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Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Jue 01 Mayo 2014, 3:33 pm
.KittyJSM. escribió:Seguilaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!
DEBERÍA!! jfdhjdfghjg
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por Invitado Jue 01 Mayo 2014, 4:15 pm
Maleeeeee sigue estoy muriendo lentamente...
Invitado
Invitado
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Jue 01 Mayo 2014, 5:29 pm
● Charlotte ● escribió:Maleeeeee sigue estoy muriendo lentamente...
:gasp: :gasp: :gasp: :gasp: debería!!!!! estoy corta de inspiración en esta novela...
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Vie 02 Mayo 2014, 11:17 am
Capítulo 10:
Aquél sentimiento perduró. El vacío en mi pecho se hacía cada vez más grande. Los días se me hacían más largos y las noches, lo que más disfrutaba, más cortas. Las noches, el único tiempo que me daba el día para desahogarme de mis penas. Las únicas horas en las que podía llorar bajo las sábanas de una cama que no es la mía y entre unas paredes que no se sienten propias.
Dormía poco y soñaba mucho. Rostros familiares apareciendo en mi inconsciente, perdurando allí cuando despertaba, haciendo que me sienta como en casa, pero a la misma vez, como si estuviera a kilómetros de distancia.
Siempre, dos veces por día, veía a Harry. Aún no se cansaba, aunque so rostro sí se veía de esa forma. Cuando su figura aparecía por entre los árboles, el sentimiento de la culpa se extendía por todo mi cuerpo, y lo único que hacía para intentar que se fuera, era alejarme, aunque no podía sacarlo de mis pensamientos luego de eso.
Lo único que hacíamos como manada era caminar. Caminar, caminar y caminar. Los primeros días me enseñaron todo el bosque, desde lo conocido a lo desconocido, una y otra vez, hasta que nada sea nuevo para mí.
Fue en una de esas caminatas que la vi, allí, entre los árboles. Sus profundos ojos esmeraldas estaban clavados en mí. Su pelaje resaltando en todo la blancura. Cuando Zayn, quien iba al frente, la vio, se detuvo de golpe. Ella caminó hasta nosotros lentamente, sus ojos aún en mí. Dejó escapar un sonido, del que logré entender las palabras “mi creación.”
Zayn lanzó un gruñido de alarma hacia ella, pero esa fue la primera vez que la loba fijó su vista en él, pero continuó su camino. Esta vez, el líder de nuestra manada lanzó un gruñido más amenazador, y se volteó hacia ella, enseñando los dientes, y amago a morderla. Ella hizo lo mismo, y de un rápido movimiento, se colocó entre ella y yo, a la vez que Liam y Niall rodeaban a la loba. Ella no producía ningún sonido, su vista seguía en mí.
“Mi creación…”´
Dí un paso hacia atrás, y ella uno hacia delante. Volví a oír el gruñido de Zayn, pero fue interrumpido por otro, más alto que el suyo. Cuando me volteé, me encontré con otro lobo. Este era gris, completamente gris. Sus ojos, exactamente del mismo color. Al regresar mi vista al frente, sólo pude ver como aquella loba, quien me había mordido, se alejaba por entre la blancura pura, su pelaje resaltando notoriamente.
En ese instante, aquél otro lobo dio un salto, y estaba delante nuestro. Se acercó a Zayn, casi rozándolo con su hocico. Él se limitó a observarlo, sus profundos ojos moviéndose a medida que el otro lo hacía. A sus espaldas, Liam gruñía en forma de advertencia.
Cuando aquél lobo se alejó, con paso firme pero a la misma vez relajado, Zayn echó a andar en la dirección en la que vinimos. Metros antes de llegar a la casa, ya era humano. Caminaba a grandes zancadas, sus manos hechas puños. Estaba furioso. Nosotros tres regresamos a nuestras formas humanas y corrimos para alcanzarlo.
Para probar aquello, abrió la puerta de una patada, y entró directo en la sala, sin esperarnos siquiera. Cuando los cuatro nos encontrábamos adentro, abrí la boca para decir algo, pero Niall posó su dedo índice suavemente sobre sus propios labios, y decidí seguir sus consejos.
Como la primera vez que estuve allí, Zayn abrió la heladera y tomó de allí una botella de agua. Sólo que esta vez no lo hizo con tranquilidad. Tomó el agua y la bebió completa, apretó la botella entre sus manos y la arrojó con furia en la basura. Luego, cerró la puerta de la heladera de un manotazo. Después caminó hasta el sofá y se dejó caer sobre él, pasando sus manos por, dejándolas allí. Nosotros seguíamos ante la puerta.
“¿Quieres saber quien dormía en tu habitación, Louis?”
A pesar de su forma de actuar previa, su voz era calma, pero casada. Asentí, pero él no me estaba viendo. De todos modos, continuó hablando sin mi respuesta.
“Esa loba, Isabelle, solía ser parte de nuestra manada.”
Suspiró, y subió sus manos hasta sus cabellos, alzando su rostro a la misma vez. Sus dientes estaban apretados, y sus ojos cerrados.
“Ella fue quien te mordió, ¿No?”
Volví a asentir, pero al recordar que no me estaba viendo, hablé.
“Sí…”
Tomó el puente de su nariz entre su dedo índice y pulgar.
“¿Quieres saber porqué?”
No respondí, pero sabía que iba a decírmelo de todos modos.
