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Sonja sabía desde un principio que Valeska había nacido para la vida bajo el foco de la fama. Valeska se movía como una sirena en el escenario, cautivante, seductora, y lograba que cualquiera prestara atención, incluso si la música fuese terrible. Sonja, en cambio, permanecía en lo oscuro del escenario y no decía palabra alguna, sino que permanecía tocando su guitarra y oyendo la melodiosa voz de su mejor amiga.
Y no le molestaba en lo absoluto, ser la persona detrás de la estrella. Porque para que una estrella brille otra debe sacrificarse por ella, ¿No?
Así que cuando al fin llegó el momento de su aparición en Married Roomate, no esperaba que nadie le reconociese, especialmente porque Brand New era solamente Valeska en los tableros de las noticias.
La muchacha a su lado se ajustó sus lentes de sol, mientras observaba sus uñas largas y negras con una sonrisa. La limusina en la que estaban viajando era demasiado y la música que sonaba en la radio era horripilante, una mezcla de un remix de electrónica y una foca pariendo, pero Valeska movía su cabeza al ritmo de la misma como si fuese una obra maestra musical.
— ¡No puedo creer que al fin estemos en Married Roomate! — Suspiró la ya mencionada vocalista. Era la debilidad de Sonja, verla así de feliz, siempre lo había sido. A la guitarrista nunca le habían gustado los realities, es más, ya tenía una muy mala impresión formada de ellos, pero su mejor amiga la convenció de último momento con su sonrisa de un millón de dólares y con su argumento  de que les conseguiría más seguidores.
— Yo tampoco — Concuerda Sonja, jugueteando un poco con sus rizos. La idea de ser observada por todo un país y tal vez, muy posiblemente, por todo el mundo, le daba comezón en todas partes.
— Te encantará — Sonrió Valeska con felicidad.
Y esta es la cosa: A Valeska no le hacen feliz muchas cosas, además de hacer reír a Sonja y salir a cantar frente a una multitud que reconozca su talento. Al contrario, hay más cosas que le hacen infeliz, y el hecho de que el viaje duró mucho más de 15 horas y Valeska no dejó de sonreír ni por un minuto hacen que Sonja realmente no puedo abrir la boca para quejarse.
Bueno, a quién le importa su privacidad si tienes la posibilidad de hacer al amor de tu vida feliz, ¿Verdad?
Abruptamente, el carro se detuvo frente a una mansión masivamente grande. La guitarrista ya debería de haber supuesto que si el reality estaba diseñado para alojar concretamente a estrellas, ya debería de haberse esperado una residencia así de grande, pero su boca se mantuvo abierta hasta llegar al piso de la camioneta.
Devuelta en Polonia, donde ambas residían, su apartamento era bonito pero nunca la gran cosa. Recientemente habían de podido llamarse a sí mismas "famosas" debido a que su más nueva canción 'Light Kicks' se había convertido en hit de la noche a la mañana.
— ¡Vamos! — La cantante exclamó con la voz desbordante de alegría, cerrando la puerta del carro detrás de ella. Sonja le envía la mirada más sucia al conductor que puede formular por su manejo descuidado y sale del auto con un portazo. Ahora, frente a la mansión, todo se ve tan real. El staff de repente las abruma, una mujer con maquillaje se acerca sin cuidado hacia Sonja y un millar de personas más forman un círculo al rededor del dúo. Finalmente, la multitud se dispersa y puede oír distantemente como alguien dice que han comenzado a rodar. En ese momento, la cantante del dúo se da vuelta, y mira a Sonja con sus ojos color mar — Bienvenida al resto de tu vida.
Hacían ya diez minutos que había llegado a la casa y Hugh Dancy ya deseaba haberse retractado. Detrás le perseguía un cantante llamado Baekhyun que estaba desesperado por aprobación, mientras el solo quería ser dejado en paz. En algún otro momento, que un chaval estuviese tan entusiasmado le hubiese encantado, pero hacía ya mucho tiempo que Hugh no tenía corazón y no tenía fuerza de voluntad para cortesías.
