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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
O W N :: Fanfiction :: Fanfiction :: Músicos :: One Direction
Página 1 de 6. • 1, 2, 3, 4, 5, 6
Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Espero que nos podamos llevar bien entre todas, y que si hay algún desacuerdo lo podamos hablar.
Les pido que, por favor, si van a adaptar la novela o van a ponerla en otra red que me den créditos poniendo mi cuenta de Twitter
¡les agradezco por elegir este tema! espero que les guste la nove.
<3
Nombre: Over Again.
Autor: Kati Bukcovac -osea, yo.. ah-
Adaptación: no, totalmente original.
Género: Romance.
Advertencias: Ninguna en especial. NO QUIERO LECTORES FANTASMAS
Otras páginas: Wattpad
Última edición por liamiamor el Dom 13 Abr 2014, 9:30 pm, editado 3 veces
Over Again
Sinópsis
Última edición por liamiamor el Jue 17 Abr 2014, 11:06 pm, editado 1 vez
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Capítulo 1
–no puede ser–dije en un susurro nulo, pero mis ojos delataban lo contrario. Estaba en la puerta de la casa de Moy, aún sorprendida. El auto de... de Liam. La última vez que lo vi fue cuando yo tenía tan sólo 19 años. No sé porqué me sorprendía tanto ver su Jeep estacionado fuera de su casa, quizá su madre solamente tenga visitas de un pariente lejano que tiene el mismo vehículo. Pero ni yo misma me lo creía. Sentía mi garganta seca, tragué saliva audiblemente, tragándome con ella la cruda realidad de que quizá él esté de vuelta. Y me empezaba a preguntar sí yo ya estaba preparada para entablar una conversación normal con él... ¿pero porqué tendría yo que entablar una conversación con Liam?
–Hola tí–dijo una tierna voz, sacándome de mis confusos pensamientos. Era Joey, mi sobrina... Una niña hermosa, con el pelo cayéndole por los hombros y unos ojos azules como los de su padre, alguna que otra peca salpicaban sus mejillas, algo que había heredado de mí, ella siempre estaba llena de imaginación y energía.
–pero hola mi amor–la saludé alzándola y dándole un beso en su suave mejilla –¿cómo estás?–pregunté mirándola a sus ojos.
–bieeeeeen–contestó, balanceándose hacía atrás, largando una carcajada – Mira quién está allá–dijo, señalando hacía la vereda de afrente, venía un chico de su misma edad con un impermeable amarillo
–¿quién es?–cuestioné a Joey pícaramente. Ella abrió la boca para contestarme, pero fue interrumpida...
–¡JOEY!–gritó el pequeño, que no tendría más de 6 años, igual que Jo–¡a qué no sabes quien está en la casa de mi abuela!–decía mientras cruzaba la calle agitando los brazos, Joey se bajó de mis brazos y fue a saludarlo.
–No ¿quién?–preguntó, mientras el chico le daba unos caramelos que sacó de su mochila.
–mi tío Liam–y sonrió
–Tía, el es Nick.. mi amigo–dijo, mientras lo traía de la mano inocentemente, aunque en mi cabeza todavía estaba el eco de lo que Nick había dicho.
–¡Hola!–saludó Nick–Jo me tengo que ir a casa a comer antes de ir al Colegio, ¿queres comer en lo de mi abuela?–preguntó, mientras terminaba de desenvolver un caramelo de manzana verde–
–Va a comer conmigo, Nick–le contesté apoyando mi mano en el hombro izquierdo de Joey, desenfocandome de lo que había dicho Harry hace unos instantes–si queres podes venir a merendar con nosotras–mencioné, acomodando el cuello de su camperon, había rocío y quizá dentro de unos segundos empieza a llover–será mejor que vayas, Nick... –le dije, insinuando lo del clima señalando el cielo.