“Ella dejó su lado humano, y quiere recuperarlo.”
Abrió los ojos cuando terminó aquella frase, y me miró directamente a los ojos. Sabía que intentaba hacer, estaba tratando de convencerme de conservar mi cuerpo. No dije nada, pero él sí.
“Los rumores corren, Louis. A todos les llegó uno que decía que al morder a cierta cantidad de humanos, podrías volver a ser uno.”
Su mirada no se movió de la mía.
“¿Sabes porque no está más aquí? ¿Sabes porque la echamos? Porque también oyó que al asesinar a otro lobo, podría recuperar su lado humano.”
Se levantó del sofá y tomó uno de los dobladillos de sus jeans. Al elevarlo me enseñó la parte posterior de su pantorrilla. Ahí había una gran cicatriz en forma de mandíbula. Había sido demasiado profunda.
“Además de ser una idiota y una traidora, fue una cobarde. Atacar por las espaldas. ¿Quién hace eso?”
Volvió a cubrir su piel.
“Luego, cuando caí, fue por el cuello. Nunca llegó, por suerte. Eso se lo agradezco a esos dos a tu lado.”
Se cruzó de brazos y volvió a sentarse.
“Está desesperada, Louis. Y la desesperación te hace actuar como un cobarde. No te pongas en esa situación.”
Tragué saliva, y me atreví a preguntar.
“¿Quién era el otro lobo?”
Al oír eso, Zayn pareció enojarse un poco más.
“Gideon. Un maldito genio. Si te lo cruzas, corre. ¿Me oíste? Es el líder de la nueva manada de Isabelle, y es probablemente el lobo más fuerte e ingenioso que alguna vez haya deambulado por este bosque.”
Esta vez, al asentir, sí me estaba viendo. Hizo lo mismo, y se levantó, cruzando el pasillo y desapareciendo en su habitación. Pasé mi mirada por Liam y Niall, que me veían en silencio.
“Solía ser líder de Zayn. Fue por él que se convirtió.”
------------------------------------------------------------------------
Disculpen mi tardanza!!
aquí esta de todos modos :) espero que les haya gustado!!
Aquél sentimiento perduró. El vacío en mi pecho se hacía cada vez más grande. Los días se me hacían más largos y las noches, lo que más disfrutaba, más cortas. Las noches, el único tiempo que me daba el día para desahogarme de mis penas. Las únicas horas en las que podía llorar bajo las sábanas de una cama que no es la mía y entre unas paredes que no se sienten propias.
Dormía poco y soñaba mucho. Rostros familiares apareciendo en mi inconsciente, perdurando allí cuando despertaba, haciendo que me sienta como en casa, pero a la misma vez, como si estuviera a kilómetros de distancia.
Siempre, dos veces por día, veía a Harry. Aún no se cansaba, aunque so rostro sí se veía de esa forma. Cuando su figura aparecía por entre los árboles, el sentimiento de la culpa se extendía por todo mi cuerpo, y lo único que hacía para intentar que se fuera, era alejarme, aunque no podía sacarlo de mis pensamientos luego de eso.
Lo único que hacíamos como manada era caminar. Caminar, caminar y caminar. Los primeros días me enseñaron todo el bosque, desde lo conocido a lo desconocido, una y otra vez, hasta que nada sea nuevo para mí.
Fue en una de esas caminatas que la vi, allí, entre los árboles. Sus profundos ojos esmeraldas estaban clavados en mí. Su pelaje resaltando en todo la blancura. Cuando Zayn, quien iba al frente, la vio, se detuvo de golpe. Ella caminó hasta nosotros lentamente, sus ojos aún en mí. Dejó escapar un sonido, del que logré entender las palabras “mi creación.”
Zayn lanzó un gruñido de alarma hacia ella, pero esa fue la primera vez que la loba fijó su vista en él, pero continuó su camino. Esta vez, el líder de nuestra manada lanzó un gruñido más amenazador, y se volteó hacia ella, enseñando los dientes, y amago a morderla. Ella hizo lo mismo, y de un rápido movimiento, se colocó entre ella y yo, a la vez que Liam y Niall rodeaban a la loba. Ella no producía ningún sonido, su vista seguía en mí.
“Mi creación…”´
Dí un paso hacia atrás, y ella uno hacia delante. Volví a oír el gruñido de Zayn, pero fue interrumpido por otro, más alto que el suyo. Cuando me volteé, me encontré con otro lobo. Este era gris, completamente gris. Sus ojos, exactamente del mismo color. Al regresar mi vista al frente, sólo pude ver como aquella loba, quien me había mordido, se alejaba por entre la blancura pura, su pelaje resaltando notoriamente.
En ese instante, aquél otro lobo dio un salto, y estaba delante nuestro. Se acercó a Zayn, casi rozándolo con su hocico. Él se limitó a observarlo, sus profundos ojos moviéndose a medida que el otro lo hacía. A sus espaldas, Liam gruñía en forma de advertencia.
Cuando aquél lobo se alejó, con paso firme pero a la misma vez relajado, Zayn echó a andar en la dirección en la que vinimos. Metros antes de llegar a la casa, ya era humano. Caminaba a grandes zancadas, sus manos hechas puños. Estaba furioso. Nosotros tres regresamos a nuestras formas humanas y corrimos para alcanzarlo.