Baekhyun era un buen chico, pero más insufrible que la vida misma.
Zakaria se encontraba con él, siendo que ambos ya eran algo así como amigos por que habían compartido viaje hasta la mansión. Zak era un modelo con un complejo de superioridad que llegaba a los cielos, vegano de sangre y un hijo de su perra madre sin cuidado alguno.
A Hugh le caía bien.
Lo que, considerando sus antecedentes, era un poco extraño. Rara vez lograba congeniar con alguien como Zak. Mejor dicho alguien, cualquier tipo de persona, punto final.
Por supuesto que en sus programas tenía que levantar un puente y fingir sonrisas por todo el lugar, pero en el momento que decidió participar de Married Roomate se prometió a sí mismo que dejaría de mostrarse como alguien que no era sino como Hugh Dancy lo era en verdad – un maldito sin corazón. Por el momento, iba realmente bien.
Había optado por apodar al dulce e insufrible Baekhyun “Barry”, solamente para molestarle. Por supuesto que sabía su nombre, solo que no le importaba demasiado.
En el medio de la sala principal ya se encontraba la mayoría de la casa. Hugh se veía rodeado de rostros familiares – ya sea porque les había mencionado en las noticias o por haber presentado algo relacionado con ellos en alguna entrega de premios o algo similar. Gugu y Aaron estaban molestándose entre sí, Gugu riéndose ya de la tarea asignada de líder que se le había dado. Hugh estaba seguro de que el chico la cagaría monumentalmente. Nada personal, pero tenía pinta de idiota.
No, se corrige mentalmente, es un idiota.
La última persona en llegar abre estrepitosamente la puerta y de ella emerge una chica pálida, de ojos azules como cristales y una sonrisa única. Kacey Rohl, recordó su nombre Hugh, la renombrada YouTuber.
Kacey Rohl era una sensación de internet, y todo el mundo estaba al tanto de ello. Especialmente Hugh, porque de su parte, había tenido que cubrir millones de historias sobre ella para el canal de televisión en el que él participaba y por qué millones de adolescentes la admiraban con todo su ser.
Hugh tenía que dárselo - su voz era dulce, melodiosa y estructurada. Pero eso era todo. Kacey Rohl era otra sensación de YouTube con cara bonita y voz suave, no había nada especial sobre ella, nada qué destacaría entre una multitud y ciertamente nada que lo hiciera dentro de una mansión llena de celebridades con verdaderos talentos, que no necesitaban recurrir al internet para ganar fama y fortuna.
Kacey sonríe, y es tan dulce que le provoca a todos a su alrededor un pico de diabetes.
— ¡Bienvenida! — Anuncia Jinki, con una sonrisa de lado a lado. Hugh recuerda que es como un niño como la mayoría de estos Idols. ¿Qué sucede con los Idols y su necesidad de ser tan niñatos? — ¡Kacey Rohl! ¡Me gustan mucho tus videos!
— Muchas gracias — Dice, con la misma sonrisa. Su rostro muestra nada más que paz — Tu voz es muy bonita también, Onew.
Hugh no puede evitar rodar sus ojos ante la escena, por otro lado 'Onew' se derretía en su sitio. Mientras Kacey hace un círculo de saludos a su alrededor, por el rabillo de sus ojos Dancy puede observar una silueta pequeña, abriendo la puerta principal con total sigilo y correteando por los pasillos, y no puede evitar hacer una mueca de diversión.
Finalmente Kacey queda cara a cara contra el presentador, y le extiende la mano.
— Hugh Dancy — Murmura, con un tono casi fascinado.
El mencionado observa su mano y se niega a sacudirla. Un sentido de ganar, de ser mejor que la YouTuber le consume e ignora su mano, observándola a los ojos durante todo el intercambio de palabras. Lentamente, Kacey baja la mano, pero su rostro solo muestra tranquilidad y calma.
— Disfruto mucho de su trabajo — Confiesa Rohl, con un rastro de interés en los ojos.