–seguro–dijo, guardó el envoltorio de su caramelo en el bolsillo–¡nos vemos en el colegio, Jo!–saludó ultimo antes de irse...–¡TIOOOOOO! ¡TIOOOOOO! ¡LIAAAAAM! –gritaba, mientras se iba, lo miré incrédulo y me apuré a entrar, ya que estaba lloviznando, subí por los tres breves escalones que me llevaban a la puerta principal de la casa, empecé a buscar las llaves en mi bolso, las sostuve en mis manos pero la curiosidad me ganó, e hice mi acción un poco más lenta. Mientras abría la puerta lo vi salir al porche... sí, a él. Teniendo la pinta de alguien totalmente noble como siempre, seguía teniendo en su mirada ese brillo especial y esa risa consoladora que te tranquiliza en los momentos malos, haciendo infaltable su manchita de nacimiento en el cuello. Nick lo abrazó y el lo alzó, y nuestras miradas se encontraron... él dejó de sonreír del modo como le hacía a Harry y me dio a mi una sonrisa más tierna, como sí yo le recordara algo... nerviosa abrí la puerta y entré tras ella. Sentía una presión en el pecho, como si me estuviese aguantando la respiración... ¿me sonrió? me sonrió. ¿porqué tiene que importarme que "me sonrió".
Le preparé la comida a Jo mientras mirábamos la televisión y hablábamos. Después nos preparamos para salir.
–Para, para–le dije, mirando por el agujero de la puerta a Jo.
–¿Que, qué pasa?–preguntó, tratando de mirar ella también.
–Se piensa que mirando a la gente con esos ojos hermosamente castaños, haciendo esa sonrisa y actuando de esa forma puede convencer a las personas de cualquier cosa–pensé, viendo como saludaba a unas chicas que pasaron, Jo me apartó y vio ella a quien estaba mirando. Al parecer, nuevamente, estaba pensando en voz alta. Que maldita costumbre. Se le quedaron los ojos en blanco, y me miró como si no lo pudiese creer.
–¿Te gusta el tío de Nick?–preguntó, y la comisura de sus labios se empezaron a levantar formando una sonrisa traviesa
–¿Qué? ¿el tío de Nick?–la miré–por supuesto que no, Jo. ¿Qué dices?–di un suspiro de pesadez al ver la cara que hacía delatando que no me creía, rodé los ojos–sólo fuimos novios, pero eso fue hace muuucho tiempo, quizá ni se acuerde de mí–.
–Entiendo. Entonces, ¿salimos por la puerta del patio de atrás?–me preguntó, me daba gracia, porque sólo tenía 6 años... pero sé que tenía la mentalidad de una chica más grande.
–¿Que estas diciendo cariño?–le pregunté, haciendo un ademán–Vamos a salir, por la puerta de adelante–y señalé la puerta blanca que estaba a nuestro lado–y mostremos que no tenemos nada para perder ¿está bien?–aclaré, pero no es que tenga resentimientos, sino que tenía dignidad de dar la cara y no quedar como la tonta de que no se anima a mirarlo frente a frente por cinco segundos, porque no es así ¿verdad? Tomamos las camperas del perchero que estaba en la entrada y salimos.
Última edición por liamiamor el Sáb 20 Abr 2013, 4:56 pm, editado 1 vez (Razón : no me gustaba el color que tenía la letra.)
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Me encanta!
Ya quiero saber que pasa :BB
Tu novela es HERMOSA.
Seguila,linda
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Nueva lectora :) Si necesitas chicas aquí estoy :corre: jajaj
Siguela :) quiero saber que pasa....
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Ya estoy aquí.
Un 10 para el principio de tu novela.
Síguela!
Besitos <3.
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
cualquier consulta saben donde encontrarme {mi cuenta de twitter} @liamiamor
xxx
pd: les agradecería si podrían compartir la nove con sus amigas, o gente que conozca, yo ya estoy trabajando en eso.
