Give me love II (Joe&Tu)

dios síguela por favor!!!!!!!

kjcxjshfldsjg oh my god siguela *u*
espero que en la fiesta de nick joe no lleve a camilla
y se puedan reconciliar kfdhsf al menos un beso!!!!!!!!!!   

Loveyoulikealovesongbeibi escribió:

desttinyjonas escribió:ooh. pero por que no la sigues?
por fa siguela, algo tiene que pasar entre ellos en el trayecto, o en la fiesta, tengo una corazonada, 
mmmm :scratch: creo que relajaran la pelvis :muack:  
siguela pleace :D

En este momento me encuentro en la casa de mi abuela asi que se me complica subir ahora hdfhgdfdhfgfd  reí demasiado con lo de "relajar la pelvis" ¿habrá que ver que pasa? para eso necesito que comenten y subiré el capitulo siguiente :) 

jjaja tengo ese efecto en mi *-*
por fa siguela :D

Para cuando dejamos el bar, era de noche y afuera llovía torrencialmente, pareciera que el cielo se fuese a caer, afortunadamente Joseph había estacionado su auto cerca de la entrada, corrimos hasta el auto, en cuanto nos encontrábamos dentro puso la calefacción e hizo partir el auto enseguida, en este momento eran cuando todos iban a sus casas de vuelta del trabajo, nos toparíamos con mucho tráfico.

Amo esta ciudad, odio el tráfico de ella – dije mirando la larga fila de autos y taxis amarillos frente a nosotros.
Bienvenida a Nueva York –dijo cambiando la estación del radio.
Mi celular vibró en mi bolsillo, lo saqué para revisarlo, era un texto de Avan.
¿Avon? – Joseph preguntó, guardé enseguida el teléfono.
Su nombre es Avan y no, no era él – mentí, pero ¿Qué podría hacer? Este auto no era lo suficientemente grande para aguantar una discusión o la tercera guerra mundial  en este momento, además el me llevaba a casa, correr en lluvia no era opción – cosas de trabajo, estoy tratando de arrendar un estudio. –me apoyé mi cabeza en el respaldo del asiento.
Que trabajo el tuyo –Joseph rió.
Lo miré un poco confundida con los ojos entrecerrados, creo haber captado un pequeño hilo de sarcasmo en su voz - ¿Perdón?
¿Es necesario rentar un estudio para pintar? No creo que sea tan difícil, son solo manchas de pintura en un pedazo de tela. – dijo sonriente como si lo que hubiera dicho estuviera bien.
No puedo creer que hayas dicho eso –reí nerviosa, lo golpee en el brazo – claro que es  mucho más que pintura en un trozo de tela.
 Vamos ______ -me miró divertido- ese no es un verdadero trabajo.
Ugh, estás sonando como mi padre –reí histérica –
Tu padre tiene mucha razón –dijo asintiendo.
Él tiene tanta razón -rodé los ojos-  es por eso  que piensa que eres un idiota –saqué mi lengua.
Está bien entiendo –rió – pero aun así no es un verdadero trabajo.
Es un gran trabajo –dije ofendida- soy artista,  hago lo que quiero y cuando quiero, no tengo a nadie a quien rendirle nada, no tengo horarios, puede ser realmente divertido y la paga es realmente buena. –dije sonriente.
Es buena si eres un buen artista – sonrió en mi dirección.
No en realidad, siempre hay gente loca que pagaría por lo que sea – bromee – pero yo si soy una gran artista.
Lo sé –ladeó su cabeza mirándome fijo.
Y yo no tengo que soportar ni criar a los hijos de otros, maestrito –bromee.
Recuerdo que te encantaba cuando era tu maestro –dijo sonando arrogante, aun así era dulce.
Debo decir que las dos horas dentro del salón yo te odiaba – no era cierto, claramente estaba jugando con él- pero fuera del aula eras un gran profesor.
¿De verdad? – Levantó sus cejas- ¿Cuál era tu parte favorita?
Nuestros encuentros en la biblioteca eran lecciones muy interactivas  -dije sonriendo tontamente al recordar que nos besábamos a escondidas en la biblioteca de la escuela, era arriesgado pero el pensar que podríamos ser descubiertos a parte de aterrador resultaba ser increíblemente excitante.
Estas completamente loca –Joseph rió.
¿Cuál fue su momento Maestro Jonas? –mordí mi labio, estaba disfrutando esta conversación, estábamos hablando de nuestra relación y hasta ahora todo iba increíblemente bien, era una sensación realmente cómoda.
De verdad disfrutaba nuestro tiempo en mi departamento – dijo con dificultad mirando al frente, sus manos apretaban el volante, sus nudillos estaban blancos.

