Loving you hurts

Cap 1
Una noche de Julio, fría, lluviosa, mientras las gotas golpeaban salvajemente contra el ventanal del living, y la chimenea me daba ese calor tan acogedor, sentí su abrazo simplemente perfecto. Sus grandes manos se unían en mi abdomen. Su calor era todo lo que necesitaba para sentirme completa. Lentamente su boca fue apoyándose en mi hombro, dejando besos ruidosos y completamente tiernos. Empezó a cambiar de destino y en cuestión de segundos fue recorriendo mi espalda y mi nuca, corría mi pelo jugando con el. Sus piernas formaban el mas cómodo de los sillones del mundo entero. Cada vez que sentía sus labios tibios sobre mi, mi piel se erizaba. Dejo los besos de lado para empezar a dejarme masajes encantadores, sentía desmayarme cada vez que sus dedos se hundían suavemente en mi espalda. Sonreía feliz mientras mis manos acariciaban sus piernas largas y esbeltas. Dibuje círculos imaginarios, recorriendo su pierna derecha.
El fuego nos iluminaba y nos daba una calidez especial, el resto de la habitación estaba completamente a oscuras. Era nuestra primer noche en nuestra pequeña casita de fin de semana.
El empezó a acomodarse, tapando nuestros cuerpos con una gran frasada. Me abrazaba tiernamente desde atrás, sosteniéndome como a un bebe. Seguía corriendo mi pelo, acariciando mi cabeza, dejándome en un estado de relajación total. El ruido de la leña fundirse con el fuego era todo lo qe podíamos escuchar, acompañado de la copiosa lluvia. De un segundo para el otro la habitación se ilumino por completo y un momento después el ruido desgarrador de un rayo nos dejo sordos. Me aferre a el, enfrentada a su cuerpo, hundiéndome en su pecho, sintiendo su calor y su perfume mientras sus brazos me sostenían con fuerza. Deje besos en su cuello, ruidosos y juguetones. Cada vez que lo atacaba sentía como suspiraba. Susurre a su oído un ‘te amo’ mientras capturaba sus piernas con la mía, enredándonos completamente. Su mano empezó a acariciar mi espalda, hasta llegar a mi cintura. Tenia la piel totalmente erizada y cada musculo alerta a su accionar…
Repentinamente acaricio mi muslo y se acomodo decididamente sobre mi. Sus manos recorrían velozmente mis piernas volviéndome loca. Me tomo del tobillo y brutalmente me acerco a el, con ambas manos agarre cada uno de sus brazos, acariciándolo, sintiéndome mas mujer que nunca, el calor de nuestros cuerpos nos hacia olvidar del crudo invierno que nos invadía. Lo miraba fija e incansablemente a los ojos, sonriéndole. Sentí su cuerpo tibio sobre el mío, que temblaba enérgicamente.
Acerco su boca a mi cuello, depositando tiernos besos, los cuales me obligaban a disfrutar de la sensación cerrando los ojos y utilizando el resto de mis sentidos. Mis dos manos encontraron el lugar perfecto en su enorme espalda, el fuego seguía vigoroso y caliente, sentía su perfume embriagándome por completo, el ruido de los truenos y la lluvia daban el toque final. Empecé a sentirlo, sentí que éramos uno. Mis manos subieron hasta su nuca, se perdieron entre su pelo. Hundí su cara entre mi cuello y a los pocos segundos empecé a sentir besos embebidos en pasión. Me hacía sentir la mujer más afortunada en el universo entero. Puso sus dos brazos a los costados de mi cuerpo, empezó a dar pequeños movimientos. Perdí mis manos en su cintura mientras lo tapaba con la frazada. El calor de nuestros cuerpos nos daba la temperatura ideal. El me miraba a los ojos y me daba besos tiernos pero apasionados al mismo tiempo. Mi respiración empezó a acelerarse, yo no dejaba de besarlo y acariciarlo y el empezaba a dar movimientos cada vez un poco mas rápidos y fuertes.
