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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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El actor y el conde (Larry Stylinson)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Página 3 de 8. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
William lo descubrio en segundos JAJAJA probablemente ya lo conocia pero no solo de la obra del dia anterior. Lo tenia en la mira (?
Ademas es obvio que william es demasiado gay. Quien mierda en esa epoca usaria un aro en la oreja siendo heterosexual? Ah.
Cuando hablan de Gemma como si fuera la pobre hermana fea me rio mil años porque es tan hermosa que me da ganas de llorar, we. Igual se que eso es parte de la trama JAJAJ.
Cuando William dijo eso de la digestion me hizo imaginarmelo en el inodoro y ya no puedo tomarme su personaje enserio, ah.
Seguila pronto por favor! Adios.
Ademas es obvio que william es demasiado gay. Quien mierda en esa epoca usaria un aro en la oreja siendo heterosexual? Ah.
Cuando hablan de Gemma como si fuera la pobre hermana fea me rio mil años porque es tan hermosa que me da ganas de llorar, we. Igual se que eso es parte de la trama JAJAJ.
Cuando William dijo eso de la digestion me hizo imaginarmelo en el inodoro y ya no puedo tomarme su personaje enserio, ah.
Seguila pronto por favor! Adios.
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
El conde es GAYYY!! A mi no me joden xD
Por eso quiere a Edward porque se lo quiere follar :D
Esta genial, tienes que seguirla!! <3
Por eso quiere a Edward porque se lo quiere follar :D
Esta genial, tienes que seguirla!! <3
MyKryptonitLarry
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Parece qué William tiene un buen ojo, o una buena memoria.
Síguela :3
Síguela :3
Ely.
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Nueva lectora!
Lo que más me gusta de todas tus traducciones es que son únicas, no son del tipo en donde uno de los dos es el chico malo de ultimo año y bla bla...
Gracias por todas tus traducciones! :love:
William lo descubrió jaja.
No me imagino lo que debe haber sido ser mujer en esa época, con corsé y tanta ropa encima, no se podrían ni mover, pobres.
Seguila pronto!!!!!!!
Besos :hug:
Lo que más me gusta de todas tus traducciones es que son únicas, no son del tipo en donde uno de los dos es el chico malo de ultimo año y bla bla...
Gracias por todas tus traducciones! :love:
William lo descubrió jaja.
No me imagino lo que debe haber sido ser mujer en esa época, con corsé y tanta ropa encima, no se podrían ni mover, pobres.
Seguila pronto!!!!!!!
Besos :hug:
I'mLarryShipper
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Se delato al tiro Edward XDDDD lo cacharon al instante.
No, no sirve mucho para ser mujer, o William es muy... no sé.
Siguela :DDD
No, no sirve mucho para ser mujer, o William es muy... no sé.
Siguela :DDD
Invitado
Invitado
Capitulo 3.
El desayuno era una perspectiva poco atractiva para Edward mientras esperaba que llegase el sastre de William. Claire ordenó un vestido de seda roja que usaría para la boda, pero había elegido sabiamente no quedarse, ya que el humor de mil demonios de él era más que evidente por su agria expresión.
Su autocompasión fue interrumpida por un suave golpe en la puerta. Edward la abrió para encontrar a un hombre pequeño de edad mediana esperando pacientemente.
—¿Sí?
—Soy Davis, Señor. El sastre del Conde Tomlinson.
Edward se hizo a un lado para dejar pasar al hombre.
―No esperaba que el Conde mandase a alguien tan temprano.
―Su Excelencia me informó que el tiempo era esencial. Sólo necesito tomar unas medidas, y estaré sobre mi camino. Si se quitara la camisa y la calza, Señor, lo agradecería mucho.
Edward se quitó su jubón y los greguescos, preguntándose inútilmente con cuánta frecuencia se vestiría como hombre una vez en Crofton Hall. Él accedió a diez minutos con el sastre para estar de aquí para allá sobre su persona. No era como si la experiencia fuera nueva para Edward, acostumbrado a que el sastre de la familia tomara sus medidas, sin embargo estaba impaciente porque Davis terminara su trabajo y lo dejara en paz.
