Es imposible no extrañarte {Nicholas Jonas & tú}

Nombre: Es imposible no extrañarte.
Autor: Leah.
Adaptación: No.
Género: ¿Romance?
Advertencias: no, ninguna.
Otras Páginas: No.

Espero que les guste♥.
_________________________________

Últimamente ya nada era igual, parecíamos dos extraños cada vez que nos veíamos. Nuestros besos, nuestras citas no eran las mismas. Ya no sentía lo mismo cuando el me abrazaba, besaba o simplemente tomaba mi mano.
Tantos momentos de felicidad, tanta fantasía. Tanta pasión, tantas maneras de decir te amo. Y lo nuestro se está acabando, poco a poco. ¿Por qué esto se desmorona? ¿qué estamos haciendo mal? Tantas preguntas y tan pocas respuestas. Sus rulos se desordenaban con la fuerte brisa que había, mojaba sus labios cada cierto tiempo. Ni uno de los dos articulaba alguna palabra. Sus manos estaban en los bolsillos de su abrigo negro, el que solía usar siempre, su perfume se podía oler a los lejos. Su mirada estaba fija en alguna parte, sus piernas estaban estiradas, no parecía ser el mismo.
-¿En que piensas?- pregunté mirando sus labios, se abrian y cerraban. Intentaba hablar, pero algo no lo dejaba.
-Ya no es lo mismo- me miró, ensegida aparto la mirada.
-Lo sé, Nicholas.
-¿Qué haremos?- sonrió para si mismo-. ¿Nos daremos un tiempo?- dijo con ironía.
-Lo mejor sería terminar- bajé la vista.
-Estoy de acuerdo.

Cuatro semanas, si no era lo mismo, ¿por qué lo extraño, maldición? Extraño estar en sus brazos, sentir sus labios y su perfume impregnado en mi ropa.
Joseph miró a su acompañante, ella jugaba con su café. Por cierta parte le dolía verla así -sufriendo por su hermano-, ella era como su pequeña hermana.
-Vamos, ya no estés así- dijo tomando su mentón, obligandola a subir la vista.
-Lo extraño y no debería ser así- negó con la cabeza-. Eso no fue lo que acordamos.
-No todo tiene que ser así, Shay. Tu no mandas a tu corazón- acarició su cabello.
-Lo sé... pero el no sentirá lo mismo por mi, ahora- él la atrajo hacia ella y la abrazó. Derramaba lágrimas sin piedad.
Sintió su aroma, ya debía estar alucinando. Levantó la vista secando sus lágrimas, para ver como Joseph se levantaba y se sentaba Nicholas en su lugar.
-¿Qué haces aquí?- preguntó algo sorprendida.
-Te extraño más que nunca- dijo no respondiendo a su pregunta, la abrazó lo más fuerte que pudo.
-Yo a ti más, Nicholas- lo apretó un poco- no sabes como.
-¿Lo volveremos a intentar?- preguntó besando un lado de su frente, seguían abrazados.
-Haremos que esta vez funcione- sonrió y lo miró. Se acercó y le dio un leve roce a sus labios, hizo un beso esquimal y luego capturó su boca.

-Sabía que esto no sería buena idea- dijo ella mirando el cielo.
-No sabíamos que pasaría, Shay- dijo Joseph-. No te lamentes, Nick estará bien.
-Espero que si, moriría si algo le pasara- respondió. El doctor salió.
-Todo estará bien, ahora pueden pasar a verlo. Se quedará un día más.
Entraron lentamente, sus ojos se llenaron de lágrimas al verlo conectado a tanta máquina. Su pecho se agitó y la tarea de respirar se le hizo mil veces más difícil.
-Shay...- sonrió.
-Nicholas- tomó su mano-. Te amo, cariño.
-Y yo a ti, saldré de esta y estaré a tu lado siempre.
-Lo sé, se que eres fuerte y seguirás como siempre.
-Bésame...- dijo quitando su máscara. Ella se acercó y juntó sus labios-. Estaré siempre a tu lado, nunca te dejaré sola, ¿si? nunca.
-Yo a ti tampoco, eres lo más importante para mí, jamás te abandonaría.
-Eres mi vida...
-Y tu la mía.

Que hermoso me encanto!