Para probar aquello, abrió la puerta de una patada, y entró directo en la sala, sin esperarnos siquiera. Cuando los cuatro nos encontrábamos adentro, abrí la boca para decir algo, pero Niall posó su dedo índice suavemente sobre sus propios labios, y decidí seguir sus consejos.
Como la primera vez que estuve allí, Zayn abrió la heladera y tomó de allí una botella de agua. Sólo que esta vez no lo hizo con tranquilidad. Tomó el agua y la bebió completa, apretó la botella entre sus manos y la arrojó con furia en la basura. Luego, cerró la puerta de la heladera de un manotazo. Después caminó hasta el sofá y se dejó caer sobre él, pasando sus manos por, dejándolas allí. Nosotros seguíamos ante la puerta.
“¿Quieres saber quien dormía en tu habitación, Louis?”
A pesar de su forma de actuar previa, su voz era calma, pero casada. Asentí, pero él no me estaba viendo. De todos modos, continuó hablando sin mi respuesta.
“Esa loba, Isabelle, solía ser parte de nuestra manada.”
Suspiró, y subió sus manos hasta sus cabellos, alzando su rostro a la misma vez. Sus dientes estaban apretados, y sus ojos cerrados.
“Ella fue quien te mordió, ¿No?”
Volví a asentir, pero al recordar que no me estaba viendo, hablé.
“Sí…”
Tomó el puente de su nariz entre su dedo índice y pulgar.
“¿Quieres saber porqué?”
No respondí, pero sabía que iba a decírmelo de todos modos.
“Ella dejó su lado humano, y quiere recuperarlo.”
Abrió los ojos cuando terminó aquella frase, y me miró directamente a los ojos. Sabía que intentaba hacer, estaba tratando de convencerme de conservar mi cuerpo. No dije nada, pero él sí.
“Los rumores corren, Louis. A todos les llegó uno que decía que al morder a cierta cantidad de humanos, podrías volver a ser uno.”
Su mirada no se movió de la mía.
“¿Sabes porque no está más aquí? ¿Sabes porque la echamos? Porque también oyó que al asesinar a otro lobo, podría recuperar su lado humano.”
Se levantó del sofá y tomó uno de los dobladillos de sus jeans. Al elevarlo me enseñó la parte posterior de su pantorrilla. Ahí había una gran cicatriz en forma de mandíbula. Había sido demasiado profunda.
“Además de ser una idiota y una traidora, fue una cobarde. Atacar por las espaldas. ¿Quién hace eso?”
Volvió a cubrir su piel.
“Luego, cuando caí, fue por el cuello. Nunca llegó, por suerte. Eso se lo agradezco a esos dos a tu lado.”
Se cruzó de brazos y volvió a sentarse.
“Está desesperada, Louis. Y la desesperación te hace actuar como un cobarde. No te pongas en esa situación.”
Tragué saliva, y me atreví a preguntar.
“¿Quién era el otro lobo?”
Al oír eso, Zayn pareció enojarse un poco más.
“Gideon. Un maldito genio. Si te lo cruzas, corre. ¿Me oíste? Es el líder de la nueva manada de Isabelle, y es probablemente el lobo más fuerte e ingenioso que alguna vez haya deambulado por este bosque.”
Esta vez, al asentir, sí me estaba viendo. Hizo lo mismo, y se levantó, cruzando el pasillo y desapareciendo en su habitación. Pasé mi mirada por Liam y Niall, que me veían en silencio.
“Solía ser líder de Zayn. Fue por él que se convirtió.”
------------------------------------------------------------------------
Disculpen mi tardanza!!
aquí esta de todos modos :) espero que les haya gustado!!
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por Invitado Vie 02 Mayo 2014, 12:23 pm
Male de mi corazón
me encntooooooooo
tanta espera valio
la pena esa Isabelle
va a querer matar a
mi Louii?????
o cielos esto me gusta
cada vez más jejejejej
Male pero cuando
Louis va a hablar con
Harry o verlo o cruzarse
en su forma de lobo o
me encanta jejejjejeje
sube cuando puedas bella
besos y abrazos, Te quiero!!!!
me encntooooooooo
tanta espera valio
la pena esa Isabelle
va a querer matar a
mi Louii?????
o cielos esto me gusta
cada vez más jejejejej
Male pero cuando
Louis va a hablar con
Harry o verlo o cruzarse
en su forma de lobo o
me encanta jejejjejeje
sube cuando puedas bella
besos y abrazos, Te quiero!!!!
Invitado
Invitado
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Vie 02 Mayo 2014, 12:35 pm
● Charlotte ● escribió:Male de mi corazón
me encntooooooooo
tanta espera valio
la pena esa Isabelle
va a querer matar a
mi Louii?????
o cielos esto me gusta
cada vez más jejejejej
Male pero cuando
Louis va a hablar con
Harry o verlo o cruzarse
en su forma de lobo o
me encanta jejejjejeje
sube cuando puedas bella
besos y abrazos, Te quiero!!!!
Charlie de mi alma!! jajajajajaja
que suerte que te haya gustado!! a mi mucho no me convencía... pero que te guste me pone muy contenta
jajajajaja ya verás, ya verás...
oh, quien sabe... tengo todo planeado
prontito!!
un beso gigante y un abrazo todavía más grande!! yo más :(L): :(L):
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por Invitado Vie 02 Mayo 2014, 12:39 pm
CapitanNiallHoran escribió:● Charlotte ● escribió:Male de mi corazón
me encntooooooooo
tanta espera valio
la pena esa Isabelle
va a querer matar a
mi Louii?????
o cielos esto me gusta
cada vez más jejejejej
Male pero cuando
Louis va a hablar con
Harry o verlo o cruzarse
en su forma de lobo o
me encanta jejejjejeje
sube cuando puedas bella
besos y abrazos, Te quiero!!!!