―Bien hecho, Señor ―dijo David―. Llevaré el vestido conmigo y lo traeré mañana.
El sastre recogió el vestido con mucho cuidado, tratando cada pieza con reverencia. ―También tengo un mensaje de su Excelencia. Preguntó que si está de acuerdo, le gustaría encontrarse con usted en The Anchor al mediodía.
Edward asintió. ―Dígale que estaré allí.
El sastre hizo una reverencia y dejó a Edward por su cuenta una vez más.
Edward entró en la taberna, dejando atrás el bullicio de la calle Clink. Se hizo paso a través de la clientela, quienes se sentaban en pequeños grupos bebiendo vino y hablando con seriedad, sin hacer caso de su presencia, hasta que encontró una mesa vacía junto a una ventana en la parte de atrás. Trató de mirar fijamente a través de la fina hoja del vidrio, pero la suciedad de su superficie le hacía difícil ver más allá de unos pocos metros de la taberna. Miró cómo era colocada en la mesa una jarra de peltre en frente de él.
William Tomlinson se sentó y sonrió. ―Gracias por venir, Edward.
―Dada la ferocidad con que mi prima se aproxima a los preparativos de la boda, estoy más que feliz de estar lejos de la casa por unas horas.
La mirada de William era evaluadora, y Edward supo que sus mejillas se estaban ruborizadas por la atención.
―Te ves mejor sin el vestido ―dijo William por lo bajo, mientras se inclinaba más cerca.
Los ojos de Edward recorrieron la taberna, consciente de que estaban rodeados. Un grupo de tres hombres a su derecha estaban absortos en una conversación sobre la calidad de un reciente lote de seda, mientras que otro grupo a su izquierda estaban jugando a las cartas y no tenían interés de escuchar la conversación de él y de William.
―Conde Tomlinson...
―Te dije ayer que me llamaras William. Nada ha cambiado desde ayer. ―William saludó a Edward con su jarra de vino rojo antes de tomar un largo trago.
―Quizá debería ser más prudente con sus palabras. Estamos en público, después de todo.
William resopló. ―A nadie le importa, Edward. Lo que dice la ley y como actúa son dos cosas totalmente diferentes, especialmente cuando tienes dinero y eres el consejero de la Reina Elisabeth.
―No todos tenemos sus privilegios.
―Pero puedes ―William se recostó en su silla―. Y seré capaz de protegerte, no importa lo que las lenguas venenosas puedan decir.
―Protección no es lo que yo llamaría a la farsa que estamos a punto de representar.
―Una boda silenciará incluso a las voces más enérgicas.
Edward miró a William con nuevo entendimiento. ―Entonces por esa razón necesitas este matrimonio. ¿Hay rumores que están demasiado cerca para tu bienestar, William?
―Eres tan inteligente como atractivo. ―William tomó otro trago largo―. A veces es prudente probar que tus detractores están equivocados, y mi matrimonio con Gemma Styles hará exactamente eso.
―Mi prima sospecha que esos son tus motivos para este matrimonio.
―Como aprenderás, la corte puede ser una criatura inconstante. Nunca hace daño planear por cualquier eventualidad.
―¿No le fue suficiente un matrimonio? A pesar de que definitivamente no pareció ser un viudo sufrido.
La sonrisa de William titubeo, pero sólo por un momento.
―Jane fue una buena amiga, una que conocía desde mi infancia, y nuestro matrimonio estuvo arreglado por nuestras familias mucho antes de que pudiera caminar. Pero por mucho que ame al hijo que ella me dio, ella no fue mi gran amor, y ciertamente yo no fui el de ella.
Edward tomo un trago de su jarra. ―¿No debería preguntar quién fue su gran amor?
―Si tan excepcional persona existiera, entonces todavía no he tenido la buena fortuna de conocerla. ¿Pero qué hay de ti Edward? ¿Está dejando una hilera de chicas con el corazón roto, gracias a nuestro arreglo?
