo.
Estupendo. Un hombre que no disfrutaba de las mañanas, el momento favorito del día para TN.
— ¿Quiere que le enseñe la cocina?
— ¡No! — casi gritó ella.
No quería parecer asustada, pero creía que se ría mejor idea permanecer cerca de la puerta en caso de que tuviera que salir a toda pastilla.
— Quiero decir, que prefiero esperarlo aquí — se explicó —. Gracias.
— De acuerdo. Vendrá en un minuto.
Tal vez un minuto no fuera tiempo suficiente para TN, sobre todo si tenía que prepararse para enfrentarse a un oso.
— Tendría que haber adivinado que no la envía la agencia — comentó Tobías mientras la miraba con aire inquisidor, como si quisiera adivinarle el pensamiento —. No es usted como la última que vino, una flaca que apenas tenía cerebro.
Era obvio que TN no era ninguna flaca, y desde luego en circunstancias normales tenía bastante cerebro, aunque en aquel momento ella misma se estuviera cuestionando su propia inteligencia. Estaba claro que Nick Jonas se había quedado sin niñera. ¿Sería aquella la razón oculta por la que le había pedido que se mudara a su casa?
— Esta misma mañana ha tenido que despedirla — continuó Tobías —. Esa niñera no estaba haciendo bien su trabajo. Esa es otra de las razones por las que Nick está de tan mal humor.

Aquello le proporcionó a TN cierto alivio. Al menos, aparentemente, no la había hecho ir para reemplazar a su niñera.
— Estoy seguro de que se pondrá más contento ahora que está usted aquí — aseguró Tobías con una mueca —. No hay nada como una chica bonita para iluminarle a un hombre las mañanas.
¿Una chica bonita?
— Gracias — susurró ella, cayendo en la cuenta de que probablemente solo estaba tratando de ser educado.
— Lamento perderme su compañía, pero tengo que marcharme — dijo el anciano mirándola con amabilidad tras consultar su reloj de pulsera —. Cuídese, señorita Simmons. Espero volver a verla pronto. Dígale a Nick que la invite otro día. A su abuela le encantaría conocerla.
Y dicho aquello salió por la puerta principal, dejando a TN a solas mientras esperaba al misterioso Nick Jonas.
Con las rodillas temblorosas por los nervios, TN se giró hacia una de las ventanas del vestíbulo y le echó un vistazo a los alrededores. Iluminado por el sol de mediados de agosto, se divisaba enfrente un pequeño parque con columpios y un tobogán, el lugar perfecto para que los niños jugaran bajo la vigilante mirada de sus padres. TN deseó poder quitarse los zapatos y correr hacia allí, pero por muy tentadora que le pareciera la idea, ya no podía escaparse.
Se frotó las manos sudorosas, preguntándose cómo sería Nick Jonas. Tal vez se trataría de una versión más joven de su abuelo, amable y considerado, siempre y cuando tuviera su dosis de cafeína. Pero, ¿qué pensaría de ella? Nick le había dicho en sus e-mails que no le importaba el aspecto físico. Pero tras verla en persona, al completo después de la pequeña foto de carné que había enviado, tal vez cambiaría de opinión.
TN escuchó entonces el sonido de unos pasos a su espalda, indicando que había llegado el momento de la verdad.
Echó los hombros hacia atrás, se dio la vuelta y contuvo un grito ante la visión del hombre que se acercaba a ella. Un hombre guapísimo que llevaba una bata azul marino bajo la que se entreveía una suave mata de pelo negro sobre un pecho bien formado. A la altura de la cadera llevaba unos pantalones de pijama de cintura baja sobre los que se adivinaba un vientre liso como una tabla. Aquel hombre se detuvo un instante antes de reanudar la marcha más despacio y pararse a un metro de ella.
TN tuvo que levantar la cabeza para mirarlo, algo poco habitual en ella teniendo en cuenta su altura. Nick tenía los ojos azules y la miraba con los párpados entornados. El cabello, negro como el ala de un cuervo, estaba revuelto. El conjunto resultaba de lo más sexy, como si acabara de levantarse de la cama.
¿Acababa de levantarse de la cama? Cielos, ¿se había olvidado de su llegada? ¿Se había confundido ella con la hora? ¿Se trataba realmente de él?
— ¿Nick?
— Tú debes ser TN — respondió él con voz ronca tras recorrerla lentamente con la mirada de arriba abajo.
En aquel momento, ella no estaba muy segura de quién era, noqueada todavía por el atractivo de aquel hombre.
— Sí, soy TN. ¿He llegado demasiado pronto?
— Son apenas las ocho de la mañana. Creo que esta hora puede calificarse como temprana, especialmente para un sábado.
— Es la hora a la que tú me dijiste que viniera.
— ¿Ah, sí? — murmuró él frunciendo el ceño.
— Sí, aquí lo tengo — contestó TN rebuscando en su bolsa de mano hasta dar con el último e-mail-. Dice: «Ven a las ocho de la mañana. Así podremos hablar antes de que Amanda se levante».
Volvió a guardar el papel en la bolsa, y al ver que él no respondía, añadió:
— ¿Quieres que vuelva más tarde?
«¿O tal vez nunca?», pensó para sus adentros.
— ¡TN! ¡Has venido!
TN se dio la vuelta y se encontró con una niña pequeña de cabello alborotado vestida con una bata de seda rosa, que bajaba las escaleras todo lo rápido que le permitían sus piececitos. Cuando llegó a la planta de abajo, siguió corriendo hasta abrazarse a las piernas de TN, haciéndola tambalearse.
— Déjame adivinar — dijo TN poniéndose de rodillas y sonriendo —. Tú debes ser el ama de llaves.
— No, soy Amanda — respondió la niña entre risas —. Pero puedes llamarme Mandy como mi papá, si lo prefieres.
Al ver la sonrisa inocente de aquella preciosa niña, TN se quedó completamente enamorada.
— Me gustaría llamarte Mandy, si tu papá está de acuerdo.
Levantó la vista para observar a Nick, que las contemplaba desde las alturas y no parecía estar muy contento.
— Mandy, ¿por qué no te vas arriba un momento? Me gustaría hablar con TN a solas.
— Yo también quiero hablar con ella — aseguró la niña haciendo un puchero.
— Luego, Amanda Elizabeth.
La pequeña bajó la cabeza e hizo amago de empezar a llorar, pero TN la abrazó sin dudarlo.
— Te diré lo que vamos a hacer, cariño: ¿Por qué no subes, te vistes y buscas tus juguetes favoritos? Yo iré dentro de un momento para que me los enseñes.
— ¿Me lo prometes?
— Te lo prometo.
— ¿No vas a marcharte?
TN sintió que se le encogía el corazón dentro del pecho. Era obvio que Amanda se había sentido abandonada en alguna ocasión anterior, tal vez en muchas. Quizá su padre era de los que me tía mujeres en su casa y luego las expulsaba de su vida en cuanto Amanda comenzaba a tomarles cariño.
— No me marcharé ahora mismo — aseguró TN incorporándose.
Aquello era lo único que podía prometer por el momento, ya que la decisión tenía que tomarla Nick.
— Subiré en cuanto tu papá y yo hablemos.
— Vale — replicó Amanda con un gesto de desilusión.
La niña comenzó a subir las escaleras muy despacio, mirando atrás a cada paso para comprobar que TN cumplía su promesa.
Cuando la pequeña hubo desaparecido de su vista, TN se giró hacia Nick, que se había atado la bata, tapándose el pecho por completo. Pero aquel gesto no le había hecho parecer menos atractivo, ni menos inquieto.
Nick miró un instante al techo antes de fijar la vista en ella.
— Escucha, TN, tengo algo que decirte.
Al escuchar la gravedad de su tono de voz, ella no tuvo ninguna duda de lo que iba a decirle. Tras haberla mirado bien, seguro que había cambiado de opinión. TN miró hacia la escalera y vio que estaba vacía. Aun así, no quería que Amanda escuchara cómo la rechazaba su padre.
— ¿Podemos hablar en algún lugar más privado?
— Claro. Por aquí.
TN siguió a Nick Jonas a través del inmenso pasillo, preparándose para el momento en que él le dijera que aquello había sido un lamentable error.