Charlie de mi alma!! jajajajajaja
que suerte que te haya gustado!! a mi mucho no me convencía... pero que te guste me pone muy contenta
jajajajaja ya verás, ya verás...
oh, quien sabe... tengo todo planeado
prontito!!
un beso gigante y un abrazo todavía más grande!! yo más :(L): :(L):
Cielos Male siempre me dejas con ganas de más
y con la intriga de saber jejejejjeej amo tus novelas
me encantann. :(L):
Invitado
Invitado
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Vie 02 Mayo 2014, 1:19 pm
● Charlotte ● escribió:CapitanNiallHoran escribió:● Charlotte ● escribió:Male de mi corazón
me encntooooooooo
tanta espera valio
la pena esa Isabelle
va a querer matar a
mi Louii?????
o cielos esto me gusta
cada vez más jejejejej
Male pero cuando
Louis va a hablar con
Harry o verlo o cruzarse
en su forma de lobo o
me encanta jejejjejeje
sube cuando puedas bella
besos y abrazos, Te quiero!!!!
Charlie de mi alma!! jajajajajaja
que suerte que te haya gustado!! a mi mucho no me convencía... pero que te guste me pone muy contenta
jajajajaja ya verás, ya verás...
oh, quien sabe... tengo todo planeado
prontito!!
un beso gigante y un abrazo todavía más grande!! yo más :(L): :(L):
Cielos Male siempre me dejas con ganas de más
y con la intriga de saber jejejejjeej amo tus novelas
me encantann. :(L):
muahahahaaaa
kasfjsdfjdhj aweee :(L): :(L): :(L): :(L): :(L):
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por Mra. De Horan Vie 02 Mayo 2014, 1:33 pm
Pinche hija de puta Isabelle!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ESpero que no les haga nada a los chicosy a Harry!!!!!!!
ESpero que no les haga nada a los chicosy a Harry!!!!!!!
Mra. De Horan
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por Invitado Vie 02 Mayo 2014, 1:48 pm
Oh! Wow!!!
Mucha información!!!
Pero igual me encantooo!!!
Seguiola pronto!!
Mucha información!!!
Pero igual me encantooo!!!
Seguiola pronto!!
Invitado
Invitado
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Vie 02 Mayo 2014, 2:14 pm
Mra. De Horan escribió:Pinche hija de puta Isabelle!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ESpero que no les haga nada a los chicosy a Harry!!!!!!!
JAJAJAJAJ lose, lose...
oh, ya verás...
un beso enorme
:(L): :(L):CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Vie 02 Mayo 2014, 2:15 pm
.KittyJSM. escribió:Oh! Wow!!!
Mucha información!!!
Pero igual me encantooo!!!
Seguiola pronto!!
Hola Kitty!!
jajajajajaja bastante para sólo un capítulo, no??
que suerte que haya sido así!!
prontito!! un beso enorme :(L):
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por Rebeca. Vie 02 Mayo 2014, 7:23 pm
WOW!
Cada vez me dejas mas y mas impactada mujersita!
Esta nove es no se... hermosa :3
Puta Isabelle, puto Gedeón... así se llama ¿no? xD
No me lo puedo creer, el convirtió a Zayn, Isabelle era su compañera... Harry sigue merodeando... yo tengo hambre...
¡joder! El cap. fue genial, de lo que se viene a enterar uno xD
Seguila pronto Male querida.
Te quiero♥
Cada vez me dejas mas y mas impactada mujersita!
Esta nove es no se... hermosa :3
Puta Isabelle, puto Gedeón... así se llama ¿no? xD
No me lo puedo creer, el convirtió a Zayn, Isabelle era su compañera... Harry sigue merodeando... yo tengo hambre...
¡joder! El cap. fue genial, de lo que se viene a enterar uno xD
Seguila pronto Male querida.
Te quiero♥
Rebeca.
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Sáb 03 Mayo 2014, 1:36 pm
Rebeca. escribió:WOW!
Cada vez me dejas mas y mas impactada mujersita!
Esta nove es no se... hermosa :3
Puta Isabelle, puto Gedeón... así se llama ¿no? xD
No me lo puedo creer, el convirtió a Zayn, Isabelle era su compañera... Harry sigue merodeando... yo tengo hambre...
¡joder! El cap. fue genial, de lo que se viene a enterar uno xD
Seguila pronto Male querida.
Te quiero♥
Hola Rebe!!
jjajajajaja awwww :(L): :(L): :(L): no sabes que contenta me hace leer tu comentario
jajajajaj lo se!! te gustaría saber que le quería poner Rebecca a Isabelle en un principio?? nada personal JAJAJAJ
JAJAAJAJAJAJAJ yo también tengo hambre... que vamos a hacer, Rebe?
:(L): :(L):
pronto la sigo!! un beso enorme
yo a vos! 