— No puede decirse lo mismo de mi parte — Suelta Hugh de un momento a otro, y Zak a su lado se tapa la boca para no reír mientras que “Barry” le mira con mala cara. Pero no Kacey – no, Kacey le sonríe aún más y sus ojos solo continúan destellando con algo extraño, algo que Hugh no puede descifrar.
— A veces las cosas que odiamos son las que más nos sorprenden —Dice, y continúa a un lado para dar sus saludos a Zak, quién es significativamente más amable que Hugh. Pero no tanto.
El encuentro le deja un sabor amargo en la boca al presentador, y su cabeza queda girando un poco en círculos.
Married Roomate significaba muchas cosas para Valerie. Como el hecho de que sería vista mundialmente, o sea que incluso sus padres, quienes ya la habían dado por muerta luego de escapar de casa para convertirse en escritora, lo verían también. Bueno, no es como si pensaran que Valerie estuviese verdaderamente muerta. Pero lo deseaban, así que es cómo lo mismo, ¿Verdad?
También significaba que su rostro sería televisado por todo el mundo. Miles de ojos, jóvenes, impresionables y listos para juzgarla la observarían ser su extraño ser, con todas sus fallas y comentarios extraños. Valerie ya estaba esperando el fin de la serie de una vez.
Difícil es imaginar que una escritora de romance reclusa de la sociedad como lo era Valerie Tian aceptaría un trabajo en una serie de televisión dónde sería observada las veinticuatro horas del día, rodeada de personas mucho más famosas que ella por millas, teniendo que estar dispuesta a enfrentar desafíos ridículos y drama que pareciese ser fabricado. Pues, Valerie tampoco lo comprende mucho. Cuando obtuvo la llamada creyó haber oído el nombre de Harry Styles e inmediatamente su cerebro hormonal aceptó.
Patético, dirán algunos. Y tienen razón.
De más está decir que Harry Styles no participaría de Married Roomate y que la escritora china estaba lista para arrojarse de un barranco.
Mientras todos terminaban de presentarse, Valerie permanecía alejada de todo mundo. Había sido una de las últimas en llegar y había logrado escabullirse hasta una habitación sin producir el más mínimo de los ruidos. A decir verdad, la mansión era exuberantemente grande y le relajaba un poco, porque significaba que podía esconderse por ahí sin levantar la más mínima sospecha, o por lo menos, eso le gustaba creer. Después de todo, simplemente era una escritora, ni se podía comprar con los idols del Kpop, o las modelos y actrices…
Al fin encontrando una habitación que parecía habitable (Una puerta blanca y grande con el número 7 incrustado en color rosa en ella), lentamente abrió la puerta, a penas un chillido se oyó... solo para encontrarse con cuatro ojos observándole.
Una de las chicas, sin duda Joy, una sensación del Kpop de la banda de Red Velvet le observaba con los ojos grandes mientras permanecía acostada en una de las camas adyacente a Margot Robbie, una renombrada bailarina, quién yacía sentada como indio leyendo una revista. Detrás, Valerie pudo observar bien de quienes se trataba: Kacey Rohl, una cantante de covers sonreía pacíficamente mientas a su lado permanecía Selena Gomez, una de las cantantes más exitosas, con los ojos abiertos observando la puerta abierta y a una muy sonrojada Valerie.
— Eh… Creo que me equivoqué — Murmuró rápidamente Valerie, con la garganta tan seca como el desierto del Sahara.
— ¡Espera! — Exclamó tras ella Joy. Y Valerie, Dios Mío, no puedes darle la espalda —No creo que te hayas equivocado. ¿No eres Valerie Tian?
— No.
— ¿Ah no? — Pregunta inocentemente Kacey, y Valerie no puede evitar sentirse abrumada por qué se ha visto todos sus videos. Desde el primero hasta el último. Su voz es dulce como un pastel, sus ojos son un mar de calma y es imposible creer que le estuviera atacando con su tono sino que desborda con curiosidad — Juraría que te he visto en la tapa de sus libros.
