O W N
¡Conéctate y ven a divertirte con nosotr@s! :)
Si no estás registrado, hazlo y forma parte de nuestra gran comunidad.
¡La administración ha modificado otra vez el foro, y los Invitados ya pueden ver todas las secciones! Aún así, para comentar y crear temas debes tener una cuenta.

Cualquier duda, queja o sugerencia que quieras darle al staff, éste es nuestro facebook: https://www.facebook.com/onlywebnovels

¡IMPORTANTE!, los Mensajes Privados de los Invitados no serán respondidos por la administración. Te esperamos en nuestro facebook (:

Atte: Staff OnlyWns.

Unirse al foro, es rápido y fácil

O W N
¡Conéctate y ven a divertirte con nosotr@s! :)
Si no estás registrado, hazlo y forma parte de nuestra gran comunidad.
¡La administración ha modificado otra vez el foro, y los Invitados ya pueden ver todas las secciones! Aún así, para comentar y crear temas debes tener una cuenta.

Cualquier duda, queja o sugerencia que quieras darle al staff, éste es nuestro facebook: https://www.facebook.com/onlywebnovels

¡IMPORTANTE!, los Mensajes Privados de los Invitados no serán respondidos por la administración. Te esperamos en nuestro facebook (:

Atte: Staff OnlyWns.
O W N
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Conectarse

Recuperar mi contraseña

Últimos temas
» micky ojos verdes
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyAyer a las 8:09 am por MickyEche

» —Hot clown shit
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyDom 12 Mayo 2024, 8:58 pm por Jigsaw

»  Goliath
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyDom 12 Mayo 2024, 2:24 pm por Opal

» poor dear pamela
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyVie 10 Mayo 2024, 5:25 pm por lantsov

» moonchild.
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyVie 10 Mayo 2024, 10:34 am por slythxrin princxss.

» Devil's advocate
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyMar 07 Mayo 2024, 8:25 pm por lovesick

» Live In Orange
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyMar 30 Abr 2024, 7:52 pm por ~Susie ∞Wallflower∞

» Our colors are grey and blue
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyMar 30 Abr 2024, 3:01 am por Jaeger.

» forever.
Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 EmptyLun 29 Abr 2024, 6:03 pm por kesshoku.

novedades

00 . 01 Anuncios del mes febrero.
00 . 02 Actualización del PROTOCOLO, nueva medida obligatoria de avatares.
00 . 03 Remodelación del foro febrero del 2017.
00 . 00 Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit.
administradora
Rumplestiltskin. ϟ Jenn.
miembros del staff
Beta readers
ϟ hypatia.
aka Kate.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ dépayser
aka Lea.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ youngjae
aka .
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Stark.
aka Cande.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Baneo
ϟ Ariel.
aka Dani.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ ceonella.
aka Cami.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Ayuda
ϟ Ritza.
aka Ems.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Charlie.
aka idk.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Limpieza
ϟ Legendary.
aka Steph.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ chihiro
aka Zoe.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Kurisu
aka Teph.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Calore
aka idk.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Eventos
ϟ ego.
aka Kalgh/Charlie.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Asclepio.
aka Gina.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ mieczyslaw
aka Alec.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Tutoriales
ϟ Kida.
aka Ally.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Spencer.
aka Angy.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Diseño
ϟ bxmbshell.
aka Mile.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ yoongi.
aka Valu.
MP ϟ Ver perfil.
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.

Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Página 5 de 8. Precedente  1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8  Siguiente

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por chelis Sáb 01 Feb 2014, 3:04 pm

;););)
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Sáb 01 Feb 2014, 6:07 pm

Chicas mañana les subo maratón, se los prometo ñ_ñ
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por chelis Sáb 01 Feb 2014, 8:57 pm

Okiiiisss
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por aranzhitha Sáb 01 Feb 2014, 11:17 pm

Síguela!
aranzhitha
aranzhitha


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por chelis Dom 02 Feb 2014, 8:17 am

;););););)
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Dom 02 Feb 2014, 11:21 pm