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Capítulo 2
Volvía de llevar a Joey al colegio, tenía que llevar un ritmo para poder entrar en calor y no morirme de frío. Mis botas estaban húmedas debido al leve rocío. Llevaba mis dos manos en los bolsillos de mi campera, escondiendo mi cuello y pera en la bufanda, hasta que veo a alguien parado a medio metro de mí, levanto la mirada y está el mirándome, sonriéndome con su mano derecha en el bolsillo de su vaquero, extendiéndome su otra mano para que lo salude.
– ¿Cuánto más ibas a esperar para saludarme? –preguntó Liam divertido. Yo lo miré frunciendo el ceño.
– Hola, Payne –dije, tan secamente como pude. En mi interior sentía una pequeña inquietud por poder saltar a sus brazos y pedirle en el oído que me cuenta todas sus aventuras en donde fuese que se haya ido todo este maldito tiempo –aunque yo misma me negaba a admitirlo–, reí irónicamente ante mi pensamiento y paso por alado de él, ignorándolo... aún recordando nuestra despedida, que yo misma lo ignore –aunque ignoro muchas cosas– tenía esa picazón que no podía rascar. La herida de su partida estaba tan latente como desde el primer día.
–¡Veo que seguís siendo la misma de siempre después de todo!–exclamó en voz alta, dándose vuelta para ver hacía donde me dirigía. Pienso en sus palabras y vienen olas y olas de recuerdo.
–¡Liam! ¡Liam!–me encuentro pidiéndole su atención–
–¿Que quieres Sarah?–me contesta, mientras sigue metiendo bolsos en la parte trasera de su Jeep. Apenas me mira, de casualidad que nota mi existencia –pienso–. ¿No se da cuenta, que con cada bolso que suma, me desgarro más y más?
– Por favor, sólo piénsalo bien –digo, siguiéndolo hasta el porche y la sala de estar de su casa–¡no hace falta que te vayas, Liam!–le digo, exaltada... esperando que haya algo de luz en tanta confusión.
–Sarah, lo lamento...–dice, suave y pacíficamente, acercándose hacía mí. Mirándome de ese modo que solamente él sabe, pensando que así, puede hacer que las personas hagan cualquier cosa, y odiaba eso.
–Salí– y miro para bajo, a la par de hacer un paso hacía atrás–No hagas esto, no te despidas–le digo, con mis ojos al borde de las lágrimas.
–Se me hace tarde–dice, mirando el reloj, y otra vez enfocándose en los papales y los bolsos– y vos sabes muy bien lo que pasó–dijo, <¡pero no!> ¡quería gritarle en la cara una y otra vez que eso era mentira! pero el ya no me creería, no después de lo que vio–ya no te amo, Sarah. Ya no–confesó. Y sentí desmoronarme, sentí mis poros mas fríos que nunca y lo peor de todo... sentí mi corazón latiendo, como si fuese martillo contra tela.
–Entonces, puedes irte. Puedes irte al lugar más lejos del planeta... Dejar todo acá, y HUIR. HUIR PARA SIEMPRE, porque no te quiero volver a ver en esta vida–le grité, todos los momentos compartidos se estaban rompiendo, nada tenía sentido sin su amor, sin él.
–Sarah... –y esas palabras se vuelven a sellar tan fuertemente en mi corazón, que duele, él mirando hacia el suelo– se que Dios hizo a otra persona para que vos puedas ser feliz –me pone una mano en el hombro– Solamente, no puedo seguir con esto –hubo un breve silencio, dónde se podía escuchar nuestras propias respiraciones– Adiós.–dijo él,me doy vuelta, para mirarlo a los ojos... quizá por ultima vez, para recordarle que su recuerdo va a estar quemando en mi mente, no importe qué. Que no lo voy a olvidar, y que voy a luchar para que las cosas mejoren, para decirle que lo amo pero es demasiado tarde, el ya esta de espalda y cabizbaja, dirigiéndose a su habitación y las palabras que salieron de su boca <
–No tengo tiempo, Liam–le digo, frenando en la cera, recordándolo todo, vuelvo a dar media vuelta, para mirar sus ojos castaños–Las cosas quedaron claras, según lo poco que recuerdo–le digo, usando el diminutivo para que no note que recuerdo exactamente todo desde el primer momento en que lo ví– ¿verdad? –levanto las comisuras de mis labios, sonriendo irónicamente, veo que lo dejé sin palabras– Eso es lo que pensé, nos vemos Liam –y me voy, dejándolo parado de espaldas atrás. Saco las llaves de la casa de Moy y entro sin mirar atrás con el corazón en las manos.