La escritora juguetea con las mangas de su jersey.
— Soy China, luzco como la mayoría de la gente.
— ¡Entra, por favor! — Habla esta vez Selena ignorando sus previos comentarios, y los pulmones de Valerie se llenan con oxígeno que no quiere dejar escapar — Háblanos un poco de ti. ¡Adoré “Cuando las Olas del Mar Llegan”!
— No fue tan bueno — Balbucea —. Lo escribí cuando tenía doce.
Y así había sido – Valerie había descubierto Wattpad a sus cortos once años y desde entonces se había enamorado de la escritura y todo lo que tenía que ver con ella, por mera curiosidad propia. “Cuando Las Olas del Mar Llegan” había sido un hit con sus tres seguidores y los diez millones que le siguieron luego de aquél libro. Con su éxito llegó su primera chance de transcribirlo a papel y de repente Valerie era conocida mundialmente.
— ¿A los doce? — Pregunta Joy, con la boca abierta — ¡Que guay! Yo no podría. Jamás.
— Es impresionante — Asiente en acuerdo Kacey, con la misma sonrisa plantada en el rostro.
— No es la gran cosa — Desmiente una vez más Valerie, rodando los ojos. Negada a introducirse en la habitación, permaneció en el marco de la puerta, como si sus pies se mantuvieran pegados al suelo — En fin, tengo que ir al baño a llorar y arrepentirme de mis decisiones de vida, ¿Alguien sabe dónde está?
— … Final del pasillo a la derecha… — Se desvía Margot, mientras todas las chicas, salvo Kacey, le observaban como si una tercera cabeza le hubiese nacido de la nada.
— Gracias.
Galopando fuera de la habitación, Valerie se dirigió rápidamente hacia el baño, sus zapatos bajos haciendo eco detrás de ella. Y vaya que la esperaba un baño de la realeza – un retrete de porcelana blanco como perla, unos azulejos color océano y Valerie no pudo hacer nada más que observar con fascinación infinita.
De vuelta en su hogar Val nunca había sido sometida a lujos de este tipo, sino que Valerie decidía guardar el dinero que ganaba de sus libros para su búnker cuando la Tercera Guerra Mundial sucediese. Les estoy tomando el pelo, en realidad solo lo guardaba para poder presumirlo más tarde. Les tomé el pelo otra vez, en realidad el dinero va a sus padres ya que es menor.
¡Menuda pasada!
Lo que sea. Sus abogados ya estaban trabajando en ello.
Incapaz de no poder observar su reflejo en el espejo, Valerie tampoco podía evitar no dejar de compararse con la gente que la rodeaba ahora en el Reality. Ahora estaba entre gente famosa, super famosa, mucho más relevante que una simple escritora. Digo, ¿Selena Gomez? ¿En qué mundo Valerie podría competir contra Selena Gomez? Y Joy, de Red Velvet. O la pacífica Kacey Rohl. O Chanyeol. Chanyeol siempre sería más lindo que ella.
Frustrante era la única palabra que podía describir ese sentimiento que la consumía. No debería haber de aceptado el trabajo nunca, ni siquiera cuando creyó que Harry Styles participaría. Parecía que la escritora tenía una pasión candente por lastimarse a sí misma, para someterse a situaciones que simplemente sabe que le pondrían los pelos de punta, situa –
La puerta del baño se abre de par en par y Valerie hace un salto que logra que sus lentes caigan al suelo.
— Pero, ¿No te gustan las películas? — Una presencia masculina habló, y cuando la vio congelada frente al espejo soltó un ‘Oh.’ Olía a canela y algo extremadamente dulce, y hasta le dejó una sensación de azúcar en la boca a la muchacha. A falta de sus lentes, no podía distinguir nada de ambos salvo colores borrosos.