Capítulo Seis




He estado investigando un poco a tu novio —dijo Toby, moviendo la cabeza con un gesto de desaprobación mientras tomaban una copa en un bar de moda—. No tiene nada que ver contigo.
—¿Qué me dices del tacto?
—Se supone que los amigos deben ser sinceros. Por lo que tengo entendido, Joe Riccardi parece decidido a tener exactamente la mala reputación que se le atribuye.
—¿En qué sentido? —preguntó _____, algo molesta.
—En todos los sentidos. Es un tiburón en los negocios y colecciona mujeres con la misma facilidad con la que un cuchillo atraviesa la mantequilla. ¿A qué estás jugando? Tú no eres así…
—Tal vez Joe sea diferente conmigo. Además, no sé por qué estamos hablando de él…
—¿De que es millonario? ¿De que sólo hace unas pocas semanas que lo conociste? ¿De que él es un predador urbano y tú una ratoncita de campo? No tienes nada en común con ese hombre. Es natural que esté preocupado por ti.
—Sin embargo, cuando hablé contigo ayer, me pareció que aprobabas la relación. Me dijiste que necesitaba pasión en mi vida.
—¿Dónde estuviste anoche?
—¿Por qué?
—No quería ser yo quien te lo dijera, pero según el periódico que he estado leyendo mientras desayunaba, Joe Riccardi estuvo de copas con tres modelos anoche.
_____ se quedó atónita. Sentía un dolor tan terrible que no podía ni hablar ni respirar. Le habría gustado replicar que Joe había estado con ella la noche anterior, pero él se había marchado de la casa y, con el humor que llevaba, lo más probable era que hubiera buscado la compañía de mujeres que le dijeran lo maravilloso que era:
—¿Acaso no lees los periódicos?
—No los que dedican espacio en sus páginas a rumores como ése.
—No creo que sea un rumor, _____.
_____ trató de serenarse. ¿Por qué le dolían tanto aquellas palabras? ¿Cómo podía sorprenderse cuando Joe jamás le había prometido fidelidad?
—Tú eres una mujer sincera y leal y te mereces un hombre mejor que ése —afirmó Toby.
—Eso no me importa. ¿Acaso crees que no sé que Joe y yo no vamos a durar ni cinco minutos? —comentó, tratando de sonreír—, pero bueno, tengo veintiséis años y sentía que había llegado el momento de correr algunos riesgos.
A partir de aquel momento, la tarde perdió la chispa. Le encantaba hablar con Toby, pero no se le ocurría otro tema que Joe. No hacía más que imaginárselo ligando con un grupo de hermosas mujeres.
—Te recuerdo que yo te apoyare siempre. Incluso cuando esté en el extranjero, puedes llamarme cuando quieras.
Al otro lado de Londres, Joe estaba trabajando. O, al menos, intentándolo. No hacía más que caminar de arriba abajo por su despacho. Finalmente, no lo pudo resistir más y llamó a Franco para saber exactamente dónde estaba _____. Una hora más tarde, entró en el mismo club al que ella había ido con Toby y la vio allí con su amigo. Con su cabello rizado como siempre, iba vestida con unos sencillos vaqueros y una camiseta azul.
Se dirigió hacia ella mientras Franco se quedaba en la barra. _____ sólo se dio cuenta de que él había llegado cuando la rodeó con un brazo y dijo:
—Ha llegado el momento de que digas buenas noches.
Ella se dio la vuelta y sintió que el corazón le daba un vuelco. El resentimiento y la emoción se mezclaron en un mismo sentimiento.
—¿Cómo sabías dónde estaba?
—Franco te acompañará a la limusina. Quiero charlar con tu amigo… en privado bellezza mia.
—Joe, por el amor de Dios…
—Vete con Franco.
—¡No te atrevas a tocar a Toby! —exclamó ella, presa del pánico.
—En ese caso, vente a casa conmigo.
—No pienso ir a ninguna parte contigo —replicó _____. Sintió que su ira iba escalando como respuesta directa a los fieros sentimientos que llevaba experimentando toda la tarde.
—Me llamo Toby James… por si a alguien le interesa saberlo —dijo Toby secamente, asombrado de lo que estaba viendo.
—A mí no —replicó Joe, sin mirarlo siquiera.
—Eres un grosero… ¡No tienes modales! —le gritó _____ de repente, sorprendiéndose a sí misma tanto como había sorprendido a Joe.
—Una modelo es infidelidad, dos es avaricia y tres… es absolutamente decadente —le espetó Toby, saliendo en defensa de su amiga.
Muy pálida, _____ se negó a mirar a Joe.
—Vamos a bailar, Toby.
—Creo que deberías solucionar este tema con Joe… porque aquí lo único que estamos haciendo es llamar la atención —le recomendó Toby.
Sin hacerles caso alguno, Joe dio un paso al frente y agarró a _____ por la muñeca con fuerza.
—He dicho que nos vamos.
_____ decidió seguir las recomendaciones de Toby en vez ponerse a gritar allí como una loca. Quería decirle todo lo que le tenía que decir con dignidad. Con la cabeza bien alta, se despidió de Toby y le prometió que le llamaría por teléfono.
—No si yo puedo hacer valer mi opinión —afirmó Joe, mientras se marchaban—. Me dijiste que habías salido con un amigo. Yo te creí…
—Y así es.
—¿De dónde te has sacado la idea de que puedes engañarme? Ahora sé que no puedo confiar en ti, por lo que tendrás que ir acompañada a todas partes.
—No me puedo creer que tengas la caradura de hablarme de ese modo. ¿Acaso no has oído a Toby decir que todo el mundo sabe que estuviste con tres modelos anoche?
—No tengo nada que decir al respecto.
—Pues yo tengo mucho que decir —le espetó _____, cuando ya estaban fuera—. No pienso meterme en tu coche. No hace falta que me lleves.
—No pienso tolerar una escena.
—Bien, pues te lo diré muy claro —dijo ella, cuadrándose de hombros—. Sólo voy a necesitar tres palabras. Se ha terminado.
—¿De qué diablos estás hablando? ¿Qué se ha terminado?
—Joseph Riccardi, te abandono. ¿Quieres que te lo ponga por escrito?
Joe miró a su alrededor y vio que un hombre con una cámara se acercaba rápidamente hacia ellos. Entonces, la tomó en brazos y la metió en el asiento trasero de la limusina.
—Hablaremos de esto en privado.
—¡Pensaba que no tenías nada más que decir al respecto!
El coche arrancó rápidamente. Joe aprovechó el brusco movimiento para abalanzarse sobre ella y besarla.
—Te odio —susurró ella.
—¿Sí? Eso dista mucho de expresar que hemos terminado.
—Como tú quieras. Te aseguro que no tengo tiempo para esto y que no tenemos nada de qué hablar. Tengo que recoger mis cosas e ir a Piglet.
Pasaron unos minutos antes de que el Coches detuviera. Cuando _____ abrió la puerta y descendió, se dio cuenta de que no estaba donde había esperado estar.
—¿De quién es esta casa? ¿Adónde me has traído?
—A mi casa —dijo él, saliendo también del vehículo y acompañándola al interior. Tras decir al servicio que los dejaran solos, se volvió a mirarla—. Deberías sentirte muy honrada. Mi casa es un espacio muy íntimo.
—Estás perdiendo el tiempo. Eres un canalla y no tienes moralidad alguna. Me niego a seguir teniendo algo contigo.
—¿Y dónde estaba tu moralidad esta noche? ¡Has quedado con el hombre del que estás enamorada a mis espaldas!
_____ palideció. ¿Cómo era posible que se hubiera enterado?
—Cuando accediste a estar conmigo, no lo mencionaste a él. ¿A ti te parece que eso es sinceridad?
—No creí que te interesara.
—¡Che idea! Esa es la clase de información que todos los hombres quieren saber de antemano y lo sabes. Cuando te marchaste a verlo esta noche, fue algo más que una cita inocente con un amigo.
¿A ti te parece que tu comportamiento es justo y decente?
—Según un periódico, tú anoche estuviste con tres mujeres. ¿Cuál es el problema? ¡No puedes esperar que yo sea sincera y decente cuando tú te vas por ahí con ésas!
—Te estás poniendo histérica…
—No. Te estoy diciendo la verdad que dijiste que querías, pero creo que ésta no te gusta mucho.
—Nuestro acuerdo no te da el derecho a cuestionar mis movimientos ni a establecer las reglas.
—No importa. Me da igual. Ahora, no pienso quedarme ni un minuto más en esta casa —dijo ella—. Ningún acuerdo es capaz de obligarme a compartir cama con un hombre que va a acostándose con cualquiera.
—Dio mio… Eso no es cierto.
—No hay razón para discutir conmigo. Tal vez mi madre fue capaz de aceptar una relación de este tipo, pero yo no…
—¿Te atreves a compararme a mí con tu padre? —preguntó Joe con incredulidad.
—Lo único que te estoy diciendo es que no voy a consentir que nadie me engañe de ese modo. O soy yo sola o nada. Ni todo el dinero del mundo va a cambiar eso. Ahora, ábreme la puerta.
Joe dijo algo en italiano.
—Prácticamente me tienes secuestrada. No está bien que me mantengas aquí en contra de mi voluntad.
Joe la estaba mirando con inusual intensidad. Al final, respiró profundamente y dijo:
—Anoche no ocurrió nada.
_____ se sintió profundamente aliviada. No se había sentido molesta sólo por orgullo, sino que le había atormentado terriblemente la idea de que él hubiera estado con otra mujer. Se sentía celosa, herida y furiosa.
—No toqué a esas modelos. Simplemente me estaban haciendo compañía. Nada más.
—¿Y permanecieron vestidas?
—Sí —admitió Joe, como si lo estuvieran torturando. No entendía por qué no la echaba de su casa y de su vida. Sin embargo, cuando más se acercaba ella a la puerta, más deseos sentía por apartarla de ella.
—Muy bien —dijo ella, mirándolo a los ojos—. ¿Y crees que ahora podrás ser fiel? No hay razón alguna para que yo me quede si no va a ser así.
—Per meraviglia…
—Sólo me vale un sí.
Joe la observó atentamente. Tenía que ser deseo. Nunca nada le había hecho renunciar a su libertad. Sin embargo, _____ resultaba tan sexy…
—Sí. ¿Te vas a quedar?
—Pero…
—Pero nada. He accedido. Te he dado lo que querías.
Antes de que ella pudiera responder la besó sin refinamiento. Dejó que la provocativa boca se le deslizara por el cuello, provocando que ella gimiera y temblara de placer. Entonces, él abrió una puerta y la empujó contra la pared de una sala tenuemente iluminada. La presión que ejercía contra el cuerpo de _____ provocó unas deliciosas chispas en sus zonas erógenas. Por su parte, ella no dejaba de acariciarle los hombros el cabello, la espalda… hasta que logró interponer las manos entre los cuerpos de ambos y le arrancó los botones de la camisa.
Con una carcajada de satisfacción, Joe siguió acariciándole los pechos, pero siempre sobre la tela de la camisa. La barrera de las prendas le provocó una profunda frustración a ella. _____ necesitaba desesperadamente tocarlo.