―Yo… ―Edward de repente encontró el contenido de su jarra muy interesante―. No hay ninguna.
―Entonces hay una tradición que estamos conservando, mi novia será virginal. ―Los ojos de William brillaron con humor, y Edward estaba aliviado de no ver ningún indicio de malicia.
―No diría que estoy completamente intacto, pero no he estado muy involucrado con el sexo débil.
―¿Y con el sexo-no-tan- débil?
Edward rápidamente miró alrededor para verificar si seguían siendo de poco interés para sus acompañantes antes de responder.
―Quizás una fracción más, pero nada de gran importancia.
William se acercó, su aliento caliente contra la piel de Edward. ―Tal vez podemos llegar a un nuevo acuerdo. Un hombre tan joven y hermoso como tú no quería atarse a una pareja de cama, y yo prometería garantizar tu placer.
Edward se echó hacia atrás. William estaba tan cerca que apenas podía respirar, sin poder formular una respuesta.
―Yo…
―Tómate tu tiempo para pensar. No te obligaría a tal situación, pero si lo deseas, creo que podría ser para beneficio mutuo.
William acabó su jarra. ―Debo irme ―dijo con una sonrisa que le pareció genuina a Edward―. Te veré en la Iglesia.
Edward miró a William marcharse. Muchos de los clientes parecieron reconocer al Conde y levantaron sus bebidas a modo de saludo mientras él pasaba. Edward agarró su jarra y se tomó de un trago todo el contenido. La sugerencia de William era muy tentadora, y Edward dudó que tuviera la fuerza para rehusar la oferta. Su moral en nada era parecida a la de un puritano, y su cuerpo ya estaba claramente a favor de la idea. Pero había cosas que no le sonaban verdad sobre los motivos de William.
Cualesquiera que sean realmente los rumores, deben haber sido bastante malos para que William entre en una situación en donde ambos podrían perder sus cabezas. Pero por ahora, Edward no presionaría para obtener más repuestas. Necesitaba asegurase que el matrimonio siguiera adelante para que las deudas de su padre fueran pagadas y el honor de la familia Styles permaneciera intacto.
Su autocompasión fue interrumpida por un suave golpe en la puerta. Edward la abrió para encontrar a un hombre pequeño de edad mediana esperando pacientemente.
—¿Sí?
—Soy Davis, Señor. El sastre del Conde Tomlinson.
Edward se hizo a un lado para dejar pasar al hombre.
―No esperaba que el Conde mandase a alguien tan temprano.
―Su Excelencia me informó que el tiempo era esencial. Sólo necesito tomar unas medidas, y estaré sobre mi camino. Si se quitara la camisa y la calza, Señor, lo agradecería mucho.
Edward se quitó su jubón y los greguescos, preguntándose inútilmente con cuánta frecuencia se vestiría como hombre una vez en Crofton Hall. Él accedió a diez minutos con el sastre para estar de aquí para allá sobre su persona. No era como si la experiencia fuera nueva para Edward, acostumbrado a que el sastre de la familia tomara sus medidas, sin embargo estaba impaciente porque Davis terminara su trabajo y lo dejara en paz.
―Bien hecho, Señor ―dijo David―. Llevaré el vestido conmigo y lo traeré mañana.
El sastre recogió el vestido con mucho cuidado, tratando cada pieza con reverencia. ―También tengo un mensaje de su Excelencia. Preguntó que si está de acuerdo, le gustaría encontrarse con usted en The Anchor al mediodía.
Edward asintió. ―Dígale que estaré allí.
El sastre hizo una reverencia y dejó a Edward por su cuenta una vez más.
Edward entró en la taberna, dejando atrás el bullicio de la calle Clink. Se hizo paso a través de la clientela, quienes se sentaban en pequeños grupos bebiendo vino y hablando con seriedad, sin hacer caso de su presencia, hasta que encontró una mesa vacía junto a una ventana en la parte de atrás. Trató de mirar fijamente a través de la fina hoja del vidrio, pero la suciedad de su superficie le hacía difícil ver más allá de unos pocos metros de la taberna. Miró cómo era colocada en la mesa una jarra de peltre en frente de él.