— No si a ti te gustan — Otra voz masculina habló. Tenía un grueso acento, y se escuchaba cansado, algo frustrado. Valerie podía dibujar sus siluetas, imaginándoselos en las páginas de un cuaderno, escritos con la más fina tinta. El primero, con hombros pequeños y sonrisa tierna, ojos llenos de vida. Al segundo chico, lo dibujaría con palabras de hombros anchos, chaqueta de cuero y ojos que demostraban nada, con una monó — ¿Te vas a quedar ahí parada todo el día o puedo pasar a mear?
— ¡Hmpf! —Exclamó con los labios sellados. Agachándose rápidamente al suelo para buscar sus lentes, palpando el suelo con sus manos buscando desperadamente por ellos.
— Déjame ayudarte — Murmura el primer chico, mientras el segundo comienza a estampar su pie derecho contra el suelo, expectante, como si su pie estuviese trazando una pieza de música invisible.
Finalmente el chico coloca su par de lentes en su mano derecha, y, lentamente ascendiendo de su posición en el suelo se los coloca para darse cuenta de que frente a ella se encuentra el único e inigualable Baekhyun, sensación del Kpop. Detrás de él, luciendo de lo más exasperado, se encuentra el Egipcio presentador de televisión Hugh Dancy.
Valerie se traga su grito de fanática desesperada y sale disparada del lugar.
Sin darse cuenta de que caminaba derecho hacía otra persona.
En el momento que su cuerpo hace contacto con el suelo, una risotada femenina resuena por las paredes del estrecho pasillo donde se encuentran.
— ¿A dónde ibas tan rápido, Flash? — Preguntó la persona frente a ella, quién Val ya había identificado casi inmediatamente. Aaron Taylor-Johnson se encontraba frente a ella, acariciándose la sien y con una sonrisa infantil que la hizo ver las estrellas. Junto a él, solo que de pie, se encontraba Gugu Mbatha-Raw, actriz renombrada y una belleza para los ojos, el rastro de preocupación decorando sus ojos café.
Valerie se quedó muda.
Los había adorado a ambos en "Kick and Turn", e inclusos su personajes habían inspirado para escribir una pequeña pieza de literatura que tenía guardada en su cuaderno (se negaba a llamarle FanFic). Era de sus películas favoritas y ahora sus actores favoritos la miraban con sonrisas de blancas y resplandecientes.
— Eh…
— ¿Estás bien? — Preguntó nuevamente Aaron, ya sobre sus piernas, extendiendo una mano hacia ella.
— Mejor muerta que viva — Intenta bromear Valerie, con la sonrisa más idiota que alguien alguna vez haya formulado, ya tomando la mano del amable chico.
— ¿No es al revés?  — Gugu cuestiona, sonriendo un poco de costado.
— No en mi caso — Responde rápidamente la escritora, solo para echar a correr nuevamente, dejando detrás una pareja de actores cuestionando su sanidad.
Finalmente, Valerie encontró un clóset enorme donde esconderse y pasar el resto de su día en paz y silencio, escondida de todo el mundo.
Si Aaron era malo en algo, era en ser líder, probablemente. Y en hablar con chicas como el reciente encuentro había probado – esa chica de anteojos había corrido el momento en que había presenciado contra quién había chocado. Pésima primera impresión.
— No fue tu culpa — Consuela Gugu, el rastro de su risa todavía pintado en su rostro. Gugu y Aaron eran muy amigos, demasiado dirían algunos. Gugu era como su hermana mayor, y él era como su torpe hermano menor.
Se habían conocido en el set de una película en la que trabajaron juntos. “Kick and Turn” o algo así. Una película pésima, con un director de infierno y vestuario y co-estrellas insufribles. Pero gracias a ese infierno, Gugu y Aaron se habían conocido, así que ambos concordaron que el sufrimiento había valido la pena. Pero solo un poquitín.
Millones de rumores sobre supuestos romances se desataron debido a esto, pero Aaron y Gugu nunca les prestaron atención. Ambos se querían a morir, peor como simples amigos, y ambos dudaban que eso alguna vez fuese a cambiar.
— Que tipa rara — Balbucea un poco Aaron, sacudiéndose la ropa, levantando un poco de tierra.