Cené en la casa de Moy y después que se durmió Joey me despedí de la familia.
–¡Llámame cuando llegues!–gritó Moy desde la puerta de su casa, con un saco en vuelto a su pijama y Jhon a su lado, abrazándola de la cintura.
Era una noche helada, y el agua-nieve ya se arrinconaba por doquier. En la calle solo se escuchaban mis pasos, el viento y el leve susurro de mi pensamiento.
Llegué a mi departamento. Era tarde, todo estaba apagado, las ventanas cerradas y un silencio inquietante. Saqué las llaves del bolso y entré. Subí las escaleras cuidadosamente y fui a la habitación -102- Me saqué el saco y lo colgué en perchero detrás de la puerta. Todo era más confortable ahora, prendí la calefacción y me tomé un baño que me sacara las malas energías que había adquirido a lo largo del día. Me puse un pijama de invierno y me dormí, pensando en como las cosas habían cambiado desde aquél día. Me dormí pensando en como estaría yo ahora si el no hubiese partido. Me dormí pensando en él. Me dormí pensando en Liam.
Última edición por liamiamor el Sáb 20 Abr 2013, 4:58 pm, editado 1 vez
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
¿Quieren otro? Contesten porfas, si no la cancelo, hasta conseguir más firmas, y todo eso.
Besos xx
Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Capítulo 3
–No, Clayton–digo, mientras recorro entre las mesas del aula. Sujeto la muñeca del joven y suavemente hago que vaya hacía arriba y abajo, usando una técnica en la muñeca– Así ¿vez? –le digo, sonriéndole– Así lo esparcís mejor, y trata de que quede todo en una misma dirección–¡Streep!–digo de repente, la castaña estaba dando como apuñaladas a la hoja con el pincel, prácticamente –tienes que dejarlo fluir– aconsejé, y agarré su muñeca, como hice con Clayton, y otra vez, le enseñé la técnica de -hacía arriba, hacía abajo-. En fin, del instituto salí a las tres de la tarde. Soplaba un viento que te penetraba los huesos, aunque había leves rayos de sol... Estaba pensando en lo calentita y cómoda que iba a estar en mi cama pero, recordé que tenía que ir a la casa de Moy para cuidar a Joey. Bufé, pero no porque tenga que ir, si no porque quizá me tenga que cruzar con Liam. Pero eso no iba a ser un inconveniente ¿verdad? él no me hace efecto. -¿verdad que no?-
Llegué a la casa de Moy, sin ni si quiera mirar para la derecha, donde se encontraba la casa de Liam. No quería cruzar ni si quiera una mirada con él. Toqué el timbre, ya que esta vez no me habían dejado la llave, y me abrió Joey. Estaba con cara triste y preocupada. Llevaba unos vaqueros con mangas tres cuartos, donde se le notaba las medias color rosa floreado y un gran camperon azul, haciendo resaltar sus ojos aunque ellos no me miraban... Detrás de ella había una carreta de arena, que tenía un envase de detergente, una esponja tamaño grande amarilla, y un balde mediano junto a otras cosas, como una libreta...
–¿Qué pasó que tenemos esa carita?– le pregunté, agachándome para llegar a su altura. Ella solo exhaló con cansancio... – ¿Estás bien? –y le toqué la frente.