William Tomlinson se sentó y sonrió. ―Gracias por venir, Edward.
―Dada la ferocidad con que mi prima se aproxima a los preparativos de la boda, estoy más que feliz de estar lejos de la casa por unas horas.
La mirada de William era evaluadora, y Edward supo que sus mejillas se estaban ruborizadas por la atención.
―Te ves mejor sin el vestido ―dijo William por lo bajo, mientras se inclinaba más cerca.
Los ojos de Edward recorrieron la taberna, consciente de que estaban rodeados. Un grupo de tres hombres a su derecha estaban absortos en una conversación sobre la calidad de un reciente lote de seda, mientras que otro grupo a su izquierda estaban jugando a las cartas y no tenían interés de escuchar la conversación de él y de William.
―Conde Tomlinson...
―Te dije ayer que me llamaras William. Nada ha cambiado desde ayer. ―William saludó a Edward con su jarra de vino rojo antes de tomar un largo trago.
―Quizá debería ser más prudente con sus palabras. Estamos en público, después de todo.
William resopló. ―A nadie le importa, Edward. Lo que dice la ley y como actúa son dos cosas totalmente diferentes, especialmente cuando tienes dinero y eres el consejero de la Reina Elisabeth.
―No todos tenemos sus privilegios.
―Pero puedes ―William se recostó en su silla―. Y seré capaz de protegerte, no importa lo que las lenguas venenosas puedan decir.
―Protección no es lo que yo llamaría a la farsa que estamos a punto de representar.
―Una boda silenciará incluso a las voces más enérgicas.
Edward miró a William con nuevo entendimiento. ―Entonces por esa razón necesitas este matrimonio. ¿Hay rumores que están demasiado cerca para tu bienestar, William?
―Eres tan inteligente como atractivo. ―William tomó otro trago largo―. A veces es prudente probar que tus detractores están equivocados, y mi matrimonio con Gemma Styles hará exactamente eso.
―Mi prima sospecha que esos son tus motivos para este matrimonio.
―Como aprenderás, la corte puede ser una criatura inconstante. Nunca hace daño planear por cualquier eventualidad.
―¿No le fue suficiente un matrimonio? A pesar de que definitivamente no pareció ser un viudo sufrido.
La sonrisa de William titubeo, pero sólo por un momento.
―Jane fue una buena amiga, una que conocía desde mi infancia, y nuestro matrimonio estuvo arreglado por nuestras familias mucho antes de que pudiera caminar. Pero por mucho que ame al hijo que ella me dio, ella no fue mi gran amor, y ciertamente yo no fui el de ella.
Edward tomo un trago de su jarra. ―¿No debería preguntar quién fue su gran amor?
―Si tan excepcional persona existiera, entonces todavía no he tenido la buena fortuna de conocerla. ¿Pero qué hay de ti Edward? ¿Está dejando una hilera de chicas con el corazón roto, gracias a nuestro arreglo?
―Yo… ―Edward de repente encontró el contenido de su jarra muy interesante―. No hay ninguna.
―Entonces hay una tradición que estamos conservando, mi novia será virginal. ―Los ojos de William brillaron con humor, y Edward estaba aliviado de no ver ningún indicio de malicia.
―No diría que estoy completamente intacto, pero no he estado muy involucrado con el sexo débil.
―¿Y con el sexo-no-tan- débil?
Edward rápidamente miró alrededor para verificar si seguían siendo de poco interés para sus acompañantes antes de responder.
―Quizás una fracción más, pero nada de gran importancia.
William se acercó, su aliento caliente contra la piel de Edward. ―Tal vez podemos llegar a un nuevo acuerdo. Un hombre tan joven y hermoso como tú no quería atarse a una pareja de cama, y yo prometería garantizar tu placer.