De repente Joe la tomó en brazos y la tumbó sobre un sofá. Lleno de impaciencia le quitó los vaqueros y las braguitas. _____ había dado por sentado que iban a subir a un dormitorio, pero todo su cuerpo estaba presa de la pasión y bordeando la desesperación por lo que no emitió queja alguna. Le rodeó el cuello con los brazos mientras él descubría con un sonido gutural lo húmeda que ella tenía la entrepierna. Entonces, la penetró hasta el fondo con un único movimiento.
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Dom 02 Feb 2014, 11:23 pm


Capítulo Seis Segunda Parte
 
_____ arqueó la espalda ante el impacto erótico de aquella penetración y gritó. Joe se retiró lentamente para volver a hundirse en ella. El placer explotó a su alrededor y perdió toda noción del tiempo y la capacidad para razonar. Entonces, Joe apartó la camiseta y el sujetador y le acarició con fuerza los excitados pezones. _____ perdió el control. Gemía de placer, se retorcía de gozo y le suplicaba que no se detuviera, poseída por el fuego del deseo más primitivo. Cuando llegó a la cima de tan delirante placer, un potente orgasmo la sacudió violentamente abrumada por el poder de la experiencia, se abrazó a él con fuerza.
—Eres maravillosa, gioia mia —susurró Joe antes de darle un beso en la frente.
Joe nunca se había sentido atraído por la fidelidad, pero se estaba empezando a dar cuenta de que _____ tenía un algo especial que le daba una nueva dimensión a sus encuentros.
Como sonámbula, _____ se incorporó un poco y, mientras se bajaba la ropa con una mano buscaba los vaqueros con la otra. Ni siquiera se habían desnudado ni llegado al dormitorio. Se sentía avergonzada y no sabía cómo comportarse. Se sentía confusa. Todo en lo que creía estaba patas arriba. Sin embargo, recordó que Joe parecía estar haciendo un verdadero esfuerzo.
Después de todo, aquella noche había ido a buscarla. ¿Se había sentido celoso al verla con Toby? Tal vez Joe no fuera tan frío e insensible como ella creía. Además, había accedido a ciertas cosas con ella. Ya no era todo como él quería.
—Tenemos que damos una ducha —dijo él. Entonces, la tomó de la mano y la llevó arriba.
Acababan de entrar en un dormitorio casi palaciego cuando el teléfono móvil de _____ empezó a sonar. Antes de responder, ella se apartó un poco de Joe.
—Sí, por supuesto que estoy bien —murmuró, avergonzada.
Joe la miró fijamente y dedujo quién la, llamaba. Vio que ella se disculpaba con la mirada y que terminaba la conversación tras prometer que se mantendría en contacto. Ahogó un bostezo con la mano.
—Creo que no deberías aceptar llamadas de ese hombre.
—¿Por qué no? Es mi mejor amigo.
—Estás enamorada de él.
—Pero no va a ocurrir nada. Toby no piensa en mí de esa manera.
—Pero a mí no me gusta.
_____ lo observó con curiosidad. Joe era tan posesivo tan apasionado… No era el hombre frío e insensible que parecía.
—Lo comprendo —dijo ella.
Joe pareció relajarse un poco. La llevó a un enorme cuarto de baño que había dentro del dormitorio y empezó a desnudarla sutilmente, con exquisita sensualidad. Las luces brillantes hacían que ella se sintiera muy tímida, pero ni siquiera eso podía reprimir la excitación que sentía. Joe la poseyó en la ducha. _____ cerró los ojos con fuerza y se rindió a las oleadas de deseo y placer que fue experimentando hasta llegar a un delirante orgasmo. Después, se sintió muy cansada. Joe la cubrió con una toalla.
—Ojalá pudieras mantenerte despierta, passione mia.
—No puedo. Anoche casi no pude dormir…
Joe la depositó sobre la cama y la cubrió con unas suaves sábanas. _____ supuso que él iba a tumbarse a su lado, pero oyó que se abría una puerta.
—¿Adónde vas? —le preguntó, tras incorporarse sobre la cama.
—Mi dormitorio está aquí —dijo él. Sólo iba vestido con unos calzoncillos.
—Pero…
—Yo siempre duermo solo. Te veré por la mañana.
La puerta se cerró. _____ se había pasado toda su vida durmiendo sola, por lo que no comprendía por qué le dolía tanto aquel rechazo. Sin embargo, se sentía tan agotada que muy pronto cayó presa de un profundo sopor.
Se despertó sobresaltada, sin saber qué era lo que la había despertado. Recordó que estaba en casa de Joe y, tras encender la luz, se sentó en la cama. Entonces, oyó un ruido procedente del dormitorio de al lado. ¿Un grito?
Sin pensárselo dos veces, se levantó y tomó la camisa que él había dejado tirada en el suelo. Se la puso rápidamente y abrió la puerta que comunicaba los dos dormitorios. Con la tenue luz del amanecer, vio a Joe dando vueltas sobre una cama muy grande. El terror que había reflejado en su voz causó una profunda impresión en _____ y la empujó a acercarse a la cama. Entonces, le colocó una mano sobre el hombro. Tenía la piel ardiendo.
—Joe, despierta —susurró, zarandeándolo suavemente.
El se sentó en la cama con un repentino movimiento que la asustó. Estaba temblando, murmurando algo en italiano. Se mesó el revuelto cabello y la miró con asombro.
—¿Qué estás haciendo aquí?
—Estabas teniendo una pesadilla.
—Eso es imposible —replicó él, a la defensiva.
—Bueno, yo también tengo pesadillas a veces…
—¿De verdad?
_____ se sentó a su lado y apoyó la barbilla sobre su hombro.
—Yo no estaba allí cuando ocurrió, pero a veces soñaba que veía cómo el coche de mi madre se estrellaba. Entonces, cuando estaba en el internado…
—¿Cuándo fue eso?
—Yo tenía diez años cuando mi padre decidió establecerse con Eva y sus hijas. Desgraciadamente, Penelope y Wanda no me aceptaron demasiado bien y, por mantener la paz, me enviaron a un internado. No me gustó nada.
—¿Se metían contigo las demás?
—Sí, porque las despertaba con mis pesadillas y porque era una llorona. Yo echaba mucho de menos mi casa…
—A mí me pasó lo mismo, pero yo no tenía ningún lugar al que ir —dijo Joe, levantándola para sentársela en el regazo.
—¿Tú también estuviste en un internado?
—Mi madre murió y su generoso jefe me pagó los estudios en un colegio exclusivo. Yo no encajaba. Las madres italianas miman mucho a sus hijos. Yo hablaba muy mal inglés, se me daban bien las ciencias y era muy bajito.
—¿Cómo?
—Sí, era muy bajito. No di el estirón hasta que llegué a la adolescencia.
—¿Se reían también de ti?
—Por supuesto que no.
—Se reían de ti. Lo sé.
—¿Cómo? ¿Con tu bola de cristal bella mia? —le preguntó. Entonces, le metió una mano debajo de la camisa y empezó a acariciarle un seno.
—No intentes distraerme…
Joe la tumbó sobre la cama y se le echó encima con un rápido movimiento.
—¿Es eso lo que estoy haciendo?
—Yo quiero saber… De verdad quiero saber lo que ocurrió para que esa pesadilla te asustara tanto.
Joe palideció y pareció encogerse.
—Me quemaron con cigarrillos, me dieron patadas y me pegaron.
—Dios mío… Joe, eso es horrible. ¿Sigues soñando con ello?
—Sí —admitió él. Aún no había comprendido por qué se lo había contado—. Pero me convirtió en un hombre fuerte. Antes, yo era demasiado blando. Me vino bien…
—¡No digas tonterías! ¡Te maltrataron!
—¿Crees que me merezco que me hagas el amor por compasión?
—A veces puedes resultar verdaderamente ofensivo… pero la respuesta es no… no porque esté enojada contigo, sino porque creo que me, aunque me dé vergüenza reconocerlo, me resultaría muy incómodo porque estoy un poco dolorida.
Joe no había pensado en esa posibilidad. De repente sintió una gran sensación de culpa.
—Puedo ser muy egoísta a veces…
—Tal vez podamos… más tarde.
—Más tarde estaré en Nueva York —anunció él, levantándose de la cama.
_____ giró la cabeza y miró el reloj que había sobre la mesilla de noche.
—¡Dios mío! ¿Es ésa la hora?
—Son sólo las seis y media.
—En menos de una hora darán de comer a los animales en el hotel donde está Piglet y no quiero llegar tarde —dijo, mientras se levantaba de la cama a toda velocidad—. No les importa que yo le dé a Piglet su desayuno porque saben que, si no, no come. Sin embargo, no quieren que interfiera en su rutina diaria y no les gusta recibir visitas entre las ocho y las nueve de la mañana.
—Espera un momento. ¿Me estás diciendo que vas a ese sitio todas las mañanas para darle de comer a tu perro?
—Y también por las tardes… ha perdido mucho peso. Deberías verlo por la webcam. Está muy deprimido. No quiere ver la televisión ni jugar a la pelota.
_____ abandonó la habitación como una exhalación. Mientras se daba una ducha fría, Joe no dejó de soltar maldiciones. Salió del cuarto de baño y fue a ver lo mal que estaba el dichoso Piglet. Y allí estaba el pobre chucho, acurrucado en su camita con dosel con el morro metido entre las patas, los ojos tristes. Efectivamente, en términos caninos, parecía muy deprimido.