por **aranzhitha** Jue 26 Jul 2012, 3:53 pm

awwww la niña es un amor :hug:
Nick que terco es a veces :roll:
Siguela!!!!

por **chelis** Jue 26 Jul 2012, 6:33 pm

PEEE.. PEEEROOOO!!
AAAII PON OOOTROOOO POOOORRRFIISSSS AAANDAAAAA SIIIIIIII

por **ElitzJb** Jue 26 Jul 2012, 7:58 pm

pero como la dejas
en la parte mas intrigante de todo el capitulo
por favor síguela quiero mas capítulos
la niña es un amor
sigue

por **chelis** Jue 26 Jul 2012, 8:08 pm

por **Caro91** Vie 27 Jul 2012, 1:23 am

ahhhhh me desaparecí unos días
pero estoy de vuelta y lo mejor con capítulos que leer... :D

ame a Amanda toda linda; pero lo mejor la abuela hahahahhahahahhahahahhahaa bien cool, es la onda :P ... :cheers:

bueno síguela
espero pronto más capítulos

por **Sunny** Vie 27 Jul 2012, 10:10 am

aranzhitha escribió:awwww la niña es un amor :hug:
Nick que terco es a veces :roll:
Siguela!!!!

ajajajja Si aparte de sexy Nick es terco..
Ya la sigo!

por **Sunny** Vie 27 Jul 2012, 10:11 am

chelis escribió:PEEE.. PEEEROOOO!!
AAAII PON OOOTROOOO POOOORRRFIISSSS AAANDAAAAA SIIIIIIII

Ya subo....

por **Sunny** Vie 27 Jul 2012, 10:12 am

nyJB escribió:pero como la dejas
en la parte mas intrigante de todo el capitulo
por favor síguela quiero mas capítulos
la niña es un amor
sigue

Mandy es una ternura, estoy de acuerdo con vos!
Ya subo...

por **Sunny** Vie 27 Jul 2012, 10:14 am

Caro91 escribió:
ahhhhh me desaparecí unos días
pero estoy de vuelta y lo mejor con capítulos que leer... :D

ame a Amanda toda linda; pero lo mejor la abuela hahahahhahahahhahahahhahaa bien cool, es la onda :P ... :cheers:

bueno síguela
espero pronto más capítulos

Ya te extrañabaaaa! jajajajajajajaj
Ya la sigooo

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