Lo miré atentamente, su departamento era nuestra burbuja lejos de los problemas, siempre estábamos bien ahí, podíamos ser nosotros mismos, no ocultar nada, sabía que esto no era fácil para él tampoco, me sentía estúpida por haberle alegado el hecho que me haya dejado, sabía que si hubiera sido por él nunca lo hubiera hecho, estábamos locamente enamorados cuando todo pasó, no podía simplemente reclamarle la decisión que tomó cuando sabía que había sido la más dolorosa para él, no era su culpa después de todo – Yo también –dije sonriendo, luchando con el nudo que tenía en mi garganta y las lágrimas que parecían ahogar mis ojos.
Joseph sonrió un poco más relajado, me miró con ternura en sus ojos, el tráfico comenzó a avanzar y después de unos minutos ya nos encontrábamos cerca de mi edificio, la lluvia no había cesado en ningún momento, para mi mala suerte la calle frente a mi edificio era una calle muy concurrida así que se le hacía difícil a Joseph detenerse en la entrada, tuvo que conducir casi dando la vuelta para poder estacionar.

Es lo más cerca que puedo estacionar, lo lamento. –me miró preocupado.
Está bien, puedo correr –miré por la ventana, si es que la lluvia no me arrastraba con ella podría llegar sana y salva a mi departamento.
Espera –Joseph se quitó el cinturón de seguridad y se estiró para alcanzar algo en el asiento trasero – Aquí está – volvió a su lugar con el paragua que le había regalado.
Te lo devolveré en cuanto pueda, Gracias –dije dispuesta a tomarlo.
Espera, no –lo alejó de mi- te acompañaré a la entrada.
Joseph en verdad no es necesario –dije con modestia.
Insisto –dijo antes de abrir la puerta y salir abriendo el paraguas, rodeó el auto para abrir mi puerta.
Me apegué a su cuerpo para que al paraguas pudiera cubrirnos ambos, Joseph lo sujetaba sobre mi cabeza, mientras me rodeaba con su brazo acercándome más a él, caminamos bajo la lluvia hasta que llegamos  a la entrada de mi edificio, nos acercamos al muro ya que una de las cornisas del edificio detenía un poco la lluvia.
Gracias por traerme – sonreí agradecida por su amabilidad.
Cuando quieras – se encogió de hombros-
Estábamos muy cerca el uno del otro, el perímetro del paraguas no cubría mucha superficie así que debíamos mantenernos cerca para no mojarnos, mis ojos se posaron en sus labios, estaba tan cerca que podría besarlo fácilmente.
Gracias por ayudarme con la decoración – dijo sonriente.
Cuando quieras –sonreí y me encogí de hombros imitándolo.
 
Joseph rió alegremente y yo reí junto él, mordí mi labio al sentir su respiración cálida junto a mí, me quedé mirando su rostro detalladamente, era tan guapo, lindo, atractivo, no podía creer que lo haya dejado ir ¿Qué tan estúpida puedo ser?   Joseph ladeó su cabeza aun sonriendo como un niño y acomodó mi cabello detrás de mí oreja, instintivamente moví mi cara para que su mano acariciara mi mejilla, lo mejor de todo es que no la quitó, la dejó en su lugar y acarició mi mejilla con su dedo pulgar, su mano estaba completamente fría culpa del clima pero aún así provocaba una sensación agradable y cálida dentro de mí, las comisuras de los labios de Joseph tiraron hacia arriba formando una dulce sonrisa, quiero esto de una manera que no puede ser sana, amo al sujeto con mi vida, sólo quería que me besara en este momento y que todo volviese a ser como antes, sentí sus tibios labios haciendo presión contra los míos antes de que pudiese volver pensar correctamente, su aroma, su sabor, la sensación era mágica, finalmente lo tenía entre mis brazos nuevamente, una mano de él se apodero de mi cadera haciéndome acercar a su cuerpo, con la otra acariciaba mi rostro suavemente, ahora yo era quien sujetaba el paraguas sobre nuestras cabezas para no mojarnos, enredé mi mano libre en su cabello para no dejarlo ir, era una sensación tan dulce volver a sentir su labios, el poder que este hombre tenía sobre mí era increíble.    
                 