Sin embargo, _____ adoraba a su mascota. ¿Por qué no? ¿Cuánto amor y atención había recibido del mentiroso de su padre y de una madre que seguramente sólo la había tenido para destruir el matrimonio de su amante? Tomó el teléfono. Si _____ iba a levantarse todas las mañanas al alba para ir al otro lado de la ciudad para dar de comer al perro, había llegado el momento de liberar a Piglet de su cautiverio.
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Dom 02 Feb 2014, 11:24 pm

Capítulo siete




Joe examinó la sala con gran insatisfacción. Se preguntó por qué cuando creía que el destino le había dado por fin lo que siempre había querido, esto le resultaba tan exasperante. Las mujeres que no se separaban de él en los actos sociales siempre le habían resultado muy irritantes.
En el curso de un mes, había aprendido que _____ no se le pegaba ni trataba continuamente de buscar su atención. De hecho, algunas veces a él le habría gustado esposársela a la muñeca o equiparla con un GPS para saber dónde estaba cuando la quisiera a su lado. Cuando se ponía a hablar con los invitados de Joe, perdía toda noción del tiempo. Era muy popular con los entusiastas de la jardinería, y él tenía que rescatarla con regularidad de los que se aprovechaban de sus conocimientos de horticultura para pedirle Consejos.
—¿Dónde está? —le preguntó por fin a Franco.
Unos minutos más tarde, su jefe de seguridad lo acompañó a la terraza trasera de su impresionante casa de Londres y le señaló el jardín. Con un hermoso vestido azul. _____ estaba mostrándoles una trepadora a un hombre y a una mujer. El hombre era un banquero Suizo libidinoso. El hecho de que estuviera al lado de _____ le ponía los pelos de punta a Joe.
—¿Sabe una cosa, jefe? La señorita Hamilton no sabe que ella podría estar molestándole a usted…
—¿Cómo dices?
—Bueno, es una chica muy simpática a la que le encanta ayudar a la gente.
El encanto de _____ parecía haber conquistado a todos, hasta al duro jefe de seguridad, que siempre había tenido una visión muy negativa del sexo opuesto. Ella era muy amable con todos y se interesaba por ellos y sus problemas.
Desgraciadamente, Joe se sentía bastante excluido de aquella amabilidad general para con todos y este hecho le dolía. _____ no se interesaba excesivamente en él ni cuestionaba sus ausencias. Existía una barrera que ella no superaba nunca. Sin embargo, ¿acaso no le excitaba como ninguna mujer lo había hecho? ¿No era eso lo que le importaba? Ninguna mujer le había dado tanto placer, y se tomaba muchas molestias para poder tener tiempo de estar con ella. También le dedicaba enormes atenciones. Naturalmente, quería que ella estuviera contenta con el papel que ocupaba en su vida, y era un amante muy generoso. Sin embargo, ella no respondía de igual modo a sus esfuerzos por agradarle.
Se ponía la ropa y las joyas que él le daba con indiferencia, cambiándoselas por vaqueros y camisetas a la primera oportunidad que tenía. Ni fiestas, ni galas… Nada parecía entusiasmarle.
Además la había vuelto a reunir con su adorable perrito ¿Se quejaba él de que aquel perro alocado estuviera siempre al acecho para morderlo?
Sin embargo, lo que más le molestaba era la sospecha de que _____ no era feliz. Ella jamás lo había mencionado, pero Joe pensaba constantemente en ello. ¿Echaría de menos a Toby James? La mera sospecha le enfurecía.
Y si ella ya era poco feliz, Joe sabía muy bien que pronto le daría la noticia que terminaría del todo con la poca felicidad que tuviera. Hacía tres semanas había recibido las pruebas que habían revelado que Donald Hamilton era culpable de otro delito más. Joe tenía por fin las pruebas de un fraude que destruiría para siempre la fe que _____ tenía en su padre.
Con el rostro sonrojado por la atención que Johannes Saudan le estaba prestando y las miradas asesinas que les enviaba a ambos la novia de él, _____ respondía las preguntas del banquero. Cuando vio a Joe en la terraza, sintió un profundo alivio.
—Creo que Joe me está buscando…
—¿Y qué hombre no la buscaría? Es usted maravillosa.
—Si me perdona… —susurró ella, sintiendo una profunda repulsión Entonces, se dirigió hacia el interior de la casa.
Joe bajó a su encuentro. Con sólo su mirada, _____ sintió un profundo calor en la entrepierna y se odió por ello.
—Siempre tengo que buscarte… hasta en mi propia casa, bellezza mia.
_____ bajó la cabeza al escuchar aquel reproche y no dijo nada. ¿Qué podía decir? Deliberadamente, se mostraba distante con él. En el dormitorio, siempre estaba donde él esperaba encontrarla porque, según ella creía, allí era donde empezaba y terminaba su relación.
Joe se acostaba con ella, aunque _____ tenía que admitir que ella tenía las mismas ganas de acostarse con él. Lamentablemente, no le resultaba tan fácil enfrentarse a la confusión que sentía.
—Me gustaría verte un poco más cuando celebramos fiestas —protestó él.
—Muy bien.
Joe le tomó la mano y le acarició suavemente la parte interna de la muñeca con el pulgar. Notó que el pulso se aceleraba y que temblaba ligeramente. Cuando ella lo miró, vio que tenía las pupilas dilatadas. Estaba presa de la tensión sexual.
—¿Cómo me haces esto?
—No sé de qué me estás hablando —susurró ella.
—Deja que te lo muestre…
Joe la agarró de las dos manos y la empujó a una habitación. En cuanto comprendió sus intenciones, _____ se puso rígida. Conocía muy bien la mirada que Joe tenía en los ojos en aquellos momentos. En demasiadas ocasiones, él le había demostrado lo débil que era en lo del sexo eligiendo momentos y lugares poco convencionales para saciar su pasión. _____ siempre se rendía, incapaz de resistirse. Sin embargo, en aquella ocasión se imaginó qué pensarían de ella lo invitados si la vieran salir de la sala con el cabello revue1to, el maquillaje corrido y el rostro ruborizado.
—No… Ahora, no. Tus invitados se darán cuenta de que no estamos.
—¿Y que?
—Se imaginaran lo que hemos estado haciendo.
—¿Por qué? —preguntó él con una carcajada.
—Porque se lo imaginarán.
—¿Y por qué tiene eso que importarte bellezza mia? —preguntó él, disponiéndose a desabrocharle el vestido.
—He dicho que no —dijo ella, apartándole las manos—. ¿Por qué iba a importarte a ti? Todos los hombres se pensarán que eres un verdadero macho, pero de mí dirán que soy una ramera.
—¿Qué es lo que te pasa? —preguntó él, mirándola con incredulidad. ¿De dónde vienen todas estas tonterías?
—No se trata de ninguna tontería. No tenemos por qué anunciar cómo es nuestra relación. Además, no pienso sentirme humillada por seres tan despreciables y rastreros como Johannes Saudan.
—¿Qué es lo que te ha dicho?
—No me ha dicho nada, pero sé lo que está pensando y no es el único…
—¿Quieres hablar con un poco de sentido común?
—Me has puesto en el escaparate para todos ellos como si fuera un caniche que ha ganado una competición. Los diamantes que llevo alrededor del cuello son el equivalente de un collar…
—Pues a mí me parece que las mujeres miran con mucha envidia ese collar.
—¡Es como si me hubieras marcado con tu sello! ¡No me importa el dinero que valga! —le espetó _____—. No lo entiendes, ¿verdad? Crees que ser tu amante es una especie de honor…
—¡Santo Cielo! Apártate de la puerta —le ordenó Joe—. Ahora, voy a ir a hablar con Saudan sobre lo que te ha dicho…
—Ya te he explicado que no me ha dicho nada no era necesario. Cree que se me puede comprar y, cuando me miró, yo supe que se estaba preguntando cuánto tardarías en volver a ponerme en el mercado. Para él, soy tan sólo un bien que se puede comprar y cree que me puede tener también…
—¡Te aseguro que voy a matar a ese tipejo!
—¿Por qué?
—¡Dannazione! ¡Te ha disgustado!
—¿Y a ti qué te importa eso? —le preguntó ella, colocándose delante de la puerta para impedirle el paso. Entonces, sin que pudiera impedirlo, los ojos se le llenaron de lágrimas.
Joe odiaba las lágrimas femeninas y jamás se había dejado influir por ellas. Sin embargo, cuando vio a _____ llorar, se sintió profundamente aliviado, como si ella le hubiera proporcionado la clave que necesitaba para comprenderla. Estaba disgustada, triste. No podía tomar en serio todo lo que ella le había dicho. Inmediatamente, la frustración que sentía empezó a remitir. De repente, todo pareció más sencillo. Extendió las manos y la abrazó.
—Yo no lloro… no… Estoy bien —musitó. Justo en aquel momento, su teléfono móvil empezó a sonar—. Si me perdonas…
Era su hermanastra Penelope.
—Tenemos que hablar contigo urgentemente —afirmó la joven, con un tono de voz que provocó ansiedad de _____—. Se trata de un asunto familiar del que no puedo hablar por teléfono. ¿Puedes venir pronto?
—Tomaré el primer tren mañana —prometió, antes de cortar la llamada. Entonces, miró a Joe—. Tengo que regresar a mi casa durante un par de días. Se trata de un problema familiar.
—Te acompañaré —dijo él, frunciendo el ceño. —Gracias, pero no creo que sea buena idea. Se trata de un asunto familiar privado.
Joe pensó que lo más probable era que Donald se hubiera vuelto a meter en un lío. Desde que descubrió lo de Furnridge Leather, supo que era cuestión de tiempo que se descubrieran el resto de los negocios sucios de Donald Hamilton. Sin embargo, sintió pena por _____.
—¿Crees que podrías cuidar de Piglet? A mi madrastra no le gustan los perros y creo que se sentiría algo traumatizado si volviera a dejarlo en el hotel para perros.
Joe se sintió muy orgulloso de que ella le confiara a su mascota ya que, sin duda, Piglet era su posesión más preciada.
—No hay problema. Haremos que esta noche sea para recordar, bellezza mia —añadió, haciendo que _____ se deshiciera por dentro de deseo.
A la mañana siguiente muy temprano, ella se despertó y oyó ruidos en la habitación de al lado, señal de que Joe estaba despierto. Jamás dormía con ella. Cuando por fin entró en la de _____, estaba ya vestido con un elegante traje oscuro. Se acercó a la cama y la miró con adoración. Estaba tan encantadora…
—Dio mio… No sé si voy a poder dejarte marchar. Anoche fue maravilloso…
_____ se sonrojó, pero se movió bajo las sábanas como una gatita.
—Deberías haberte quedado —dijo, sin poder contenerse.
—Tengo una reunión dentro de una hora. Es muy importante.
Sin embargo, había sido la primera vez que _____ se le había insinuado. Joe se sentía casi mareado por el triunfo que aquello suponía. Llamó a Franco y le dijo:
—Informa a mi despacho que voy a llegar tarde.
Se aflojó la corbata y se la quitó, antes de hacer lo mismo con la chaqueta. Entonces, sin dejar de mirarla, empezó a desabrocharse la camisa con desesperante lentitud.
—¿Qué estás haciendo? —preguntó ella, asombrada—. Creía que tenías una reunión…
—Haz que merezca la pena haberlo pospuesto —susurró, desafiándola, mientras se tumbaba en la cama a su lado para besarla apasionadamente…
 