Edward se echó hacia atrás. William estaba tan cerca que apenas podía respirar, sin poder formular una respuesta.
―Yo…
―Tómate tu tiempo para pensar. No te obligaría a tal situación, pero si lo deseas, creo que podría ser para beneficio mutuo.
William acabó su jarra. ―Debo irme ―dijo con una sonrisa que le pareció genuina a Edward―. Te veré en la Iglesia.
Edward miró a William marcharse. Muchos de los clientes parecieron reconocer al Conde y levantaron sus bebidas a modo de saludo mientras él pasaba. Edward agarró su jarra y se tomó de un trago todo el contenido. La sugerencia de William era muy tentadora, y Edward dudó que tuviera la fuerza para rehusar la oferta. Su moral en nada era parecida a la de un puritano, y su cuerpo ya estaba claramente a favor de la idea. Pero había cosas que no le sonaban verdad sobre los motivos de William.
Cualesquiera que sean realmente los rumores, deben haber sido bastante malos para que William entre en una situación en donde ambos podrían perder sus cabezas. Pero por ahora, Edward no presionaría para obtener más repuestas. Necesitaba asegurase que el matrimonio siguiera adelante para que las deudas de su padre fueran pagadas y el honor de la familia Styles permaneciera intacto.
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Lo se, la farsa le duro poco con will.Debby escribió:William lo descubrio en segundos JAJAJA probablemente ya lo conocia pero no solo de la obra del dia anterior. Lo tenia en la mira (?
Ademas es obvio que william es demasiado gay. Quien mierda en esa epoca usaria un aro en la oreja siendo heterosexual? Ah.
Cuando hablan de Gemma como si fuera la pobre hermana fea me rio mil años porque es tan hermosa que me da ganas de llorar, we. Igual se que eso es parte de la trama JAJAJ.
Cuando William dijo eso de la digestion me hizo imaginarmelo en el inodoro y ya no puedo tomarme su personaje enserio, ah.
Seguila pronto por favor! Adios.
Ah, el tipo es respetado, nadie duda de el, oh bueno quien sabe.
Hey, es solo en el fic, ella es muy bonita.
jajajajaja, perdió su toque.
Bye:)
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Mas claro ni el agua no?MyKryptonitLarry escribió:El conde es GAYYY!! A mi no me joden xD
Por eso quiere a Edward porque se lo quiere follar :D
Esta genial, tienes que seguirla!! <3
Ah, según el.
Saludos:)
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Es una forma de decirlo:))Ely. escribió:Parece qué William tiene un buen ojo, o una buena memoria.
Síguela :3
Saludos.
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
HolaaI'mLarryShipper escribió:Nueva lectora!
Lo que más me gusta de todas tus traducciones es que son únicas, no son del tipo en donde uno de los dos es el chico malo de ultimo año y bla bla...
Gracias por todas tus traducciones! :love:
William lo descubrió jaja.
No me imagino lo que debe haber sido ser mujer en esa época, con corsé y tanta ropa encima, no se podrían ni mover, pobres.
Seguila pronto!!!!!!!
Besos :hug:
Bienvenida!
Muchas gracias por leerlas:)
Espero que te guste!
Byee
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Ah, la farsa le duro poco.Emma escribió:Se delato al tiro Edward XDDDD lo cacharon al instante.
No, no sirve mucho para ser mujer, o William es muy... no sé.
Siguela :DDD
HAHAHA, es un misterio.
Saludos:)
Invitado
Invitado
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
Síguela *-*
Enserio amo como narras, haces parecer qué estamos en algún siglo pasado y eso me encanta!
Enserio amo como narras, haces parecer qué estamos en algún siglo pasado y eso me encanta!
Ely.
Re: El actor y el conde (Larry Stylinson)
su trato se esta volviendo mucho mas interesante, mucho mas conveniente. no creo que Edward tenga que pensarlo mucho en realidad.
seguila pronto por favor! bye ♥
seguila pronto por favor! bye ♥
Invitado
Invitado
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