¿Quieres subir? –pregunté ignorando el hecho de verme ridícula o desesperada pero no me importaba realmente, lo quería conmigo.
Joseph rió divertido.
No creo que sea buena idea – rozó su nariz con la mía.
¿Por qué no? – lo miré directo a los ojos.
Es tarde y no vives sola  -dijo sonriendo.
Cierto – me había olvidado completamente de Avan, subir con Joseph provocaría un momento muy incómodo, no entre ellos, lo digo por mí, digo no puedo dormir con el hombre que amo siendo que tengo al hombre que no amo y dormí durmiendo en mi sofá, podría, pero ni yo soy tan descarada. – Tienes razón – sonreí abrazándolo.
Nos vemos mañana –dijo sonriente-  
Si –asentí –
Joseph me besó última vez antes de dejarme ya dentro del edificio a salvo de toda lluvia.
Adiós Joseph –dije cuando se encontraba en la entrada, volteó y me entregó una sonrisa.
¿Esto de verdad acababa de pasar? ¿Acaba de besarlo? La respuesta era sí, podrían publicarlos en todos los diarios de la cuidad y no me importaría, subí al elevador tratando de volver a mi departamento flotando en una nube de corazones y por todo lo que es amado y preciado en este mundo, me apoyé en la pared del elevador y cerré mis ojos, saboree su sabor aun permaneciente en mis labios, suspiraba sin vergüenza, después de todo si había valido la pena, todo vale la pena por un beso, una caricia de Joseph Jonas.

¿Alguien tuvo un buen día? –Dijo Avan recostado en mi sofá al verme llegar con una gran sonrisa plasmada en mi rostro.
No tienes idea – dije completamente embobada.
¿Eso significa que volvieron? –me siguió con la mirada mientras me quitaba el abrigo.
No – lo miré fijamente- pero creo que hemos mejorado, quizá si seguimos así estemos en vías de lograrlo.
¿Él te besó, no? –enarcó su ceja.
-mordí mi labio y asentí- siento como si en cualquier momento mi corazón estuviera a punto de explotar en mi pecho. –me senté junto a él en el sofá.
Eso es genial –sonrió-
Deberías venir conmigo mañana a la fiesta de Nicholas –sacudí su brazo.
Me encantaría – rió- pero ________ estará Joseph, y si tú y él están en vías de volver no quiero ser yo quien lo arruine, el sujeto me detesta.
Sería genial que ustedes pudieran llevarse bien –apoyé mi cabeza en su hombro.
Quizás más adelante, cuando tú y él estén juntos, sabes que por mi lado no hay problema. –se encogió de hombros.
Lo sé –bostecé – estoy cansada.
Es tarde, deberías irte a dormir –sacudió mi pelo.
Creo que tienes razón –me levanté- Avan  -ladee la cabeza mirándolo fijo.
¿Si? –levantó sus cejas atento.
¿He dicho que eres un gran mejor amigo? –dije sonriente.
Mmm –puso una expresión pensativa- creo que hoy no lo has mencionado.
Eres el mejor –le di un beso en la mejilla.
Ya lo sé –dijo sonriendo.
Buenas Noches –tomé mi abrigo y me dirigí a mi habitación.
Dulces sueños –dijo antes de que entrara en mi cuarto.

No sé cómo le haría para dormir esta noche, estaba muy feliz por lo sucedido hoy, no podría dejar de pensar que pasaría mañana cuando lo viera nuevamente en la fiesta de Nick ¿Cómo lo saludaría? ¿Con un beso en la mejilla como si el beso de hoy no hubiera sucedido? o cómo si hubiéramos vuelto y queríamos que todas las personas presentes se enteraran, estoy siendo increíblemente ridícula al respecto pero deben entenderme hace cuatros años estaba esperando para volver con Joseph, de verdad lo digo enserio y esta vez nada lo impedía.