CapitanNiallHoran
Re: Into the woods. -Larry Stylinson (Cap.15 publicado)
por CapitanNiallHoran Miér 07 Mayo 2014, 5:59 pm
Capítulo 11:
Mis zapatillas hundiéndose en la nieve, a la vez que correteaba por todos lados. Oía la voz de mi madre en la distancia, diciendo mi nombre una y otra vez, pero no me detuve. Miré hacia el cielo, este estando completamente cubierto de nubes, proyectándose a través de las ramas. Comencé a girar, viendo como todo también lo hacía a mí alrededor. Cuando me detuve, me sentí mareado. Intenté caminar, pero mis pies me fallaron, y caí sentado al suelo. La risa brotó de entre mis labios, llegando hasta mis propios oídos. Cuando alcé la vista, pude divisar, a menos de un metro de distancia, un enorme lobo gris. Sus penetrantes ojos incoloros estaban fijos en mí. No podía moverme. No podía levantarme del suelo. No podía separar mi mirada de la suya.
De un salto, me tumbó al suelo. Lo que le siguió fue un punzante dolor en mi clavícula, y un grito desgarrador proveniente de mis labios. Luego, todo se volvió negro.
Cuando desperté, estaba en mi habitación. Oía los murmullos de mis padres detrás de la puerta cerrada.
“¿Qué vamos a hacer?”
Dijo mi madre, claramente preocupada.
Recuerdo aquél día en el que ambos estaban junto a mí, y aquél punzante dolor atacó mi cuerpo. Lancé un largo chillido, pero ellos no hicieron nada para hacerme sentir mejor. Me miré las manos, las pequeñas manos de un chico de tan sólo ocho años de edad. Recuerdo como mis dedos se curvaron en garras. Recuerdo el grito de horror de mis padres, y la forma en la que se alejaron de mí.
“¡No podemos llevarlo al médico, Trisha! ¡Es un monstruo! ¡Allí curan enfermos, no monstruos!”
El llanto de mi madre llegó a mis oídos junto con las palabras de mi papá, desgarrando mi alma y quebrando mi corazón. Ya no me veían como a su hijo. Me veían como un monstruo. Llegué a creer que era eso.
El agua me llegaba hasta el cuello, tibia alrededor de mi cuerpo desnudo. Mi madre lloraba y se tapaba el rostro. Pero mi padre no. Él me miraba serio, su labio inferior entre sus dientes, una expresión de enojo en su rostro. Posó sus manos sobre mis hombros, y ejerció presión hacia abajo. El agua cubrió mi rostro casi al instante, a la vez que yo comencé a patalear e intentar salir a la superficie. Lo único que veía eran las burbujas que salían de mis labios, distorsionando el rostro de mi padre.
Oí un grito desgarrador, y las manos sobre mis hombros desaparecieron. En ese instante, busqué la superficie, y tomé una enorme bocanada de aire. Logré ver lo que me salvó, era mi mamá, que mantenía a mi padre sobre el suelo, completamente enfurecido. La miré, a la vez que recuperaba el aliento, y luego abandoné el cuarto de baño, chorreando agua. Llegué a mi habitación y me coloqué lo primero que encontré, para luego correr hasta las escaleras.
“¡Ese no es nuestro hijo! ¡¿Es que no lo entiendes, Trisha?! ¡Ese ya no es nuestro hijo! ¡Ese no es Zayn!”
Oí a mi padre vociferar desde el baño. Con un nudo en la garganta, corrí y corrí.
“¡Te amo, Zayn!”
Fue lo último que oí cuando abandoné mi hogar, tan sólo una simple fotografía entre mis manos.
Me detuve cuando me encontraba en el bosque, y fue en ese momento cuando lo sucedido me golpeó en el rostro. Ya no tenía familia. Mis padres ya no me querían. Era un monstruo.
Lloré, sin molestarme en secar mis lágrimas, a la vez que miraba a mí alrededor. Un hombre apareció entre los árboles. Su cabello de un negro azabache, piel pálida y pómulos resaltados. Portaba unos anteojos negros sobre el puente de su nariz. Sus ojos grises puestos en mí en total seriedad.
“Sígueme.”
Fue todo lo que dijo. Y lo hice. Se abrió paso entre los finos troncos de los árboles con total agilesa. Aumentó su velocidad poco a poco, y luego, ya no era un humano. Al mirar al suelo, pude ver sus anteojos allí, entre la blanca y espesa nieve. Al convertirme yo también, fui tras él.
Siempre me arrepentiré de haberlo hecho.
Todo ser humano pasa su adolescencia entre amigos, viviendo entre la responsabilidad y la irresponsabilidad. Bueno, yo no. Parte de mi niñez y adolescencia me la pasé en el bosque. Gideon me traía libros y demás para mi estudio. La manada de la que era parte consistía en mí, un chico un año mayor que yo pero que parecía de aún más. Su ancha espalda y grandes brazos no dejaban mucho que imaginar sobre su fuerza. Tenía un rostro ancho, sus ojos siendo pequeños y de un color celeste. Su nombre es Mirko. Luego estaba Vivian, una chica dos años mayor que yo. Era demasiado flaca, su alargado rostro adornado por unos grandes ojos oscuros, que eran bordeados por unas espesas ojeras. Ella falleció de hambre al poco tiempo de yo estar allí. Éramos tres. Gideon era un muy buen maestro, ya que también se dedicaba a ello cuando era simplemente un humano.
Recuerdo una mañana en la que íbamos caminando por la nieve en total tranquilidad. Gideon iba a enseñarnos como atacar. Lo que nunca creí es que iba a hacerlo con una persona viva. Lo que nunca creí es que iba a conocer a aquella persona.