–Tengo un problema –la miré atenta– mi papá se quedó sin trabajo y el banco nos quitará la casa si no juntamos la plata suficiente– largó así, apenada. Me enojé mentalmente con Moy y John por haberle contado a ella problemas que no la incumben en realidad. Si les falta plata saben que me pueden pedir a mí sin ningún problema.– Así que ahora voy a salir a buscar un empleo, voy a lavar autos para que el banco no se lleve nuestra casa– dijo, mientras se abría camino. Le dije que no hay nada de lo que ella pueda preocuparse. Que su papá tenía la plata suficiente para pagarla, y que todos iban a estar bien, teniendo como contestación que ella había escuchado la noticia quedándose detrás de la puerta de la cocina pero indignada a su tragedia, siguió caminando por el patio delantero, colgó un cartel hecho de papel que decía "Delicioso lavado de Auto". Sonreí tiernamente, mientras tachado, antes de "lavado de auto" decía "juego de limón" mientras llegaba su amigo Nick a ayudarla. Sabía que no se iban a quedar sin su casa... pero todavía tenía esa inquietud de que, lo había escuchado, y Moy se habría dado cuenta y no la había si quiera calmado ¿porqué transmitirle problemas a una persona como Joy tan vital?. Me hizo recordar a gran parte de mi infancia y adolescencia, donde mis papás lo único que hacían era transmitirnos, a Moy y a mí, sus problemas tanto bancarios como familiares.
–Hoy no saldrás a jugar afuera Sarah, tendrás que ayudar a tu madre a vender algunas cosas, ya sabes que no tenemos fondos suficientes– Moy, acompaña a tu hermana a saludar a tu abuela, sabes muy bien que se esta muriendo y no le podemos pagar el tratamiento–Tienen que tener las mejores calificaciones en el colegio, es muy caro y nos cuesta pagarla– Miles de presiones que me quebraban porque muchas veces yo era despistada, tratando de fotografiar un momento en mi propia mente, o tan solo pensando en otras cosas. Mis calificaciones no eran malas en el colegio, pero tampoco tenía el mejor promedio, como lo hacía siempre mi hermana mayor. A veces sentía bronca por ella, porque era la favorita de todos... pero con el tiempo me dí cuenta de que no lo hacía apropósito. De verdad la admiro. Cuando nuestros papás peleaban, cuando nos exigían cosas, o las cosas se volvían asquerosamente jodidas, ella era la fuerte. Enfrentaba las cosas que le pasaban. En cambio yo solo encierro mis problemas, escondiéndome dentro de mí misma, tratando de ser fuerte, aparentandolo, mientras solamente me vuelvo vulnerable, tratando de lucir bien por afuera como si las cosas no me afectaran, pero por dentro era totalmente distinta... Podría estar comportándome como me lo pedían pero interiormente estaba desgarrándome porque yo no era fuerte, me dañaba con cualquier cosa, de tanto aguantar las cosas, llegar a un punto que no se puede más. Cuando tuve 15 años, me compré el primer atado de cigarrillos y lo guardaba arriba del placar para desquitarme cuando estaba mal, pero no soy una fumadora activa. Todavía tengo uno sobre mi ropero, o leer demasiados libros para sumergirme a otro mundo y tratar de olvidar la realidad, pero mi vida se había iluminado cuando había encontrado esa relación con Liam. Y eso me enojaba. Mucho. Porque el conocía mi punto débil. Lo conocía muy bien.
–Hola Joey– saludó una voz familiar, haciendo que deje de pensar en la mierda de persona que era yo muchas veces.
–Hola, tío de Nick– saludó Jo, no sabía si entrar a la casa nuevamente, porque ahí estaría sacandole cuidado a mi sobrina –aparte de quedar como una ridícula–, o si quedarme en el porche, viendo como Liam se acercaba a mí. Lucía como siempre, con unos vaqueros gastados, una remera blanca y una camisa azul a cuadro haciendo juego con la remera y obviamente su campera de cuero y lana forrado por dentro. Cada vez se acercaba más, y más...