MIERDA
QUE PORQUE LA
DEJAS ALLI OSEA
LA BESO Y NO ERA
QUE SE IBA A DAR UNA
OPORTUNIDAD CON LA
TIPA ESA DIOS SOLO
COMPLICARA LAS
COSAS 
SEGILA

SEGURAMENTE AHORA VA A LLEGAR CON ESA TAL CAMILA A LA FIESTA NO?
ellos son tan lindos , los amo !
SÍGUELA!!!!!

ahhhhhhhhhhhhh que tiernos *u*
fkjdshf se besaron! ayyyyy :aah: :aah: :corre: :corre: 
Me fascinó el capiii <3 espero subas pronto!!

Oh no como la dejas asi? Que va a pasar? Y Camila? Ojala la bote jajajaja ay no los amo me encanta siguelaaaaaaaa

sigue *u*

sigueeeee

awwwwwwwww :amor: :canto: :enamorado:  jajaj por fis siguela

 yo pense que iban a relajar la pelvis :arrastro:

siguela! :ilusion: :ilusion:

El día siguiente se me pasó rapidísimo, entre los preparativos de la fiesta sorpresa de Nick, visitar la galería y pedirle ayuda a Alexis con lo que usaría esta noche, no me di ni cuenta cuando ya era hora de irme, creo que era que estaba muy ansiosa por todo, por la sorpresa de mi hermano, conocer a su nueva novia, que si todo sale como espero sería mi nueva cuñada y bueno sobre todo por Joseph, la anticipación de volver a verlo después de ayer, estaba en un constante estado de mariposas revoloteando en mi estómago, de verdad en este momento me sentía bastante adolescente con respecto a lo que sentía, ni siquiera cuando tenía 17 me sentía tan así, debe ser que el haber estar apartados hizo que todo lo que sentía se intensificara, me sentía en una nube a mil pies de altura, podría lanzarme del Empire State en este momento y probablemente caería como una pluma.

Cuando llegué al bar inmediatamente visualice a Joseph, estaba muy ocupado dirigiendo y dando órdenes porque había mucha gente, muchos amigos y conocidos de mi hermano se encontraban en el lugar, también había gente que simplemente no conocía.
Joseph al parecer aún no notaba que había llegado, estaba muy ocupado tampoco quería molestarlo, aunque quizá necesitaba de mi ayuda, es mi hermano el que está de cumpleaños, claramente debo ayudar.

Hey – me acerqué hacia dónde estaba.
________ que bueno que llegas –me abrazó fuertemente, sonaba muy aliviado de verme – necesito ayuda, nadie se queda quieto.
¿Qué se supone que haga? –lo miré confundida.
Hace que todos guarden silencio, tu hermano está a punto de llegar –miró la hora en su reloj.
Creo poder hacerlo –asentí, no sabía si podría hacerlo.

Joseph siguió con lo que estaba haciendo, de pronto se alejó de mi lado, no sé a donde habrá podido ir, traté y actué como anfitriona con algunos de los compañeros de trabajo de Nick, no sé dónde se habrán metido mi hermano y Olivia pero ya estaban tardando, de pronto mi teléfono comenzó a sonar en mi bolso, era el número de Olivia, era un texto diciendo que llegarían en una par minutos, no más, no menos, esto era emocionante, ahora debía hacer que todos guardaran silencio ¿cómo lo haría? Aún tenía problemas formulando esa parte, de pronto me pareció una brillante idea subir a la barra, le pedí a unos de los compañeros de Nick que me ayudaran a subir.

¡Silencio todo mundo! – dije subiendo la voz, todos me miraron y quedaron en silencio, había funcionado – Mi hermano está llegando, todos escóndanse y apaguen las luces.
Todos se movieron rápidamente a sus lugares, antes de bajar de la barra pude notar que ¿esa era Camilla? No sabía que fuese amiga de mi hermano, me ayudaron a bajar de la barra antes que apagaran las luces, pude esconderme detrás de esta fácilmente, las luces se apagaron, se escuchaban muchos murmuros entre la gente, de pronto la puerta del bar se abrió dejando entrar la luz del exterior, pude escuchar la voz de mi hermano hablando con Olivia.

Olivia ¿Dónde me trajiste? –sonaba confundido.
Espera y verás –dijo la voz femenina junto a él.

Las luces se encendieron y todos saltaron de sus lugares gritando un gran ¡Sorpresa!                   La cara de Nick era increíble, sin duda no se lo esperaba, Joseph y sus demás amigos lo fueron a saludar rápidamente después de revelada la sorpresa, mi hermano se veía muy confundido pero a la vez muy feliz.