Mi respiración ya estaba completamente desencajada. Necesitaba abrir la boca y respirar de la forma que fuese necesaria. Todo mi cuerpo lo sentía sin dificultad alguna. Salvajemente mis manos estrujaron la sabana mientras el se encargaba de hacer sus movimientos cada vez mas pronunciados y profundos. Una vez más mis manos agarraron su espalda, sintiendo como se movía enérgicamente. Intente ahogar un grito, pero fue en vano. Ambos sonreímos mientras nuestros cuerpos iban humedeciéndose. Me aferraba a su cintura con mis piernas. El empezó a hacer sus movimientos cada vez mas lentos. Volvió hacia mi para darme otro beso completamente lleno de ternura y luego retomo su actividad eufórica y salvaje. Escuchaba su respiración alterada, lo que me provocaba un escalofrío por toda la espalda. Me deje llevar y empecé a dejar que mis gritos sonaran cada vez que fuese necesario, mi respiración estaba completamente desencajada. Mis manos recorrían su espalda, la cual estaba completamente mojada lo que me excitaba más aun. El daba embestidas mas salvajes, mucho mas salvajes que las anteriores mientras daba gritos apasionados, lo que a mi me provocaba hacer lo mismo. No paso mucho tiempo que de repente una ola de calor me recorrió el cuerpo entero, mis piernas estaban entumecidas y mi cuerpo entero se sentía como sobre una nube, deje escapar un grito que venia dirigido desde la fuerza que generaba mi abdomen al contraerse, junto con el grito me deje caer rendida, al mismo tiempo que Joe quedaba acostado sobre mi pecho, abrazándome, completamente exhausto y agitado. Mis manos lo acariciaban incansablemente. Deje un beso en su cabeza. Me quede mirando el fuego, mientras el seguía acostado sobre mi. Me asegure de que estuviera completamente tapado y abrigado. Un momento después sentí su respiración profunda y relajada, estaba completamente dormido sobre mis brazos.
Me desperté, el me abrazaba, en el transcurso de la noche se corrió para un lado y para el otro al igual que lo hice yo. El estaba completamente dormido. Me levante sin hacer el menor ruido, y sobre el sillón encontré una camisa de el, a cuadros. Se la robe y me la puse a modo de pijama. Hice en mi cabeza un rodete improvisado y fui hasta la cocina sin hacer ruidos. Busque algo rico para hacer de desayuno… no teníamos muchas provisiones pero algo se me iba a ocurrir. Si hay algo que me gusta hacer es cocinarle cualquier cosa. Amo ver su sonrisa y escuchar su ‘Está riquísimo amor’ o cosas similares. Debía preparar algo bien energético ya que el adora hacer deportes y un día de lluvia no iba a ser su impedimento. Adora pasar horas en nuestro gimnasio, así es. Tenemos nuestro propio gimnasio. Volviendo al desayuno, empecé a preparar unos ricos waffles, los bañe en chocolate derretido formando una especie de torre. Hice jugo de naranja, bien dulce. Y dos cafes bien cargados con un poco de crema. Acomode todo en una bandeja y fui hasta el living otra vez.
Buen día mi amor… -murmuro mientras estiraba su espalda, semi acostado- Dejame ayudarte con todo eso… -enseguida dije ‘no, no, no’ y me senté a su lado. Me sonrió. No existía mejor manera de empezar el día.

FICHA:

Autor: Victoria ! :)
Género:GENERAL.
Adaptación: Pura imaginación, mi muso inspirador (? Joseph Jonas <3 Todo se lo debo a el
Advertencias: Vocabulario y escenas no aptas para menores de edad (y cardíacos abstenerse (?)
Otras paginas: fotolog.com/joee_a_joonas Hay unas novelas, tienen un formato malisimo, pero si les interesa... serán bienvenidas.

sadasdasdad Hola :BBBBBBBB Te voy a poner en mi firma soy tan tierna.
Tenes que hacerte publicidad vos tmb -.-