Allí, en lo más lejano del bosque, había una persona atada al tronco de un árbol. Sus ojos estaban tapados, al igual que su boca. Era una mujer de unos cuarenta años, sus largos cabellos oscuros cayendo sobre su rostro. Ella se movía, intentando zafarse, a la vez que sollozaba desesperadamente. Como no iba a reconocer a mi propia madre.
Gideon caminó hasta ella con tranquilidad, y quitó la tela que cubría sus ojos. Ella pasó su vista por todo a su alrededor, hasta posarla en mí. Lanzó un sonido tanto de sorpresa como de susto. Yo no hice nada. No me moví, no hablé, no hice absolutamente nada. Cuando el líder de la manada se volteó, posó su mirada en mí. Él sabía que aquella mujer era mi mamá.
Se convirtió en lobo, no sin antes decirnos que prestemos la máxima atención posible. Tomó carrera, y al saltar sobre ella, le asestó un mordisco en el abdomen. Ella chilló, su voz amortiguada por la tela, su vista clavada en mí.
Lo hizo de nuevo. Una y otra vez. Y yo miré. Vi como la sangre de mi mamá convertía la nieve en roja, y como poco a poco, sus fuerzas la abandonaban. Mi corazón latía aceleradísimo, y mi garganta picaba con las ganas de gritar. De detenerlo. Pero no lo hice.
Cuando acabó, mi mamá era casi irreconocible. Gideon volvió a su forma humana, y caminó hasta nosotros, limpiándose la sangre del rostro con el brazo. Su rostro seguía tan serio como siempre.
“No se preocupen por eso. Yo lo arreglaré.”
Siguió de largo, esperando a que lo siguiéramos. Y lo hicimos. Lancé una última mirada hacia lo que él había llamado “eso”. Hacia la mujer que había evitado que muriese aquél día hacía años. Y ahí quedaba su cuerpo, mutilado por un ser que yo también soy. Por un monstruo. El monstruo que ella salvó fue el mismo que la mató. Y el no haber hecho nada por hacer lo mismo que ella hizo por mí me atormentará por siempre.
Más años pasaron, y yo aún seguía con él.
“Zayn, ten tus libros nuevos.”
Los recibí entre mis manos. “nuevos” no era una palabra adecuada. Sus lomos casi se desprendían, y más de una de sus hojas, de un amarillo oro, se salían de su lugar.
“Ahora léelos.”
Los miré, y regresé mi vista a él.
“¿De que tratan?”
“Verás cuando los leas.”
Los arrojé al suelo, provocando un sonido seco. Gideon me miró.
“Sabías que era mi madre.”
Echó la cabeza hacia un lado levemente.
“Aquella mujer que asesinaste frente a mí. Sabías que era mi madre.”
“¿Tanto tiempo te costó decirlo?”
Caminé hasta él y lo tomé por el cuello de la camisa, pero en el instante en el que hice aquello, una de sus manos me tomó por el cuello, y de ese modo me obligó a caminar hacia atrás, hasta que choqué contra la pared de concreto que formaba la casa que habitábamos.
“No vuelvas a posar un dedo sobre mí nunca más, ¿Me oíste?”
Me costaba respirar, a la vez que su pulgar presionaba mi nuez.
“¿Me oíste?”
Asentí como pude, y él me soltó. Caí al suelo casi al instante, recuperando el aliento y frotando mi cuello.
“Estoy harto.”
Mi voz sonó ronca y quebrada. Gideon se volteó.
“¿Qué dijiste?”
“¡Que estoy harto!”
Me levanté lentamente, sin separar mi mirada de la suya.
“Me voy de aquí.”
No se movió.
“La única forma de que salgas de este bosque es de la misma forma que tu madre.”
Mis manos se hicieron puños, pero me mantuve quieto.
“No me iré del bosque. Me iré de aquí.”
Él sonrió de lado.
“¿Y crees que podrás sobrevivir allí afuera sin mí?”
“Prefiero morir que seguir viviendo aquí contigo.”
Lanzó una risa burlona, cruzándose de brazos sobre el pecho.
“Entonces está decidido.”
Corrió hacia mí, y supe lo que se venía. Pero yo me adelanté. Abrí la puerta, cerrándola cuando me encontré fuera, y corrí. A diferencia de mí, Gideon se tomaba unos segundos para transformarse. Yo, en cambio, ya era un lobo para el momento en el que me adentré entre los árboles.
Así fue como me separé de él. Cómo enfrenté mi miedo, y defendí mis derechos. Gideon no iba a apoderarse de mí ni de nadie que conozca nunca más.
Tracé el rostro de mi madre en aquella fotografía, y cerré los ojos con fuerza. Cuando me levanté y salí de mi habitación, me encontré con Liam, Niall y Louis en el sofá.
“¿A dónde vas?”
Preguntó el primero. Pero no me detuve, sino que fui directo a la puerta, y con furia, abrí la puerta.
“No me sigan.”
Como todas las veces que recordé mi pasado y salí a despejar mi nudo de pensamientos, ellos no me siguieron. Eso era lo que más me agrada de mi manada. Ellos me conocen y me entienden. No me cuestionan, y están ahí para mí.
La culpa aún me carcome por dentro.
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siento haberme tardado en actualizar!!
bueno, un capítulo un poquito feo, no?? :c soy yo el monstruo, no Zayn jajajajaj
de todos modos espero que les haya gustado!