 
Joe la despertó a mediodía. Mientras ella se sentía agotada, él parecía lleno de energía. Evidentemente, se había dado una ducha porque tenía el cabello mojado y brillante.
—Has perdido el tren. Te está esperando el chófer para llevarte al helipuerto. Puedes ir a ver a tu familia pero no tardes demasiado en volver.
—Muy bien —comentó ella, algo azorada ante la idea de ir en helicóptero a Somerset.
Joe le tomó una mano y le besó suavemente las yemas de los dedos. Entonces, la contempló con satisfacción.
—Enhorabuena, bellezza mia.
—¿Por qué?
—Porque por fin siento que me perteneces.
_____ palideció.
—Así era como yo quería que fuera y como tiene que ser. Jamás me habría conformado con menos —añadió él.
—¿De qué sirve el amor verdadero? Ahora eres más mía de lo que nunca serás de ese hombre.
Con eso, se dispuso a marcharse. Sin embargo, antes de que saliera del dormitorio, ella lo llamó.
—Joe…
—¿Sí? —respondió él, dándose la vuelta para mirarla con satisfacción en el rostro.
—¿En quién crees que pienso cuando hago el amor contigo? —le espetó, arrepintiéndose enseguida de lo que había dicho. Tal odio no era propio de ella, pero cada vez que Joe le hacía daño reaccionaba de las maneras más imprevisibles.
Joe la miró con el rostro imperturbable. Ella notó que palidecía y supo que aquel comentario había dado en el blanco. Sin embargo, se avergonzaba más de lo que se alegraba de su éxito. Arrepentida, se echó a temblar. Fue como si la temperatura hubiera bajado repentinamente.
Cuando él cerró por fin la puerta del dormitorio, _____ se cubrió el rostro con las manos. ¿Qué le estaba ocurriendo? ¿Qué le había hecho Joe? ¿Desde cuándo había sido tan vengativo?

¿Cuándo había pensado en Toby estando en presencia de Joe? Nunca. Ese hecho la asombró y la asustó a la vez…
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Dom 02 Feb 2014, 11:25 pm