–Hola Sarah–brindó, dándome una sonrisa amistosa.
–Hola–dije sin dejar de mirar a Joey y Nick que estaban más adelante, sentados como indios esperando a que pase un auto así poder lavarlo. Yo, obviamente esquivando la mirada de Liam.
–¿cómo andas?–me preguntó, así como si nada.–¡cuánto tiempo ha pasado!–dijo, luché con mi mente para poder mirarlo y apenas levantar la comisura de mis labios para no quedar tan estúpida, como si tuviese resentimientos... porque definitivamente el demostraba lo contrario viniendo a hablarme así como si nada
Última edición por liamiamor el Sáb 20 Abr 2013, 4:58 pm, editado 1 vez
Re: Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Ahora subo el Capítulo 4.
Es que, con el tema del colegio y todo eso, se me complica.
Besos.
No se olviden de compartir la novela.
Over Again - Liam Payne & Sarah Hart -tú-
Capítulo 4
–¿cómo vas con el trabajo, cariño?– le pregunté, después de dar unos rápidos pasos.
–mal, muy mal, todavía no ganamos nada– dijo, mientras yo me ponía en cuclillas frente a ella. Tratando de olvidar la ridiculez que acababa de hacer y enfocarme en Joey. Pero me retumbaba la conciencia saber que era una ridiculez, y preguntarme <¿Porqué lo haces, entonces?>. No me importaba darle respuestas a mi conciencia en estos minutos...
–te doy cien pesos si lavas mi camioneta– dijo, una persona parada atrás mío, cerré mis ojos fuertemente, frustrada, porque sabía bastante bien de quien era esa voz, me dí vuelta, mirándolo desde abajo-.
–¿enserio?–preguntó impresionada Jo, mientras yo lo miraba atónita. ¿de verdad le iba a dar ese dinero?
–segurisimo, esta muy sucia la pobre– contestó Liam, sonriendo tiernamente, mientras llevaba su mano atrás del vaquero para sacar su billetera– pero...–dijo deteniéndose ante su acción, y mirando cómplicemente a Joey– a cambio yo necesito que tu tía tenga una charla normal, como cualquier persona –ahora mirándome a mí– conmigo –sí las miradas mataran, el ya estaría metros bajo tierra, alado de una carretera abandonada. Él sabía que no le podía decir que no a Joey, lo sabía. ¿Cómo decirle que no a Joey? "No Joey, vas a tener que quedarte sin ganancias hoy, no quiero hablar con el tío de tu amigo Nick porque soy una inmadura y no le puedo sostener la mirada" no, definitivamente no. Aparte no podía romper sus esperanzas de tener un golpe de suerte con que tan sólo yo diga un simple "Sí". Miré a Joey, que me miraba suplicante, con su mirada de cachorrito mojado.
–Está bien– acepté girando los ojos, noté la sonrisa de victoria sobre el rostro de Liam...
–¿Hay que hacer así las cosas ahora?– dijo entre risas, mientras le entregaba el dinero a Joey, y ella contenta, junto con Nick, se arremangaban las mangas y empezaban a preparar las cosas.
Reí entre dientes, disimulando mi nerviosismo– al parecer es el nuevo negocio de la familia –Él sólo rió, y de haber cerrado los ojos en esos momentos hubiese podido imaginar que nada pasó, de que el nunca se había ido, y que todo estaba perfecto.
Murmuró algo que no comprendí apoyando su mano en el estómago, debido ¿a la risa?. –Seguís siendo como siempre–dijo después, y lo que me sorprendió fue la compostura de su oración: osea, el no lo había olvidado todo. Pero de todos modos ¿eso importaba?