Mis zapatillas hundiéndose en la nieve, a la vez que correteaba por todos lados. Oía la voz de mi madre en la distancia, diciendo mi nombre una y otra vez, pero no me detuve. Miré hacia el cielo, este estando completamente cubierto de nubes, proyectándose a través de las ramas. Comencé a girar, viendo como todo también lo hacía a mí alrededor. Cuando me detuve, me sentí mareado. Intenté caminar, pero mis pies me fallaron, y caí sentado al suelo. La risa brotó de entre mis labios, llegando hasta mis propios oídos. Cuando alcé la vista, pude divisar, a menos de un metro de distancia, un enorme lobo gris. Sus penetrantes ojos incoloros estaban fijos en mí. No podía moverme. No podía levantarme del suelo. No podía separar mi mirada de la suya.
De un salto, me tumbó al suelo. Lo que le siguió fue un punzante dolor en mi clavícula, y un grito desgarrador proveniente de mis labios. Luego, todo se volvió negro.
Cuando desperté, estaba en mi habitación. Oía los murmullos de mis padres detrás de la puerta cerrada.
“¿Qué vamos a hacer?”
Dijo mi madre, claramente preocupada.
Recuerdo aquél día en el que ambos estaban junto a mí, y aquél punzante dolor atacó mi cuerpo. Lancé un largo chillido, pero ellos no hicieron nada para hacerme sentir mejor. Me miré las manos, las pequeñas manos de un chico de tan sólo ocho años de edad. Recuerdo como mis dedos se curvaron en garras. Recuerdo el grito de horror de mis padres, y la forma en la que se alejaron de mí.
“¡No podemos llevarlo al médico, Trisha! ¡Es un monstruo! ¡Allí curan enfermos, no monstruos!”
El llanto de mi madre llegó a mis oídos junto con las palabras de mi papá, desgarrando mi alma y quebrando mi corazón. Ya no me veían como a su hijo. Me veían como un monstruo. Llegué a creer que era eso.
El agua me llegaba hasta el cuello, tibia alrededor de mi cuerpo desnudo. Mi madre lloraba y se tapaba el rostro. Pero mi padre no. Él me miraba serio, su labio inferior entre sus dientes, una expresión de enojo en su rostro. Posó sus manos sobre mis hombros, y ejerció presión hacia abajo. El agua cubrió mi rostro casi al instante, a la vez que yo comencé a patalear e intentar salir a la superficie. Lo único que veía eran las burbujas que salían de mis labios, distorsionando el rostro de mi padre.
Oí un grito desgarrador, y las manos sobre mis hombros desaparecieron. En ese instante, busqué la superficie, y tomé una enorme bocanada de aire. Logré ver lo que me salvó, era mi mamá, que mantenía a mi padre sobre el suelo, completamente enfurecido. La miré, a la vez que recuperaba el aliento, y luego abandoné el cuarto de baño, chorreando agua. Llegué a mi habitación y me coloqué lo primero que encontré, para luego correr hasta las escaleras.
“¡Ese no es nuestro hijo! ¡¿Es que no lo entiendes, Trisha?! ¡Ese ya no es nuestro hijo! ¡Ese no es Zayn!”
Oí a mi padre vociferar desde el baño. Con un nudo en la garganta, corrí y corrí.
“¡Te amo, Zayn!”
Fue lo último que oí cuando abandoné mi hogar, tan sólo una simple fotografía entre mis manos.
Me detuve cuando me encontraba en el bosque, y fue en ese momento cuando lo sucedido me golpeó en el rostro. Ya no tenía familia. Mis padres ya no me querían. Era un monstruo.
Lloré, sin molestarme en secar mis lágrimas, a la vez que miraba a mí alrededor. Un hombre apareció entre los árboles. Su cabello de un negro azabache, piel pálida y pómulos resaltados. Portaba unos anteojos negros sobre el puente de su nariz. Sus ojos grises puestos en mí en total seriedad.
“Sígueme.”
Fue todo lo que dijo. Y lo hice. Se abrió paso entre los finos troncos de los árboles con total agilesa. Aumentó su velocidad poco a poco, y luego, ya no era un humano. Al mirar al suelo, pude ver sus anteojos allí, entre la blanca y espesa nieve. Al convertirme yo también, fui tras él.
Siempre me arrepentiré de haberlo hecho.
Todo ser humano pasa su adolescencia entre amigos, viviendo entre la responsabilidad y la irresponsabilidad. Bueno, yo no. Parte de mi niñez y adolescencia me la pasé en el bosque. Gideon me traía libros y demás para mi estudio. La manada de la que era parte consistía en mí, un chico un año mayor que yo pero que parecía de aún más. Su ancha espalda y grandes brazos no dejaban mucho que imaginar sobre su fuerza. Tenía un rostro ancho, sus ojos siendo pequeños y de un color celeste. Su nombre es Mirko. Luego estaba Vivian, una chica dos años mayor que yo. Era demasiado flaca, su alargado rostro adornado por unos grandes ojos oscuros, que eran bordeados por unas espesas ojeras. Ella falleció de hambre al poco tiempo de yo estar allí. Éramos tres. Gideon era un muy buen maestro, ya que también se dedicaba a ello cuando era simplemente un humano.