Capítulo 8




—Viajas con todo lujo: helicóptero privado y una limusina para que te traiga hasta nuestra casa —le dijo su padre con admiración, cuando los dos estaban en su despacho—. Me siento muy impresionado. Evidentemente, Joe Riccardi te tiene en mucha estima.
—No lo sé. Simplemente perdí mi tren —respondió _____. Se había estado preguntando si Penelope había exagerado sobre la crisis familiar. Su padre no parecía preocupado. De hecho, parecía muy relajado—. Penelope hizo que la situación aquí pareciera muy grave. He estado muy preocupada.
—En ese caso, te aliviará saber que el problema que tengo en la actualidad es simplemente una consecuencia del de Furnridge —comentó su padre—. Yo tenía mucho lío e hice lo que hace la mayoría de la gente en una crisis. Tomé un poco prestado de Pedro para pagar a Pablo.
—No te comprendo…
—Me temo que se han descubierto ciertas irregularidades en las cuentas del comité de Massey. Por supuesto, con el tiempo suficiente, yo las habría enmendado. Desgraciadamente, los pesados del comité demandan un pago inmediato.
—¿Estás diciendo que robaste dinero del Fondo de los Jardines de Massey… también? ¿En que diablos estabas pensando?
—No me hables en ese tono de voz, _____.
—Me resulta imposible creer que, después de todas esas galas para recaudar fondos y todo los discursos que diste, te quedaras tú con el dinero que la gente nos entregó —susurró atónita—. ¿Por qué no lo mencionaste el mes pasado?
—Evidentemente porque esperaba poder devolverlo, pero eso ha sido imposible. Estoy en el paro y Eva y yo casi no nos podemos permitir vivir en esta casa. Ayer, nos llamaron dos miembros del comité y nos dijeron que van a llamar a la policía.
—¿De cuánto dinero estamos hablando? —le preguntó ella, abrumada por la tensión.
Donald mencionó una suma que la dejó atónita.
—Dios mío… ¿Qué vamos a hacer?
—Bueno, tú podrías vender un collar de diamantes o algo así para salvarnos el pellejo —dijo una voz femenina a sus espaldas.
_____ se dio la vuelta y vio que sus hermanastras y su madrastra acababan de entrar en la sala.
—O tal vez le podrías pedir a tu rico amante que pague las deudas de tu padre —añadió Penelope con el mismo tono sarcástico.
—No puedo hacer eso —dijo, sin saber cómo explicar que ella no se consideraba dueña de ninguna de las joyas que Joe le había dado.
—Desgraciadamente, tú eres la única persona que nos puede ayudar en estos momentos —afirmó su padre—. No tenemos dinero ni podemos tener esperanzas de conseguir un préstamo.
Con ese comentario, Donald Hamilton salió del despacho.
—Yo tampoco puedo hacer nada —dijo _____—. Yo tampoco tengo dinero.
Eva habló por primera vez.
—Si no encuentras el modo de enmendar esta situación discretamente, te aseguro que me divorciare de tu padre y entonces ni siquiera tendrá un lugar en el que vivir. Ya estoy harta. No pienso tolerar esto ni un minuto más.
—Entiendo cómo te sientes…
—No lo creo. Mientras nuestras vidas se hacen pedazos y tenemos que pensar cómo pagarnos las facturas, tú has estado viviendo como una reina —le espetó Penelope. He visto tu fotografía en las revistas de mayor tirada y tu nombre en las columnas de sociedad.
—Comprendemos que te habría resultado difícil presentarle a Angelo un listado de peticiones durante la primera semana de vuestra convivencia, pero ya va siendo hora que dejes de ser una egoísta y compartas tu buena suerte con tu familia —apostilló Wanda.
—Ya basta, niñas —murmuró Eva—. Estoy segura de que _____ ha comprendido lo que le queremos decir.
—No creo que conseguir el dinero sea un problema para ti —afirmó Penelope—. Después de todo, llevas una fortuna a cuestas. Ese bolso debe de costar por lo menos mil quinientas libras.
_____ contempló el bolso horrorizada. ¿Tan caros eran los bolsos? No tenía ni idea de lo que valían ninguno de los accesorios que llevaba por que no los había comprado ella.
—Os repito que no tengo dinero propio y que no puedo pedirle a Joe que me lo dé
—¿Cómo puedes ser tan egoísta? —le espetó Wanda.
—No soy una prostituta —dijo, sin poder contenerse—. No le voy a pedir dinero.
Su madrastra la miró con desprecio.
—No exageremos, _____. Por lo que he visto, Joe Riccardi necesita que lo animen muy poco para mimarte todo lo que quieras y más.
—¡Dejad de hablarme como si estuviera con Joe porque yo quiero o como si fuera algo maravilloso para mí! Yo estaba enamorada de otra persona. Joe me ofreció un trato… Si me acostaba con él, retiraría los cargos contra papá.
Se arrepintió de su confesión inmediatamente, al observar cómo las tres mujeres la observaban completamente boquiabiertas.
—No lo sabía —dijo Eva—. Me parece algo completamente inmoral y espero que no nos culpes por la decisión que tomaste. No necesitamos conocer los sórdidos detalles, gracias.
—¿Estás diciendo que Joe Riccardi tuvo que chantajearte para que te acostaras con él? Madre mía, yo me habría arrojado a su cuello ¿Qué diablos te pasa? —le preguntó Wanda.
—Eso resulta muy sexy —comentó Penelope, sin ocultar su envidia—. Eres tan patética, _____. . .Ninguna mujer normal se estaría quejando de algo así.
Asombrada por las reacciones de las tres mujeres, _____ salió del despacho. Se quedó muy sorprendida al ver que Toby la estaba esperando en el recibidor. Enseguida comprendió que su amigo, como miembro del comité, conocía perfectamente todo lo ocurrido.
—Lo descubrí ayer. Me ofrecí voluntario para darte la noticia, pero no podía hacerlo por teléfono…
—_____… —le dijo su padre desde el otro lado del pasillo.
—Sácame de aquí —le suplicó _____ a Toby antes de volverse para hablar con su padre—. Mira, no sé lo que decir en estos momentos. Tengo que pensar las cosas. Por favor, no esperes que sea capaz de hacer un milagro. Te llamaré.
Ignorando las protestas de su padre, _____ salió de la casa y dejó que Toby la acompañara a su coche.
—Mira, tengo una habitación en el Four Crowns para esta noche. ¿Quieres que vayamos allí para hablar?
El teléfono de _____ empezó a sonar. Era Joe. Sin poder imaginar cómo iba a decirle lo que había hecho su padre, lo desconectó.
Cuando llegaron al hotel, los dos fueron a cenar al restaurante. No hablaron del problema de Donald hasta que no estuvieron en la habitación de Toby con una botella de buen vino.
—Te seré sincero. El comité está deseando llamar a la policía, pero yo les persuadí de que esperaran un poco. Como no quieren que este escándalo se haga público por si evita que la gente siga haciendo donaciones al fondo, han accedido ¿Crees que Joe va a ayudar a tu padre en esta ocasión?
—Lo dudo…
—Sin embargo, me pareció que te tiene mucho afecto. Por respeto a ti, no te voy a decir lo que pienso de tu padre.
—Te lo agradezco.
Justo en aquel momento, alguien llamó a la puerta. Cuando Toby se levantó para abrir la puerta, _____ sintió que se le caía el corazón a los pies. Era Joe.
Se levantó inmediatamente de la cama, donde habían estado sentados y notó inmediatamente la ira que brillaba en los ojos de Joe. Cuando avanzaba hacia él, vio cómo Joe pegaba a Toby, que cayó hacia atrás, sobre la cama.
—¿Estás loco? —le preguntó ella, atónita.
—¡Estabas tumbada en su cama! —gritó Joe—. Mantente al margen de esto. Este asunto es entre él y yo.
—No soy un cobarde, pero no le veo sentido a lo de pegarse —gruñó Toby, frotándose la mandíbula.
Joe lo observó con desprecio.
—¡Ni siquiera es capaz de pelear por ti!
—¿Y por qué iba hacerlo? Es gay —dijo _____, acercándose a Toby para ver si estaba bien.
—¿Gay? —preguntó Joe, con incredulidad.
—Gay —afirmó Toby, mirando con sorpresa a _____—. ¿No te lo había contado ella?
—No era asunto de Joe —declaró _____.
Joe dio un paso al frente y extendió la mano hacia Toby para ayudarlo a que se levantara —Lo siento. Te debo una sincera disculpa. ¿Por qué no me lo dijiste, _____? ¿Por qué no era asunto mío?
_____ se sonrojo, pero no pudo responder. Se sentía enfadada y culpable de que Toby hubiera resultado herido. Aunque le costaba reconocerlo se había alegrado al darse cuenta de que Joe la había seguido a Somerset.
—¿Vas a venirte a mi hotel? —le preguntó Joe.
De mala gana, _____ asintió y se marchó con él. Cuando estuvieron a solas, le espetó:
—¿Cómo has podido hacer eso?
—Tú eres la responsable.
—¿Por que?
—Cuando te llamé por teléfono, no contestaste. Te marchaste de la casa de tu padre con el hombre del que me dijiste estabas enamorada. Cenaste con él y luego subiste a su habitación. ¿Qué querías que pensara?
—No todo el mundo está tan obsesionado con el sexo como tú. Sigo sin comprender cómo has sabido dónde estaba.
—Yo siempre sé dónde estás. Cuando sales, siempre te está vigilando alguien del equipo de Franco. Yo soy un personaje público y tengo enemigos. Aunque sólo sea de la amenaza de los paparazzi, necesitas protección.
—Es como estar bajo supervisión policial. ¿Por qué no me lo habías dicho?
—Tu seguridad es lo que más me preocupa. Ahora, háblame de Toby. ¿Cómo te las arreglaste para enamorarte de un homosexual?
—Era un secreto y yo no lo sabía cuando lo conocí. Cuando me lo contó, era demasiado tarde.
—¿Cómo de tarde?
—¿Cuándo te enamoraste tú por última vez? —le preguntó ella, sin responder a la pregunta de Joe.
Joe se sintió como si hubiera caído en arenas movedizas. No creía en el amor. El amor era una palabra de cuatro letras que no había vuelto a salir de sus labios desde la infancia y no era algo de lo que estuviera dispuesto a hablar. Su reserva en ese sentido era bien conocida. Joe Riccardi jamás contestaba preguntas personales y nadie se las hacía para no molestarle.
—¿Cómo es que tú me puedes preguntar a mí, pero yo no puedo preguntarte a ti? —replicó ella, al ver que él no respondía.
—Yo no me enamoro. ¿De acuerdo?
—¿Quieres decir nunca?
—¿Y qué? —replicó él, enfurecido por la mirada de compasión que ____ le estaba dedicando, como si fuera un lisiado emocional.
_____ deseó no haberle preguntado nada. Sentía una profunda tristeza por él.
—Mi abuela decía que tiene que haber de todo en la viña del Señor. Supongo que si yo hubiera encontrado a alguien del que mereciera la pena enamorarse, me habría olvidado de Toby. Aunque habría tenido que ser una persona muy especial. Toby es muy creativo. Diseña parques y jardines. Tenemos mucho en común…
—Tierra, plantas… Vaya cosa.
—Toby es muy especial.
Aunque no estaba buscando el amor, Joe se sintió herido. Toby era perfecto, imposible de comparar con el resto de los mortales. Joe decidió que seguir hablando del tema estaba por debajo de su dignidad.
Era casi medianoche cuando llegaron al hotel Perevil House. Un ascensor privado los llevó a una opulenta suite que comprendía varias habitaciones. En el momento en el que _____ entró por la puerta Piglet se abalanzó sobre ella para darle la bienvenida.
—Madre mía, ¿te lo has traído también? Gracias —susurró mientras acariciaba suavemente al perro.