–Bueno, algunas cosas no cambian– y acomodé mis manos en el bolsillo delantero del jean. Estaba haciendo frío, y los chicos aún no terminaban con su camioneta, ni si quiera habían empezado en realidad.
–Me alegro de eso– contestó pensativo. miles y miles de recuerdos se reproducían una y otra vez en mi cabeza... Solamente inhale el aire congelado y así los dejé de lado.
–¿Te parece que vayamos a dentro?– me preguntó –Está empezando a caer agua-nieve –dijo riendo, extendiendo su mano frente a él, seguía siendo igual el también–
–Mmmh– lo pensé un segundo– claro –¿que más da? tenía un trato con mi sobrina ¿verdad?
– ¡Chicos, dejen esa camioneta sucia y arruinada para después! –dijo gritando para que lo escuchen– déjenlo para mañana, si es que hay un lindo día, de otoño–dijo más bajito. Los miraba tiernamente... se me revolvió el estómago, y decidí dejar de pensar con qué actitud hacía o decía las cosa, me rodeó levemente con su brazo izquierdo para meternos en la casa de Moy– ¿Puedo pasar, verdad?-preguntó antes de apoyar la mano en el picaporte, yo sólo asentí pero antes de eso, Nick y Joey pasaron entre nosotros dos, apartándonos para pasar corriendo e ir a la habitación a jugar. Qué lástima, había empezado a gustarme el abrazo... pero sólo porque tenía frío, sí. Porque tenía frío.
Hablamos con Liam de lo grande que estaban los chicos sin insinuar absolutamente nada, solo una charla normal, justo como el había dicho. Ya tenía que irse así que nos levantaos del sofá y nos dirigimos a la puerta, todo era tan raro... Tenerlo de nuevo en en lo que fue una vez mi casa, en frente, dirigiéndonos a la puerta. Todo esto era familiar. Sumamente familiar, y el aire que nos rodeaba, especialmente para mí, estaba lleno de nostalgia.
–Bueno Liam– empecé a decir, con tono de despedida, pero fu interrumpida–.
– ¿Que te parece sí nos vemos mañana en el parque de diversiones que esta a tres cuadras de la calle Amelie?–preguntó decidido.
–Eeeeh–fue lo único que pude decir... millones de ideas se pasaban por mi mente en una fracción de segundo, quizá no esté tan mal pasar un poco de diversión con un viejo "amigo" ¿verdad que no? Lo que sí, estaba como a una hora de distancia desde mi casa –Seguro– dije, mirándolo a los ojos un momento, no sé porque carajos no le podía sostener la mirada... sus ojos castaños aún tenían algo misterioso que me hacían ruborizar si los miraba mucho tiempo.
–¡Genial!– dijo sonriendo– ¿A que hora te paso a buscar por tu casa?– Me preguntó caballerosamente, pensé que mañana era Sábado y quizá duerma hasta tarde más otras cosas que tengo que hacer...
–¿Te parece bien a las cuatro de la tarde?– pregunté achicando un poco mis ojos–
–No hay problema–
–Sí– le contesté, y me dio su celular para que marque mi numero, sabía muy bien como era pero ¿Qué tenía de malo en equivocarme en un número? de ese modo no me llamaría... Y entonces no habría compromiso. ¡A quién estoy mintiendo! Lo voy a tener que ver de todos modos, y voy a quedar más estúpida de lo que lo estoy siendo ahora –Toma, ya está– Abrí la puerta y nos saludamos con un beso en la mejilla, y se fue cabizbaja con las manos en su campera a la casa de enfrente, mientras tanto yo me cruzaba de brazos y me apoyaba sobre el marco de la puerta mirando como se marchaba, pero antes de entrar a su casa se dio vuelta y me sonrió. Yo sólo hice una sonrisa improvisada, ruborizándome, ahora el sabría que lo había quedado mirando. Entré rápido y cerré la puerta con seguro.
Última edición por liamiamor el Sáb 20 Abr 2013, 5:02 pm, editado 2 veces
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