Recuerdo una mañana en la que íbamos caminando por la nieve en total tranquilidad. Gideon iba a enseñarnos como atacar. Lo que nunca creí es que iba a hacerlo con una persona viva. Lo que nunca creí es que iba a conocer a aquella persona.
Allí, en lo más lejano del bosque, había una persona atada al tronco de un árbol. Sus ojos estaban tapados, al igual que su boca. Era una mujer de unos cuarenta años, sus largos cabellos oscuros cayendo sobre su rostro. Ella se movía, intentando zafarse, a la vez que sollozaba desesperadamente. Como no iba a reconocer a mi propia madre.
Gideon caminó hasta ella con tranquilidad, y quitó la tela que cubría sus ojos. Ella pasó su vista por todo a su alrededor, hasta posarla en mí. Lanzó un sonido tanto de sorpresa como de susto. Yo no hice nada. No me moví, no hablé, no hice absolutamente nada. Cuando el líder de la manada se volteó, posó su mirada en mí. Él sabía que aquella mujer era mi mamá.
Se convirtió en lobo, no sin antes decirnos que prestemos la máxima atención posible. Tomó carrera, y al saltar sobre ella, le asestó un mordisco en el abdomen. Ella chilló, su voz amortiguada por la tela, su vista clavada en mí.
Lo hizo de nuevo. Una y otra vez. Y yo miré. Vi como la sangre de mi mamá convertía la nieve en roja, y como poco a poco, sus fuerzas la abandonaban. Mi corazón latía aceleradísimo, y mi garganta picaba con las ganas de gritar. De detenerlo. Pero no lo hice.
Cuando acabó, mi mamá era casi irreconocible. Gideon volvió a su forma humana, y caminó hasta nosotros, limpiándose la sangre del rostro con el brazo. Su rostro seguía tan serio como siempre.
“No se preocupen por eso. Yo lo arreglaré.”
Siguió de largo, esperando a que lo siguiéramos. Y lo hicimos. Lancé una última mirada hacia lo que él había llamado “eso”. Hacia la mujer que había evitado que muriese aquél día hacía años. Y ahí quedaba su cuerpo, mutilado por un ser que yo también soy. Por un monstruo. El monstruo que ella salvó fue el mismo que la mató. Y el no haber hecho nada por hacer lo mismo que ella hizo por mí me atormentará por siempre.
Más años pasaron, y yo aún seguía con él.
“Zayn, ten tus libros nuevos.”
Los recibí entre mis manos. “nuevos” no era una palabra adecuada. Sus lomos casi se desprendían, y más de una de sus hojas, de un amarillo oro, se salían de su lugar.
“Ahora léelos.”
Los miré, y regresé mi vista a él.
“¿De que tratan?”
“Verás cuando los leas.”
Los arrojé al suelo, provocando un sonido seco. Gideon me miró.
“Sabías que era mi madre.”
Echó la cabeza hacia un lado levemente.
“Aquella mujer que asesinaste frente a mí. Sabías que era mi madre.”
“¿Tanto tiempo te costó decirlo?”
Caminé hasta él y lo tomé por el cuello de la camisa, pero en el instante en el que hice aquello, una de sus manos me tomó por el cuello, y de ese modo me obligó a caminar hacia atrás, hasta que choqué contra la pared de concreto que formaba la casa que habitábamos.
“No vuelvas a posar un dedo sobre mí nunca más, ¿Me oíste?”
Me costaba respirar, a la vez que su pulgar presionaba mi nuez.
“¿Me oíste?”
Asentí como pude, y él me soltó. Caí al suelo casi al instante, recuperando el aliento y frotando mi cuello.
“Estoy harto.”
Mi voz sonó ronca y quebrada. Gideon se volteó.
“¿Qué dijiste?”
“¡Que estoy harto!”
Me levanté lentamente, sin separar mi mirada de la suya.
“Me voy de aquí.”
No se movió.
“La única forma de que salgas de este bosque es de la misma forma que tu madre.”
Mis manos se hicieron puños, pero me mantuve quieto.
“No me iré del bosque. Me iré de aquí.”
Él sonrió de lado.
“¿Y crees que podrás sobrevivir allí afuera sin mí?”
“Prefiero morir que seguir viviendo aquí contigo.”
Lanzó una risa burlona, cruzándose de brazos sobre el pecho.
“Entonces está decidido.”
Corrió hacia mí, y supe lo que se venía. Pero yo me adelanté. Abrí la puerta, cerrándola cuando me encontré fuera, y corrí. A diferencia de mí, Gideon se tomaba unos segundos para transformarse. Yo, en cambio, ya era un lobo para el momento en el que me adentré entre los árboles.
Así fue como me separé de él. Cómo enfrenté mi miedo, y defendí mis derechos. Gideon no iba a apoderarse de mí ni de nadie que conozca nunca más.
Tracé el rostro de mi madre en aquella fotografía, y cerré los ojos con fuerza. Cuando me levanté y salí de mi habitación, me encontré con Liam, Niall y Louis en el sofá.
“¿A dónde vas?”
Preguntó el primero. Pero no me detuve, sino que fui directo a la puerta, y con furia, abrí la puerta.
“No me sigan.”
Como todas las veces que recordé mi pasado y salí a despejar mi nudo de pensamientos, ellos no me siguieron. Eso era lo que más me agrada de mi manada. Ellos me conocen y me entienden. No me cuestionan, y están ahí para mí.
La culpa aún me carcome por dentro.
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