Nick –salté sobre él abrazándolo – Feliz cumpleaños hermano.
Tú planeaste todo esto –dijo riendo.
Claro que no, fue idea de Joseph – lo miré quien estaba a nuestro lado.
Recibí un poco de ayuda de ______ –dijo Joseph encogiéndose de hombros.
______, Joseph, quiero presentarles a Olivia – la tomó por la cintura, era una chica hermosa, piel morena, cabello café.
Finalmente conozco a la chica que trae loco a mi hermano –saludé a Olivia, era una chica muy simpática.
Oficialmente podría decir que Nick había escogido una buena chica, Olivia sin duda era aprobada por su nueva cuñada, bueno yo, era una mujer muy agradable, muy inteligente como Nicholas había dicho, pase casi toda la noche hablando con ella, sin duda quería hacerla sentir parte de la familia, además la distraía porque Nick estaba con sus amigazos bebiendo y celebrando, ya saben cuándo los chicos se juntan suelen actuar como si fuesen más rudos de lo que en realidad son, solo para impresionar.

Estaba animadamente hablando con Olivia, estaba contándole una que otra anécdota vergonzosa de mi hermano, para que supiera y se preparara para lo que vendría si su relación con Nick lograba ponerse más seria, Nicholas me mataría en cuanto se enterara de las cosas que le había contado, pero al menos ahora a mí y a Olivia nos hacía demasiada gracia. Después de mi tercer mojito sentí unas ganas terribles de ir al baño, así que tuve que dejar a Olivia por unos momentos y no soy del tipo de chica que va acompañada al baño, me parece extraño, como sea entre a los baños de bar, los de chicas obviamente, había una que otra empolvándose y retocándose el maquillaje en los espejos, contando uno que otro chisme de oficina, deberían ser compañeras de trabajo en el lugar de Nick por lo que alcancé a escuchar, de pronto las chicas debieron salir del baño porque los cuchicheos cesaron.

Salí del baño y lave mis manos, retoque también un poco mi maquillaje, la puerta se abrió y cerró rápidamente.

¿Qué estás haciendo aquí? –dije sorprendida.
Oh –dijo sonriendo casualmente- creo que me equivoqué de baño – Joseph cerró la puerta detrás de el con seguro.
Sabes que más chicas vendrán a retocar su maquillaje –dije sonriendo.
Bueno tendrán que esperar –ladeo su cabeza de una manera muy inocente para lo que estaba pasando por su cabeza.
Joseph, tengo que volver con Olivia, está esperándome. –dije acercándome a la puerta.
Yo estoy justo aquí y también estoy esperando –se puso en frente de mí mordiendo su labio, estaba luchando conmigo misma por no besarlo, si comenzaba ya nada podría detenerme.  
¿De verdad Joe? En el baño de un bar, que romántico eres – dije cerca de él jugando con la orillas de su chaqueta.
Tienes razón – corrió el cabello detrás de mí oreja – pero he estado conteniéndome las ganas de besarte desde que te vi llegar.
¿Me viste llegar? – dije sonriendo.
Claro que sí, no he podido quitarte los ojos de encima –dijo en mi oído – te ves hermosa.

Sonreí, Joseph me empujó contra la pared poniendo sus manos a cada lado de mi cabeza, estaba acorralada, no me molestaría en luchar o tratar de escapar, de pronto me agradaba la sensación de tenerlo cerca y estar así con él, siendo que en cualquier momento alguien podría llegar, tiré del cuello de su chaqueta para acercarlo más y poder besarlo, mis rodillas inmediatamente se debilitaron, era increíble lo que solo un beso suyo podría causar en mí, se separó de mi dejándome queriendo más.

Tú lo dijiste, el baño no es lugar para nosotros, soy muy romántico señorita Miller ¿Ya lo olvidó? –dijo rozando su nariz con la mía.
Claro que no lo he olvidado –dije sonriente.
Quizás después de la fiesta… –ladeo su cabeza sonriendo.  
¿Ni tu romanticismo es capaz de esperar? –dije riendo.
Soy romántico, no un santo - Joseph rió – nos vemos en la fiesta –movió su cabeza a la puerta, se acercó para abrirla y salir.

Una vez que ya me encontraba sola nuevamente tuve que retocar nuevamente mi maquillaje y refrescarme un poco ¿Hacia calor o solo era yo? Debía reponerme un poco antes de volver a la fiesta.