Joe se preguntó cómo iba a dejar solo a un perro que se ponía en huelga de hambre sin _____. Piglet tenía que ser el perro que había llamado la atención con más éxito en toda la historia de la raza canina.
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Dom 02 Feb 2014, 11:26 pm

Capítulo 8 Segunda Parte




A la mañana siguiente, _____ se despertó a las nueve. A pesar de todo lo ocurrido, había dormido como un tronco y Joe no la había molestado. Tal vez se había dado cuenta de lo cansada que ella estaba. Se sorprendió que no le preguntara por la crisis familiar de la noche anterior. Sin embargo, ¿por qué iba a interesarle? Pero si no le interesaba, ¿para qué había ido a buscarla a Somerset?
Ya no podía seguir evitando la desagradable decisión que tenía que tomar. ¿Iba a pedirle a Joe que ayudara a su padre o no? No sabía qué hacer.
Cuando ella salió a desayunar, Joe la saludó con una inclinación de cabeza. Estaba sentado al escritorio, colgado al teléfono y hablando rápidamente en italiano. Ella lo observó mientras tomaba cereales con leche. Pensando en la conversación que la esperaba, se le había quitado el apetito.
Joe colgó el teléfono y se acercó a ella. Estaba tan guapo como siempre.
—¿Has dormido bien? —le preguntó.
—Sí, gracias.
—Yo no —dijo, apoyándose contra la mesa del desayuno—. Ven aquí.
La ayudó a levantarse y al ver el vestido que ella se había puesto, sonrió. Era azul y se ajustaba perfectamente a las curvas del cuerpo de _____.
—Te elegí ese vestido en Nueva York.
_____ se sorprendió.
—No sabía que tú eligieras mis cosas.
—Bueno, en realidad sólo fueron un par de cosas. He decidido que necesitamos unas vacaciones —anunció—. A finales de semana nos vamos a Cerdeña.
—¿Hablas en serio?
—Tengo una casa allí… que tiene un enorme jardín. Te encantará. Como tus plantas, yo necesito gran cantidad de sol y de atención.
_____ lo miró atentamente.
—¿No quieres saber por qué he tenido que ir a ver a mi familia?
—Me lo imagino —admitió él.
—¿Cómo? Es decir, no me has dicho nada…
—¿Qué cómo? Tengo empleados en Furnridge y los rumores sobre lo ocurrido con el jardín de Massey empezaron a correr como la pólvora hace unos días. Entonces, yo indagué un poco más. Por eso estoy aquí.
—No se trata de un rumor.
—No.
—Mi padre se llevó dinero y lo utilizó para tratar de ocultar las sumas que se había llevado de Furnridge.
—Mira, prefiero que no tengamos esta conversación —dijo él, levantando un dedo a modo de advertencia —. No me gusta la dirección que sospecho va a tomar.
—¿Cómo se supone que puedo yo responder a eso?
—Con un cambio de tema. Tu vida ha cambiado.
—Pero no se puede cambiar a la familia.
—Te sorprendería lo que se puede hacer —susurró él con rostro sombrío.
—¿Me estás diciendo que sabías todo esto y que ni siquiera lo mencionaste anoche? —preguntó _____, muy confusa. ¡No me extraña que no me preguntaras qué me ocurría! ¿Cómo eres capaz de separar las cosas de ese modo?
—Soy un hombre práctico.
—Joe…
—No vayas por ese camino, bellezza mia.
_____ se apartó de él y se dio la vuelta.
—¡Es imposible que sepas lo que voy a decir cuando aún ni siquiera lo he dicho!
—¿No?
—Mira, estás haciendo que esto me resulte muy difícil. ¿Crees que me resulta fácil pedir dinero? Y ahora lo estoy estropeando todo.
—En absoluto. Te has vestido muy bien para el desafío. Ni vaqueros ni camisetas —comentó Joe con tristeza.
—¿De verdad crees que ésa es la razón de me haya vestido de esta manera? Yo no soy de esa clase de mujeres…
—Yo tampoco lo creía. Desgraciadamente pareces decidida a demostrar que me equivoco.
Pálida y tensa, _____ lo miró a los ojos.
—Deja de hacerte el listo y de intentar meterme miedo para que me calle. ¿No te das cuenta de que no puedo no pedirte dinero?
—No. ¿De verdad crees que tu padre se merece tanto esfuerzo?
—Es mi padre y lo quiero. En estos momentos, yo también me avergüenzo de él —admitió en voz baja—. A pesar de todo lo que ha hecho, es mi pariente más cercano y no puedo olvidarme de cómo me ayudó cuando yo era una niña.
—¿Y si las cosas no fueron del modo que tú imaginas? —replicó él con una fuerte carcajada.
—¿Qué quieres decir con eso?
—Olvídalo. Estaba pensando en otra cosa.
Joe sabía que _____ tendría que saber la verdad tarde o temprano. Sin embargo, aquel momento no era el más adecuado. Se lo diría en Cerdeña. Una vez ella supiera la verdad sobre su padre, se plantearía de otro modo los lazos familiares.
—Deseo desesperadamente que mi padre tenga la oportunidad de darle otro rumbo a su vida.
Joe realizó un gesto de total desesperación con las manos y se acercó a la ventana.
—Por favor…
—Jamás lo conseguirá si nadie cree en él. Si el comité presenta una denuncia contra él, tendrá que ir a prisión y no tendrá oportunidad alguna. Por eso te pido que, por favor, repongas tú el dinero. Aunque sea como un préstamo.
—Dio mio… Un préstamo sin aval alguno. Casi me habías convencido de que tú eras diferente y me gustaba la idea. Una mujer de principios. Hasta este momento, te distinguías por ser la única mujer que jamás me ha pedido dinero ni joyas. También me dijiste que no se te podía comprar. Sin embargo, acabas de decirme tu precio.
Los ojos de _____ se llenaron de lágrimas.
—Joe, te aseguro que no quería hacer esto…
—Pero lo has hecho. ¿Crees que me importa a mí lo que pueda ocurrirle a tu padre? No. ¿Acaso crees que deseo agradarte hasta ese punto? Me temo que no —concluyó Joe con profunda frialdad.
Aquélla última afirmación fue como un bofetón para _____. El único valor que ella tenía para Joe Riccardi era sexual. Nada más.
—Siento haber cometido el error de creer que podrías tener compasión.
—Yo me reservo mi compasión para causas que lo merecen y tu padre jamás aparecerá en esa categoría.
—¡Sin embargo, puedes ir desperdiciando una fortuna en estúpidas ropas para mí! En colgarme alrededor del cuello diamantes que valen… Dios sabe cuánto. Hasta el modo en el que te burlas de mí por preocuparme de mi padre…
—Yo no me burlo…
—¡En ese caso tu voz lo hace en tu nombre!