El actor podía jurar que el rostro de aquella chica le sonaba conocido, de alguna parte, solo que no sabía bien de dónde. Eso era ya decir mucho, porque el límite de atención de Aaron era frágil como una casita de cristal. Recordar rostros no era lo suyo, pero por alguna razón aquella chica china le resultaba extrañamente familiar.
— Sí — Concuerda Gugu, mirando hacia atrás, ya sin rastros de la muchacha en el pasillo. Nuevamente se concentra en su amigo —, pero a quién le importa. ¿Cómo crees que te ira cómo líder?
Si Gugu estaba sorprendida por el hecho de que habían escogido al actor como líder, Aaron estaba en estado de shock. Rara vez Aaron era escogido para algo importante que no fuera un papel, y ahora ser escogido como líder de una mansión entera llena de famosos, los cuales la mayoría eran niños atrapados en cuerpos de adultos o fríos hijos de puta como era el caso de Hugh Dancy, le ponía los pelos de la nuca de punta. Altos como postes.
Y déjenme decirles, si Aaron era malo en algo, era en actuar bajo presión. Como ahora. O como aquella vez en el Kinder que Aaron tenía que liderar al grupo de Gimnasia hasta la banderilla. Resumen: El asunto terminó con un niño atravesado por un palo de bambú.
— Honestamente — Habla — Creo que me irá terriblemente mal.

abreme:

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+10 pts bc tu cap fue largo xd
weno, me pongo seria y paso a comentar...
a ver, no conozco a la mayoría de los pjs así que me encantó que hayas contado y detallado bien que hace cada uno, a que se dedica y toda la cosa, lo agradezco infinitamente. otra cosa que no quiero pasar por alto es.. ¡ame como escribis! enserio, sos muy buena haciéndolo, así da ganas de leer, me gustó mucho ♥
well, tuve que buscar a ver quienes eran valeska y sonja, me encontré con algunas canciones en youtube y debo admitir que pese a que no es algo que escucharía todo el día, valeska canta muy lindo ♥ además pa imaginarme mejor los personajes lo sentí necesario xd me gusta esa dupla, sería lindo que en un futuro (hablo de acá de la nc obvio xd) sonja saliese de un poco de la sombra de su compañera, aunque es cute eso de que sea como su protectora(? we me fui por las ramas xd
we ese hugh me cayó mal, le quise pegar desde que apareció mas o menos, pls kien c kré? que se ubique, jajaj igual es entretenido que haya un pj así, aunque le quiera pegar hasta cuando respira xdxd wtf con barry, porque le dice así a baekhyun? me dio gracia pero no(? we, ak debe aparecer chanyeol a poner orden con su man pls, yap, m klmo.
Valerie me dio ternurita(¿? pero a la vez.. aish, me estresa un poco que sea tan así xd si se relaja un poco la va a pasar mejor.
[quote="Chanyeol siempre sería más lindo que ella."[/quote]
pos si, chanyeol es mas besho que todos ahr, no sé, yo.. tengo debilidad por ese men.
weno en fin, creo que todos los pjs tienen algo que destacar y eso está bien kul. y me mató el final...

Y déjenme decirles, si Aaron era malo en algo, era en actuar bajo presión. Como ahora. O como aquella vez en el Kinder que Aaron tenía que liderar al grupo de Gimnasia hasta la banderilla. Resumen: El asunto terminó con un niño atravesado por un palo de bambú.

xd, que chico desastroso pls.
we, no se quien sigue pero.. sigan, bai

Bueno, merezco un premio por no aparecerme xdxd, ¿saben? mi compu casi explota y el cel no me deja entrar al foro, pero aquí estoy. Leí los dos capítulos con una sonrisa tonta en la cara y todo porque me encantaron.

o n e:

t w o:

Les repito, lamento ausentarme tanto, pero estaré ya de regreso en estos días... ¡Las amo! La siguiente es Vic (taejin.), pero está de vacaciones, so, sólo queda esperar... Si no, arreglaremos en el m.i... ¡Besos!