—Tu padre está tratando de utilizarte una vez más. ¿Dónde está tu sentido común? ¿Es que no te das cuenta? ¿Acaso crees que un hombre decente dejaría que su hija le pagara la libertad con su cuerpo?
—Eso no es justo. Mi padre cree que mantenemos una relación.
—Y mantenemos una relación.
—Ya sabes a lo que me refiero. Él cree que sentimos algo el uno por el otro. Y, dado que tú lo dijiste primero, ¿acaso crees que un hombre decente le pediría a una mujer que comprara la libertad de su padre con su cuerpo?
—Per meraviglia… No me compares con tu padre. Si aún se pudiera comprar y vender a las personas, él habría sido el primero en venderte para sacar beneficio.
—¡Eso es una sucia mentira! Mi padre me quiere…
—Tu padre es un estafador. Tengo una pregunta para ti. ¿Qué clase de hombre le roba a su hija de ocho años la herencia que le ha dejado su madre?
_____ lo miró sin comprender.
—¿Qué es lo que estás diciendo? ¿De qué herencia estás hablando?
—Donald Hamilton falsificó el testamento de tu madre.
—¿Falsificar? ¿Qué es lo que estás diciendo?
—Tengo muchas pruebas. Se ha consultado con expertos en caligrafía. El testamento no es ni siquiera una copia bien hecha. Uno de los testigos y el abogado ya han muerto, pero al segundo testigo se le ha encontrado en el extranjero y está dispuesto a testificar que ese testamento no es el documento que él firmó en presencia de tu madre. Tu padre falsificó el testamento de tu madre y se nombro a sí mismo beneficiario principal. Quería que Massey Manor fuera suyo y se aprovechó de la muerte de tu madre para quitártelo.
—Todo eso son tonterías… Ridículas tonterías…
—Cuando tu padre se apresuró tanto a ofrecerte una casa y adoptarte, todo el mundo se sorprendió y se quedó muy impresionado. Sin embargo, nadie se preguntó por qué una mujer que, según todo el mundo sabía, lo había odiado a muerte, le dejaba todo lo que poseía.
—Joe… lo que estás tratando de insinuar es…
—Lo siento, pero es la verdad.
—No… no… no puede ser —susurró ella. Fue a tomar el bolso de la silla donde lo había colgado la noche anterior y sacó su teléfono móvil.
—¿A quién vas a llamar?
—A Toby.
—¿Qué necesitas hablar con él? —le preguntó Joe, arrebatándole el teléfono.
—¡Devuélveme mi teléfono!
—Piénsatelo bien antes de contárselo… ¿Puedes contarle a ese Toby James una información tan delicada? El forma parte del comité de Massey Manor, ¿verdad?
____ le quitó el teléfono, pero no realizó ninguna llamada. Deseaba golpear a Joe el hacerle pensar dos veces antes de ponerse en contacto con su mejor amigo para que la apoyara.
—Mi padre no falsificó el testamento de madre. Además, este asunto no tiene nada que ver contigo.
—Nos entregó la propiedad para pagar parte de las deudas que tenía con Furnridge. Si no es el dueño legal de Massey Manor, ha cometido otro delito de fraude. Tal vez preferirías que la Policía investigara el asunto.
_____ sintió un profundo escalofrío. Se sentía como si estuviera atrapada en una pesadilla de la que no había escapatoria. Joe le colocó una mano en la espalda, pero ella se apartó con un violento gesto.
—Tenías que enterarte en algún momento, bellezza mia.
_____ le lanzó una mirada desafiante.
—Tengo la intención de hablar de estas acusaciones con mi padre.
—En primer lugar, deberías ver las pruebas —dijo Joe, sacando un archivador del cajón del escritorio. Entonces, se acercó a _____ y se lo entregó.
—Vete —le espetó ella.
Joe se fue al vestíbulo. Al abrir la puerta, dejó entrar a Piglet. El animal se dirigió directamente a su dueña, que lo tomó en brazos y se sentó en el escritorio para examinar los papeles. Había cartas, ejemplos de la escritura de su madre, opiniones de expertos. Sin embargo, cuando llegó a la declaración del hombre que había sido testigo del testamento de su madre, sintió una extraña sensación en el estómago. El testigo estaba dispuesto a jurar en un tribunal que Isabel Massey le había dejado todos sus bienes a su hija.
Media hora más tarde, cuando Joe regresó, _____ había recuperado la compostura. Se puso de pie.
—Quiero ver a mi padre.
—Te dará un montón de excusas. Me han dicho que es así como actúa.
—Podré superarlo.
—Lo siento, pero no estoy de acuerdo.
—¿Qué diablos tiene todo esto que ver contigo? ¿Qué sabes tú? —le gritó.
Joe permaneció en silencio.
—Crees que voy a perder los estribos, ¿verdad? Te aseguro que no. ¡Sólo los pierdo contigo!
 
 
_____ estaba sentada en la limusina como una estatua de piedra, pero bajo la tranquila superficie, bullía un crisol de turbados sentimientos. El vehículo se detuvo por fin delante de la casa de su padre.
—No tienes que enfrentarte con él. ¿Por qué no dejas que sea yo quien se ocupe de esto? —le preguntó Joe con voz tranquila.

—Es mi padre —replicó ella, agarrando con fuerza el archivador—. ¡No te atrevas a entrar!
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Monse_Jonas Dom 02 Feb 2014, 11:27 pm

Bueno chicas, espero y les guste el maratón. Ya sólo quedan dos capis más.
Monse_Jonas
Monse_Jonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por aranzhitha Lun 03 Feb 2014, 9:19 am

Aww me encanta que Joe sea fiel a la rayiz!
Penélope me cae muy gorda!
Maldita zorra!
El padre es un maldito!
Sólo la ha utilizado!
Síguela!
aranzhitha
aranzhitha


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por RatoncitaJonas Lun 03 Feb 2014, 7:54 pm

Me encanta la novela, no quiero que termine :(
RatoncitaJonas
RatoncitaJonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por RatoncitaJonas Lun 03 Feb 2014, 7:54 pm

Sube masssssss! :)
RatoncitaJonas
RatoncitaJonas


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por aranzhitha Lun 03 Feb 2014, 7:59 pm

Síguela!!
aranzhitha
aranzhitha


Volver arriba Ir abajo

Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN - Página 5 Empty Re: Venganza Deliciosa (Joe y tú) ADAPTACIÓN

Mensaje por Contenido patrocinado

Contenido patrocinado



Volver arriba Ir abajo

Página 5 de 8. Precedente  1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8  Siguiente

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Volver arriba

- Temas similares

Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.